UNIVERSIDAD DE CHILE FACULTAD DE CIENCIAS FÍSICAS Y MATEMÁTICAS DEPARTAMENTO DE INGENIERÍA CIVIL CARACTERIZACIÓN Y DETERMINACIÓN DEL PELIGRO SÍSMICO EN LA REGIÓN METROPOLITANA MEMORIA PARA OPTAR AL TÍTULO DE INGENIERO CIVIL MENCIÓN ESTRUCTURAS-CONSTRUCCIÓN NATALIA ANDREA SILVA BUSTOS PROFESOR GUÍA: JAIME CAMPOS MUÑOZ MIEMBROS DE LA COMISIÓN: EDGAR KAUSEL VECCHIOLA MAXIMILIANO ASTROZA INOSTROZA SANTIAGO DE CHILE 2008 RESUMEN DE LA MEMORIA PARA OPTAR AL TÍTULO DE INGENIERO CIVIL POR: NATALIA ANDREA SILVA BUSTOS FECHA: 27 / 03 / 2008 PROFESOR GUÍA: SR. JAIME CAMPOS M. PROFESOR CO-GUÍA: SR. EDGAR KAUSEL V. PROFESOR INTEGRANTE: SR. MAXIMILIANO ASTROZA I. Una vez identificadas y caracterizadas las fuentes sismogénicas presentes en el país, se estimó mediante el cálculo probabilístico estándar, el efecto de cada una de ellas y su acción conjunta, sobre la zona de estudio, para conocer la influencia de éstas en el cálculo de Amenaza Sísmica. Conociendo la sismicidad entregada por los catálogos sísmicos consultados, se determinaron las ecuaciones propias para cada fuente, conocidas como leyes de GutenbergRichter, que indican la frecuencia de ocurrencia de los eventos en relacion a la magnitud, para luego, asumiendo una ley de probabilidad de Poisson, estableciendo las magnitudes máximas de cada fuente, y calculando las ventanas de tiempo necesarias para representar correctamente eventos de una determinada magnitud; construir las relaciones estadísticas necesarias para estimar y evaluar el peligro sísmico en la Región Metropolitana de Santiago. Los trabajos previos de peligro sísmico en Chile, no sólo utilizaron estimaciones de leyes Gutenberg-Richter a partir de catálogos no necesariamente completos ni específicos para cada zona sismogénica, sino que además no incorporaron en el análisis, leyes de atenuación específicas para cada una de las fuentes, obviando además el efecto del terreno involucrado, por no existir, hasta hoy, información suficiente respecto del fenómeno de respuesta de sitio. Con los nuevos antecedentes sobre curvas de atenuación específicas, ubicación de fallas tectónicamente activas detectadas en el frente cordillerano de Santiago, como la Falla San Ramón, relaciones de Gutenberg-Richter obtenidas de un análisis detallado del conjunto de catálogos sísmicos disponibles, y del establecimiento de las magnitudes máximas esperadas dependiendo del tipo de fuente, se construyeron Mapas de Peligro Sísmico para la Región Metropolitana, para dos períodos de vida útil de interés, como son 10 y 50 años, en los cuales se presentan curvas isosistas calculadas para un determinado porcentaje de probabilidad de ocurrencia del valor de intensidad de Mercalli, IMM. Los mapas de peligro sísmico elaborados son solo la parte visible de esta memoria, sin embargo, la finalidad de este trabajo radica en el establecimiento de metodologías exportables a nivel nacional e incluso a mayor escala, dejando claro la necesidad de mejorar los resultados que aquí se presentan, complementando y perfeccionando temas aun incipientes, como son los referentes a eventos corticales y el efecto de sitio. ÍNDICE DE CONTENIDO CONTENIDO CAPÍTULO 1 PÁGINAS INTRODUCCIÓN 1.1 MARCO CONCEPTUAL……………………………………………………………………. 2 1.2 OBJETIVOS……………………………………………………………………………….. 3 1.3 1.4 1.2.1 OBJETIVO GENERAL………………………………………………………….. 3 1.2.2 OBJETIVOS ESPECÍFICOS……………………………………………………. 3 ANTECEDENTES DEL PELIGRO SÍSMICO EN LA CUENCA DE SANTIAGO……… 3 1.3.1 TECTÓNICA DE PLACAS……………………………………………………… 4 1.3.2 ONDAS SÍSMICAS GENERADAS Y PROPAGADAS………………………... 6 RESULTADOS ESPERADOS…………………………………………………………….. 8 CAPÍTULO 2 BASE DE DATOS 2.1 CONTENIDO GENERAL………………………………………………………………… 10 2.2. IMPLEMENTACION DE LA BASE DE DATOS ………………………………………. 10 2.2.1. DETERMINACIÓN ÁREA DE ESTUDIO…………………………………………. 11 2.2.2. DETERMINACIÓN ÁREA DE INFLUENCIA…………………………………….. 12 2.2.3. GENERACIÓN DE LA BASE DE DATOS………………………………………… 12 2.2.4. HOMOLOGACIÓN DE ESCALAS DE MAGNITUD…………………………….. 13 2.2.5. DETERMINACIÓN MAGNITUDES MAXIMAS ESPERADAS…………………. 19 2.2.6. PROBLEMA DE ESTADÍSTICA SÍSMICA NO HOMOGENEA………………… 20 RESULTADOS Y CONCLUSIONES…………………………………………………….. 23 2.3 CAPÍTULO 3 DETERMINACION DE LA SISMICIDAD Y CARACTERIZACIÓN DE FUENTES SISMOGÉNICAS 3.1 CONTENIDO GENERAL………………………………………………………………… 26 3.2 DESARROLLO……………………………………………………………………………. 26 3.2.1. IDENTIFICACIÓN DE LAS FUENTES SISMOGÉNICAS……………………….. 26 3.2.2. LEYES DE GUTEMBERG-RICHTER……………………………………………… 34 3.2.3. CARACTERIZACION DE LAS FUENTES SISMOGENICAS MEDIANTE LAS LEYES DE GUTENBERG-RICHTER……………………………………………….. 35 3.2.3.1 SISMOS TIPO INTERPLACA…………………………………………………………. 35 3.2.3.2 SISMOS TIPO INTRAPLACA DE PROFUNDIDAD INTERMEDIA……………….. 40 3.3 3.2.3.3 SISMOS CORTICALES O CORDILLERANOS SUPERFICIALES………………….. 45 RESULTADOS Y CONCLUSIONES…………………………………………………….. 56 CAPÍTULO 4 LEYES DE ATENUACIÓN 4.1 ANTECEDENTES GENERALES…………………………………………………………. 59 4.2. DESARROLLO……………………………………………………………………………… 59 4.2.1. CONSIDERACIONES EN LA DETERMINACIÓN DE UNA LEY DE ATENUACIÓN……………………………………………………………………. 59 4.2.2 SELECCIÓN DEL PARÁMETRO DE ATENUACIÓN………………………….. 61 4.2.3 OBTENCIÓN LEY DE ATENUACIÒN SEGÚN CRITERIO DE PERCEPCIÓN DEL EVENTO, PARA CADA FUENTE SISMOGENICA……………………. 62 4.2.3.1 LEYES DE ATENUACION EN FUNCIÓN DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO INTERPLACA SEGÚN PERCEPCION DEL EVENTO……………….. 65 LEYES DE ATENUACION EN FUNCIÓN DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO INTRAPLACA DE PROFUNDIDAD INTERMEDIA SEGÚN PERCEPCION DEL EVENTO………………………………………………………….. 66 LEYES DE ATENUACION EN FUNCIÓN DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO CORTICALES SEGÚN PERCEPCION DEL EVENTO……………… 67 OBTENCIÓN LEYES DE ATENUACIÒN SEGÚN CRITERIO DE ÁREA DE DAÑOS GENERADAS POR EL EVENTO…………………………………….. 69 LEYES DE ATENUACION EN FUNCION DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO INTERPLACA…………………………….… 69 LEYES DE ATENUACION EN FUNCION DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO INTRAPLACA DE PROFUNDIDAD INTERMEDIA…………………………………………………………. ………………... 69 LEYES DE ATENUACION EN FUNCION DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO CORTICALES……………………………….. 70 4.2.3.2 4.2.3.3 4.2.4 4.2.4.1 4.2.4.2 4.2.4.3 4.3 4.2.6 COMPARACION CON LA LEY DE ATENUACION DE BARRIENTOS…. …... 72 4.2.7 COMPARACION CON LAS LEYES DE ATENUACION DE TRABAJOS ANTERIORES PARA EVENTOS TIPO INTRAPLACA………………………….. 76 4.2.8 COMPARACION CURVAS DE ATENUACION OBTENIDAS DEPENDIENDO DEL CRITERIO DE SELECCIÓN DE LA BASE DE DATOS……………….... .. 80 4.2.9 ANÁLISIS GENERAL DE LOS DATOS DE INTENSIDADES DE LA BASE DE DATOS………………………………..……………………………….. 82 RESULTADOS Y CONCLUSIONES………………………………………………………. 84 CAPÍTULO 5 EVALUACIÓN DEL PELIGRO SÍSMICO 5.1 ANTECEDENTES GENERALES………………………………………………………..... 86 5.2 METODOLOGIA GENERAL……………………………………………………………… 87 5.2.1 87 METODOLOGIA DE ALGERMISSEN Y PERKINS…………………………… 5.2.2 DEFINICION AREA DE ESTUDIO……………………………………………… 90 5.2.3 DEFINICION FUENTES SIMOGENICAS………………………………………. 91 5.2.3.1 FUENTE INTERPLACA…………………………………………………… 92 5.2.3.2 FUENTE INTRAPLACA DE PROFUNDIDAD INTERMEDIA………… 92 5.2.3.3 FUENTE CORTICAL CORDILLERANA………………………………… 93 PROGRAMA DE CALCULO DE PELIGRO SISMICO…………………………. 95 5.3 CURVAS DE PROBABILIDAD DE OCURRENCIA DE INTENSIDAD………………... 99 5.4 CONCLUSIONES………………………...………………………………………………… 103 5.2.4 CAPÍTULO 6 EFECTO DE SITIO 6.1 ANTECEDENTES GENERALES…………………………………………………………… 113 6.2 MOTIVACION……………………………………………………………………………….. 113 6.3 INFLUENCIA EFECTO DE SITIO………………………………………………………….. 114 6.4 DESARROLLO………………………………………………………………………………. 114 6.4.1 BASE DE DATOS………………………………………………………………….. 114 6.4.2 ATENUACION DE INTESIDADES DEL TERREMOTO DE VAPARAISO DE 1985…………………………………………………………... 115 6.4.3 METODOLOGIA GENERAL……………………………………………………… 116 6.4.4 METODOLOGIA ALGERMISSEN Y KAUSEL. ………………………………… 120 RESULTADOS Y CONCLUSIONES……………………………………………………….. 122 6.5 REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS…………………………………………………… 126 ANEXO A: TABLAS A.1. ANTECEDENTES DEL TERREMOTO DE LAS MELOSAS DE 1958………………………..…. 129 A.2 ANTECEDENTES DEL TERREMOTO DE VALPARAÍSO DE 1985……………………………. 130 ANEXO B: FIGURAS Y MAPAS B1. FUENTE SISMOGENICA INTERPLACA TIPO TRUST……………………………….….….. 138 B2. FUENTE SISMOGENICA INTRAPLACA DE PROFUNDIDAD INTERMEDIA…….….…... 139 B3. FUENTE SISMOGENICA CORTICAL CORDILLERANA (SUPERFICIAL)……….…….…. 140 B4. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 10 AÑOS, POR EFECTO CONJUNTO DE LAS FUENTES………..…….…. 141 B5. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 50 AÑOS, POR EFECTO CONJUNTO DE LAS FUENTES…………..……. 142 B6. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 10 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE INTERPLACA.……………..….. 143 B7. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 10 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE INTRAPLACA.……….…….….. 144 B8. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 10 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE CORTICAL…..……….……..…… 145 B9. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 50 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE INTERPLACA…………..…...…... 146 B10. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 50 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE INTRAPLACA…..…….…..……... 147 B11. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 50 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE CORTICAL….………………….… 148 CAPÍTULO 1 1.1 INTRODUCCIÓN MARCO CONCEPTUAL En nuestro país el peligro sísmico es un problema de preocupación, responsabilidad e interés nacional. El grado de exposición de las grandes obras de ingeniería, plantas nucleares de investigación, todo tipo de instalaciones industriales y en general de la infraestructura productiva del país están expuestas a la amenaza sísmica en gran parte del territorio nacional y representa un problema mayor para la ingeniería chilena debido a los graves daños ocasionados históricamente por los sismos. Lo anterior afecta directamente la calidad de vida y el desarrollo de la nación. Es fundamental, por ende, dirigir los esfuerzos en caracterizar y determinar, de la mejor manera posible, el grado de amenaza sísmica para lograr reducir significativamente el riesgo al que se exponen la población y todo tipo de estructuras. El mejoramiento e implementación de metodologías para caracterizar esta amenaza sísmica nacional, permite avanzar en este sentido y constituye una línea de trabajo necesaria y fundamental para la ingeniería en Chile. En los años recientes se han logrado importantes avances en el reconocimiento de diferentes agentes que inciden directamente en el peligro sísmico. La incorporación de estos nuevos antecedentes, junto con una mejor comprensión de la actividad sísmica relacionada con fallas activas, los avances en sismotectónica y la incidencia que los diferentes tipos de sismos existentes en un ambiente de subducción “tipo Chile”, contribuye a la elaboración de modelos más realistas para la estimación de la amenaza sísmica en nuestro país, en particular para la Región Metropolitana de Santiago. En el presente estudio, se pretende entregar una determinación de las zonas que potencialmente pudiesen sufrir grandes daños producto de los distintos tipos de terremotos que afectan la zona Central de Chile, mediante la metodología probabilística. Se propone una reevaluación del peligro sísmico en la zona central de Chile considerando 3 fuentes principales que afectan a la zona en estudio y su caracterización mediante una reestimación de las leyes de Gutenberg-Richter. También se incorporan nuevas relaciones de atenuación de la Intensidad de Mercalli Modificada (IMM) en función de la distancia hipocentral y la magnitud Ms del evento, para cada uno de los tipos de fuente sismogénica. Se optó por utilizar IMM como parámetro sísmico pues refleja de mejor manera la potencialidad de daños que se tienen en las zonas en estudio A partir de estudios anteriores realizados en esta misma línea de investigación, y de los antecedentes que se recopilarán, se determinará el peligro sísmico en la Región Metropolitana de Santiago, región en la cual estudios sismotectónicos, geológicos, geotécnicos y sísmicos efectuados los últimos años, han permitido aportar nuevos antecedentes que hacen posible evaluar metodologías, y desarrollar nuevas prácticas en la estimación del peligro sísmico en un contexto de subducción andina que eventualmente puedan ser exportables a otras zonas del país o del continente. Los Mapas de Peligro Sísmico, elaborados en base al parámetro de la intensidad, serán uno de los instrumentos aportados por esta memoria, lo cual pretende ser una valiosa herramienta para la ingeniería, poniendo a disposición no sólo de los profesionales involucrados en el área, 2 sino que también a todo usuario, un mapa que exponga el peligro sísmico en la Región Metropolitana, entendiéndose éste como la excedencia de una cierta variable en un determinado período de tiempo, lo cual servirá de antecedente para el posterior análisis sismorresistente de cualquier obra que se quiera diseñar, evaluar y emplazar en el área de estudio. 1.2 OBJETIVOS 1.2.1 OBJETIVO GENERAL Generación de Mapas de Peligro Sísmico para la Región Metropolitana, particularmente en la Cuenca de Santiago. 1.2.2 OBJETIVOS ESPECÍFICOS a) Confeccionar una base de datos confiable y representativa de los eventos, dentro de las coordenadas y el período que abarca este estudio. b) Caracterizar y parametrizar cada fuente sismogénica presente en la Región Metropolitana. c) Encontrar y aplicar las correspondientes leyes de atenuación de intensidad, para cada fuente sismogénica. d) Estudiar diversos datos recopilados estos últimos años en diferentes sitios de la cuenca de Santiago, con el objeto de intentar determinar un indicador cualitativo, y eventualmente cuantitativo, de los efectos sísmicos observados en algunas zonas de Santiago respecto a algunos de estos observables. e) Finalmente, generar Mapas de Peligro Sísmico que consideren los antecedentes antes mencionados, para evaluar la amenaza sísmica en localidades de interés dentro de la Cuenca de Santiago, y para ciertos periodos de recurrencia, con sus respectivas probabilidades de ocurrencia. f) Obtener conclusiones concensuadas por los sismólogos nacionales, sentando un precedente metodológico en relación a los temas a abordar en este trabajo. 1.3 ANTECEDENTES DEL PELIGRO SÍSMICO EN LA CUENCA DE SANTIAGO Es importante, en particular, para la ingeniería estructural en el área de la sismorresistencia, calcular el peligro sísmico presente en una determinada localidad debido a que en esta disciplina es fundamental predecir el comportamiento de una estructura frente al movimiento sísmico que experimenta el suelo que soporta dicha construcción. Esto permite determinar la demanda o amenaza sísmica real existente, en particular para este estudio en la Región Metropolitana. 3 Nuestro país presenta una gran extensión territorial cubriendo una da las zonas sísmicas más grandes del mundo. Chile presenta diferentes rangos de actividad sísmica a lo largo de su geografía. Para entender porqué Chile es una de las zonas de mayor actividad sísmica a nivel mundial, es que se debe recurrir a la tectónica de placas. 1.3.1 TECTÓNICA DE PLACAS La superficie del planeta está dividida en grandes placas rígidas que conforman la litósfera, la cual se desplaza sobre capas más dúctiles y que se encuentran a mayor temperatura, que componen la astenósfera, ambas regiones pertenecientes al Manto Superior de la Tierra. En la mayor parte de Chile, se presenta una zona de convergencia entre la placa oceánica de Nazca, y la placa continental Sudamericana, situación en que la placa más densa se hunde o subducta en el manto terrestre, generándose lo que se conoce como proceso de subducción. Ver figura Nº 1.1 y 1.2. La subducción es el proceso donde una placa se sumerge bajo otra. En nuestra zona de estudio la placa oceánica subduce a la placa continental Sudamericana, debido a que su composición basáltica la hace más densa y pesada. La subducción de Nazca (ver figura N° 1.2) se produce según un plano inclinado hacia el Este conocido como Plano de Wadati & Benioff, con buzamientos que fluctúan en ángulos comprendidos entre 15º y 40º con respecto a la horizontal. La placa de Nazca, una de las más veloces y jóvenes, se desplaza hacia el este con una velocidad de convergencia cercana a 6.6 cm/año (Kendrick, Eric. et al 1993), siendo éste el valor más actualizado, ya que la aproximación anterior, publicada en 1991 por Sèbrier y Soler, estimaba una velocidad de convergencia comprendida entre los 5-6 cm/año. La dirección de convergencia o rumbo de la placa es de N 78.4 °E. La placa Sudamericana a su vez se desplaza unos 3 cm/año en dirección aproximada hacia el oeste, lo que hace una tasa neta de convergencia estimada entre 8 a 9 cm/año. Estas características, en particular, el alto valor de la velocidad de convergencia, genera una gran acumulación de tensiones en las zonas de asperezas de las placas, las cuales resisten hasta un cierto valor límite, luego del cual se produce una liberación de energía ocasionando lo que se percibe como terremoto. 4 Figura Nº 1.1: Tectónica de placas correspondiente a Chile. Figura Nº 1.2: Disposición de la zona de subducción chilena. En el sur de Chile, más allá de Puerto Aysén (aproximadamente a los 46º L.S.), desaparece la influencia de la placa de Nazca, produciéndose el contacto de la placa Antártica con la Sudamericana, con una velocidad relativa menor que más al norte, es por eso, que en esta zona la actividad sísmica decae notoriamente, debido a la menor velocidad de convergencia de la placa oceánica Antártica que subduce a la placa continental Sudamericana con una velocidad promedio de 2 [cm/año]. 5 En el extremo Sur, se encuentra la subplaca Scotia, que abarca el sur de Tierra del Fuego, siguiendo la línea del lago Fagnano y Seno del Almirantazgo, continuando según el brazo occidental del Estrecho de Magallanes. Su contacto con la placa Sudamericana, es de tipo Transcurrente, observándose desplazamientos relativos importantes, pero siendo comparativamente menor en cuanto a actividad sísmica que el tramo anterior. 1.3.2 ONDAS SÍSMICAS GENERADAS Y PROPAGADAS Un terremoto es ocasionado por la liberación abrupta y repentina de la energía de deformación que se ha venido acumulando lentamente a lo largo de una falla, la cual corresponde a una zona de fracturación en la corteza terrestre. Cuando se rompe o fractura una falla, las ondas sísmicas se propagan en todas las direcciones desde la fuente. Al momento de producirse un sismo, gran parte de la Energía Sísmica se libera en forma de calor y una pequeña parte mediante la propagación de diversas tipos de ondas que hacen vibrar la corteza terrestre. Dentro de estas ondas encontramos las de Cuerpo que viajan a grandes distancias a través de la roca, identificándose las ondas P, primarias o de compresión, que producen que las partículas experimenten un movimiento paralelo a la dirección de propagación y las ondas S, secundarias o de corte, inducen un movimiento transversal. Otro tipo de onda son las Superficiales, las cuales se deben a reflexiones y refracciones de las ondas de cuerpo cuando éstas llegan a la superficie o a una interfase entre estratos, se identifican dentro de éstas ondas las Rayleigh con movimiento vertical y elíptico, y las Love con movimiento horizontal. Ver figura Nº 1.4. A medida que las ondas P, S, Love y Rayleigh, inciden en la superficie de la tierra, hacen vibrar el terreno a frecuencias que oscilan entre unos 0,1 y 30 Hz. También hacen vibrar a los edificios, como consecuencia de la amplitud, la composición espectral y la duración del temblor de tierra. Ver figura Nº 1.3. Si el edificio no esta diseñado y construido de forma que soporte las fuerza dinámicas que acompañan a estas vibraciones, sufren daños. Las ondas de compresión (P) y transversales (S) ocasionan, principalmente vibraciones de alta frecuencia (mayores a 1 Hz), que son más efectivas que las ondas de baja frecuencia para hacer vibrar a los edificios bajos. A su vez las ondas Rayleigh y Love, ocasionan, principalmente, vibraciones de baja frecuencia (menores a 1 Hz), que son más eficaces que las ondas de alta frecuencia para hacer vibrar a los edificios altos. 6 Figura Nº 1.3: Esquema de propagación de ondas sísmicas y su repercusión en una estructura. 7 Figura Nº 1.4: Direcciones de Propagación de ondas sísmicas desde la fuente. 1.4 RESULTADOS ESPERADOS Mediante la recopilación de los sismos reportados por los distintos catálogos nacionales e internacionales, se confeccionará una base de datos representativa de los sismos a partir del primer evento del cual se tienen reportes instrumentales de magnitud en Chile, el terremoto de Valparaíso de 1906. Se determinarán las ventanas temporales necesarias para contemplar eventos de ciertos rangos de magnitud, de forma completa y representativa, luego de esto se puede caracterizar los eventos según sus fuentes generadoras. 8 El presente trabajo mejorará la estimación de los coeficientes de la ley de GutenbergRichter obtenidos en estudios anteriores, a partir de la base de datos confiable, que recopile los valores de magnitudes e intensidades de los eventos sísmicos registrados en la Cuenca de Santiago, para un cierto período de tiempo. Luego de identificar y caracterizar las fuentes sismogénicas, se encontrarán las curvas de atenuación propias para cada una de ellas en función de la intensidad, determinando posteriormente curvas isosistas de interés, en las cuales se determinen las probabilidades de excedencia en un cierto porcentaje de la Intensidad Máxima Esperada, para un periodo de tiempo de interés, con lo cual se construirán Mapas de Peligro Sísmico para la Región Metropolitana de Santiago, los que permitan responder preguntas del tipo, ¿cual es la probabilidad de exceder el 10 % de la intensidad máxima esperada para un evento perteneciente a una cierta fuente sismogénica, en Santiago, dentro de los próximos 50 años? O bien conocer por ejemplo con un 10% de probabilidad, la ocurrencia de un evento con una intensidad mayor o igual a la obtenida (Io) para un periodo de vida útil de 50 años, en una determinada localidad perteneciente a la Cuenca de Santiago, y producto de una determinada fuente sismogénica o por la acción conjunta de las 3 fuentes. 9 CAPÍTULO 2 2.1 BASE DE DATOS CONTENIDO GENERAL El movimiento de las capas tectónicas genera una gran acumulación de deformaciones, lo que se traduce en que año tras año se incrementan las tensiones en las zonas de contacto entre las mismas. Esto genera un aumento de la energía potencial de deformación en la falla, conocida como Energía Sísmica Acumulada (E.A.S). Luego de un cierto número de años, dependiendo de la resistencia del material de la falla y otros factores, dicho material llega a su máxima capacidad de resistencia y cede, allí se produce el evento tectónico o sismo cuya magnitud dependerá de características como la longitud del área de ruptura y la cantidad de energía acumulada. Por ello, la actividad sísmica se resume en un proceso de acumulación y liberación de energía que se va modulando de acuerdo a la tasa de convergencia de las placas. La deformación acumulada se distribuye hacia la zona de contacto Interplaca y hacia el continente (sismos corticales), definiendo así diferentes zonas o fuentes sismogénicas. Para nuestro país, estas fuentes son las zonas de contacto entre las placas tectónicas mencionadas en el capítulo anterior, lo que hace que en nuestra región los sismos sean generados debido a una “subducción tipo Chile”, caracterizada por un sistema de tensiones de tipo compresivas, como se esquematiza en la figura Nº 2.1. Figura Nº 2.1: Tipo de Subducción Chilena. 2.2. IMPLEMENTACION DE LA BASE DE DATOS Una vez determinada y acotada las coordenadas del área de estudio y de definir las áreas de influencia, se deberá definir el rango de magnitudes que se considerará, elegir la ventana de tiempo que resulte más representativa tanto para los eventos de alta y baja magnitud. Esto obliga a seleccionar criteriosamente los catálogos que permitirán confeccionar una base de datos para las intensidades de los eventos registrados, en un cierto período de tiempo. 10 Posteriormente, definidos el o los catálogos que permitirán confeccionar la base de datos para registros de intensidades, se deben estimar las ventanas temporales representativas para reportar eventos según ciertos rangos de magnitudes, para eventos agrupados entre rangos de magnitud igual a ∆Ms = 0.5, perteneciente a rangos desde Ms = 4.5 – 5.0 incrementando el diferencial de Ms, hasta la magnitud máxima histórica de cada fuente sismogénica. De esta manera se puede estimar qué tan extenso debe ser el catálogo para tener una recurrencia significativa y representativa en cada rango de magnitudes de los sismos en la zona de estudio. 2.2.1. DETERMINACIÓN ÁREA DE ESTUDIO ¿Por qué estudiar la Región Metropolitana y en particular analizar la Cuenca de Santiago, y evaluar en ella el peligro sísmico?, es la pregunta que se contestará en este ítem. Chile es el sitio preciso para estudiar fenómenos geofísicos y sísmicos ya que es un laboratorio experimental por excelencia en toda su extensión, lo que favorece y enriquece los estudios que se hacen al respecto y permite desarrollar nuevas técnicas y teorías acerca de todo tipo de eventos presentes en nuestro país. No obstante y pese a lo atractivo que resulta nuestro territorio, incluso para investigadores extranjeros, la vulnerabilidad y la latente amenaza sísmica ponen a prueba la serviciabilidad de las estructuras y la seguridad de la población, más aún en áreas tan pobladas como la capital de Chile, la cual, de experimentar una catástrofe, repercutiría directamente en la economía y progreso nacional. En Chile la concentración de la población y de infraestructuras es muy alta en la Región Metropolitana de Santiago. Es por esto la necesidad de estudiar y evaluar el peligro sísmico en dicha zona, recopilando nuevos antecedentes y actualizando investigaciones anteriormente desarrolladas. Otro aspecto de interés en la zona seleccionada, son las características que presenta el contacto entre las placas frente a la cuenca de Santiago, debido a una particularidad del contacto subductivo. A los 33° S aproximadamente, la placa cambia su ángulo de buzamiento a partir de una profundidad de unos 100 Km. Al norte de los 33° la placa es casi horizontal comparado con los 25°- 30° que tiene al sur del paralelo 33. En el segmento norte, entre los 27º y 33º, llamado segmento de subducción subhorizontal, la zona de Wadati- Benioff desciende bajo el continente con una pendiente media de 25º E hasta aproximadamente 60 Km de profundidad. Bajo esta profundidad va decreciendo su pendiente hasta casi 0º a los 100 Km de profundidad y sigue una trayectoria casi subhorizontal por más de 300 Km desde donde continúa su descenso en el manto con una pendiente media de 25º E. (Pardo, et al.2000). En el segmento sur, entre los 33º y 36º S, la zona Wadati-Benioff mantea unos 30º hacia el Este aumentando progresivamente su inclinación con la profundidad. Estas características y particularidades de la morfología tectónica que se conjugan en estas latitudes, generan la presencia de eventos de diferentes fuentes sismogénicas. Por ende, si se realiza un estudio detallado de esta zona, los resultados pueden ser fácilmente extrapolables a otras regiones de Sudamérica y del mundo. 11 Concretamente, la Cuenca de Santiago la cual será estudiada en este trabajo, es el sector correspondiente a la Depresión Intermedia ubicada en la zona central de Chile, comprendida entre los paralelos 33° y 34° de latitud Sur. Limitando al Norte con el cordón de Chacabuco, y al sur con el cordón de Paine. 2.2.2. DETERMINACIÓN ÁREA DE INFLUENCIA La sismicidad de la región donde se quiere predecir el movimiento es el primer paso a seguir para el estudio del peligro sísmico. Previamente se debe definir la extensión de la zona cuya actividad sísmica pudiera afectar a un emplazamiento dado dentro de la Región Metropolitana. Casi todas las normativas establecen como área de influencia un círculo de radio igual a 300 kilómetros alrededor del punto a estudiar, y se impone el análisis de sismicidad en la región comprendida dentro del mismo. Se considerará, entonces, como área de influencia para la Cuenca de Santiago, en cuanto a la repercusión que puedan tener los sismos fuera de la región de estudio y que eventualmente pudieran incrementar el Riesgo Sísmico en la Región Metropolitana, un rango de 300 Km al norte y 300 Km al sur de Santiago. Se debe mencionar que dentro de esta selección de la extensión esférica de las áreas de influencia, no se considera el efecto directivo de las fallas superficiales. En conclusión, éste estudio abarcará una extensión entre los paralelos 30º y 37º de Latitud Sur, es decir comprende zonas de la región de Coquimbo, de Valparaíso, del Libertador General don Bernardo O’Higgins, la Región Metropolitana y parte de la región del Maule. 2.2.3. GENERACIÓN DE LA BASE DE DATOS La sismicidad histórica proporciona criterios cualitativos acerca de la actividad sísmica nacional a partir del siglo XVI, pero dichos registros no son totalmente representativos ya que los reportes no han sido captados homogéneamente a partir de entonces hasta la fecha. Para confeccionar la base de datos que se ocupará en este trabajo, se consultan catálogos nacionales e internacionales. La confección de la base de datos con los sismos chilenos se hizo conservando el formato utilizado en la elaboración del catálogo del proyecto SISRA (CERESIS; et al. 1985), el cual permitirá determinar las curvas de atenuación; mientras que para la determinación de las relaciones Gutenberg- Richter, se recurrirá a los reportes del catálogo inglés ISC. La información reunida corresponde entonces, a la proporcionada por los siguientes catálogos: • Catálogo del Centro Internacional de Sismología (Internacional Seismological Centre, ISC). • Catálogo CERESIS, fue confeccionado por el Centro Regional de Sismología para América del Sur, cuenta con información desde 1962. Este catálogo nace por la necesidad de unificar los catálogos de América del Sur bajo el auspicio del "Programa para la Mitigación 12 de los efectos de los terremotos en la Región Andina" (conocido como el Proyecto SISRA, 1985). Para la elaboración de la base de datos que permitirá la caracterización de las fuentes sismogénicas, se emplearán los datos disponibles en el catálogo inglés ISC (Internacional Seismological Centre), a través de su pagina web http://www.isc.ac.uk. A partir de la revisión de este catálogo, que recopila registros de eventos mundiales, se seleccionarán los eventos pertenecientes a las latitudes 30° y 37° S, y a las longitudes 69° y 73° W, que corresponden a los rangos de estudio de este trabajo. La mayoría de los eventos registrados contiene variaciones en los parámetros sísmicos reportados, dependiendo del servicio o estación sismológica que informó el evento ya que algunos datos se recalculan o relocalizan, es por eso, que en el catálogo del ISC algunos eventos presentan más de un valor de magnitud o de profundidad focal, pero sólo se seleccionó el que corresponde al reporte dado por el ISC. Se consideró además, de la base de datos, aquellos eventos que presentan registro numérico de profundidad focal, descartando aquellos que no presentan este valor. Luego de tener los parámetros sísmicos de todos los eventos reportados, se tomarán los sismos que tienen dos reportes de magnitud, ya sea Ms y mb, o Ml o Mw, con estos pares de datos se puede obtener una relación lineal entre las escalas de medición de magnitud. Con la ecuación determinada, es posible obtener la magnitud Ms para todos los eventos considerados del catálogo seleccionado. Con el valor de Ms calculado para cada evento reportado por el ISC, se procede a seleccionar de la base de datos sólo aquellos con Ms mayor o igual a 4.5, criterio que se considerará en este trabajo, por considerarse de interés para el ámbito ingeneril. El gran período de tiempo comprendido entre 1904 y 2006, hace que la ventana temporal considerada, que abarca más de 100 años, sea representativa de los sismos de baja y alta magnitud. Este hecho permite elaborar una muestra de sismos para Chile, y en particular para la Región Metropolitana de Santiago, que se considere confiable. Toda esta información para los sismos ocurridos hasta el 2006 reportados en el catálogo ISC, contempla en resumen 3.300 eventos de la base de datos para el rango de coordenadas que abarca el presente estudio. 