Apuntes de Economía - Banco Central del Ecuador

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Apuntes de Economía
Dirección General
de Estudios
LA MISIÓN Y VISION INSTITUCIONAL
DEL
BANCO CENTRAL DEL ECUADOR *
Apuntes de Economía No 15
Mayo de 2001
Resumen ejecutivo
Este documento analiza los fundamentos, carácter y objetivos de la misión del Banco Central del Ecuador
y presenta varias reflexiones respecto a la visión del Banco Central del futuro. Si bien, se pone cierto
énfasis en las condiciones específicas que el esquema de dolarización le impone a la institución, los
sustentos teóricos y metodológicos y la propia evidencia empírica de un año de aplicación del esquema,
plantean la exigencia de dotarle de un contenido y alcance mayores; justamente en la medida en que la
misión de velar por la estabilidad de corto y largo plazos de la economía que se complementa con la de
contribuir para que los mercados monetario y financiero operen en forma eficiente y eficaz se constituyen
en los fundamentos de la existencia de un banco central moderno, sea cual fuere el sistema monetario y
cambiario en vigencia.
*
En el mes de julio del año 2000 los técnicos del Banco Central del Ecuador presentamos una primera versión de este
documento a las autoridades de ese entonces y con motivo de las discusiones sobre la Misión y Visión del Banco
Central a raíz de la reforma monetaria adoptada en enero de ese mismo año. Luego de 10 meses de un constante
enriquecimiento tanto teórico como práctico se ha visto la necesidad de actualizar aquel documento inicial con los
valiosos aportes recibidos por los propios técnicos del Banco Central, el Directorio de la Institución, así como con los
realizados por técnicos externos nacionales e internacionales que de manera directa o indirecta han participado en
estas discusiones. Al respecto se debe resaltar que esta versión recoge principalmente las conclusiones del Seminario
Internacional que el Banco Central llevó adelante en el mes de marzo de este año con el título: El rol del Banco
Central bajo Dolarización. Si bien el primer trabajo de actualización corrió a cargo del Departamento de
Investigaciones del Banco Central del Ecuador; en su revisión final participaron los directores generales de Estudios
y Bancario y así como varios de los técnicos de estas unidades.
PRESENTACIÓN
La Misión y Visión institucional del Banco Central del Ecuador
En el mes de enero de 2000 el Ecuador inició una profunda transformación de su
estructura económica al modificar el sistema monetario y cambiario y adoptar un
esquema de dolarización. Esto implica, en la coyuntura y a mediano plazo, llevar
adelante una serie de acciones para el país por parte de sus autoridades económicas y
sociales, así como la reforma de la institucionalidad del Estado, en la perspectiva de
consolidar el nuevo modelo y favorecer la estabilidad macroeconómica, la
competitividad externa y la equidad social.
El proceso ecuatoriano es inédito en la región y no es comparable a experiencias del
pasado; en Panamá, único país en el que ha regido la dolarización, ésta ha respondido a
determinantes históricos diferentes y se puso en práctica bajo circunstancias políticas de
índole muy particular. El Ecuador, al contrario, impulsa tal proceso en medio de un
mundo interrelacionado e interdependiente, en el que la competencia y la productividad
son los determinantes básicos de la riqueza de las naciones. En estas circunstancias, la
regulación macroeconómica resulta esencial, lo que obliga a una especialización
institucional que contribuya del modo más eficaz al logro de los más altos objetivos
nacionales.
El proceso de dolarización no puede prescindir de un banco central; su existencia y
fortalecimiento es esencial y básica, al menos si se considera que la institucionalidad
internacional, hoy más que nunca, ha reconocido la importancia de la banca central
como artífice de la estabilidad, independientemente del tipo de sistema cambiario que
un país adopte.
En el marco de la dolarización hay un largo margen para la gestión monetaria, bajo
patrones que se están definiendo y construyendo progresivamente. También desde la
academia esto se ha reconocido explícitamente: la dolarización, para su mejor
implementación, requiere de un banco central aún más especializado, tomando en
consideración que el ciclo económico y su tendencia responden a otras determinaciones
y se hace en medio de condiciones de mayor rigidez.
Sin embargo, quizá la especificidad de su función está dada por la necesidad de contar
con un auditor macroeconómico, independiente, que propicie una gestión anticíclica de
la regulación y que condicione la tradicional tendencia a la concentración de poderes,
que ha sido una de las causas del retraso del país en los últimos años.
De otro lado, visto que la existencia de mercados perfectos es una noción teórica, la
necesidad de un “tercero confiable”-el banco central-, que los coordine y regule, cobra
relevancia; tal es el caso, por ejemplo, del mercado de cambios, en el cual la oferta de
2
divisas se encuentra concentrada en pocos agentes, mientras su demanda abarca a casi la
totalidad de la economía.
Sobre esa base, la Dirección General de Estudios y la Dirección General Bancaria del
Banco Central del Ecuador prepararon el documento La Misión y Visión Institucional
del Banco Central del Ecuador. Es fundamental para el país precisar la naturaleza de su
Banco Central; que es la base para que la Institución continúe brindando su mejor aporte
para la consolidación del esquema económico vigente.
Este documento analiza los fundamentos, carácter y objetivos de la misión del Banco Central del Ecuador
y presenta varias reflexiones respecto a la visión del Banco Central del futuro. Si bien, se pone cierto
énfasis en las condiciones específicas que el esquema de dolarización le impone a la institución, los
sustentos teóricos y metodológicos y la propia evidencia empírica de un año de aplicación del esquema,
plantean la exigencia de dotarle de un contenido y alcance mayores; justamente en la medida en que la
misión de velar por la estabilidad de corto y largo plazos de la economía que se complementa con la de
contribuir para que los mercados monetario y financiero operen en forma eficiente y eficaz se constituyen
en los fundamentos de la existencia de un banco central moderno, sea cual fuere el sistema monetario y
cambiario en vigencia.
A lo largo de sus más de 70 años de vida institucional, el Banco Central ha pasado de ser una institución
puramente monetaria a otra promotora del desarrollo económico, para luego, volver a la exclusividad del
campo monetario; demostrando así capacidad para adecuarse a las exigencias del ambiente económico.
Así por ejemplo, la ley de creación del Banco Central de 1927 lo definía como un ente esencialmente
emisor en base a los principios dispuestos por el Patrón de Cambios Oro; no obstante; mas tarde, la nueva
Ley de Régimen Monetario del año 1948 señalaba que el objeto de esta institución sería “… la ejecución
de la política monetaria nacional, a fin de crear y mantener las condiciones monetarias, crediticias y
*
cambiarias más favorables al desarrollo ordenado de la economía nacional” .
De otro lado, la argumentación teórica que sustenta la existencia de la banca central se fundamenta
incluso en los desarrollos teóricos de la <<Nueva Economía Institucional>>, según la cual toda sociedad
se organiza en torno a una red de instituciones. El potencial de esta matriz o red está en su capacidad de
minimizar la incertidumbre, de ofrecer información confiable y coordinar las acciones entre los agentes
económicos en los diferentes mercados para que se alcancen mejores niveles de crecimiento y desarrollo
económicos.
Sobre este sustento se puede concluir que la visión del Banco Central de Ecuador es la de ser una
Institución que a través de su autonomía técnica vigile y promueva la coherencia de la gestión
macroeconómica y financiera para coadyuvar al desarrollo económico sostenido del país. En ese sentido
deberá potenciar sus funciones de agente financiero de la Nación, monitorear y regular la liquidez de la
economía, precautelar la sustentabilidad de la balanza de pagos y convertirse en el principal centro de
investigaciones económicas del país.
*
Ley de Régimen Monetario. Decreto 434 del Dr. Carlos Julio Arosemena Tola, Presidente Constitucional de la
República. Registro Oficial 149 del 13 de marzo de 1948
3
Vale advertir que bajo un esquema de dolarización, el velar por la estabilidad macroeconómica del país
comporta un reto aun mayor, en tanto el ejercicio de la política económica en general y la capacidad para
enfrentar las vulnerabilidades externas en particular se ven restringidos por la pérdida de los clásicos
instrumentos de gestión; lo que obliga a pensar y crear nuevos y novedosos mecanismos para su ejercicio.
El Banco Central del Ecuador deberá continuar con el seguimiento y control de la macroeconomía, desde
una perspectiva que le permita monitorear bajo condiciones de independencia y autonomía institucional,
el desempeño macroeconómico de todos los agentes económicos, ningún esquema monetario y cambiario,
admite la concentración de funciones en lo que tiene relación con la ejecución de la política económica y
en la evaluación y monitoreo de su ejercicio.
La vulnerabilidad externa de una economía pequeña y abierta como la ecuatoriana, que adolece además
del problema de tener mercados incompletos, exige que permanentemente se presenten a la sociedad
alternativas de política económica consistentes con la evolución del ciclo económico; pero teniendo
siempre presente una visión de largo plazo sobre las expectativas de crecimiento de la economía
ecuatoriana; independientemente del esquema monetario y cambiario vigentes.
Esta creación e innovación de mecanismos de gestión deben orientarse al logro de la estabilización y el
crecimiento económico, única garantía de la estabilidad en el largo plazo siempre en el marco de una
programación macroeconómica consensuada a nivel nacional y en la que el Banco Central, en su calidad
de institución de evaluación independiente, se constituya en un elemento catalizador de los consensos. Se
propone por ejemplo un nuevo ordenamiento en el ejercicio de la política económica a través de un
sistema de fondos de capitalización, que canalicen recursos hacia la inversión productiva, modulen el
ciclo económico y las fluctuaciones provocadas por choques exógenos.
La sociedad ecuatoriana reconoce al Banco Central del Ecuador como un “tercero confiable” sobre la
base de más de setenta años de desarrollo institucional. Lo confirman el pleno y eficiente funcionamiento
del sistema de pagos en el país; la provisión de cifras de síntesis macroeconómica confiables reconocidas
como tales no solo por clientes nacionales sino por los internacionales, la administración transparente y
eficiente de las reservas internacionales, etc.
En el mercado monetario la restricción impuesta al poder de la emisión endogeniza aun más los
elementos de la oferta monetaria; sin embargo, el Banco Central del Ecuador puede y debe regular los
niveles y los flujos de la liquidez de la economía para modular la presencia de potenciales desbalances
inflacionarios o incluso deflacionarios; determinar una política de tasas de interés atendiendo al delicado
balance entre los equilibrios macroeconómicos y las perspectivas de la actividad productiva. Así mismo,
debe definir una política activa de encaje, buscando el adecuado equilibrio entre las necesidades de
liquidez; la eficiencia económica; los requerimientos de estabilidad de los agregados monetarios; y, la
solidez de la intermediación financiera.
Dado el conjunto de actividades que desarrolla el Banco Central del Ecuador para lograr sus objetivos y
considerando su autonomía técnica y administrativa consagrada en la Constitución Política de la
República del Ecuador, está en capacidad -con ventaja sobre cualquier otro agente de la economía,
público o privado- de estudiar y sugerir medidas de política que den seguridad al sistema de pagos y
confianza al depositante y que permitan anticipar y desplegar acciones para prevenir eventuales crisis en
la evolución de la actividad económica.
Para tal efecto se desarrolla un dinámico plan de trabajo y de investigaciones consistente y coherente con
sus objetivos. Entre estos se deben señalar por ejemplo, i) el cálculo del señoriaje perdido, ii) la
determinación del stock y de los flujos del medio circulante, iii) la identificación de los mecanismos a
través de los cuales se pueden producir variaciones en la liquidez del sistema monetario y sus efectos
4
sobre el índice de precios al consumidor, iv) el análisis de la competitividad de la economía en general y
del comercio exterior en particular (estrategia imprescindible para controlar el ciclo económico ante
shocks externos), v) las potencialidades de internacionalización de la banca, las posibilidades y alcances
del ejercicio de una política monetaria autónoma, vi) los mecanismos de transmisión de la política
monetaria norteamericana a la actividad económica nacional, vii) el desarrollo de modelos de crecimiento
de largo plazo dentro del nuevo esquema, viii) la construcción de la central nacional de balances, ix) la
dolarización de todo el espectro estadístico de síntesis, x) nuevas propuestas a la supervisión y regulación
bancaria y financiera, xi) la renovación y modernización del sistema de pagos, etc.
El mismo proceso de transición le ha impuesto al Banco Central del Ecuador una serie de exigencias en
un ambiente sumamente adverso. La ejecución del proceso de canje de monedas, conforme lo dispone la
Ley de Transformación Económica del Ecuador con toda la complejidad que este supone; la
determinación del monto necesario del fraccionario en sus diferentes denominaciones; los cambios
metodológicos en las estadísticas por la dolarización, la administración, gestión e inversión de la reserva
de libre disponibilidad; la elaboración del programa macroeconómico en el nuevo contexto monetario y
cambiario; la profundización del sistema de pagos, etc.
Por último, pero no menos importante es ratificar el compromiso social y cultural que ha asumido el
Banco Central del Ecuador a lo largo de su vida institucional. Los programas culturales y sociales en
ejecución trascienden las fronteras de lo puramente económico y constituyen eficientes mecanismos de
redistribución del ingreso y de gestión y custodia del más importante patrimonio cultural con el que
cuenta la nación ecuatoriana.
A pesar de la crisis económica y por la nueva circunstancia monetaria que el país está viviendo el Banco
Central del Ecuador ha puesto especial atención en sus responsabilidades de aportar en la consolidación
de la identidad nacional.
5
1.
Introducción.
El propósito de este documento es definir la misión que tiene el Banco Central del
Ecuador para el presente en consideración del nuevo esquema monetario y cambiario
adoptado en el año 2000 y presentar la visión de futuro de la institución.
