Nueva época, Año 2 Número 1. Septiembre 2011 Boletín Cultural e Informativo del Centro Universitario de Integración Humanística, A.C. EL SUEÑO, LA SIESTA, SOÑAR EL HUMANISTA Francisco de Goya y Lucientes. Capricho No. 43. El Sueño de la razón produce monstruos. 1799. Museo del Grabado de Goya El Humanista. Boletín cultural e informativo del Centro Universitario de Integración Humanística, A.C. Publicación mensual, Nueva época, Año 2, no. 1, Septiembre de 2011. Rectora: Mtra. Ma. del Pilar Galindo de Cordero; Vicerrectora Mtra. Pilar Cordero Galindo. Directora Académica: Mtra. Regina H. Domínguez; Dirección y Diseño Editorial: Lic. Ana Lourdes Ross. EDITORIAL E l aguafuerte número 43 de la serie Los Caprichos es el pre-texto para el tema de este número de El Humanista. Como bienvenida al nuevo ciclo escolar, conviene recordar lo que conside- raba Goya para los albores del siglo XIX: el adormecimiento, el olvido de la razón, produce monstruos que pueden entenderse como el prejuicio, el horror; la ciencia podría ser un arma para liberar al espíritu de la ignorancia. Sin embargo, en el Manuscrito de Ayala, otra versión de este Capricho, se explica que aunada la fantasía con la razón, se producen las artes. Por ello la obra de Leonora Carrington entra en esta relación, pues el arte surge de los elementos imaginativos del alma humana y se materializa con una base estructurada, racional. No es posible concebir el arte sin tal racionalización, porque toda obra es resultado de un proceso creativo donde, invariablemente, interviene el pensamiento que planifica, moldea y soluciona. Tal hecho se observa también en la poesía barroca de Sor Juana, cuya estructura no responde únicamente a un sentimiento por expresar, sino a todo un pensamiento filosófico, donde los campos semánticos del Primero Sueño poseen una riqueza que va más allá de una lectura asequible tan sólo a los sentidos. El sueño, desde el punto de vista psicológico, es una experiencia que sentimos como realmente vivida, y nos lleva por símbolos, imágenes, signos, que mezclan la verdad con lo imaginado o deseado. Desde esta perspectiva, también puede entenderse el Capricho de Goya con el sueño de la razón por el poder mismo, que sin la temperancia, sin la prudencia, conduce también a menudo a las pesadillas. La guerra, la barbarie, el egoísmo, los intereses por encima de lo humano donde el fin justifica cualquier medio, son los horrores de la razón dormida. Como los sueños, léase deseos, pueden convertirse en pesadilla, es tarea del humanista morigerar su acontecer en el mundo de la vigilia. Ana Ross Página 2 Nueva época, Año 2 Número 1. Septiembre 2011 Leonora Carrington Por Paco Rossique* La artista Leonora Carrington siempre se burló de la etiqueta de surrealista. En una entrevista recordó que para los surrealistas, las mujeres eran vistas como un objeto. “Ser una mujer surrealista quiere decir que eres la que cocina la cena de los hombres surrealistas”, dijo. En efecto, el acercamiento de las pintoras al surrealismo fue a través de vínculos amorosos, como en los casos de Maruja Malló, de Remedios Varo, casada con Benjamín Peret; de Gala, la musa y compañera de Dalí; y de la propia Leonora, unida sentimentalmente a Max Ernst. Pero ninguna firmó los Manifiestos, ni tampoco participaron en la primera exposición de París en 1925. Algunos estudiosos de la obra de las mujeres pintoras, hacen notar que la visión que los surrealistas tenían de la mujer, provenía de los románticos y simbolistas. “El problema de la mujer es lo más maravilloso y turbador que existe en el mundo...”, se lee en el segundo Manifiesto de 1929. Whitney Chadwick, en su libro sobre las mujeres surrealistas, hace notar que “las múltiples y ambivalentes visiones de la mujer por el surrealismo convergen en la identificación que de ella hacía con las misteriosas fuerzas y los poderes regenerativos de la naturaleza. Las artistas se apresuraron a acercarse a esa identificación, pero lo hicieron con mente analítica y con actitud irónica”. A despecho de esta visión, Carrington y sus compañeras de generación como Leonor Fini, Kay Sage, Dorotea Tanning y Remedios Varo, demarcaron su trabajo, apartándose “de las alucinaciones y la violencia erótica de los varones”, para emprender una aventura artística plena de fantasía, donde predominó la ironía y el trazo fino, diferenciándose de las vacas sagradas de este movimiento. Leonora Carrington Bird Pong. 1949 *Tomado de ww.elestantedelfondo.blogspot.com/2007/01/arte-leonora-carrington.html