2.2.4. HOMOLOGACIÓN DE ESCALAS DE MAGNITUD El análisis del peligro sísmico se realiza en función de la magnitud y la intensidad. Las escalas de magnitud empleadas comúnmente son la mb y Ms, calculadas a partir de las ondas de cuerpo y ondas superficiales, respectivamente. Al igual que en el catálogo del proyecto SISRA (Sismología para la Región Andina, 1985), sólo se consideran los sismos con una magnitud superior o igual a 4,5 sea ésta, mb (magnitud de la onda interna), Ms (magnitud de la onda de superficie), Mw (magnitud de Momento Sísmico), Mc (magnitud coda) o Ml (magnitud local). 13 Para cada sismo se entrega la fecha y hora en que ocurrió junto con las coordenadas del epicentro, latitud [º], longitud [º] y profundidad focal [km], además de las magnitudes registradas, ya sea en escalas mb, Ms, Mw, y/o Ml. La magnitud es un valor único y es una medida cuantitativa del sismo relacionada con la energía sísmica liberada. Teóricamente la magnitud no tiene límite superior, pero está limitada por la resistencia de las rocas en la corteza terrestre y la longitud de ruptura probable en la falla. Para su determinación han sido creadas diferentes escalas, dependiendo del tipo de onda en que se basa la medición; se tienen, así, las siguientes escalas de magnitud: 1. Magnitud Local ( Ml ): La idea de medir la magnitud de un sismo basado en un registro instrumental fue introducida en 1935 por Charles Richter, sismólogo de California Technological Institute. Fue definida para sismos locales en California para un radio de aproximadamente 600 km y se determina a partir de la máxima amplitud registrada por un sismógrafo Wood Anderson con constantes específicas (período = 0.8 segundos, amplificación estática igual a 2.800 y factor de amortiguamiento cercano a 0.8) ubicado a 100 kilómetros de la fuente sísmica. Para su determinación se utiliza la siguiente expresión: Ml = 1og (A) – log (Ao) Donde A es la máxima amplitud de la traza registrada y Ao la amplitud máxima que sería producida por un sismo patrón, siendo éste aquel que produciría una deflexión de 0.001 mm en un sismógrafo ubicado a 100 Km del epicentro. Ya que la escala de magnitud es logarítmica, el incremento en una unidad de magnitud significa un aumento en diez veces de la amplitud de las ondas en el sismograma, lo cual no debe confundirse con lo que sucede con la energía sísmica liberada en donde un incremento en magnitud equivale a un aumento de aproximadamente 31,5 veces de energía. Las escalas de magnitud Ms y mb no reflejan adecuadamente el tamaño de sismos muy grandes, subestiman su valor y entregan una estimación poco exacta de la energía liberada, lo que se ha denominado saturación de las escalas de magnitud. Las máximas magnitudes mb se encuentran alrededor de 6.5 a 6.8, y la magnitud Ms entre 8.3 a 8.7. Así también la magnitud definida empíricamente con base en la amplitud de las ondas sísmicas no permite definir el tamaño del sismo en términos del proceso físico de ruptura y de las dimensiones de la zona de dislocación. 2. Magnitud de Ondas Superficiales (Ms): Esta escala se basa en la amplitud máxima producida por las ondas superficiales Rayleigh con período en el rango de 18 a 22 segundos. La expresión para determinar su valor es la siguiente: 14 Ms=log10(A/T)+1.66log10(De)+3.30 Donde A es la máxima amplitud horizontal del terreno medida en micrómetros, T es el período de la onda en segundos y De la distancia epicentral en grados. 3. Magnitud de Ondas de Cuerpo (mb): La determinación de la magnitud Ms para los sismos con profundidad focal mayor a 50 kilómetros se dificulta, debido a que no se generan ondas de superficie con suficiente amplitud; para compensar esto se utilizó un factor de corrección de tal forma que se pudieran utilizar las ondas de cuerpo. La magnitud mb se basa en la amplitud de ondas de cuerpo con períodos cercanos a 1.0 segundos, para su determinación se utiliza la siguiente expresión: mb = log (A/T) + Q(D,h) Donde A es la amplitud del terreno en micrómetros, T es el período en segundos y Q es un factor de atenuación que está en función de la distancia (D) en grados y la profundidad focal (h) en kilómetros. 4. Magnitud Momento (Mw): La introducción del concepto de Momento Sísmico en la sismología, ha aportado una medida para designar el tamaño de un sismo que está en función directa de las propiedades físicas de la roca y de las dimensiones del área que sufre la ruptura. Es a partir de este concepto que se ha desarrollado la magnitud de momento. La cantidad de energía liberada por un sismo a partir del Momento Sísmico se define así: Mo = µ D A En la cual Mo es el momento sísmico medido en [dinas-cm], µ es la rigidez de la roca en dinas/cm2, D es el desplazamiento promedio de la falla en cm y A es el área del segmento que sufrió la ruptura expresada en cm2. La nueva escala de magnitud, denominada magnitud momento fue desarrollada por Hiroo Kanamori, del California Technological Institute. Para su determinación se utiliza la siguiente expresión: Mw=2/3 log (Mo) – 10.7 Las magnitudes de los sismos grandes fue recalculada usando esta nueva escala y para algunos de ellos cambió notablemente, tal como sucedió con el sismo de Chile de 1960 que tenía una magnitud Ms de 8.3 y que al calcularle la magnitud momento ésta fue de 9.5 convirtiéndose así en el sismo de mayor magnitud hasta hoy registrado. 15 Para resolver entonces al problema de la homologación de las escalas de medición de la magnitud, debido a que los catálogos para diferentes períodos de tiempo, registran los eventos en diversas escalas, se seguirá el siguiente procedimiento: la magnitud considerada será la magnitud Ms. Los sismos que no tengan Ms reportada, ésta se obtendrá convirtiendo mb a Ms. En el caso de ser necesario, los eventos que no tengan Ms ni mb, se convierte Ml a Mw, luego Mw a mb y este mb a Ms, y los que no tengan las magnitudes anteriores se convierte Mc a Mw, ésta a mb y finalmente ésta a Ms, todo dependiendo del tipo de escala con la que se reporte el evento, de modo tal de expresar todos los sismos en términos de una sola escala de magnitud, Ms, para poder realizar comparaciones y análisis posteriores. Este procedimiento se realizará recogiendo de la base de datos confeccionada, los registros que reporten para un mismo evento la magnitud en diferentes escalas. Se agruparán dichos casos y al graficarlos se determinará, a través de una regresión lineal, la relación entre el par de escalas de magnitud. Llamó la atención al grupo de sismólogos que colabora en este trabajo, al momento de presentar los pares de datos con Ms y mb, el gran número de eventos reportados por el ISC con Ms inferior a 4.0 reportados en los últimos años. Este hecho considerado poco riguroso no es despreciable, pues corresponde a más de un centenar de eventos en esta situación, cuya presencia afecta considerablemente la pendiente de la recta que relaciona Ms y mb, haciéndola decrecer cuando se omiten de la muestra los eventos de bajo Ms. Para solucionar este problema, se decidió no considerar para la relación entre Ms y mb los eventos con Ms inferior a 4.0, luego resultan cerca de trescientos eventos con Ms y mb, a partir de los cuales se generará la relación lineal entre las escalas de magnitud, que corresponde a la ecuación 2.1. Lo anterior, se presenta en la tabla Nº 2.1, donde se exponen las relaciones que permiten homogenizar la muestra para los 285 reportes de sismos que componen la base de datos que presentan el valor de la magnitud en dos escalas reportadas Ms y mb, a partir del año 1978 . Considerando los eventos entre los 30º y 37º de latitud sur, se obtiene: Tabla Nº 2.1 Relación lineal entre Escalas de Magnitud Ms y mb Escalas Ecuación 2.1 R2 Ms y mb Ms = 1.099 x mb – 0.588 0.58 El valor del factor de correlación R2 representa cuán dispersos se encuentran los eventos en relación a la línea de tendencia que los representa. En el caso de las escalas de magnitud para las cuales se encontró un bajo valor de R2, esto se explica debido al escaso número de eventos que reportaran el valor de la magnitud en dos escalas de medición, en comparación con el número total de reportes. A partir de la tabla anterior se procedió a evaluar cada ecuación para los distintos pares de magnitudes mb y Ms registradas para un mismo evento perteneciente a la base de datos empleada en este trabajo, en total 285 pares de datos, cuyo comportamiento se presenta en el siguiente grafico Nº 2.1. 16 Gráfico N° 2.1: Relación lineal entre escalas de magnitud Ms y mb. Relacion lineal entre Ms y mb Ms = 1.099 x mb - 0.5883 2 R = 0.5797 8 7.5 7 6.5 Ms 6 5.5 5 4.5 4 3.5 3 3 3.5 4 4.5 5 5.5 6 6.5 7 7.5 8 mb El bajo coeficiente de correlación obtenido con la ecuación de la tabla Nº 2.1 indica la mala dispersión de los datos, lo que hace pensar que quizás la relación lineal no es la que mejor se ajusta a los valores de magnitud Ms y mb, pero sin embargo es la que se ha usado desde siempre para relacionar las diferentes escalas de medición de magnitud. Sin embargo, para fines comparativos se ajusto una curva cuadrática, obteniéndose un factor de correlación igual a 0.592, similar al 0.5797 de la ecuación 2.1, por lo que al no experimentar una diferencia en el comportamiento de los datos, se acepta la relación lineal entre las escalas de magnitud. El trabajo en esta misma línea de investigación considerado como antecesor, realizado por Romanoff en 1998, empleó para los procedimientos de cálculo del peligro sísmico, la relación determinada por Martin en 1990, que corresponde a la ecuación Ec. 2.2, presentada a continuación: Ms = 2.5 mb – 8.23 Ec. 2.2 En el 2006, Araya obtuvo una nueva relación para los eventos de todo Chile, registrados desde el año 1981 al 2006, es decir, a partir del año de término de reportes realizados por el SISRA, relación que se presenta en la tabla N° 2.2. Para comparar las ecuaciones encontradas en este trabajo, con las de Martin y Araya, se grafican las relaciones lineales obtenidas entre Ms y mb, correspondientes a las ecuaciones 2.1 y 2.2. Posteriormente, se obtuvo el indicador estadístico de desviación estándar, que calcula la diferencia entre los datos observados y los teóricos obtenidos a partir de las relaciones encontradas. 17 Se debe mencionar la importancia de comparar las ecuaciones encontradas en este trabajo, con las relaciones encontradas por otros autores, los cuales han elaborado ecuaciones a partir de eventos comprendidos en todo el territorio nacional, para diversas ventanas de tiempo consideradas, y de acuerdo a diferentes catálogos empleados. Las relaciones entre las escalas de magnitud, y los resultados de su aplicación a los eventos reportados, se presentan en la tabla Nº 2.2, mientras que la comparación de las curvas se observa en el grafico Nº 2.2. Grafico Nº 2.2: Comparación de las relaciones lineales entre escalas de magnitud Ms y mb, dependiendo de diversos autores. Relacion Ms y mb 9,0 8,0 7,0 Ms 6,0 5,0 4,0 3,0 2,0 3 3,5 4 4,5 mb 5 Relacion Ms y mb este trabajo Araya_ 2006 5,5 6 6,5 7 Relacion ms y mb, martin 1990 Este trabajo considerando Ms <4,0 Tabla Nº 2.2 Comparación Estadística Relaciones lineales Ms y mb Autor Ecuación Desv. estándar Martin (1990) Araya (2006) Este trabajo con todos los valores de Ms reportados por el ISC Este trabajo con los valores de Ms > 4.0 reportados por el ISC Ms = 2.5 mb - 8.23 Ms = 1.26 mb – 1.56 1.019 2.184 Ms = 1.28 mb – 1.58 2.199 Ms = 1.1 mb – 0.59 0.456 A partir del estimador estadístico de la desviación estándar, se observa una menor dispersión de los datos reportados empleando la ecuación 2.1, la cual presenta una menor diferencia entre el valor de magnitud observado y el obtenido mediante el ajuste teórico de los datos reportados. Teniendo entonces los valores de magnitud Ms para los 3.374 eventos reportados por el ISC dentro de las coordenadas que abarca este estudio, se aplica el criterio de considerar sólo 18 aquellos eventos con Ms ≥ 4.5, por lo que la base de datos resultante contempla definitivamente 1.079 eventos. Una vez homologadas las escalas de medición de magnitud, y obtenido el valor Ms para todos los eventos de nuestra base de datos, el paso siguiente, es agrupar los eventos según rangos de magnitudes, y obtener los valores necesarios de las ventanas de tiempo del catálogo para confeccionar una base de datos confiable, procedimiento que se detalla a continuación. 2.2.5 DETERMINACIÓN DE LAS MAGNITUDES MAXIMÁS ESPERADAS La determinación del sismo de diseño, consiste en conocer la actividad sísmica del lugar y contar con información anexa de interés como fecha de ocurrencia, ubicación de epicentros, profundidades focales, magnitudes, intensidades, descripción de daños, generaciones de tsunamis, etc. Con éstos antecedentes es posible establecer el umbral de magnitud a partir del cual empiezan a ocurrir daños de importancia, las zonas de ruptura, periodos de actividad sísmica, distribución espacio-tiempo de sismos de importancia y la determinación de periodos de recurrencia para rangos de magnitudes de interés para el riesgo sísmico. Uno de los terremotos interplaca tipo thrust más importantes en el área de estudio, corresponde al ocurrido en Valparaíso en 1906, con un largo de ruptura de 365 [km] y un ancho de 150 [km], cuya magnitud es estimada en Ms= 8,5, siendo ésta la magnitud máxima esperada apropiada para este tipo de fuente (Comte y otros, et al. 1985). Los terremotos intraplaca de profundidad intermedia de gran magnitud sólo se han registrado correctamente a partir del siglo XX, siendo algunos ejemplos de este tipo de sismos los ocurridos en Chillán (1939), con magnitud igual a Ms=7.8 (Beck y otros, et al. 1998); Calama (1950) con una magnitud de Ms=8.0 (Kausel y Campos, et al. 1990); y el terremoto de Tarapacá del año 2005, con una magnitud registrada Mw = 7.9. En el caso de los sismos corticales o superficiales, en el continente se producen al pié de la cordillera de Los Andes en la parte central del territorio y en la precordillera en el Norte Grande. Estos eventos se caracterizan por su poca profundidad y porque sus efectos destructivos se concentran en un área de dimensiones reducida. Con la información reunida en los últimos años, gracias a las redes locales como la red telemétrica de Santiago, se ha podido comprobar que esta actividad es persistente pero no se ha podido estimar la magnitud máxima esperada ni la frecuencia de estos terremotos. De acuerdo con los datos históricos, el evento más importante de este grupo corresponde al terremoto de Las Melosas de 1958 con una magnitud del orden de 7.0 y con una intensidad en la zona epicentral de IX grados en la escala de Mercalli Modificada (Astroza y Sepúlveda, et al. 2006). El terremoto de las Melosas consiste en una secuencia de al menos 3 eventos de una magnitud inferior a 6.9, (Alvarado, et al. 2008). Además de este evento, en los últimos cinco años han ocurrido dos eventos de este tipo que han provocado daños y cuyos epicentros se han ubicado al interior de Iquique, terremoto de Chusmiza del 2001, y el terremoto de Curicó del 2004. Entonces, para la consideración de las magnitudes de diseño se recurrirá a datos históricos registrados y ya usados con anterioridad en otros trabajos relacionados con el tema. Lo anteriormente citado se resume en la siguiente tabla, Tabla Nº 2.3. 19 Tabla Nº 2.3 Magnitudes Máximas esperadas según Fuente Generadora 2.2.6 Fuente Sismogénica Magnitud Histórica Máxima [Ms] Interplaca tipo Thrust 8.5 Intraplaca de Profundidad Intermedia 8.0 Cordilleranos Corticales Superficiales 7.0 PROBLEMA DE ESTADÍSTICA SÍSMICA NO HOMOGENEA. Para resolver el problema de la Estadística Sísmica No homogénea, se expone la siguiente metodología propuesta por Stepp en 1973, empleada posteriormente en Chile por primera vez por Labbé y Saragoni en 1976, metodología que se ha aplicado en trabajos más recientes, dado a que existen rangos de magnitudes que no han sido registrados adecuadamente a lo largo de la historia, además de que a medida que la magnitud se incrementa, aumenta también el tiempo necesario a considerar en la obtención del promedio anual de ocurrencia de N terremotos de magnitud ≥ Mi. Los pasos a seguir se resumen a continuación: a) Agrupar los sismos en rangos de magnitudes, y cada intervalo se modela como un proceso estocástico puntual en el tiempo. b) Considerar que la varianza (SR2) de la media de la muestra, es inversamente proporcional al número de observaciones que compone la muestra considerada. c) Emplear la Ley de distribución de Poisson, que supone independencia de los eventos y que permite modelar la ocurrencia de los sismos como un proceso homogéneo de Poisson. Es decir, para cada rango de magnitud, la longitud del intervalo debe ser lo suficientemente grande para establecer una tasa promedio estable de ocurrencia. Es decir, si Ki representa el número de sismos que ocurren anualmente, entonces una estimación de la tasa promedio anual de la muestra será: n R(M) = ∑ Ki , (Ec. 2.1) i=1 La varianza S R 2 = R(M) , con T = longitud de años de la muestra. T La desviación estándar de la muestra se calcula como S R = R(M) (Ec. 2.2) (Ec. 2.3) T Para minimizar los efectos de la incompletitud de una base de datos, se ha recurrido a éste simple método estadístico y empírico, basado en el criterio de estabilidad de la tasa de recurrencia para ciertas magnitudes. De acuerdo a este método un catálogo completo de terremotos se agrupan en eventos en varios rangos de magnitud, y el número promedio de eventos por año R(M), es evaluado para cada rango de magnitud para diferentes ventanas de 20 tiempo de longitud creciente, descontando desde el año de registros más recientes. Las series obtenidas de R(M) se analizarán dada la mínima longitud de las ventanas de tiempo para la cual R(M) comienza a ser estacionaria, y esta ventana se asume que representa el mínimo periodo en el cual los reportes se consideran completos. Ver figura Nº 2.3. Figura Nº 2.3. Metodología de Stepp. Teniendo los resultados de las ecuaciones anteriores, se puede crear una muestra artificial de datos homogéneos, mediante una cuidadosa determinación de los intervalos en los cuales los terremotos están completamente reportados para diferentes rangos de magnitud, es decir, cuando la tasa de ocurrencia de un rango de magnitud es constante, implica que el intervalo de tiempo T ha reportado completamente los eventos de magnitud Ms ≥ Mi, teniendo como objetivo la minimización del error en la estimación de la tasa promedio de ocurrencia de sismos para cada rango de magnitud de interés. En el siguiente capítulo se muestran en detalle, los valores de tasas de ocurrencias R(M), varianzas (SR2) y desviaciones estándares (SR) para los eventos agrupados en diferentes rangos de magnitud, separados por fuente generadora, cálculos realizados con el objeto de graficar posteriormente en escala log-log los datos de la desviación estándar SR de la estimación de la media del número de anual (N/T) de eventos, como una función de la duración T de la muestra para varios rangos de magnitud, entre los 30º y 37º de latitud sur. De los resultados anteriores se podrá deducir los lapsos de tiempo necesarios para tener un reporte adecuado de los sismos de un cierto rango de magnitud, como era de esperar se obtuvo que a medida que aumenta la magnitud del evento, se incrementa también el lapso de tiempo necesario para tener un catálogo representativo y completo de los eventos. 21 Al graficar en escala logarítmica los valores de la desviación estándar versus el tiempo, como se mostró anteriormente, y observar el tipo de curva obtenida, se puede concluir que el tiempo requerido para la selección de una ventana representativa de dicho rango de magnitud, es el primer punto sobre la curva a partir del cual la tasa de recurrencia anual se vuelve estable. Se debe mencionar que la selección de dicha coordenada, requiere además un cierto criterio subjetivo que maneje una ventana de tiempo adecuada y razonable para cada rango de magnitud. Es importante mencionar el comportamiento de la curva de desviación versus el tiempo, graficados en escala logarítmica ambos ejes, en la cual se aprecian claramente dos pendiente en cada curva, las primeras coordenadas decaen linealmente a razón K/√T siendo K una constante propia para cada rango de magnitud, es decir, R(M,T) = N(M) 1 K ⇒ R(M,T) ≈ ⇒ R(M,T) = T T T (Ec. 2.4) Graficando los valores de magnitud versus la tasa de ocurrencia normalizada temporalmente, se obtiene la ecuación de Gutenberg-Richter, que indica la frecuencia de ocurrencia de eventos para una cierta magnitud en una cierta localidad, y en una cierta ventana de tiempo. Con el fin de evaluar la ventana temporal necesaria para registrar un evento de magnitud cercana a la magnitud de máxima esperada de cada fuente, se reemplaza en la relación Gutenberg-Richter obtenida para cada fuente sismogénica, el Ms establecido en la tabla Nº 2.3. El trabajo en este ámbito más reciente fue el realizado por Martin (1990), el cual reportó las siguientes ventanas de tiempo para eventos desde 1906 hasta 1985, siendo un total de 2.224 registros de eventos de magnitud Ms ≥ 4.5 para todo el territorio nacional, ver tabla Nº 2.4; Tabla Nº 2.4 Determinación de Ventanas Temporales para catálogos según Martin (1990) Rango de Magnitud [Ms] Frecuencia Anual de Ocurrencia [N] Tiempo considerado [años] ≥ 4.5 96.67 3 ≥ 5.0 35.80 10 ≥ 5.5 13.80 10 ≥ 6.0 6.50 30 ≥ 6.5 3.17 30 ≥ 7.0 1.35 40 ≥ 7.5 0.40 40 ≥ 8.0 0.06 140 22 Lo anteriormente señalado, permitió tener una idea general de los resultados que se deben obtener en este trabajo, teniendo en cuenta, que en ésta memoria el estudio se ve restringido al rango entre 30º y 37º de latitud sur, correspondiente a Región Metropolitana de Santiago y sus áreas de influencia, y sólo para sismos de magnitud superior a 4.5, que son los que importan para una evaluación de peligro sísmico y un análisis de riesgo posterior. En el capítulo siguiente se realizarán los procedimientos antes citados en este ítem, para determinar las ventanas de tiempo y las relaciones de Gutenberg- Richter, separando los eventos por fuente sismogénica generadora. Para la clasificación y caracterización de dichas fuentes, se emplearán criterios de ubicación del epicentro, y la profundidad focal registrada, agrupando eventos en 3 regiones sismogénicas. 2.3 RESULTADOS Y CONCLUSIONES La estadística sísmica no es homogénea o integra, es decir los eventos sísmicos de distintas magnitudes no han sido reportados con el mismo cuidado a través del tiempo. Como prueba de ello se puede destacar que los sismos de magnitudes inferiores a 6.5 sólo se han recopilados en su totalidad a partir de 1960, siendo gran parte de ellos réplicas de los terremotos del 21 y 22 de mayo de 1960. En cambio, para magnitudes altas, mayores o iguales a 7.0, se observa que existe uniformidad de información para el período de tiempo perteneciente al siglo XX. De acuerdo con Madariaga et al.1998, la lista de terremotos de magnitud próxima a 8 no es completa en los estudios históricos porque sus daños se limitaron a zonas locales que por el hecho de no estar pobladas han pasado desapercibidos para los registros. El trabajo de generar una base de datos, comienza con la selección de los catálogos sísmicos adecuados, dependiendo de la relación entre parámetros sísmicos que se desee obtener. Un problema grave de los catálogos antiguos consiste en que es necesario corregirlos, debido a varios factores: población de la época, exageraciones, errores de trascripción (rara vez se encuentra la versión original), pérdida de reportes, cambios en las regiones muestreadas, etc. Sin embargo, la aplicación de técnicas estadísticas muy refinadas permite aprovechar gran parte de la información antigua. El afán de tener catálogos lo más extensos posible va más allá de la mera curiosidad científica; los grandes terremotos ( .0), que son los que encierran más interés, tienen tiempos de recurrencia del orden de varias décadas, de manera que es imposible determinar si existen periodicidades en su ocurrencia y cuáles son sus variaciones si no se puede estudiar varios ciclos completos. Se recurre a información proveniente de catálogos mundiales como el ISC o NEIC, si es que se requiere información con un número mayor de años abarcados; o se recurre a catálogos regionales, como el CERESIS o el GUC, simplemente por la credibilidad y confianza que representa el hecho de contar con registros captados por redes sismológicas locales, considerando 23 la sismicidad de nuestro país, y la expertiz de los servicios simologicos y/o tecnología con la que se dispone para cuantificar los eventos sísmicos ocurridos dentro de nuestro territorio. Para establecer y caracterizar las fuentes sismogénicas se confeccionó una base de datos nutrida de eventos reportados por el catálogo inglés ISC, con el objetivo de determinar la relación de ocurrencia de los sismos según la magnitud, dentro del área de estudio considerada, ligados a través de la relación Gutenberg- Richter. Se seleccionó el ISC por considerarse el más completo a nuestra disposición y por lo accesible y rápido de obtener la sismicidad entre un cierto rango de coordenadas, ya que este catálogo recoge los reportes a nivel mundial. Como se pudo verificar, este catálogo también es incompleto, pues no presenta todos los eventos considerados importantes ocurridos en nuestro país, ocasionando importantes ausencias en cada fuente sismogénica, lo que luego repercute en su caracterización sísmica, por lo cual la base de datos extraída del ISC debió complementarse con los datos de otras fuentes de información o de otros catálogos. Para el segundo gran tema abordado en este trabajo, correspondiente a la determinación de las relaciones de atenuación, se privilegió los reportes de intensidades observadas en localidades captadas por el Proyecto SISRA, catálogo sudamericano que cuenta con un importante número de observaciones para cada evento ocurrido a partir de 1985, en particular para Chile. Se debió recurrir al catálogo inglés para obtener las relaciones G-R características de las fuentes sismogénicas, debido al escaso número de eventos resultantes de considerar sismos ocurridos entre los 30º y 37º S reportados por el Catálogo de Intensidades del CERESIS (Proyecto SISRA), el cual posee un gran sesgo al reportar los eventos en los cuales se tengan intensidades registradas, lo cual reduce significativamente el numero de sismos, y distorsiona la relación de ocurrencia versus la magnitud de un sismo en un determinado lugar. En el desarrollo de este trabajo, se pudo conocer y concluir, lo sesgado de los catálogos sísmicos disponibles tanto nacionales como internacionales. Pese a ser el país sísmicamente más activo a nivel mundial, no contamos con una base de datos completa ni actualizada de los eventos ocurridos en Chile desde 1906. Lo anterior pone de manifiesto la necesidad imperiosa de elaborar y publicar un catálogo nacional completo, que contenga los parámetros sísmicos actualizados de los grandes eventos que han sido estudiados y reevaluados de forma detallada en estos últimos años, como son los terremotos de Talca, Chillán, La Ligua, Santiago, Punitaqui, Las Melosas, entre otros; recogiendo y ordenando la información dispersa que se ha obtenido en numerosas investigaciones, para contar con un antecedente actualizado y revisado por los sismólogos nacionales, que permita tener la certeza de considerar los eventos importantes con sus parámetros reevaluados y/o relocalizados, con el objetivo de recurrir a esta base de datos para los posteriores estudios de peligro sísmico, o con la finalidad de contar con un reporte nacional completo que sea un referente fidedigno de la sismología histórica nacional. Todo lo anteriormente mencionado, hace de la elección de un catálogo un proceso criterioso que asegure la confección de una base de datos representativa. Es decir, la elección de 24 una ventana temporal que no sea tan corta como para que no incluya eventos de gran magnitud, ni tan larga para que el instrumental empleado a lo largo de los años involucrados, haya sido incapaz de percibir los eventos pequeños. Referente al párrafo anterior, en relación a la determinación de una ventana temporal, que permita que una base de datos contemple en forma representativa los sismos de un determinado rango de magnitud, se debe concluir que la metodología de Stepp, representa un grado de subjetividad, al determinar el punto donde comienza la estabilidad de las tasas de ocurrencia, el cual repercute posteriormente en la obtención de la ventana de tiempo, y en la determinación de la relación de G-R. Se debe mencionar que las curvas en escala log-log de la desviación estándar de las muestras versus el periodo considerado, igual a 100 años, decae tal como se había planteado, es decir, a razón inversa de la raíz del periodo, tal como se dedujo en la ecuación 2.4. Además se concluye, que el coeficiente K se reduce a medida que el rango de magnitudes Ms considerado crece, trasladándose en forma paralela decreciente a mayores valores de Ms, como se constatará en el siguiente capítulo. Según Labbé y Saragoni en 1976, y posteriormente Martin en 1990, las ventanas temporales necesarias para generar una base de datos confiable que contemple sismos de magnitud igual a la máxima esperada, consta de 166 y 140 años, respectivamente. En esta ocasión no se separaron eventos según fuente generadora, además de determinar este periodo para sismos reportados en todo el territorio nacional. Teniendo en cuenta las magnitudes que se manejan, se puede esperar que trabajando con la escala Ms se privilegie a los eventos de mayor magnitud, considerando que para estos sismos el valor de mb se satura sobre grado 6.0, quedando mejor representados por la magnitud Ms. Es por eso que la escala de magnitud Ms, es aquella con la que se expresaron los eventos registrados, para posteriormente obtener relaciones entre magnitudes y frecuencias de ocurrencias, a través de la ley de Gutenberg-Richter propia para cada fuente. 25 CAPÍTULO 3 3.1 DETERMINACIÓN DE LA SISMICIDAD Y CARACTERIZACIÓN DE FUENTES SISMOGÉNICAS CONTENIDO GENERAL Considerando que Chile es uno de los países con más alta actividad sísmica en el mundo, y que frecuentemente el país sufre catástrofes debido a la vulnerabilidad que presenta a lo largo de su extensión, es que se hace necesario y de suma importancia, evaluar certeramente el Peligro Sísmico existente, contar con redes instrumentales dispuestas en todo el territorio, para predecir probabilísticamente las intensidades que podrían excederse en cualquier localidad de Chile, empleando adecuadamente leyes de atenuación y correlacionando la sismicidad con la tectónica presente en nuestro país, lo que ha permitido determinar las fuentes sismogénicas y caracterizar sus respectivos parámetros sismológicos de interés. La identificación y caracterización de cada fuente sismogénica se realiza estudiando la sismicidad que aportan los eventos existentes en los catálogos sísmicos disponibles. Estos eventos se representan y se clasifican dependiendo de su sectorización y profundidades focales, con lo cual se reconocen las fuentes sismogénicas que los originaron. A cada grupo de eventos se asocia su “fuente tipo” y sus respectivos parámetros geométricos, tamaño del terremoto máximo posible, entre otros datos. Para cada fuente se estimará la relación Gutenberg-Richter y se determinarán posteriormente las respectivas leyes de atenuación, para conocer la variación de la intensidad con la distancia hipocentral, y poder evaluar posteriormente el peligro sísmico en ciertas áreas de interés de la Región Metropolitana, y en especial dentro de la cuenca de Santiago. En el presente capítulo se identificarán las fuentes sismogénicas encontradas según la base de datos generada en el capítulo anterior a partir del catálogo internacional ISC, posteriormente se obtendrán para cada región sismogénica las leyes de Gutenberg- Richter mediante el método de mínimos cuadrados. Mediante la conocida metodología probabilística de Algermissen y Perkins, se obtendrán en una etapa fina, las probabilidades de excedencia del parámetro de intensidad para la determinación del peligro sísmico en Región Metropolitana de Santiago. 