Desde el enfoque de la ‹‹Economía Institucional›› una sociedad moderna demanda
instituciones y organizaciones que reduzcan la incertidumbre, completen los mercados,
viabilicen procesos de coordinación, y que se creen los espacios y las garantías
necesarias para que las conductas de los agentes individuales permitan alcanzar óptimos
sociales sustentables.
En el caso particular de los mercados monetario y financiero, esta propuesta considera
necesaria la presencia de un banco central renovado que permita corregir las
imperfecciones de estos mercados, tanto en el ámbito macro como a nivel
microeconómico.
El Banco Central del Ecuador es la organización más apropiada para controlar la
inestabilidad macroeconómica inherente al ciclo; para ejercer funciones de auditor de la
economía desde una posición distinta a la de los agentes responsables de su
administración; para promover los cambios institucionales requeridos por las nuevas
exigencias macro; y, para ejercer las funciones de un “tercero confiable” en la compleja
interrelación entre “agente” y “principal” 1 que está permanentemente presente en las
actividades relacionadas al sistema de pagos y con las operaciones financiero-bancarias.
Por otro lado, en el caso particular del país al Banco Central en su trayectoria histórica,
le ha tocado asumir compromisos culturales y sociales que, aún cuando no sean los
específicos a las funciones de una banca central clásica, han pasado a formar parte
estructural de su misión.
Obviamente la misión y los compromisos institucionales deben concretarse en acciones
y productos específicos a ser ejecutados en procesos diseñados con ese propósito. En los
anexos a este documento se enumeran el conjunto de productos que se ejecutan
actualmente y aquellos que se encuentran en fase de desarrollo a la luz de las nuevos y
futuros condicionamientos.
Este documento define y sustenta la misión y visión del Banco Central del Ecuador.
Ello de ninguna manera desconoce la importancia de las áreas de apoyo, indispensables
para dar sustento a la misión propuesta. Sin embargo, dado el carácter de este trabajo,
no se hace referencia a requerimientos de organización y de administración.
1
Estos conceptos se aplican en la teoría microeconómica y tienen relación con el problema que se presenta en la
presencia de información asimétrica entre el principal (que actúa como el que delega las funciones y
responsabilidades) y el agente (que actúa como la contraparte, en calidad de delegado).
6
2.
Instituciones y Economía Institucional.
La noción de que los mercados operan en competencia perfecta –lo cual supone la
existencia y el acceso a la información en forma simétrica y perfecta– está limitada al
análisis teórico. Por el contrario, los sistemas económicos están conformados por
mercados imperfectos, en los cuales los individuos acceden a información de diferente
calidad y en proporciones no equitativas, provocando incertidumbre, y afectando las
transacciones económicas y complicando la planificación de acciones futuras.
Es más, se ha demostrado que de los mercados difícilmente pueden surgir –al menos de
manera espontánea– las condiciones de organización y coordinación que posibiliten
resultados óptimos. De la misma manera, resulta improbable que los partícipes que
tienen como objetivo la maximización de sus beneficios, destinen recursos en procura
de generar externalidades positivas a los mercados y en especial en lo relativo a la
producción de información confiable para la toma adecuada de decisiones.
Estos tres elementos –información, incertidumbre y organización– se traducen en costos
de transacción. Si se acepta que a través de las transacciones los individuos integran un
sistema económico, entonces la asimetría de información, la ausencia de coordinación y
la incertidumbre asociada, demandan la inversión de recursos adicionales de tiempo y
esfuerzo para obtener el máximo beneficio.
Para reducir los elementos adversos, característicos de los mercados imperfectos, la
sociedad requiere de instituciones que proporcionen estructuras estables para la
interacción entre individuos. Desde una perspectiva teórica, las instituciones son las
reglas del juego de una sociedad o, más formalmente, las coacciones diseñadas por ella
para estructurar la interacción humana; es decir, son las creencias, los acuerdos
informales sancionados por la costumbre, las normas jurídicas, las acciones
administrativas y de control, y las organizaciones.2 Si a través de las instituciones se
establecen medios de coacción, también se define una base de incentivos que promueve,
premia o castiga las acciones de los individuos, tornando más eficiente el
funcionamiento del sistema, evitando el riesgo moral, el comportamiento oportunista y
las acciones ilegales.
En general, una sociedad se organiza alrededor de una matriz institucional, en la que se
definen las opciones y posibilidades de crecimiento y expansión de la economía. Esta
matriz institucional, además de normas e incentivos, está conformada por
organizaciones constituidas por asociaciones o grupos de interés público o privado con
objetivos comunes. El atributo que define a cada uno de los miembros de dichos grupos
2
Este desarrollo teórico tiene su origen en la llamada economía institucional; para una exposición exhaustiva se
sugiere revisar los trabajos de Douglas North (1993), Instituciones, Cambio Institucional y Desempeño
Económico, Fondo de Cultura Económica, México, 190 p. Una aplicación práctica del análisis de la economía
institucional se puede ver en Robert Picciotto (1995), “Putting Institutional Economics to Work: From Participation
to Governance”, World Bank Discussion Papers, No. 304.
7
u organizaciones es la posesión de ciertos derechos de propiedad (trabajo, capital, tierra,
etc.) que son los que sustentan sus transacciones.
Un grupo especial de organizaciones –las públicas– realizan acciones no mercantiles, a
pesar de actuar en el mercado; se plantea que son un resultado de los fallos del mercado
y que intervienen para lograr un segundo mejor. Estas no persiguen la maximización de
sus ganancias, sino que tienen como propósitos regular y completar esos fallos; tales
como son: la información asimétrica, la existencia de bienes públicos de monopolios
naturales y de externalidades negativas en los procesos de acumulación y distribución.
Organizaciones públicas que en muchas ocasiones han perdido la capacidad de cumplir
con las funciones y atribuciones a ellas delegadas por la ausencia de un permanente
proceso de rendición de cuentas y de auditoria social o por la presencia de un marco
jurídico inestable (en el que se alteran los derechos de propiedad); por la falta de
permanencia de los acuerdos o de los contratos; o por la inexistencia de espacios en los
que se pueda construir y alcanzar convergencias y compromisos; todo lo que da prueba
inequívoca de la existencia de una estructura institucional ineficiente y que en tal virtud
contribuye a elevar los costos de transacción.
En el contexto de la teoría de juegos una institución pública debe ser vista como el
“agente” de un “principal”, es decir de las organizaciones privadas. El “principal”
delega al “agente” el poder y la capacidad para resolver los conflictos inherentes a la
economía de mercado a fin de reducir los costos de transacción implícitos en la
interacción económica y de garantizar los derechos de propiedad.
En una matriz institucional el agente actúa entonces como un ‹‹delegado›› de los
distintos grupos de presión y, en el marco de las condiciones preestablecidas por el
principal, es autónomo para tomar decisiones. Una vez definidas dichas funciones, la
autonomía garantiza la universalidad y obligatoriedad de las reglas de juego o normas
acordadas.
La autonomía sustenta, además, la calidad de “tercero confiable”3 del agente, para
resolver las disputas en los mercados, pues previene el riesgo moral4 y crea
externalidades positivas para la interacción y, por ende, para la eficiencia de un sistema
económico.
Una matriz institucional en la que los agentes carezcan de autonomía, es proclive a
exacerbar las imperfecciones en los mercados; de entre ellas, una de las más importantes
es la relativa al acceso a la información. Aquel que mayores niveles de información
3
Se denomina tercero confiable al actor de un juego que es reconocido por dos oponentes como la parte dirimente
más idónea.
4
El riesgo moral ocurre cuando un principal tiene más información o mejores medios a su disposición para alterar las
normas, lo que le permitiría obtener ganancias extraordinarias dentro de un ordenamiento institucional previamente
pactado.
8
posee puede obtener mayores ganancias en relación a sus rivales, pues esa condición
privilegiada mejoraría su posición en el contexto de la competencia. Este sería el caso, a
manera de ejemplo, de una cámara de compensación y liquidación delegada a una
entidad privada que, por el ejercicio de esta función, dispondría de información
excepcional frente a sus competidores y tendría la opción de actuar en su favor y en
contra los más débiles o menos informados.
Organizaciones sin autonomía propician la ineficiencia económica al obligar a los
principales a destinar más recursos para obtener información; recursos que, en un
escenario de autonomía, serían asignados exclusivamente al proceso productivo. Así, un
nivel de precios sub–óptimo tiene, entre otras causas, costos de transacción elevados por
esta circunstancia lo que, adicionalmente, influye en el nivel de competitividad del
país.5
2.1 Instituciones y mercado monetario y financiero
En términos generales, se puede afirmar que toda economía se organiza en torno a sus
instituciones y que su grado de eficiencia es función de la capacidad de dichas
instituciones para proveer información, minimizar la incertidumbre y coordinar las
acciones de los agentes de mercado; y esto, es aun más relevante en el caso del mercado
monetario y financiero el que demanda la presencia de un banco central como la mejor
opción para alcanzar mayores niveles de eficiencia.
El mercado monetario y financiero es particular y con características diferentes a los
otros mercados. Las entidades bancarias y financieras (o agente), en oposición a las
industriales o comerciales, operan con dinero ajeno, el de los depositantes (o de los
principales) . Es por ello que en este mercado el riesgo de asimetría en la información es
alto y evidente: los administradores de dichas entidades conocen con exactitud la
situación financiera de sus clientes (empresas e individuos), mientras que éstos tienen
muy poca información sobre la gestión de los primeros. En este mercado la confianza en
el cumplimiento de los contratos, que en muchas ocasiones no son explícitos, es la base
de su funcionamiento y por ello justamente es que es el mercado más propenso a la
incertidumbre y al riesgo.
5
Este análisis, enfocado a las relaciones económicas, puede extenderse al estudio de las instituciones en general. En
este sentido, las organizaciones autónomas son, por construcción, democráticas o parte constitutiva de un sistema
democrático de gobierno. Sin poder judicial autónomo los grupos más poderosos usualmente obtendrían fallos a su
favor; sin tribunal electoral sería muy costoso para cada agrupación política –o candidato– garantizar que los
resultados obtenidos en las urnas sean los que prevalezcan; en ausencia de contraloría general, los gobernantes no
tendrían la coacción necesaria para que sus acciones sean transparentes, y los costos atribuibles a actos de corrupción
serían aún mayores. El liberalismo que acompañó a la formación de los Estados democráticos en el siglo pasado ha
sido, una y otra vez, revisado a la luz de la necesidad de contar con organizaciones que regulen la interacción social.
Obviamente, todo Estado también se sustenta en otras organizaciones, directamente vinculadas al poder central y que
no requieren de autonomía para realizar su misión y la economía institucional no desconoce este segundo tipo de
organizaciones; simplemente no viene a término considerarlas.
9
Por otro lado y en la medida en que este mercado se caracteriza por la existencia de
selección adversa y de racionamiento de crédito y en muchos casos por un alto grado de
concentración, la formación de las tasas de interés no garantiza ni el equilibrio del
mercado monetario (oferta y demanda monetaria) ni la transformación del ahorro
financiero en inversión productiva; lo que le hace especialmente vulnerable a eventos de
contagio y crisis.
Vale advertir que no se le puede pedir al sector financiero que se constituya en el
instrumento para la obtención del equilibrio monetario; pues no es su función ni su
objetivo. Como a cualquier empresa de mercado, a las empresas financieras les interesa
maximizar sus ganancias y esto no necesariamente equivale a propiciar y mantener el
equilibrio. Por el contrario, dicha maximización en muchas ocasiones puede producir
periodos de crisis monetarias; pues la suma de las opciones individuales para maximizar
ganancias no implica ni el equilibrio del mercado ni su eficiente funcionamiento.
Debe existir, por tanto, una organización específica y especializada que articule y
complete en la medida de lo posible los mercados monetario y financiero, mediante
acciones que contribuyan a minimizar la incertidumbre, a coordinar su funcionamiento
y a generar externalidades positivas; incluida la provisión de información confiable a
todos los participantes lo que se tiene que hacer sobre la base de la confianza depositada
como un verdadero “tercero confiable”.
De otra parte, en el ámbito macroeconómico, las acciones del conjunto de agentes de la
economía requieren de condiciones de estabilidad las que no surgen espontáneamente
del ciclo económico; de igual forma la información relevante requerida por los actores
de mercado (oportuna, confiable y consistente) no se produce tampoco en forma
espontánea de la operación de los mercados. De otro lado el escrutinio del
desenvolvimiento de la actividad económica, en el corto y mediano plazos, no lo deben
realizar los agentes económicos con compromisos adquiridos, sean estos fiscales o de
mercado.
Estas consideraciones son la base teórica sobre la cual se asienta la misión del Banco
Central del Ecuador; existe en consecuencia, una razón económica, que no proviene de
la voluntad de legitimarse por sí y ante sí. Tiene un papel específico como ejecutor de
las normas que constituyen la institución monetaria y financiera.6
Como se explica a continuación, el papel del Banco Central del Ecuador es necesario en
el nuevo esquema monetario y cambiario, tanto por la delegación explícita de la
Constitución Política como por las razones económico institucionales expuestas; las que
se tornan más importantes, en condiciones en que se ha abandonado la posibilidad de
6
Igual que la Corte Suprema de Justicia, el Tribunal Supremo Electoral, la Contraloría General del Estado, la
Procuraduría de la Nación y las superintendencias de Compañías y Bancos. Todas estas organizaciones existen para
mitigar la incertidumbre presente en las relaciones sociales y en la imperfección de los mercados.
10
ejercer política monetaria, entendida en sus términos convencionales7 Entonces a nivel
macroeconómico, su misión es procurar la estabilidad monetaria y cambiaria, lo que
implica la supervisión macroeconómica, la coordinación con la política fiscal y la
estabilización o política anticíclica; a nivel microeconómico, es garantizar el óptimo
funcionamiento de los mercados monetario y financiero.
