Historia y Derecho - Consejo General de Procuradores de España

H ISTORIA Y DERECHO
San Ivo, patrón de juristas
Por JULIÁN CABALLERO
AGUADO
PROCURADOR
San Ivo es el más universal
santo patrón de abogados y
procuradores, pero en buena
parte es desconocido en el
mundo judicial en que nos
movemos. Su popularidad
como protector de juristas y
como abogado de pobres fue
asombrosa durante la Edad
Media, tanto que rebasando
las fronteras de su Bretaña
natal accedió a Francia
y llegó a todo el Occidente.
Salvo excepciones, ha sido
y es un perfecto desconocido
en España, donde se prefirió
rendir culto al más próximo
San Raimundo de Peñafort,
coetáneo de San Ivo. Aun así,
su festividad, el 19 de mayo,
se celebra solemnemente
por algunos Colegios de
Procuradores y de Abogados
españoles.
Tumba de San Ivo, Catedral de Tréguier.
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S
an Ivo o Ibo en castellano e
italiano, en catalán Sant Iu,
en vasco San Ibon, en francés
Saint Yves, en bretón Sant Erwan, se
llamaba Yves de Hélori y nació en
1253 en Kermatin, pequeña aldea de
Bretaña. Con catorce años sus padres le enviaron a estudiar a La Sorbona en París, donde obtuvo el título de bachiller con maestros de la
talla de Alberto Magno y Tomás de
Aquino, junto a compañeros de aula
como Dante Aligheri. Concluyó sus
estudios jurídicos y canónicos en
otra gran universidad francesa de la
época, la de Orleans, ordenándose
sacerdote. De Orleans regresó a su
Bretaña para ejercer como juez eclesiástico en Rennes, la capital bretona. Durante su estancia en Rennes
acudía al convento de franciscanos
llegando a pertenecer a la orden tercera. El obispo de Tréguier lo reclama y se traslada a su diócesis de origen, regalándole un caballo como
agradecimiento, para hacer el viaje.
Pero Ivo vende el caballo, reparte a
los pobres lo que obtiene, y realiza
el viaje a pie. En Tréguier el obispo
le da el cargo de juez y la rectoría
de Trédez. Esto ocurría por el año
1285, y comparte las tareas de juzgar
en causas civiles y las de atender a
sus feligreses. También la de defender a los pobres, porque además de
desempeñarse como juez con gran
sentido de la Justicia en el territorio de su jurisdicción, ejerció la Abogacía ante otros tribunales defendiendo a los desamparados, tratando
siempre de reconciliar a los adversarios, pero tomaba las causas de
los más miserables, lo que le mereció el título de “abogado de los
pobres”, asumiendo a menudo los
gastos judiciales de sus clientes. Es
difícil comprender con la mentalidad de hoy cómo podía Yves compartir las dos tareas de juzgar y de
defender; es posible que el juez pudiera asumir, en una función partícipe de la magistratura, jurisdicción
rogada, y de la iniciativa o promoción de oficio, la tarea de juzgar y de
defender. Hay autores que afirman
que Ivo informó como abogado en
los tribunales civiles de Tours y de
París, desplazándose al efecto desde
Bretaña. Aparte de su conocimiento
de “ambos derechos”, su dominio de
las lenguas bretona, francesa y latina lo hacían perfectamente idóneo
para este ejercicio en regiones sometidas a distintos poderes políticos y
entonces con distintos idiomas.
Desde joven demostró su inclinación a la vida ascética, sobresaliendo siempre por su preocupación
por satisfacer las necesidades de los
más débiles. De diversas maneras
manifestó su simpatía por la vocación de las órdenes mendicantes y
de regreso a Kermartin, transformó
la casa paterna –recibida por ser el
hijo mayor– en hospital, orfanato,
comedor y alojamiento de las gentes
sin recursos, a quienes asistía personalmente. Agregó un pabellón a su
casa, que funcionaba como un verdadero asilo: los peregrinos de paso,
los pobres, los enfermos y los mendigos eran recibidos, reconfortados,
alimentados y vestidos.