3.2. DESARROLLO 3.2.1. IDENTIFICACIÓN DE LAS FUENTES SISMOGÉNICAS. Una vez determinada la base de datos de los sismos registrados por el Catálogo del ISC, es decir, teniendo registros de magnitudes desde 1904 hasta el 2006, además de definir los límites de magnitudes que se considerarán y de tener una suficiente ventana temporal de registros, que asegure un reporte confiable para todo rango de Ms, se procede a determinar cada fuente sismogénica, que es la etapa siguiente al capítulo de la determinación y confección de la base de datos. En la figura 3.1, se presentan los eventos del catálogo ISC considerados en la confección de la base de datos de este trabajo, en esta figura se visualiza la distribución de los sismos, además de presentar la extensión de la fosa en el tramo correspondiente a este estudio. La figura Nº 3.1 muestra la latitud, la longitud y la profundidad focal del evento, presentando en planta la 26 distribución espacial de los eventos reportados por el ISC desde 1904 hasta el 2006, entre los 30° S y los 37° S, y entre los 69° W y 73° W. Esta imagen permitirá visualizar el evento como una esfera cuyo tamaño es proporcional a su magnitud, y cuyo color está representado en una barra vertical que indica la relación del color con la profundidad focal reportada para cada evento respectivo. Fosa Chileno-Peruana Figura 3.1: Representación de los eventos del ISC considerados según área de estudio, y ubicación del perfil de la fosa con respecto de la costa de Chile. 27 El margen situado frente a las costas de Chile se caracteriza por ser uno de los más activos, tanto desde el punto de vista sísmico como tectónico. Fisiográficamente es extremadamente interesante y único, en el sentido que una fosa oceánica, en este caso la fosa Chile-Perú, pueda ser observada en forma continua a través de varios miles de kilómetros. Es sin duda un margen típico de convergencia y se origina por las colisiones de la placa de Nazca con la Sudamericana por el Oeste y por el encuentro al Sur de la elevación de Chile, de la placa Antártica con la Sudamericana. La fosa Chile-Perú es un elemento morfológico dominante a lo largo de todo el territorio, es una depresión continua del fondo marino que se extiende por más de 5.000 kilómetros persistiendo como unidad estructural desde la costa de Colombia, hasta Tierra del Fuego en Chile. La figura Nº 3.2 y 3.3 permiten observar el “quiebre” que experimenta la fosa frente a la latitud aproximada de 33° S, en donde la placa de Nazca cambia su ángulo de buzamiento. Esta particularidad de la geometría de la fosa dada por la subducción, influye en la definición de la fuente sismogénica en el contacto mismo, es decir, la fuente que origina los sismos de tipo thrust, posee una orientación dada por el azimut que se produce en el punto de perpendicularidad del perfil de la fosa, con respecto del punto en el cual se evalúe la amenaza sísmica. Esto se puede visualizar mediante perfiles de sismicidad para una cierta latitud, como se hizo en este trabajo y se comprobó la subhorizontalidad con la que subducta la placa de Nazca al norte del paralelo 33º. Este azimut se ha estimado del orden de N20ºE. Las coordenadas de la fosa chileno – Peruana, permiten tener una idea general de la disposición de ésta, y su distancia al continente. Esto se muestra en la figura Nº 3.3. Figura 3.2: Esquema de la transición en el ángulo de subducción de la Placa de Nazca. 28 Perfil de la Fosa -78.00 -76.00 -74.00 -72.00 -70.00 -68.00 -18.00 -20.00 -22.00 -24.00 perfil de la fosa -75,00 -26.00 -74,00 -73,00 -72,00 -71,00 -70,00 -29,00 -69,00 -30,00 -28.00 -31,00 -30.00 -32,00 Latitud [°] Latitud -32.00 -34.00 -33,00 -34,00 -36.00 -35,00 -38.00 -36,00 -40.00 -37,00 -42.00 Longitud [°] -38,00 -44.00 -46.00 -48.00 -50.00 Longitud Figura 3.3: Coordenadas del perfil de la fosa Chilena-Peruana. En la figura de la derecha se muestran las latitudes abarcadas en este trabajo y la singularidad en el azimut de subducción. 29 Para caracterizar los tipos de fuentes sismogénicas se usarán criterios de ubicación de las profundidades focales expresada en [km] según los rangos considerados como límites usuales para cada tipo de evento perteneciente a una cierta región sismogénica, además de considerar la ubicación geográfica del epicentro, dato reportado en la base de datos. De este modo se dividirán y agruparán las fuentes sismogénicas, para analizar sus características y patrones comunes de comportamiento. A modo general se mencionan las 3 fuentes presentes y reconocidas en nuestra zona de estudio, las cuales se describen brevemente a continuación: Sismos tipo Thrust o Interplaca: Ocurren a lo largo del plano de contacto entre las placas tectónicas Sudamericana y la de Nazca, son sismos costeros, en general, aquellos de profundidad focal menor que 50 [km]. Pertenecen a este tipo de eventos, los terremotos de Valparaíso de 1906 y el de 1985. La mayor parte de los grandes sismos, corresponden a este tipo de eventos. Sismos Intraplaca de Profundidad Intermedia: Aquellos sismos que ocurren al interior de la placa de Nazca, se denominan sismos Intraplaca. Se caracterizan por tener epicentros en el interior del continente, y registrar profundidades focales consideradas entre 50 [km] y 300 [km]. Como ejemplo de este tipo de eventos, se mencionan terremotos como el de Talca de 1927, de Chillán de 1939, el de Santiago de 1945, La Ligua 1965 y Punitaqui de 1997. Sismos Corticales Cordilleranos: Aquellos sismos que se producen al interior de la placa Sudamericana. Son sismos cordilleranos superficiales, situados en el frente precordillerano y cordillerano con distancias focales cercanas a 20 [km] de profundidad. Un ejemplo de este tipo de eventos es el terremoto de Las Melosas ocurrido en 1958. Falla San Ramón: Es necesario mencionar en este trabajo, esta falla tectónica encontrada en el frente cordillerano, perteneciente a la fuente cortical, pero con características muy peculiares. Es en cuanto a esta falla, a la que se refieren los siguientes párrafos, pues aparte de su caracterización no se puede concluir nada certero hasta la fecha, acerca de su potencial sísmico. Con respecto a la Falla San Ramón (FSR), es una falla inversa cortical, que corresponde al límite entre la cordillera principal y la depresión central al oriente de Santiago. La falla "monta" la cordillera principal sobre al depresión central (se puede imaginar como un plano con una inclinación cercana a los 50º al Este). Su traza está reconocida entre los ríos Maipo y Mapocho, pero hay evidencias (Rauld et al. 2007), que la falla sigue al norte en la Dehesa y al sur en Pirque. Lo que no está tan claro es qué pasa un poco más al norte y al sur, es decir si hay otras fallas y cómo la FSR se relaciona con ellas. Respecto a la actividad, ésta presenta evidencias de actividad reciente (en términos geológicos), es decir en los últimos 10.000 años, lo que queda por confirmar mediante dataciones, pero eso la hace considerarse como falla activa o potencialmente activa. Sin embargo hay evidencias como escarpes de fallas y depósitos aluviales cortados por la falla que indican que la falla ha tenido actividad durante el Cuaternario (desde 2.6 Millones de años). El único marcador crono estratigráfico que se tienen, son depósitos de ceniza cortados por la falla y de 30 edades cercanas a los 450.000 ± 50.000 años, aunque esta data se encuentra actualmente en revisión. Se definen tres segmentos a lo largo de la extensión de la falla, los cuales en total conforman alrededor de 30 Km, los tramos identificados son los siguientes: 1. Cerro Calán – Quebrada Nido de Águila, de 10 km de largo, cambia su dirección hacia el sur, pasando de NNW a la dirección NS, 2. Quebrada Nido de Águila - Lo Cañas, de 7 km de extensión y dirección NS, 3. Lo Cañas – Río Maipo, de aproximadamente 12 km de longitud y dirección NS. Con respecto a su potencial sísmico se tiene la idea, por las evidencias morfológicas y por su taza de desplazamiento vertical estimada (del orden de 0.1 a 0.2 mm / año) que podría generar sismos de magnitudes Mw entre 6.5 a 7, con períodos de recurrencia de algunos miles de años (entre 5.000 y 10.000). En la figura N° 3.4 se muestra un panorama del frente cordillerano de Santiago Oriente, donde es posible apreciar los escarpes asociados a la falla San Ramón. Figura Nº 3.4: Panorama general de la falla San Ramón. En la figura N° 3.5, se muestra la extensión de la falla San Ramón, la cual está comprendida dentro de la zona de estudio de este trabajo. 31 Figura Nº 3.5: Extensión de la falla San Ramón, y sus segmentos de falla. En la siguiente figura, N° 3.6 y 3.7, se aprecia un perfil frente a Santiago, para los 32.5° y para los 33° respectivamente, con la disposición de las fuentes sismogénicas mencionadas anteriormente. 32 Figura Nº 3.6: Perfil esquemático de sismicidad a la latitud 32.5° S. Corticales cordilleranos Interplaca tipo Thrust fosa costa Intraplaca prof. Intermedia Figura Nº 3.7: Taxonomía de las fuentes. Perfil de sismicidad a los 33° S, se diferencian las fuentes sismogénicas presentes. 33 Dado el catálogo (ISC) y las ventanas temporales definidas mediante Stepp, según lo mencionado en el capítulo anterior, las cuales permitirán obtener una recurrencia de sismos en forma significativa, se procede con posterioridad a calcular el número (N) de eventos de magnitudes Ms pertenecientes a un cierto rango de magnitud, y se dividirá por la cantidad de años abarcados en la ventana de tiempo seleccionada, de forma tal de tener así el número de eventos por año, pues para realizar los cálculos de la metodología probabilística se requiere que la frecuencia de los eventos (N) esté normalizada temporalmente. Es decir, se determinará la relación propia para cada fuente identificada entre los 30º y 37º latitud sur, para luego obtener leyes por unidad de tiempo (1 año). Esta operación se realiza para ceñirse a la definición de fuente sísmica como el área o volumen que contiene temblores distribuidos homogéneamente. 3.2.2. LEYES DE GUTENBERG-RICHTER Para la caracterización de cada región sismogénica, se recurre a las siguientes relaciones de frecuencia-magnitud de Richter, dadas por la sismicidad reportada en el catálogo internacional ISC, a partir del cual los eventos fueron clasificados según pertenecían a los rangos de latitud, longitud y profundidad, correspondientes a cada fuente sismogénica. Se determinará, entonces, para cada fuente sismogénica la relación empírica que liga la frecuencia de ocurrencia de sismos para una determinada magnitud Ms, en un determinado período de tiempo y en una cierta zona en estudio. Esta relación es lo que se conoce como Ley de Gutenberg- Richter, que tiene la siguiente forma: Log10 (N) = a – b · Ms (Ec. 3.1) Donde: N: Es el número de eventos con magnitudes mayor o igual que un valor Ms. a: Representa la actividad sísmica. Es el número de sismos con magnitudes mayores que cero durante el tiempo t, que considera el catálogo de la base de datos. b: Coeficiente que indica la proporción de sismos pequeños con respecto a la cantidad de sismos grandes. Su valor fluctúa generalmente entre 0.7 y 1.5, en general es cercano a 1.0 cuando los sismos son de origen tectónico. Mientras mayor es el valor de b, mayor es la cantidad de sismos pequeños respecto de los grandes registrados. La ley de G-R para cada fuente se obtendrá mediante el método de regresión lineal empleando mínimos cuadrados a los datos reunidos, para luego con el mismo procedimiento matemático estimar los errores asociados a dicha metodología empleada. Los principales sismos de las zonas de subducción son los terremotos interplaca tipo thrust y los intraplaca de profundidad intermedia, los cuales presentan significativas diferencias en cuanto a los valores de amplitud máxima, contenido de frecuencias, duración, largo de ruptura, caída de tensiones, entre otros factores que los caracterizan y diferencian. 34 Los terremotos de subducción de la costa Pacífica de América se deben a las propiedades de las placas que se encuentran en contacto, como sus edades y velocidades de convergencia, las cuales están relacionadas directamente con la magnitud máxima del terremoto característico de cada zona. Además de la rugosidad de las placas, factor relacionado con la edad de éstas y que influye en el contenido de frecuencias de los acelerogramas de los terremotos, factor que a su vez, está relacionado con el valor de la aceleración máxima del terremoto (P.G.A, o peak ground acceleration). Una fuente sismogénica se define como un volumen o área caracterizada por su ancho, largo, orientación e inclinación con respecto a la superficie de la Tierra, aproximaciones que se fundamentan en datos empíricos que simulan el modelo de falla tectónica como fuente del evento. 3.2.3 CARACTERIZACION DE LAS FUENTES SISMOGENICAS MEDIANTE LAS LEYES DE GUTENBERG- RICHTER De un total de 1.079 eventos reportados con Ms ≥ 4.5, recopilados del catálogo ISC, resultantes luego de homologar escalas de magnitud, y de filtrar por coordenadas y Ms de interés, se procede a diferenciar según la profundidad focal registrada en [Km], y la longitud [º] de la coordenada epicentral del reporte. Bajo este criterio se diferencian tres grupos de eventos, para los cuales se obtendrán las correspondientes relaciones de frecuencia de ocurrencia y magnitud Ms, conocidas como relaciones de Gutenberg- Richter (G-R). 3.2.3.1 SISMOS TIPO INTERPLACA Grupo de eventos reportados por el catálogo del ISC, que cumplen los siguientes criterios de clasificación: a) Profundidad focal menor o igual que 50 [km]. (Belmonte – Pool, et al. 1997) b) Ubicación de la coordenada epicentral al Este de los 71º de longitud Oeste, extendiéndose al oeste, hasta el borde de la fosa chileno-peruana. Con estos requisitos, cuento con un total de 463 eventos correspondientes a sismos de origen interplaca tipo thrust, reportados por el catálogo ISC dentro de las latitudes que contempla este trabajo. Ver figura N° 3.8. 35 Figura Nº 3.8: Sismicidad de eventos Interplaca tipo Thrust, a partir del catálogo ISC. 36 Para la posterior determinación de las ventanas temporales de eventos de este tipo de fuente, se procede a seguir los pasos de la Metodología de Stepp detallada a cabalidad en el capítulo N° 2, en donde se calculan las desviaciones estándar de los eventos normalizados temporalmente, en función del tiempo (T) en años, como se muestra en la Tabla N° 3.1. 37 A continuación se presentan, a modo de ejemplo del procedimiento, sólo algunos de los rangos de magnitudes realizados para el desarrollo de la metodología de Stepp. En los siguientes gráficos N° 3.1 al N° 3.3 se presenta la curva decreciente de la desviación de la tasa promedio de ocurrencia en función del tiempo, y desde el gráfico N° 3.4 al N° 3.6, se muestran los mismos valores representados anteriormente, pero en escala log-log, con el fin de obtener el año, para el cual un evento perteneciente a dicho rango de magnitud, queda bien representado. A continuación se dan a conocer los procedimientos previos necesarios para el cálculo de la ventana temporal, siguiendo la metodología de Stepp. Gráfico N° 3.1: Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años], pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [ 4.5 ; 5.0[ Desviacion v/s tiempo para 4.5< Ms<5.0 Desviacion Sr 3,00 2,50 2,00 1,50 1,00 0,50 0,00 0 20 40 60 80 100 120 Tiempo [años] Gráfico N° 3.2 : Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años], pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [ 5.0 ; 5.5[ Desviacion v/s tiempo para 5.0< Ms<5.5 2,50 Desviacion Sr 2,00 1,50 1,00 0,50 0,00 0 20 40 60 Tie mpo [años] 38 80 100 120 Gráfico N° 3.3 : Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años], pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [ 6.0 ; 6.5[ Desviacion v/s tiempo para 6.0< Ms<6.5 Desviacion Sr 1,20 1,00 0,80 0,60 0,40 0,20 0,00 0 20 40 60 80 100 120 Tiempo [años] Con los resultados anteriores, se grafica en escala log-log, los valores de SR y de T [años], obteniéndose un comportamiento casi lineal de los datos en todo el tramo. El paso siguiente de la metodología de Stepp, descrito y presentado en el capítulo N° 2, corresponde a encontrar la primera coordenada respectiva del período, a partir del cual los puntos siguientes de la curva, se (1) vuelven estables y coinciden sobre la recta de ecuación k/ T . Gráfico N° 3.4: Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años] en escala log-log, pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [4.5 ; 5.0[ Desviacion v/s tiempo para 4.5< Ms<5.0 Desviacion Sr 100,00 10,00 1,00 0,10 0,1 1 10 0,01 Tiempo [años] 39 100 1000 Gráfico N° 3.5: Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años] en escala log-log, pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [5.0 ; 5.5[ Desviacion v/s tiempo para 5.0< Ms<5.5 Desviacion Sr 100,00 10,00 1,00 0,10 0,1 1 10 100 1000 0,01 Tiempo [años] Gráfico N° 3.6: Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años] en escala log-log, pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [6.0 ; 6.5[ Desviacion v/s tiempo para 6.0< Ms< 6.5 Desviacion Sr 10,00 1,00 0,10 0,1 1 10 100 1000 0,01 0,00 Tiempo [años] (1) Se ha demarcado con un círculo sobre los puntos del grafico, el dato que se considera el período en años necesarios para la ventana temporal representativa de eventos pertenecientes a dicho rango de magnitud. 3.2.3.2 SISMOS TIPO INTRAPLACA DE PROFUNDIDAD INTERMEDIA Grupo de eventos que cumplen los siguientes criterios de clasificación: a) Profundidad focal mayor que 50 [km] y menor que 300 [Km], b) Ubicación de la coordenada epicentral entre los 69º y los 72º de longitud Oeste. 40 Con estos requisitos, cuento con un total de 561 eventos correspondientes a sismos de origen intraplaca de profundidad intermedia, según reportes extraídos del catálogo inglés ISC, para las latitudes de estudio de este trabajo. La sismicidad se muestra en la figura Nº 3.9. Figura Nº 3.9: Sismicidad de eventos Intraplaca de Profundidad Intermedia, según ISC. 41 Para la posterior determinación de los períodos representativos de eventos de este tipo de fuente, se procede a seguir los pasos de la Metodología de Stepp, en donde se calculan las desviaciones estándar de los eventos normalizados temporalmente, en función del T (tiempo) en años, como se muestra en la Tabla N° 3.2. En los siguientes gráficos N° 3.7 al N° 3.9 se presenta la curva decreciente de la desviación de la tasa promedio de eventos en función del tiempo, y desde el gráfico N° 3.10 al N° 3.12, se muestran los mismos valores representados anteriormente, pero en escala log-log, con el fin de obtener el mínimo valor temporal (año), a partir del cual un evento perteneciente a dicho 42 rango de magnitud, queda bien representado. A continuación se dan a conocer los procedimientos previos necesarios para el cálculo de la ventana temporal, siguiendo la metodología de Stepp. Sólo se colocan en el presente informe algunos de los rangos de magnitudes, con el objeto de dar a conocer el comportamiento de los datos y la posterior selección de la ventana temporal. Gráfico N° 3.7 : Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años], pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [ 4.5 ; 5.0[ Desviacion v/s tiempo para 4.5< Ms<5.0 Desviacion Sr 3,00 2,50 2,00 1,50 1,00 0,50 0,00 0 20 40 60 80 100 120 Tiempo [años] Gráfico N° 3.8: Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años], pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [ 5.0 ; 5.5[ Desviacion v/s tiempo para 5.0< Ms<5.5 1,60 Desviacion Sr 1,40 1,20 1,00 0,80 0,60 0,40 0,20 0,00 0 20 40 60 Tie mpo [años] 43 80 100 120 Gráfico N° 3.9 : Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años], pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [ 5.5 ; 6.0[ Desviacion v/s tiempo para 5.5< Ms<6.0 0,40 Desviacion Sr 0,35 0,30 0,25 0,20 0,15 0,10 0,05 0,00 0 20 40 60 80 100 120 Tiempo [años] Con los resultados anteriores, se grafica en escala log-log, los valores de SR y de T [años], obteniéndose un comportamiento casi lineal de los datos en todo el tramo. El paso siguiente de la metodología de Stepp, corresponde a encontrar la coordenada respectiva del período (mínimo valor), a partir del cual los puntos siguientes de la curva, se vuelven estables y coinciden sobre la (2) recta correspondiente a k/ T . Gráfico N° 3.10 : Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años] en escala log-log, pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [4.5 ; 5.0[ Desviacion v/s tiempo para 4.5< Ms<5.0 Desviacion Sr 100,00 10,00 1,00 0,10 0,1 1 10 0,01 Tiempo [años] 44 100 1000 Gráfico N° 3.11 : Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años] en escala log-log, pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [5.0 ; 5.5[ Desviacion v/s tiempo para 5.0< Ms<5.5 Desviacion Sr 100,00 10,00 1,00 0,10 0,1 1 10 100 1000 0,01 Tiempo [años] Gráfico N° 3.12: Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años] en escala log-log, pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [5.5 ; 6.0[ Desviacion v/s tiempo para 5.5< Ms<6.0 Desviacion Sr 100,00 10,00 1,00 0,10 0,1 1 10 100 1000 0,01 Tiempo [años] (2) Se ha demarcado con un círculo sobre los puntos del grafico, el dato que se considera el período en años necesarios para la ventana temporal representativa de eventos pertenecientes al rango de magnitud respectiva. 3.2.3.3 SISMOS CORTICALES O CORDILLERANOS SUPERFICIALES Grupo de eventos que cumplen los siguientes criterios de clasificación: a) Profundidad focal menor o igual que 20 [Km]. En algunos eventos reportados, se debió priorizar la ubicación del epicentro, por ejemplo, existen eventos localizados en el frente cordillerano o precordillerano con profundidades focales superiores a la considerada 45 como límite, alrededor de 30 Km, estos eventos claramente pertenecen a la fuente sismogénica del tipo cortical, por lo que se contabilizaron en este grupo. b) Ubicación de la coordenada epicentral entre los 69º y los 70.5º de longitud Oeste. Con estos requisitos, cuento con un total parcial de 54 eventos correspondientes a sismos de origen cortical, ubicados en el sector cordillerano, provenientes de los reportes registrados en el catálogo ISC. Ver figura Nº 3.10. Figura Nº 3.10: Sismicidad de eventos Corticales o cordilleranos Superficiales 46 Para la posterior determinación de los períodos representativos de eventos de este tipo de fuente, se procede a seguir los pasos de la Metodología de Stepp, en donde se calculan las desviaciones estándar de los eventos normalizados temporalmente, en función del T en años, como se muestra en la Tabla N° 3.3. Al realizar el recuento de eventos del tipo cortical, se observa que el evento de Las Melosas, ocurrido el día 04 de Septiembre de 1958, no está reportado en el Catálogo de Intensidades del ISC, pese a que pertenece al rango de magnitudes comprendido entre [6.5 ; 7.5[ y a las latitudes consideradas. Esta importante ausencia, altera la obtención de la curva de Gutenberg- Richter para los eventos de este tipo de fuente cortical. Es por esto que se decidió incluir en la base de datos el evento cortical de mayor magnitud reportado en nuestro país, el Terremoto de las Melosas. El día 04 de septiembre de 1958, una secuencia de tres terremotos de poca profundidad (cercano a 10 km) sacudió las Cordillera de los Andes, en la localidad del pueblo de Las melosas, en el Cajón del Maipo, tramo superior del valle del río Maipo (Lomnitz, et al. 1960; Piderit, et al. 1961). Se reportaron magnitudes entre los 6.7 y 6.9 en escala de Richter y la Intensidad Mercalli Modificada fue IX y el epicentro se localizó en la confluencia de los ríos Maipo y Volcán. Ver reportes de intensidades en la tabla Nº 3.4, y su detalle en el ANEXO A; A.1. Tabla Nº 3.4 Localidades afectadas por el Terremoto de Las Melosas, 1958 Localidad Lat [°] Long [°] I reportada [IMM] Puente Alto -33,60 -70,57 5,5 Las Vizcachas -33,60 -70,52 5,5 La Obra -33,58 -70,45 5,5 El Canelo -33,57 -70,43 6 El Manzano -33,58 -70,40 6 Guayacán -33,58 -70,38 6,5 San José de Maipo -33,63 -70,37 6,5 El Melocotón -33,70 -70,33 7 San Alfonso -33,72 -70,28 7 El Ingenio -33,77 -70,25 7,5 San Gabriel -33,78 -70,25 7,5 Los Queltehues -33,78 -70,22 8 Las Melosas -33,85 -70,22 8,5 El Volcán -33,82 -70,17 9 Lo Valdés -33,85 -70,05 7 Santiago -33,45 -70,63 5 Valparaíso -33,03 -71,63 3 San Felipe -32,75 -70,72 3 La Calera -32,75 -71,20 3 Sewell -34,08 -70,38 4 Rancagua -34,17 -70,75 3 Curicó -34,98 -71,23 3 Curepto -35,08 -72,02 3 Talca -35,42 -71,58 3 Cauquenes -35,97 -72,32 2 47 Se debe incluir entonces, en los registros del ISC el terremoto de las Melosas. Para el posterior estudio de las curvas de atenuación se emplearán los antecedentes presentados en la tabla Nº 3.4, sin embargo, para la obtención de la relación de Gutenberg-Richter, se considerará como un sólo evento el ocurrido el 04 de septiembre de 1958 (no la seguidilla de los 3 sismos ocurridos ese día), siendo entonces un total de 55 eventos corticales los que componen la base de datos de este trabajo. El resumen de eventos de este tipo de fuente, se presenta en la tabla Nº 3.3. En los siguientes gráficos N° 3.13 al N° 3.15 se presenta la curva decreciente de la desviación de la tasa promedio de eventos en función del tiempo; y desde el gráfico N° 3.16 al N° 3.18 se muestran los mismos valores representados anteriormente pero en escala log-log, con el fin de obtener el año, para el cual un evento perteneciente a dicho rango de magnitud, queda 48 bien representado. A continuación se dan a conocer sólo algunos de los procedimientos previos necesarios para el cálculo de la ventana temporal, siguiendo la metodología de Stepp. Gráfico N° 3.13: Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años], pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [ 4.5 ; 5.0[ Desviacion v/s tiempo para 4.5< Ms<5.0 1,60 Desviacion Sr 1,40 1,20 1,00 0,80 0,60 0,40 0,20 0,00 0 20 40 60 80 100 120 Tiempo [años] Gráfico N° 3.14: Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años], pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [ 5.5 ; 6.0[ Desviacion v/s tiempo para 5.5< Ms<6.0 Desviacion Sr 0,60 0,50 0,40 0,30 0,20 0,10 0,00 0 20 40 60 Tiempo [años] 49 80 100 120 Gráfico N° 3.15: Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años], pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [ 6.0 ; 6.5[ Desviacion v/s tiempo para 6.0< Ms<6.5 0,35 Desviacion Sr 0,30 0,25 0,20 0,15 0,10 0,05 0,00 0 20 40 60 80 100 120 Tiempo [años] De forma sistemática a como se hizo con las otras 2 fuentes, se grafican en escala log-log los valores de SR y de T [años], obteniéndose un comportamiento casi lineal de los datos en todo el tramo. El paso siguiente de la metodología de Stepp, corresponde a encontrar la coordenada respectiva del período, a partir del cual los puntos siguientes de la curva, se vuelven estables y (3) coinciden sobre la recta correspondiente a k/ T . Gráfico N° 3.16 : Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años] en escala log-log, pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [4.5 ; 5.0[ Desviacion v/s tiempo para 4.5< Ms<5.0 Desviacion Sr 100,00 10,00 1,00 0,10 0,1 1 10 0,01 Tiempo [años] 50 100 1000 Gráfico N° 3.17 : Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años] en escala log-log, pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [5.5 ; 6.0[ Desviacion v/s tiempo para 5.5< Ms<6.0 Desviacion Sr 1,00 0,10 0,1 1 10 100 1000 0,01 0,00 Tiempo [años] Gráfico N° 3.18: Desviación estándar del número de eventos versus el tiempo [años] en escala log-log, pertenecientes al rango de magnitud comprendido entre [6.0 ; 6.5[ Desviacion v/s tiempo para 6.0< Ms< 6.5 Desviacion Sr 10,00 1,00 0,10 0,1 1 10 100 1000 0,01 0,00 Tiempo [años] (3) Se ha demarcado con un círculo sobre los puntos del grafico, el dato que se considera el período en años necesario para la ventana temporal representativa de un evento perteneciente a dicho rango de magnitud. Las curvas de la metodología de Stepp, se realizan para poder deducir a partir de ellas, el período de tiempo necesario para tener una ventana de años representativa de los eventos, dependiendo del rango de magnitud Ms al cual pertenecen. Los gráficos log-log para cada fuente, constan de curvas correspondientes a ∆Ms =0.5, a partir de rangos de magnitud que abarcan desde Ms =4.5 hasta la respectiva magnitud máxima esperada según fuente. 