En uno y otros niveles, el Banco Central del Ecuador persigue objetivos no mercantiles
para regular las acciones de mercado de los individuos. Y, como organización
constituida por los “principales” dentro de un sistema democrático, su misión última es
velar por el bienestar general de los ciudadanos.
Los niveles microeconómico y macroeconómico de la misión del Banco Central del
Ecuador son complementarios y dependientes uno de otro. Para lograr estabilidad
económica es indispensable un funcionamiento razonable y confiable del sistema de
pagos; y, el funcionamiento óptimo del sistema de pagos requiere de una razonable y
confiable estabilidad económica. Esta complementariedad y dependencia define la
necesidad de contar con una organización específica, autónoma e integrada.8
Se mantiene que en el ámbito macroeconómico la principal tarea del Banco Central del
Ecuador sigue siendo la gestión de la política monetaria y cambiaria pues, si bien con
dolarización hay una mayor endogenización de la oferta monetaria, esto no es óbice
para que dejen de presentarse variaciones no deseadas en la liquidez de la economía.
Esta endogenización aumenta los grados de incertidumbre debido a que la volatilidad de
los choques externos se reflejarían directamente en las condiciones de monetización de
la economía provocando dificultades en el diseño de planes de inversión, en la
definición de un horizonte de consumo, en los flujos de caja óptimos, en la planificación
de los niveles adecuados de existencias y en el nivel de empleo.
Por ello, la nueva misión de la política monetaria es y será la de atenuar las
fluctuaciones en la oferta de dinero en su acepción más amplia. Con este propósito, se
deberán crear mecanismos que promuevan el registro de ingresos efectivos de las
divisas tanto por comercio exterior como por la cuenta de capitales. Y, solo con esta
información se podrá construir un programa macroeconómico consistente y en su
contexto definir márgenes de acción para la autoridad monetaria a fin de lograr el
cumplimiento de las metas trazadas y de fortalecer el nuevo esquema. Esto implica
también estar en la capacidad de alertar sobre las posibles dificultades a las que se vería
abocada la economía, en el evento de que cambien las condiciones del entorno
internacional, o de que se presenten indicios de deficiencias en el sistema financiero o
de inobservancia de las metas previstas en el presupuesto del sector público.
7
Por mandato de la Ley de Transformación Económica del Ecuador el Banco Central del Ecuador no puede emitir
dinero (excepto el fraccionario) ni otorgar préstamos de liquidez a las instituciones del sistema financiero; además
esta norma ratificó las condiciones a las que se restringen los préstamos al gobierno.
8
Además de lo definido previamente, en este caso particular se entiende por autonomía la desvinculación entre la
organización ,el ciclo político y los centros de poder. Esto garantiza la permanencia de la misión institucional, más
allá de las vicisitudes determinadas por la alternabilidad en el gobierno.
11
En el ámbito microeconómico el Banco Central del Ecuador continúa su misión de dotar
a los mercados monetario y financiero de un tercero confiable. Las operaciones que se
efectúan para garantizar el funcionamiento del sistema de pagos necesitan de una
organización que medie con normas claras y precisas. Dichas operaciones no se pueden
delegar a una entidad privada que, al disponer de información privilegiada, podría
actuar en la frontera de lo ético. Esto también es válido en las funciones de agente
financiero de los depósitos del sector público no financiero, en las operaciones de
liquidación de la cámara de compensación; en transacciones de corresponsalía; y, en el
reciclamiento de los recursos de la banca, desde las instituciones excedentarias hacia las
deficitarias, a fin de prevenir situaciones de falta de liquidez.
Como se ha mencionado, una organización es definida por la matriz institucional de la
cual forma parte. Este proceso no es estático; por el contrario, tiene una trayectoria
histórica que, en el caso del Banco Central del Ecuador ha forjado las siguientes
fortalezas: (i) autonomía técnica, administrativa y financiera; (ii) potestad coactiva para
respaldar sus funciones; (iii) reconocimiento formal y de facto para conferir garantías a
nivel de organismos internacionales; (iv) personal altamente especializado; (v) ventajas
tecnológicas y de infraestructura; (vi) imparcialidad de sus acciones en los mercados; y
(vii) portadora de una escuela de permanente aprendizaje. La conjunción de estas
fortalezas en una organización corrobora el cumplimiento de su misión.
Las organizaciones tienen que transformarse para garantizar el cambio, en función de
las nuevas prioridades. Para que esto sea viable, dicho cambio deberá estar apoyado por
otras organizaciones, públicas y privadas, igualmente comprometidas en dichas
prioridades. Caso contrario, se acrecientan las posibilidades de ingresar a un esquema
ineficaz e ineficiente, pues se estaría contribuyendo a crear una situación de caos, es
decir, un ambiente en el que la incertidumbre sea tan grande que la economía no pueda
alcanzar niveles apropiados de crecimiento y desarrollo.9
Estos antecedentes nos permiten concluir en que la visión del Banco Central del
Ecuador será la de una institución que a través de su autonomía técnica vigile y
promueva la coherencia de la gestión macroeconómica y financiera para así coadyuvar
al desarrollo económico sostenido del país. En ese sentido potenciará sus funciones de
agente financiero de la Nación, monitoreará y regulará la liquidez, precautelará la
sustentabilidad de la balanza de pagos y será el principal centro de investigaciones
económicas del país.
9
Douglas North (1995), “The New Institutional Economics and Third World Development”, en Harris, Hunter,
Lewis (eds.), The New Institutional Economics and Third World Development, Routledge, Londres, pp. 17-26.
12
3.
La misión macroeconómica del Banco Central del Ecuador
Efectivamente la dolarización implica la renuncia a la capacidad de emitir dinero; no
obstante, de esto no se desprende que se deba renunciar a la gestión de la política
monetaria, así como tampoco se debe confundir la gestión de la política cambiaria con
la simple modificación en el precio de la divisa. De hecho, la dolarización implica, un
profundo proceso de modificación estructural de la base productiva y del sistema
financiero ecuatorianos.
Los supuestos que sustentan el que con la dolarización se deberían eliminar las políticas
monetaria y cambiaria son:
1. Se considera que la responsabilidad de la política monetaria del país que se
"dolariza" se traslada o se delega al Sistema de la Reserva Federal de los
EE.UU. y que este asume un carácter global en la gestión de su política
monetaria, incluso a riesgo de subordinar el interés particular de su nación al
de la “zona del dólar”10. Con la sustitución de la moneda doméstica por el
dólar en todas sus funciones se espera que se elimine, o en el peor de los
casos que se reduzca al mínimo, la probabilidad de ocurrencia de crisis
monetarias, por la fortaleza del dólar.
2. Se confía en el pleno funcionamiento de los estabilizadores automáticos del
mercado; lo que implica asumir que efectivamente los precios trasmiten toda
la información disponible y –lo que es más importante– que lo hacen en el
tiempo apropiado y en forma oportuna. Se cree que los factores de la
producción funcionan con perfecta movilidad y plena información, siempre
buscando su precio de equilibrio y su óptimo Pareto.11
Sin embargo el criterio de los técnicos del Banco Central es que no se ha eliminado la
posibilidad de que se produzcan crisis monetarias, las que incluso podrían ser más
graves en tanto comportan elementos exógenos y tampoco han desaparecido las
imperfecciones de los mercado de bienes, dinero, servicios y trabajo en el Ecuador.
Bajo el esquema de dolarización la economía ecuatoriana no está exenta del riesgo de
caer en crisis monetarias o financieras en un contexto en el que incluso se ha perdido la
función de prestamista de último recurso. De hecho la oferta de dinero, al menos en su
acepción más líquida (la base monetaria), deja de ser un instrumento (“exógeno”) para
la gestión política monetaria y pasa a ser una variable “endógena” al sistema. Con la
10
Se pueden presentar problemas de asimetría de objetivos frente al emisor monetario (EE.UU.). Las expansiones del
ciclo económico norteamericano no necesariamente coinciden con el ciclo económico ecuatoriano, lo que podría
llevar a una gestión no deseable de la tasa de interés. Como ejemplo se podría señalar los efectos que tuvo el
incremento de las tasas de interés de los EEUU a principios de los 80 en todos los países con alguna modalidad de
tipo de cambio fijo (Chile, Ecuador, etc.). Justamente en estos años la deuda externa empezó a ser un problema de
grandes magnitudes para estos países.
11
El óptimo de Pareto es esa situación de equilibrio en la que es imposible mejorar las condiciones de un agente
económico sin, al mismo tiempo, perjudicar las condiciones de los demás.
13
dolarización, la cantidad de dinero de la economía pasa a estar determinada
principalmente por la evolución de las cuentas externas, a saber: las balanzas comercial
y de capitales; variables sobre las que no se tiene un control directo y que son las que
van a originar cambios en la cantidad de dinero en circulación.
El Ecuador es una economía abierta, pequeña, con un alto nivel de endeudamiento y
dependiente de la exportación de productos primarios (vulnerables por su bajo
contenido de valor agregado) por lo que la variación que presentan sus cuentas externas
es y seguirá siendo relativamente alta independientemente del régimen monetario.
Un superávit comercial inesperado (sea por cantidades o por precios), junto a una
balanza de capitales equilibrada, provocaría un exceso de liquidez en el conjunto de la
economía; mientras que un elevado servicio de la deuda externa producto por ejemplo,
de un incremento no esperado en las tasas internacionales de interés originaría el
proceso inverso. La volatilidad de los capitales de corto plazo se trasmitiría
directamente a la cantidad de dinero en circulación en el mercado nacional; alterando el
stock de liquidez en la economía que ahora ya no puede compensarse internamente;
convirtiéndose en fuentes de crisis monetarias.
Adicionalmente puede ocurrir que una restricción del circulante por ejemplo, venga
acompañada de una reducción en la velocidad de circulación del dinero debido a una
actitud precautelar de los agentes económicos (incremento de la demanda
precaucionaría de dinero); y, para que se mantenga la identidad de la teoría cuantitativa
tendría que caer el producto y/o los precios; la deflación en precios y/o en producto
reduce las recaudaciones fiscales y las disponibilidades de liquidez para el gasto público
corriente y de capital. La crisis monetaria se transmite al sector real de la economía y
éste a su vez hace lo propio con las cuentas fiscales; las que actúan de manera procíclica
lo que, en un contexto de alto endeudamiento, puede resultar altamente perjudicial; en
tanto las respuestas externas a un incremento en las tasas de interés domésticas ( ajuste
automático) no se traducirían en influjos de capitales; por el riesgo de default.
Se plantea entonces la necesidad de que se pueda advertir la presencia de choques
internos y externos que puedan vulnerar –consecuencia de la volatilidad monetaria– la
evolución del ciclo económico; y, en el marco de un programa macroeconómico
consistente, se los pueda enfrentar mediante el diseño de un sistema de mecanismos de
estabilización que, actuando bajo reglas propias e independientes, sean regulados y
planificados integralmente desde el Banco Central del Ecuador.
Justamente, en estas funciones de monitorerar la ejecución de la política económica,
hacer el seguimiento del ciclo económico, presentar toda la información necesaria para
una adecuada toma de decisiones por parte de los agentes económicos, advertir la
posibilidad de choques exógenos, diseñar estrategias para enfrentarlas, ajustar el
programa macroeconómico, observar el cumplimiento de los compromisos en el campo
14
económico; es que el Banco Central puede ejercer su rol de tercero confiable, en el
ámbito macro.
Es por esto que el ejercicio tradicional de la programación macroeconómica debe
modificarse en sus metas, objetivos e instrumentos. Si antes la relación entre el
agregado monetario bajo control y la meta de inflación era muy estrecha y relativamente
estable; hoy la dolarización ha roto la relación entre instrumento y meta. Si antes la
gestión por parte de la autoridad monetaria en mesas de cambios y de dinero podía
alterar los niveles de la liquidez de la economía en la búsqueda de alcanzar el objetivo
inflacionario actuando en el arbitraje y en las expectativas de los agentes económicos;
hoy, simplemente no existen estos instrumentos; no hay control directo en el agregado y
tampoco se podría guiar o determinar un sendero para la inflación con algún grado de
discrecionalidad. Parecería ser que de una gestión discrecional en la política monetaria
se debería pasar a la regulación y control de los flujos en la búsqueda permanente de la
estabilización.
En este contexto es que se sugiere por ejemplo impulsar el Sistema de Mecanismos de
Estabilización Económica el que se sustenta en la creación de varios “fondos de
estabilización”. Cada fondo tendrá su propio ejecutor y reglas claras de captación y
colocación, específicos a su naturaleza y propósito; estará diseñado de manera que su
política de inversión contemple la alimentación de un fondo común que contribuya a
aliviar contingencias temporales específicas de cualquiera de ellos.
Este sistema de mecanismos de estabilización consideraría los siguientes fondos:
•
•
•
•
•
•
•
Fondo de estabilidad fiscal
Fondo de estabilidad monetaria
Fondo de contingencia financiera
Fondo de fomento productivo marginal
Fondo de reconversión industrial
Fondo de desarrollo regional
Fondo de combate a la pobreza
Cada fondo puede tener su propio ejecutor; debe estar diseñado de tal manera que,
conservando su independencia, parte de su política de inversiones contemple la
alimentación de un fondo común que contribuya a aliviar contingencias temporales; y,
reglas de captación y colocación de recursos, específicos a su naturaleza y propósito.
Dada la escasez de recursos, todos los fondos deberían contribuir a un mecanismo de
inversión común que actúe como si fuese un sistema de vasos comunicantes. Este
mecanismo de inversión común operaría como opera la inversión de la RILD . Sin
embargo, la alimentación de un fondo con recursos de otro debe operar de acuerdo a
reglas de colocación en términos de rentabilidad, riesgo y maduración preestablecidas.
