Tertúlies literàries REUNIÓ ¿Qué han hecho con mi país, tío? Dimarts, 19 d’octubre de 2004 a les 19:30 hores Biblioteca Central T e c l a S a l a Av. Josep Tarradellas 44 08901 L'Hospitalet de Llobregat Tel. 93 260 24 84 Fax 93 260 24 85 http://www.l-h.es/teclasala b.hospitalet.ts@diba.es Biblioteca Central Tecla Sala de Michael Moore L’autor: Michael Moore Michael Moore nació y se crió en Flint (Michigan); a los 14 años asistió a un seminario católico, donde estudió para convertirse en sacerdote y a los 18 años fue nombrado director de su escuela, por lo que se convirtió en uno de los más jóvenes funcionarios públicos de Estados Unidos. A los 22 años fundó The Flint Voice, uno de los diarios alternativos más respetados del país, del que ha sido editor durante diez años. A mediados de los años ochenta fue productor, director, autor y presentador de la serie televisiva TV Nation, galardonada con un Premio Emmy. En 1989, Michael Moore dirigió Roger & Me, una película que hizo historia y que narraba su odisea personal para entrar en contacto con el presidente de la General Motors, Roger Smith, al que quería pedir explicaciones sobre las desastrosas consecuencias que la reestructuración de General Motors había tenido sobre su ciudad natal, Flint (Michigan). Este documental fue incluido en más de cien listas de las mejores diez películas del año elaboradas por los críticos estadounidenses, y, entre otros, obtuvo el Premio al Mejor Documental del Círculo de Críticos Cinematográficos de Nueva York. Los beneficios que produjo fueron aportados por Moore para la creación del Center for Alternative Media, una fundación que ha empleado más de medio millón de dólares para subvencionar las obras de directores noveles o las actividades de grupos que trabajan en asuntos sociales. Además, ha escrito y dirigido la película Canadian Bacon (Operación Canadá, 1994), que participó en el Festival de Cannes de 1995 (Sección Un Certain Regard). Su segundo documental largo, The Big One (1998), que ha obtenido igualmente numerosos premios, ha dado a conocer al público las fechorías de las grandes empresas y de los políticos insensibles e indiferentes obligando a que Nike dejara de utilizar a niños como fuerza de trabajo barata en Indonesia. En los años 1999 y 2000, ha producido dos temporadas de la serie televisiva The Awful Truth, definida por Los Angeles Time como "la más cómica y divertida sátira política". Michael Moore, además, ha dirigido los vídeos musicales de REM y de Rage Against the Machine, y ha participado varias veces en programas televisivos como Politically Incorrect; The Dossier Tertúlies Literàries Biblioteca Central Tecla Sala 1 Late Show with David Letterman y Late Night with Conan O'Brien. Además de su éxito como cineasta, Moore es uno de los autores de no ficción más leídos en Estados Unidos con dos grandes éxitos de ventas: Stupid White Men and Other Sorry Excuses for the State of the Nation (2001, editada en España en 2003 con el título de Estúpidos hombres blancos) y Dude, Where's My Country (2003; editado en España en 2004 bajo el título ¿Qué han hecho con mi país, tío?), además de otros dos libros Downsize This! Random Threats From an Unarmed American y Adventures in a TV Nation (coescrito con Kathleen Glynn). En 2002 dirigió el documental Bowling for Columbine, que obtuvo el Premio del 55 Aniversario en el Festival de Cannes 2002, Premio César a la Mejor Película Extranjera y Oscar a la Mejor Película Documental, un hito en la historia del documental. Su siguiente película, FAHRENHEIT 9/11, fruto de más de un año de cuidadosa investigación, ha sido galardonada con la Palma de Oro del Festival de Cannes de 2004. FONT: http://www.comohacercine.com/chc_detalle.php?ide=832 La novel·la : ¿Qué han hecho con mi país, Moore, Michael. ¿Qué han hecho con mi país, tío? Barcelona: Ediciones B, 2004. 263 p. ISBN: 84-666-1684-5. 