En 1296 fue protagonista de un
episodio que reflejaba su entereza
frente al atropello. El rey de Francia
Felipe IV el Hermoso pretendió
apoderarse del tesoro de la catedral
de Tréguier. El juez y religioso se
tumbó delante del altar para impedir el expolio, sirviendo tal gesto
San Ivo, Catedral de Tréguier.
para que el pueblo bretón reaccionara expulsando al invasor.
Unos años
más tarde, Ivo renuncia a su cargo
oficial. Es por los
años 1298 a 1300,
y a partir de entonces solamente
se dedica a defender a los desvalidos ante los tribunales y a su tarea
pastoral hasta su
muerte el 19 de
San Ivo con un rico y con un pobre. Iglesia de San Ivo de Minihy-Tréguier.
mayo de 1303,
a los cincuenta
años, en su granja de Kermartin. ción y el proceso de canonización se
Cuatro hombres del pueblo trasla- inició, conducida la investigación
daron sus restos, primero a la capi- por dos prelados que fueron maeslla de Kermartin, y luego a la cate- tros de Ivo en Orleans: Roger, obisdral de Tréguier, donde recibirían po de Limoges, y Auquelin, obispo
sepultura. La lápida, que posterior- de Angulema.
mente arrasaron los revolucionarios
Declararon en el proceso dosfranceses de finales del siglo XVIII cientos ochenta y nueve testigos, enarrojándola al mar, contenía un cu- tre ellos Juan de Kerhoz, compañero
rioso epitafio cincelado por la de- desde la infancia de Ivo, que cuanvoción popular: “Santus Ivus erat do prestó testimonio tenía noventa
brito, advocatus et non latro; res mi- años. Tras varias interrupciones, el
randa populo” (San Ivo era bretón, proceso se resuelve en sentido faabogado y no ladrón, cosa que ad- vorable a la canonización, medianmiraba el pueblo).
te la bula de Clemente VI dada en
Ya en vida, Ivo gozó de fama Aviñón el 19 de mayo de 1347, a los
de santidad, y prueba de ello es cuarenta y cuatro años de la muerte
que inmediatamente después del santo. Ivo Hélori de Kermartin
de morir el pueblo tomó trozos quedaba inscrito en el catálogo ofide sus vestiduras para venerarlos cial de los santos.
como reliquias. Este sentir geneEl duque Juan V erigiría en la caral fue interpretado por el duque tedral de Tréguier una bella tumba
de Bretaña Juan II, quien elevó al para San Ivo, qué fue destruida en
papa Clemente V la petición de 1794 durante la revolución francelos bretones de que Ivo fuera ele- sa, siendo arrojado el cuerpo al mar,
vado a los altares, solicitud que así como las piedras del sepulcro.
apoyaron Felipe VI de Francia Solamente se salvó la cabeza, que
y la reina Juana de Borgoña, así hoy se guarda en relicario de plata.
como la Universidad de París y el La tumba sería reconstruida años
cabildo de Tréguier. El obispo de más tarde.
Tréguier, acompañado del herLa iconografía de San Ivo es
mano del duque, Guido de Bre- abundante, sobre todo en Bretaña,
taña, se trasladó a la corte papal y sumamente curiosa. Unas veces se
de Aviñón para apoyar la peti- le representa vistiendo toga, tocado
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Ivo”, que es una romería popular
Como se dijo anteriormente, el
al estilo bretón, en la que las mu- patronazgo de San Raimundo de Pejeres lucen sus cofias almido- ñafort sobre los juristas se encuennadas típicas. La iglesia está edi- tra mucho más arraigado en España
ficada sobre la que fue casa de que el de San Ivo, por ser un santo
campo de Kermartin, donde na- de la tierra y, quizá, por haber sido
ció y murió el santo. En su pres- un santo de canonización más rebiterio se muestra una tela pin- ciente (año de 1604), dos siglos y
tada con el texto del testamento medio después, que hiciera que le
en latín y un manuscrito del si- reemplazara en muchos de los casos.
