ss CLj1^ HIBPA^U IN9QI,AR DID I'vFL[7^PIGIA DEflHR7"ICA (^RGIiIPIELAa4 CA.^ARIO^ Dotado este clima de ^luz y temperatura, ai se tiene agua, las cosechas son abundantes en esta ^región. El agua para el riPgo, como en Le^vant^e, ea o'b^enída por el esfuerzo del hom^bre, apra• vec^llando manantiales .que p^roced^en de llu• vias o de nievea eu los mr^s altos picos. ^Precocidad v finura caracterizan todos sus tropicales praductos, espeeialmente plátanos, chirimoyos, guaya^bas, ananas, café; y entre los subtropicales^, limonQS, naranjas, dátiles, . hig^s chumbas; y d^e la zona templad^a, productos mu,y tempran ^s, como tomat^s, patatas, pimi^entos vi cebollas, ^sien^do objeto de exportación. No^a ^singular es que, en Lanza•rote y Fu^erteventura, sE empl^ea para el transparte el dromedario. La ganadarfa no es impartante, par ^la escaaez de pas^tos. PR^ONQS^ICaS DFL "I'IEMPO Inbe^resa muchísimo a las agricu'.tores po5eer algunoa vonocimientos pa^ra saber ®1 tiempo que va a hacer profiablemente, pue5 de eata depende la olase de trabajas ^que en el oultivo ^h$ de ordenar, tanto en l^abares, como en siembras, abonado; riegos, defensa contra lzeladas, prevención para e^ita^ p'agas como el mildeu de ]as vides o el reptilo. vívillo u ojo de pawo real de los o ^ iv^is, etc. Si en España tuviéramos bastantes pues• tos de o'bs^ervaciones ^meteoro'ógicas ( 1) don^ de la^ diversos a pa^ratos dan datos de t,emperatura, presión, :humedad, vientos, y dichas estaciones tuviesen cnmunicación constante ,y rápida entre ellas, por medio d^el telégrafo, tolófono o telegraf[a sin tiilos, la p^evi ^iól^ de^ tiempo seria fácil. iP^ro ^sin disponer del oanocimiento de los el^em^ntos de esta clase que exi^ten e^ k'apaña, el agricultor se encontrará aislado y}en• drá que ^recurrir a sus' obaervacione^s .liropia^. Y.para que e.^tas observaciones sean lo máy acertadas posib'e, vamos a sxponer las ri^: • tos que le conviene tener en cu^enta.` ... ^Pa^ra predeci-r el tiempo•.,abserv^ar^áo el ,ba• rómetro, no sólo nos.,fijaremos .en. el niímEro de milímetras que la presión ^iai'ométrica' sube ó baja, sino en la velocidád cori que lo hace. ^e dicg que el barómetro ^está alto, cuandu la eol,umna barométrica está pQr encima de la cifra de milimetros ^ue corresponde a la localidad, y que está ba^o, cuando la column,8 nó llega a dicha' cifra. Esta cifra d^e mi1{metros o preslón media da cad^a localidad, (1' i^etacione^ moteorolbgico-agricole^^, del^end^e de la altura a que se está sabre el nivel d^el mar. Pero en ,qene^ral podemos decir que si el barómetro está por encima de 765 milímetros, el ti^empo con frecaencia es bueno; y si es inferior a 74^0 milímetros, es muy pro^bablemQnte malo. r Un d^ese^enso consirierable y rápido (de un milímetro por hora) anuncia la llegada de una borrasca' o^nue pa^a muy próxima a! agricultor. Si la ha,ja es de duración de muy poca^s horas, puede anunciar la proximidad de un^a granizada o. en ca^so de ^ran calor, de Una tempestad. Un d^escenso muy lento y débil indica el tnante^nimie^nfo de^ iie^mno actual. Una subida continua por encima de la presión normal y de larga ríuración y asoen+so lento, anuncia buen tiempo. Después dc un^a baja, una sttbida franca que ]leve ascendiendo en forma y tiempo la misma marc^ha ,q.tre el descenso, nos dice que mejarará el tiempo. Pero ^i ^el ascenso as menos aeentuado que la baja, es de t,emer nue^a ba,ja, y, nor tanto. vuelta al m:al tiernpo. Si estand^i el Eharómetro an su a!tura me^ dia, su'b,e bruscamente, ^bajará pronto, préaentándose tiempo inse^;uro. ,Si ^estando el barómetro ^on poc.a altu^ra, sube rápid^amente ésta, es indi •io de buen tiempo, pero poco duradero, - 8s .