Proyecto Formación y Sensibilización Ambiental en los Sectores Textil y Químico Guía de Buenas Prácticas Personales Sector Textil 1. Buenas Prácticas. Introducción La guía de buenas prácticas que aquí se presenta está destinada tanto a empresarios como a trabajadores del sector textil. El objetivo esencial de la guía es promover la gestión energética y la mejora continua, en el ámbito de la eficiencia y el ahorro energético del sector. La guía pretende que, mediante la aplicación de las buenas prácticas y las recomendaciones aquí expuestas, se alcancen y consigan ahorros energéticos, como consecuencia de la mejora en la eficiencia energética. Logrando esta eficiencia tanto en procesos y equipos, como en acciones y actitudes hacia el ahorro energético, llevadas a cabo por parte del personal relacionado con el sector textil. Con el término buenas prácticas personales en el sector textil, nos referimos a conseguir que, con pequeños cambios en los usos y actitudes, de forma simple y sencilla -y, por lo tanto, con un bajo coste asociado-, se pueden lograr resultados importantes en cuanto a ahorros energéticos. Esta guía de buenas prácticas pretende llevar a cabo una mejor gestión energética dentro de la industria textil, dando consejos y ayudas sobre distintas técnicas, usos, actitudes y prácticas, que puedan ser utilizadas por cualquier empresa y su personal, dentro del ámbito textil. Así pues, el objetivo principal de la guía es promover la mejora continua de la actividad del sector textil en relación con la gestión energética. Está organizada de la siguiente forma: En primer lugar, se expone una relación o detalle de los procesos y herramientas utilizadas en una instalación o industria textil, seguido de una enumeración de por qué es importante prestar atención a la eficiencia y al ahorro energético en esta industria. Las siguientes dos secciones de la guía, se refieren a una serie de buenas prácticas de ahorro y eficiencia energética. En el ámbito de la vida privada y del hogar, en el primer caso, y especificas del sector textil, en el segundo. A continuación se expone un ejemplo generalista de buenas prácticas -cambio de luminarias en una instalación textil-. Finalmente, la guía se completa con la legislación aplicable relativa al sector textil, en lo referente a medio ambiente y ahorro energético, así como direcciones de interés relativas al sector textil que permitan ampliar información para quienes lo deseen. Página 1 de 23 2. Conceptos y definiciones Desarrollo Sostenible: desarrollo que satisface las necesidades actuales de las personas y organizaciones, sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer las suyas. Impacto Ambiental: efecto producido por la acción de una organización sobre el medio ambiente. Medio ambiente: conjunto de factores físicos, ambientales, culturales, económicos y sociales que rodean al ser humano. Eficiencia Energética: implementación de cambios, mejoras, modificaciones, etc. en los procesos, actividades, operaciones o maquinaria, que lleven consigo la consecución de un ahorro energético o una mayor eficiencia en la gestión de la energía. Residuos: material o sustancia orgánica, inorgánica, sólida, líquida, gaseosa, o una mezcla y/o combinación de ellas, resultante de la actividad de una organización. Sistema de gestión ambiental: proceso cíclico de planificación, implantación, revisión y mejora de los procedimientos y acciones que lleva a cabo una organización para realizar su actividad, garantizando el cumplimiento de sus objetivos ambientales. Energías Renovables: energías producidas por la acción de fenómenos naturales como el Sol -energía solar o fotovoltaica-, los ríos –hidroeléctrica-, el viento -eólica-, la biomasa, las olas del mar y las mareas o el calor interior de la Tierra –geotérmica-. La característica principal es que, debido a su naturaleza, estos tipos de energía son inagotables. Página 2 de 23 3. Procesos. Equipos, máquinas y herramientas Principales procesos que se dan en el sector textil según, su ciclo de producción: Fabricación de la fibra: Fibras químicas Preparación de la fibra: Fibras naturales Fabricación de hilo Producción de tejido Pretratamiento Tintura Estampación Acabados y aprestos Revestimientos y laminado Recubrimiento interior de alfombras Lavado □ Lavado con agua: alto consumo de agua y, por tanto, de energía □ Limpieza en seco Secado: importante consumo energético, ya sea si el secado es mecánico o a partir de calor Principales equipos y herramientas utilizados