glo XIII llamado “breviario de La primera referencia de San Ivo en
San Ivo’’. En el cementerio hay una cofradía de juristas la encontraun monumento del siglo XIII mos como patrón de una de las priperforado en su centro con un meras Cofradías de Procuradores
arco muy bajo, que pasan los pe- establecidas en España, la Cofradía
regrinos arrodillados y que lla- de San Ivo de Barcelona, fundada en
man “tumba de San Ivo”, que el año 1511, antecesora del Colegio
parece ser un altar de la iglesia de Procuradores de la ciudad conprimitiva.
dal, cuyos primitivos estatutos preAltar de San Ivo en la Basílica de la Merced de Barcelona,
La catedral de Tréguier, que venían “que el día de la fiesta del glopropiedad del Colegio de Procuradores de Barcelona.
conservó su sepultura, es una rioso San Ivo, que no sea lícito ni
obra gótica con su claustro anejo. permitido a ningún procurador que
con birrete, con un rollo de perga- Poco a poco está siendo restaurada sea cofrade, ni a sus esposas, trabajar
mino o papeles en la mano y un pá- de los daños producidos por el tiem- aquel día; sino, por el contrario, sea
jaro o paloma volando en torno a po, las guerras y las revoluciones. No observado como el santo domingo”.
su cabeza o posado sobre el birrete. es de las grandes catedrales france- También está presente en la primePero no es frecuente un San Ivo ais- sas, pero acaso les gana en encanto ra asociación de abogados establecilado, sino que más bien se le repre- y en poesía. Abogados de todas las da en España, la Cofradía de Letrasenta entre otras dos figuras, la del partes del mundo han llevado allí dos del Señor San Ivo de Zaragoza,
“pobre” y la del “rico”, rechazando sus ofrendas en homenaje al patro- fundada hacia 1543, así como en
las dádivas de éste e inclinado hacia no. Con ocasión del sexto centena- la Congregación de Abogados de la
el primero. Cuenta la tradición que rio de la canonización, el 19 de mayo Corte y Consejos de Su Majestad
un hombre rico demandó a un men- de 1947, acudieron en peregrinación establecida en Madrid en el año
digo para que lo indemnizara por los abogados de todo el orbe, y asis- 1596, cuyas ordenanzas fundaciohaber respirado las deliciosas ema- tieron a la procesión formando bello nales venían establecidas “para glonaciones de su cocina señorial. El contraste sus severas togas con las ria y honra de nuestro señor y su bencaso era bastante insólito, pero Ivo blancas cofias de las aldeanas bre- ditísima madre, y del bienaventurado
tenía fama de justo, así que admitió tonas. También estuvo con ellos el San Ybo”.
la demanda del rico, escuchó lo que Nuncio en París,
las partes tenían que decir y fallo monseñor Roncaa favor del rico, condenando al lli, que poco despobre a depositar sobre el estrado pués sería el Papa
una moneda; la hizo sonar sobre la Juan XXIII. En el
mesa y cuando el rico iba a tomar- año 2003 se celela, Ivo añadió: “Si he condenado a bró en Tréguier el
este hombre por oler tu estofado, tú VII centenario de
te conformarás con escuchar la in- la muerte de San
demnización”; y le devolvió su mo- Ivo, y con motineda al pobre.
vo de ello el Papa
En Minihy-Tréguier, pueblo na- Juan Pablo II retal de Ivo, se conserva vivo el re- cordó la figura de
cuerdo del santo. Allí cada 19 de este insigne jurismayo se celebra el “perdón de San ta bretón.
Procesión con los restos de San Ivo en Tréguier.
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No se sabe cómo llegó a España
la devoción al santo bretón. Puede
que penetrase a través de la corte papal de Aviñón, aunque fuera escasa
la atención que prestó Clemente VI
al proceso de canonización de San
Ivo. Sobre el respecto cuenta la tradición que el propio San Ivo se apareció en sueños al pontífice para
abogar por su propia causa. Más
probable es que la devoción llegara
desde Roma, donde el primer Papa
Borgia, Calixto III, había fundado
en 1456 una iglesia para los bretones
y franceses establecidos allí, juntamente con un hospital anejo, denominada “San Ivo dei Brettoni”, o por
las noticias que llegaran de las instituciones, fundadas en fechas anteriores, que con la finalidad de prestar asistencia jurídica gratuita a los
indigentes fueron creadas bajo la advocación de San Ivo en Amberes,
Gante y Malinas.