18 euros Tras el clamoroso éxito internacional de su última obra, Estúpidos hombres blancos y de Bowling for Columbine, el documental más visto en la historia del cine, Michael Moore vuelve de nuevo a la carga y sin pelos en la lengua con ¿Qué han hecho con mi país, tío? Una sarcástica y despiadada cruzada con una clara misión: acabar de una vez por todas con el mandato de George W. Bush, el hombre que se coló en la Casa Blanca gracias a los compinches de su papá. Moore no deja títere con cabeza al tiempo que invita al lector a ponerse manos a la obra para tratar de salvar al mundo de uno de los hombres más poderosos y nocivos del planeta. FONT: http://www.nodo50.org/vocesdehuelva/galeria_de_libros.htm Dossier Tertúlies Literàries Biblioteca Central Tecla Sala 2 Opinió: Opinió Estúpidos hombres blancos, del polémico Michael Moore, fue la obra de no-ficción más vendida en los Estados Unidos durante el año 2002. También en España el volumen de ventas alcanzó cifras importantes, e idéntico destino comercial podemos augurar para este reciente ¿Qué han hecho con mi país, tío? En la reseña correspondiente al primero de los títulos mencionábamos como el volumen proporcionaba “material más que suficiente para hacernos reflexionar sobre buena parte de los temas que preocupan actualmente a la civilización y especialmente a los norteamericanos...” (El Cultural, 23-29-X, 2003, pág. 17), e idéntica afirmación se puede reproducir a propósito del más reciente. Tal vez con la sutil, pero no por ello menos trascendente matización, de eliminar la mención norteamericana, pues los “temas” tratados, dada la globalización política y las consecuencias de los recientes acontecimientos internacionales, han dejado de ser una incumbencia exclusivamente nacional. La argumentación, en cada uno de los once “ensayos” que componen el volumen, vuelve a girar en torno a la presidencia Bush y las consecuencias de los atentados del 11-S. El tono satírico, en ocasiones irónico y siempre mordaz e incisivo, continúa siendo similar, si bien ahora observamos una mayor seriedad, profundidad incluso, tanto en las formas y el tratamiento, como en el contenido conceptual. No todos tienen el mismo rigor analítico: “Jesús W. Cristo” o “Cómo hablar con tu cuñado conservador” son piezas intrascendentes y con una buena dosis de demagogia, si bien es precisamente en éstas donde Moore alcanza sus mejores y más sublimes momentos humorísticos. En la primera de ellas es Dios el narrador, y lamenta el desliz que tuvo con George W. Bush, a quien creó “para que fuera uno de los típicos niños juerguistas.” (pág. 143), de forma que ahora se ve obligado a “asegurar lo siguiente: 1. Soy el Señor vuestro Dios y ÉL es el Hijo de George, no el Hijo de Dios. Le haré pasar la eternidad aparcando coches en el parking de los VIP del infierno en cuanto le ponga las manos encima.” (pág. 144). Si en Hombres blancos frivolizaba respecto al complejo asunto de Irlanda del Norte, aquí aborda los salarios y la situación laboral de los trabajadores de forma un tanto desahogada. Pero resulta injusto cargar las tintas en las excepciones, pues los logros superan con creces las posibles censuras y objeciones. “Siete preguntas para George de Arabia”, el primero de los ensayos, suscita todo un universo de interrogantes respecto a la verdadera autoría de los atentados del 11-S. Moore es consciente de la importancia y trascendencia de sus razonamientos y renuncia inteligentemente a su peculiar tono satírico en la elaboración de toda Dossier Tertúlies Literàries Biblioteca Central Tecla Sala 3 una teoría bien documentada y en buena medida coherente si atendemos a las referencias aportadas (en 36 páginas incluye 97 notas a pie de página, referidas a artículos de prensa e incluso informes del propio gobierno estadounidense, avalando sus afirmaciones). La insinuación de Moore gira en torno al hecho de que si bien fueron los talibanes quienes atacaron las Torres Gemelas en la fatídica fecha tal vez no fuera “un tipo sometido a diálisis desde una cueva de Afganistán” quien estuviera detrás, sino alguien mucho más próximo: “tus amigos los saudíes”. Difícilmente responderá Bush a interrogantes del tipo “¿Es cierto que los Bin Laden han mantenido relaciones comerciales contigo y tu familia de manera intermitente durante los últimos 25 años?” (pág. 21) y el tiempo dirá si nos encontramos ante un nuevo y singular “caso Kennedy” de tal vez imposible, resolución. Un buen número de lectores españoles encontrarán especial deleite durante la lectura de “El hogar del embustero”. El axioma inicial resulta ser una excelente piedra angular para la posterior elaboración: si el asunto Lewinsky “llevó a un presidente al borde de la destitución y el procesamiento” (pág. 55) no por el hecho en sí mismo, sino