en el sector: • Dentro de los equipos y maquinaria: Autoclaves, armarios, barca torniquete, jet, overflow, softflow, airflow, beam, jigger, foulard, pad-batch, pad-jig, pad-steam, prensas, pad-dry, cubetas para baños, telares, máquinas de coser, máquinas cortadoras y mesas de cortes, ruecas, hiladoras, planchas industriales etc. • En lo referente a herramientas y utillaje utilizado: Tablillas, punzones, cuchillas, tijeras, agujas, patrones, reglas y cintas métricas, tinturas, troqueles, etc. Página 3 de 23 4. ¿Por qué reducir el consumo? ¿Por qué se debe prestar atención al ahorro y la eficiencia energética? ¿Por qué es importante reducir el consumo de energía? La energía es un coste que representa una fracción muy importante de los gastos de producción de una instalación textil; de ahí la necesidad de su control. Una gestión energética adecuada de una instalación industrial textil implica un uso eficiente de sus consumos energéticos, de forma que se consiga una reducción de los costes energéticos en sus diferentes procesos productivos. La importancia de la reducción de los consumos energéticos se integra dentro de la mejora de la competitividad de las empresas y la reducción de costes, a lo que toda organización debe tender, pero igualmente estos ahorros energéticos, tienen otros componentes, aparte del económico, como son, entre otros: su relación con la mejora medioambiental, la optimización de recursos, la reducción de emisiones de CO2 -principal responsable del efecto invernadero- o la implantación de energías de carácter renovable. Así pues, mediante el control y reducción de los consumos energéticos se consigue un beneficio, no solo para la organización por los menores costes generados, sino también para la sociedad y el medio ambiente y, en definitiva, para el desarrollo sostenible tanto de la organización como de la sociedad. Por qué es importante reducir el consumo de energía. La energía y su gestión eficiente es un aspecto crucial en la actualidad para la competitividad de cualquier tipo de empresa, debido a que: Es cara. Es limitada. Los precios de la energía han crecido de forma significativa en los últimos años y se incrementarán significativamente en el futuro. El derroche de energía provoca extracostes en las empresas y a la sociedad. A continuación se dan una serie de buenas prácticas para reducir los consumos energéticos y conseguir ahorros, tanto en el ámbito privado como en el sector textil. Página 4 de 23 5. Ahorro y eficiencia energética personal Medidas de ahorro y eficiencia energética personal. Consejos básicos. Cómo podemos conseguir ahorros energéticos en el uso diario y en la vida privada, respecto a: Electrodomésticos Ejemplos de buenas prácticas de ahorro energético relativas al uso de dos de los electrodomésticos principales del hogar: frigorífico-congelador y lavadora. Como buena práctica general, es recomendable la compra de electrodomésticos con un etiquetado energético eficiente. El etiquetado energético, muestra la diferencia de consumos entre aparatos de similares prestaciones. Este etiquetado clasifica los electrodomésticos a través de la asignación de unas letras: desde la “A” hasta la “G”, siendo la letra “A” indicativa de un electrodoméstico de máxima eficiencia energética y la letra “G” uno de menor eficiencia. Frigorífico y congelador Buenas prácticas Configurar la temperatura del frigorífico en un intervalo entorno a 3 a 7 °C, y para el caso del congelador entre -18°C y -15°C. Un grado más de enfriamiento puede suponer hasta un 5% más de consumo energético, por lo que resulta evidente la importancia del control de temperatura. El frigorífico debe ubicarse fuera del alcance de la luz solar o cualquier otra fuente de calor, evitando con esta exposición, la necesidad de un mayor consumo energético para sus operaciones de enfriamiento. Durante ausencias importantes o prolongadas, principalmente si se trata de más de 15 días, se debe desconectar tanto el frigorífico como el congelador, evitando así gastos energéticos innecesarios. Página 5 de 23 Lavadora Buenas prácticas Regular la temperatura del agua a la menor posible. Este punto es el elemento clave del consumo energético de una lavadora, ya que se estima que el 80- 85% del consumo energético de la lavadora se produce como consecuencia del calentamiento del agua. Emplear, siempre que sea posible, la lavadora al máximo de su capacidad, consiguiendo un menor tiempo de utilización, con el consiguiente ahorro energético. Utilizar detergentes