-- ^i el barómetro baja mucho ,y el viento pasa del Norte hacia el Oeste y el Sur, aumentando su fuerza, presagiaremos lluvia; mal tiempo, aunque no s^erá de muoha duración. ^Cuando ei ^bardmetro baja, pero el viento gira poco a pooo hacia nueatra dereaha, mirando nosotros al Norte, el mal tiempo da j^ará también a la derecha el lu$^a,r en qu^e ^ eatamos. Cuando el ^barómetro sube de pronto en alpjunos minutDS v cambia el víento muy rápidamente de dirección, ss pro+bable una t,empestad. ^ ... Sl m1TamDS a] ci^elo y vemos aparecer rápidamente las nwb^es llamadas círrus. que ^se transforman en cirru-stratus, form^ando un v^lo, y al, mismo tiempo baja el ^barómetro, la lluvia está próxima. ^uando ba.jando el barómetro después de las nubes ci^rrue o cirru-stratus, aparecen muchos ci •^ru-cúmuloG, dando un a;sp^ecto de embaldoaado al cielo, la proximidad de mal tismpo es probable. ^e ahí el refrán "^C;ielo ^empedrado, suelo mojado". . Si ia lluvia empieza a poco de apareoer los primeros ‚irru-cúmulos, du^rará con prababilidad; tanto más, cuanto má.s pronto comience. ^Cua.ndo durante el buen tiempo persistente, caracterixado por brumas o nieblas mati- nal^es, aparecen lc+ntamente cirrus ligeros, no es p^raba^ble mal tiempo. Es^to ^hace recardar otro refrán: "Mañana de niebla, tarde de paseo". Si se ven cúmulos por la mañana, que disminuy^en par l^a iarde, se puede predecir buen tiempo. Otro género d.e si^nos son las eorona^s ^los hal^os. La luna rodeada d^e una corona o d^e un Ihalo, indica, en da mayor ^parte de las casos, cambio de tiempo. Los halas se diferPnci^a.n de las ^coronas por sus mayores dimensione$. Son producidos por la desviación de los ra,yoa luminosos en ^las caras de las a,^ujas de hielo de la^s nubes elevada^s, o^sean los cirrus; y^la presencia de éstos indica. por tanto, la probabilidad de mal ti^e.mpo. f R R Hay otras manifesta.ciones^ auxiliares qut indican la proximidad de Iluvia o, par lo menos, que est-á car^ada la at,mósf^era de vapor acuo.^o. +Par ejemplo: cuando vemos que la locomotora d^e un tren desprende por ^su ehimenea el vapar en forma de copos blan^cos, parecidas a las nu^]-,es llamada,s cúmulus, nos ^revela esto que se cóndensa con faci^li^d el vapor de agua, ^es decir, qu^e la atmósfe^ra. está propioia a la producción de lluvia. Pero si e^as ^nubes de vapor de la locomotora se deshacen rapidí^iucameni,e, dem.uestran yu^ las gotitas de vapor condensadas encuentran uu si^re muy seco y se evaporan instantáneament^e. Y ese air^ tan seco no es propic•io para la lluvia. Si aparecen humedecidas las superfici^es de cuerpos pulimentados o aglutin^da la sal común o wo,jadas algunas piedras (por ser higroscópicas) de la^ casas, ^es ^nue ^ha^ mucho vapor acuoso en 1•a atmófera y, por tsnio., praha,bilidad de Iluvia. Los tallos de l^u- ` minosas, como el tr¢hol, cuando se ponen mt^y d©rec^os en el campo, indican que la Iluvia está cerca. ^Hay animales que, ^rovistas de órganos o t^egumentos muy sensrhles a la humedad, indican ta presencia de gran cantidad de vapor de agua. Así lo manifiestan en sus movim^entos, volando las golondrinas muy oerca de la tierra, frotándose el hacico los ^•atos con sus patas, batiendo sus alas la^s aves acuáticas, ei^cé^tera. ... ^Con tiempo húmedo v templado encuentran condiciones favora>i^les para ^su desarsollo ci^ertos hongos paqueñísimos, microscópicos, como san, por ejemplo. el mildeu (Plasmoparn vtit>,cola) ^en las vi^d^s •y el •repilo, vivillo u ojo de pavo real (C^cloconium Ol^eag^num) en los ol•ivos. Exi•sien unoa agaratas ]lamados polímetr4s, qus ^airven para conooer