por haber mentido, por qué no ocurre la mismo con Bush respecto a su “mentira” en cuanto a las armas de destrucción masiva del dictador iraquí. Tal vez, argumenta, porque “si se sostiene una mentira de manera continuada durante mucho tiempo, termina por convertirse en verdad”. (pág. 56) Aunque no tan documentado como el anterior, también este ensayo ofrece una serie de datos y cifras significativas – “(sólo el 13 por ciento de los españoles estaba a favor de la guerra, y sólo en el caso de que fuera una invasión respaldada por la ONU)” (pág. 85)– como la relativa a la cobertura televisiva del conflicto: por cada argumentación en contra de la guerra un telespectador norteamericano podía ver 25 apoyando la intervención. (pág. 91) “Los Estados Unidos de ¡BUU!” bien puede resultar no tan “apasionante” como los anteriores, pero en él se trata el asunto más inquietante, y a la larga sustancial, del libro: aquel relativo a las libertades civiles. El tono, sin duda, no es tan riguroso como en los anteriores, y tampoco encontraremos la garantía que siempre ofrecen los datos y cifras documentadas, pues la tesis defendida, se fundamenta en aspectos índole filosófico-psicológica y sociológica. No se tardó en hacer creer que el mundo está plagado de terroristas, y consecuencia directa de ello ha sido una sociedad dominada por el miedo (quien haya visitado recientemente los Estados Unidos entenderá lo expuesto), “el miedo irracional es de lo peor que hay. Nos arrebata nuestra brújula de la supervivencia. [...] Hace que no nos guste vivir cerca de alguien de otra raza.” (pág. 112). En su conclusión final Moore se hace eco de una preocupación cada vez más extendida y que, como en otros casos, también invita a la reflexión: “Hemos perdido el sentido de la perspectiva. Y Dossier Tertúlies Literàries Biblioteca Central Tecla Sala 4 lo están utilizando contra nosotros, y no los terroristas, sino los líderes que quieren aterrorizarnos.” (pág. 117) En el resto de los ensayos se tratan temas de lo más heterogéneos, desde el problema palestino-israelí y el papel que juegan los Estados Unidos en todo ello hasta las elecciones norteamericanas, pasando por las implicaciones derivadas de una economía basada en el petróleo, como en el futurista y divertido “Poderoso caballero es Don Petróleo”. Como ocurriera con Hombres blancos la polémica está servida; para unos no pasará de divertimento, para otros será el catón referencial y algunos quedarán convencidos como el autor de que “¿La historia? Una engañifa.” (pág. 93). José Antonio GURPEGUI FONT: http://www.elcultural.es/HTML/20040311/Letras/LETRAS9053.asp Altres llibres: Moore, Michael. Downsize this! Random treats from an unarmed american. New York: HarperPerennial, 1997. 317 p. ISBN 0-060-9773-37 No hay nada más sagrado que la verdad en el hilarante discurso de Michael Moore contra el estado de América, Downsize this! Con la misma tenacidad descarada que le ha convertido en un héroe, Michael Moore se mete en la piel de gigantes corporativos, políticos, lobbies y de los medios – cualquiera que haya hecho la vida más difícil a los millones de americanos que trabajan más horas para pagar menos y ya están hartos. FONT: www.michaelmoore.com Moore, Michael. Estúpidos hombres blancos. Barcelona: Ediciones B, 2003. 288 p. ISBN: 84-666-1281-5 18 euros ¿Se acuerdan de cuando todo iba bien? ¿Cuando había superavit, se reducía la contaminación, la paz se abría camino en Oriente Medio y en Irlanda del Norte, y el puente hacía el nuevo siglo estaba reforzado con un Dossier Tertúlies Literàries Biblioteca Central Tecla Sala 5 cable de conexión de alta velocidad a Internet y revestido con oro de 401 kilates? Ya esté apelando a las Naciones unidas para que eliminen de su puesto a la Familia Bush, o a los afroamericanos para que pongan carteles de “solo blancos” a la entrada de negocios turbios, o rezando para que Jesse Helmes se bese con un hombre, Michael Moore quiere curar al mundo de una plaga de estúpidos hombres blancos. El libro no de ficción más vendido del 2002, Estúpidos Hombres Blancos ha encabezado durante un año la lista de bestsellers del New York Times. Número 1 de ventas en Canadá, Gran Bretaña, Alemania, Australia, Japón, Irlanda y Nueva Zelanda; ha sido traducida a 24 lenguas, y ha vendido más de 3 millones de copias en todo el mundo. FONT: www.michaelmoore.com Diaz, Leonard. Michael Moore. Barcelona: Ediciones de la Tempestad, 2003. 