51 En la tabla N° 3.5 se presenta el resumen de las ventanas temporales representativas para los eventos agrupados en rangos de magnitud según Stepp, obtenidas a partir de los set de curvas de eventos realizadas para cada fuente. Tabla N° 3.5 Resumen de ventanas Temporales Representativas Cortical Intraplaca Interplaca Tipo Fuente ≥ Magnitud [Ms] 4.5 5.0 5.5 6.0 6.5 7.0 7.5 8.0 4.5 5.0 5.5 6.0 6.5 7.0 7.5 4.5 5.0 5.5 6.0 6.5 Ventana [años] 3 5 20 30 40 60 90 100 3 5 10 30 70 90 100 3 30 40 40 50 Con los períodos de tiempo ya definidos, y las frecuencias de ocurrencia reportadas en la base de datos, se pueden obtener las curvas de Gutenberg-Richter normalizadas temporalmente, para cada fuente sismogénica. Las cuales se presentan en la siguiente tabla N° 3.6 y se representan en los gráficos N° 3.19, 3.20, 3.21 y 3.22, que se encuentran a continuación: Tabla Nº 3.6 Resumen de leyes de Gutenberg- Richter normalizadas temporalmente Fuente Relación Gutenberg- Richter Interplaca Thrust Log (NT) = 5.09 – 0.865 x Ms (Ec. 3.8) Intraplaca Log (NT) = 5.39 – 0.965 x Ms (Ec. 3.9) Cortical - Cordillerana Log (NT) = 5.08 – 1.061 x Ms (Ec. 3.10) 52 Gráfico Nº 3.19: Relación de recurrencia temporal (G-R) para eventos tipo interplaca. Ec.3.8. Relacion de Gutenberg-Richter, Interplaca Log(N) =5,0891 - 0,8652x Ms 2 R = 0,9786 2,000 1,500 Log (N/T) 1,000 0,500 0,000 3 3,5 4 4,5 5 5,5 6 6,5 7 7,5 8 8,5 9 -0,500 -1,000 -1,500 -2,000 -2,500 Ms Gráfico Nº 3.20: Relación de recurrencia temporal (G-R) para eventos intraplaca de profundidad Intermedia. Ec. 3.9. Relacion de Gutenberg-Richter, Intraplaca Log (N) =5,3854 - 0,9647 x Ms 2 R = 0,9909 2,000 1,500 1,000 Log (N/T) 0,500 0,000 -0,500 3 3,5 4 4,5 5 5,5 -1,000 -1,500 -2,000 -2,500 -3,000 Ms 53 6 6,5 7 7,5 8 8,5 Gráfico Nº 3.21: Relación de recurrencia temporal (G-R) para eventos corticales cordilleranos. Ec. 3.10. Relacion de Gutenberg-Richter, Corticales Log(N) = 5,0786 -1,0609 x Ms 2 R = 0,9416 1,000 0,500 0,000 3 3,5 4 4,5 5 5,5 6 6,5 7 7,5 Log (N/T) -0,500 -1,000 -1,500 -2,000 -2,500 -3,000 Ms Gráfico Nº 3.22: Comparación de las relaciones de recurrencia temporal (G-R) de las tres fuentes sismogénicas, normalizadas temporalmente por unidad de tiempo (1 año). Comparacion relaciones Gutenberg-Richter según fuente 1.5 1.0 0.5 Log (NT) 0.0 4.0 4.5 5.0 5.5 6.0 6.5 7.0 7.5 8.0 8.5 -0.5 -1.0 -1.5 -2.0 -2.5 Ms Interplaca (N.T) Intraplaca (N.T) 54 Cortical (N.T) Para el posterior cálculo del peligro sísmico en la Región Metropolitana de Santiago, se requieren las ecuaciones no sólo normalizadas temporalmente, sino que también normalizadas por unidad de área, dada por la superficie de las celdas que conforman los planos representativos de las fuentes sismogénicas (modelos analíticos) establecidos en el capitulo Nº 6 de este trabajo. Es por eso, que a cada coeficiente a de las ecuaciones presentadas en la tabla Nº 3.6, se le debe sustraer el logaritmo del número (s) que corresponde a la cantidad de veces que el área de una celda está contenida en el área total del plano representativo de la fuente, según se explica con detalle en el capitulo N° 6. Resultando entonces, las ecuaciones de Gutenberg- Richter normalizadas por unidad de área para cada fuente sismogénica definida. Las relaciones que se presentan a continuación, en la tabla Nº 3.7, se grafican posteriormente en el grafico N° 3.23. Tabla Nº 3.7 Resumen de leyes de Gutenberg- Richter normalizadas por unidad de área Fuente Relación Gutenberg- Richter Interplaca Log (NA) = 2.554 – 0.865 * Ms Intraplaca Log (NA) = 2.859 – 0.965 * Ms Cortical- Cordillerana Log (NA) = 2.819 – 1.061 * Ms Gráfico Nº 3.23: Comparación de las relaciones de recurrencia temporal (G-R) de las tres fuentes sismogénicas normalizadas por unidad de área. Comparacion relaciones Gutenberg-Richter según fuente 0,5 0,0 4,0 4,5 5,0 5,5 6,0 6,5 7,0 7,5 8,0 -0,5 -1,0 Log (NA) -1,5 -2,0 -2,5 -3,0 -3,5 -4,0 -4,5 Ms interplaca (N.A) Intraplaca (N.A) 55 Cortical (N.A) 8,5 Evaluando las ecuaciones presentadas en la tabla Nº 3.6, para una magnitud cercana a la magnitud histórica o la máxima esperada para conocer las ventanas temporales representativas de un evento según su fuente, se obtienen los períodos representativos que se muestran en la tabla Nº 3.8: Tabla Nº 3.8 Evaluación de leyes de G –R obtenidas Fuente 3.3 Ms Ventana Temporal [años] Interplaca 8,5 184 Intraplaca 8,0 215 Cortical 7.0 223 RESULTADOS Y CONCLUSIONES Referente a la metodología de Stepp, se debe concluir la subjetividad al seleccionar el primer punto (T [años]), a partir del cual la tasa de ocurrencia de los sismos de una determinada fuente sismogénica se vuelve estable. La determinación de este punto repercute directamente en la posterior obtención de la relación de G-R, pues la curva que representa las ocurrencias de eventos, es susceptible al número de años considerado debido a que está normalizado temporalmente. En general, el comportamiento de las curvas que grafica el número de eventos por año, es similar para todos los eventos sin importar la fuente generadora, presentando el mismo patrón de decaimiento, correspondiendo a la inversa de la raíz cuadrada del tiempo considerado en años. Para cada fuente sismogénica se observa el mismo comportamiento, la constante k en el numerador de la ecuación de la curva (Ec. 2.4), decrece a medida que el rango de magnitudes considerada aumenta, fluctuando su valor entre 3 y 0.2, generando un ordenamiento decreciente de las curvas que se observan cuasi paralelas para cada set correspondiente a un delta igual a 0.5 de Ms, procedimiento realizado sistemáticamente para cada fuente sismogénica. En el caso de los rangos de magnitudes superiores a Ms=6.5, la determinación de un período de tiempo requiere de un mayor manejo numérico, verificando la selección de un T (expresado en años) mediante la evaluación en la relación de G-R obtenida, para un Ms igual a la magnitud máxima esperada. La base de datos tiende a arrojar una ventana temporal de 180 años apropiada para representar a los eventos del tipo Interplaca, aproximada a la obtenida por Martin en 1990 y a la de Labbé y Saragoni obtenida en 1976 presentada en el capítulo anterior, tabla N° 2.2, en donde se obtiene para los eventos nacionales, predominantemente del tipo interplaca thrust, una ventana temporal cercana a 140 y 170 años, respectivamente, para Ms superiores a 8.0, sin separar por fuente sismogénica. En el caso de los sismos de origen cortical, no se tienen antecedentes de los períodos de retorno, por consiguiente mucho menos de la ventana temporal necesaria para contemplarlos en 56 forma representativa, debido al escaso número de eventos de este tipo producidos en la zona de estudio. Para los sismos de origen interplaca tipo Thrust, Comte et al.1986 estimó para la zona comprendida entre los 30° y 35° S, un período de retorno de 83 ± 7 años, para sismos con Ms cercanos a 8.0, con lo que se espera que la ventana temporal que debe conformar un buen catálogo, sea superior a este período para tener una representatividad fidedigna de este tipo de eventos, y asegurar el hecho de contemplar eventos de este origen sismogénico, dentro del período estimado. Si se hace una gráfica del logaritmo del número de sismos versus la magnitud Ms, la relación de Gutenberg - Richter es una recta. Sin embargo, en ella se ve que los puntos que representan las observaciones no se ajustan a ésta en el caso de magnitudes muy pequeñas o muy grandes (extremos de la curva). Este fenómeno puede deberse, al menos parcialmente, a fallas en el muestreo: los sismos muy pequeños no se alcanzan a registrar en un número suficiente de estaciones, y por lo tanto no son localizados ni reportados correctamente; mientras que los sismos muy grandes ocurren tan esporádicamente que los tiempos de muestreo no son significativos. Por otro lado, si se hubiera muestreado un tiempo mucho más largo, o con un catálogo que contuviera todos los eventos ocurridos en esta área de estudio, los datos referidos a las grandes magnitudes sí se ajustarían por completo a la recta. Aparentemente la explicación acerca de los sismos pequeños es correcta; pero parece que, además del efecto de tiempos de muestreo cortos, y corrigiendo el posible efecto de saturación de las magnitudes, existe un tope superior para el tamaño de los sismos, debido a la cantidad de esfuerzo que puede soportar el material terrestre y a las dimensiones propias de los continentes. A partir del coeficiente de corte (a) de las relaciones de G-R, se observa que el coeficiente de la fuente intraplaca es levemente mayor que en los interplaca, y éste a su vez superior que el de los eventos corticales, lo cual corrobora la sismicidad extraída del ISC, concordando con la explicación física de cada coeficiente de la relación de G-R. Se debe mencionar además, que para todas las fuentes el valor del coeficiente b se encuentra dentro de las fluctuaciones asociadas a sismos de origen tectónico, perteneciente al rango comprendido entre 0.7 y 1.0. Del grafico Nº 3.40 se puede comparar el comportamiento de las relaciones de GutenbergRichter encontradas en este trabajo, para cada fuente sismogénica. Se observa que la pendiente de las tres curvas normalizadas temporalmente es aproximadamente la misma, en torno a 0.95, lo que indica que cada zona se caracteriza por tener la misma relación entre sismos de pequeña magnitud y de gran magnitud, que es lo que representa físicamente el valor del coeficiente b de la relacion de G-R. Como las 3 rectas son cuasi paralelas, se tiene que para cualquier valor de magnitud Ms, el número de eventos con Ms mayor o igual a dicha magnitud, es mayor para la fuente interplaca, y notoriamente inferior a las otras dos fuentes, para la fuente sismogénica cortical. Se debe mencionar que el comportamiento y alineación de las tres curvas de relación de frecuencia de ocurrencia versus la magnitud del evento, no varía en relación al trabajo predecesor en esta línea (Romanoff et al.1998) manteniéndose el hecho de que en cada rango de magnitud 57 es mayor el número de eventos de origen interplaca que los intraplaca de profundidad intermedia, ambos resultados superiores numéricamente que los sismos de origen cortical. Se concluye que las posibles distorsiones entre los datos y las rectas de GutenbergRichter obtenidas, se pueden deben a la inclusión de datos provenientes de catálogos distintos (ISC, SISRA, Araya), lo cual se hizo con el fin de completar y complementar la sismicidad en las latitudes abarcadas, asegurando el hecho de incluir y contemplar al menos los eventos históricos. Al realizar posteriormente la normalización por unidad de área, disminuye en las tres ecuaciones el valor de la pendiente, pero se conserva el alineamiento y ordenamiento decreciente de las curvas. El valor de los coeficientes de corte de estas ecuaciones, se ve alterado producto de las distintas concentraciones de eventos según el área considerada para cada fuente sismogénica, las cuales no están representadas por modelos que abarcan las mismas latitudes. Además del hecho de que al considerar las magnitudes máximas, hay un mayor rango de magnitud para la fuente interplaca, que para los intraplaca, y a su vez que los corticales, lo que afecta la relacion de recurrencia de cada fuente. De forma preliminar, sin introducir aún el concepto de atenuación y obviando los eventuales efectos de sitio, es decir, sólo recurriendo a características como la sismicidad y rangos límites de magnitudes consideradas, la fuente interplaca thrust, debiera ser la que mayor influencia o mayor aporte representase en el cálculo del peligro sísmico para localidades ubicadas al oeste de la cuenca, y debiera existir influencia mixta de las fuentes, para puntos ubicados al este de la Cuenca de Santiago. Para la evaluación posterior del Peligro Sísmico se deberán confeccionar las 3 fuentes sismogénicas apropiadas para emplear la metodología de Algermissen y Perkins, mediante los mismos criterios de latitud, longitud y profundidad focal definidos en este capítulo. El detalle de dicho procedimiento, se presenta a cabalidad en el capitulo Nº 6 del presente trabajo de memoria. 58 CAPÍTULO 4 4.1 LEYES DE ATENUACIÓN ANTECEDENTES GENERALES Atenuación, es la disminución de la amplitud de las ondas sísmicas debido a su transmisión a través del interior y por la superficie de la tierra. Las Leyes o Curvas de Atenuación describen la variación de la intensidad del movimiento del terreno en función de la magnitud y de la distancia epicentral o de la distancia a la fuente sísmica. Una ley de atenuación es entonces, una relación empírica que determina cómo varía un parámetro, en función básicamente de la distancia hipocentral o epicentral (Ver figura Nº 4.1 para comprender la diferencia entre ambos conceptos). Es por eso que los principales parámetros para elaborar fórmulas de atenuación son: coordenadas del hipocentro y del epicentro del sismo, la magnitud registrada del sismo, las coordenadas de la estación acelerográfica y la estratigrafía del suelo bajo dicha estación de muestreo. En el presente capítulo, se determinará la ley de atenuación empleando el parámetro de la intensidad, además de incorporar en la ecuación el término de la profundidad focal (H) y en general, ver cómo afecta a la atenuación para las distintas fuentes sismogénicas. Sitio R = distancia epicentral H =Profundidad focal r =distancia hipocentral Foco Figura 4.1: Distancias epicentrales, hipocentrales y profundidad focal. 4.2. DESARROLLO 4.2.1. CONSIDERACIONES EN LA DETERMINACIÓN DE UNA LEY DE ATENUACIÓN. Las fórmulas de atenuación comúnmente empleadas, son del tipo: x= A ⋅ exp(B ⋅ M s ) (R + C) D 59 (Ec. 4.1) Siendo los coeficientes A, B, C y D constantes que se obtienen a partir de datos acelerográficos registrados y análisis estadísticos convencionales (regresiones); Ms la magnitud en escala Richter; R es la distancia hipocentral o epicentral en [km]; y x es el parámetro a atenuar, ya sea aceleración, desplazamiento o velocidad, para valores máximos verticales u horizontales. Se considera que el medio de propagación de las ondas es homogéneo y que el foco es puntual. La influencia del tipo de contacto sismogénico, la velocidad de convergencia, el tipo de subducción, entre otros factores influyen en la atenuación de los parámetros sísmicos, siendo ésta una característica particular para cada zona en estudio, es decir, propia para cada región sismogenética. Según el análisis de la base de datos de las fórmulas de atenuación realizadas para sismos chilenos, la mayoría de ellas adolecen de los siguientes problemas: d) No cuentan con un adecuado número de acelerogramas ni con suficientes registros a diferentes distancias hipocentrales ni epicentrales. e) Debido a la ventana de tiempo considerada, no cuentan con registros de sismos de magnitudes altas. f) No consideran ni diferencian las distintas regiones simogénicas de subducción. g) No discriminan para los distintos sismos que ocurren en una determinada zona de subducción. h) No consideran el tipo de suelo bajo la estación acelerográfica que captó el registro. De acuerdo a las leyes de atenuación, la intensidad de un evento sísmico decrece a medida que la distancia epicentral se incrementa. Otro aspecto importante es que la intensidad, no sólo depende de la magnitud del sismo ni de la distancia epicentral o hipocentral, si no que también es función de la conformación del subsuelo y de la forma del terreno, es decir, se debe conocer el comportamiento del suelo de fundación para predecir la respuesta de una estructura frente a un movimiento sísmico. Las fórmulas de atenuaciones, para las aceleraciones máximas, propuestas para el tipo de subducción chilena, no han tenido resultados favorables hasta el momento. Esto se debe a que se ha considerado la clasificación del suelo según la norma NCh 433 Of. 96 “Diseño Sísmico de Edificios”, la cual propone una división estática del suelo. Esta clasificación del suelo ha sido estudiada hasta hoy, entregando nuevos resultados, basados en criterios dinámicos, que hacen que la división de la norma pueda presentar sub clasificaciones dentro de un mismo tipo de suelo según determinados rangos de velocidades de onda Vs (Ruiz, et al. 2002). En cuanto a las atenuaciones según el parámetro de intensidades de los sismos, en los últimos años se ha estudiado detalladamente y se ha relacionado el grado de intensidad subjetivo que perciben las personas afectadas, de acorde al tipo de construcción dañada por un sismo (Menéndez, et al. 1991). Además de contar con la principal referencia en cuanto a las relaciones de atenuación de acuerdo a intensidad, como es el trabajo de Sergio Barrientos desarrollado en 1980, considerando todo el territorio nacional; resultados que servirán de referencia para este trabajo. Sólo en los últimos años se han desarrollado fórmulas de atenuación de aceleraciones horizontales máximas de importancia (aceleraciones mayores a 0.01 [g], pues si es menor a este 60 valor es difícil distinguir entre ruido y señal) para zonas de subducción, por ejemplo para Chile, México y Canadá. En particular la base de datos de aceleraciones, velocidades y desplazamientos, horizontal y vertical fueron obtenidas por Sergio Ruiz (2002). Estudio en el cual se consideran solamente registros de terremotos chilenos, separados en registros de sismos interplaca tipo thrust y de sismos intraplaca de profundidad intermedia diferenciando el tipo de suelo según la idea UBC97, esto es para roca dura, suelo con velocidad de onda de corte Vs > 1500 [m/s]; y roca o suelo duro, para aquellos terrenos en que la velocidad de propagación de la onda fluctúa en el rango 360[m/s] <Vs< 1500[m/s]. Será entonces un aporte novedoso de este trabajo de memoria, el incorporar el estudio de la atenuación con respecto al parámetro de la intensidad, con el objetivo de actualizar el trabajo antecesor de Barrientos, y de agregarle un término a la Ec. 4.1, que tiene relación con la profundidad focal del evento (H). Definidos los catálogos o eventos a utilizar, para la determinación de las leyes de atenuación, las cuales permiten comprender la severidad de un evento, y cómo se ve afectado un cierto parámetro del sismo al variar la distancia hipocentral o epicentral. 4.2.2 SELECCIÓN DEL PARÁMETRO DE ATENUACIÓN Se seleccionará el parámetro que se empleará en la relación de atenuación, ya sean aceleraciones, velocidades y desplazamientos máximos, estos dos últimos ya han sido estudiados en detalle por Sergio Ruiz, el cual ha determinado relaciones para cada uno de estos parámetros en la dirección vertical y horizontal para sismos tipo thrust e intraplaca, no incluyendo los corticales por no contar con suficientes registros. En cuanto a este aspecto, se pretende en este trabajo realizar un aporte novedoso al tema de las atenuaciones por lo que se definirá como parámetro de estudio la intensidad, parámetro sísmico sólo estudiado con anterioridad en 1980 por Sergio Barrientos. Dicho estudio permitirá comparaciones con los actuales resultados obtenidos, para el caso de sismos tipo interplaca. Además, teniendo en cuenta que el reconocimiento de los sismos tipo intraplaca de profundidad intermedia es reciente, se hace necesario desarrollar nuevas fórmulas de atenuación de intensidad, como lo sugirió Barrientos en 1998, de modo de cuantificar el incremento de los daños observados en ellos, para magnitudes comparables a las de un evento tipo interplaca o thrust. Como otro aspecto innovador se pretende incorporar un término nuevo al ya considerado anteriormente en la literatura. Es decir, además de considerar el término geométrico de la ley de atenuación (Ec. 4.1), se incluirá un término que representa la profundidad focal del evento, (H). Las curvas de atenuación en función de la intensidad, se confeccionaron recurriendo a los reportes del Catálogo de Intensidades del CERESIS (Centro Regional de Sismología, a través de su proyecto SISRA, Sismicidad para la Región Andina, 1985). Dicho catálogo fue elegido para la estimación de curvas de atenuación de intensidad, debido a que se considera que los reportes que contiene, se encuentran mejor localizados, por tratarse de una base de datos sudamericana, que además recoge información del servicio sismológico nacional. 61 Para cada evento registrado, se indica la intensidad máxima registrada, el número de localidades de las que se tiene información de intensidades percibidas, las coordenadas de cada localidad junto con su distancia epicentral e hipocentral y su altitud con respecto al nivel del mar. Finalmente se entrega la escala de magnitud utilizada y la fuente de donde se obtuvo el dato de la intensidad para cada localidad afectada. El formato de registro de los eventos de la base de datos se muestra a continuación, en la tabla Nº 4.1: Tabla Nº 4.1 Formato de identificación de los registros del CERESIS Fecha Año Mes Hora(UTC) Día hr:min:seg Epicentro Lat Long (º) (º) Prof. (km) Magnitud mb Ms Mw Mc Elevación Dist. Epi. Dist. Hipo. (m.s.n.m) (km) (km) Ml Máx. Int Num Obs Intensidades Localidad 4.2.3 Coordenadas Lat Long (º) (º) Intensidad Valor Ref. Escala OBTENCIÓN LEY DE ATENUACIÒN SEGÚN CRITERIO DE PERCEPCIÓN DEL EVENTO, PARA CADA FUENTE SISMOGENICA En primer lugar, toda ley de atenuación debe ser expresada en términos de la magnitud de Richter Ms y no en función de la escala mb, por lo que resulta fundamental recurrir y aplicar la relación lineal (Ec. 2.1) obtenida en el Capítulo Nº 2 del presente trabajo, además de considerar el hecho de que para los posteriores cálculos probabilísticos se requiere que la frecuencia de los datos esté expresada por unidad de tiempo, lo que justifica la normalización temporal realizada en el capítulo anterior. Para obtener las leyes de atenuación se empleará el modelo matemático de regresión lineal a través de mínimos cuadrados, aplicándoselo a los registros de nuestra base de datos para los sismos seleccionados, a partir de datos de intensidades ingresados en el orden que se indicó en la tabla Nº 4.1. Para ello se debe recordar que este método sólo se puede aplicar a funciones del tipo lineal, es decir, se debe trabajar con la Ec. 4.1 modificada empleando la función logaritmo como se presenta en la ecuación 4.2. En este trabajo se expresarán las ecuaciones en función del logaritmo natural ln() a diferencia de otros trabajos de atenuación de intensidades en los que se emplea comúnmente el log(). En rigor, el uso de ambas funciones no afecta el comportamiento de la curva de atenuación obtenida, y se pueden usar indistintamente, variando sólo el valor de las constantes que acompañan a las variables. Ln(x) + D ⋅ Ln(R + C) = B ⋅ Ms ⋅ Ln(A) (Ec. 4.2) La obtención de leyes de atenuación desde el punto de vista de la percepción del evento, permite tener una idea de cuán extensa fue el área en la cual se percibió el evento sísmico, es decir, la envergadura de las zonas sensibles al sismo, lo cual no tiene incidencia necesariamente en el daño causado por el sismo, por lo cual, para este propósito se considerarán todos los valores de intensidad reportada, según fuente sismogénica generadora de dicho evento. 62 En general para este trabajo, se planteará la relación de atenuación para la intensidad de la siguiente forma, a partir de la Ec. 4.2 modificada e incluyendo el término H. Es decir, las ecuaciones que se establecerán en este trabajo tendrán la estructura que se presenta en la ecuación 4.3. Ln (I) = K1+ K2 * ln (R+C) + K3 * M + K4* H (Ec. 4.3) Siendo: K1, K2, K3 y K4 constantes a determinar, R = Distancia epicentral, en [km]. M =Magnitud del evento [Ms]. H = Profundidad focal, expresada en [km]. I = Intensidad del evento. C = Coeficiente que representa el valor más representativo de las profundidades focales para los diferentes tipos de sismos en Chile. Los valores del coeficiente C que se emplearán en este trabajo, se muestran en la siguiente tabla N° 4.2, Tabla N° 4.2 Valores Característicos del coeficiente C según fuente Tipo Evento Interplaca Intraplaca Corticales Valor (C) 60 80 10 - 30 Como referencia a los valores de C se tiene que Saragoni y Ruiz (2005), considerando la inclinación de la placa oceánica de Nazca y la profundidad del contacto sísmico, han definido para condiciones de diseño, una distancia hipocentral de 40 [km] para los terremotos interplaca tipo thrust y de 60 [km] para los eventos intraplaca de profundidad intermedia, valores que son levemente inferiores a los indicados en la Tabla N° 4.2. Para la obtención de los coeficientes de la ley de atenuación propuesta en este capítulo, se recopilará la información de los catálogos de la forma que indica la tabla N° 4.3.: Tabla Nº 4.3. Formato de Información para obtención leyes de Atenuación en función de la Intensidad Latitud Longitud Prof. Focal Magnitud Dist. Epicentral Intensidad reportada [º] [º] [Km] [Ms] [km] Para la obtención de los factores K1, K2, K3, K4, se desarrolla un programa en el lenguaje computacional Matlab, basado en una expresión matricial de las variables, tal como se muestra a continuación: 63 D e t e r m in a c io n d e la L e y d e A t e n u a c ió n e n f u n c io n d e la I n t e n s id a d S e p r e t e n d e r e s o lv e r la s ig u ie n t e e c u a c ió n : l o g ( I) : = K 1 + K 2 ⋅ l o g ( R + C ) + K 3 ⋅ M s + K 4 ⋅ h ⎛⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎝ ( 1) L o g (I ) 2 L o g (I ) 3 Log I . . . . . . ⎞ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ( n) ⎠ .Log I = ⎛ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎝ 1 1 1 ( 1 L o g (R 2 L o g (R 3 Log R ) C) C) + C Ms + Ms + Ms 1 2 3 D e la f o r m a : h h h 1 2 3 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 ( lo g R n + C ) Ms . n h n ⎞ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ ⎟ x ⎛ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎜ ⎝ K K K K 1 ⎞ 3 ⎟ ⎟ ⎟ 4 ⎠ 2 ⎠ Se resuelve un sistema matricial, extrayendo valores de la base de datos empleada. A modo de ejemplo, se presentan las siguientes instrucciones: C = 60; C = 80; C = 10; G (i, 1) = 1; G (i, 2) = log( intensidades ( i,6) + C); G (i, 3) = intensidades ( i, 4); G (i, 4) = intensidades (i,3); d (i) = log( intensidades (i,7)); Gg = G' * G; Gd = G'* d'; X =inv(Gg)*Gd; Para el caso de sismos interplaca Para el caso de sismos intraplaca Para el caso de sismos corticales Lee distancias epicentrales. Lee vector de magnitudes Ms. Lee profundidades focales. Lee vector de intensidades. El procedimiento anterior permite la siguiente reflexión, porqué la necesidad de incorporar el coeficiente C como miembro en la expresión de atenuación. La respuesta, es simplemente, para que la curva no se indefina para distancias epicentrales iguales a 0, es decir, en aquellas mediciones, en donde el sitio se encuentre en la proyección en superficie del mismo foco. La generación de curvas de atenuación considerando distancia epicentrales, se vuelve bastante arbitraria al momento de tener que escoger un coeficiente C, que sea representativo para cada fuente. Es por eso, que surge la necesidad y la importancia de obtener las curvas de atenuación en términos de la distancia hipocentral, que es lo que se realizará a continuación, y son las curvas que se consideraran válidas posteriormente para efectos comparativos. En el grafico Nº 4.1 se observa la relación entre la intensidad IMM reportada para los eventos registrados en el catálogo CERESIS, y la distancia hipocentral. Se observa claramente el decaimiento de la intensidad observada a medida que se incrementa la distancia hipocentral, es decir mientras más cerca de la zona epicentral es mayor la percepción del evento sísmico. 64 Gráfico N° 4.1: Relación entre la intensidad reportada y la distancia hipocentral. Variación segun distancia hipocentral de la Intensidad 12.0 Intensid ad IMM 10.0 8.0 6.0 4.0 2.0 0.0 0.00 200.00 400.00 600.00 800.00 1000.00 1200.00 1400.00 1600.00 Distancia hpocentral [Km ] Es decir, expresando la ecuación 4.3., correspondiente a la atenuación de la intensidad pero ahora en términos de la distancia hipocentral, se obtiene en éste trabajo la siguiente expresión genérica para eventos originados por cualquier fuente sismogénica: Ln (I) =K1 + K2 * ln (r) + K3* Ms + K4* H (Ec. 4.4) Siendo: K1, K2, K3 y K4 constantes determinadas, r = Distancia hipocentral, en [km]. M =Magnitud del evento [Ms]. H = Profundidad focal, expresada en [km]. I = Intensidad teórica del evento [IMM]. 4.2.3.1 LEYES DE ATENUACIÓN EN FUNCIÓN DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO INTERPLACA SEGÚN PERCEPCION DEL EVENTO Empleando los mismos criterios de clasificación de fuente sismogénica establecidos en el capítulo Nº 3, se recurre a la diferenciación de eventos según su origen sismogénico. Los reportes seleccionados del catálogos SISRA, serán aquellos contemplados dentro de las mismas coordenadas que se eligieron para obtener las relaciones de G-R, es decir, entre los 30º y 37º L. S. y los 73º y 69º L.W. Para eventos con profundidad focal reportada menor o igual que 50[Km], se tiene un total de 1.449 registros de intensidades de eventos correspondientes al tipo interplaca, considerando todas las intensidades reportadas por el SISRA dentro del período de tiempo considerado y las latitudes y longitudes que abarca este estudio. 65 Es decir, expresando la ecuación 4.4. correspondiente a la atenuación de la intensidad en términos de la distancia hipocentral, se obtuvo en éste trabajo la siguiente expresión para los eventos interplaca tipo thrust, correspondiente a la ecuación 4.5. Ln (I) =1.1044 - 0.2704* ln (r) + 0.2531 * Ms + 0.0041 * H (Ec. 4.5) Gráfico N° 4.2: Ejemplos de aplicación de la ley de atenuación de la ecuación 4.5 a eventos interplaca de la base de datos del catálogo SISRA. Atenuacion Intensidad evento Interplaca Ms=6.0 y P.F= 46 km Atenuacion Intensidad evento Interplaca Ms= 7.5 y P.F= 40 km 10 8 9 Intensida d IMM 7 6 5 4 8 7 6 5 4 3 3 2 0 50 10 0 150 200 2 50 300 3 50 0 400 IMM teorica 50 100 150 200 250 300 350 400 450 500 550 600 650 Dst. Hipocentral [Km] D s t . Hip o c e nt ra l [ Km] IMM teorica IMM observada IM M observada 4.2.3.2 LEYES DE ATENUACIÓN EN FUNCIÓN DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO INTRAPLACA DE PROFUNDIDAD INTERMEDIA, SEGÚN PERCEPCION DEL EVENTO Empleando los mismos criterios de clasificación del capítulo Nº 3, para eventos con profundidad focal reportada mayor que 50[Km] y menor o igual que 300 [Km], se tiene un total de 886 registros de intensidades para eventos del tipo intraplaca de profundidad intermedia, considerando todos los reportes percibidos por las distintas localidades afectadas. Es decir, expresando la ecuación 4.4, correspondiente a la atenuación de la intensidad en términos de la distancia hipocentral, se obtuvo en éste trabajo la siguiente expresión para los eventos tipo intraplaca de profundidad intermedia, como se observa en la ecuación 4.6 que se presenta a continuación: Ln (I) = 2.0383 -0.3493 * ln (r) + 0.1643* Ms + 0.0017* H (Ec. 4.6) A continuación se presentan algunos eventos extraídos del catálogo SISRA, correspondientes a eventos tipo Intraplaca de profundidad intermedia, a los cuales se les calculó las intensidades generadas mediante la ecuación 4.6. 66 Gráfico N° 4.3: Ejemplos de aplicación de la ley de atenuación de la ecuación 4.6 a eventos intraplaca de profundidad intermedia, de la base de datos del catálogo SISRA. Comparacion atenuacion teorica y observada Ms=5.6 P.F=105 km 7 Comparacion atenuacion teorica y observada Ms=5.5 P.F= 87 7 6 Intensidad IMM Intensidad IMM 6 5 4 4 3 2 3 1 2 0 20 40 60 80 100 120 dist. Hipocentral Intensidad observada 140 160 50 180 100 150 200 250 dist. Hipocentral Intensidad observada Atenuacion teorica intensidad 300 350 Atenuacion teorica intensidad Comparacion atenuacion teorica y observada Ms=5.8 P.F= 51 km Comparacion atenuacion teorica y observada Ms=5.5 P.F= 86 km 8 9 7 8 6 7 Intensidad IMM Intensidad IMM 5 5 4 3 6 5 4 3 2 2 1 50 100 150 200 250 300 350 dist. Hipoce ntral Intensidad observada 400 450 10 500 Atenuacion teorica intensidad 60 110 160 210 260 dist. Hipocentral Intensidad observada 310 360 Atenuacion teorica intensidad 4.2.3.3 LEYES DE ATENUACIÓN EN FUNCIÓN DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO CORTICALES SEGÚN PERCEPCION DEL EVENTO Empleando los mismos criterios de clasificación de fuentes sismogénicas establecidos en el capítulo Nº 3; para eventos con profundidad focal reportada menor o igual que 20[Km], se tiene un total de 50 registros de intensidades para eventos del tipo cortical. Se debe mencionar que en el Catálogo de Intensidades del CERESIS no aparece el evento de Las Melosas (1958), destacando que éste se registró en el Catálogo de Hipocentros del CERESIS, por lo cual fue necesario incluirlo mediante los datos actualizados y reevaluados en las localidades con intensidades reportadas Estos datos fueron aportados por el estudio de Sepúlveda y Astroza, et al. 2007, presentados en la tabla N° 3.4, del capítulo anterior, y presentes íntegramente en el Anexo A.1. 67 Expresando la ecuación 4.4, correspondiente a la atenuación de la intensidad en términos de la distancia hipocentral, se obtuvo en éste trabajo la siguiente expresión 4.7 que corresponde a la atenuación para los eventos tipo corticales cordilleranos: Ln (I) = 2.0205 – 0.3411* ln (r) + 0.1585* Ms + 0.0018 * H (Ec. 4.7) A continuación se presentan dos eventos extraídos del catálogo SISRA, correspondientes a sismos tipo corticales cordilleranos, a los cuales se les calculó las intensidades generadas mediante la ecuación 4.7 determinada en este trabajo. Gráfico N° 4.4: Ejemplos de aplicación de la ley de atenuación de la ecuación 4.7 a eventos corticales, de la base de datos del catálogo SISRA. Atenuación evento cortical Ms = 6,5 y P.F =5 [Km] Atenuación evento cortical Ms = 5,9 y P.F =5 [Km] 7 6 5 Intensidad IMM Intensida d IMM 6 4 3 2 0 20 40 60 80 100 120 140 160 180 D.hipocentral [Km] Atenuacion Intensidad Intensidad Observada 5 4 3 2 200 0 50 100 Atenuacion Intensidad 150 200 D.hipoce ntral [Km] 250 300 350 Intensidad Observada Para conocer la variación del valor atenuado de la intensidad obtenido a partir de la aplicación de las ecuaciones 4.5, 4.6 y 4.7, en comparación con el valor de IMM reportado en la base de datos considerada por el SISRA, se recurre al estimador estadístico de la desviación estándar. A través del cual, se obtuvo la diferencia entre los valores observados y los teóricos para cada fuente sismogénica. Los resultados se muestran en la tabla N° 4.6. Tabla Nº 4.6 Desv. estándar obtenido para fuentes sismogénicas empleando criterio de todos los reportes percibidos Tipo fuente Nº reportes Desv. estándar Interplaca thrust 1.449 1.004 Intraplaca Prof. Intermedia 886 1,129 Corticales-cordilleranos 50 1.168 68 4.2.4 OBTENCIÓN DE CURVAS DE ATENUACIÒN SEGÚN CRITERIO DE ÁREA DE DAÑOS GENERADAS POR EL EVENTO. Este ítem es, sin duda, desde el punto de vista del riesgo sísmico, y para la ingeniería sismorresistente el más importante, pues permitirá realizar un análisis del área de daño generada por un evento, más allá de las zonas en que sólo se percibió dicho fenómeno sísmico. De un total de 2.432 eventos reportados, cuya base de datos contiene los valores de las profundidades hipocentrales y las coordenadas de la localidad en donde se percibió el evento, se procede a reducir dicha base de datos, considerando sólo los eventos con intensidad IMM mayor o igual a VI, para obtener leyes de atenuación empleando el denominado criterio de áreas de daño. Con esto, se cuenta entonces con 783 eventos pertenecientes a todas las fuentes, los cuales se proceden a diferenciar según la profundidad focal registrada en [Km], y la longitud [º] del epicentro, criterios que se establecieron en el capítulo N° 3. Para la obtención de las siguientes curvas de atenuación, se reproduce el mismo procedimiento en matlab que el mostrado en el ítem 4.2.3, empleando los registros de distancias hipocentrales y variando el número de eventos según la fuente a la cual pertenecen. 