15
El Banco Central del Ecuador tendría a su cargo el diseño, la gestión, el monitoreo y la
prospección de las condiciones que garanticen la sustentabilidad de cada fondo y del
sistema en su conjunto, desde una visión integral del desempeño macroeconómico del
país y en clara coordinación con la programación macroeconómica.
Es vital para el funcionamiento óptimo de este instrumento, el desarrollo de un sistema
de indicadores de alerta temprana y de un seguimiento de cada uno de los mercados
involucrados, para definir con la debida anticipación estrategias de emergencia, en casos
de alto riesgo de que el sistema de vasos comunicantes sufra choques adversos en varios
fondos a la vez. Esto requiere una gestión macroeconómica y financiera del sistema en
su conjunto.
Si bien al momento no se dispone de los recursos necesarios para todo el sistema, el
Banco Central del Ecuador debería contar con el diseño del mecanismo en su conjunto,
para garantizar el manejo técnico más apropiado de las contingencias que podrían
afectar a la economía, velando por la equidad intra e intergeneracional y regional, y por
la coherencia de un camino de desarrollo sustentable.
De esta manera, para citar un ejemplo, los fondos producto de las recuperaciones de los
recursos involucrados en el salvataje bancario (AGD, créditos de liquidez, etc.), de
mecanismos de conversión de deuda o de donaciones, tendrían listos los canales
adecuados para su utilización, a salvo de presiones coyunturales.
Así mismo, la estabilidad del corto plazo tiene razón de ser en tanto amplía el horizonte
de acción a los agentes públicos y privados y permite el diseño y desarrollo de
estrategias de crecimiento para el largo plazo. Y, en este contexto el Banco Central
puede coadyuvar también a la definición y ejecución de la estrategia de crecimiento y
desarrollo para el largo plazo.
La gestión de la política cambiaria también debe renovarse, en tanto la renuncia a uno
de los instrumentos de política económica que permitía corregir en forma rápida las
pérdidas de competitividad, obliga a encontrar otros instrumentos de gestión que
faciliten la inserción de la producción nacional en los mercados internacionales. Esto
desplaza el centro de la discusión y de la gestión de la política cambiaria hacia otra
variable de mayor relevancia como es el tipo de cambio real; lo que implica saltar de
una visión de competitividad e inserción internacional pasiva o espúrea a otra más
dinámica, permanente y eficiente, lo que no implica que se deje de observar los
movimientos del dólar en los mercados internacionales; y, estudiar sus efectos en la
economía ecuatoriana.
Con dolarización oficial de la economía, desaparece la posibilidad de provocar
variaciones nominales en este indicador, no obstante, la política cambiaria adquiere una
dinámica distinta. En el nuevo esquema económico, sustentado en la libre circulación
16
del dólar de los Estados Unidos, la política cambiaria se desenvuelve en relación a la
política económica orientada a la modificación del tipo de cambio real.
Si se acepta que la definición de tipo de cambio real como la relación que existe entre
los precios de los bienes comercializables y los precios de los bienes no
comercializables, la nueva política cambiaria consistiría en actuar sobre los factores que
permitan conseguir logros en competitividad; creando el marco necesario para que las
presiones de los precios de los bienes no comercializables disminuyan y a que el precio
de los comercializables, especialmente de nuestros productos de exportación, mejore en
los mercados internacionales. El Banco Central podría sobre la base de los estudios
respectivos, realizar una serie de recomendaciones de política económica orientadas a
lograr una evolución favorable en el tipo de cambio real y, dotar por tanto de mayor
competitividad a la producción nacional.
El ejercicio de la nueva política monetaria demanda la realización de un diagnóstico
muy detallado de los mecanismos de transmisión de los choques externos sobre la
liquidez de la economía y; el estudio de la capacidad de respuesta de los mercados de
activos, del producto, del empleo, del fisco y del sistema financiero. La posibilidad de
anticipar y determinar la duración de estos eventos, así como establecer su permanencia,
resulta una tarea imprescindible para afinar las medidas de política.12
El desenvolvimiento de la actividad económica depende en forma crucial del nivel, de
los flujos y de la accesibilidad al crédito. En un contexto de dolarización el Banco
Central renuncia a la gestión de la base monetaria (excluida la parte correspondiente a la
emisión de moneda fraccionaria); sin embargo, esto no implica per-se el que esta
institución no pueda influir sobre el mercado del crédito a través de otros instrumentos
de política. Por ejemplo, el Banco Central podría realizar una gestión más activa y más
amplia sobre los requerimientos de reserva al sistema financiero; hacer estudios y sobre
su base recomendaciones que permitan completar este mercado, sea a través del
fomento a la creación de nuevas instituciones especializadas en ofertar crédito a
segmentos de la población actualmente excluidos; sugerir modificaciones al marco legal
con éste propósito y con el de asegurar niveles de competencia, seguridad y
accesibilidad a la intermediación financiera así como regular la gestión crediticia de los
fondos de estabilización.
Para cumplir con los objetivos señalados en el ámbito macroeconómico, la Dirección
General de Estudios del Banco Central del Ecuador asume los aspectos
macroeconómicos de la misión institucional sobre la base de tres procesos13:
12
Por ejemplo, una caída en los términos de intercambio contrae la liquidez de la economía. El diagnóstico debe
determinar si ésta afecta al conjunto de bienes o al conjunto de los mercados, si es temporal o estructural.
13
Se entiende por proceso, “Cualquier actividad o grupo de actividades que emplee un insumo, le agregue valor a
éste y suministre un producto a un cliente externo o interno. Los procesos utilizan los recursos de una organización
para suministrar resultados definitivos”. Véase James Harrington (1993), Mejoramiento de los procesos de la
empresa, Santa Fe de Bogotá, McGraw–Hill Interamericana S.A.
17
§
§
§
Análisis y Política Económica de la Coyuntura
Investigaciones Económicas y Políticas de Largo Plazo
Estadística Económica
Los tres procesos son interdependientes, pues sus metodologías, requerimientos y
resultados se alimentan unos a otros. Así, los productos estadísticos constituyen
insumos para el análisis de la coyuntura, la programación macroeconómica, para la
investigación económica y el diseño de políticas de largo plazo. De igual forma, los
requerimientos de los procesos de análisis e investigaciones demandan información
estadística específica a los productos generados en ellos. De su lado, las investigaciones
sustentan un conjunto de conocimientos sobre la realidad ecuatoriana, necesarios para la
política y el análisis de coyuntura. En definitiva, la producción asociada de estos
procesos provee una visión integral y de conjunto que solamente así hace posible
estructurar la misión macroeconómica en condiciones de autonomía técnica.
El proceso de Análisis y Política Económica de la Coyuntura, tiene por misión analizar
y monitorear la evolución de la economía ecuatoriana y de la economía internacional en
la coyuntura, con el propósito de definir y recomendar políticas y estrategias para la
estabilización y sustentabilidad macroeconómica del país. El objetivo esencial de este
proceso es precisar la lógica de funcionamiento de corto plazo de la economía
ecuatoriana, identificar sus posibles desequilibrios y sugerir los correctivos necesarios;
y establecer sus relaciones fundamentales.
Bajo el nuevo esquema el desempeño económico va a depender de una manera crucial
del sector externo y del buen funcionamiento de la interrelación entre el sector real y el
sector financiero; justamente la última crisis permitió advertir que los responsables de la
política económica deben superar la estrecha visión de pretender alcanzar la estabilidad
financiera solamente; y, observar con mayor detenimiento la relación que se establece
entre lo monetario / financiero y lo real. Por tanto la estabilidad de largo plazo exige la
definición de una estrategia de desarrollo que busque una inserción eficaz a los
mercados mundiales que garantice un sector productivo robusto y diversificado
sustentado en un ágil y sólido sistema financiero.
Es por tanto imprescindible trabajar en el seguimiento de la economía internacional, con
énfasis en el ciclo de los EE.UU. y en la situación de los principales socios comerciales.
Así mismo, realizar estudios detallados de los principales precios del mercado, prever
su desenvolvimiento futuro y realizar simulaciones que permitan advertir la
vulnerabilidad de la economía. Se debe crear nuevos indicadores de alerta y
seguimiento monetario / financiero / real. Todos estos ejercicios se orientan a la
elaboración y monitoreo del Programa Macroeconómico y de la Síntesis Coyuntural,
que se constituyen en el insumo principal para la gestión de las nuevas políticas
monetaria y cambiaria. Evoluciones periódicas sobre la gestión macroeconómica serán
publicadas regularmente.
18
El proceso de Estadística Económica tiene por objetivo medir la evolución de la
economía ecuatoriana a través de la elaboración de estadísticas de síntesis
macroeconómica para los sectores monetario–financiero, fiscal, externo y real de la
economía; recopilar y procesar estadísticas de base; elaborar previsiones
macroeconómicas e indicadores de alerta; coordinar la recolección y diseño de
estadísticas; y aplicar y desarrollar metodologías de análisis estadístico (En el anexo 1
se detallan los productos que elaboran estos procesos).
En este contexto, la principal fuente de información y elaboración de la estadística
necesaria es justamente el proceso de Estadística Económica, que continuará siendo el
principal proveedor de estadística de síntesis macoeconómica y además tendrá que
redoblar esfuerzos para lograr recoger, clasificar, ordenar y presentar la nueva
información, en especial la relativa al “resto del mundo” y a la prospección de la
evolución futura de las variables más importantes dentro del nuevo esquema monetario.
El proceso de Investigaciones Económicas y Políticas de Largo Plazo, tiene como
objetivo analizar el comportamiento estructural de la economía, para contribuir al
diseño de estrategias de política para el desarrollo económico. Será necesario también,
proponer mecanismos de alerta temprana a fin de prevenir y anticipar el
desenvolvimiento del ciclo económico. Por otro lado, y mediante investigaciones de
más largo aliento se identificará las vulnerabilidades y fortalezas del esquema cambiario
adoptado en los campos relacionados con la producción, la productividad, el sistema
financiero, el comercio internacional y la inserción de la economía en los mercados
internacionales.
Será necesario además redefinir las formas de participación del país en los distintos
foros de integración y de convenios comerciales internacionales con propuestas de
renovación que consideren su nueva estructura monetaria y cambiaria. En este proceso
continuarán prestando servicio los Núcleos Técnicos de Información Económica y
Publicaciones Económicas. El primero cambiará su estrategia con respecto a la
conformación del fondo editorial, a fin de que tenga un sesgo hacia las nuevas
necesidades de información impuestas por el cambio de esquema monetario.
19
4.
La misión microeconómica del Banco Central del Ecuador
El medio a través del cual se transfieren fondos entre las entidades financieras – las que
a su vez actúan como depositarias de gran parte de la moneda en circulación – se
denomina sistema de pagos. Por su intermedio se canalizan todas las operaciones del
mercado financiero nacional y de éste, al mercado financiero internacional. Es un
sistema propio de las sociedades modernas pues, en tanto mantiene y salvaguarda la
estabilidad financiera, requisito del crecimiento económico, contribuye a normar y
reglamentar las transacciones monetarias una de las principales fuentes de
incertidumbre que surge en mercados imperfectos.
Si bien un sistema de pagos podría ser administrado y regulado por entidades del sector
privado, éstas enfrentarían conflictos de interés al ser, simultáneamente, reguladoras y
partícipes. Así mismo, si una entidad privada tiene más información que el resto, podría
monopolizar ese servicio y discriminar a partícipes marginales, los cuales verían
limitada su capacidad para competir. En este caso se estaría frente a un sub–óptimo que
incrementaría la incertidumbre y provocaría un funcionamiento ineficiente de la
economía.
Sólo una entidad autónoma, digna de confianza, sin fines de lucro, con acceso a
información completa, que actúe como tercero confiable, que coordine las operaciones
financieras, que tenga un objetivo superior al de cada partícipe del mercado y que
disponga de la dotación tecnológica y profesional, está en capacidad de administrar un
sistema de pagos sin generar riesgo moral, conflictos de interés e incentivos perversos.
Como consecuencia, la autonomía contribuye a la estabilidad financiera, la seguridad en
las transacciones y la regulación de este mercado.
El Banco Central del Ecuador ha sido –tradicionalmente– el ente regulador del sistema
de pagos y el operador de los principales mecanismos de liquidación vigentes al servicio
de la sociedad ecuatoriana, por lo que se ha constituido en el tercero confiable que
marca las directrices, normas y regulaciones de las operaciones financieras bajo
principios de seguridad, eficiencia, equidad y protección de los intereses de todos los
partícipes en ese mercado.
De ahí que parte de la misión microeconómica del Banco Central del Ecuador sea
garantizar la estabilidad, el buen funcionamiento y la confianza en el sistema de pagos,
y velar por la provisión adecuada de las especies monetarias en circulación. Estos
factores son indispensables para el desarrollo de las actividades financiera, comercial y
productiva de la nación.
En la gestión de esta misión el Banco Central del Ecuador ha incorporado normas
internacionalmente aceptadas, que determinan los principios fundamentales que debe
observar un sistema de pagos:
20
Principio de seguridad: garantiza la prevención, el control y minimiza los siguientes
riesgos asociados al funcionamiento del sistema de pagos:
• Riesgo sistémico.- se relaciona con el hecho que una entidad, al no cumplir con
sus obligaciones, ocasione que otras entidades no puedan asumir las propias.
• Riesgo de crédito.- se relaciona con la posibilidad de que un cliente no disponga
de los fondos suficientes para cubrir sus obligaciones.
• Riesgo de liquidez.- se relaciona con la posibilidad de que una entidad no pueda
cancelar sus obligaciones de manera oportuna.
b. Principio de eficiencia: logra un flujo rápido y preciso de las transacciones.
c. Principio de equidad: permite que todos los intermediarios puedan operar en los
sistemas que se desarrollen, promoviendo una justa competencia entre los mismos.
d. Principio de protección: garantiza la disponibilidad pronta y oportuna de los
recursos transferidos, así como de la confidencialidad y seguridad de la información
referente a los pagos realizados.
a.