125 p. ISBN: 84-7948-982-0. 10 euros Biografía básica de este norteamericano inquieto e innovador. Actor, escritor, cineasta, periodista y showman, Moore concibe “al ciudadano como un activista, y como tal debe comprometerse con la democracia donde vive”. En sus libros, series de TV o films, identifica a los “culpables” y plantea una agenda en defensa de los derechos civiles y de la mujer, de las condiciones laborales y del medio ambiente, y en lucha contra el racismo y el uso de la maquinaria bélica. Primer perfil biografico completo de Michael Moore. FONT: http://www.casadellibro.com/fichas/fichabiblioin/0,1511,2900000956683,00.html Documentals: Roger y yo En 1989 Michael Moore irrumpió en la escena del dirección cinematográfica con Roger y yo. Este documental narraba los esfuerzos de la corporación más grande del mundo, la General Motors mientras convertía la ciudad donde nación, Flint, Michigan en una ciudad fantasma. En su investigación de porqué la General Motors habría querido hacer una cosa así, Moore – nacido en Dossier Tertúlies Literàries Biblioteca Central Tecla Sala 6 Flint- intenta entrevistarse con el presidente, Roger Smith, para convencerle de que lo acompañe a Flint para ver su destrucción de primera mano. The Big One Mejor Documental del festival de Aspenr Documental del festival de Denver Michael Moore podía haber pensado que iba a tener problemas para hacer una continuación de Roger y yo, el escandaloso documental que hizo al presidente de General Motors, Roger Smith, cerrar una planta de construcción de Buick y despedir a miles de empleados. Desde ese documental de 1988, que le permitió a Michael Moore sentirse mejor consigo mismo, el director ha conseguido tomarle la medida a la fama. Pero entonces llegaron las reducciones de los 90. Como las corporaciones descubrieron que podían aumentar los beneficios despidiendo a trabajadores estadounidenses que le hacían rico para dárselo a trabajadores de otros países que cobraran menos, llegó el nuevo documental de Moore, the Big One. Jay Carr, Boston Globe. Bacon canadiense Estados Unidos lleva invadiendo culturalmente a Canadá casi desde su última incursión militar en 1812. Ahora Moore se ha imaginado a un presidente (Alan Alda) que hace duras declaraciones contra los vecinos del norte para poder mejorar sus números en las votaciones y poner las fábricas de armas estadounidenses otra vez en marcha. El problema surge cuando un abogado de las Catarátas del Niágara, Nueva York, John Candy se toma este discurso en serio y precipita un conflicto internacional. Bart Mills Marquee Magazine. Roger y yo Dossier Tertúlies Literàries The big one Bacon canadiense Biblioteca Central Tecla Sala 7 Farenheit 9/11 (Palma de oro Cannes 2004) En esta ocasión, Michael Moore afronta una cuestión que afecta a los centros del poder en Estados Unidos. FAHRENHEIT 9/11 toma como punto de partida la controvertida elección de George W. Bush en el año 2000 para seguir su ascenso de mediocre petrolero tejano a presidente de Estados Unidos y describir las oscuras relaciones de negocios entre su padre y la familia de Osama Bin Laden, poniendo de relieve que el poder y la riqueza del enemigo número uno de los estadounidenses han aumentado gracias a este vínculo. También se indaga sobre lo sucedido en Estados Unidos después del 11 de septiembre de 2001 y cómo la Administración de Bush utilizó el trágico ataque a las Torres Gemelas para su propio beneficio político. FAHRENHEIT 9/11, tras más de un año de cuidadosa investigación, ha sido todo un desafío para Michael Moore, decidido a descubrir toda la verdad. FONT: http://www.golem.es/golem/pelis.php?id=631&titulo=Farenheit+9%2F11 Opinió sobre el film: 11 de agosto de 2004 La quiero, Señora Bibliotecaria. Por Kurt Vonnengut Como seguramente ya habéis hecho la mayoría de vosotros, ya he visto la película de Michael Moore, Fahrenheit 9/11. El título es una parodia del libro de Ray Bradbury Fahrenheit 451, que es la temperatura a la que arde el papel con el que se hacen los libros. El protagonista de la novela de Bradbury es un funcionario municipal cuyo trabajo es quemar libros. Y a propósito de quemar libros; quiero felicitar a los bibliotecarios, personas que no son especialmente