4.2.4.1 LEYES DE ATENUACIÓN EN FUNCIÓN DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO INTERPLACA SEGÚN AREA DE DAÑOS Empleando los mismos criterios de clasificación de fuentes sismogénicas establecidos en el capítulo Nº 3, para eventos con profundidad focal reportada menor o igual que 50[Km], se cuenta con un total de 532 registros de intensidades para eventos del tipo interplaca. Es decir, expresando la ecuación 4.4, correspondiente a la atenuación de la intensidad en términos de la distancia hipocentral, se obtuvo en éste trabajo la siguiente expresión 4.8, que corresponde a los eventos interplaca tipo thrust, la que a diferencia de la ecuación 4.5 considera sólo las intensidades IMM sobre VI de los eventos reportados: Ln (I) =1.3751 - 0.0931 * ln (r) + 0.1387* Ms - 0.0002* H (Ec. 4.8) Siendo: K1, K2, K3 y K4 constantes determinadas en matlab, r = Distancia hipocentral, en [km]. M =Magnitud del evento [Ms]. H = Profundidad focal, expresada en [km]. I = Intensidad del evento (IMM ≥ VI). 4.2.4.2 LEYES DE ATENUACIÓN EN FUNCION DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO INTRAPLACA DE PROFUNDIDAD INTERMEDIA SEGÚN AREA DE DAÑOS Empleando los mismos criterios de clasificación de las fuentes sismogénicas, establecidos en el capítulo Nº 3, es decir, para eventos con profundidad focal menor o igual que 300 [Km] y mayor que 50 [Km], se tiene un total de 247 registros de intensidades para eventos del tipo intraplaca de profundidad intermedia. 69 Expresando la ecuación 4.4, correspondiente a la atenuación de la intensidad en términos de la distancia hipocentral y sólo considerando las intensidades superiores a VI, se obtuvo en éste trabajo la siguiente expresión para eventos intraplaca de profundidad intermedia, que se presenta a continuación en la ecuación 4.9: Ln (I) =1.4849 - 0.0568 * ln (r) + 0.1007* Ms - 0.0001* H (Ec. 4.9) 4.2.4.3 LEYES DE ATENUACIÓN EN FUNCION DE LA DISTANCIA HIPOCENTRAL PARA SISMOS TIPO CORTICALES SEGÚN AREA DE DAÑOS Empleando los mismos rangos de clasificación del capítulo Nº 3, es decir, para eventos con profundidad focal menor que 20 [Km], se tiene un total de 14 registros de intensidades para eventos del tipo cortical, extraídos del catálogo SISRA. Expresando la ecuación 4.4 correspondiente a la atenuación de la intensidad en términos de la distancia hipocentral y a diferencia de la ecuación 4.7, la ecuación 4.10 considera sólo las intensidades IMM > VI de los eventos reportados, se obtuvo en éste trabajo la siguiente expresión para sismos de origen cortical cordillerano: Ln (I) =2.0034 - 0.3363 * ln (r) + 0.1562* Ms + 0.0019* H (Ec. 4.10) Se debe tener presente que el número de eventos de la base de datos se redujo de 2.438 eventos a sólo 783, debido a la consideración del efecto de daño de los sismos reportados, que es lo que interesa en este ítem; para la obtención de la ley de atenuación por fuente sismogénica, lo que servirá para realizar comparaciones con las curvas de atenuación que consideran todos los valores de intensidades de un evento. Se consideró como límite inferior de la intensidad, la isosista VI, ya que el valor de IMM = V½, es el denominado inicio de daño en las estructuras de adobe, y el valor de IMM=VIII es el valor que denota el daño estructural en estructuras de hormigón armado con diseño sísmico. Para analizar el valor que arrojan la evaluación de las leyes de atenuación a sus respectivos grupos de eventos, se procede a calcular el estimador de la desviación estándar antes mencionado, con el objeto de comparar cuán certeros son los valores de las intensidades teóricas, obtenidos a través de las ecuaciones 4.8, 4.9 y 4.10, con las intensidades reportadas. Los valores estadísticos se presentan en la siguiente tabla, N° 4.7. Tabla Nº 4.7 Desv. estándar obtenido para fuentes sismogénicas empleando criterio de intensidades superiores a VI Tipo fuente Nº eventos Desv. estándar Interplaca thrust 532 0,70 Intraplaca Prof. Intermedia 247 0,74 Corticales-cordilleranos 14 1.53 70 Para la comparación de las curvas obtenidas, se recurrirá a los trabajos antes mencionados en base a eventos de importancia histórica nacional, los cuales corresponden a curvas de atenuación de intensidad en función de la distancia hipocentral, para eventos históricos tipo intraplaca de profundidad intermedia, como son por ejemplo, los terremotos de Chillán, Punitaqui, Santiago y La Ligua. Lo anterior se realizará con el fin de poner a prueba el comportamiento de las curvas de atenuación obtenidas en este trabajo y analizar cómo se comportan frente a los grandes eventos, pues si bien es cierto, no todos estos terremotos pertenecen a la zona de estudio de esta memoria, por lo cual se aceptan diferencias en los valores de intensidad, pero esta variación entre los reportes de IMM observados y los teóricos obtenidos mediante las curvas de atenuación determinadas, no debe superar un cierto porcentaje de error considerado como aceptable. La variación de los valores de intensidades teóricas obtenidas a partir de las distintas relaciones de atenuación de la intensidad, se debe a la diferencia de la base de datos considerada, y a la ubicación de los sismos que componen dicha base de registros. Por otro lado, al aplicar la curva de atenuación de la intensidad obtenida para el terremoto de Santiago (1965), los valores de las intensidades teóricas se acercan mucho más a los valores de las intensidades IMM reportadas en la base de datos de este trabajo, debido a la zona en común que comparten ambas investigaciones, ambas comprendidas en la Región Metropolitana y sus áreas de influencia. Ver gráfico Nº 4.5, en donde se representa un evento de la base de datos, ocurrido en 1997, con epicentro en las coordenadas 30.88º S y 71.17º W, a 58 [Km] de profundidad focal, y reportando una magnitud Ms = 6.8. A partir del gráfico Nº 4.5 se observa el casi paralelismo entre la curva de atenuación obtenida en este trabajo y la perteneciente al sismo de Santiago de 1965, la diferencia entre ambas radica en que la primera es inferior en todo su recorrido en casi un punto en el valor de las intensidades reportadas. Gráfico Nº 4.5: Curvas de Atenuación aplicada a eventos históricos tipo Intraplaca de Profundidad Intermedia. Leyes de Atenuación para Eventos Intraplaca 11 10 9 IMM 8 7 6 5 4 3 20 60 100 140 180 220 260 Distancia Hipoce ntral [Km] este trabajo chillán Santiago 71 La ligua 4.2.5 COMPARACIÓN CON LA LEY DE ATENUACIÓN DE BARRIENTOS La fórmula de atenuación propuesta por Barrientos (Barrientos, Sergio, et al.1980), recomendada para eventos interplaca (Ec. 4.11); generada a partir de una muestra de 74 eventos sísmicos ocurridos en Chile entre los años 1906 y 1974, de los cuales el mayor porcentaje corresponde a eventos del tipo interplaca thrust, es la siguiente: I(r) = 1.3844 x Ms - 3.7355 x log(r) – 0.0006 x r + 3.8461 (Ec.4.11) Siendo, I: Grado de Intensidad, IMM. r: Distancia Hipocentral [Km] calculada como r = R 2 + h 2 con R la distancia epicentral en [Km] y h la profundidad focal también expresada en [Km]. Ver figura Nº 4.1 M: Magnitud Ms. En la ecuación planteada anteriormente se supuso que la atenuación intrínseca del medio es constante independiente de la profundidad y/o que las características focales como espectro, caída de tensión, etc. son sólo funciones de la magnitud y no varían sistemáticamente con la profundidad (H) propuesta en la Ec.4.4. Además dicha ecuación no hace diferencia de acuerdo a las distintas fuentes sismogénicas. Para comprobar dicho supuesto, se presentó en ese trabajo una ecuación que considerara dicho término, obteniéndose la siguiente relación: I(r) = 1.4239 x Ms – 4.1245 x log(r) – 0.0003 x r + 0.0073 x H + 3.9253 (Ec. 4.12) Con la ecuación (Ec. 4.12) es posible comparar y estudiar el comportamiento de una curva de atenuación que considera el parámetro de profundidad como la obtenida en este trabajo, para un cierto valor de magnitud de interés de un evento registrado cualquiera. Se analizó el caso de un evento cualquiera reportado por el SISRA, de magnitud Ms = 8.4. Evento cuyos datos de distancias hipocentrales y profundidad focal se encuentran en la base de datos confeccionada a partir del catálogo del CERESIS. Para este evento se aplicó ambas curvas de atenuación propuestas por Barrientos (Ec. 4.11 y 4.12) para sismos del tipo interplaca, observándose lo que se muestra en el siguiente gráfico comparativo. Ver grafico Nº 4.6. 72 Gráfico N° 4.6: Comparación Curvas de Atenuación de Barrientos (Ec. 4.11 y 4.12) para un evento interplaca. Comparacion Curvas de Atenuacion de Barrientos Para Eventos Interplaca 10,0 Intensidad Teórica IMM 9,0 8,0 7,0 6,0 5,0 4,0 3,0 2,0 1,0 0,0 10,00 210,00 410,00 610,00 810,00 1010,00 1210,00 1410,00 distancia Hipocentral [Km] Barrientos con H Barrientos sin H Comparando ambas curvas, la de Barrientos I(r,h) y Barrientos (r) , para un mismo evento interplaca, se puede concluir al respecto que la diferencia es mínima durante todo el trazado. Para un análisis de sismorresistencia, la aplicación de una u otra ecuación, para efectos prácticos, daría lo mismo; pues no se ven afectados los valores de intensidad para rangos que causen daños estructurales, es decir, las curvas coinciden en la zona epicentral, para distancias hipocentrales menores a 200 Km. Para comparar el comportamiento de las curvas de atenuación de intensidades para eventos de tipo interplaca, pero ahora considerando la ecuación de Barrientos I(r,H), y la ecuación determinada en este trabajo para todos los reporte de IMM percibidos para un evento (Ec.4.5), se recurre a la representación gráfica de ambas curvas, lo cual se presenta en el siguiente grafico, Nº 4.7. 73 Grafico N° 4.7: Comparación de curvas de atenuación para eventos interplaca, según ecuación 4.5 calculada en este trabajo y ecuación de Barrientos (Ec. 4.12). Atenuacion Intensidad evento Interplaca Ms=6.0 y P.F= 46 km 10 9 7 8 Intensidad IMM Intensidad IMM 8 6 5 4 7 6 5 3 4 2 3 0 50 100 150 200 250 300 350 400 0 IM M teorica IM M teorica Barrientos Atenuacion Intensidad evento Interplaca Ms= 6.3 y P. F= 39 km 8 50 100 150 200 250 300 350 400 450 500 550 600 650 Dst. Hipoce ntral [Km] Dst. Hipocentral [Km] Barrientos Atenuacion Intensidad evento Interplaca Ms= 7.8 y P.F =40 km 10 9 7 8 Intensidad IMM Intensida d IMM Atenuacion Intensidad evento Interplaca Ms= 7.5 y P.F= 40 km 6 5 4 7 6 5 4 3 3 2 0 50 100 150 200 250 300 350 400 2 450 0 Dst. Hipocentral [Km] IMM teorica 50 100 150 200 250 300 350 400 450 500 550 600 650 700 750 800 Dst. Hipoce ntral [Km] Barrientos IM M teorica Barrientos A partir de los gráficos anteriores se deduce que la ecuación de Barrientos, obtenida en base a eventos del tipo interplaca, subrepresenta el valor de la intensidad teórica, a medida que la distancia hipocentral se incrementa. Presenta valores de la intensidad, por debajo de la curva de atenuación entregada por este trabajo (Ec.4.5), no reportando correctamente los valores de IMM, pues es aún mayor la diferencia con respecto a los reportes, a medida que se aleja de la zona epicentral. Para observar y comparar como se ajusta la ecuación de Barrientos para eventos originados por distintas fuentes sismogénicas, se procede a graficar las atenuaciones dadas por las ecuaciones 4.5, 4.6 y 4.7 versus la ecuación 4.12. Lo anterior, se presenta en el siguiente Grafico Nº 4.8. 74 Grafico Nº 4.8: Comparación de curvas de atenuación obtenidas en este trabajo y la determinada por Barrientos, dependiendo de la fuente sismogénica generadora. De arriba a abajo: Fuente interplaca, evento de Ms =8.5 y h =30 Km; fuente Intraplaca, Ms =8.0, h= 60 Km; fuente Cortical, Ms =7.0 y h= 10 Km. Comparacion Curvas de Atenuacion, fuente Interplaca 10 Intensidad [IMM] 9 8 7 6 5 4 3 2 1 0 50 100 150 200 250 300 350 Dist. hipoce ntral [Km] Interplaca Ec.4.5 Ec. Barrientos Comparacion Curvas de Atenuacion, fuente Intraplaca de Prof. Intermedia 10 Intensidad [IMM] 9 8 7 6 5 4 3 2 1 0 50 100 150 200 250 300 350 Dist. hipoce ntral [Km] Intraplaca Ec.4.6 Ec. Barrientos Comparacion Curvas de Atenuacion, fuente Cortical Cordillerana 10 Intensidad [IMM] 9 8 7 6 5 4 3 2 1 0 50 100 150 200 250 300 Dist. hipoce ntral [Km] Cortical Ec.4.7 75 Ec. Barrientos 350 4.2.6 COMPARACIÓN CON LAS LEYES DE ATENUACIÓN DE TRABAJOS ANTERIORES PARA EVENTOS TIPO INTRAPLACA Para realizar otro análisis comparativo de las leyes de atenuación obtenidas, se recurre a los trabajos recientes realizados de forma específica para determinados eventos que han presentado acelerogramas importantes y altos valores de magnitud, perteneciendo al grupo de los eventos chilenos de mayor importancia, como son en particular, el evento de Santiago de 1945, que representa el Umbral de Daño; y el gran sismo de Chillán de 1939 considerado como el Terremoto de Colapso para los eventos del tipo Intraplaca de Profundidad Intermedia. Para ello, se presenta la siguiente tabla, que resume la información de dichas investigaciones de eventos particulares, cuyos parámetros sísmicos han sido actualizados y reevaluados. Ver las siguientes tablas Nº 4.8 y N° 4.9. Tabla Nº 4.8 Trabajos de Leyes de Atenuación para eventos grandes de Chile Autor Investigación Evento Tipo fuente Ms Sanhueza, Simón Talca,1928 Interplaca, thrust 8,0 Moya Alejandro Chillán,1939 Intraplaca, Prof. intermedia 7,8 Sandoval, Marcelo Santiago,1945 Intraplaca, Prof. intermedia 7,1 Norambuena, Ana La ligua, 1965 Intraplaca, Prof. intermedia 7,1 Díaz, Óscar Punitaqui,1997 Intraplaca, Prof. intermedia 6,7 Tabla Nº 4.9 Atenuación de la intensidad en función de la Distancia Epicentral (R) Evento Relación Chillán,1939 I=19.726 - 6.067*log(R) + 0.002*R Santiago,1945 I=10.925 - 2.738*log(R) - 0.003*R La ligua, 1965 I=17.480 - 5.027*log(R) - 0.001*R Punitaqui,1997 I=12.136 - 2.896*log(R) - 0.004*R Al igual que la curva de atenuación de Barrientos se expresó en términos de la distancia hipocentral, del mismo modo como se obtuvo también en este trabajo, se considerarán las siguientes relaciones de atenuación de los eventos intraplaca de importancia nacional, en función de la distancia hipocentral, como se muestran en la siguiente tabla Nº 4.10. Tabla Nº 4.10 Atenuación de la intensidad en función de la Distancia Hipocentral (r) Evento Relación Chillán,1939 I = 29.688 - 10.458*log (r) + 0.0049*r Santiago,1945 I = 20.357 - 7.122*log (r) + 0.0017*r La ligua, 1965 I = 28.364 - 10.200*log (r) + 0.0047*r Punitaqui,1997 I = 27.262 - 10.388*log (r) + 0.0056*r 76 Además de graficar las curvas de atenuación de la tabla Nº 4.10 para eventos como el Terremoto de Chillán, Santiago, La Ligua y Punitaqui, se graficará un evento cualquiera de magnitud similar a las reportadas por los sismos grandes de tipo intraplaca de profundidad intermedia presente en la base de datos de este trabajo, y se analizarán las diferencias presentes, al aplicar la curva de atenuación obtenida en este capítulo. En el siguiente gráfico, también se indicarán dos líneas de importancia para la ingeniería sismorresistente, como son la recta igual a IMM= V½, que indica el inicio del daño en estructuras de cualquier tipo, en especial del adobe, y la segunda línea presentada en el grafico, corresponde a la de IMM= VIII, que demarca el inicio de daño moderado en estructuras de Hormigón Armado con Diseño Sísmico, Grüntal, et al. 1998. Ver gráfico Nº 4.9. Gráfico Nº 4.9: Comparación de curvas de atenuación de la tabla Nº 4.10, para sismos tipo Intraplaca. Atenuación de Intensidad para Eventos Intraplaca 11 10 Intensidad [IMM] 9 8 7 6 5 4 3 2 1 50 100 150 200 250 300 350 400 450 500 550 600 Distancia Hipocentral [Km] santiago 1945 La Ligua 1965 Intraplaca M s=7,3 Inicio de daño Estructuras H.A Punitaqui 1997 Chillán 1939 Inicio de daño Adobe Si analizamos las 4 curvas de atenuación de los eventos antes citados de importancia histórica nacional, encontramos que efectivamente un tramo de la curva correspondiente al terremoto de Chillán, está por sobre la recta segmentada del daño en estructuras diseñadas sísmicamente, por lo cual éste evento se ha denominado como Terremoto de Colapso para los sismos de origen Intraplaca de Profundidad Intermedia y en cuanto a las demás curvas, si se colocaran en orden decreciente de sismos destructivos, debido a las porciones de curva sobre IMM=5.5, se ordenarían de la siguiente forma: La ligua, Punitaqui, y Santiago. En cuanto a la curva de atenuación en función de las distancias hipocentrales, determinada en este trabajo, se puede mencionar, a partir del grafico anterior, que para la zona cercana al epicentro, entrega valores menores de intensidad, y presenta un decaimiento de la IMM, con respecto a la distancia hipocentral mucho más paulatino y gradual que los otros sismos, en los cuales es más abrupta la tasa de atenuación. 77 La tasa de atenuación de la intensidad de los sismos tipo Intraplaca de Profundidad Intermedia destructivos, como es el caso de Chillán, es más alta que los eventos del mismo tipo de fuente sismogénica pero considerados como no destructivos, como el terremoto de Santiago de 1945, presentando los primeros eventos, daños importantes en la zona epicentral. Para analizar el ajuste de la curva de atenuación de Barrientos a los sismos de tipo intraplaca, se graficará un evento de la base de datos de este trabajo, seleccionado en función de su distancia hipocentral y sus coordenadas epicentrales, y de acuerdo a una magnitud Ms que fuera representativa de un evento de tipo Intraplaca de Profundidad Intermedia. A los datos de este evento, se le aplicará la curva de atenuación de Barrientos (Ec. 4.12), elaborada en base a eventos interplaca, y también la curva de atenuación encontrada en este trabajo, según la ecuación 4.6. De acuerdo a lo anterior, se obtiene el siguiente gráfico Nº 4.10. Gráfico N° 4.10: Curva de Atenuación para evento Intraplaca de Profundidad Intermedia, empleando la curva de este trabajo, según percepción de evento, Ec.4.6 versus la ecuación de Barrientos. Comparacion atenuacion teorica sismo intraplaca Ms=5.6 P.F=105 km 7,0 7,0 6,0 Intensida d IMM 6,0 Intensida d IM M Comparacion atenuacion teorica sismo intraplaca Ms=5.5 P.F= 87 5,0 4,0 5,0 4,0 3,0 3,0 2,0 2,0 1,0 0 20 40 60 80 100 120 dist. Hipocentral 140 Atenuacion teorica intensidad 160 50 180 150 200 250 dist. Hipocentral 300 Atenuacion teorica intensidad Barrientos Comparacion atenuacion teorica sismo intraplaca Ms=5.5 P.F= 86 km 350 Barrientos Comparacion atenuacion teorica sismo intraplaca Ms=5.9 P.F= 93 km 8,0 7,0 7,0 6,0 6,0 Intensidad IMM Intensida d IMM 100 5,0 4,0 3,0 5,0 4,0 3,0 2,0 2,0 1,0 1,0 50 100 150 200 250 300 350 dist. Hipocentral Atenuacion teorica intensidad 400 450 50 500 100 150 200 250 dist. Hipocentral Atenuacion teorica intensidad Barrientos 78 300 350 Barrientos 400 Se observa a partir de las curvas anteriores, que la atenuación de Barrientos, entrega valores menores de la intensidad, durante todo el tramo, presentando una diferencia de más de una unidad en el valor de la intensidad fuera de la zona epicentral, pues presenta tasa de decaimiento de la intensidad en función de la distancia hipocentral más abrupta. En el caso de las regiones cercanas al epicentro, la curva de Barrientos, está por debajo de la obtenida en este trabajo, lo que es importante cuando se requiere un análisis de daño estructural, pues subrepresenta los valores de IMM en las zonas de daño. La diferencia fundamental se explica debido a que la base de datos de la cual se obtuvo la curva de atenuación de Barrientos, estaba compuesta en su mayoría por eventos del tipo interplaca, por lo cual no se ajusta correctamente a eventos pertenecientes a otras fuentes sismogénicas. Para analizar cómo se comporta la curva de Barrientos con un evento intraplaca de profundidad intermedia como el terremoto de Chillán, y además comparar como se atenúa este evento empleando la curva de atenuación de intensidad obtenida para este evento en particular, ecuación presente en la tabla Nº 4.10, versus la curva de atenuación para eventos intraplaca determinada en este trabajo (Ec. 4.6) obtenida a partir de una base de datos contemplada entre los 30º y 37º S., se procede a graficar los valores de intensidad reportada y a evaluarlos con las diferentes curvas de atenuación obtenidas para este tipo de eventos. Ver grafico Nº 4.11. Gráfico N° 4.11: Curva de Atenuación para evento Intraplaca de Profundidad Intermedia, empleando las ecuaciones de Barrientos, la Ec. 4.6 de este trabajo, y la curva propia de este terremoto determinada por Alejandro Moya. Comparación Curva Atenuación para evento Intraplaca Histórico 11 10 9 Intensidad [IMM] 8 7 6 5 4 3 2 0 100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000 Dist. Hipocentral [Km] Ecuacion Atenuacion Chillan Ec. Intraplaca (Ec.4.6) Ec. Barrientos, M s=7,9 y P.F=90 Km. 79 4.2.7 COMPARACIÓN CURVAS DE ATENUACIÓN OBTENIDAS DEPENDIENDO DEL CRITERIO DE SELECCIÓN DE LA BASE DE DATOS Para realizar la atenuación de eventos en función de la intensidad y determinar diferentes curvas de atenuación, se debe responder a la pregunta ¿para qué se desea conocer el decaimiento de la intensidad en función de la distancia hipocentral?, ¿qué diferencias se producen en la atenuación, al considerar diferentes bases de datos? Respondiendo algunas otras interrogantes que se han planteado dentro de este mismo tópico, es que en este trabajo se realizaron curvas de atenuación para la intensidad, bajo dos criterios; el primero de ellos, considera una base de datos que incluye reportes de todos los valores de intensidades percibidas por la población una vez ocurrido el evento; el segundo, que sin duda es el importante para un análisis de sismorresistencia posterior, considera sólo los eventos en que se han reportado intensidades mayores o iguales a VI, es decir, aquellos en los cuales se empiezan a registrar algún daño estructural. Para concretizar la comparación de ambos criterios considerados en la obtención de curvas de atenuación, para diversos eventos clasificados según su fuente sismogénica, se procede a graficar un evento tipo de cada fuente generadora, y graficar los valores de intensidades considerados en función de la distancia hipocentral, como se muestra en el grafico Nº 4.12. Gráfico Nº 4.12: Comparación evento Interplaca de Ms =7.5 y P.F=40 km, perteneciente a la base de datos, empleando ambos criterios de atenuación. Curva de Atenuacion de evento interplaca, segun criterio de atenuacion 8 intensidad [IMM] 7 6 5 4 3 2 0 100 200 300 400 500 600 700 Distancia Hipocentral [km] Atenuacion según percepcion evento Atenuacion según area de daño generada por evento 80 Gráfico Nº 4.13: Comparación evento Intraplaca de Ms =6.8 y P.F=58 km, perteneciente a la base de datos, empleando ambos criterios de atenuación. Curva de Atenuacion de evento intraplaca, segun criterio de atenuacion 9 8 intensidad [IMM] 7 6 5 4 3 2 1 40 60 80 100 120 140 160 180 200 220 240 260 280 300 Distancia Hipocentral [km] Atenuacion según percepcion evento Atenuacion según area de daño generada por evento Se aprecia para ambas fuentes sismogénicas el mismo efecto. A lo largo de todos los valores de distancia hipocentral registrados para las distintas localidades que percibieron el efecto del sismo, empleando la ecuación de atenuación según criterio denominado como área de daños, es decir, cuando sólo consideramos los valores de intensidad mayor a VI, se observa un decaimiento casi nulo de la intensidad en función de la distancia hipocentral, es decir, el valor de la intensidad observada en cada localidad, se mantiene constante a medida que me alejo de la zona epicentral, fenómeno que se extiende más allá de los 300 km, lo cual es inaceptable físicamente, es por eso, que se corrobora la importancia de las ecuaciones 4.5 a 4.7, pues son las curvas de atenuación que representan de mejor forma el decaimiento en el valor de la intensidad a medida que aumenta la distancia al foco. Otro aspecto importante de rescatar, es la comparación de las curvas de atenuación para dos eventos de la misma magnitud, pero pertenecientes a distintas fuentes generadoras. Para ver este fenómeno, se recurre al grafico Nº 4.14 en el cual se observa la curva de atenuación de un evento interplaca de P.F = 46 km y la de un evento intraplaca de profundidad intermedia, con P.F = 61 km., ambos con magnitud Ms =6.0. 81 Gráfico Nº 4.14: Comparación evento Intraplaca de P.F =61 km y un evento interplaca de P.F=46 km. Curvas de Atenuacion 10 9 Intensidad [IMM] 8 7 6 5 4 3 2 20 40 60 80 100 120 140 160 Distancia Hipoce ntral [km] Atenuacion evento Interplaca 180 200 220 240 Atenuacion evento Intraplaca 4.2.8 ANÁLISIS GENERAL DE LOS DATOS PERTENECIENTES A LA BASE DE DATOS DE INTENSIDADES El primer análisis que se obtuvo de la base de datos de intensidades reportadas para las distintas localidades, corresponde a conocer la distribución de los valores de intensidades registradas, lo cual se da a conocer en la tabla Nº 4.19 y se visualiza en el grafico Nº 4.15. Tabla Nº 4.19 Intensidad Número Localidades II 259 II-III 404 III 344 III-IV 349 IV 368 IV-V 323 V 280 V-VI 80 VI 151 VI-VII 72 VII 86 VII-VIII 8 VIII 32 VIII-IX 2 IX 17 IX-X 3 X 13 X-XI 1 82 Gráfico N° 4.15: Distribución de intensidades y número de localidades reportadas según base de datos del catálogo SISRA. Distribución Espacial de Eventos Numero de Localidades 450 400 350 300 250 200 150 100 50 XXI X IX -X IX V IX III- VI II V VI IIII VI I VI -V II VI VVI V IV -V IV IIIIV III IIIII II 0 Rango de Intensidades Para conocer la validez de los datos de las intensidades reportadas, se procedió a graficar los registros de las intensidades captadas para diferentes distancias epicentrales de las distintas localidades, anotando además el número de observaciones que se cuentan para un cierto rango de intensidades (I + ∆ 1.0), perteneciente a un cierto intervalo de distancias epicentrales (R+∆ 20 [Km]). De la figura Nº 4.2, se concluye con facilidad a partir de la degradación de la escala de colores que indica el número de observaciones, cuán bien registrado o cuantos reportes considerados confiables se tienen para un cierto de rango de intensidades y distancias epicentrales, para un evento respectivo de la base de datos. Figura Nº 4.2: Validación de datos pertenecientes a la Base de Datos de Intensidad Es decir se presenta en amarillo los eventos de intensidad inferior a VIII y mayor a V, y para distancias epicentrales comprendidas entre 50 a 200 [Km], lo que se interpreta de modo tal que los eventos cuyos parámetros sísmicos están comprendidos entre los rangos antes 83 mencionados, se encuentran mayoritariamente registrados, por lo que la base de datos se compone principalmente de eventos con dichas características. 4.3 RESULTADOS Y CONCLUSIONES Pese a la importancia que el parámetro de intensidad representa para comprender y conocer los efectos y características de un sismo, se debe mencionar lo mal reportado que se encuentran los valores de ésta, ya que para magnitudes pequeñas, las intensidades se registran según percepción de los habitantes de la localidad afectada, produciendo entonces distorsiones en su valor, aportando con registros sobreestimados de la IMM para sitios distantes de la zona epicentral. Estas singularidades presentes en los reportes de los catálogos, generan errores considerables en la obtención de las curvas de atenuación mediante métodos cuadrados, ocasionando que dichos puntos mal localizados “levanten” la curva que ajusta la totalidad de los datos, al registrarse un reporte con intensidad percibida alta a una distancia hipocentral distante a la zona epicentral . Como el mismo autor mencionó con antelación, se concluye a partir del grafico Nº 4.8 que la curva de atenuación de Barrientos en cuanto a Intensidades presentada en 1980, no representa de la mejor forma los sismos de origen Intraplaca de Profundidad Intermedia, ya que presentan notorias diferencias en el valor de la IMM en la zona epicentral, por lo que se hace necesario seguir proponiendo fórmulas de atenuación para este tipo de eventos, tendientes a encontrar una curva que los represente de la mejor manera posible, incluyendo el comportamiento de los grandes eventos pertenecientes a esta fuente generadora. Como se supuso en un principio, la curva de atenuación de Barrientos es recomendable sólo para eventos tipo thrust, ya que es la que coincide con las ecuaciones determinadas en este trabajo, como se observa además en el grafico 4.8. Al igual que la curva obtenida para este tipo de eventos costeros (Ec. 4.5), ambas representan correctamente la intensidad en áreas cercanas al epicentro, sin embargo para distancias hipocentrales mayores a 200 Km, la curva determinada por Barrientos entrega valores de intensidad teórica menores a los que se obtienen al evaluar un mismo evento con la ecuación 4.5. La diferencia en los valores de intensidad, en el tramo final de las curvas, se aprecia mayormente para eventos con Ms menores o iguales a 7.0. Esto se explica debido al tipo de ecuación empleada, ya que Barrientos expresa la curva de atenuación como I(r, Ms, h), mientras que en este trabajo se expresa el decaimiento del Ln (I) en función de los mismos parámetros sísmicos. La real diferencia, se presenta por ejemplo en eventos de magnitud 5.5 o 6.0 para los cuales se presentan valores de intensidades menores a I (inclusive valores negativos) al evaluar la ecuación de Barrientos para distancias hipocentrales mayores a 600 Km. Del grafico Nº 4.11, se comprueba que en las zonas de daños, cercanas al epicentro, las intensidades obtenidas con la formula de atenuación propuesta por Barrientos, para una magnitud similar a la del evento intraplaca, se encuentra siempre por debajo de las intensidades de este tipo de eventos. Además, se observa que las curvas se cruzan a una cierta distancia hipocentral, debido a que los eventos intraplaca tienen mayores intensidades en el área epicentral. La amplitud de las ondas sísmicas se atenúa en su propagación como consecuencia de la expansión geométrica del frente de ondas y de la anelasticidad del medio. Al no considerar los valores de intensidades en localidades más alejadas del epicentro, es decir, emplear el criterio de área de daños, donde no se reportan evidencias de daños, ni personales ni materiales, la curva de 84 atenuación se ve menos influenciada por los valores correspondientes a distancias mayores, lo que se visualiza ya que la curva permanece estable en casi todo su tramo. Los efectos de los sismos intraplaca se atenúan más rápido que los sismos interplaca, es decir, tienen una mayor tasa de decaimiento de la intensidad, en función de la distancia hipocentral, o bien, una caída de intensidad por unidad de incremento de la distancia hipocentral, mayor que los sismos de origen thrust. En relación a esto se puede concluir que la profundidad del foco, y la ubicación geográfica del epicentro, son determinantes en el nivel de daños de un determinado evento. Se obtiene mayor tasa de decaimiento, aplicando el criterio de atenuación de todos los valores de intensidad reportados por el catálogo, bajo este criterio la atenuación es más rápida respecto de la distancia al epicentro, que si se consideran sólo los valores superiores a VI de IMM al considerar sólo aquellos eventos que generen un área de daños de importancia ingeneril o de diseño, resultando una curva de decaimiento más certera y más ajustada a las intensidades observadas de los datos sin truncar los reportes, según el grafico Nº 4.12 y 4.13. Debido a lo anterior, es que se considera la importancia de las ecuaciones 4.5, 4.6 y 4.7, que son las curvas de atenuación de intensidad en función de la distancia hipocentral determinadas en este trabajo para cada fuente sismogénica, y que serán empleadas para el posterior cálculo del peligro sísmico en la Región Metropolitana y para la generación de los Mapas de Peligro o Amenaza Sísmica, que es el objetivo fundamental de esta memoria de título. Se observa, a partir del grafico Nº 4.14, que en general las intensidades de un evento intraplaca de profundidad intermedia en zonas cercanas al epicentro, son mayores que las observadas por un evento interplaca de igual magnitud, y se reitera la conclusión referente a la mayor tasa de decaimiento de un evento intraplaca versus un evento interplaca. Otro aspecto importante de mencionar, es que para el caso de los sismos de origen cortical es poco preciso, por no decir, poco riguroso, presentar una curva de atenuación con un número tan reducido de eventos de este tipo de fuente. La falta de rigurosidad, se agrava más aún al presentar una ecuación de atenuación considerando sólo aquellos eventos con IMM mayor a V½, ya que reduce drásticamente la pobre base de datos de eventos corticales reportados dentro de la zona de estudio, por lo cual se deja explicito, que se presentan en este trabajo las ecuaciones o curvas de atenuación sólo con fines de presentar el procedimiento a seguir, y de dar a conocer los reportes de este tipo de fuente ocurridos entre las latitudes 30º a 37º L.S., sin establecer que la ecuación determinada para eventos corticales sea la curva de atenuación definitiva para este tipo de eventos. Se concluye acerca de las posibles distorsiones entre el valor de intensidad reportado y el teórico obtenido mediante las relaciones de atenuación, que éstas tal vez se reducirían al emplear el ajuste de los datos a través de mínimos cuadrados ponderados, es decir, se sugiere para procedimientos posteriores emplear los datos con “peso”, es decir, ponderar de manera más importante o que “pese más” un sismo de mayor magnitud que uno de baja magnitud, mediante la ponderación de la magnitud por coeficiente designado entre 0 y 1, dependiendo de la magnitud del evento. Se sugiere entonces, que en los próximos trabajos que continúen esta línea investigativa, previamente se realice una única base de datos disponible, revisada y actualizada con los 85 parámetros sísmicos estudiados y reevaluados, en particular los valores de intensidad reportados, además de plantear la necesidad de extender los procedimientos a todo el territorio nacional, en particular para conocer el comportamiento de atenuación de los eventos de tipo cortical cordillerano. 