Hoy día, en España, varios Colegios de Abogados celebran como
patrón al santo bretón: los de Zaragoza, Oviedo, Pamplona…, y en
cuanto a los procuradores, curiosamente es en Cataluña donde más se
le venera, tierra natal del otro gran
santo patrón de la Justicia, San Raimundo de Peñafort, haciéndose
bueno aquello de que nadie es profeta en su tierra. San Ivo, Sant Iu en
catalán, es patrón de los Colegios de
Procuradores de Barcelona, Gerona
y Tarragona.
De tiempos medievales proviene
la devoción al santo en Barcelona,
siendo testigo de ello una de las
puertas más antiguas de la catedral
de Santa María del Mar, la porta de
Sant Iu, en la calle de los Condes,
que data de principios del siglo XIV.
En el interior de la catedral existió un altar dedicado a San Ivo, y
hoy día pueden contemplarse una
vidriera emplomada y un rosetón
con la imagen del santo. Los procuradores barceloneses celebran ininterrumpidamente a San Ivo desde el
año 1511 en que fundaron la Cofra-
San Ivo, Colegio Procuradores de La Coruña.
día de San Ivo, antecedente del Colegio de Procuradores. De aquellos
lejanos tiempos proviene una talla
del santo, de madera policromada
en oro, perteneciente al Colegio de
Procuradores, que se conserva en
el museo del Palacio de Justicia de
Barcelona. El 19 de mayo, día de
San Ivo, el Colegio celebra variados
actos institucionales que culminan
con una misa solemne en la Basílica de Ntra. Sra. de la Merced, patrona de la ciudad condal, donde el Colegio tiene un altar con una imagen
Talla de San Ivo.Museo de los Procuradores en
la Audiencia Provincial de Barcelona.
del santo. Para mantener viva la tradición y el culto a Sant Iu, el Estatuto
del Colegio dedica un capítulo a los
denominados Pabordes de Sant Iu,
colegiados encargados de “la conservación del altar que el Colegio posee en la Parroquial Basílica de la
Merced y de todo aquello que se refiere a la función religiosa que cada
año, desde tiempos inmemoriales, se
celebra en honor del Patrón del Colegio” (art. 65). Uno de los dos pabordes es el secretario general del
Colegio. El otro es un colegiado
nombrado por la Junta de Gobierno colegial, cargo que desde hace
unos cuantos años viene ostentando
con cariño y esmero la procuradora
Montserrat Guillemont Sala.
Los procuradores gerundenses
también tienen a Sant Iu como patrón desde tiempos lejanos, y los primeros Estatutos del Colegio de Procuradores de Gerona, del año 1783,
se promulgaron bajo el amparo del
santo bretón. El Colegio de Procuradores de Tarragona también le celebra como patrón.
Fuera de Cataluña, es santo patrón del Colegio de Procuradores de
Baleares, y en Galicia, donde tantas
similitudes pueden encontrarse con
la Bretaña francesa, encontramos a
San Ivo como patrón del Colegio de
Procuradores de La Coruña.
Terminaré con una leyenda atribuida a San Ivo que recoge el barcelonés Carlos Fisas en su obra “Frases
que han hecho Historia” (ed. Planeta,
Barcelona, 1992, pág. 51): “Se cuenta que el primer abogado que llegó al
cielo fue San Ivo, y lo hizo con trampa. Según la leyenda, San Ivo se mezcló con un grupo de bienaventurados
que entraban en el cielo y cuando se
dieron cuenta los porteros celestes
quisieron expulsarle, pero Ivo dijo
que no aceptaba la expulsión si no se
la comunicaban a través de un procurador, y como de éstos no había
ninguno en el cielo él pudo quedarse
tranquilamente gozando de la gloria
celestial”. Octubre 2006 • PROCURADORES / 55