Página 3 EL HUMANISTA Numerología en el Primero Sueño de Sor Juana. Por Susana Arrollo* El poema Primero Sueño fue escrito por Sor Juana Inés de la Cruz, según palabras de su confesor, el Padre Calleja y de acuerdo con la primera publicación del mismo -1692, en Sevilla-, hacia la madurez y plenitud de la existencia de la jerónima. Es sabido por todos los amantes de Sor Juana que éste fue su poema preferido, el más rico y ambicioso, a él han dedicado muchas horas de estudio tanto contemporáneos de la monja como hombres y mujeres en todo el mundo a lo largo de tres y medio siglos. De los 5,008 términos -palabras- que comprende el poema, existen 1,508 vocablos, es decir, entradas léxicas; de esta manera se puede observar la riqueza léxica del poema, además de su riqueza en todos los niveles de la lengua. Sintácticamente, en el poema se construyen imágenes mediante el empleo del hipérbaton que superan las expectativas del lector. Ésa es una de las razones por las cuales el poema es de una belleza inusitada. Los campos semánticos La organización de elementos que comparten algunas características o rasgos de significado común, es la base de la teoría del campo semántico. Cada uno de los campos semánticos representa una parte importante de la concepción del mundo que se "narra". Cabe resaltar que los campos semánticos que se han agrupado pertenecen a las diferentes zonas de significación que comprenden la naturaleza significativa del poema, es decir, se basan en sus significados esenciales proporcionados por los diferentes significantes que la autora ha propuesto en distintos momentos de la obra. De ahí que exista un campo de la religiosidad, otro de la mitología, otro de la naturaleza, otro de la navegación, de los animales, del arte, del orden, del movimiento, y otros más en oposición, por ejemplo de la luz y la oscuridad, o de la vida y la muerte. De los 55 campos semánticos del poema, son 34 los vocablos que se encuentran comprendidos en el llamado campo: 'dimensión'. En el trabajo antes mencionado -sobre la semántica y la retórica del poema-, se descubre el campo semántico del 'movimiento', el cual es el más numeroso tanto por los términos que tienen que ver con el movimiento, (verbos, sustantivos o adjetivos), como por la idea de movimiento que permea Página 4 Nueva época, Año 2 Número 1. Septiembre 2011 el poema, ya que desde el acto mismo de soñar, de pensar, de descubrir, de conocer, etc., se encuentra implícito el rasgo mencionado. El manejo de la numerología en la época barroca es singular. Los números y su alusión o recreación se encuentran contenidos en un lenguaje críptico, emblemático, el cual me propongo discutir en esta comunicación. En este campo referido -el de la 'dimensión'- se puede observar la importancia de los números, los cuantificadores, los términos que aluden a un proceso que se realiza por medio de la adición de cantidades o, en otros casos, el contexto permite reconocer la existencia de una propuesta significativa en este tenor. El campo de la 'dimensión' contiene los siguientes vocablos: aparatoso, cantidad, cinco, contar, craso, cuantidad, cuatro, dimensión, dos, madeja, medir, mensura, mil, multiplicado, multiplicar, número, numeroso, peso, poco, presupuesto, primero, proporción, proporcionado, quilo, segundo, tamaño, tanto, tres, triplicado, último, uno, varios, vasto, vez. Algunos de los términos contenidos en el campo mencionado son, en apariencia, distantes de la dimensión, sin embargo, forman parte de este pequeño repertorio de acuerdo con los usos de la época o las condiciones en la que se manejaron, así se observa el ejemplo de 'craso' cuyo significado tiene que ver con 'grueso'; el poema señala: faroles sacros de perenne llama, que extingue, si no infama, en licor claro la materia crasa consumiendo, que el árbol de Minerva de su fruto, de prensas agravado, Otro ejemplo sería 'madeja' que, desde luego, tiene que ver con cantidad. En el poema se lee. mientras nuestro Hemisferio la dorada ilustraba del Sol madeja hermosa, que con luz judiciosa de orden distributivo, repartiendo a las cosas visibles sus colores Página 5 EL HUMANISTA (…) Los vocablos que componen el campo de la 'dimensión' se encuentran distribuidos a lo largo del poema con diferentes frecuencias: 13 vocablos aparecen una vez cada uno, 8 vocablos aparecen 2 veces; 2, se encuentran 3 veces, 2, se encuentran 4 veces; 3 de ellos aparecen 5 veces; uno, 6 veces; 2, se encuentran 7 veces; 1 vocablo se encuentra 11 