86 CAPÍTULO 5 5.1 EVALUACIÓN DEL PELIGRO SÍSMICO ANTECEDENTES GENERALES Antes de comenzar a evaluar y analizar los resultados obtenidos, se hace necesario especificar términos que si bien es cierto se relacionan y vinculan, no apuntan a los mismos conceptos y en muchas ocasiones se confunden y mal interpretan. Con esto, se hace referencia a los términos de Peligro Sísmico y Riesgo Sísmico. El primero, conocido también como Amenaza Sísmica, se define como la probabilidad de exceder en un cierto valor, un determinado parámetro en un determinado lugar y para un cierto período de tiempo. El segundo, en cambio, hace referencia a la probabilidad de excedencia de que en un determinado sitio y durante un tiempo de exposición dado, las consecuencias económicas y sociales producidas por un evento sísmico, excedan valores preestablecidos, como número de víctimas, cuantías de daños y pérdidas económicas. Generalmente se recurre a la siguiente relación para relacionar y comprender dichos conceptos: Riesgo = Peligro x Vulnerabilidad Entendiéndose como vulnerabilidad, el grado de daño o pérdida a que está sujeta determinada obra o cualquier elemento a causa de un sismo de una magnitud o intensidad dada, se expresa también en una escala que varía desde 0 hasta 10, ningún daño a colapso total, respectivamente. Según la ONU, la vulnerabilidad es estimada como la capacidad de respuesta de las construcciones humanas a la activación de una amenaza y la exposición, alude a la población medida en número de habitantes o de bienes por unidad de superficie, situados al interior de una zona de peligro. Si un proceso potencialmente peligroso se activa se está en presencia de un desastre o catástrofe natural, entendiéndose como tal, aquella situación en la que la vida de las personas puede sucumbir masivamente, produciéndose una desorganización social que excede la capacidad de reacción ordinaria de la comunidad social afectada, (Ayala-Carcedo, et al. 1988). El peligro sísmico, se entenderá en este trabajo como la probabilidad de que en un lugar determinado, ocurra al menos un movimiento sísmico de intensidad mayor o igual a un cierto valor fijado, para un cierto periodo de interés. En general, se hace extensivo el término intensidad a cualquier otro parámetro de un sismo, como por ejemplo, la magnitud, aceleración máxima, el valor espectral de la velocidad, el valor espectral del desplazamiento del suelo, o cualquiera otro de interés. La intensidad sigue siendo la medida de severidad usada en los estudios relacionados con la evaluación del peligro o amenaza sísmica (Romanoff et al. 1998) y por lo tanto contar con datos de intensidad sigue siendo de mucha utilidad para la ingeniería sísmica. En éste capítulo se determinarán las probabilidades de ocurrencia de un cierto valor de intensidad y para un determinado período de interés, ya sean 10, 50, 100 ó 250 años. Estudiando e interpretando las curvas de iso intensidades o isosistas generadas en los Mapa de Peligro Sísmico obtenidos para la Región Metropolitana de Santiago. 87 Para convertir este aporte de los mapas de Peligro Sísmico a un trabajo más palpable y de mayor difusión no sólo orientado a sismólogos o geofísicos nacionales, sino más bien de acogida para todo usuario interesado o cualquier entidad dedicada a esta disciplina, se aplicarán y evaluarán para ciertas ventanas de tiempo de interés dichas curvas de isosistas obtenidas, para representar escenarios potenciales en la Región Metropolitana de Santiago. Las isosistas se definen como líneas en un mapa que unen sitios que han experimentado igual intensidad, o en su defecto, líneas que separan sitios de diferente grado de intensidad. Es así, por ejemplo como cuando se analizan los reportes de un sismo, se observa como las isosistas se distribuyen en forma cuasi concéntrica a partir de la zona epicentral, presentando curvas que se expanden en sentido norte-sur, representando las intensidades menores a medida que las localidades se alejan del área principalmente afectada, la cual reporta evidentemente la mayor intensidad. Estas curvas de igual intensidad para un mismo evento, permiten determinar, según la escala del mapa, las áreas más afectadas contenidas en la región epicentral, permiten determinar las localidades hasta donde se percibe el efecto del sismo, determinar el área encerrada por la isosista III, la cual denota las zonas en donde comienza el daño estructural, y mucha más información que se puede extraer de las curvas generadas con los datos de intensidades registradas en la escala IMM( Intensidad de Mercalli Modificada), presentes en la base de datos de este trabajo. En el presente capítulo se obtienen estimaciones generales del peligro sísmico para Chile Central las cuales permitirán determinar la amenaza sísmica considerando los tres tipos de fuentes. Pudiendo estimar de mejor forma el peligro sísmico al considerar tipos de fuente sísmica no incluidas en los trabajos previos. 5.2 METODOLOGÍA GENERAL Para el cálculo del peligro sísmico, definido como la probabilidad de ocurrencia de al menos un sismo que supere un cierto valor de intensidad y para un período de interés dado, se recurre a la metodología desarrollada por Algermissen y Perkins en 1976, con la cual se podrá determinar probabilidades de superar ciertos valores de intensidad para períodos de vida útil de interés como por ejemplo, 10, 50, 100 ó 250 años, en la Región Metropolitana de Santiago. 5.2.1. METODOLOGÍA ALGERMISSEN Y PERKINS La metodología que será empleada en este trabajo para la evaluación de la amenaza sísmica es la de Algermissen & Perkins (1976), al igual que como se empleó en el trabajo predecesor a éste en la línea de amenaza sísmica en la Región Metropolitana, desarrollado por Romanoff en 1998. A diferencia del trabajo original de 1976, éste se realizará en base a las probabilidades de ocurrencia de intensidades y no de aceleraciones máximas (P.G.A). El procedimiento consiste básicamente en la definición de las fuentes sismogénicas, recurriendo para ello a las relaciones de Gutenberg- Richter obtenidas en el Capítulo Nº 3 de este trabajo, para luego calcular su efecto, en conjunto y de forma individual, sobre una malla de puntos que cubren la Región Metropolitana de Santiago, definidos mediante sus coordenadas 88 localizadas en el centro de cada celda de la grilla establecida. Para calcular el efecto de cada punto representativo del modelo de las fuentes sobre cada punto de la región de estudio, se utilizan las fórmulas de atenuación de intensidades en función de la magnitud Ms y la distancia hipocentral obtenidas en el capítulo Nº 4 de este trabajo, correspondientes a las ecuaciones 4.8, 4.9 y 4.10. Luego se debe incorporar el cálculo probabilístico, mediante la distribución acumulativa de la intensidad máxima, empleando la Fórmula de Poisson, modelo de distribución que supone una independencia temporal y espacial entre los eventos sísmicos. En esencia, la metodología de Algermissen & Perkins se basa en lo siguiente: Para cada rectángulo unitario que define la región de interés, en este caso la Región Metropolitana de Santiago, el programa calcula el número esperado de ocurrencias en rangos de intensidad (∆ =0.2 IMM), para los terremotos distribuidos por los elementos de la respectiva fuente modelada analíticamente. El resultado final es, para cada rectángulo unitario, la distribución del número esperado de ocurrencias como función de la intensidad. La función de distribución de probabilidad condicional acumulativa puede ser calculada como se presenta en la ecuación 5.1. F (Io ) = P[I ≤ Io | M ≥ M min = 4.5] (Ec. 5.1) Que corresponde a la probabilidad de que la intensidad I sea menor o igual que el valor Io, dado el caso que ocurra un terremoto de magnitud M, mayor que cierta magnitud mínima considerada como Ms =4.5, y máxima igual a la magnitud máxima esperada considerada para cada fuente. El cálculo para cada intensidad de interés a se realiza por: F (Io ) = # de ocurrencias con I ≤ Io, M ≥ M min # total de ocurrencias con M ≥ M min (Ec. 5.2) El número de ocurrencias de una intensidad inferior o igual a Io en una localidad cualquiera, viene dado por la sumatoria de todas las frecuencias asociadas a su respectiva intensidad I, la cual cumple con I ≤ Io. En pocas palabras, esta metodología cuenta todos los eventos dentro de una determinada grilla que son capaces de exceder un cierto umbral de intensidad. Luego, determina la probabilidad de sobrepasar este umbral dividiendo el número de éxitos por el número total de eventos que las fuentes consideradas son capaces de generar. Se hace entonces, en cada coordenada de interés dentro de la Región Metropolitana de Santiago, aproximadamente entre los 33º y 34º L.S, una tabla con valores de io y F(Io), incrementando la Intensidad en 0.2 grados. Para luego definir en cada sitio, la distribución acumulativa de Intensidades Máximas Fmax (Io) de la ecuación 5.5. 89 El período de retorno se define por como se presenta en la siguiente expresión, Ec. 5.3, que es análoga a la Ec. 5.9 que se presenta posteriormente: R(Io ) = 1 1 − F (Io ) (Ec.5.3) Siendo R(Io) el número medio de eventos que producen una intensidad I ≥ Io. El período de retorno en años está dado por: R y (Io ) = R(Io ) # esperado de eventos con M ≥ M min (Ec. 5.4) Se define la distribución acumulativa de intensidades máximas como Fmax (Io): Fmax (Io) = P(I max ≤ Io) (Ec. 5.5) Considerando que las intensidades de los eventos siguen una distribución de Poisson, es decir, que los sismos son independientes entre sí, se tiene que la ecuación anterior equivale a: Fmax = exp( −φ ⋅ t ⋅ ( 1 − F(Io))) (Ec. 5.6) Siendo: Φ = tasa o frecuencia media de ocurrencia de sismos con Ms ≥ 4.5, por unidad de tiempo (año). Dada a través de la evaluación de las relaciones de G- R definidas previamente. t = intervalo de tiempo, en años, que contempla el estudio de evaluación del P.S. La ecuación previa a la evaluación del P.S. corresponde a la que entrega la probabilidad P (Io,t) de ocurrencia de al menos un sismo que provoque una Intensidad ≥ Io, en un período de tiempo t, denominado vida útil. Esto se define como sigue en la ecuación 5.7. P(Io,t) = 1 − exp( −φ ⋅ t ⋅ ( 1 − F(Io))) (Ec. 5.7) Pero la ecuación que realmente expresa la definición de peligro o amenaza sísmica, es la que se refiere a la intensidad Io, para la cual la probabilidad de ocurrencia de que al menos un evento produzca un valor de intensidad mayor o igual que Io, en un cierto período de tiempo, para una determinada zona en estudio, sea igual a un porcentaje de probabilidad de interés, ya sea un 5%, o un 10%. Para ello se recurre a la ecuación Nº 5.8. P.S (sitio) = Io, tal que P (Io, t) = 0.10, para 10 y 50 años. P.S (sitio) = Io, tal que P (Io, t) = 0.05, para 100 y 250 años. (Ec. 5.8) El valor de Io que cumpla con la condición de la Ec. 5.8 será determinado, cuando sea necesario, mediante interpolación de los valores contiguos de intensidad obtenidos. 90 La etapa final de este trabajo, y en particular de este capítulo, consiste en la confección de un mapa de peligro sísmico para la Región Metropolitana de Santiago, mediante un trazado de isosistas, a partir de los valores de IMM que cumplan con la ecuación 5.8, en un determinado sitio. Es importante mencionar, que el set de mapas se entregarán para la región contemplada entre los paralelos 33º y 34º L.S y los 69.5º y 72º L.W, indicado el período de vida útil para el cual se analizó dicho cálculo de P.S., indicando por separado el efecto conjunto de las fuentes sismogénicas, y luego el efecto individual de las tres fuentes sobre el área de interés. Lo anterior con el objeto de comparar y concluir acerca del eventual predominio de una determinada fuente. 5.2.2. DEFINICIÓN AREA DE ESTUDIO Se define como origen del sistema de coordenadas la intersección de los 30º de latitud sur con los 73º de longitud oeste. Con el objeto de encasillar el área de estudio que abarca este trabajo y analizar el efecto de las fuentes sismogénicas sobre una malla de puntos que representen la Región Metropolitana de Santiago, se hacen los siguientes supuestos: i) Área de interés para el cálculo del peligro sísmico, de los 33º a 34º L.S. y los 69,5º a 72º L.W. Ver figura Nº 5.1. j) Promediando los valores de 1º de longitud que se obtienen a partir de expresar las coordenadas de las latitudes contempladas en este trabajo (30º a 37º S.) en distancias transformadas a Km., resulta lo siguiente: k) 1º longitud = 111.18 x cos (latitud º) = 92.71 [Km]. l) 1º latitud = 111.18 [Km]. El área de estudio abarcada en este trabajo, se dividió en una grilla de puntos, cuyos límites, a partir del origen del sistema de coordenadas definido anteriormente, son los siguientes: 5 6 Eje Y abarca desde 333,54 Km. (33º L.S) hasta 444,72 Km. (34º L.S). Eje X abarca desde 92,71 Km. (72º L.W) hasta 324,49 Km. (69.5º L.W). Considerando que los puntos de la malla que representan la zona de estudio, en particular que contienen a la Región Metropolitana de Santiago, son equidistantes entre si, espaciados cada 25 Km., se tienen 10 x 5 sitios los que componen el reticulado de la malla, ver figura Nº 5.1, para los cuales se analizará el efecto conjunto y por separado de las fuentes sismogénicas que se definirán a continuación. Es decir, para cada punto ubicado en el centro de cada celda de la grilla de la Figura Nº 5.1, los cuales se suponen ubicados en la superficie de la Tierra (la cual por hipótesis se considerará plana), se calculará el efecto individual y luego conjunto de cada sitio que compone la determinada fuente sismogénica (compuesto por sub fuentes puntuales, que poseen latitud, longitud y profundidad, como se muestran en el Anexo B.1, B.2 y B.3 para cada fuente respectivamente). Empleando las ecuaciones que se presentan a continuación con el objeto de obtener el valor de la intensidad en cada sitio de la región de estudio, a partir de las ecuaciones de atenuación determinadas en el capítulo Nº 4 de este trabajo, es decir, las ecuaciones 4.8, 4.9 y 4.10, evaluadas para el rango de magnitudes Ms según corresponda a cada fuente, con un delta de ∆Ms = 0.5. De este modo, se tiene para cada sitio de la figura 5.1, las intensidades que se 91 alcanzarían, producto de sismos ocurridos en cada punto ubicado en el centro de las celdas, que componen las mallas que modelan las fuentes sismogénicas definidas. r = R 2 + Z fij [Km] (Ec. 5.9) R = (( X cij − Xfij ) 2 + (Ycij − Y fij ) 2 [Km] (Ec. 5.10) 2 Siendo: R = Distancia epicentral, en Km.. r = Distancia Hipocentral, en Km.. Zfij = Profundidad focal del punto perteneciente a una determinada fuente, en Km.. Xcij, Ycij = Coordenadas del punto ubicado en el centro de cada celda de la malla que define la zona de estudio, en Km.. Xfij, Yfij = Coordenadas del punto ubicado en el centro de cada celda de la malla que define las fuentes sismogénicas modeladas analíticamente, en Km. Para cada uno de los 40 puntos ubicados en el centro de cada celda de la malla que define la zona de interés, se obtuvieron valores de intensidades desde IMM III a XII, incrementadas en ∆IMM =0.2, haciendo un recuento del número de ocurrencias con I(r, Ms) menor o igual que un cierto valor de Io, y calculando la distribución acumulativa de intensidades F(Io), por efecto conjunto de las tres fuentes y luego por influencia individual de cada fuente. 92 Figura Nº 5.1: Disposición de la Malla que representa la zona de cálculo de Peligro Sísmico. Compuesta por 40 puntos localizados en el centro de cada celda. 5.2.3 DEFINICION FUENTES SISMOGÉNICAS Para la definición de las fuentes simogénicas, se debe considerar que éstas se pueden representar como volúmenes que poseen largo, ancho, orientación e inclinación con respecto a la superficie de la Tierra, la cual sólo para simplificar los cálculos se considerará plana, como se mencionó anteriormente. Para efectos prácticos de un estudio de Peligro Sísmico, se define como fuente sismogénica, aquella línea, zona o volumen geográfico que tenga similitudes geológicas, geofísicas y sísmicas, tales que se pueda considerar que posee un potencial sísmico homogéneo en toda la fuente, es decir, en las que el proceso de generación y recurrencia de sismos, sea espacial y temporalmente homogénea. La definición y demarcación de las fuentes simogenéticas o sismogénicas, suele ser un proceso bastante subjetivo, sin embargo, es de gran importancia para estudios cuantitativos de peligro sísmico que se efectúen en base a ellas. Para caracterizar una fuente, al menos se deben considerar las siguientes particularidades, como la magnitud máxima probable y la relacion frecuencia – magnitud, aspectos que ya han sido definidos en el capítulo Nº 3 de este trabajo. 93 5.2.3.1 FUENTE INTERPLACA Con respecto a la fuente sismogénica del tipo interplaca o thrust, se modeló como una superficie de orientación dada por la geometría que presenta la fosa a lo largo de las coordenadas de estudio. La superficie de modelamiento analítico de esta fuente, se inicia en la fosa (región costera de Chile Central, donde comienza el margen de convergencia de la placa oceánica de Nazca bajo la placa Sudamericana) a una profundidad distribuida según la sismicidad, comprendida entre los 0 hasta los 50 Km, según referencia Belmonte - Pool, et al. 1997. Para determinar la orientación de esta superficie de modelación, se recurre a suponer que ésta se encuentra definida por la pendiente máxima que presenta la geometría de la fosa en las latitudes de estudio, la cual presenta un quiebre en el tramo frente a Santiago, por lo cual es incorrecto suponer que un plano con orientación norte-sur, representa a los sismos ocurridos en el contacto subductivo. Para comprender el procedimiento de definición de esta fuente sismogénica, se recurre a identificar la geometría de la fosa entre las latitudes consideradas, para ello se presenta el azimut obtenido, calculado como se muestra en la figura Nº 5.2., que corresponde a 15º con respecto al norte. Geometría de la fosa N 15º Figura Nº 5.2: Geometría de la fosa, y azimut de la subducción en estas latitudes. La región sismogénica que representa la fuente tipo thrust, se extiende desde las longitudes que bordean el limite de la fosa chileno-Peruana, hasta los 71º L.W, y abarca desde los 30º a 37º latitud sur, es decir desde el kilómetro 0 hasta los 778.26 Km. 94 Considerando estos antecedentes, el plano que representa a la fuente costera interplaca posee una inclinación de 13,77 º con respecto al plano X-Y (considerando superficie de la Tierra plana). 5.2.3.2 FUENTE INTRAPLACA DE PROFUNDIDAD INTERMEDIA Se considera que la fuente sismogénica correspondiente al interior del valle central, se inicia a continuación de la fuente costera, alrededor de los 71,5º L.W. hasta aproximadamente los 69º L.W, es decir, desde aproximadamente los 140 hasta los 371 Km. En cuanto a latitud se extenderá a lo largo de toda la zona de estudio, es decir, desde los 30º a 37º L.S, abarcando desde el kilómetro 0 hasta los 778.26 Km., en relación al origen del sistema de referencia inicialmente impuesto. La superficie inclinada que modela esta segunda fuente, bisecta la “nube de puntos” dada por la sismicidad característica de esta fuente. Pasando por el medio de los eventos generados por esta fuentes sismogénica, cuando se visualiza un perfil tipo de esta fuente a una latitud dada, el plano representativo abarca profundidades entre los 50 y casi 200 Km. de profundidad focal. Para representar esta fuente sismogénica, se debe tener en cuenta que en el segmento norte, entre los 27º y 33º llamado segmento de subducción subhorizontal, la zona de contacto Wadati- Benioff desciende bajo el continente con una pendiente media de 25º E hasta aproximadamente los 60 Km. de profundidad. Bajo esta profundidad va decreciendo su pendiente hasta casi 0º a los 100 Km. de profundidad y sigue una trayectoria casi subhorizontal por más de 300 Km. desde donde continua su descenso en el manto con una pendiente media cercana a los 25º E. (Pardo, et al. 2000). Mientras que en el segmento sur, entre los 33º y 37º S, la zona Wadati-Benioff mantea unos 30º hacia el Este, aumentando progresivamente su inclinación con la profundidad. De acuerdo a estos antecedentes geomorfológicos, es que se deben hacer dos planos con inclinación distinta, el primero de ellos desde los 30º a los 32.5º S con una pendiente con respecto a la superficie de la Tierra igual a 15º E, que abarque desde los 50 Km. hasta los 100 Km. de profundidad. Mientras que el segundo tramo de este plano representativo de la fuente intraplaca, a continuación del segmento anterior, tendrá una mayor inclinación correspondiente a 31.5º E y se extenderá hasta más allá de los 200 Km. de profundidad, comenzando en los 32.5º y extendiéndose a los 37º S. Es decir, cuando se observen perfiles de esta fuente al sur de los 32.5º habrá una pendiente mayor que al norte de esta latitud. 5.2.3.3. FUENTE CORTICAL CORDILLERANA Se considera que la fuente sismogénica correspondiente al sector cordillerano frente al valle central, se sitúa entre los meridianos 70.5º hasta aproximadamente 69º L.W, y en cuanto a latitud se extenderá a lo largo de toda la zona en donde existan eventos de este tipo de fuente dado por la sismicidad, es decir, desde los 30º a 35º L.S. A lo largo de este rango de latitudes, no se presentará una distribución homogénea de eventos, como se aprecia en las otras dos fuentes. Los sismos propios de esta fuente sismogénica, se encuentran en un plano sub horizontal, por lo que el plano característico de esta fuente cortical, no posee inclinación con respecto a la superficie de la Tierra. Se considera una profundidad focal promedio representativa de estos 95 sismos corticales, equivalente a aproximadamente 10 Km. Luego el plano representativo de la fuente sismogénica cordillerana superficial, queda definido por: 5 Eje X desde 231,78 Km. (70.5º L.W) hasta 370,84 Km. (69º L.W). 6 Eje Y desde 0 Km. (30º L.S) hasta 555,90 Km. (35º L.S). 7 Eje Z igual a 10 Km. de profundidad. La separación de los puntos de las mallas dadas por los planos representativos de cada fuente sismogénica, se estima considerando el largo de ruptura causado por un sismo de magnitud Ms = 5.0, a través de las siguientes ecuaciones: Mo = µ ⋅ S ⋅ u (Ec. 5.9) Donde, Mo = Momento Sísmico. µ = Modulo de Rigidez, corresponde a 3x1011 [cgs] S = Área de ruptura [Km.2], corresponde a w x L. w = Ancho de ruptura [Km.] < u > = Deslizamiento promedio [Km.], corresponde a 10-5 x L L = largo de ruptura [Km.]. Se asume la relacion L = 2 x w. Además, se recurre a la ecuación de magnitud - momento (Mo), Kanamori, et al. 1977: Log(Mo) = 1.5 ⋅ Ms +16.1 (Ec. 5.10) Evaluando las ecuaciones Nº 5.9 y 5.10, comenzando con Ms = 5.0, se obtiene para las tres fuentes un largo de ruptura cercano a los 30 Km., pero por convención empleada en trabajos anteriores se empleará un reticulado en cada malla representativa de las fuentes sismogénicas de un área de 20 x 20 Km., lo que será expresado en términos de grados de longitud y latitud. En conclusión, se tiene para cada fuente sismogénica el siguiente reticulado que la define que se presenta en la tabla Nº 5.1, lo cual se complementa con las figura B.1, B.2 y B.3 del Anexo B. Tabla Nº 5.1 Reticulado de las Fuentes Modeladas Tipo Fuente Área celda Nº de sitios 2 Interplaca Thrust 20 x 20 [km ] 343 2 Intraplaca de Profundidad Intermedia 20 x 20 [km ] 336 2 Cortical Cordillerana 20 x 20 [km ] 182 Debido a que los sismos pueden provenir de cualquier punto de la fuente, deben considerarse las distancias más cortas al sitio, medidas desde todos los puntos dentro de cada una de las fuentes. En la práctica, y como quedó definido en el párrafo anterior, cada fuente se subdivide en subfuentes menores (puntuales), donde las distancias al sitio se miden desde el centro de dichas subfuentes. Las intensidades en el sitio para cada sismo de cada una de las 96 subfuentes puntuales, se calculan mediante las relaciones de atenuación correspondientes. El resultado es un set de intensidades provenientes de sismos de distintas magnitudes, ubicados en diferentes sectores de las fuentes sismogénicas modeladas, con diferentes probabilidades de ocurrencia. Este set se integra, en una sola curva que muestra la probabilidad de excedencia de distintas intensidades en el sitio por unidad de tiempo, que es lo que se visualiza posteriormente en los mapas de amenaza sísmica. 5.2.4 PROGRAMA DE CÁLCULO DE PELIGRO SISMICO Los trabajos anteriores desarrollados para el cálculo y evaluación del Peligro Sísmico han empleado el programa computacional RISK elaborado por Mc Guire en 1976. Este programa se basa en la metodología de Cornell, la cual integra información sismotectónica, parámetros sismológicos y leyes de atenuación, para los diferentes mecanismos de ruptura. El resultado es una curva de peligro sísmico, donde se relaciona la intensidad y su probabilidad anual de excedencia. En el presente estudio de peligro sísmico, el nivel de excedencia (RISKt) y probabilidad extrema se definen como la probabilidad que, en un tiempo determinado (tiempo de vida útil o de exposición) ocurra un sismo de intensidad igual o mayor a una intensidad dada. El nivel de excedencia se expresa de la manera siguiente: RISKt = 1 − exp( −t ) Ry(a) (Ec. 5.11) Donde: t : tiempo de vida útil, ya sean 10, 50, 100 ó 250 años. Ry(a): período de retorno promedio en años de un sismo de intensidad > a. El nivel de confidencia se expresa como: Nivel de confiabilidad = 1 – RISKt (Ec. 5.12) Los movimientos de diseño que el ingeniero debe seleccionar están asociados a un nivel de excedencia suficientemente pequeño durante la vida útil de la edificación. La selección de los movimientos sísmicos depende del tipo de obra. En este trabajo, para la determinación del Peligro Sísmico en la Región Metropolitana de Santiago, y la posterior generación de los Mapas de Peligro Sísmico, se ha desarrollado un programa computacional, basado en la Metodología de Algermissen y Perkins, que calcula el efecto conjunto de las fuentes sismogénicas sobre un punto de la zona de estudio, y luego el efecto individual de cada fuente sismogénica sobre dicha coordenada, para luego comparar y concluir la predominancia de una fuente sobre el área integrada, dependiendo del período y de la probabilidad de excedencia considerada. En relación a los períodos que se estudiarán, éstos corresponden a los años de vida útil de interés como son los 10, 50, 100 y 250 años, que se relacionan a través de la probabilidad de 97 ocurrencia de un evento, con el período de retorno de dicho evento, generado por una determinada fuente sismogénica en un determinado lugar. El programa desarrollado y creado para la determinación del peligro sísmico en la Región Metropolitana de Santiago, denominado CalPelSis, tiene las siguientes características: a) Requiere como input los siguientes antecedentes: Las coordenadas de la localidad donde se quiere evaluar el Peligro Sísmico (lat [º], long [º]). Corresponden al centro de cada celda de la malla que define la zona de estudio. Tipo de parámetro sísmico a atenuar, en este caso la intensidad. Período de vida útil que se quiera analizar, 10, 50, 100 y/ó 250 años. El archivo con las 3 fuentes sismogénicas modeladas analíticamente, definidas como se describió anteriormente. b) Arroja como output los siguientes datos: 1. Columna 1: Corresponde a la Intensidad de 1 a 10 en IMM, con un delta de 0.2 grados, obtenida en el período analizado, para una cierta localidad de la Región Metropolitana de Santiago, y según efecto de la(s) fuente(s) sismogénica(s). 2. Columna 2: Corresponde a la probabilidad de ocurrencia de dicho valor de IMM, en la localidad analizada, y por efecto de la(s) fuente(s) sismogénica(s) considerada(s). c) La base de datos con la que opera, es la siguiente: Latitud y longitud de las coordenadas dadas por los puntos que caracterizan las 1. fuentes sismogénicas. Coeficiente a y b de la relación de Gutenberg- Richter obtenidas para cada fuente, 2. en el capítulo Nº 3 de este trabajo. El coeficiente a se entrega normalizado por unidad de área, es decir, el numero de veces (s) que el área de una celda está contenida en el área total del plano de la fuente, numero que se presenta en la tabla Nº 5.1. Este coeficiente se calcula como la diferencia entre el coeficiente a (obtenido de la normalización temporal, de cada ecuación de G-R obtenida en el capítulo Nº 3 del presente trabajo) y el logaritmo de s. Magnitud mínima y máxima considerada para cada fuente, se estableció la 3. magnitud mínima igual a Ms = 4.5 y la máxima dependiendo de la fuente sismogénica, es decir, para la fuente Interplaca, corresponde a Ms = 8.5; para los eventos Intraplaca, Ms = 8.0; y para los corticales, Ms = 7.0. Las relaciones de atenuación de la intensidad, determinada en el capítulo Nº 4 de 4. este trabajo, para cada fuente sismogénica, correspondiente a las ecuaciones 4.8, 4.9 y 4.10. Para visualizar el funcionamiento del programa desarrollado, a continuación se muestran algunas de sus etapas, lo cual se presenta en las figuras Nº 5.3 y 5.4. 98 Figura Nº 5.3: Programa de cálculo de Peligro Sísmico en la Región Metropolitana de Santiago. Se indica el input y la base de datos requerida por el programa. Dependiendo del período de vida útil analizado, interesa un cierto porcentaje de probabilidad de ocurrencia de la intensidad, es así como por ejemplo, históricamente se ha considerado representativo lo siguiente: Para 10 años de período, interesa determinar la intensidad alcanzada con un 10 % de probabilidad, en un cierto lugar. Período de retorno de 95 años. Para 50 años de período, interesa determinar la intensidad alcanzada con un 10 % de probabilidad, en un cierto lugar. Período de retorno de 475 años. Para 100 años de período, interesa determinar la intensidad alcanzada con un 5 % de probabilidad, en un cierto lugar. Período de retorno de 1.950 años. Para 250 años de período, interesa determinar la intensidad alcanzada con un 5 % de probabilidad, en un cierto lugar. De acuerdo a los períodos de retorno obtenidos para cada período de vida útil analizado, se presentarán los mapas de Peligro Sísmico sólo para 10 y 50 años, pues son los años que entregan períodos de retorno de interés e importancia ingeneril. Cumpliendo así con el objetivo de que los mapas sean una herramienta concreta, a la cual se recurra al momento de diseñar y /o emplazar obras de ingeniería en la Región Metropolitana, entregando una evaluación del peligro sísmico cuando el proyecto así lo requiera. 