En forma complementaria y dentro del ámbito microeconómico del Banco Central del
Ecuador presta los servicios de agente financiero del Estado, los que incluyen: (i) la
administración de los recursos financieros, tanto propios como aquellos de otras
entidades del sector público, encomendados por Ley; (ii) el servicio de la deuda pública
externa; (iii) la emisión y el servicio de la deuda pública interna; (iv) la participación en
los procesos de negociación y asesoría en la conversión y renegociación de la deuda
pública externa; y, (v) las funciones de depositario oficial de los recursos públicos.
De esta manera se facilita al Ministerio de Economía y Finanzas la recaudación de
impuestos y la ejecución de las respectivas distribuciones de fondos fiscales a favor de
todas las entidades que conforman el sector público. El Banco Central del Ecuador
proporciona al gobierno información sobre sus compromisos futuros e ingresos
estimados, colaborando de esta manera en la proyección de la caja fiscal. Esta tarea es
posible gracias al acceso a información completa en lo referente a los movimientos que
efectúan los agentes económicos a través de las cuentas que mantienen en la entidad el
sector público y el sistema financiero nacional.
Bajo el esquema de dolarización, la Reserva de Libre Disponibilidad y los recursos
financieros del Estado deben ser administrados con la mayor eficiencia, para modular
eventuales carencias temporales de recursos en los diferentes sectores de la economía.
Adicionalmente, el Banco Central del Ecuador cumple con el objetivo de reciclar los
recursos de liquidez del sistema financiero, público y privado, para garantizar su
viabilidad y, por ende, la del sector productivo del país14. El mecanismo de reciclaje de
liquidez es un instrumento de reordenamiento monetario que modula la volatilidad de
14
La Ley de Transformación Económica del Ecuador, anula la capacidad de conceder créditos al sistema
financiero, al derogar los artículos 24 y 25 de la Ley de Régimen Monetario y Banco del Estado.
Paralelamente, reorienta las operaciones de mercado abierto con el objetivo de recircular la liquidez entre
las instituciones financieras.
21
los flujos monetarios en la economía. Mediante estas acciones se logra recoger los
excedentes de liquidez del sistema financiero, a través de la emisión de Títulos del
Banco Central (TBC), para redistribuirlos equitativamente y canalizarlos, mediante
operaciones de reporto, hacia instituciones financieras que presenten necesidades
temporales de liquidez y que no pueden acceder de manera suficiente al mercado
interbancario. De esta manera se reduce el riesgo en el sistema financiero, al evitar que
problemas temporales y particulares de liquidez se perciban como dificultades
permanentes y generales de solvencia.
Por la naturaleza y características particulares de las funciones expuestas anteriormente,
la autonomía del Banco Central del Ecuador es factor determinante para el éxito de su
misión microeconómica. Esta garantiza la seguridad y la eficiencia económica en la
administración de los activos encomendados y el acceso a las mejores opciones en la
captación de recursos para el Estado. Igualmente, la autonomía facilita los roles como
agente financiero en las operaciones del sector público y como "tercero confiable",
otorgando credibilidad al sistema de pagos y propiciando su viabilidad.
Para sustentar estas funciones, el Banco Central del Ecuador realiza el seguimiento de
los niveles de riesgo, estableciendo mecanismos de alerta temprana y proponiendo los
correctivos del caso. Esto es posible porque se dispone de tecnología de punta e
infraestructura de comunicación nacional e internacional, para el análisis y seguimiento
de los mercados financieros y el acceso a información financiera.
Con este propósito, el Banco Central del Ecuador aborda su misión microeconómica
sobre la base de los siguientes procesos:
w
w
w
w
w
w
w
Proceso de Riesgos Financieros
Proceso de Inversiones
Proceso de Servicios Bancarios Internacionales
Proceso de Servicios Financieros
Proceso de Recuperación Financiera y Administración de Activos
Proceso de Servicios Bancarios Nacionales
Proceso de Especies Monetarias
Estos procesos son mutuamente dependientes, pues su ámbito de intervención está
relacionado con la operación de los mercados monetario y financiero. Las acciones que
se realizan tienen lazos comunes en tanto se enfocan a reducir los riesgos y a que las
transacciones sean eficientes y seguras. De esta manera, conforman un conjunto que les
permite tener una visión integral de esos mercados, lo que hace factible que la misión
microeconómica se lleve a cabo con competencia.
La misión del Proceso de Riesgos Financieros consiste en identificar y monitorear los
riesgos inherentes a las actividades financieras del Banco Central del Ecuador para
22
sugerir acciones que permitan minimizarlos, así como analizar y proponer políticas que
coadyuven a la estabilidad y fortalecimiento del sistema financiero nacional.
El Proceso de Inversiones administra los recursos de la Reserva de Libre Disponibilidad
y del Fondo de Empleados, así como de otros fondos entregados para su inversión en
los mercados financieros nacional e internacional (Fondo de Solidaridad, CONSEP y
Depósitos Judiciales).
El proceso de Servicios Bancarios Internacionales tiene como misión atender los pagos
al y del exterior (transferencias internacionales, corresponsalías con bancos en el
exterior y convenios de pagos internacionales), distribuir los ingresos provenientes de
las exportaciones de hidrocarburos, monitorear las operaciones de comercio exterior,
administrar las cartas de crédito del sector público por importaciones, efectuar el
servicio de la deuda pública externa y registrar la deuda externa privada y la inversión
extranjera directa.
El Proceso de Servicios Financieros administra los mecanismos de recirculación de
liquidez, al obtenerla de la emisión de Títulos del Banco Central (TBC), y redistribuirla
a través de Operaciones de Reporto, hacia las instituciones financieras. Cumple con la
función de agente financiero del Estado, al realizar la emisión, custodia y pago de
principal e intereses de la deuda pública interna.
La misión del Proceso de Recuperación Financiera y Administración de Activos es
recuperar mediante mecanismos extrajudiciales y judiciales la cartera recibida o
transferida al BCE y efectuar la administración y realización de los activos recibidos en
calidad de dación en pago
El Proceso de Servicios Bancarios Nacionales asegura el normal funcionamiento del
Sistema de Pagos del país (cámara de compensación, transferencias interbancarias
nacionales, agente financiero y fiduciario del Estado, depositario central del sistema
financiero, corresponsalía de bancos locales).
El Proceso de Especies Monetarias provee al sistema financiero el servicio de
recepción, clasificación, custodia y distribución de billetes dólares y moneda
fraccionaria. Además, brinda al público en general el servicio de cambio y canje de
billetes y monedas.
En cuanto el sistema de estabilización y desarrollo propuesto anteriormente15 se
implemente, la DGB actuaría como un operador del sistema de fondos, responsable ante
los respectivos directorios y ejecutores de los mismos.
15
Ver la Apunte de Economía No. 13, Banco Central del Ecuador
23
5.
La banca central del futuro: independencia, representatividad y contraloría
16
social
La vulnerabilidad externa, la fragilidad fiscal, la convergencia de la inflación a los
niveles internacionales, la mejora de la productividad y la eficiencia productiva son los
temas urgentes de una agenda de reformas económicas inconclusa que, además, deberá
ser acompañada - en la mayoría de casos- por una profunda reforma política y cambios
constitucionales, que culminen en una reorganización del aparato estatal, en mayor
equidad social, fundamentalmente.
La literatura económica, desde finales de los años ochenta, está llena de artículos
relativos a la independencia de los bancos centrales y a las repercusiones que esta
independencia tiene en el logro de los equilibrios macroeconómicos. En el marco de la
dolarización, si bien se pierde la función de emisión quedan espacios abiertos para el
ejercicio de una política monetaria anticíclica como ha quedado demostrado en la
exposición anterior. Una clara “división del trabajo” entre el papel de los organismos de
la hacienda pública y el banco central permitiría -al menos- situar las responsabilidades
respecto del incremento de los medios de pago o su reciclaje bajo un modelo de
dolarización.
Los gobiernos, por definición, al desenvolverse en una referencia temporal de corto
plazo tienen un horizonte finito para la maximización de su función de utilidad; por
tanto, dicho horizonte es, por definición, unigeneracional lo que en un contexto de
segmentación social y multipartidismo fragmentario acentúa la vocación cortoplacista
en el ejercicio de la política económica, actitud que se proyecta a los agentes
económicos y repercute en una visión también cortoplacista de la evolución económica.
Es evidente que la decisión de “conceder” independencia a la política monetaria no
revela, como parecería, únicamente una decisión de naturaleza técnica; tiene, además,
un claro trasfondo político-social en el que los consensos deberían tender precisamente
a encontrar “objetivos nacionales” que se expresarían afirmando que la función de
utilidad de quienes actúan en política activa debería tratar de conciliar objetivos
intertemporales y multigeneracionales. En todo caso, en dichos consensos, la estabilidad
de precios o la importancia de la gestión anticíclica deberían tener una ponderación
importante.
El Banco Central del Ecuador debe considerar entonces entre sus prioridades
estratégicas una conducción macroeconómica consistente a través del tiempo, sin
interferencias originadas, por ejemplo, como consecuencia del ciclo político,
especialmente marcado en los países en desarrollo.
16
Esta sección se ha basado en Varios autores, Setenta Años del Banco Central del Ecuador, Pasado, Presente y
proyección al Futuro, Quito, Ecuador, Banco Central del Ecuador, noviembre de 1997.
24
Si bien la dolarización por si sola implica que la autoridad monetaria no puede llevar a
cabo políticas monetarias (a través de instrumentos directos o indirectos, en precios o
cantidades); se ha explicado in extenso que la autoridad monetaria no pierde la
capacidad de influir sobre la estabilidad macroeconómica a través de la utilización de
otros instrumentos de política; por medio de las recomendaciones de política económica
que haga a otras instancias de la función pública; y, a través de la información que
presenta a la sociedad respecto al manejo macroeconómico y sus análisis respectivos.
Por ello, es igual de importante ahora como lo era antes de la dolarización, que las
funciones del Banco Central se realicen bajo el mayor grado de independencia respecto
a las presiones de grupos de poder en la sociedad ecuatoriana, para que la utilización de
los instrumentos de política y las recomendaciones y análisis que se realicen tengan
como principal fundamento el bienestar de la sociedad entera.
Un banco central goza de independencia cuando sus directivos, órganos colegiados o
mandos principales no están sometidos o presiones por parte de entidades del Poder
Ejecutivo, el Parlamento o cualquier grupo de presión integrante de la sociedad civil. En
definitiva, un banco central es independiente si sus decisiones de política económica y
de carácter administrativo son producto de la reflexión colectiva de sus instancias
directivas; esta independencia puede manifestarse de varias maneras: constitucional,
legal o de facto.
Por ejemplo, la limitación legal impuesta a la posibilidad de que el Banco Central
conceda créditos al Sector Público , constituye un primer freno importante que debe ser
complementado con la reestructuración del Estado; caso contrario, éste emitirá deuda
pública y en la mayoría de casos creará un efecto de crowding out a la inversión privada
y, por otro lado, generará presiones sobre la tasa de interés y desequilibrios en los
mercados monetario y financiero.
Se debe aclarar el que la lucha contra la inflación no necesariamente es el único objetivo
de los bancos centrales, “por ejemplo, el Convenio Consultivo del Sistema de la
Reserva Federal en los Estados Unidos habla explícitamente de un crecimiento de los
agregados monetarios compatible con el pleno empleo, de la estabilidad de precios de
largo plazo y del crecimiento del producto y moderadas tasas de interés” [Rubli 1997, p.
6]. Aunque en la práctica un número elevado de bancos centrales manejan directamente
la política cambiaria, no está claro -o al menos no hay consenso- si ésta es una función
típica de banca central.
Es claro que la eficiencia en el ejercicio de las funciones de banca central tiene un
impacto multiplicador sobre la estabilidad macroeconómica. Las tareas que cumple el
BCE y que cumplirá a futuro pueden influenciar de manera determinante las
posibilidades de crecimiento y desarrollo del país, lo que a su vez afectará la
oportunidad de mantener la estabilidad macroeconómica en el largo plazo. En este
sentido es indispensable que las funciones que el BCE tiene y tendrá de acuerdo a lo
descrito en este documento, se lleven a cabo con el mayor grado posible de
25
responsabilidad y ética, teniendo siempre como objetivo el bienestar económico del
conjunto de la población.
De modo que la independencia no cambia ni la estructura técnico-administrativa ni las
funciones principales de un banco central convencional; modifica algo más importante:
la visión que la sociedad civil debe tener respecto de las responsabilidades de los
funcionarios públicos, lo que implica una acrecentada responsabilidad de supervisión
comunitaria (accountability) y la visión que los responsables técnicos deben tener de su
responsabilidad frente a la sociedad; lo que implica ganancia (o pérdida) de credibilidad
y, en consecuencia, un permanente “rendimiento de cuentas” social, tan necesario en
sociedades poco transparentes y escasas de permeabilidad social.
Se debe por tanto darle el mayor nivel de seguridad a la población de que las decisiones
tomadas y las recomendaciones de política sugeridas por el BCE a otras instancias
gubernamentales, están encaminadas a fomentar el objetivo que por ley el BCE
persigue.
Y es que la autonomía e independencia que las leyes del país le garantizan a esta
institución son un requisito necesario pero no suficiente para que el Banco Central
ejerza sus funciones sin la presión o influencia de grupos de poder. No son un requisito
suficiente porque dicha autonomía consagrada en las leyes solo resguarda el derecho de
las autoridades del BCE a tomar las decisiones que estimen conveniente dentro de su
campo de acción que es la política monetaria o crediticia; es necesario por tanto
asegurar que estas autoridades tengan los incentivos necesarios para que las decisiones
tomadas estén encaminadas al bienestar colectivo. El concepto de “accountability” es
clave para lograr la generación de este tipo de incentivos “no perversos”; y, este
concepto hace alusión a la rendición de cuentas que una persona empoderada de
autoridad tiene que presentar a la sociedad respecto al ejercicio de sus funciones y
decisiones tomadas.
