Colombia frente a las medidas de protección y prevención a las violaciones de Derechos Humanos Durante décadas en el mundo, como consecuencia de los enfrentamientos bélicos y, a través de diferentes expresiones religiosas y civiles, se ha dado la existencia de los Derechos Humanos, como una necesidad de proteger a quienes se han visto vulnerados en el marco de los conflictos. En este sentido, el presente ensayo se basará en señalar ¿cuál es la responsabilidad que tienen las diferentes entidades de un gobierno en materia de Derechos Humanos, y cuáles son las medidas (leyes y normativas) que para el caso colombiano, se han tomado en esta materia teniendo en cuenta el conflicto interno armado? Así, la responsabilidad de los Estados en materia de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario, se encuentra regulada, por una serie de normas que consagran su deber frente a la implementación de medidas de prevención a violaciones e infracciones de aquellos que, consagrados en la “Declaración Universal de los Derechos Humanos”, y que son considerados básicos e inalienables a la existencia humana. En 1919, con el fin de la Primera Guerra Mundial, se firmó el tratado de Versalles a través del cual se creó la Sociedad de las Naciones con el fin de establecer las bases de la paz y exhortar a las potencias que hicieron parte de dicho tratado a promover el bienestar de las poblaciones locales y reorganizar las relaciones internacionales. En este sentido, a continuación se describe de forma general, los éxitos y fracasos de la Sociedad de las Naciones y, la legislación universal que desde entonces se estableció en materia de protección y prevención de Derechos Humanos. Como parte del recorrido histórico, cabe mencionar, las principales causas de la Primera Guerra Mundial, las cuales se centraron en las fricciones políticas presentadas entre Inglaterra, Austria, Alemania, Francia y Rusia, la rivalidad entre Francia y Alemania causada por la guerra Franco-Prusiana1, pero especialmente por la competencia comercial y colonial que existía entre Guerra Franco-Prusiana o Guerra Franco-Alemana, ocurrida entre los años 1870 y 1871. Fue protagonizada por Francia y el Reino de Prusia; durante el conflicto, Prusia recibió el apoyo de la Confederación de Alemania del 1 estos países. Como efecto de estos enfrentamientos, murieron cerca de nueve millones de personas (entre civiles y militares), y alrededor de 30 millones quedaron heridos como consecuencia de los múltiples ataques químicos, tratos inhumanos a los prisioneros, bombardeos, uso de armas, desplazamientos, entre otras violaciones; por otra parte, el conflicto dejó grandes brechas en Europa, generando una crisis económica dada por la devastación, el desarrollo de nuevos tipos de armamento, y la desintegración de varios imperios. Basado en las trágicas consecuencias de la Gran Guerra (denominada así hasta la II Guerra Mundial), el presidente estadounidense Woodrow Wilson durante la conferencia de París, planteó el establecimiento de una Asamblea en la que participaran todos los países, especialmente de aquellas potencias que habían sido protagonistas durante la guerra; con el fin de lograr la paz, la reconciliación, además de fomentar la cooperación y el progreso social, económico y cultural (Varios autores. Revista de Clases Historia. Publicación digital. ISSN 1989-4988-depósito legal MA 1356-2011. Consultado desde http://www.claseshistoria.com/1guerramundial/pazsociedadnaciones.htm). Para este fin, Wilson, planteó un tratado compuesto por 14 puntos que contemplaban una diplomacia abierta, la eliminación de barreras económicas, garantías para la reducción de armamentos, entre otros específicos para la restauración y rectificación de fronteras de los países objeto de la guerra. Sin embargo, para lograr su cumplimiento era necesaria la firma de un acuerdo y establecimiento de una Asamblea que vigilara el cabal cumplimiento de lo que se estableciera en el marco de la paz internacional. Así en el año 1920, con la firma de tratado de paz de Versalles, se estableció la Sociedad de las Naciones con el objetivo de "promover la cooperación internacional y para lograr la paz y la seguridad” (Historia de las Naciones Unidas. Consultado desde http://www.un.org/es/sections/history/history-united-nations/), inicialmente, hicieron parte de Norte, del cual formaba parte y de los estados de Baden, Wurtemberg y Bavaria. La victoria de los alemanes marco el ultimo capítulo de la unificación alemana bajo el reinado de Guillermo I de Prusia, asimismo, marco la caída de Napoleón III y del sistema monárquico en Francia, como el fin del Segundo Imperio Francés y su sustitución por la Tercera República Francesa. También como resultado de la guerra, Francia tuvo que ceder los territorios de Alsacia y Lorena que se anexaron a Prusia, aunque dichos territorios sólo permanecieron unidos a Alemania hasta el fin de la Primera Guerra Mundial cuando fueron reincorporados a Francia según el Tratado de Versalles. (González Aníbal, Historia Universal, 2011, consultado desde http://www.historiacultural.com/2010/09/guerra-francoprusiana-1870.html). 