99 Ejemplo de Período de vida útil de 250 años Probabilidad de 5% de que en 250 años ocurra un evento de IMM igual a la interpolación de ambos valores, por efecto conjunto de las 3 fuentes, en la coordenada (-33º, 69º) Figura Nº 5.4: Ejemplo de aplicación del programa de cálculo de Peligro Sísmico en una zona de la Región Metropolitana de Santiago. 5.3 CURVAS DE PROBABILIDAD DE OCURRENCIA DE INTENSIDAD Para evaluar la incidencia de algunos factores empleados en el programa desarrollado, y concluir acerca de cuán sensible es el resultado de la probabilidad de ocurrencia de un cierto valor de intensidad frente al cambio de estos factores, se analizó un mismo escenario de evento a través de las curvas de probabilidad de ocurrencia versus intensidad. Por ejemplo se realizaron los mismos cálculos pero variando en el input del programa, las Ms limites consideradas, variando el valor a Ms igual a 4.0, y modificando el valor de Ms máxima de la fuente cortical; con lo cual se concluye que las variaciones en el valor de las magnitudes mínimas y máximas consideradas, no genera un cambio notable en el peligro sísmico estimado en un punto. Sin embargo, cuando se alteran los coeficientes de la ley de G-R, lo cual se hizo modificando el valor de a, al considerar un numero de sitios (s) distintos a los presentados en la tabla Nº 5.1, la curva resultante está por debajo de las curvas arrojadas con los coeficientes de la relaciones G-R definitivas, lo que indica mayor sensibilidad frente a cambios que afectan las curvas que se relacionan con la sismicidad y características de las fuentes establecidas. 100 Al analizar los valores del peligro sísmico obtenido para un punto cualquiera ubicado en el centro de la Región Metropolitana, en particular en la Cuenca de Santiago, se obtiene que la fuente interplaca domina por sobre las otras dos fuentes sismogénicas, siendo coincidente con el efecto conjunto de las 3 fuentes sobre dicha coordenada. Le siguen en influencia la fuente cortical, seguida de cerca por la fuente intraplaca, esta predominancia se mantiene para períodos de vida útil de 10 y 50 años. Las curvas de probabilidad de ocurrencia se presentan en los siguientes gráficos Nº 5.1 y 5.2. Grafico Nº 5.1: Curva de probabilidad de ocurrencia para 10 años, coordenada (-33.35; -70.60). Curvas de probabilidad de ocurrencia de IMM, para 10 años de vida util 1,0E+00 9,0E-01 Probabilidad [%] 8,0E-01 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 3 4 5 6 7 8 9 Intensidad [IMM] Conjunto Interplaca 101 Intraplaca Cortical 10 Grafico Nº 5.2: Curva de probabilidad de ocurrencia para 50 años, coordenada (-33.35; -70.60). Curvas de probabilidad de ocurrencia de IMM, para 50 años de vida util 1,0E+00 9,0E-01 Probabilidad [%] 8,0E-01 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Intensidad [IMM] Conjunto Interplaca Intraplaca Cortical Al analizar un punto localizado en la costa de la zona de estudio, con coordenadas 33,35º S y - 72º W, se observa la total influencia de la fuente interplaca en el cálculo del peligro sísmico, es decir, el aporte de este tipo de eventos es el de mayor influencia para el sector poniente de la Región Metropolitana de Santiago. Esto se concluye al observar la coincidencia de las curvas de efecto conjunto y la de influencia individual de la fuente tipo thrust. Al observar los gráficos Nº 5.3 y 5.4., se concluye la absoluta importancia de la fuente tipo thrust para las localidades ubicadas al oeste de la Cuenca de Santiago, siendo coincidente el efecto de esta fuente con la acción de las 3 fuentes conjuntas. Separadas por más de dos puntos de intensidad correspondiente a la probabilidad del 10% de ocurrencia, se encuentra el aporte de las fuentes intraplaca y cercana a ésta, la influencia de la fuente cortical. 102 Grafico Nº 5.3: Curva de probabilidad de ocurrencia para 10 años, coordenada (-33.35; -72). Curvas de probabilidad de ocurrencia de IMM, para 10 años de vida util 1,0E+00 9,0E-01 Probabilidad [%] 8,0E-01 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Intensidad [IMM] Conjunto Interplaca Intraplaca Cortical Grafico Nº 5.4: Curva de probabilidad de ocurrencia para 50 años, coordenada (-33.35; -72). Curvas de probabilidad de ocurrencia de IMM, para 50 años de vida util 1,0E+00 9,0E-01 Probabilidad [%] 8,0E-01 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Intensidad [IMM] Conjunto Interplaca Intraplaca Cortical El cálculo del peligro sísmico para localidades próximas al sector cordillerano, arroja la predominancia del efecto ocasionado por la fuente sismogénica cortical, siendo la más próxima a la curva generada por el efecto conjunto de las 3 fuentes. En segundo lugar de influencia para localidades ubicadas al este de los 70º W, se encuentra la fuente interplaca, y separada de esta curva por aproximadamente dos puntos de IMM, se encuentra la acción de la fuente sismogénica de tipo intraplaca de profundidad intermedia. 103 Lo anteriormente descrito, se observa en el siguiente par de gráficos, Nº 5.5 y 5.6, correspondiente a las curvas obtenidas para un punto de coordenadas (-33.35; -69.6). Grafico Nº 5.5: Curva de probabilidad de ocurrencia para 10 años, coordenada (-33.35; -69.6). Curvas de probabilidad de ocurrencia de IMM, para 10 años de vida util 1,0E+00 9,0E-01 Probabilidad [%] 8,0E-01 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Intensidad [IMM] Conjunto Interplaca Intraplaca Cortical Grafico Nº 5.6: Curva de probabilidad de ocurrencia para 50 años, coordenada (-33.35; -69.6). Curvas de probabilidad de ocurrencia de IMM, para 50 años de vida util 1,0E+00 9,0E-01 Probabilidad [%] 8,0E-01 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 3 4 5 6 7 8 9 Intensidad [IMM] Conjunto Interplaca Intraplaca 104 Cortical 10 5.4 CONCLUSIONES Los resultados obtenidos en este trabajo de memoria no son definitivos, pues se irán completando y perfeccionando a medida que avancen las investigaciones que apuntan a mejorar la estimación del peligro sísmico, y en la medida que sucedan eventos que permitan reportar nuevos antecedentes y obtener renovadas conclusiones, además de permitir ampliar la base de datos por ejemplo en el caso de eventos del tipo cortical. En este sentido, Chile, y en particular la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, cuenta con un equipo multidisciplinario de profesionales como geofísicos, geólogos, ingenieros civiles estructurales, y por supuesto sismólogos, los cuales permanentemente investigan temas como la Regionalización Sísmica, estudios de nuevas fallas tectónicamente activas, efectos de amplificación del suelo, análisis de la vulnerabilidad y de la amenaza sísmica presente en nuestro territorio, analizándola desde distintos puntos de vista, pero con el único objetivo de hacer de Chile un país preparado instrumental y socialmente, para enfrentar las continuas solicitaciones sísmicas, desde el punto de vista estructural y de la población, respectivamente. Para un 10 % de probabilidad de que ocurra al menos un evento con una intensidad mayor o igual a la correspondiente al valor de IMM dado por la intersección de la curva de efecto conjunto de las fuentes con la recta del porcentaje de probabilidad, el valor obtenido se ve incrementado a medida que aumenta el período de vida útil considerado. Lo anterior, se explica debido a que a medida que aumentan los años considerados, se incrementa la probabilidad de que una determinada fuente produzca un evento de magnitud igual a la máxima esperada, lo que se traduce también en un alto valor de intensidad provocada por un sismo, pues el análisis para un determinado período de vida útil se acerca al período de retorno de ocurrencia de un sismo histórico, dependiendo de la fuente generadora. El efecto observado para diversos sitios dentro de la Región Metropolitana de Santiago, no siempre concuerda con el hecho de que una localidad esté influenciada en forma preponderante por la fuente a la que se encuentre más próxima, ya que se aprecia una escasa influencia de la fuente sismogénica intraplaca de profundidad intermedia en el cálculo del peligro sísmico para puntos localizados en el centro de la Región Metropolitana de Santiago, específicamente bajo el valle central. A través de las curvas de probabilidad se observa que para un mismo período de vida útil analizado, existe un decaimiento en el valor de la intensidad obtenida con un cierto porcentaje de probabilidad de ocurrencia, a medida que avanzo hacia el este de la Cuenca. Se debe mencionar que las curvas de probabilidad de excedencia de intensidad, se generan para una coordenada en particular, y que por razones comparativas se presentan para los 4 períodos de vida útil analizado. Sin embargo, el resultado de la metodología antes descrita, tangible a través de los mapas de peligro sísmico, representan las isosistas de toda el área metropolitana, pues el programa permite generar una integración y cobertura total del área, a partir de probabilidades acumulativas obtenidas para algunas localidades. En cuanto a la definición de las fuentes sismogénicas, se debe concluir que su modelamiento repercute directamente en la evaluación del peligro sísmico, observándose que las 105 variaciones que se presentan en el valor de las intensidades obtenidas para un mismo porcentaje de probabilidad, son mínimas, pero sí se observan en algunos casos traslapos en las curvas de probabilidad, que manifiestan cambios en la influencia de las fuentes sobre la localidad analizada. En el caso de la fuente sismogénica tipo intraplaca de profundidad intermedia, se hizo el cálculo según dos modelos analíticos, con el objeto de comparar y evaluar las diferencias obtenidas mediante ambos casos. En el primer caso la fuente intraplaca se modeló con una sola pendiente de inclinación, desde los 50 Km. hasta aproximadamente los 200 Km. de profundidad, con una pendiente promedio de 25º E. Con esta representación se obtiene una predominancia de esta fuente para puntos localizados en el centro de la Región Metropolitana de Santiago, en segundo lugar la fuente interplaca y en tercer lugar la fuente cortical, como se muestra en el grafico Nº 5.7. Para una coordenada al oriente de la Cuenca, se observa predominio de la fuente cortical, en segundo lugar la fuente intraplaca y por último de la interplaca. Y para el caso de las curvas de probabilidad de ocurrencia realizadas para un punto ubicado en la costa se observa mayor influencia de la fuente interplaca thrust, al igual que en el grafico Nº 5.3 y 5.4, en segundo lugar la fuente intraplaca y en tercer lugar de predominancia la fuente cortical cordillerana. Lo anteriormente descrito, se presenta en los gráficos Nº 5.8 y 5.9, correspondiente a curvas de localidades ubicadas en un sector cordillerano, y otro en el sector poniente de la Región Metropolitana, respectivamente. Es decir, como se puede apreciar mediante la comparación de las curvas para ciertas localidades, el hecho de representar la fuente intraplaca de profundidad intermedia con dos tramos de inclinación generó una escasa importancia de dicha fuente sobre el cálculo del peligro sísmico en la cuenca, alterando el efecto de ésta frente a la acción de las otras fuentes sismogénicas. 106 Grafico Nº 5.7: Curva de probabilidad de ocurrencia para 50 años, coordenada (-33.5; -70.65). Curvas resultantes de la modelación de la fuente con un tramo de inclinación. Curva de probabilidad de Ocurrencia, periodo de 50 años, Pto (-33,5; -70,65) 1,0E+00 9,0E-01 Probabilidad [%] 8,0E-01 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Intensidad [IMM] Conjunto Interplaca Intraplaca Cortical Grafico Nº 5.8: Curva de probabilidad de ocurrencia para 50 años, coordenada (-33.5; -70.2). Curvas resultantes de la modelación de la fuente con un tramo de inclinación. Curva de probabilidad de Ocurrencia, periodo de 50 años, Pto (-33,5; -70,20) 1,0E+00 9,0E-01 Probabilidad [%] 8,0E-01 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 Conjunto 3 4 5 6 Intensidad [IMM] Interplaca 107 7 Intraplaca 8 9 Cortical 10 Grafico Nº 5.9: Curva de probabilidad de ocurrencia para 50 años, coordenada (-33.5; -71.50). Curvas resultantes de la modelación de la fuente con un tramo de inclinación. Curva de probabilidad de Ocurrencia, periodo de 50 años, Pto (-33,5; -71,50) 1,0E+00 9,0E-01 Probabilidad [%] 8,0E-01 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Intensidad [IMM] Conjunto Interplaca Intraplaca Cortical Para conocer el efecto de las leyes de atenuación sobre el cálculo del peligro sísmico, se obtuvieron las curvas de probabilidad para algunos puntos pertenecientes a la Región Metropolitana de Santiago, modificando las relaciones de atenuación consideradas en el cálculo. Con el fin de comparar los resultados y concluir acerca de las diferencias obtenidas, analizando cuan sensible es la evaluación de la amenaza respecto de las curvas de atenuación empleadas. Por ejemplo, se analizaron algunos de los puntos haciendo correr el programa de Cálculo del Peligro Sísmico, utilizando la formula de atenuación de Barrientos. Para analizar lo expuesto en el párrafo anterior, se recurre a dos gráficos, ambos resultados del peligro sísmico en un punto ubicado en la costa, o sector poniente de la cuenca. Los gráficos Nº 5.10 y 5.11, corresponden a curvas de probabilidad de que se exceda en un 5% el valor de la intensidad obtenida, para un período de vida útil de 100 años. El primer grafico es el resultado de emplear la ecuación de Barrientos como atenuación de las tres fuentes, mientras que el segundo corresponde a utilizar la curva de atenuación de Barrientos, sólo para la fuente cortical, manteniendo para las otras 2 fuentes las ecuaciones obtenidas en este trabajo, correspondientes a las Ec. 4.8 y 4.9 respectivamente. 108 Grafico Nº 5.10: Curva de probabilidad de ocurrencia para 100 años, coordenada (-33.5; 71.50). Se empleó la Curva de Atenuación de Barrientos para las 3 fuentes sismogénicas. Punto (-33,5, -71,5), Periodo de vida util 100 años, Atenuacion Barrientos 1,0E+00 9,0E-01 8,0E-01 Probabilidad [%] 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Intensidad [IMM] conjunto Interplaca Intraplaca Cortical Grafico Nº 5.11: Curva de probabilidad de ocurrencia para 100 años, coordenada (-33.5; 71.50). Curva de Atenuación Mixta, se empleó las ecuaciones encontradas en este trabajo para las fuentes thrust e intraplaca, y la ecuación de Barrientos para la fuente cortical cordillerana. Punto (-33,5, -71,5), periodo de vida util 100 años, Atenuacion Mixta 1,0E+00 9,0E-01 8,0E-01 Probabilidad [%] 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 3 4 5 6 7 8 9 Intensidad [IMM] conjunto Interplaca 109 Intraplaca Cortical 10 Para fines comparativos, se hace necesario presentar las curvas de probabilidad versus intensidad para el mismo período de vida útil que el considerado en los gráficos Nº 5.10 y 5.11, es decir, a continuación se muestran las curvas correspondientes al cálculo del peligro sísmico en la misma coordenada para la cual se generaron los dos gráficos anteriores, con la diferencia que en el grafico Nº 5.12 se emplearon las curvas de atenuación obtenidas en este trabajo para las 3 fuentes sismogénicas. Grafico Nº 5.12: Curva de probabilidad de ocurrencia para 100 años, coordenada (-33.5; 71.50). Se emplearon las curvas de atenuación correspondientes a las ecuaciones 4.8, 4.9 y 4.10, de este trabajo. Curvas de probabilidad de ocurrencia de IMM, para 100 años de vida util 1,0E+00 9,0E-01 Probabilidad [%] 8,0E-01 7,0E-01 6,0E-01 5,0E-01 4,0E-01 3,0E-01 2,0E-01 1,0E-01 0,0E+00 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Intensidad [IMM] Conjunto Interplaca Intraplaca Cortical La influencia de las fuentes sismogénicas, se ve alterada frente al cambio de las curvas de atenuación que se consideren para la evaluación del peligro sísmico. Se observa mayor similitud en el caso en que se empleó la curva de atenuación propuesta por Barrientos, igual para las tres fuentes (Grafico Nº 5.10), y el grafico Nº 5.12, en el cual se presentan los resultados de obtener un 5% de probabilidad de que un cierto valor de IMM sea superado, mediante las ecuaciones determinadas en el capítulo Nº 4 del presente trabajo. Al comparar los tres últimos gráficos, se desprende el hecho de que el valor de IMM para el porcentaje de probabilidad considerado, es mayor en el caso de emplear las ecuaciones de atenuación establecidas en esta memoria de titulo, debido a que se crearon considerando la existencia de tres fuentes sismogénicas independientes y con características individuales y diferentes entre sí. El hecho de caracterizar las fuentes intraplaca de profundidad intermedia y la fuente cortical de forma independiente, genera importantes fluctuaciones en el valor de las intensidades alcanzadas por sus efectos individuales, desplazando las curvas de probabilidad hacia la izquierda de una curva obtenida mediante la consideración de que los eventos forman parte de una misma 110 fuente generadora, como es el caso del concepto empleado en la obtención de la curva de atenuación de Barrientos en 1980. En conclusión, las curvas de probabilidad presentadas anteriormente, no sólo permiten realizar comparaciones acerca de la influencia de las fuentes sobre un determinado sitio, ni obtener resultados a partir de ellas como valores de intensidades excedidas con un cierto porcentaje de probabilidad, si no que por sobre todo permiten establecer la importancia fundamental de las leyes de atenuación consideradas para cada fuente, y la implicancia que dichas curvas producen en el peligro sísmico de una cierta localidad. De acuerdo al mapa de peligro sísmico de la Región Metropolitana, obtenido para un período de vida útil de 10 años y según efecto conjunto de las 3 fuentes, se puede concluir, como lo muestra la figura B.4 del Anexo B, que el valor de IMM dados por las isosistas decrece hacia el este. Se observa predominio de la fuente interplaca, reportando los valores de intensidad mayores en el sector poniente de la Región, es decir coincidiendo con la localización de la fuente tipo thrust. Específicamente sobre la Cuenca de Santiago aparece la influencia de la fuente intraplaca, presentando un aumento de la intensidad en este sector, para luego continuar decreciendo hacia la cordillera. En comparación con el trabajo antecesor a este en la misma línea investigativa, se debe mencionar la similitud en el rango de intensidades alcanzadas en esta misma área. En el trabajo de Romanoff, la máxima intensidad se presenta en el límite regional colindante a la zona costera, presentando una IMM de 7.5 y en el presente trabajo se obtuvo una máxima IMM de 7.2, decayendo hacia el este, hasta IMM cercanas a 6.8, lo que se observa en ambos trabajos En relación al mapa de peligro sísmico de la Región Metropolitana, obtenido para un período de vida útil de 50 años y considerando la acción de las 3 fuentes, se puede concluir que las isosistas decrecen sostenidamente hacia el este, comenzando con una intensidad del orden de los VII ½ hasta cerca de los VII grados en el sector cordillerano. Predomina la acción de la fuente interplaca, pero apareciendo la influencia de la fuente cortical sobre la Cuenca de Santiago, como lo muestra la figura B.5 del Anexo B. Con respecto al mapa de la figura B.4, se observa el aumento de las intensidades, con lo cual se corrobora lo obtenido por las curvas de probabilidad, es decir, a mayores períodos considerados para la evaluación, el peligro sísmico en una misma región, aumenta. Al comparar este mapa con el obtenido en el trabajo de Romanoff, se observan coincidencias en los valores limites de IMM alcanzados, presentando valores en la costa de 8.5, y en el sector cordillerano 7.5, mientras que en el mapa de la figura B.4, los rangos de IMM fluctúan entre 8.4 y 7.5. Otra característica que se repite en ambos trabajos, en particular en los dos mapas generados a partir del efecto conjunto de las fuentes, es que las isosistas se presentan paralelas entre si, con orientación norte-sur desde los 71º L.W al oeste, mientras que al este de Talagante las isosistas se desordenan, disponiéndose de forma semi concéntricas, elipsoidales. De acuerdo al mapa de peligro sísmico de la Región Metropolitana, obtenido para un período de vida útil de 10 años y según efecto individual de la fuente interplaca, se puede concluir, como lo muestra la figura B.6 del Anexo B. que el valor de las isosistas decae sostenidamente de costa a cordillera. Se observa claro predominio de la fuente interplaca. Otro aspecto que aparece en este mapa, es el ordenamiento paralelo de las isosistas, las cuales se aproximan entre sí hacia el este de la región en estudio. El mayor valor de intensidad que se observa en este mapa, corresponde a un valor de IMM levemente superior a los VII. 111 A partir del mapa de peligro sísmico de la Región Metropolitana, obtenido para un período de vida útil de 10 años y según efecto individual de la fuente intraplaca de profundidad intermedia, se puede concluir, que el valor de las intensidades asociado a las isosistas, decae hacia el este, pero no de forma paulatina, sino más bien, como lo muestra la figura B.7 del Anexo B, se observa una leve alza de las intensidades en el sector central de la zona abarcada, para luego decaer hacia el tramo cordillerano. Resulta lógico, entonces, que el peligro sísmico producto de la fuente intraplaca, sea mayor sobre la región bajo la cual se sitúa, decreciendo levemente hacia la costa y hacia la cordillera. Las formas en las que se distribuyen las isosistas, son paralelas entre sí, pero el espaciamiento entre ellas no sigue un patrón de ordenamiento, como en el mapa de amenaza de la figura B.6. El rango de intensidades producidas para este período de vida útil, y considerando sólo la influencia de la fuente intraplaca de profundidad intermedia, es inferior a los valores obtenidos en el mapa anterior, generado considerando sólo la fuente tipo thrust. De acuerdo al mapa de peligro sísmico de la Región Metropolitana, obtenido para un período de vida útil de 10 años y según efecto individual de la fuente cortical se puede concluir, como lo muestra la figura B.8 del Anexo B, que las isosistas aumentan su valor de IMM a medida que se acercan a la zona cordillerana, esto debido a la cercanía con la fuente sismogénica generadora, dejando sentir el efecto de la fuente cortical en la zona ubicada al este de Talagante y San Bernardo. Al oeste de estas localidades, las isosistas se ordenan paralelas entre si, acercándose las unas a las otras, y presentando mayores intensidades, pero al este de la Cuenca se presenta un ordenamiento diferente de las isosistas. En general se observa que las intensidades, decrecen hacia la costa y hacia el lado trasandino. El rango de intensidades alcanzadas varía entre los III ½ y VII, en el sector poniente y oriente respectivamente. En ubicaciones noreste y sureste de la cuenca, aparecen isosistas semi elipsoidales cuyos valores decrecen a medida que se aproximan a la Cuenca de Santiago. En relación al mapa de peligro sísmico de la Región Metropolitana, obtenido para un período de vida útil de 50 años y según efecto individual de la fuente interplaca, se puede concluir que el valor dado por las isosistas aumenta sostenidamente hacia el este de la zona estudiada, además de observar el ordenamiento de las curvas, paralelas entre si, y orientadas de norte a sur, como lo muestra la figura B.9 del Anexo B. Se puede apreciar en este mapa el aumento del valor de intensidades alcanzado, en relación al mismo escenario planteado en el mapa B.6, pero aumentando el período de vida útil considerado en la evaluación de la amenaza, alcanzando intensidades de VIII ½ en el tramo costero, hasta cerca de VI ½ en el este. Del mapa de peligro sísmico de la Región Metropolitana de Santiago, obtenido para un período de vida útil de 50 años y según efecto individual de la fuente intraplaca, se puede concluir, como lo muestra la figura B.10 del Anexo B que las isosistas se ordenan paralelamente en forma decreciente hacia el este. No se observa un aumento de las intensidades bajo la fuente intraplaca, ni tampoco el decaimiento hacia la costa y cordillera observado en el caso análogo pero para el periodo de 10 años. El decaimiento del valor de IMM es paulatino, registrando intensidades del orden de los V hasta cerca de los IV. A partir del mapa de peligro sísmico de la Región Metropolitana, obtenido para un período de vida útil de 50 años y según efecto individual de la fuente cortical se puede concluir, como lo muestra la figura B.11 del Anexo B el mismo comportamiento observado en el mapa dado por la figura B.8, presentando un aumento de las intensidades hacia el sector este de la región en estudio, decayendo hacia la costa y hacia el lado Argentino. La forma de las isosistas 112 obtenidas es idéntica al caso anterior, pero presentando un rango de IMM superior al calculado en el mapa B.8, fluctuando entre IV y VII ½. Se observa, a través del set de mapas que el valor de las isosistas decrece de costa a cordillera, debido al efecto predominante de la fuente interplaca, ya que la atenuación de la intensidad aumenta a medida que el sitio se aleja de la fuente, como se observa numéricamente a través de las curvas de atenuación determinadas. Además de concluir que el peligro sísmico aumenta cuando se consideran mayores períodos de vida útil. Así como también se desprende de los mapas, que al considerar mayores períodos de vida útil, el efecto de la fuente cortical cordillerana se hace sentir al este de Talagante y San Bernardo. Al realizar los mapas de Peligro Sísmico para un periodo de vida útil de 100 años con un 5% de probabilidad de ocurrencia, se obtienen un incremento en el valor de IMM, pero se conserva el mismo comportamiento de las isosistas que en los mapas análogos pero con periodos de vida útil de 10 y 50 años. Es así, como por ejemplo para el mapa generado por efecto conjunto se obtiene un rango de intensidades que fluctúa de costa a cordillera entre los 9.4 y 8.1 grados de IMM, para el mapa producido solo considerando la acción de la fuente interplaca tipo thrust, se presentan intensidades que varían desde los 9.4 a los 7.1 grados de IMM, en el caso del mapa de amenaza generado por acción de la fuente intraplaca de profundidad intermedia el rango de intensidades disminuye, pero es mayor al presente en el mapa de la figura B.7 y B.11, alcanzando valores de IMM comprendidos entre los 5.1 y 4.1, presentando un decaimiento del valor de las isosistas hacia la cordillera pero no sostenido, pues en el valle central existe un leve aumento de las intensidades para luego continuar el decaimiento hacia el este. Por último, para el mapa de peligro sísmico obtenido considerando sólo la fuente cortical, los valores de intensidades arrojadas corresponden a valores de 4.2 en la costa hasta valores cercanos a 8.7 en el sector precordillerano. En general, es posible apreciar que se llega a mayores valores en la zona costera que hacia el interior de continente, probablemente debido al efecto de los terremotos interplaca. Efecto que en los trabajos anteriores probablemente no fue considerado en forma adecuada al no considerar en forma independiente los diferentes tipos de sismos. También se observa en algunos de los mapas que se presentan en el Anexo B, que el ancho de las curvas de iso-intensidad va aumentando de Oeste a Este, efecto causado por la influencia de los sismos intraplaca de profundidad intermedia y los de tipo cortical, presentes en el flanco oriental de la zona en estudio. Es posible verificar que la fuente interplaca tipo thrust es la que modula el peligro sísmico en Chile Central, produciendo los mayores valores de IMM en la costa. Pero, tanto la fuente intraplaca de profundidad intermedia como la cortical tienen influencia sólo en el sector de la Cuenca de Santiago; todo ello redunda en un aumento de los valores esperados en la zona del valle central de la Región Metropolitana. Esta intrascendencia de la fuente intraplaca, que se concluye al no observar un aumente notorio de las intensidades en las zonas situadas sobre la localización de esta fuente sismogénica, se puede deber a la modelación de esta fuente, y no se cree atribuible a la ecuación de atenuación empleada, ya que se obtuvo resultados similares en el trabajo antecesor de peligro sísmico en esta misma región, empleando la ecuación de Barrientos, para las tres fuentes. Es posible verificar que los mapas de isosistas reflejan la atenuación de la energía sísmica en función de la distancia, mostrando tendencias elipsoidales debido a la heterogeneidad del medio. Esta forma de tendencias geométricas de ordenamiento de las isosistas es común de 113 aquellos sismos de origen subductivo, como es el caso de los eventos pertenecientes a este estudio. Otro aspecto que se desprende de la observación de las isosistas, es el ordenamiento cuasi paralelo a la línea costera. Esta disposición se observa repetidamente en la mayoría de los mapas de peligro sísmico generados, pudiendo observar a lo largo de las latitudes involucradas cómo se distribuyen las curvas de iso intensidades alineándose con el margen de la costa, levemente arqueadas. Un aspecto que cabe hacer notar es el hecho que las fuentes corticales usualmente no presentan una sismicidad homogénea, sino más bien concentrada en torno a fallas sísmicamente activas. Ello no es reflejado por las metodologías utilizadas en este trabajo debido a la falta de información a este respecto. Es necesario realizar un estudio más detallado de este fenómeno para poder estimar el peligro sísmico en la zona urbana de Santiago con mucha mayor precisión. Al igual que como se había demostrado anteriormente, en este trabajo se concluye que el peligro sísmico obtenido cuando se considera la acción conjunta de las fuentes sobre un determinado lugar, no es igual a la combinación lineal de las tres fuentes individuales, como tampoco es la suma ni multiplicación de ellas, sino que más bien, corresponde al efecto de la fuente interplaca tipo thrust, con una mínima influencia de la fuente intraplaca de profundidad intermedia y un leve incremento de las intensidades en el sector cordillerano, debido a la presencia de la fuente cortical superficial. Se plantea además al término de este trabajo la ventaja de contar con un programa computacional que permita calcular el Peligro sísmico en cualquier zona de interés, el cual se encuentra aun en etapa de perfeccionamiento, y requiere que las futuras investigaciones en esta línea puedan entregar como input datos que se hayan actualizado incorporando nuevos antecedentes, y quizás otras variables como el tipo de sitio de una cierta localidad. Como ha quedado demostrado, es imprescindible, entonces, ampliar el conocimiento principalmente de los eventos de tipo intraplaca de profundidad intermedia y corticales, con el fin de conocer como las intensidades que dichos sismos ocasionan, decaen en función de la distancia con respecto al foco. Esto tendiente a caracterizar de mejor forma ambas fuentes sismogénicas, lo que permita crear curvas de atenuación consideradas validas, tanto para los grandes eventos como para los de baja magnitud, con el propósito de obtener estimaciones más certeras del peligro sísmico, extendiendo el área de evaluación, y procurando no subestimar el efecto de dichas fuentes, sobre una determinada localidad. 