CAPITALISM: A LOVE STORY. Michael Moore Por: Laura Osorio Rendón.

CAPITALISM: A LOVE STORY. Michael Moore
Por: Laura Osorio Rendón.
Capitalism: A love story, es una documental que muestra la forma en que el
capitalismo se apodera de una nación y la destruye lentamente. Para esto el
director, Michael Moore, se encarga de mostrar situaciones que muestran las
verdaderas intenciones de los grupos bancarios, el estado, entre otras entidades
para quedarse con el dinero y las propiedades de los ciudadanos de la manera
más vil y deshumanamente posible.
Michael Moore recurre en gran medida a las imágenes de archivo: primero para
empezar a contar como toma forma el capitalismo y porque se dan los problemas
que se dan y segundo para tener un apoyo y prueba de lo que dice, pues al hacer
alguna afirmación, se hace más creíble cuando nos pone en imágenes a los
personajes o las acciones que nos relata. Estás imágenes de archivo se
encuentran presentes durante todo el documental, lo cual da cuenta del largo
trabajo de investigación que Moore realizó. Además ayudan al desarrollo narrativo
del documental y que la carga dramática qué se genera con las entrevistas y
argumentos que él presenta sea complementada y cada vez mayor. Al usar
imágenes de archivo, revive y con esto hacer recordar y caer en cuenta al
espectador (si es que no lo había notado) de los fraudes, engaños, mentiras, de la
avaricia de los que tienen el poder y el dinero en su país capitalista.
Al hacer las entrevistas a las personas afectadas por los grupos bancarios, el
estado o cualquier empresa o entidad prestadora de dinero, pone la cámara en
una ángulo natural para que el espectador sienta que es real, honesto, que es la
realidad lo que les está pasando y lo que les está afectando, con excepción de la
entrevista que le realiza a un piloto, el cual no quiere revelar su identidad.
Generalmente encuadra hacia el lado derecho o izquierdo del cuadro para
acompañar a la persona con imágenes, fotos o cualquier otro elemento, que
ayudan a contextualizar. Los planos en su mayoría son cortos, pues a medida que
Michael Moore habla se acompaña de los videos de archivo o imágenes que el
camarógrafo que lo acompaña hace. Al tener un camarógrafo que lo acompañe,
aprovecha cualquier instante para grabar personas que generalmente no quieren
dar la cara, haciendo así que queden ridiculizadas y demuestra que ni esas
personas tienen una explicación para la crisis que atraviesa Estados Unidos.
Michael Moore, se encarga de narrar, de contextualizar y de contar las diferentes
historias que va conociendo al transcurrir el documental, por esto es que la voz se
vuelve un elemento de enlace, es decir, cuando Moore cambia de una idea y
empieza con otra, lo hace por medio de una voice-over que a continuación, le da
paso a la imagen. La cámara en mano que se muestra en la mayoría de las partes
en la que Moore intenta ingresar a un lugar o hablar con una congresista o
presidente de alguna empresa, es fluida, no se dan saltos inesperados, lo que
hace que el espectador siga el documental sin problema. Además, como
mencionaba antes, la voz se vuelve un hilo conductor que es continuo, hace
entender mejor la problemática y complementa la imagen. La voice-over que
acompaña la imagen marca un ritmo algo acelerado, los planos acaban rápido, a
menos que el drama que se genera justifique una larga duración, pues son mucho
las hipótesis, las imágenes de archivo, las entrevistas, los argumentos que da y el
desarrollo oportuno para cada situación.
En cuanto al montaje, está construido de una manera narrativa clásica, pues
empieza con la historia de la evolución del capitalismo en Estados Unidos, sigue
con los primeros problemas y termina mostrando la crisis con una posible solución;
todo esto, teniendo en cuenta el paso del tiempo y la historia del país. Es un
documental expositivo, pues como se mencionaba anteriormente, la voz del
director es la que da la continuidad retórica y ordena el discurso, las imágenes
están dispuestas a la voz.
Michael Moore, hace un bueno uso de los elementos del lenguaje audiovisual para
expresar su inconformidad con el capitalismo que hay en su país que cada vez
hace más daño a los que me menos tiene y favorece a los que más tiene poder.
Con este documental logra manifestar que Estados Unidos ha dejado la
democracia de lado para tomar el capitalismo como forma de organización social y
dejar el poder a los que más dinero tienen y a los que más saben engañar.