LA CRIMINOLOGÍA Y LA TECNOLOGÍA Dr. Gino Ríos Patio Presidente del CECRIM La realidad nos muestra cotidianamente una serie de condiciones criminogénicas que merecen la atención de la Criminología, la cual por su carácter multidisciplinario tiene el efecto de convocar inmediatamente la preocupación de las disciplinas científicas implicadas en la importante tarea de prevenir la criminalidad, para evitar que esas condiciones originen sus devastadores efectos. Las redes sociales son, no cabe duda, un invento que presta un útil servicio a las personas, al ponerlas en contacto y permitir su comunicación instantánea, sin conocer fronteras de ninguna índole. Sin embargo, pueden convertirse en una siniestra condición criminogénica, que puede llegar a perturbarla vida de los jóvenes, que son los usuarios más asiduos de este medio, en caso se cometan excesos en su uso, que es lo que generalmente ocurre por las particulares características que presenta esta red comunicacional. La noticia nos llega a través del Diario El Comercio, edición de 18 de noviembre de 2012, y da cuenta que en la ciudad de Arnhem, Holanda, el sábado 14 de enero un adolescente de 14 años llegó hasta la casa de una chica de 15 años, tocó el timbre y cuando ésta abrió la puerta, se abalanzó sobre ella y le asestó varias puñaladas, ocasionando su muerte tras cinco días de agonía. El padre de la joven, al tratar de defenderla, también resultó herido. La investigación determinó que una pareja de adolescentes (15 y 16 años), amigos de la chica asesinada, le habían ofrecido al joven atacante 100 euros y pagarle todas sus bebidas cuando salieran de fiesta, por eliminar a su víctima, que era amiga de ellos, pero que les había molestado por publicar en Facebook unos comentarios maliciosos sobre la supuesta vida libertina de la joven de la pareja, por lo que ella y su novio habían decidido vengarse. El hecho es verdaderamente espeluznante y sobrecoge pensar los excesos que vertiginosamente se pueden llegar a cometer por un mal uso de la tecnología o por la influencia que ésta ejerce sobre la mentalidad inmadura, la personalidad en desarrollo y el temperamento frenético de un adolescente que prácticamente vive pegado a la red, desafiando al tiempo, la imaginación y la vida misma, sin controles, límites ni demarcaciones tecnológicas ni éticas. 1 La sentencia impuesta al adolescente asesino le impuso un año de detención en un centro de menores y tres de internamiento psiquiátrico. A los autores intelectuales, les impuso dos años de reformatorio y tres de internamiento psiquiátrico. Al ser menores de edad, no se les pudo aplicar las penas previstas para el mismo crimen cometido por un adulto, no obstante haber declarado el joven homicida que de haber sido necesario hubiera eliminado a la familia entera con tal de lograr el objetivo de matar a la señalada víctima. El delito cometido es gravísimo. El adolescente convertido en sicario por precio recibido y promesa ofrecida, venció sus escrúpulos y activó sus pulsiones ya exacerbadas por el uso indiscriminado e ilimitado de la red, cayendo irremediablemente en ésta, luego de haber sucumbido al riesgo fatal al que están expuestos cotidianamente nuestros jóvenes en la actualidad. Inmediatamente surge la reflexión que se impone ante tales circunstancias. Debemos tener absolutamente claro que enseñar es instruir o transmitir conocimientos e indicar caminos. Es una actividad grupal a cargo de docentes. Muy distinta de educar, que implica desarrollar y perfeccionar las facultades de las personas. Es, sin duda, una actividad Individual, a cargo de maestros. Recordemos que etimológicamente significa “hacer salir de dentro hacia afuera”. En consecuencia, como padres y miembros de una sociedad civilizada, debemos poner todo nuestro esfuerzo en educar, para lograr formar personas valiosas, éticas y libres De acuerdo con Jacobs, Mónica, Mory-Odette Vélez, Eliana en su libro Ética y Política. Arte de vivir y convivir. UPC, 2000. Lima, la dimensión individual del ser humano es la capacidad de idear, escoger y crear, acertando y equivocándose. Por ello, debemos educar con base en la ética y dentro de la libertad, para producir conductas comprometidas con los valores de individuos razonables y ecuánimes, a fin de contrarrestar lo que podríamos llamar la paradoja del mundo al revés, es decir, gran avance tecnológico y enorme retroceso social. Recordemos y eduquemos a los jóvenes en que lo fundamental no es tener libertad sino ser y vivir bien; afrontar la existencia y resolver los problemas. La libertad en el ser humano tiene un fin y propósito que es imprescindible para establecer responsabilidades y permitir la convivencia, porque conciencia y libertad nos hace seres moralmente responsables. La libertad, es una facultad individual que sirve para ordenar la vida social. Toda persona tiene que vivir su vida sólo por y para sí mismo, proyectándose hacia alguna meta trascendente para que su vida sea plena. En cambio, si nos detenemos en el yo, definitivamente nos convertiremos en nuestros esclavos. Si 2 nos ocupamos de los fines externos seremos víctima de fuerzas que nos pueden llevar hasta despreciarnos. Es una coyuntura de hondo contenido ético que debemos resolver ejercitando responsablemente nuestra libertad. Benjamín Franklin dijo: “El pastor retira a la oveja del lobo, por ello la oveja le agradece y lo considera su liberador, mientras el lobo lo denuncia como destructor de la libertad. Extraigamos nuestras propias conclusiones. Invitamos al Centro de Estudios de Derecho y Tecnología a sumarse a esta preocupación. *************** 3