líquidos, que hacen trabajar menos a las lavadoras, logrando una mayor eficiencia y el consiguiente ahorro. Igualmente, la existencia de detergentes que admiten el lavado con agua fría permite la consecución de importantes ahorros energéticos, como consecuencia de evitar el calentamiento del agua. Si la vivienda dispone de tarifa nocturna, en cuanto a consumo eléctrico, la utilización de la misma en los periodos de tiempo de coste más módicos logrará unos ahorros energéticos a igual trabajo o consumo. Iluminación Buenas prácticas Utilizar tubos fluorescentes y bombillas fluorescentes compactas de alta eficiencia energética en todas las lámparas de la vivienda. Las lámparas fluorescentes compactas poseen sólo entre un 20 y un 25% de la potencia de una incandescente, siendo capaces de proporcionar el mismo nivel de iluminación. Así pues, los ahorros en consumos energéticos serán de un 75 u 80%. Las lámparas fluorescentes compactas duran entre 6 y 10 veces más que las incandescentes convencionales. Página 6 de 23 Limpiar periódicamente lámparas y luminarias de la vivienda logrando ahorros de hasta un 20% en el consumo de electricidad. Acondicionamiento térmico A continuación se dan una serie de consejos o buenas prácticas de ahorro en relación al acondicionamiento térmico de la vivienda. Estos consejos pueden tener una incidencia muy importante en la factura energética, ya que el acondicionamiento térmico supone el principal consumo energético de una vivienda. Veamos cada una de esas prácticas por separado. Calefacción En la mayoría de las ocasiones, una gran parte de la energía que se consume en calefacción, se pierde o malgasta innecesariamente, debido a un mal aislamiento de los hogares, a pérdidas de calor importantes por un mal cierre de puertas y ventanas, al funcionamiento incorrecto de la instalación, o aun mal uso de la misma, etc. Buenas prácticas La temperatura de la calefacción influye mucho en el consumo energético de un hogar. Por cada grado que se aumente la calefacción por encima de los 20ºC, se produce un incremento del consumo de entre un 6 y un 9%. Así pues, un control adecuado de la temperatura, logrará importantes ahorros energéticos. La temperatura adecuada de una estancia depende de muchas variables, siendo las actividades que en ella se realicen la más importante. De forma general, se pueden considerar como adecuadas las siguientes temperaturas: o Sala de estar y habitaciones de estudio: 18-22ºC. o Dormitorios: 17-19ºC. o Vestíbulos y cuartos de baño: 20-22ºC. o En la cocina prácticamente se puede eliminar la calefacción al existir otras fuentes de calor. o Por la noche, la temperatura ambiente se puede reducir hasta los 16ºC. Página 7 de 23 Aire acondicionado Buenas prácticas La temperatura ideal del aire acondicionado es de 25ºC con un grado de humedad aproximadamente del 50%. A medida que aumenta la humedad, será necesario reducir la temperatura para poseer la misma sensación térmica. Por cada grado que se desee reducir la temperatura, el consumo energético aumentará entre un 5 y un 10%. Así pues, conviene no regular la temperatura del termostato a una temperatura excesivamente baja. Hay que evitar que los electrodomésticos que generan calor se encuentren en las habitaciones refrigeradas, por el consiguiente sobreconsumo de energía para lograr la temperatura adecuada. Aislamientos Buenas prácticas Con una vivienda aislada y adecuadamente acondicionada térmicamente, se garantiza no sólo el ahorro en calefacción en invierno, sino también el ahorro de aire acondicionado en verano. Mediante un buen aislamiento se pueden conseguir ahorros de hasta un 40% en los gastos de calefacción, logrando además una serie de beneficios adicionales tales como: temperaturas más estables a lo largo del año, aislamientos acústicos, evitando ruidos, y aumento de la sensación de confort. Utilizar dobles ventanales cuando sea posible, con lo que se evitarán pérdidas de calor y frío en el hogar. Transporte y vehículos El transporte es uno de los mayores consumidores de energía, principalmente de combustibles fósiles, los cuales son una energía no renovable y altamente contaminante. A continuación se dan una serie de consejos para mejorar la eficiencia energética en el transporte. Página 8 de 23 Buenas prácticas energéticas en el uso y utilización de transporte y vehículos. Incentivar el uso del transporte público Por qué es conveniente: El uso y utilización de la energía de autobuses y trenes es de 3 a 5 veces más eficiente que el del