cuándo ^qe apro- - 91 - ximan esas condiciones favorabies pa^ra e:l desarrollo de diclias pi^agas. El saber pre^agiar ese tíempo húmedo y t^emplado y, por tanto, poder emplear preventivamente^ el ca^ldo bordelés contra esas p agas, es^ tan utilí^si.mo, que ^equivale a^salcar importantísimas riquezas agrícolas de Espa- . ña, como son el vino y el aceite. t • + Durante el v^erano se pu^ede presagiar tormenlas, si se pre^entan las ^circuns?ancías siguientes: El viento e^t{t encalmado o apenas es sensibl$. A1 principio del dfa se presentan CÚnlUlos que, uniéndose, aumentan, t'ormando masas grandes. Por encima de Pstas aparecen r.irrus en forma de. plumero : a yunqu^es. .El barómetro se mueve, con pequeñas pero constant,es oscilaciones, permaneciendo ba,jo. El calar pre^s^nta grandes va^ri.acione^s en el . dia, si^endo mayor de lo qu^e carre^sponde. -La humedad aumenta m^ís de lo normal, lo que s^e verá por el higrómetro. ... La previsió^^ de las condicion^es meteorológicas de^l tiempo futuro, ^está atín hoy día muy limitada Se puede con^e^guir. con a^lguna. exactitud pred^eci^r el tiempo éon veinticuatro. horas de antela^ción, pero nada má^ , -- 92 -- Heypecto de añus futuros o predicciones a largo plazo, ho y^ no hay cierto más que la llamada ley de Briickner, por llam8rse así e1 profesor de Viena que Ia enunció en ^esta forma. "Desde varios siglos, el clima de la Europa oceidenGal parec^e experimeniar oscilaciones rogulares de treinta a treinta ,y cinco años, dividiéndose ba.da una en do^s períodos igua^les de próximamente dieci•siete añog, uno frío y hú^m^edo; otro calienis y^ser.o," F,e^o na es hipótesi^s, sino ^heehos camprobados. Observá el sab^o geólogo las variacione^, de nivel del mar Gaspio, ^que viene a ser por •sus condiciones como un inmenso pluviómetro. F•stas variaciones correspondían a un período de trienta a treinta_v einco año5; diecis^ete de aguas bajas v dieciesiete de al, tas Se le ocur^ió observar las medias m®teoro]ógioas de ]a Europa occidental, y vió que acusa•ban la misma periodicidad. Pero aun estc no se debe pronosticar más ^ q^^r pa^ra Europa ocoident^l. ... Transmitiendo las estaciones meteorológ^cas, entre otro^s datos, ^los d^e pTesión •barométrica, a otra oentra^l, par medío de ]a tele^rafía, y uniendo todos los puntos qñe tienen a una hora debermin^ada la misma prssñón, re• s^ultan unas curvas cerradas formando como anillos algo deformados, alrededor do un punto central. , A3 -_ !`;,ata^ líndxs cu;rvae se llaman ieubareb. Cuando a m^edida que s^e aproximan ai aen• bro, las presiones repres+entadas por estae curvas van siendo menores, es que. en e+se c:f^ntro exists una zona de pc^esiones bajas, u -ea una borrasca. Si sucede a.l revés, o sea qus a medida que se ap^roximan al centro, ^cada curva es de una presión más ^alta, e^sa zona central será un área de altas presiones barométricas o sea un a,nti^ciclón. Si comparamas los gráficos o mapa, de días sucesrvos, s^e ohaervará que varía 1^ situación de ese ^rupo de curvas o íso'b;a,ras, esto es, que marcha; y se notará no sólo su dirección, sino tam^ién su ve.locidad. En ^las depresiones barornétricas, o s^ea en los cic'ones, la velocidad es mayor que en las presiones altas o anticiclone.,. ;En estos la oa:racierí^tica ^es casi la falta d^e movimiento. La dire,cción del viento farma un ángulo muy pequeño con las curvas de las isabaras; es casi paralel^a a ellas: Para la p redicción del tie^mpo existe una IAy (la d^e Buys Ballot), o^sea qu^e en el hemisferio narte ^le la Tierra, o sea el nuestri^. la dirección del viento da la izquierda a las presion^es bajas y la darecha a las altas. , ^