114 CAPÍTULO 6 6.1 EFECTO DE SITIO ANTECEDENTES GENERALES La modificación de la señal sísmica debida a la influencia de las condiciones geológicas y topográficas durante o después de un terremoto, se conoce como efecto local. Esta modificación consiste en la amplificación fuerte de la señal así como una mayor duración de la misma y la modificación de su contenido frecuencial. Este efecto consiste, en términos generales, en cambios en el contenido de frecuencia de los movimientos del suelo esperados, que usualmente implican amplificaciones en ciertas zonas del espectro de respuesta. Es decir, el efecto de sitio o amplificación de suelos, es un fenómeno que se entiende como la amplificación sísmica o patrón de daño generado durante un evento, los cuales presentan variaciones de un lugar a otro, lo cual se explica por las propiedades geotécnicas del subsuelo y del basamento rocoso. Es imprescindible conocer el comportamiento del suelo frente a una solicitación sísmica y ver como afecta esta respuesta a una estructura fundada sobre dicho terreno, es decir comprender lo que se conoce como interacción suelo- estructura. Para ello se debe recoger antecedentes de varias disciplinas de la ingeniería como es el área de la geomecánica y geología, las cuales aportarán con estudios especializados y nuevos antecedentes acerca de la composición geomorfológica de la zona de interés de este trabajo. Para las estimaciones del Peligro Sísmico se utilizan las curvas de atenuación de la intensidad obtenidas en el capítulo anterior para cada fuente sismogénica, correspondiente a las ecuaciones 4.8, 4.9 y 4.10, las cuales derivan de los datos registrados en diversos tipos de terreno, por lo que se hace necesario para realizar una mejor evaluación del peligro sísmico en la región de estudio de este trabajo, estudiar el efecto de sitio en las localidades donde se tenga la suficiente información, o asimilar los resultados a un determinado tipo de suelo. El presente capítulo aborda el efecto de sitio, en particular para la fuente sismogénica tipo Interplaca, la que debido al gran terremoto de fines del siglo pasado, el segundo más grande en afectar a la zona de estudio, luego del ocurrido en 1906, permite contar con una gran cantidad de información dirigida al conocimiento de este tipo de eventos de origen interplaca tipo thrust. 6.2 MOTIVACIÓN La amplificación de las ondas sísmicas debido a las características propias de suelo en un determinado lugar es uno de los parámetros más relevantes en la distribución de daños producto de un gran sismo. Una serie de trabajos han puesto en evidencia que las amplificaciones producidas suelen depender fuertemente de la frecuencia característica de las ondas sísmicas y del tipo de suelo. El presente estudio tiene como objetivo investigar y comparar los rangos de variaciones en intensidades en algunos suelos pertenecientes a localidades afectadas por el Terremoto de 115 1985. Este trabajo permitirá seguir avanzando en nuestro conocimiento sobre la respuesta sísmica del suelo, y de esta manera, aminorar los terribles efectos de los terremotos en Chile. 6.3 INFLUENCIA DEL EFECTO DE SITIO En la respuesta a grandes terremotos hay una fuerte influencia de las condiciones del sitio en cuestión, efecto conocido por casi 200 años cuando fue puesto en evidencia por los diferentes comportamientos en las cercanías a los ríos Mississippi y Ohio, comparados con emplazamientos más elevados, durante las secuencias sísmicas de New Madrid de 1811-1812 (Drake, et al.1815, p. 82). Casos similares de la influencia del sitio fueron detectados por el gran terremoto de Japón de 1891 (Milne, et al. 1898), el terremoto de San Francisco de 1906 (Wood, et al. 1908) y el terremoto de Long Beach de 1933 (Wood, et al.1933). Una gran parte del daño ocasionado por el terremoto de 1989 de Loma Prieta fue directamente atribuido al efecto de sitio (Holzer, et al. 1994), al igual que los efectos del terremoto de 1994 en Northridge, produciendo sectores con una gran cantidad de daño a menos de 1 Km. de regiones que prácticamente no sufrieron mayores destrozos en la ciudad de Los Ángeles (Wald & Mori, et al. 2000). Santiago no es una excepción en este tipo de comportamiento, mostrando una gran diferencia en los daños de 0.5 a 2 puntos de diferencia en Intensidad de Mercalli Modificada, en áreas cercanas al epicentro del terremoto de 1985 de Valparaíso (Astroza & Monge, et al.1989; y Menéndez, et al.1991), como se corroborará en el desarrollo de este capítulo. 6.4 DESARROLLO 6.4.1 BASE DE DATOS Para realizar un estudio del fenómeno de respuesta de sitio en las latitudes que abarca la región estudiada en este trabajo, y en particular analizar los efectos de los terremotos interplaca, se recurrió al estudio realizado por Menéndez en 1991, en relación al terremoto de Valparaíso ocurrido el 03 de Marzo de 1985, donde se analizó la atenuación de las intensidades ocasionadas por este evento en función de la distancia a la zona de ruptura y del tipo de suelo presente en las distintas localidades afectadas. Este terremoto ha sido clasificado como una falla inversa de bajo ángulo de manteo, registró una magnitud de Richter igual a Ms= 7.8, reportándose el epicentro a 20 Km de la costa y a 15 Km de profundidad focal. Llamó la atención en este terremoto el desplazamiento de las curvas isosistas al Este de la zona de ruptura, además de presentar una propagación de la ruptura en dirección norte sur. En el estudio de Menéndez, se empleó un banco de datos que contempló las ciudades afectadas por el terremoto, es decir, desde Illapel a Parral. Los antecedentes provienen de 42 memorias para optar al título de Ingeniero Civil de la Universidad de Chile, y de un estudio realizado por Maximiliano Astroza y Joaquín Monge en la zona de Choapa, y en la región cordillerana. También se utilizó un proyecto MINVU, el cual aportó con registros más completos de la comuna de San Antonio. Todos los datos antes mencionados, se encuentran recopilados en detalle en la base de datos del trabajo de Menéndez, los que permitieron tener la ubicación de cada localidad respecto al epicentro y sus características locales, las cuales influyen en el grado de intensidad. La base de 116 datos corresponde a más de 450 reportes de localidades afectadas por este terremoto, en cada una de ellas se especifica las coordenadas del sitio, la distancia epicentral e hipocentral en kilometros y la intensidad reportada. Los antecedentes empleados en el desarrollo del presente capítulo, se presentan íntegramente en el Anexo A, parte A.2. 6.4.2 ATENUACION DE INTENSIDADES DEL TERREMOTO DE VALPARAISO DE 1985 Para comparar y analizar la variación del grado de intensidad reportado según el tipo de suelo de las localidades afectadas en el terremoto de 1985, del trabajo de Menéndez se recogen los datos que se presentan en la tabla Nº 6.1 Y 6.2. Con estos datos se obtuvieron las ecuaciones de atenuación de intensidad, según terreno en grava o roca. Tabla Nº 6.1 Atenuación de la Intensidad en Roca, en localidades fundadas en Roca d┴ [Km] Localidad Intensidad en Roca Quintero 7.0 27.54 Valparaíso 7.5 21.93 Algarrobo 7.0 25.37 El Quisco 7.5 24.25 El Tabo 7.0 27.13 Cartagena 6.5 36.53 Pichilemu 6.3 10.91 Coya 5.0 162.34 San Gabriel 5.0 188.82 Farellones 5.0 170.18 Río Blanco 5.0 164.62 Tabla Nº 6.2 Atenuación de la Intensidad en Roca, en localidades fundadas en Grava d┴ [Km] Localidad Intensidad en Roca Santiago 6.0 137.74 Peñaflor 6.5 113.99 Talagante 6.5 111.41 El Monte 6.5 104.49 Isla de Maipo 6.5 116.82 Buín 6.0 134.65 Paine 6.0 136.42 Rapel 7.0 30.11 Lo Miranda 6.0 130.36 Rancagua 6.0 142.38 Doñihue 6.5 118.33 Las Cabras 6.5 83.33 Requinoa 6.0 137.58 Coltauco 6.5 108.83 Peumo 6.5 101.5 117 Con la información anterior, se obtuvo en esa ocasión las conclusiones que se presentan a continuación, algunas de las cuales se pretenden cotejar en este estudio: Los depósitos de grava presentan un aumento entre 0.5 - 1.0 grados respecto de 7.2.3 roca. Los depósitos coluviales, presentan en general un aumento de intensidad entre 1.0 7.2.4 – 2.0 grados respecto de la intensidad estimada en roca. 7.2.5 Los depósitos de cenizas ignimbríticas pumicíticas, presentan un aumento de la intensidad respecto a la roca entre 1.5 y 2.0 grados en la zona comprendida entre Santiago y San Pedro, y de 0.5 a 1.0 grado en la zona comprendida entre Itahue y Parral. Los depósitos lacustres presentan un aumento de la intensidad respecto a la roca de 7.2.6 aproximadamente 2 a 2.5 grados. Para determinar la atenuación de la intensidad con la distancia a la zona de ruptura, se calculó la distancia de cada localidad o sector donde se tiene información de intensidad en roca, a la línea media epicentral (d┴). La necesidad de calcular la distancia respecto a esta línea y no respecto del epicentro, obedeció a la forma elíptica del área de replicas y de las isosistas obtenidas, lo que se tradujo como que la energía no se disipó en un solo punto. Con los valores de las intensidades reportadas en las localidades de la base de datos elaborada por Menéndez para el terremoto de 1985, existen sitios ubicados en roca y en grava, para los cuales se calcularon las distancias a la línea media epicentral, obteniendo en ese trabajo la Atenuación de la Intensidad en Roca y en Grava, resultando la ecuación Nº 6.1 y 6.2, respectivamente. (Ec. 6.1) I = 9.99 – 2.13 * log (d┴) La ecuación 6.1 permite obtener la relación de atenuación en roca en función de la distancia media epicentral, si se prefiere para fines comparativos con otros autores. Al incluir las localidades fundadas en grava, resultó la Atenuación de la Intensidad en Roca corregida y aplicable a terrenos gravosos. Que es la relación que se presenta en la ecuación Nº 6.2. (Ec. 6.2) I = 9.24 – 1.52 * log (d┴) 6.4.3 METODOLOGIA GENERAL En primera instancia se considerará el valor de las intensidades reales del terremoto de 1985, para ello se recurrió al trabajo de recopilación de Araya et al.2006, el cual posee una base de datos de todas las localidades con intensidades reportadas y sus respectivas coordenadas. Posteriormente, con la ley de atenuación encontrada por Menéndez en 1991, determinada exclusivamente para el terremoto de Valparaíso del 85, se corregirán las observaciones hechas. Es decir, se toma el valor real observado y reportado en la base de datos presente en el Anexo A.2, y se le sustrae el valor teórico obtenido con la ley de atenuación en roca y grava de la ecuación determinada por Menéndez, a través de las ecuaciones 6.1 y 6.2. 118 La diferencia entre ambos valores de IMM, se traduce como las amplificaciones o deamplificaciones por efecto de sitio. Esto se expresa en cambios de intensidad (∆ IMM). Los valores obtenidos representan el efecto de sitio empírico, los cuales se pueden correlacionar con otras observaciones geofísicas, como estimaciones de la velocidad de ondas en la parte superficial, entre otros temas que no se abordarán en este capítulo. Es necesario en particular para este terremoto, tener claro el concepto de distancia a la línea media epicentral ( D┴ ), para el posterior cálculo de las intensidades teóricas en suelos tipo roca y grava, la cual se obtiene empleando las ecuaciones Ec. 6.3. a Ec. 6.7. Ecuación de la línea media epicentral, Ec.6.3. Latitud = 5.144 x longitud – 37.410,1 [Km] (Ec. 6.3) Recurriendo a las siguientes equivalencias: 1º latitud = 111,18 [Km] y 1º longitud = 111,18 x cos (º lat) [Km] La línea media epicentral corresponde a la línea que pasa por el epicentro reportado del terremoto de 1985, y sigue la inclinación del plano de falla con rumbo N 11º E. Esta línea se extiende desde Quintero hasta Pichilemu, pasando por el epicentro, es decir pasando por el punto de coordenadas 33,217º S y 71,87º W. Esto se esquematiza en la figura Nº 6.1. Previo al calculo de la distancia a la línea media epicentral, se requiere obtener las coordenadas del punto donde la corta perpendicularmente. Esto se expresa a través de la ecuación 6.4 y 6.5. long M lat S + 0.194 ⋅ long S + 37410.1 = [km] 5.338 lat M = 0.964 ⋅ lat S + 0.187 ⋅ long S − 1346.86[km] (Ec. 6.4) (Ec. 6.5) Siendo, Lat M, Long M = Coordenadas geográficas del punto que corta la línea perpendicular a la línea media epicentral. Expresada en [Km]. Lat S, Long S = Coordenadas geográficas de un punto, o localidad cualquiera del reporte de la base de datos. Expresada la coordenada en valor absoluto y aplicándole el factor de corrección a [Km]. Se denomina entonces: ∆ Lat = (Lat M - Lat S) , ∆ Long = (Long M - Long S) 119 (Ec. 6.6) Luego se calculan las coordenadas del punto donde la costa es perpendicular a la línea media epicentral, que corresponde a la distancia a la línea media epicentral. Ver Ec. 6.7. d┴2 = ∆ Lat 2 - ∆ Long 2 . (Ec. 6.7.) Línea Media Epicentral N 20 Costa M d┴ S 11º Sitio reportado Figura Nº 6.1: Esquematización de la Línea media epicentral para el terremoto de 1985. Teniendo las distancias a la línea media epicentral, calculada para todas las localidades reportadas en la base de datos, se pueden obtener las intensidades en roca y en grava, dadas por Menéndez según las ecuaciones 6.1 y 6.2, respectivamente, y representadas en el grafico Nº 6.1 Grafico Nº 6.1: Atenuación de Menéndez dependiendo del tipo de suelo para intensidades del Terremoto de 1985. 120 Atenuacion de Intensidad Terremoto de 1985, Trabajo de Menendez 8 7 Intensidad 6 5 4 3 2 0 50 100 150 200 Distancia a la linea media epicentral [km] Atenuacion en Roca Atenuacion en Grava Una vez realizado el cálculo de las distancias a la línea media epicentral, y de aplicar la ecuación de atenuación de intensidad en roca y grava, se procede a calcular la diferencia entre los valores de intensidad reportada y la teórica obtenida mediante las ecuaciones de atenuación del trabajo de Menéndez (Ec. 6.1 y 6.2) y la calculada en el presente estudio, para eventos tipo thrust (Ec.4.8). Dicha diferencia es atribuible al efecto de sitio teórico, es decir, al tipo de suelo correspondiente a la localidad reportada. Se procede posteriormente a conocer la desviación estándar de los datos y conocer los grados de amplificación y/o deamplificación de la intensidad (IMM), con respecto a la intensidad observada, dependiendo del suelo de la localidad en donde existe reporte, como se presenta en la tabla Nº 6.3. Tabla Nº 6.3 Atenuación Intensidades Terremoto de 1985 Autor Suelo Var. IMM Desv. Estándar Menéndez, Pilar Este trabajo Roca 3,97 a -2,17 1,87 Grava 3,25 a -2,38 Suelo Tipo 3,70 a -1,20 1,31 1,42 Estas diferencias se visualizan en la figura Nº 6.2 que se presenta a continuación, es importante hacer notar que este efecto de sitio empírico corresponde al considerar solo el evento de 1985, esto es, un evento tipo interplaca; es posible que otro tipo de eventos, ya sea intraplaca de profundidad intermedia o cortical, produzca en el sitio una amplificación /deamplificación distinta. La Figura Nº 6.2 presenta los valores del efecto de sitio considerados en el presente estudio, con respecto a grava. La siguiente figura corresponde entonces, a un mapa con los factores de amplificación de la IMM, presentados por Menéndez y utilizados en este estudio, para las localidades emplazadas en terreno correspondiente a grava. El color es proporcional al incremento o disminución de la 121 IMM, tal como se presenta e interpreta según la escala ubicada en el borde superior de la figura 6.2. Se consideró la amplificación con respecto a grava pues se estimó que ello representa mejor una variación de los datos reportados en los catálogos Figura Nº 6.2: Mapa con los factores de amplificación para el terremoto de Valparaíso de 1985. Valores teóricos de efecto de sitio respecto a Grava. 6.4.4 METODOLOGIA ALGERMISSEN Y KAUSEL De acuerdo a los factores de respuesta de sitio específicos asociados al material superficial del sitio, determinados para Chile Central en el trabajo presentado en la Revista Geofísica por Algermissen y Kausel, et al. 1992, se observan los coeficientes de respuesta según el tipo de material del sitio, que se exponen en la figura Nº 6.3. 122 Los valores de respuesta de sitio indicados en el trabajo de 1992, fluctúan entre 1.5 y -2.0, interpretándose estos coeficientes como una acción amplificadora o deamplificadora de la respuesta del suelo frente a un evento sísmico, respectivamente. Para aplicar los coeficientes de respuesta de sitio a la zona de estudio del presente trabajo, se debe recurrir a identificar el respectivo valor dado por la figura Nº 6.3, y conocer el efecto que ejercen dichos factores, dependiendo del tipo de material o suelo en el que se emplaza la localidad en la cual se calculará el peligro sísmico. 123 Figura Nº 6.3: Factores de respuesta de sitio. Algermissen y Kausel, et al 1992. 124 Recurriendo a la malla definida en el capítulo anterior, se expresa en forma matricial el factor de respuesta de sitio, correspondiente al centro de cada celda del reticulado de la zona de estudio, obtenido mediante interpolación en los casos en que la coordenada se encontrara en la transición inmediata de dos o más colores, ponderando por el porcentaje de un determinado color en el área total de cada celda. Esto se presenta en la tabla Nº 6.4, en la cual se presentan los valores asociados a la respuesta de sitio. Tabla Nº 6.4 Factores de respuesta promedio asociados al material superficial, Algermissen y Kausel et al. 1992 cij 1 2 3 4 5 6 7 8 9 1 0.00 -1.35 -1.40 0.15 0.53 0.04 0.00 0.00 0.00 2 0.00 -1.50 -0.65 0.30 0.68 0.00 0.00 0.00 0.00 3 0.00 -1.00 -0.63 0.05 0.68 0.45 0.15 0.15 0.00 4 0.30 -0.48 0.45 0.15 0.60 0.15 0.15 0.00 0.00 6.5 RESULTADOS Y CONCLUSIONES Cuando la predicción de los eventos en una determinada zona, se realiza teniendo en cuenta sólo aspectos como la fuente y propagación de las ondas sísmicas, el movimiento queda caracterizado en roca o suelo duro, sin que intervengan efectos locales. Pero cuando el movimiento se produce en otro tipo de emplazamientos, por ejemplo, suelos con espesor variable de sedimentos o con ciertas irregularidades topográficas, es necesario tener en cuenta la influencia de las condiciones locales, esencialmente geología superficial y topografía, como factor integrante del movimiento. La respuesta y la magnitud de la amplificación de la señal están controladas principalmente por las propiedades geotécnicas de los materiales geológicos, especialmente por sus características dinámicas, así como el espesor de las capas y la profundidad a la que se encuentra el sustrato rocoso. Cuando se produce una sacudida sísmica se libera una gran energía de deformación almacenada. Esta energía se transmite por el interior de la tierra (rocas) en forma de ondas sísmicas que normalmente se atenúan con la distancia al foco emisor y con el tiempo. Sin embargo, cuando las ondas atraviesan determinados tipos de terrenos (por ejemplo suelos blandos, no consolidados) el movimiento o la señal de entrada se amplifican de forma muy relevante. Empíricamente, ha quedado demostrado que este efecto local, puede introducir un factor de amplificación altamente significativo. Por ejemplo, algunas de las conclusiones que se mencionarán es que los suelos blandos presentan baja frecuencia propia y tienden a amplificar más las frecuencias de este orden. Por ello, los factores de amplificación de los suelos, son mayores para aceleraciones espectrales de baja frecuencia. Del análisis estadístico, mediante la desviación estándar de los datos, y lo presentado en la figura 6.2, se concluye que en algunos sitios, producto de este terremoto, existen amplificaciones de más de 3 grados de intensidad, especialmente en la zona sureste de la región metropolitana, y valores inferiores a cero, es decir presentando deamplificaciones en el sector costero de las 125 latitudes abarcadas. Para la zona urbana de Santiago también se tienen importantes amplificaciones; pero es necesario un estudio mucho más detallado para cuantificar este efecto de manera más precisa. Como era de esperar, corroborándose en el grafico 6.1, se obtuvo una mayor tasa de atenuación para localidades emplazadas en roca, pues en suelos duros el decaimiento de la intensidad ocurre más rápido a medida que se incrementa la distancia hipocentral, que en suelos blandos. Esto debido a la composición del terreno, que al encontrarse más compacto, permite que las ondas sísmicas viajen a mayor velocidad a través de dicho estrato. Se corrobora, además a partir de este grafico, el hecho de que en grava los valores de intensidades reportados, son mayores que en roca, presentando diferencias entre 0.2 y 1.0 grados de IMM por sobre los valores presentados en roca, como se supuso por hipótesis en relacion a lo concluido en el trabajo de Menéndez. La curva de atenuación obtenida en este trabajo para eventos tipo thrust (Ec.4.5), no se generó para un tipo de suelo específico, si no que más bien se supuso que dicha curva era representativa de la atenuación experimentada en el tipo de suelo más abundante en la zona de estudio, es decir, para grava. Esta suposición, se confirma apropiada para este tipo de terreno, ya que coincide con el rango de diferencias para intensidades obtenido mediante la desviación estándar alcanzada con la curva de atenuación para suelo tipo grava obtenida para el terremoto de 1985, mediante el trabajo especializado realizado por Pilar Menéndez. Lo anterior, se demuestra a través de los valores de fluctuación de intensidades reportados en grava, atribuibles al efecto de sitio empírico presentados en la tabla Nº 6.3, los cuales concuerdan con lo experimentado en el Terremoto de Valparaíso, visualizado en la figura Nº 6.2. Con esta concordancia de valores, correspondientes a la diferencia entre la IMM observada en terreno, y la IMM calculada mediante la curva de atenuación dada por la ecuación 4.5, es posible plantear que esta ultima ecuación pueda ser asimilada a un tipo de suelo en particular, la grava. Dicha comparación y asimilación de que la curva de atenuación elaborada en este trabajo es representativa principalmente para suelos gravosos, se concluye solo mediante estimaciones estadísticas, ya que las curvas del grafico 6.1 no son comparable con la ecuación 4.5 aplicada a los datos del terremoto, ya que el primer par de curvas no se elaboró en base a la distancia hipocentral, si no que en función de la línea media epicentral, debido a la forma de las isosistas que presento este evento en particular. El mapa de factores de respuesta de sitio dado por Algermissen y Kausel, entrega un rango de fluctuaciones levemente inferior al obtenido a través de la diferencia de intensidades reportadas en las localidades afectadas por el Terremoto de Valparaíso de 1985, que se observa en la figura Nº 6.2, ya que para el estudio de este evento, la discretización de los suelos involucrados no se realizó con el nivel de detalle que el mapa elaborado en 1992. De acuerdo al mapa de coeficientes de respuesta asociados al material superficial promedio entregados por Algermissen y Kausel (figura Nº 6.3), se debe mencionar que por ejemplo en la Cuenca de Santiago, solo considerando el tipo de suelo presente, existiría teóricamente una amplificación de alrededor de 0.6 grados de intensidad de Mercalli. Ahora, aplicando este escenario a un terremoto histórico tipo thrust, se observa mediante la figura Nº 6.2, un incremento de la intensidad cercano a 3.0 grados, producto de este terremoto de Ms igual a 7.8, ocurrido en Valparaíso con un epicentro costero y profundidad focal cercana a 15 Km., es 126 decir el fenómeno de repercusión de un sismo en las localidades afectadas depende tanto de los parámetros sísmicos del terremoto en particular, como también de las condiciones geomorfológicos del área involucrada. Esta forma de estudiar y considerar el efecto de sitio puede incorporar zonas que han sido estimadas con pocos datos no siendo del todo representativas de la zona. Ello se puede apreciar claramente de la Figura 6.2 donde aparecen sectores con una gran cantidad de datos (la zona urbana de Santiago) en contraste con otras en las cuales se tienen muy pocas observaciones (como, por ejemplo, la zona cordillerana). En la tabla Nº 6.4, se presentan correcciones en el valor de Intensidad desde -1.5 hasta 0.68, lo que es significativo en el resultado final de los mapas de Peligro sísmico, en el caso que se corrijan las isosistas por efecto conjunto o individual de las fuentes, sin estudiar este efecto para un terremoto en particular. Solo a partir de los valores presentados matricialmente en la tabla 6.4, se puede concluir acerca del comportamiento del suelo y su efecto en las intensidades ocasionadas. Es así como, por ejemplo se tiene que existe una disminución de las intensidades en sectores costeros debido a la presencia de un suelo mayoritariamente de buena calidad, con excepción del cuadrante que comprende a Rapel, en donde existe una amplificación de la intensidad, debido a la presencia de un suelo superficial promedio de baja calidad, lo que produce el mayor valor en las isosistas, corroborándose lo obtenido en los mapas de peligro sísmico presentados en el capitulo anterior. Desde talagante al este (columna 4 de la tabla 6.4), incluyendo el Valle Central, y hasta aproximadamente la localidad de San José de Maipo, se produce un aumento sostenido de las intensidades, producto de la mala calidad del suelo predominante, lo que se corrobora numéricamente con los coeficientes de la tabla 6.4 y se observa a través de las isosistas de los mapas de Peligro Sísmico presentados en el capitulo Nº 5. Se concluye entonces, que el escenario teórico del efecto de suelo presentado por Algermissen y Kausel, en el cual se indican los factores de respuesta del material superficial, concuerda con un escenario particular de un evento tipo thrust, con datos obtenidos empíricamente tras el Terremoto de 1985 mostrados en la figura 6.2. Coincidiendo estos rangos de amplificación o deamplificación con los presentados en el mapa de la figura 6.3., no solo en relacion al valor numérico obtenido de las diferencias de intensidades, sino que también concordando en el comportamiento de las áreas abarcadas, dependiendo del tipo de terreno presente en las localidades involucradas. Es así, como se concluye que el comportamiento del material desempeña un papel relevante en la distribución, índole y gravedad de los daños ocasionados por un terremoto. La naturaleza y la distribución de los daños que se pueden producir en las infraestructuras con la ocurrencia de un terremoto, está muy influenciada por la respuesta del terreno frente a cargas cíclicas, como consecuencia de lo cual se produce una modificación de la señal sísmica (Aki, 1988, Seed et al. 1997). La modificación de esta señal sísmica debido a la influencia de las condiciones geológicas y topográficas, es lo que se conoce como efecto de sitio y consiste en la amplificación de dicha señal en varios órdenes de magnitud. En cuanto al estudio del efecto de sitio, se necesita un mayor nivel de detalle de las localidades reportadas, para poder cuantificar este efecto, no solo a nivel de Chile Central, sino que además incluir el efecto de sitio ocasionado por las distintas fuentes sismogénicas presentes en el país. 127 El estudio de la respuesta sísmica del suelo es un campo de interés en el análisis de riesgo sísmico y en el diseño sismorresistente y en el presente, está siendo objeto de numerosos trabajos. Es por eso, que se plantea la necesidad de recopilar mayor antecedentes acerca de la geomorfología del terreno, con el objeto de conocer el verdadero efecto que ejerce el suelo sobre una estructura, cuando éste se ve afectado por un sismo. 128 REFERENCIAS 1. 2. 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Sandoval, Marcelo. 2004. “Estudio de los efectos del sismo fuerte de Santiago del 13 de Septiembre de 1945” Tesis para optar al título de Ingeniero Civil- Universidad de Chile. 25. Sauter, Franz, 1989. “Fundamentos de Ingeniería Sísmica I, Introducción a la Sismología”. Editorial Tecnológica, Costa Rica. 26. Sepúlveda, Sergio; Astroza, Maximiliano; Kausel, Edgar; Campos, Jaime; Casas, Eduardo; Rebolledo, Sofía; Verdugo, Ramón; 2007. “New findings on the 1858 Las Melosas earthquake sequence, central Chile: Implications for seismic hazard related to shallow crustal earthquakes in subduction zones”. 27. Sitio del catalogo ingles ISC, Internacional Seismological Centre, a través de su pagina web http://www.isc.ac.uk. 28. Slawomir Jerzy Gibowicz; Andrzej, Kijko, 1994. “An Introduction to Mining Seismology”. 29. Slejko, D; P.L. Bragato; 2005.”Empirical Ground- Motion Attenuation Relations for the Eastern Alps in the Magnitude Range 2.5 - 6.3” Volume 95, Nº 1, pp. 252-276. Bulletin of the Seismological Society of America. 130 ANEXO A: TABLAS A.1 ANTECEDENTES DEL TERREMOTO DE LAS MELOSAS, 1958. Coordenadas Epicentro Latitud [º] Longitud[º] -33,84 -70,17 (1) P. F. [Km] 10,00 Localidad Lat [°] Long [°] I observada d epi [Km] d Hipo [Km] Puente Alto Las Vizcachas La Obra El Canelo El Manzano Guayacán San José de Maipo El Melocotón San Alfonso El Ingenio San Gabriel Los Queltehues Las Melosas El Volcán Lo Valdés Santiago Valparaíso San Felipe La Calera Sewell Rancagua Curico Curepto Talca Cauquenes -33,60 -33,60 -33,58 -33,57 -33,58 -33,58 -33,63 -33,70 -33,72 -33,77 -33,78 -33,78 -33,85 -33,82 -33,85 -33,45 -33,03 -32,75 -32,75 -34,08 -34,17 -34,98 -35,08 -35,42 -35,97 -70,57 -70,52 -70,45 -70,43 -70,40 -70,38 -70,37 -70,33 -70,28 -70,25 -70,25 -70,22 -70,22 -70,17 -70,05 -70,63 -71,63 -70,72 -71,20 -70,38 -70,75 -71,23 -72,02 -71,58 -72,32 5,5 5,5 5,5 6,0 6,0 6,5 6,5 7,0 7,0 7,5 7,5 8,0 8,5 9,0 7,0 5,0 3,0 3,0 3,0 4,0 3,0 3,0 3,0 3,0 2,0 42,37 39,19 36,69 37,30 34,18 33,42 28,03 20,49 16,44 10,32 8,98 7,18 4,05 2,40 10,21 57,93 151,51 129,28 148,45 32,55 60,66 155,26 207,34 211,55 296,99 43,53 40,44 38,03 38,62 35,61 34,88 29,76 22,80 19,24 14,37 13,44 12,31 10,79 10,28 14,29 58,78 151,84 129,67 148,78 34,05 61,48 155,58 207,58 211,79 297,16 (1) Antecedentes entregados por Sepúlveda, Sergio; Astroza, Maximiliano; Kausel, Edgar; Campos, Jaime; Casas, Eduardo; Rebolledo, Sofía; Verdugo, Ramón; 2007. 131 A.2 Año 1985 ANTECEDENTES DEL TERREMOTO DE VALPARAÍSO DE 1985. Fecha Mes 3 Día 3 Hora(UTC) hr:min:seg 22:47:09 Epicentro Latitud (º) Longitud (º) -33,21 -71,87 132 Prof (km) 15,0 mb 6,0 Magnitud Ms Mw 7,8 8,0 Num Obs 447 133 134 135 136 137 138 139 ANEXO B: FIGURAS Y MAPAS B1. FUENTE SISMOGENICA INTERPLACA TIPO THRUST Fuente Interplaca -29,5 -75,0 -74,8 -74,6 -74,4 -74,2 -74,0 -73,8 -73,6 -73,4 -73,2 -73,0 -72,8 -72,6 -72,4 -72,2 -72,0 -71,8 -71,6 -71,4 -71,2 -71,0 -70,8 -70,6 -29,7 -29,9 -30,1 -30,3 -30,5 -30,7 -30,9 -31,1 -31,3 -31,5 -31,7 -31,9 -32,1 -32,3 -32,5 Latitud [º] -32,7 -32,9 -33,1 -33,3 -33,5 -33,7 -33,9 -34,1 -34,3 -34,5 -34,7 -34,9 -35,1 -35,3 -35,5 -35,7 -35,9 -36,1 -36,3 -36,5 -36,7 -36,9 -37,1 -37,3 Longitud [º] 140 Fte inter Fosa Sismicidad B2. FUENTE SISMOGENICA INTRAPLACA DE PROFUNDIDAD INTERMEDIA Fuente Intraplacade Profundidad Intermedia -72,5 -72,3 -72,1 -71,9 -71,7 -71,5 -71,3 -71,1 -70,9 -70,7 -70,5 -70,3 -70,1 -69,9 -69,7 -29,5 -69,5 -29,7 -29,9 -30,1 -30,3 -30,5 -30,7 -30,9 -31,1 -31,3 -31,5 -31,7 -31,9 -32,1 -32,3 -32,5 -32,7 Latitud [º] -32,9 -33,1 -33,3 -33,5 -33,7 -33,9 -34,1 -34,3 -34,5 -34,7 -34,9 -35,1 -35,3 -35,5 -35,7 -35,9 -36,1 -36,3 -36,5 -36,7 -36,9 -37,1 -37,3 Longitud [º] 141 Fte intra Sismicidad B3. FUENTE SISMOGENICA CORTICAL CORDILLERANA (SUPERFICIAL) Fuente Cortical -29,8 -70,6 -70,4 -70,2 -70,0 -69,8 -69,6 -69,4 -69,2 -69,0-30,0-68,8 -30,2 -30,4 -30,6 -30,8 -31,0 -31,2 -31,4 -31,6 -31,8 -32,0 Latitud [º] -32,2 -32,4 -32,6 -32,8 -33,0 -33,2 -33,4 -33,6 -33,8 -34,0 -34,2 -34,4 -34,6 -34,8 -35,0 -35,2 Longitud [º] 142 Fte Sismicidad B4. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 10 AÑOS, POR EFECTO CONJUNTO DE LAS FUENTES. 143 B5. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 50 AÑOS, POR EFECTO CONJUNTO DE LAS FUENTES. 144 B6. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 10 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE INTERPLACA 145 B7. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 10 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE INTRAPLACA 146 B8. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 10 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE CORTICAL 147 B9. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 50 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE INTERPLACA 148 B10. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 50 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE INTRAPLACA 149 B10. MAPA DE PELIGRO SISMICO CON PROBABILIDAD DE 10 % PARA UN PERÍODO DE VIDA UTIL DE 50 AÑOS, POR EFECTO DE LA FUENTE CORTICAL. 150