coche o vehículo privado. El espacio urbano también constituye un recurso limitado, y el transporte público utiliza el espacio de forma más eficaz, evitando aglomeraciones y permitiendo a un mejor uso y disfrute de la ciudad. Mejorar los usos y mantenimiento del automóvil Moderar la velocidad y respetar los límites, no solo por seguridad sino también como consecuencia de los ahorros en el consumo que supone. Revisar periódicamente la presión de las ruedas, contribuyendo a evitar excesos de consumos. Conducir de forma suave, lo cual evitará consumos excesivos de combustible. Los arranques y frenazos bruscos desperdician combustible, además de desgastar y degradar ruedas y frenos. No sobrecargar el vehículo con artículos o accesorios innecesarios que le hagan aumentar de peso y, por lo tanto, de consumo. Evitar el uso excesivo del aire acondicionado, ya que es una fuente de consumo energético muy importante. Finalmente, un coche revisado y puesto a punto ahorra dinero en combustible, disminuye la contaminación y minimiza el desgaste del motor. Página 9 de 23 6. Ahorro y eficiencia en la industria textil ¿Qué tipo de medidas son aplicables en la industria textil para conseguir eficiencia y ahorros en el uso de la energía? Iluminación industrial En los sectores económicos de la industria y los servicios, la iluminación corresponde a más del 5% del consumo de energía. Así pues, su control es importante para la obtención de ahorros energéticos. Buenas prácticas Es conveniente, siempre que sea posible, aprovechar la luz natural. Utilizar tubos fluorescentes de alto rendimiento, logrando que se obtengan flujos luminosos un 10 % superiores, con un menor consumo y una mayor vida de los tubos. El nivel de iluminación es dependiente de la actividad laboral que se realice en cada dependencia de la instalación; así pues, cada una de las estancias debe tener la iluminación que más se corresponda con su función o utilidad. Utilizar, siempre que sea posible, detectores de presencia o temporizadores, evitando el encendido de luces innecesarias. Utilizar sistemas de arranque de lámparas de descarga electrónicos, obteniendo menores consumos. Limpieza de lámparas y luminarias en la instalación industrial, evitando que existan obstáculos que disminuyan la intensidad de la luz. Estas actuaciones pueden conseguir reducciones en el consumo de hasta un 20%. Página 10 de 23 Acondicionamiento térmico y ventilación Aislamientos Buenas prácticas. Aislar los muros y paredes de la instalación textil, al igual que los techos y suelos, obteniendo como consecuencia reducciones importantes de consumos energéticos en la organización. Asegurar la hermeticidad de los cerramientos, tanto internos como externos, de la instalación industrial, evitando consumos energéticos innecesarios por fugas. Sistemas de calefacción Buenas prácticas Aprovechar la luz natural, consiguiendo no solo ahorros en iluminación sino que, a su vez, es una fuente de calor gratuita durante el invierno. Establecer temperaturas de confort ajustadas a las necesidades de cada zona. De forma general, 20ºC es un ajuste suficiente durante el invierno. Correcta y continua revisión de los aislamientos, tanto en los sistemas constructivos como en las calderas y depósitos, evitando pérdidas energéticas. Aislamiento de las tuberías que transportan el calor, mejorando su aprovechamiento y uniformidad en la distribución del mismo, con el consiguiente ahorro por evitar el despilfarro energético. Ventilación La ventilación, en menor grado que la calefacción, también puede contribuir con un porcentaje importante al consumo energético de las instalaciones textiles. Página 11 de 23 Buenas prácticas Las principales ventajas energéticas, relativas a la ventilación de la instalación industrial, se consiguen en la fase de diseño, al tener en cuenta el componente de la eficiencia energética en todo el ciclo de vida del edificio y/o instalación. Se recomienda mejorar las condiciones de los locales para evitar la ganancia térmica -obtención de calor-, tanto interior como exterior, dotándolos de ventilación inducida natural, cuando sea posible. Ventilar permitiendo la entrada de aire exterior, justo el tiempo mínimo necesario. Ordenadores y equipos ofimáticos Buenas prácticas Apagar el ordenador cuando no se esté trabajando con él durante periodos superiores a una hora, evitando consumos innecesarios. Configurar el ordenador en modo “ahorro de energía” consiguiendo así reducciones de hasta un 60% menos de consumo, permaneciendo