mación tecnológica orientada hacia la sustitución de trabajo por capital. Las máquinas existentes sólo mecanizan un fragmento de la cadena, la clasificación por longitud de tallo, y son todavía ineficientes como para competir con los costes salariales en Canarias. Ello no es óbice para que afirmemos que la búsqueda de tecnología se haya dirigido p'rimordialmente hacia la consecución de una mejor calidad. En este contexto general queda explicada la escasa aceptación que ha tenido el frigorífico entre las firmas exportadoras de tomate que siendo una innovación que se conoce desde antiguo, se introduce en 1972, no se ha difundido prácticamente ni ha tenido un desarrollo ulterior, como veremos más adel : nte. 5. ADOPCION: RENTABILIDAD E INCERTIDUMBRE La adopción de innovaciones es el resultado de la confluencia de la demanda y oferta de tecnología. Es evidente que las expectativas de ganancia han inducido a la introducción de las innovaciones por los empresarios. Sin embargo, toman las decisiones en condiciones de racionalidad limitada, no saben a ciencia cierta cuál puede ser la rentabilidad de la nueva inversión. En este apartado vamos a estimar cuál ha sido la rentabilidad a posteriori de las innovaciones post-cosecha, conjuntamente para dos empresas exportadoras, de rosas. Para el caso del tomate estimaremos cuál era la rentabilidad esperada de acuerdo con las especificaciones de la maquinaria y la compararemos con los rendimientos reales en los dos años sucesivos a la introducción de la maquinaria por la empresa líder. El contraste entre estas dos magnitudes nos permitirá demostrar que la innovación entraña una incertidumbre. 358 5.1. Ventajas y rentabilidad de las innovaciones post-cosecha en la exportación de rosas Las innovaciones post-cosecha tienen unos efectos difícilmente cuantificables en términos monetarios. Las ventajas de su introducción se pueden reducir a tres: 1) incremento de los precios percibidos, 2) captura de nuevas parcelas del mercado en base a la excelencia, 3) reducción de las pérdidas físicas, como efecto secunda- rio. Nada más difícil que la estimación de los beneficios y costes marginales derivados de la introducción de técnicas postcosecha. Se han integrado en unas estructuras empresariales lo suficientemente ámplias y complejas como para que resulte casi imposible aislar sus efectos. Además, la experimentación de dichas técnicas en la región es insuficiente como para determinar los cambios en los resultados económicos derivados de las innovaciones. De hecho, no se conocen todavía con precisión sus efectos. Se tiene una conciencia clara de que la calidad ha aumentado pero resulta imposible individualizar qué parte de esta mejora es atribuible a cada estadio del proceso: producción y post-recolección. En realidad la mejora de la calidad que se manifiesta en el sector ha sido consecuencia de un paquete tecnológico de amplio espectro: desde la producción hasta la expedición (Gutiérrez, et al., 1985). En este apartado vamos a separar artificiosamente los efectos debidos a las técnicas de producción y post-recolección. Tampoco vamos a considerar las transformaciones en el sistema de recolección inducidas por la puesta a punto de las innovaciones. La diversidad en la dotación en infraestructura y tamaño de las explotaciones hacen una estimación contable de estos conceptos demasiado engorrosa. Vamos a considerar el centro de selección y empaquetado como una unidad autónoma. La información utilizada son los datos recabados en dos cooperativas de Tenerife. Son las únicas que se han prestado a facilitar datos económicos fiables. La entidad que llamare359 mos A, es la líder en la innovación y la mayor empresa del sector (35 % de la exportación). Es una cooperativa de segundo grado con cinco asociados de primer grado. En la sede central se organiza la comercialización, se verifica la calidad, se empaqueta y se deciden las inversiones y orientaciones técnicas. En las asociadas se realiza el primer enfriamiento, la confección de ramos y clasificación por calidades, bajo las. directrices de la de segundo grado. La empresa B, figura entre los primeros innovadores. Es una cooperativa de primer grado que ocupa el segundo puesto en la clasificación por tamaños de las empresas (20 % de la producción total del sector). Los procesos de empaquetado no están fraccionados y la cooperativa centraliza todas las funciones. El régimen jurídico de estas dos entidades dificulta la aplicación de un análisis financiero convencional de la inversión en nuevas tecnologías. Las cooperativas no registran beneficios en su balance y éstos se liquidan en los precios a los agricultores. Hechas estas salvedades, vamos a realizar un análisis de la rentabilidad. Previamente vamos a estimar, utilizando los datos de las dos empresas, los ingresos marginales derivados de la irinovación. Con los resultados vamos a calcular la tasa de rendimiento interno. 