veces y un vocablo, 12 veces. La relación que existe entre el vocablo que se encuentra mayor cantidad de ocasiones -que es la palabra 'vez'- tienen una proporción, en relación con la que se encuentra más veces en el poema -que es la preposición 'de' con 215 frecuencias-, de .055%, es decir, aparentemente no se maneja en una alta frecuencia. Sin embargo, considerando que la palabra más empleada por Sor Juana es una palabra sin semántica, esto es, sin contenido nocional, y siguiendo de cerca el recuento lexicométrico del poema en el cual las palabras con sentido nocional en número de frecuencias son 'bien' (14); 'mal' (13), y si agrupamos las ocurrencias de 'vez' (6) y 'veces' (6), formando así la siguiente palabra autosemántica, con sentido nocional, en el tercer lugar en importancia de acuerdo con la cantidad de apariciones en el texto, es decir, 12. La siguiente palabra de mayor frecuencia en el poema es viento (11), luego se encuentran 6 términos con 10 frecuencias; posteriormente hay 6 con 9 frecuencias, después 8 con 8 y la frecuencia 7 es representada por 10 elementos léxicos, dos tienen que ver con el campo de la dimensión, se trata de los números 'dos' y 'tres'; por lo tanto, podríamos atrevernos a decir que el campo 'dimensión' es de una gran trascendencia en el texto pues en él se encuentra contenido el vocablo -insisto, de contenido nocional- cuyo número de apariciones es del 85% al de mayor incidencia y tras las frecuencias 10, 9 y 8, se encuentran dos vocablos cuya frecuencia es, en relación con la totalidad del poema, de .13, sumadas las frecuencias de los dos vocablos relacionados con la 'dimensión', existe una relación de .26, es decir, la cuarta parte de la totalidad léxica del poema se encuentra contenida en vocablos cuyo sentido nocional remite a la numerología. (...) En relación con el número 3 empezaremos señalando que en la manera como da inicio el poema: Piramidal, funesta…, se observa que la erección de las pirámides en una convergencia ascensional une el reencuentro de dos mundos: un mundo mágico ligado a los ritos funerarios para reteColibrí No. 6, Lomas Verdes, 1a sección, 53120, Naucalpan, Edo. de México Página 6 Teléfonos: 5343-24-96; 5343-25-98; 5343-25-32 Escríbenos: ana_ross@yahoo.com Nueva época, Año 2 Número 1. Septiembre 2011 ner indefinidamente la vida o el pasaje a una vida supratemporal, y un mundo racional que evoca la geometría y los modos de construcción. Se atribuye a Hermes Trismegisto la idea del símbolo de la pirámide como el verbo demiúrgico que, emergido del Padre (aunque sin haberlo éste engendrado) y gobernando toda cosa creada, es totalmente perfecto y fecundo. El nombre de Hermes Trismegisto tiene que ver con el número tres, Hermes, es considerado el padre de la alquimia, de él se ha tomado el nombre de hermetismo. Trismegisto significa tres veces grande, porque fue el gran filósofo, gran sacerdote y gran rey, dicen los historiadores y los mitólogos, poseía las tres partes de la sabiduría o filosofía del mundo universal. Para Chevalier, el número tres, expresa un orden intelectual y espiritual, en Dios, dentro del cosmos o dentro del hombre. Resulta de la unión del uno y el dos, es producto de la Unión del Cielo y de la Tierra. El hombre, hijo del cielo y de la tierra completa la gran triada. Dios es uno en tres personas. La cantidad de las interpretaciones en relación con el término 'tres' rebasaría cualquier posibilidad de análisis en un espacio tan breve como éste. Los estudios emblemáticos, simbólicos y crípticos sobre este numeral, serían de gran auxilio para demostrar la preponderancia del 'tres' sobre casi cualquier término empleado por Sor Juana no sólo en el PS sino en cualquiera de sus obras y en la mayor parte de la literatura tanto occidental como oriental. Su significado ha sido estudiado por filósofos, literatos, psicólogos y hermeneutas en general mostrando singularidades en relación con diversos ámbitos del saber humano. *Fragmentos. Vía Internet: Revista Electrónica Razón y Palabra, No. 34, agosto-septiembre de 2003. En www.razonypalabra.org.mx/anteriores/n34/sarroyo.html#Sa Página 7 EL HUMANISTA QUÉ ES UN SUEÑO* Todos tenemos la experiencia de soñar y por ello sabemos lo que es un sueño y tenemos la experiencia de que es algo más de lo que contamos, que nuestros relatos no los recogen de una forma exacta, sin embargo el conocimiento científico de los sueños tiene que basarse en las narraciones que se hacen de ellos, porque no vale analizar exclusivamente