el ordenador en estado de reposo o de bajo consumo. Comprar ordenadores y otros equipos ofimáticos con etiquetado o certificación de equipos eficientes energéticamente del tipo “energy star”, “blue angel” o “white swan”, asegurando y garantizando un consumo energético adecuado. Disminuir el derroche de papel. Utilizar ambas caras del mismo, consiguiendo una reducción de los impactos ambientales debido a la actividad de la empresa. Utilización de “salvapantallas” sin animación, disminuyendo el consumo energético del monitor. Página 12 de 23 Medidas específicas en la industria textil Buenas prácticas energéticas específicas de la industria textil Realizar campañas de educación, formación e información energética y medioambiental a los empleados, promoviendo su participación activa en la gestión de la energía, su consumo y el ahorro energético. Efectuar un mantenimiento adecuado de los equipos industriales, pudiendo ser éste preventivo o predictivo, en función de los distintos equipos y procesos, consiguiendo así, ahorros energéticos, como consecuencia de evitar fallos o paradas en los procesos. Optimizar los procesos de secado a través de la implantación de técnicas más eficientes, tales como: presecados mecánicos; presecados con infrarrojos por baja frecuencia; evitar el sobresecado de los tejidos, minimizar las pérdidas de aire, etc. Automatizar la piscina de colores, secuenciando a su vez el tintado desde colores claros a oscuros, evitando la mezcla de colores y reduciendo los consumos. Optimizar el uso de los recursos, principalmente, agua, energía y materias primas. Reducción de embalajes, uso de contenedores reciclables y reciclaje de los residuos textiles, de forma que al reducir los recursos, también se reduzca el consumo energético. Optimizar la gestión de la línea de vapor y condensados, logrando reducir consumos excesivos. Recuperar el calor de fluidos, principalmente de los gases y fluidos emitidos en los procesos industriales. Promover la mejora de los aislamientos térmicos, principalmente el aislamiento de las tuberías, de forma que no se incrementen los consumos energéticos por fugas o pérdidas térmicas. Página 13 de 23 Optimizar los equipos de baño que tienen un alto consumo energético, tales como jets con baja relación y alto aprovechamiento térmico; autoclaves con baja relación baño y alto aprovechamiento térmico; foulard eficientes, jig/jiggers de alta eficiencia; winch de alta eficiencia; intercambiadores y mejoras en los flujos contracorrientes. Monitorizar y registrar el consumo de agua y energía de los distintos procesos, permitiendo comprobar en tiempo real los consumos energéticos, de forma que se posibilite la toma de medidas, para reducir o reconducir los consumos, si estos se desvían de la normalidad. Utilización de variadores de frecuencia en los motores, permitiendo la mejora de la flexibilidad del proceso de hilado, facilitando los procesos de acuerdo con los requerimientos específicos de funcionamiento, logrando finalmente la eficiencia energética de los procesos. Optimizar la gestión energética, mediante la implantación de sistemas de gestión de la energía. Utilizar los equipos más eficientes a su máxima capacidad y los equipos menos eficientes solamente cuando sea necesario, consiguiendo, de esta forma, una optimización de los consumos. Instalar controladores automáticos en relación al volumen de llenado y la temperatura del líquido en máquinas por lotes, evitando así, consumos excesivos. Igualmente, se recomienda instalar bajos y ultrabajos ratios de líquidos en la maquinaria de proceso por lotes, reduciendo consumos. Establecer procedimientos de producción bien documentados para evitar perdidas de recursos materiales, energéticos y humanos por prácticas de trabajos inadecuados. Adopción de sistemas de cogeneración energética -electricidad y calor- allí donde sea económica y técnicamente viable. Sustituir motores y equipos sobredimensionados y de baja eficiencia por otros más adecuados a la dimensión de la instalación textil. Página 14 de 23 Optimizar la combustión en calderas, evitando pérdidas por inquemados que hacen incrementar los consumos. Investigar y promover la posibilidad de la combinación e integración de diferentes tratamientos textiles en un sólo proceso, que permita reducir consumos energéticos. Utilización de rodillos de alta presión y sistemas de control de humedad de las piezas tejidas, consiguiendo así ahorros en los procesos de tejeduría. Optimizar la eficiencia de las máquinas de