LA TRANSICIÓN A LA DEMOCRACIA ÍNDICE TEMA PÁGINA 1− Crisis final de la Dictadura 2− Inicio de una Monarquía Parlamentaria 3− Elecciones democráticas 4− La Constitución de 1978 5− Intento golpista 6− Final de la transición 3 5 6 7 8 9 1− Crisis final de la Dictadura Esta etapa de crisis empezó a partir de la desaparición el 20 de diciembre de 1973 del almirante Luis Carrero Blanco, quien fue víctima de un atentado de ETA, y que se agravó también con las enfermedades del Dictador (1974−1975), el cual se sabía que estaba en sus últimos años de vida. Fue precisamente por esta razón por la que el régimen sufrió una gran crisis debido a la disputa de dos grupos políticos existentes y que apostaban por gobiernos muy diferentes. Por un lado, se encontraban los inmovilistas y, por el otro, los aperturistas o reformistas. En enero de 1974, se formó un nuevo gobierno con Carlos Arias Navarro como presidente, quien en su discurso des 12 de febrero en las Cortes anunció una apertura del régimen con una nueva ley y una serie de reformas. 1 Estas reformas tenían poco contenido real, ya que este nuevo gobierno fue decantándose hacia posturas más inmovilistas. Esto lo demostró con el cesé del ministro Pío Cabanillas. Esta situación tan irritante para el pueblo español desemboco en una oleada de manifestaciones y huelgas para demostrar el descontento general, a lo que el gobierno respondió con represión en las calles. Ante esta situación, los partidos políticos se unieron para derrocar el régimen alrededor de varias reuniones conjuntas como la Junta Democrática (impulsada por el PCE), la Plataforma de Convergencia Democrática (impulsada por el PSOE) y, tras la muerte de Franco, Coordinación Democrática (unión de las dos anteriores). En septiembre de 1975 fueron condenados a muerte y ejecutados cinco activistas de ETA y del FRAP, lo que provocó la última gran protesta internacional contra Franco. El 20 de noviembre de 1975 (coincidiendo con el aniversario de la muerte de José Antonio Primo de Rivera) murió Francisco Franco a los 83 años tras una larga agonía y fue enterrado con éste en la Abadía de la Santa Cruz del Valle de los Caídos. Foto del discurso de Arias Navarro donde pronunció su famosa frase: Españoles, snif, snif, [...] Franco ha muerto Foto del dictador en su capilla ardiente 2 Foto de la Cruz de los Caídos, donde yacen los cuerpos de Franco y de José Antonio Primo de Rivera Tras la muerte de Franco, la situación era de total inseguridad e incertidumbre, con la única certeza de que, según la Ley de Sucesión (1947) y el nombramiento de Juan Carlos de Borbón en 1969 como Príncipe de España, el sucesor de Franco en el poder debía de ser el Rey Juan Carlos I de España. 3 Foto del discurso que dio el rey Juan Carlos I después de la muerte de Franco y durante la jura como nuevo Jefe del Estado ante las Cortes del Estado. 2− Inicio de una Monarquía Parlamentaria En este periodo, tuvo un papel fundamental el Rey Juan Carlos I de Borbón, sin cuyo esfuerzo por desmantelar la dictadura y convertirla en un régimen democrático, habría sido muy difícil tal cambio radical. El 22 de noviembre de 1975 se designó oficialmente a Juan Carlos I como jefe del Estado a título de rey, y Carlos Arias Navarro fue confirmado como presidente del gobierno. Sin embargo, la Corona no le correspondía a Juan Carlos I, por lo que Don Juan de Borbón renunció a sus derechos a la Corona Española en favor de su hijo con un emotivo discurso pronunciado en el Palacio de La Zarzuela el 14 de mayo de 1977, dejando constar de manera oficial su renuncia a reinar en España como Juan III en favor de su patria y de su hijo para que éste no quedase como un usurpador del trono el cual no le pertenecía todavía. 