Y, el grado de “accountability” de una institución a estar en estrecha relación con su
grado de representatividad; el que se convierte en condición suficiente. Representación
que le permita actuar como el interlocutor válido y “equidistante” de todos los sectores
de la sociedad.
26
6.
Misión cultural del Banco Central del Ecuador
Desde su fundación, el BCE está al servicio del desarrollo del Ecuador, entendiendo
que, para que dicho desarrollo sea integral, su acción no puede circunscribirse a lo
estrictamente económico y debe trascender a lo cultural y social. Si bien lo cultural no
forma parte de las misiones macroeconómica y microeconómica, inherentes a la banca
central tradicional, el Banco Central del Ecuador ha incluido por más de medio siglo la
promoción cultural en su misión; por diferentes razones de orden histórico e
institucional.17
Con un esquema de dolarización es aún más importante y urgente continuar y fortalecer
los programas culturales del Banco Central del Ecuador, pues este esquema, inscrito
dentro de un proceso más amplio de globalización de la economía en particular y de las
naciones en general se requiere el afianzamiento de los valores culturales nacionales,
fuente primordial de la identidad; pues se corre el riesgo de ser “estandarizado” dentro
de una cultura internacional unificadora.
El Banco Central del Ecuador es custodio de cerca de cuatro millones de obras
culturales, como libros, mapas y atlas, colecciones de periódicos y revistas, documentos
originales en papel, videos, partituras, grabaciones sonoras en distintos formatos,
fotografías, pinturas, esculturas, piezas arqueológicas de cerámica, metal, piedra y otros
materiales, monedas y billetes, objetos etnográficos, etc. El conjunto de esos objetos,
que se salvaguardan, son objeto de investigación y se exhiben en Esmeraldas, Ibarra,
Quito, Bahía de Caráquez, Manta, Riobamba, Guayaquil, Cuenca y Loja, constituye la
mayor colección cultural formada en el Ecuador desde su creación como República
independiente. Representa, además, una parte significativa de los activos de la entidad
(con un valor económico estimado en muchos millones de dólares pero que, en realidad,
es invalorable) y constituye un segmento insustituible del patrimonio cultural de la
nación ecuatoriana.
El Banco Central del Ecuador mantiene la convicción de que ese patrimonio cultural
debe ser desarrollado, conservado, investigado y difundido, en beneficio de la
humanidad.18
Para cumplir con la misión cultural, el Banco Central del Ecuador cuenta con tres
procesos:
§
Museístico
17
Este es el caso de otros bancos centrales de América Latina. La experiencia más próxima constituye la del Banco
de la República de Colombia que mantiene la Biblioteca Luis Angel Arango (el mayor repositorio bibliográfico de
ese país) y el Museo del Oro.
18
La obligación del Banco Central, de mantener este acervo cultural y de apoyarlo con sus propios recursos, está
consagrada en la Ley de Régimen Monetario y Banco del Estado.
27
§
§
Documental
Editorial
El Museístico administra los museos de la institución. El documental gestiona los
servicios de biblioteca y musicoteca. El editorial recoge investigaciones, tratados y otras
obras sobre las artes y la historia del país para publicarlas en sus diferentes colecciones
(los productos que corresponden a estos procesos se encuentran en el anexo 3).
28
7.
La misión social del Banco Central del Ecuador: Programa del Muchacho
Trabajador
Los objetivos nacionales requieren de una mutua correspondencia entre la política
económica del país y su política social, a fin de armonizar el impacto económico con
políticas de compensación y desarrollo social.
La política económica imprime las directrices fundamentales para el desarrollo
dinámico y equilibrado de la economía, el crecimiento y diversificación del aparato
productivo, el control de los indicadores macroeconómicos, la aceleración del progreso
científico tecnológico, el mejoramiento de la calidad de todos los eslabones de la
economía nacional.
La política social, por su parte, busca elevar el nivel y calidad de vida de la población,
cualificar su fuerza laboral y mejorar su adaptabilidad a los procesos de mercado,
posibilitando la incorporación de los diversos sectores sociales como factor dinámico
del proceso económico, a través de políticas de capacitación profesional y garantía de
derechos fundamentales como los de empleo, salud y educación.
Hoy se levanta como derecho fundamental de las naciones, el derecho al desarrollo que
supone un crecimiento económico sostenido en interdependencia con el crecimiento
social, es decir, con la equidad, la satisfacción de necesidades básicas y el acceso al
conocimiento. Es el reto actual para gobiernos y sociedades.
Este enfoque integral del desarrollo humano promete ser la vía de superación de la
pobreza, la inequidad, el desempleo, la corrupción; y, de acceso a un más amplio
espectro de oportunidades para los sectores más vulnerables de la población
ecuatoriana, especialmente, los niños y jóvenes.
Mas aún cuando el gobierno nacional optó por el proceso de dolarización, le
corresponde al Banco Central del Ecuador en su nueva misión, reflejar la tendencia
mundial expresada en los organismos internacionales, como el FMI y el Banco
Mundial, para incorporar a los países en desarrollo en el proceso de globalización; y, a
la vez, conjugar la importancia y la reciprocidad existentes entre la política económica
y la política social y viceversa.
Actualmente, la crisis económica que afecta al país ha expulsado más y más niños a
trabajar en la calle. El 37% de niños menores de 18 años trabajan en el país y, de ellos,
el 58% han desertado del sistema escolar. El 74% de los niños que trabajan aportan al
presupuesto de sus familias que viven con un promedio de dos dólares diarios. Estas
cifras podrían aumentar significativamente, si el proceso de dolarización no es
acompañado de una política de inversión social de largo alcance.
29
De ahí que, el Banco Central del Ecuador, como entidad bancaria moderna
multidimensional incorpora en su estructura, procesos especiales que salvaguardan el
patrimonio cultural de la nación ecuatoriana y su patrimonio social, los niños y jóvenes,
como la semilla de transformaciones sustantivas y como fuerza productiva fundamental
del país. De esta manera aporta al desarrollo económico, social y cultural del Ecuador.
La misión primordial del Programa del Muchacho Trabajador es promover el respeto,
valoración y vigencia de los derechos de la niñez en la sociedad ecuatoriana y propiciar
la formación ciudadana de niñas, niños y jóvenes que viven en condiciones de
marginalidad, a fin de elevar su calidad de vida, ampliar sus oportunidades, potenciar su
actoría social y, desde su participación, apostar al desarrollo del país y a la construcción
de una nueva cultura democrática.
Para cumplir con la misión se han establecido las siguientes acciones y mecanismos:
1. El PMT liderará, a nivel nacional y regional, propuestas de cambio en la calidad
de vida de niñas, niños y jóvenes que viven en condiciones de marginalidad,
desde el ejercicio de sus derechos.
2. Impulsará la constitución de organizaciones para la defensa y exigibilidad de los
derechos de la infancia y la juventud, comprometiendo a gobiernos seccionales,
instituciones y sectores sociales organizados del país.
3. Será un centro de transferencia de sus propuestas y experiencias para proyectar
su sostenibilidad y trascendencia.
4. Participará en la formulación de políticas de Estado para la infancia y juventud
que garanticen la vigencia plena de sus derechos y genere transformaciones en
su situación.
Los ejes de acción contemplarán aspectos cualitativos tales como: (i) sensibilizar,
comprometer y movilizar a distintos sectores de la sociedad y del Estado en políticas y
acciones de defensa y vigencia de los derechos de la niñez y juventud; y (ii) fortalecer el
proceso de formación de niñas, niños y jóvenes, con un sólido sistema de valores y el
desarrollo de su capacidad de aprendizaje hacia la construcción de ciudadanos
competentes y productivos, éticos, flexibles al cambio, con responsabilidad social,
identidad y visión de futuro.
Para cumplir con la misión, cuenta con dos procesos:
§
§
Movilización y concertación social
Formativo pedagógico
El de movilización y concertación social busca el respeto, vigencia y defensa de los
derechos del niño y el joven en la sociedad ecuatoriana, a través de las defensorías
comunitarias de la niñez y la familia, la incidencia en políticas públicas para la niñez y
juventud y, la promoción en derechos de la infancia y la juventud. El proceso formativo
30
pedagógico, incorpora un sistema de valores y de destrezas cognitivas que mejoran la
capacidad de aprendizaje de niños y jóvenes, para su adaptación a los vertiginosos
procesos de cambio del nuevo milenio a través de la dotación de espacios alternativos
de prevención y formación a niños de barrios urbano marginales, centros de atención
especializada para niños y adolescentes trabajadores y por medio del programa
“Construyendo Nuestro Futuro”.
31
Anexo 1:
Productos de los procesos que sustentan la misión macroeconómica del
Banco Central del Ecuador
A. Análisis y Política Económica de la Coyuntura
1. Reporte y Seguimiento de la Economía Internacional
El eje central de los trabajos de esta unidad será alertar sobre los cambios que se
produzcan en el ambiente económico internacional y que puedan afectar el “normal”
desenvolvimiento del ciclo económico nacional; sugerir estrategias para enfrentar
los potenciales choques externos, así como para tomar ventaja de coyunturas
favorables. Determinar la lógica de funcionamiento de corto plazo de la economía y
proponer opciones de política económica. Especial interés se deberá poner en el
seguimiento y monitoreo de la economía de los EEUU así como de los principales
socios comerciales y financieros del país vigentes, potenciales o futuros.
2. Programación macroeconómica y síntesis coyuntural:
La elaboración del Programa Macroeconómico es tarea fundamental del Banco
Central del Ecuador. Este producto se centra principalmente en la formulación de un
programa macroeconómico consistente para el corto plazo (no más allá de dos años
de programación) que considera una síntesis integrada de las cinco áreas de
desenvolvimiento económico: el monetario, el financiero, el fiscal, el real y el sector
externo. Una vez realizado el Programa, es también su responsabilidad realizar el
seguimiento de las metas establecidas y la evaluación de las mismas. Estos
productos son materia prima fundamental para la elaboración de la Síntesis
Coyuntural.
La elaboración y cumplimiento de este producto se realiza de común acuerdo con el
FMI cuando así lo amerite y se presentará para la discusión a los distintos sectores
de la sociedad
3. Auditoria y seguimiento de la gestión macroeconómica:
La renuncia implícita que con la dolarización se hace a la gestión de la política
económica a través de la definición de metas de agregados monetarios, de tipo de
cambio o incluso de meta inflacionaria; han centrado la atención del Banco Central
en intentar desarrollar alternativas sólidas y consistentes. Una de ellas es puede ser
el de la meta de crecimiento económico. De esta forma la auditoría y el seguimiento
de la gestión macroeconómica de los diferentes hacedores de la política económica y
la formulación de alternativas de política económica para el corto plazo consistentes
32
con las metas de crecimiento entrarían en el ámbito de las funciones del Banco
Central del Ecuador.
Parte de este producto es la definición del diseño y las estrategias de utilización en
coyunturas específicas de los fondos de estabilización. También se publicará,
regularmente, la Síntesis Coyuntural de la Economía Ecuatoriana.
4. Seguimiento de la inflación, tasas de interés, tipo de cambio real y empleo.
Consiste en el análisis de los principales precios de la economía. Es un insumo
necesario para conocer e informar sobre los principales cambios que se producen en
la economía nacional y alertar sobre las posibles consecuencias.
5. Situación de la relación Sistema financiero – Sector Real.
Los enfoques tradicionales de estudio y seguimiento de la situación de la
intermediación financiera; se basan en la clásica dicotomía (autonomía) entre la
esfera monetaria y la real que sustentó los desarrollos del pensamiento clásico y
neoclásico posteriores a la teoría cuantitativa del dinero. Sin embargo, ya desde
Patinkin la teoría reclamaba la lógica interacción entre estos sectores; incluso para
muchos sin minar los resultados de la neutralidad del dinero. Esto sumado a las
particulares características de la última crisis financiera en el Ecuador obligó al
Banco Central a iniciar una investigación profunda sobre la relación dinámica
existente entre el sistema financiero y el sector real. Esta investigación definirá
métodos, indicadores y el contexto teórico para su seguimiento. Este es un producto
que, en coordinación con otros procesos del Banco Central del Ecuador,
suministrará a la sociedad indicadores de alerta que permitan anticipar posibles
fallas en este mercado.
6. Tarea de corto plazo.
•
Seguimiento de negociaciones y regulaciones internacionales sobre el comercio e
inversiones. Definición de estrategias en sectores clave (servicios financieros, por
ejemplo). Publicaciones regulares especializadas
B. Investigaciones Económicas y Políticas de Largo Plazo
1. El principal producto de este proceso son las investigaciones económicas, que
constituyen un sustento para el diseño de políticas de corto, mediano y largo plazos.
Los principales temas que se abordarán en el futuro a fin de afianzar el
funcionamiento del nuevo esquema económico son:
•
Evaluación de los modelos de inflación
33
•
•
•
•
•
•
•
•
•
Estructura de la relación entre la macroeconomía y el sector financiero
Situación del mercado del trabajo
Choques externos, sostenibilidad y flexibilidad de la política económica
Competitividad y productividad
Dinámica del tipo de cambio real
Seguimiento y análisis permanente de la dolarización como histórico
Economía del largo plazo y ciclo económico
Estrategia de reconversión industrial nacional y regional
Participación en las propuestas de reforma estructural y sectorial: seguridad
social, banca pública, privatizaciones, autonomía y descentralización.