lavado, tanto en procesos continuos como por lotes. Optimizar la cantidad de materiales empleados, ajustando los diseños o patrones a las piezas con el corte de mayor rendimiento en cada caso, para reducir el consumo de tejidos y la producción de retales y, por lo tanto, los consumos energéticos. Control y regulación de procesos -principalmente en los de ennoblecimiento-, de forma que se consigan reducciones en las temperaturas de trabajo y de los tiempos de fabricación, reduciendo así los consumos energéticos. Reducir los tiempos muertos de la maquinaria y equipos al mínimo, apagando los mismos cuando su uso no sea necesario. Reutilizar el agua de enfriado en las aguas de proceso. Igualmente se recomienda la recuperación del calor, ahorrando energía. Sellado de los distintos componentes, partes de la maquinaria y/o instalaciones, para evitar las pérdidas de calor. Aislar tuberías, válvulas, tanques y maquinarias, con la finalidad de minimizar las pérdidas de calor. Optimización de calentadores, mediante la aplicación de la reutilización del agua condensada, aire de precalentado, y recuperación de calor de los gases de combustión. Página 15 de 23 Utilizar la electricidad en horas no-puntas, siempre que sea posible. Controlar la temperatura de los baños de tintado para evitar sobrecalentamientos y derroche de energía. Realizar periódicamente auditorías energéticas sobre consumos. Cuando se incorpore nueva maquinaria a la instalación, debe comprobarse su eficiencia en cuanto a consumo energético y de agua, es decir, verificar la certificación energética de la maquinaria. Recuperar el calor en las operaciones de secado de productos textiles. Utilizando el aire precalentado de salida en un nuevo ciclo de utilización. Acondicionamiento del aire en hilados, de forma que se eviten perturbaciones en todo el proceso de hilado y consumos excesivos como consecuencia de las perturbaciones. Comprobar que la electricidad se compra bajo la tarifa más apropiada y que el consumo de electricidad es conocido y controlado. Diferenciar y segregar las distintas corrientes de agua de los procesos textiles en fría y caliente, antes de que se produzca la recuperación de calor, consiguiendo así que los procesos sean más eficientes y, por lo tanto, menos consumidores de energía. Recuperar los residuos, en los procesos de hilatura, mediante aspiración, de forma que estos residuos no lleguen a los sistemas de climatización y acondicionamiento de aire, evitando su obstrucción y manteniendo su funcionamiento en los parámetros adecuados, sin excesos de consumos energéticos. Página 16 de 23 7. Sistemas de Gestión Energética -SGESistemas de gestión energética -SGE- o cómo implantar un plan de eficiencia del uso energético en el sector textil. La gestión energética es una metodología o sistema organizado de previsión y control del consumo de energía con el fin de obtener el mayor rendimiento energético posible sin disminuir el nivel de prestaciones de los procesos o de la empresa. Objetivos de la gestión energética en una organización: Controlar y gestionar con la máxima eficiencia la energía consumida por las instalaciones. Conseguir el mayor ahorro energético. Controlar y optimizar la facturación energética de las compañías. Disminución de los impactos ambientales de la organización como consecuencia de la disminución del consumo energético. Un sistema de gestión de la energía no es un sistema documental sino un procedimiento o metodología de ahorro de energía. El sistema de gestión energética y el programa que de él se desprenda, tiene que ir encaminado a la consecución de resultados y metas concretas. Por ejemplo, hay que concentrar los esfuerzos en el control de las principales funciones o consumos energéticos procesos productivos, iluminación, calefacción,...-. Lo más importante para lograr la eficiencia energética en una organización es que ésta cuente no solo con uno o varios planes de ahorro de energía, sino desarrollar, a su vez, un sistema de gestión energética que garantice la mejora continua. Beneficios de implantar el SGE Ahorros en energía de forma inmediata, desde las primeras facturas. Como consecuencia de los ahorros energéticos se consiguen ahorros económicos. Página 17 de 23 Permite en muchos casos, conseguir ahorros en energía sin necesidad de realizar inversiones. Elimina las ineficiencias en el uso de la energía convirtiéndolas en importantes ahorros económicos para la empresa. Permite la adopción rápida de medidas ante cambios legislativos que supongan ahorro de costes -por ejemplo: liberalización del mercado energético-. Promueve tecnologías menos contaminantes y más eficientes con la consiguiente reducción del impacto ambiental de la organización Etapas en la implantación de un SGE De forma genérica, para implantar un sistema de gestión energética se identifican cuatro fases o etapas fundamentales: 1. Diagnóstico de la situación. Auditoría energética inicial. Informe de diagnóstico. 