nuestros propios sueños para hacer una teoría sobre ellos. Hobson (2000) describe de la siguiente forma lo que es un sueño: “La actividad mental que ocurre en el sueño se caracteriza por una imaginación sensomotora vivida que se experimenta como si fuera la realidad despierta, a pesar de características cognitivas como la imposibilidad del tiempo, del lugar, de las personas y de las acciones; emociones, especialmente el miedo, el regocijo, y la ira, predominan sobre la tristeza, la vergüenza y la culpabilidad y a veces alcanzan una fuerza suficiente para despertar al durmiente; la memoria, incluso de los muy vívidos, es tenue y tiende a desvanecerse rápidamente después de despertarse a no ser que se tomen medidas especiales para retenerlo”. Las fases del sueño Dentro del sueño se distinguen distintas fases que se identifican por la existencia o no de un movimiento rápido de ojos REM (Rapid Eye Movement), que es visible debajo del párpado para el observador. En el sueño no-REM (NREM) que se llama también sueño lento, se distinguen también cuatro etapas (Bobes, Díaz y Bomper, 1999): La Etapa 1 de transición de la vigilia al sueño, ocupa cerca del 5% del tiempo de sueño en adultos sanos, desaparecen las ondas alfa que en el EEG corresponden a la vigilia y son substituidas por ondas más lentas (ondas theta) propias del sueño NREM. También aparece un enlentecimiento del latido cardíaco. Durante esta fase, el sueño es fácilmente interrumpible. Esta etapa dura pocos minutos. La Etapa 2 aparece a continuación de la 1 y representa más del 50% del tiempo de sueño. Se caracteriza por ondas electroencefalográficas con una frecuencia mayor, que las theta. El tono muscular se hace algo más débil y se eleva el umbral del despertar. Corresponde al principio del sueño propiamente dicho. Página 8 Nueva época, Año 2 Número 1. Septiembre 2011 Las Etapas 3 y 4 se corresponden al sueño más profundo porque durante ellas aparecen las ondas delta, que son muy lentas. El tono muscular es débil y la frecuencia cardiaca y respiratoria disminuyen. Durante ellas ocurren los sueños, así como los episodios de terror nocturno en el niño y los episodios de sonambulismo. Los movimientos oculares, si existen, son lentos. Después de pasar por estas etapas, durante unos 70 a 120 minutos, suele presentarse la primera fase REM (Rapid Eye Movement, Movimiento Rápido de Ojos). El tiempo que se tarda en iniciar esta fase nos dará la latencia REM. El sueño REM ocupa el 20% del tiempo total del sueño en el adulto, aunque varía con la edad, siendo mayor en los niños y en él se observan descargas de movimientos oculares rápidos y una abolición completa del tono muscular, la frecuencia Fotograma de Un perro Andaluz respiratoria y el pulso se hacen más rápiLuis Buñuel y Salvador Dalí dos e irregulares. Luego, las diferentes fases del sueño se alternan cíclicamente a lo largo de la noche, durante la primera parte del sueño predomina el sueño NREM y durante la segunda los periodos REM se van haciendo más largos. Durante el sueño normal aparecen periodos de vigilia tan breves que pueden no ser recordados al día siguiente. Los estudios sobre la fisiología del sueño han avanzado de forma muy importante en los últimos años basándose en las nuevas tecnologías de neuroimagen, entre otras. Las características fisiológicas de la actividad onírica varían a lo largo de las distintas etapas del sueño. Durante el sueño REM aparecen imágenes más raras y estrafalarias, los reportes de los sueños son más largos, más emocionales que en las etapas NREM lo que correlaciona con la diferente fisiología de estas fases. *Vía Internet: www.psicoterapeutas.com/pacientes/suenyos.htm Página 9 EL HUMANISTA DE LA LENGUA Y OTRAS MARAVILLAS POESÍA José Carlos Cataño No pienses la poesía, hazla. No pienses la música, componla. No pienses la pintura, píntala. Pensar en la vida y vivir el pensamiento. * Lo que se resiste, déjalo. Como un techo por donde entra todo el aire. La noche de todas las maneras te acompaña, aunque nunca hayas dado con su palabra. * Si tú vivieras ahora al margen de tus faltas y tus errores. Si yo viviera todavía al margen de mis faltas y mis errores... Pudiera pasarme el resto escuchándote, conociéndote, aprendiendo lo que en vida de ti no fue posible. * Tendría que parar y preguntar: ¿Qué es lo que pasa? Y ya antes de entrar en la pregunta -en esa fuente de ansiedad-, con reparar en que use o prescinda de los pronombres, o que introduzca es lo que, se desata la maraña de las preguntas