conocidas por su fuerza física, ni por tener contactos en el mundo de la política, ni por amasar fortunas, pero que han resistido incondicionalmente a los matones antidemócratas que ha intentado retirar ciertos libros de las estanterías, y que se han negado a facilitar a la “policía” los nombres de las personas que los han pedido. Dossier Tertúlies Literàries Biblioteca Central Tecla Sala 8 De manera que la América que amo todavía existe, aunque no en la Casa Blanca ni en el Tribunal Supremo, ni en el Senado ni en la Cámara de Representantes ni tampoco en la prensa. La América que amo está detrás de los mostradores de las bibliotecas públicas. Siguiendo con lo de los libros: nuestras fuentes diarias de noticias, periódicos y televisiones, tienen tanto miedo, están tan poco interesadas en el bien de los americanos, tan desinformativas, que solo a través de los libros podemos enterarnos de lo que pasa. Si por casualidad no os habéis enterado, y como resultado de unas elecciones desvergonzadamente amañadas, en las que miles de afroamericanos fueron privados arbitrariamente del derecho a voto, nos presentamos ante el resto del mundo orgullosos, sonrientes, mirando por encima del hombro, con un amor inmisericorde por la guerra, con un armamento poderoso y sin oposición. Si por casualidad no os habéis dado cuenta, somos tan temidos y odiados ahora mismo como lo fueron los nazis. Y con razón. Si por casualidad no os habéis dado cuenta, nuestros líderes no elegidos han deshumanizado a millones y millones de personas en todo el mundo solo por su religión y su raza. Los herimos, los matamos, los torturamos y los encarcelamos como nos da la gana. Está chupado. Si por casualidad no os habéis dado cuenta, también deshumanizamos a nuestros propios soldados, no por su raza o su religión, sino debido a su baja posición social. Los mandamos a donde sea a hacer lo que sea. De manera que soy un hombre sin país, a no ser por los bibliotecarios y por el periódico con sede en Chicago que estáis leyendo. Antes de atacar Irak, el New York Times aseguraba que tenían armas de destrucción masiva. Albert Einstein y Mark Twain renunciaron a la raza humana al final de sus vidas, a pesar de que Mark Twain no había visto ni la Primera Guerra Mundial. Ahora la guerra es un tipo de entretenimiento televisivo más. Y lo que convirtió a la Primera Guerra Mundial en algo tan entretenido fueron dos inventos americanos, el alambre de espino, y la metralleta. El SHRAPNEL (metralla) lo inventó un inglés con el mismo nombre: no deseas tener algo que lleve tu nombre? Al igual que Einstein y Twain, yo también estoy tentado a renunciar a la raza humana. Y, como algunos de vosotros ya sabréis, esta no es la primera vez que me rindo ante una despiadada maquinaria armamentística. ¿Mis últimas palabras? La vida no es la manera de tratar a ningún animal, ni siquiera a un ratón. El Napalm se inventó en Harvard. De verdad. Dossier Tertúlies Literàries Biblioteca Central Tecla Sala 9 ¿Nuestro presidente es cristiano? También lo era Hitler. ¿Que se le puede decir a la gente joven, ahora que unos cuantos psicópatas, o lo que es lo mismo, gente sin conciencia ni piedad ni vergüenza, han vaciado las arcas del estado y de las corporaciones para hacer lo que les dio la gana? Bibliografia: x Roberto Montoya. El imperio global. Madrid: La Esfera de los libros, 2003. 493 p. ISBN 849734-097-3 22,12 x Chomsky, Noam. Hegemonia o supervivencia. Barcelona: Empúries, 2004. 343 p. ISBN 84-9787-018-12 x Ali, Tariq. Bush en Babilonia: la recolonizacion de Iraq. Madrid: Alianza, 2004. 287 p. ISBN 84-206-4158-8 x Meyssan, Thierry. La gran impostura. Ningún avión se estrello en el Pentágono. Madrid: La esfera de los libros, 2004. 232 p. ISBN 84-9734-058-2 x Alba, Santiago, [et.al]. Washington contra el mundo. Tres Cantos: Ed. Foca, 2003. 320 p. ISBN 84-95440-40-7 x Hudson, Gabe. Estimado Sr. Bush. Barcelona: Emecé, 2003. 160 p. ISBN x Clark, Weasley. ¿Qué ha fallado en Irak? la guerra, el terrorismo y el imperio americano. Barcelona: Crítica, 2004. 205 p. ISBN 84-8432-531-8 x Majid, Samán Abdul. El verdadero Sadam. Madrid: Martínez Roca, 2004. 231 p. ISBN 84270-3028-2 x Batalla, Xavier. ¿Por qué Irak? Barcelona: Debolsillo, 2003. 270 p. ISBN 84-9759-493-2 84-9590-850-6 FONT: http://www.nodo50.org/vocesdehuelva/galeria_de_libros.htm 10