4 Foto del discurso de renuncia al trono de Don Juan de Borbón y Battenberg Navarro procedió a la formación de un nuevo consejo de ministros, que mostró su incapacidad de llevar a cabo reformas democráticas. Así, la oposición democrática impulsó movilizaciones reivindicativas que defendían reclamaban las libertades, la amnistía de los presos políticos y la autonomía. Esta amnistía por decreto−ley llegó el 17 de marzo de 1977, aunque con efectos limitados. Ante esta situación del país, los inmovilistas respondieron con represión o con la acción de bandas o grupos paramilitares. El 30 de junio de 1976, Arias Navarro se vio obligado a dimitir, en gran parte forzado por el monarca, quien, contra todo pronóstico, en vez de nombrar como presidente al conde de Motrico, como se comentaba por la calle, nombró a Adolfo Suárez, arriesgando con esta elección incluso la Corona. Adolfo Suárez propuso la Ley de Reforma Política, aprobada el 18 de noviembre de 1976 por las Cortes franquistas, y que proclamaba la democracia. 3− Elecciones democráticas Desde principios de 1977 hubo una progresiva legalización de partidos políticos y sindicatos, se avanzó en el ejercicio de las libertades y se procedió a desmantelarlas organizaciones franquistas (CNS, Movimiento Nacional), lo que provocó acciones de violencia ultra, como los asesinatos en enero de 1977 de cinco abogados a manos de tres individuos armados en el portal número 55 de la calle Atocha donde había un despacho de abogados laboralistas de Comisiones Obreras (CCOO). La mayoría de sus miembros pertenecían 5 al PCE. Foto de los féretros de los abogados asesinados en la calle Atocha La legitimidad de las elecciones y de la futura democracia pasaba por la participación de todas las fuerzas políticas sin excepciones, por lo que, finalmente, el PCE fue legalizado el 9 de abril de 1977. El 15 de abril de 1977 se anunció la celebración en junio de elecciones. Esto hizo que se formasen nuevos partidos, como la Unión de Centro Democrático (UCD) alrededor de Suárez, y Alianza Popular (AP) fundada por la derecha antifranquista y representado por Manuel Fraga Iribarne y López Rodó. Los líderes principales del PSOE fueron Felipe González y Alfonso Guerra. El PCE se presentó con dirigentes como Santiago Carrillo y Dolores Ibárruri a la cabeza. Las elecciones del 15 de junio dieron la victoria a UCD. El PSOE se convirtió en la segunda fuerza política, y el PCE y AP obtuvieron resultados muy alejados de sus expectativas. Foto de la victoria de UCD el 15 de junio de 1977 en la persona de Adolfo Suárez, cuya frase más conocida fue Puedo prometer y prometo 4− La Constitución de 1978 Se optó por elaborar un texto de consenso entre todas las fuerzas parlamentarias debido a la importante representación parlamentaria que obtuvo la izquierda en las elecciones recién celebradas. Para ello, se formó una Ponencia de siete diputados, que fueron los llamados Padres de la constitución: Gabriel Cisneros (UCD), José Pedro Pérez Llorca (UCD), Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón (UCD), Miguel Roca Junyent (Minoría Catalana), Manuel Fraga Iribarne (AP), Gregorio Peces−Barba (PSOE), Jordi 6 Solé Tura (PCE). Foto de los Padres de la Constitución Este texto constitucional, de claro carácter progresista, definía a España como un Estado social y democrático de derecho organizado como una monarquía parlamentaria, y de carácter no confesional, garantizaba una serie de derechos y libertades civiles y políticas muy completas, se abolía la pena de muerte, daba el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones y reconocía el castellano y las demás lenguas españolas como lenguas oficiales en las Comunidades Autónomas correspondientes. El resultado de esta constitución significó el fin del Estado centralista y el comienzo de un proceso de construcción de un Estado de Autonomías. Proceso que concluyó en 1995 al establecer como Ciudades Autónomas a Ceuta y Melila. Así, España quedó finalmente dividida en 17 Comunidades y dos Ciudades Autónomas. 