1. Productos adicionales:
Paralelamente este proceso tiene a su cargo dos productos importantes:
•
•
Administración y actualización de la Biblioteca e Información Económica
Publicaciones económicas.
c. Estadística Económica
1. Estadísticas de síntesis macroeconómica
Para medir la evolución de la economía se emplean modelos económico-contables
denominados de “síntesis macroeconómica.” Estos requieren consistencia estadística
y contable, dentro de un contexto de equilibrio general, y pueden aplicarse a niveles
coyuntural (corto plazo) y estructural (largo plazo). Son las cuentas nacionales, la
balanza de pagos, las estadísticas de finanzas públicas y las estadísticas monetarias y
financieras. Los productos que surgen de estos subprocesos son los siguientes:
1.1. Cuentas nacionales reales y financieras
1.2. Estadísticas del Sector Externo y de Balanza de pagos
1.3 Estadísticas monetarias y financieras
1.4 Estadísticas de finanzas públicas
2. Estadísticas macroeconómicas básicas
La medición de la evolución de la economía se complementa con estadísticas
macroeconómicas que, por su periodicidad y características especiales, responden a
criterios específicos a ellas. A diferencia de las estadísticas de síntesis macroeconómica,
las estadísticas básicas definen su calidad en función de la consistencia estadística. Son
las siguientes:
34
2.1. Captura y presentación de Información y Estadística de base:
•
•
•
•
•
Sistema financiero.
Sistema monetario
Sistema corporativo
Sector público.
Precios, salarios y empleo
2.2 Encuestas de coyuntura e índice de actividad económica coyuntural (IDEAC)
2.3 Previsiones económicas
3. Productos en desarrollo
Para consolidar la dolarización el Banco Central del Ecuador y las autoridades
económicas requieren de información adicional a la que se ha producido, en especial
enfocada al corto plazo. Con este propósito, se están diseñando nuevos productos:
•
•
•
•
•
•
•
•
•
•
•
•
•
•
•
•
•
Central de balances
Indicadores del sector externo.
Precios internacionales de productos de exportación.
Comercio no registrado.
Indicadores de competitividad.
Indicadores de alerta temprana de balanza de pagos.
Indicadores de alerta temprana de finanzas públicas.
Panorama monetario en sentido amplio.
Panorama financiero.
Panorama de cooperativas.
Indicadores de alerta temprana monetarios y financieros.
Indicadores de alerta temprana de precios.
Indicadores de alerta temprana de salarios y empleo.
Precios internacionales de productos de exportación.
Indicadores de alerta temprana de comercio exterior.
Indices de actividad por industria.
Indicadores de alerta temprana del sector real.
35
Anexo 2:
Productos de los procesos que sustentan la misión microeconómica del
Banco Central del Ecuador
1. Proceso de Riesgos Financieros
Consiste en identificar y monitorear los riesgos inherentes a las actividades financieras
del Banco Central del Ecuador para sugerir acciones que permitan minimizarlos, así
como analizar y proponer políticas que coadyuven a la estabilidad y fortalecimiento del
sistema financiero nacional. Cuenta con los siguientes productos:
1. Informes sobre legislación financiera y mercado de valores: incluye el análisis y
propuestas de modificación a la legislación financiera ecuatoriana, para adecuarla al
entorno dinámico de la economía y del funcionamiento del sistema bancario.
2. Reporte bancario y financiero: califica el desempeño financiero de las entidades que
operan en el sistema financiero nacional. Con ello se las cataloga en función de sus
diferentes riesgos para poder anticipar potenciales debilidades y así proponer
correctivos oportunos. Con el propósito de contar con una herramienta extra–situ de
análisis de la situación financiera (patrimonial, liquidez y de gestión) de los bancos
privados y disponer de una herramienta que permita determinar en forma oportuna
niveles de riesgo relevante; conjuntamente con el Organismo de Control se elaboran
sistemas de alerta temprana. Estas herramientas permiten monitorear los niveles de
riesgo de las instituciones bancarias, su evolución y su tendencia, para que en base a
los resultados, se tomen decisiones en cuanto a niveles de exposición de inversiones
en cada institución financiera.
3. Reporte de liquidez de bancos y financieras: posibilita conocer el nivel de liquidez
de las instituciones financieras y determinar las potenciales dificultades para su
adecuado funcionamiento con el fin de proponer los correctivos oportunos.
Conjuntamente con las áreas de tesorería de las entidades financieras que operan en
el país, se realiza un seguimiento de la situación de liquidez de cada entidad y se
efectúan proyecciones con el objetivo de prever oportunamente desfases de liquidez
y efectuar las recomendaciones pertinentes a las autoridades del Banco Central y por
intermedio de éstas a la entidad de control.
4. Matriz de riesgo de los balances del BCE: consiste en el análisis de los cuatro
balances del Banco Central, con el propósito de recomendar y proponer a las
autoridades políticas que permitan limitar el riesgo en el manejo de activos y
pasivos, administrando de esta manera los riesgos inherentes a las operaciones del
BCE.
36
5. Informe de evaluación del flujo de caja del BCE: efectúa el análisis y seguimiento
de la liquidez del BCE para determinar fuentes de desequilibrios entre las posiciones
activas y pasivas y proponer los correctivos necesarios en forma oportuna.
6. Cupos de operación de las instituciones financieras: se refiere al control del
cumplimiento de la normativa vigente, para establecer cupos de operación de las
entidades financieras, nacionales e internacionales, que realizan operaciones con el
BCE. De esta manera se garantiza que los recursos que la institución compromete
como agente regulador del sistema financiero o para fomentar operaciones de
comercio internacional, sean adecuadamente canalizados hacia dichas instituciones.
7. Informes de evaluación de los portafolios de inversión administrados por el BCE:
se reporta el cumplimiento de las políticas y niveles de riesgo asumidos en las
inversiones que desarrolla el BCE, así como los resultados en términos de
rendimientos en los portafolios de la Reserva Monetaria Internacional, Fondo de
Solidaridad, Agencia de Garantía de Depósitos, Fondo de Pensiones de Empleados,
CONSEP y Depósitos Judiciales. Para cumplir con este objetivo, se utilizan
metodologías con aceptación internacional en el control de riesgo.
8. Límites de exposición de riesgo de las operaciones de inversión del BCE: analiza la
estructura de los portafolios de inversión, objetivos e instrumentos financieros con
los que se opera a fin de proponer a las autoridades los límites de exposición al
riesgo.
9. Calificación de Activos de Riesgo del BCE: valoración de todos los activos de riesgo
que constan en el balance del BCE para sugerir su adecuada gestión en función del
riesgo implícito y así dar cumplimiento a la normativa dispuesta en la legislación
financiera
2. Proceso de Inversiones
Administra los recursos líquidos de la Reserva de Libre Disponibilidad y del Fondo de
Empleados, así como de otros fondos entregados por Ley para su inversión en los
mercados financieros nacional e internacional (Fondo de Solidaridad, CONSEP y
Depósitos Judiciales).
Con el propósito de alcanzar esta misión, al interior de este proceso se desarrollan los
siguientes productos:
1. Políticas y estrategias para la administración de los fondos de inversión: propone
políticas y estrategias, de carácter financiero y operativo, que servirán de directrices
para gestionar en forma óptima la inversión de los recursos encomendados al Banco
Central del Ecuador, a la luz de los continuos cambios del entorno legal y financiero
mundial. Así mismo, se establecen parámetros internacionales de control y
37
evaluación para monitorear la gestión de inversión en cuanto a los niveles de riesgo
asumidos y de rentabilidad esperada.
2. Investigaciones de mercado: efectúa un seguimiento macroeconómico y un análisis
de mercados financieros de los principales países desarrollados y emergentes. Así
mismo analiza y monitorea permanentemente las tendencias de precios de los títulos
valores y de los principales bienes primarios y de tipos de cambio, con el fin de
coadyuvar al enriquecimiento del proceso decisional sobre las inversiones que
realiza el BCE. Como parte de este producto se provee información financiera y de
mercado al interior de la Institución y al público en general.
3. Inversión de los recursos en los mercados financieros nacional e internacional:
abarca el conjunto de actividades que se desarrollan con el fin de tomar las mejores
alternativas de inversión autorizadas y disponibles en los mercados financieros
nacional e internacional, en lo referente a los tipos de instrumentos, montos, plazos,
duraciones, rendimientos esperados y contrapartes de las negociaciones. Como parte
de la inversión se efectúa un seguimiento permanente a la relación riesgo-retorno de
cada instrumento y de los portafolios , con el objetivo de optimizar la gestión bajo
parámetros internacionales.
4. Adquisición y provisión de los recursos en divisas para los pagos del sector público
al exterior: se refiere a la administración de los recursos en las cuentas que el Banco
Central del Ecuador mantiene en el exterior, en diferentes monedas, a su nombre o a
nombre de entidades del Sector Público. También se provee de los fondos
necesarios para efectuar la importación de monedas y billetes que serán utilizados
para el canje por moneda nacional..
5. Tabla de Cotizaciones de Monedas Extranjeras: se refiere a la publicación de las
cotizaciones internacionales de monedas con el fin de servir de referente al sistema
financiero privado, de valorar los activos de la RILD y de establecer el precio para
ciertas compras y ventas de divisas del sector público.
6. Análisis de requerimientos de las inversiones de entidades del sector público:
Abarca las actividades conducentes a la aprobación por parte del Directorio del
Banco Central de las inversiones de los excedentes de caja de dichas entidades en el
mercado financiero nacional.
3. Proceso de Servicios Bancarios Internacionales
El proceso de Servicios Bancarios Internacionales tiene como misión atender los pagos
al y del exterior (transferencias internacionales, corresponsalías con bancos en el
exterior y convenios de pagos internacionales), distribuir los ingresos provenientes de
las exportaciones de hidrocarburos, monitorear las operaciones de comercio exterior,
administrar las cartas de crédito del sector público por importaciones, efectuar el
38
servicio de la deuda pública externa y registrar la deuda externa privada y la inversión
extranjera directa.
Para cumplir esta misión, el proceso desarrolla los siguientes productos:
1. Sistema de pagos al y del exterior: el BCE es signatario del Convenio de Pagos y
Créditos Recíprocos, suscrito en el marco de la ALADI, por el cual se establecieron
líneas de crédito con los bancos centrales miembros. Este convenio de pagos
conjuntamente con el convenio de pagos bilateral suscrito con el Banco Nacional de
Cuba y el Acuerdo de Pagos con el Banco Húngaro de Comercio Exterior,
posibilitan el intercambio de pagos entre la banca local y la del exterior, derivados
de operaciones de comercio exterior, utilizando para ello los sistemas de
compensación y liquidación previstos en cada uno. En un contexto de crisis de los
mercados financieros internacionales como los vividos, los mecanismos del
Convenio de Pagos y Créditos Recíprocos con la banca central, constituyen una
alternativa para canalizar de manera segura y eficiente los pagos internacionales de
la banca local derivados de las operaciones de comercio exterior de sus clientes,
fomentando de esta manera el desarrollo de estos sectores.
2. Distribución de rentas por hidrocarburos: controla y distribuye los ingresos
provenientes de las exportaciones de hidrocarburos y de las ventas de derivados para
el consumo naviero, administra las cartas de crédito stand by que garantizan el pago
de las exportaciones de hidrocarburos, registra los contratos suscritos entre
Petroecuador y las compañías petroleras, elabora las estadísticas de la referida
distribución y, administra los Fondos Rotativos de Petroecuador y Petroproducción.
3. Corresponsales del exterior: mediante este producto, se diseñan y ejecutan las
políticas de corresponsalía a nivel internacional, se administran las cuentas
especiales del sector público y privado que por normas expresas mantienen sus
depósitos en el Banco Central y se administra la participación accionaria del país en
los organismos monetarios y financieros internacionales (FMI, FLAR, CAF, BID,
Banco Mundial).
4. Comercio exterior: bajo la normativa vigente, el BCE ha delegado a los bancos
privados para que bajo el esquema de corresponsalía, concedan el visto bueno en las
declaraciones de importación y exportación, lo que posibilita realizar el control del
ingreso al país de las divisas provenientes de las exportaciones. Además, se autoriza
los permisos globales de importación y exportación de hidrocarburos y los
reembolsos para el pago al exterior de las importaciones efectuadas por las
instituciones del sector público.
5. Apertura y administra las cartas de crédito del sector público por importaciones,
administra las donaciones de gobiernos extranjeros al Gobierno Nacional y la cesión
de cobranzas al sector privado.
39
6. Estadísticas y proyecciones sobre el movimiento de la deuda pública y la deuda
privada externa: provee de los insumos necesarios para realizar la programación
macroeconómica y el seguimiento de los flujos externos del país, los cuales se
materializan en el cálculo de la balanza de pagos que se realiza en la Dirección
General de Estudios del BCE.
7. Registro de la deuda externa privada y la inversión extranjera directa: en
cumplimiento de disposiciones legales, administra el registro de la deuda externa
privada y de la inversión extranjera directa, facilitando las proyecciones que efectúa
la Dirección General de Estudios.
8. Gestión activa de obligaciones de deuda pública: consiste en definir las opciones de
financiamiento a las que el país puede acceder en cuanto a potenciales acreedores y
mercados financieros, así como brindar apoyo técnico en los procesos de
renegociación de deuda pública y participar en la recompra de deuda externa pública
que se considere conveniente a los intereses del país.
4. Proceso de Servicios Financieros
Administra los mecanismos de recirculación de liquidez, al obtenerla de la emisión de
Títulos del Banco Central (TBC), y redistribuirla a través de Operaciones de Reporto,
hacia las instituciones financieras. Cumple con la función de agente financiero del
Estado, al realizar la emisión, custodia y pago de principal e intereses de la deuda
pública interna.