subordinadas, o bien aisladas, o bien espontáneas y deudoras de un sistema remoto, o bien secretamente concatenadas a la pregunta inicial. De tal modo que poco antes de cesar el pensamiento para contemplar mi pregunta, sobreviene todo tipo de incertidumbre, y la avidez de saber y la avidez de desentrañar la incerteza; y eso es lo que nos pierde. Lo que nos sumerge otra vez en el océano de la inquietud, del que queríamos, por un momento solo, salir para averiguar por qué sufrimos. Era mediodía. Las gentes iba por la calle encandilada. Yo sólo quería averiguar por qué bajo el azul sangrante del cielo vivimos en la angustia. Página 10 Nueva época, Año 2 Número 1. Septiembre 2011 PÍLDORAS DE ARTES Land Art. Es una corriente artística contemporánea que utiliza paisajes y elementos de la naturaleza como escenarios y medios para hacer arte. Nació en la década de los setenta para llamar la atención sobre la devastada naturaleza. Su principio radica en intervenir el espacio natural, crear con sus propios elementos y dentro de su mismo entorno, de forma que se realiza in situ, en regiones remotas y a menudo de difícil acceso. Parte de sus características esenciales, está su tendencia a ser arte efímero, para que sean los mismos fenómenos naturales los que desgasten los materiales de la obra para reintegrarlos a su propio medio. Por ello, lejos de pertenecer a circuitos comerciales, su registro se obtiene a partir de fotografías, videos o dibujos, que son los que se exponen en galerías y museos. En el Viejo Continente existe la Real Academia Española de la Siesta (RAES), institución encargada de promover y vigilar el correcto desarrollo de una verdadera siesta. Estas son las que dictaminó como las: LEYES BÁSICAS DE LA SIESTA 1. La siesta solo se puede tomar después de las 14:00. 2. Si se hace la siesta antes de esta hora es la siesta del carnero, no una siesta propiamente dicha, además te quita el sueño para la de después de comer, la reglamentaria. 3. Se aconseja tomar la siesta después de una comida copiosa, regada por caldos de la tierra. 4. El lugar ideal para una siesta es un sofá o sillón, también vale la cama, con o sin deshacer las sábanas, pero también una siesta al aire libre al sol o a la sombra debajo de un árbol incrementa un 10% más de su valor. 5. La siesta es personal e intransferible...Si vas a la cama con otro/a (s) ya no es siesta propiamente dicha, aunque quizás en ese caso existan más aportaciones para la mejora de la salud que con la siesta tipo. 6. La siesta más valiosa es la de pijama y orinal. El orinal siempre tiene que estar debajo de la cama o el sofá y no encima.... 7. La mantita de la siesta tiene que ser "reglamentaria", debe cumplir unas estrictas normas de calidad aprobadas únicamente por cada siestista. 8. Nunca se debe de poner un vaso de agua cerca, eso evitaría ese bonito efecto lengua estropajosa cuando te levantes. Página 11 Boletín Cultural e Informativo del Centro Universitario de Integración Humanística, A.C. 9. Una siesta sin ronquidos pierde un 10 % de su valor. (Regla unánime de la RAES). 10. No existe, ni existirá nunca, control antidopaje contra la siesta, es tonto suponer que alguien ingiere tranquilizantes para dormitar al mediodía. 11. La siesta siempre conservará su carácter de amateur...Profesionalizar la siesta, en aras de mejorar el rendimiento laboral, está estrictamente prohibido. 12. La siesta no debe exceder los 45 minutos ni resultar inferior a los 15, aunque cada cual es libre de alargarla en tiempo de vacaciones. 13. No se apagará, ni se le bajará el volumen al aparato de sonido o televisión que esté cerca del siestista, ya que se le despertaría sin remedio. 14. El que se despierte de mal humor después de una siesta recibirá un aviso, a los tres avisos será expulsado de la Academia. 15. Será ampliamente recomendable el uso de documentales televisivos de ayuda, documentales científicos de nombres tan prometedores como: "La transhumancia de ñú","Por qué el salchichón no es considerado Vincent Van Gogh chorizo", o "El efecto invernadero La siesta. 1890 en la creación de las termiteras". 16. La regularidad y la constancia a la hora de practicar la siesta mejora la calidad de ésta. 17. Expandir, publicitar y propagar la siesta es deber y derecho de todo siestista. 18. Se someterá el derecho a la siesta a la O.N.U. para la consideración y aprobación de todos los países civilizados. Para los fines convenientes, nada como seguir estas reglas básicas para conseguir un buen descanso.