5− Intento golpista 7 En marzo de 1979 se celebraron nuevas elecciones legislativas en las que venció UCD, pero con una amplitud menor que en las de 1977. Este hecho de pérdida del apoyo popular, se sumó a las divisiones que existían dentro del propio partido debido a diferencias ideológicas y a disensiones producidas por los contenidos de las reformas básicas. Esta situación de crisis interna del partido se vio agravada debido a que Adolfo Suárez no consiguió un liderazgo incontestable dentro del partido y a que en 1980 tuvo que someterse a una moción de censura presentada por el PSOE en las Cortes. Además, el terrorismo de carácter independentista (ETA) o anticapitalista (GRAPO, FRAP) añadió más tensión a la construcción de la democracia y situó la violencia en primer plano de la vida política. Pero la principal amenaza al sistema democrático provenía de la reacción militar, ya que buena parte del Ejército era contraria a cualquier proceso democrático, como fueron la legalización del PCE, el desarrollo autonómico y el anuncio de reforma del Ejército. Por todo esto, se organizó en las filas del ejército una acción subversiva. Parte del ejército organizó un golpe de Estado con la pretensión de destruir la democracia. El 29 de enero de 1981 Suárez dimitió. Situación que aprovecharon los golpistas. El 23 de febrero el teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Tejero entró en el Congreso de los Diputados interrumpiendo la investidura del nuevo candidato a presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo. Mantuvo como rehenes a todos los diputados, mientras el capitán general Milans del Bosch se sublevó en Valencia llegando incluso a sacar los tanques a la calle. Estas acciones provocaron el temor de la poblción civil y la división de los militares. Todos se hallaban expectantes de lo que sucedería y si triunfaría este golpe. Ante esta situación, el Rey intervino en televisión sobre la una de la madrugada del día 24 de febrero, vestido con uniforme de Capitán General de los Ejércitos, para situarse contra los golpistas, defender la Constitución española y desautorizar a Milans del Bosch. A partir de ese momento el golpe se dio por fracasado. Durante la mañana del 24 fueron liberados los diputados y se condenó a diversas penas a los autores de este fallido golpe según su implicación. 8 6− Final de la transición El fracaso del intento golpista representó el principio de la desaparición de la amenaza militar. El gobierno de Calvo Sotelo entró en una fase de agonía hasta que en agosto de 1982 se disolvieron las Cortes y se convocaron elecciones generales. En 1982 se inició una nueva etapa política con la victoria electoral del PSOE por mayoría absoluta, el hundimiento de la UCD, el descenso de PCE, el ascenso de AP y la consolidación de los grandes partidos nacionalistas (PNV y CiU). El PSOE accedió al poder con un núcleo dirigente cohesionado y con un líder indiscutible, Felipe González. El cambio socialista no se propuso nacionalizar las industrias, ni solicitar los medios de producción, sino que se presentó como un proyecto de liquidación definitiva de la herencia del franquismo. Esto se concretó en un amplio programa de reformas con la prioridad de la lucha contra la crisis económica, la reconversión industrial y el avance hacia el Estado de bienestar. El objetivo de las reformas era la integración en la Comunidad Económica Europea (CEE) La plena integración de España en Europa se hizo efectiva el 1 de enero de 1986 con su incorporación en la Comunidad Económica Europea, la actual Unión Europea (UE). Este hecho introdujo a España dentro del grupo de los países occidentales más desarrollados, y la hizo experimentar una etapa de crecimiento económico y social. 9 Felipe González firmando el Acta de Adhesión ante la atenta mirada del Rey Juan Carlos I el 12 de Junio de 1985. Con este hecho, queda patente el final de un período de restricciones y represiones y el comienzo de otro de libertades y de intercambio con el resto del mundo. 2 9 10