5.1.1. INGRESOS MARGINALES El efecto de las innovaciones post-cosecha es el aumento de la calidad. Para su traducción en términos monetarios necesitaríamos descomponer la calidad en sus diferentes atributos y conocer exactamente cómo varían al introducir las innovaciones. La elasticidad precio-característica por el incremento en cada una de ellas nos daría como resultado el ingreso unitario marginal debido a la introducción de innovaciones. Ambas magnitudes son imposibles de medir con los datos que disponemos. Por lo tanto, utilizaremos un método indirecto. Disponemos de los precios de liquidación a los socios de 360 las dos empresas para los años 1980 y 1986 (ver Cuadro n° V.16). Conocemos también los valores unitarios de las exportaciones canarias y del total de las importaciones C.E.E. La diferencia entre las tasas de crecimiento del precio de estos tres grupos nos servirá para determinar el incremento del precio a causa del aumento de la calidad. Aumento que, de acuerdo con la literatura especializada en post-cosecha, consideramos que es atribuible en un 66 % a la mejora en las técnicas postrecolección. El resto se asignará al compacto producción. Previamente vamos a comentar algunos datos de la empresá A, como una primera aproximación a la magnitud del fenómeno. En dicha empresa las rosas son clasificadas por categorías a efectos de liquidación a los socios. El cambio en la distribución por calidades no podía haber sido más éspectacular. Las proporciones se han invertido con un notable ascenso de las componentes extra y primera. De haberse mantenido la distribución en los mismos términos los ingresos del año 86 hubieran sido un 35 % menores. Cabe advertir, no obstante, que esta valoración es excesivamente optimista. Sospechamos que ha habido un cambio de los criterios de clásificación internos. De ahí que hayamos renunciado a continuar por esta vía en la estimación de los ingresos marginales (ver Cuadro n° V.16). Las empresas A y B tienen unas tasas de crecimiento del precio similares, superior al del valor unitario de las exporta ciones regionales al Mercado Común. A su vez, la tasa de crecimiento del valor unitario de las exportaciones canarias se ha situado muy por encima del total de las importaciones C.E.E. El aumento de cotización en las empresas responde también a un cambio en la distribución geográfica de las ventas. Tomando la hipótesis más desfavorable, es decir, suponiendo que la diferencia entre la tasa de crecimiento de las cotizaciones de las empresas y el total de las exportaciones canarias al Mercado Común es una consecuencia de la reestructuración geográfica de las ventas, la tasa de crecimiento anual de los precios, debido a la mejora técnica, ascenderia al 2,6 % (5,3 - 2,7). Si consideramos que la mejora es progresiva, en el Cuadro n° V.16 aparecen los ingresos marginales en un perío361 do de diez años. La media de dichos ingresos multiplicada por el porcentaje correspondiente a las técnicas de post-recolección sería la estimación dei aumento de ingresos debido a la introducción de las innovaciones (1,10 ptas.^flor). 5.1.2. TASA DE RENDIMIENTO INTERNO Conforme a las expectativas previas a la adopción, las innovaciones han aumentado los beneficios de las empresas. Para verificarlo, vamos a calcular el tipo de rendimiento interno de la inversión utilizando los datos de la empresa A, que son los más completos. Para calcular la tasa de retorno o tipo de rendimiento' de la inversión, disponemos de los siguientes datos: 1) coste del frío filacell 2) inversiones realizadas por la empresa durante el período 1980-86, 3) cargas de estructura (salarios, material fungible...) de los distintos departamentos de la empresa, 4) coste de los aditivos por unidad de producto 5) coste unitario de los aditivos Para simplificar el análisis, establecemos las siguientes hipótesis: 1 a) Las inversiones se producen como una reacción de reajuste de la empresa tras la introducción de las innovaciones. Por lo tanto, actualizamos el inmovilizado al inicio del período (a un interés del 12 %) y consideramos que en la empresa no' ha habido ampliaciones: la facturación es constante e igual a la del año 1986. 2a) . Las cargas de la dirección técnica, coordinación y control son impútables como costes variables al manejo de las técnicas (incremento de costes salariales). ' Para el cálculo de la tasa de retorno, las cuasi rentas han de ser cons• tantes a lo largo del período de amortización de la inversión. En nuestro caso aumentan progresivamente. Para ajustarlas calculamos la media anual del período. 362 3') El coste de los aditivos se contabiliza también como pago por unidad de producto. 4') Los cobros serán los derivados de la mejora de la calidad y constantes para todos los años. Se igualan a la media de los incrementos de los diez primeros años. ^ Los datos y resultados aparecen eñ el Cuadro n° IV.16. La inversión con los supuestos más restrictivos es rentable. La tasa de retorno es superior al interés máximo del capital al que facilita los préstamos el Banco de Crédito Agrícola (12 %). Se ha adoptado la innóvación porque existían unas expectativas de beneficio y han resultado colmadás. 