2. Análisis del informe. Estudio de las Mejores Técnicas Disponibles. Preparación de planes de acción. Anteproyectos de ejecución. 3. Preparación y ejecución de los proyectos. Implantación y puesta en marcha de las mejoras. Ejecución de los planes. 4. Revisión y mejora del sistema. Página 18 de 23 8. Ejemplo de buenas prácticas en el sector textil Sustitución de lámparas en una instalación textil Se pretende reemplazar las lámparas incandescentes de alta potencia por fluorescentes compactos de baja potencia en una instalación textil, manteniendo el nivel de los lúmenes en toda la instalación industrial. El reemplazo de las bombillas se hará una por una. Las hipótesis de partida son las siguientes: El precio del kw/h = 0.10 € Las lámparas existentes son: Tipo de lámpara Cantidad 25 W A-19 10 100W A-19 20 150 W A-21 30 Las lámparas de sustitución serán Tipo de lámpara Cantidad 5 W T-4 10 26 W T-4 20 36 W T-5 30 Las lámparas están encendidas una media de 16 horas al día. Resultado de la sustitución Es sencillo comprobar cuales serán los ahorros conseguidos. Las horas anuales de operación serán: 16 horas/día x 5 días/semana x 52 semanas/año = 4.160 horas /año Página 19 de 23 Lámparas existentes Cantidad WATIOS Lámparas nueva 25 W A-19 10 5 W T-4 25 5 Diferenci Total a 20 200 100W A-19 20 26 W T-4 100 26 74 1480 150 W A-21 30 36 W T-5 150 36 114 3420 Viejas Nuevas 5100 Total Potencia ahorrada por el cambio = 5.100 W = 5,1 Kw kilowatios ahorrados por la sustitución x Ahorro energético generado = horas anuales de operación de lámparas x precio de kw/h Ahorro energético anual = 5,1 Kw x 4.160 horas/año x 0.10 € = 2.122 € Página 20 de 23 9. Legislación Legislación aplicable Real Decreto 833/1988 Sobre residuos tóxicos y peligrosos Ley 11/1997 de Envases y Residuos de Envases Ley 10/1998 de Residuos. Regula la producción y gestión de residuos Real Decreto Legislativo 1/2001 Texto refundido de la Ley de Aguas Ley 16/2002 de Prevención y Control Integrados de la Contaminación Ley 5/2002 sobre vertidos de aguas residuales industriales a los sistemas públicos de saneamiento Estrategia de ahorro y eficiencia energética en España 2004-2012 Plan de acción 2005-2007 de la estrategia de ahorro y eficiencia (E4) Fuentes de referencia Manual de buenas prácticas ambientales en la familia profesional de las industrias textiles. Ministerio de Medio Ambiente. Las buenas prácticas medioambientales en el textil. Generalitat Valenciana. Guía de mejores técnicas disponibles en España del sector textil. Ministerio de Medio Ambiente. Guía de buenas practicas medioambientales. Cámara de Madrid. Energía sostenible para Europa 2005-2008. Comisión Europea. Página 21 de 23 10. Direcciones de interés ¿Dónde se puede encontrar más información? www.aitex.es - AITEX- Instituto Tecnológico del sector Textil español www.fiteqa.ccoo.es - FITEQA-CC.OO Federación de industrias textil, piel, química y afines www.textil.org - Centro de Servicios de Internet para el Textil www.observatoriotextil.com - Observatorio Tecnológico Textil-Confección www.madeingreen.com - Sello Verde de Calidad de AITEX www.buscatex.com - Buscador de Empresas relacionadas con la Industria Textil www.aitpa.es - Asociación Industrial Textil del proceso algodonero www.idae.es - Instituto para la diversificación y ahorro de la energía www.energype.es - Programa de Mejora de la Eficiencia Energética en la Pyme Subvenciones Instituciones que ofrecen programas, subvenciones y ayudas relativas a la eficiencia y el ahorro energético: Ministerio de industria Turismo y Comercio: www.mityc.es Consejerías o Direcciones Generales de industria, energía y/o economía de las distintas CCAA □ Madrid: www.madrid.org □ Castilla y León: www.jcyl.es Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI): www.cdti.es Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE): www.idae.es Algunos ayuntamientos también han desarrollado programas de incentivación de la eficiencia energética. Se recomienda informase en las propios ayuntamientos en relación a ayudas y subvenciones. Página 22 de 23