Para cumplir con la misión antes mencionada, dentro del proceso se desarrollan los
siguientes productos:
1. Emisión de Títulos del Banco Central del Ecuador (TBC): Con la aplicación de este
mecanismo se consigue que flujos de capital que eventualmente hubieran salido del
país recirculen dentro de la economía, dado que los TBC tienen bajo riesgo. El BCE
no interfiere en la demanda de crédito del sector privado, pues la tasa de interés a la
que el BCE coloca sus papeles es substancialmente inferior a la tasa activa
referencial e inclusive a la tasa pasiva referencial. Son bonos cupón cero,
denominados en dólares norteamericanos, que se negocian con descuento, es decir a
un precio menor a su valor nominal. El valor nominal de estos títulos se paga al
vencimiento. El mecanismo de venta de los títulos se realiza mediante subasta
pública en la que participan instituciones financieras privadas y públicas y las tasas
de interés fluctúan en función de las condiciones del mercado.
2. Operaciones de Reporto: Constituyen negociaciones mediante las cuales las
instituciones financieras venden al Banco Central del Ecuador, exclusivamente
títulos valores denominados en cualquier moneda emitidos o avalados por el
Gobierno Nacional a través del Ministerio de Economía y Finanzas, con el
compromiso de recomprar tales títulos a la fecha de vencimiento. Al apoyar con
40
recursos (a través de las operaciones de reporto del BCE) a las instituciones
financieras que lo requieran se permite una distribución más homogénea de la
liquidez en el sistema financiero, se reduce la incertidumbre de los agentes respecto
a la estabilidad del sistema financiero y se facilita que las operaciones de crédito
hacia los sectores productivos de las instituciones con deficiencia de liquidez se
cumplan de manera adecuada. Es decir, el mecanismo de reciclaje, en lugar de ser
un factor que restrinja las operaciones de crédito, las facilita.
3. Servicio de custodia de títulos valores: Este producto ofrece el servicio de custodia
de títulos valores a los procesos del BCE e instituciones financieras públicas y
privadas.
4. Emisión y servicio de los títulos de deuda pública interna: El Banco Central del
Ecuador, como agente financiero del Estado, emite títulos valores de deuda pública
interna, ejecuta el pago de principal e intereses a nivel nacional e instrumenta el
registro contable de las operaciones y los mecanismos de control pertinentes.
5. Proceso de Recuperación Financiera y Administración de Activos
Recupera mediante mecanismos extrajudiciales y judiciales la cartera recibida o
transferida al BCE y efectúa la administración y realización de los activos recibidos en
calidad de dación en pago.
Este producto comprende los siguientes productos:
1. Recuperación extrajudicial de la cartera: Las actividades de este subproceso están
encaminadas a buscar mecanismos de solución de pago de las obligaciones
adeudadas por el sistema financiero al BCE, utilizando para el efecto, el diseño y
aplicación de las estrategias más idóneas que le permitan a la entidad, una pronta
recuperación de las mismas. Por otra parte, efectúa la recuperación extrajudicial de
la cartera de propiedad de la Institución, y de aquella que ha sido cedida o endosada
en respaldo de las operaciones de crédito concedidas al sistema financiero,
considerando para tal objetivo, la posibilidad de reprogramar con los deudores
dichos adeudos o buscar otros mecanismos de solución. En forma complementaria,
registra, controla y actualiza las operaciones otorgadas, sus pagos o abonos; gestiona
la sustitución de garantías; mantiene en custodia documentos de cartera y garantías
otorgadas a favor de la Institución; realiza el seguimiento de los activos
fideicomitidos; controla, evalúa y exige el cumplimiento de los encargos fiduciarios;
y, valida periódicamente el desenvolvimiento de los fiduciarios.
2. Recuperación judicial de créditos y demás obligaciones: consiste en el inicio e
impulso de los juicios coactivos a los deudores, para lo cual se efectúan las
siguientes acciones: citación con el auto de pago, ejecución de medidas preventivas
y las de coacción; avalúo y remate de bienes embargados; recepción y clasificación
41
de las ofertas presentadas en los remates; expedición de los autos de adjudicación;
representación del BCE en las Asambleas y Juntas de Acreedores de las IFIs en
liquidación; y, defensa de los derechos del BCE en las acciones propuestas por los
deudores en los juzgados ordinarios derivados de los juicios coactivos.
3. Administración de activos recibidos en pago: este subproceso se encarga de la
administración y realización de los bienes recibidos en calidad de dación en pago
por el Banco Central del Ecuador. Para el caso, diseña políticas y procedimientos
para su administración y realización; coordina con las áreas respectivas el monitoreo
del mantenimiento de los bienes; coordina la valoración periódica de los mismos;
crea mecanismos de alerta temprana que permitan establecer deterioros en los
bienes; constituye y supervisa el cumplimiento de los contratos fiduciarios a los
cuales se encuentren transferidos los bienes.
6. Proceso de Servicios Bancarios Nacionales
Asegura el normal funcionamiento del Sistema de Pagos del país (cámara de
compensación, transferencias interbancarias nacionales, agente financiero y fiduciario
del Estado, depositario central del sistema financiero, corresponsalía de bancos locales),
a través de:
1. Sistema de pagos del sector financiero: administra el servicio de las cuentas
corrientes de bancos y sociedades financieras, posibilitando de esta manera que las
entidades financieras canalicen sus transferencias de fondos de manera oportuna y
eficiente. Adicionalmente, la administración de estas cuentas posibilita efectuar la
liquidación de los resultados de la compensación de cheques girados por los cuenta–
correntistas de la banca local y controlar que las instituciones financieras mantengan
reservas mínimas sobre sus depósitos y captaciones colocadas en el BCE, como un
mecanismo de respaldo a los depositantes.
2. Sistema de pagos del sector público: cumpliendo la función de depositario oficial de
los recursos públicos y agente financiero del Estado, el BCE administra el servicio
de las cuentas corrientes del sector público para la ejecución de sus cobros y pagos a
través de la red bancaria corresponsal, facilitando que el Ministerio de Economía y
Finanzas pueda recaudar impuestos y realizar las respectivas distribuciones de
fondos fiscales a favor de todas las entidades que conforman el sector público.
Adicionalmente, se le proporciona a la referida cartera de Estado la proyección de su
liquidez, con base al registro de compromisos futuros e ingresos estimados. Así
mismo, se administran los fideicomisos para la distribución de los fondos que el
BEDE asigna a las distintas municipalidades.
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3. Servicios bancarios especializados: controla la reserva mínima (encaje) que las
instituciones financieras que operan en el país deben mantener en sus cuentas
corrientes en el Banco Central del Ecuador, la cual se establece en función de los
depósitos y captaciones efectuados por dichas instituciones.
En cualquier modelo económico, el encaje constituye una herramienta transparente y
eficiente, que posibilita que las instituciones financieras se apoyen en su propia reserva
de recursos, lo que permite a su vez la administración del riesgo asociado a las
fluctuaciones de liquidez, precautelando de esta manera la seguridad de los depositantes
y el mantenimiento de la confianza en el sistema financiero nacional.
También se administra el Sistema Nacional de Cámara de Compensación, mediante
el cual se realiza de manera oportuna el proceso de cobro de todos los cheques que,
con cargo a otros bancos, son recibidos en las ventanillas de las instituciones
bancarias del país. Adicionalmente, se efectúa el registro de los resultados de
compensación obtenidos por las instituciones bancarias en las sesiones de Cámara y
se realiza la liquidación de valores correspondientes de cada una de las instituciones
financieras participantes con cargo a los recursos que éstas mantienen depositados
en el BCE. En caso de existir incumplimientos por parte de alguna institución
financiera al momento de efectuar las liquidaciones, se toman de manera inmediata
las medidas correctivas, procurando que éstas ocasionen el menor impacto posible
en el Sistema de Pagos y tratando, en todo momento, de proteger los intereses de
los cuenta–correntistas nacionales.
Finalmente, en este producto se dispone de la mejor infraestructura tecnológica y de
comunicación, lo cual posibilita la prestación de servicios bancarios especializados
a todas las instituciones financieras y entidades públicas, sobre la base de la
celebración de convenios de asistencia requerida.
4. Regulación del Sistema de Pagos: mediante normativas y regulaciones, se procura
mantener la estabilidad del Sistema de Pagos, función que desempeña procurando
cumplir con los siguientes objetivos básicos de aceptación internacional:
a)
Posibilitar que los participantes comprendan claramente los riesgos
financieros en los que incurren, a través de su intervención en los sistemas
que se desarrollen.
b)
Dotar de procedimientos claramente definidos para afrontar los riesgos
crediticios y riesgos de liquidez, especificando las respectivas
responsabilidades del operador del sistema y de los participantes.
c)
Ofrecer a los participantes una oportuna liquidación de los resultados de la
compensación, preferentemente durante el día y como mínimo al final de la
jornada.
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d)
Asegurar un alto grado de seguridad y confiabilidad operativa. Para ello se
debe contar con convenios de contingencia que completen el procesamiento
diario en los horarios establecidos.
e)
Ofrecer un medio para efectuar los pagos que sea práctico para sus usuarios
y eficiente para la economía.
f)
Revelar públicamente los criterios de participación, que permitan un acceso
justo y abierto a todos los potenciales partícipes
7. Proceso de Especies Monetarias
Provee al sistema financiero el servicio de recepción, clasificación, custodia y
distribución de billetes dólares y moneda fraccionaria. Además, brinda al público en
general el servicio de cambio y canje de billetes y monedas. Estas operaciones se
realizan mediante las siguientes acciones:
1. Planificación, adquisición, importación y envío de especies monetarias: a más de
estimar la cantidad de especies monetarias que deben estar en circulación, se
efectúan estimaciones en cuanto a la cantidad de especies monetarias que el BCE
debe mantener como reserva técnica. De esta manera se evita que por efecto de
demandas atípicas, la economía enfrente un desabastecimiento de circulante y
consecuentemente la población no pueda realizar sus transacciones comerciales con
normalidad. Sobre la base de dichas estimaciones, se coordina con bancos del
exterior para la provisión de billetes denominados en dólares, de acuerdo a las
denominaciones requeridas por la economía, así como el envío de aquellas especies
que por su estado de deterioro deben ser canjeadas.
2. Especies monetarias en circulación: garantiza que la economía disponga de la
cantidad óptima de especies monetarias en circulación y, de esta manera, que las
transacciones se realicen con normalidad.
3. Custodia de especies monetarias: este producto es el encargado de custodiar los
billetes que no se encuentran en circulación, disponiendo para ello de la
infraestructura más sofisticada y segura del país. Prueba de lo anterior es el hecho de
que el BCE no ha sufrido pérdidas de billetes como consecuencia de actos
delictivos, como sí lo han sufrido la gran mayoría de entidades financieras del país.
4. Emisión de moneda fraccionaria: cumple con lo dispuesto en la Ley de Régimen
Monetario y Banco del Estado en lo referente a la facultad del BCE de emitir
moneda fraccionaria, la misma que sólo circula como canje del circulante en sucres
y billetes actualmente existentes. Con la moneda fraccionaria se dota a la economía
de circulante de baja denominación, para que la población pueda realizar con
normalidad sus transacciones económicas.
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5. Desmonetización de especies monetarias en moneda nacional: siguiendo estrictos
parámetros de auditoría, se efectúa la destrucción de los billetes denominados en
sucres que han sido canjeados por la ciudadanía.
6. Depósitos y retiros de efectivo al sistema financiero: los bancos y financieras que
operan en el país tienen cuentas corrientes en el BCE, lo que facilita que dichas
instituciones efectúen depósitos y retiros en la Institución y de esta manera
satisfagan las necesidades de billetes de sus depositantes.
7. Canje y cambio de especies monetarias: cumple con lo dispuesto en la Ley de
Régimen Monetario y Banco del Estado en lo pertinente a canjear los sucres en
circulación por dólares de los Estados Unidos de América, usando para ello una
cotización fija de veinticinco mil sucres por dólar. Los sucres recibidos son
inmediatamente retirados de circulación. Adicionalmente se canjean los billetes
denominados en dólares de Estados Unidos de América que se encuentran
deteriorados, así como billetes de alta denominación por billetes de baja
denominación o viceversa.
8. Transportación de valores: Este producto dispone de los equipos más sofisticados
en la transportación de valores facilitando el abastecimiento de billetes al sistema
financiero de una forma eficiente y segura.
9. Custodia: presta el servicio de custodia a entidades públicas como el CONSEP,
Armada Nacional, Patrimonio Cultural, Aduanas, AGD, entre otras. En este
producto se custodian bienes de alto valor y de la más variada naturaleza, los cuales
responden a las actividades propias de cada una de las instituciones mencionadas.
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Anexo 3:
Productos de los procesos que sustentan la misión cultural del Banco
Central del Ecuador
1. Museístico:
• Antropología: Museos Arqueológicos y Etnográficos
• Arte: Colonial, Moderno, Contemporáneo
• Numismática
2. Documental:
• Bibliotecas (y hemerotecas)
• Musicotecas (y videotecas)
• Archivos históricos (documentos en papel, en imágenes y en medios
audiovisuales)
3. Editorial:
• Artes plásticas e historia del arte
• Antropología y etnohistoria
• Numismática y notafílica
• Historia y fuentes documentales
• Música ecuatoriana
• Revista Cultura
4. Proyectos especiales:
•
•
•
•
•
•
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Castillo de Ingapirca (Dirección Regional de Cuenca)
Bosque Petrificado de Puyango (Dirección Regional de Guayaquil)
Centro Cívico de Guayaquil (Dirección Regional de Guayaquil)
Archivo Histórico del Guayas (Dirección Regional de Guayaquil)
Parque Histórico de Guayaquil (Dirección Regional de Guayaquil)
Malecón 2000 (Dirección Regional de Guayaquil)
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