5.2. Ventajas y rentabilidad de la cadena automática de empaquetado La disminución del empleo de mano de obra por unidad de producto es un beneficio derivado de la adopción de maquinaria inmediatamente captado por los empresarios. Otras ventajas, como la mejora en la clasificación o en el registro contable del proceso, no han sido desarrolladas. Para estimar el rendimiento financiero, teórico o previsto, de la inversión vamos a utilizar los datos de la empresa lider. Como en el caso anterior, se refieren a una determinada escala. A medida que ésta disminuye,^ aumenta el coste del capital unitario. Este aspecto lo desarrollaremos más adelante. 5.2.1. TASA DE RENDIMIENTO INTERNO DE LA INVERSION.• ESPERADA Y REAL Las especificaciones de la maquinaria asignan un 30 % de aumento de los rendimientos de la mano de obra con respecto a los otros tipos de cadena. Vamos a tomar dos casos teóricos: un ahorro del 30 % y otro del 25 %. Consideramos que la vida útil es de seis años, igual al plazo de amortización de los créditos gubernamentales y que se aproxima al de la obsolescencia. Los costes de reparación y mantenimiento son muy superiores en este tipo de cadena pero vamos a suponer que se 363 mantienen constantes. El mismo criterio aplicamos para el consumo de energía. Finalmente, suponemos que los costes salariales son estables, e iguales a los del primer período2, y que la inversión no es fraccionada. Los datos y resultados aparecen en el Cuadro n° V.17. Para que la inversión resultase rentable, la reducción de los costes del trabajo aplicado tendrían que ser superiores al 30 %, o los intereses de capital inferiores al 12 %. Si suponemos que los salarios aumentan en un 6% anualmente, los resultados se repiten. Para demostrarlo calculamos el Valor Actualizado Neto (V.A.N.). El V.A.N. es valor capital de una inversión. Si V.A.N. es > O la inversión es rentable V.A:N. es G O la inversión no es rentable Los resultados aparecen en el Cuadro V.17. Comprobamos que resulta negativo para un rendimiento del 25 %, aunque en este caso la diferencia no es tan notable. Con estas expectativas, la decisión de invertir ha estado justificada por las especiales condiciones de fmanciación: una subvención, 25 % del capital invertido y, el resto, un crédito al 12 % con una demora de tres años. Por lo tanto, uno de los factores claves que ha inducido a la adopción ha sido unas condiciones de financiación privilegiadas. El empresario ha tomado la decisión de innovar con unas expectativas de ganancia elaboradas de acuerdo con la información a la que tiene acceso. Si ahora aportamos los rendimientos reales de la maquinaria, comprobaremos que dicha información es incompleta y, por lo tanto, las decisiones se toman con incertidumbre. Los rendimientos en el primer y se• gundo año, tras la adopción, han mejorado en 8,1 % y un 25 % respectivamente. Son muy inferiores al 30 % prometido por las especificaciones de la maquinaria. Un conocimiento a priori de la productividad no hubiera justificado la inversión en ningún caso. Queda entonces demostrado que la innovación se emprende con una expectativa de ganancia pero en condi^ Mantenemos esta hipótesis para poder aplicar el método de cálculo de la tasa de retorno. 364 ciones de racionalidad limitada. La mejora paulatina de los rendimientos pone en evidencia, también, el importante efecto aprendizaje. 6. ADAPTACION, APRENDIZAJE Y DEPENDENCIA TECNOLOGICA Una de las características peculiares de la tecnología agraria es que su materialización en nuevos insumos se localiza normalmente en el sector agroindustrial. Las empresas agrarias adoptan tecnología creada en otros sectores y en el caso de áreas subdesarrolladas, como Canarias, tecnología transferida de otros países. Sin embargo, la adopción de innovaciones es en sí misma generadora de tecnología. De la adaptación y uso de las ^écnicas se recaba una información que, debidamente aplicada, da lugar a una mejora en su funcionamiento o dise• ño y que, canalizada hacia las instituciones de investigación, empuja el avance de la ciencia. En definitiva, las técnicas no tienen un fi.uicionamiento completamente codificado ni un diseño perfecto. En el caso de la post-cosecha, las innovaciones tienen un alto contenido científico no especificado. Las de conservación están fundamentadas sobre unos principios de fisiología todavía no completamente consolidadas. Como vimos anteriormente, el conocimiento de las reacciones químicas que dan lugar a los procesos de maduración y senescencia es todavía fragmentario. Por ende, el impacto ambiental es muy importante sobre dichos procesos. De ahí que, además de exigir un esfuerzo de adaptación, de la aplicación de técnicas post-cosecha se extraiga una información de fisiología descriptiva de indudable contenido científico. La cadena de empaquetado estaba fundamentada en unos principios que tampoco estaban completamente establecidos. El esfuezo tecnológico desarrollado para la adaptación de las técnicas ha sido intenso y continuo. La introducción de las mismas, además de requerir una investigación para la adaptación de su manejo a las condiciones locales, ha inducido a la transformación de otras técnicas y abierto nuevos temas en 365