2 este organismo 45 países, y alcanzó un número máximo de 57 países miembros durante sus 26 años de existencia, es importante destacar que Colombia hizo parte de los países fundadores. Dato que se considera relevante dado que muestra la voluntad que han tenido los países que a lo largo del tiempo adoptando medidas en materia de protección y prevención a la violación de los Derechos Humanos, así como la resolución de conflictos de forma pacífica. Asimismo, gracias a la Sociedad de las Naciones, los países comenzaron a introducir en sus políticas conceptos en protección de derechos, con un énfasis en el desarrollo humano sobre lo político, es decir, promoviendo a través de diferentes instrumentos jurídicos blindar a los ciudadanos de los abusos que en su contra se pudieran cometer. Otra de las tareas destacadas de la Sociedad de las Naciones se basó en establecer las sanciones económicas impuestas a Alemania como consecuencia de la guerra, las cuales se terminaron de pagar solo hasta el año 2010. Sin embargo, si bien la Sociedad de las Naciones promovía el desarrollo de un modelo organizativo de carácter internacional promoviendo la no agresión entre los países miembros, así como el establecimiento de políticas de intercambio comercial pero especialmente de aquellas que erradicaran la guerra; por otra parte, no contó con el soporte político suficiente para imponer a sus miembros sus resoluciones o sanciones en forma obligatoria. Cabe destacar que durante su funcionamiento, la Sociedad de las Naciones tuvo grandes logros entre los que se destaca el apoyo para resolver de forma pacífica algunos conflictos en el período de posguerra. Asimismo, durante este periodo, se firmó el Tratado de Locarno (1925), con el cual se permitió el ingreso de Alemania en la Sociedad en 1926, también se firmó el Pacto Briand-Kellogg (1928). Se considera que otro de los logros de la Sociedad de las Naciones, fue el impulso de los Convenios de Ginebra sobre seguridad, respeto y derechos mínimos de los prisioneros de guerra, así como la “Declaración Universal de los Derechos Humanos” el 10 de diciembre de 1948 tras la Segunda Guerra Mundial, dada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en París; declaración que en sus 30 artículos recoge los derechos humanos considerados como básicos, a partir de la carta de San Francisco del 26 de junio de 1945. 3 Cabe destacar que la unión de esta declaración y los Pactos Internacionales de Derechos Humanos y sus Protocolos comprende lo que se ha denominado la Carta Internacional de Derechos Humanos; mientras que la Declaración constituye, generalmente, un documento orientativo, los Pactos son tratados internacionales que obligan a los Estados firmantes a cumplirlos. Sin embargo, la crisis económica de 1929 (gran depresión), causó un grave problema financiero para la organización, tanto para financiar proyectos como para su sostenimiento; por otra parte, la Sociedad no logró la suficiente autoridad para imponer a sus miembros las sanciones económicas como consecuencia de las diferentes acciones y conflictos que se dieron durante su existencia, lo que provocó la salida de varios de sus miembros y el no ingreso de Estados Unidos causando la disolución de la organización. La principal razón radicó en no poder evitar el inicio y desarrollo de la Segunda Guerra Mundial, esto por supuesto, dado que su principal función era la de promover la resolución pacífica de conflictos y el mejoramiento en las relaciones económicas de los países. Aunque la Sociedad de las Naciones no logró dotarse de los elementos y herramientas necesarios para llevar al cabo sus metas y cumplir sus objetivos, fue el escalón que dio pie a la creación y firma de la Carta de las Naciones Unidas, además brindó la experiencia necesaria para tratar los temas de paz y establecer políticas de carácter internacional en la protección y prevención a las violaciones de los Derechos Humanos, que desde entonces son las pautas que orientan la vida humana basándose en los principios de libertad, igualdad, justicia y paz. En este sentido, acorde a lo regulado por la Carta de las Naciones y lo estipulado por tribunales internacionales como la Corte Interamericana de Derechos Humanos-CIDH, es un deber general de los Estados organizar su estructura para evitar daños contra los Derechos Humanos y, en los casos en que las violaciones resulten inevitables, deben investigar y sancionar conforme a la ley a los responsables, garantizando, al mismo tiempo, la reparación integral de las víctimas. En Colombia, la violencia generalizada del conflicto armado interno no es más que una de las muchas consecuencias que, en diferentes niveles y ámbitos, conllevan a la victimización de miles de ciudadanos, además de ponerlos frente a una situación en la que sus derechos han sido vulnerados. Así, son muchos los connacionales que tras años de violencia esperan en el 4 pleno cumplimiento de la normatividad nacional e internacional frente a violaciones de Derechos Humanos e infracciones al Derecho Internacional Humanitario, una garantía de no repetición, además de obtener una oportunidad para la construcción de nuevas realidades y espacios de paz para generaciones venideras con garantías de cumplimiento y protección de sus derechos. De esta manera, hacer frente a los daños derivados del conflicto armado, además de diferentes situaciones de violencia que transgreden el pleno cumplimiento de los Derechos Humanos, le exige al Estado Colombiano (como parte y miembro fundador de las Naciones Unidas), el diseño y la ejecución de mecanismos que a través de herramientas múltiples, diferenciales y variadas garanticen el goce efectivo de los derechos vulnerados a sus ciudadanos en todo el territorio nacional. A través de la firma y ratificación de los Pactos Internacionales de Derechos Humanos y de una serie de convenciones internacionales e interamericanas, que generan un carácter vinculante que obliga y demanda al Estado colombiano el respeto de dichos acuerdos. En tal sentido, a partir de la constitución de 1991, Colombia se enmarca en las cualidades de un Estado social de derecho, buscando el reconocimiento, la protección y garantía de los derechos civiles de los ciudadanos, integrando las normatividades internacionales para la salvaguardia de los Derechos Humanos, tal como lo expresa el artículo 93 a continuación: “Los tratados y convenios internacionales ratificados por el Congreso, que reconocen los derechos humanos y que prohíben su limitación en los estados de excepción, prevalecen en el orden interno. Los derechos y deberes consagrados en esta Carta, se interpretarán de conformidad con los tratados internacionales sobre derechos humanos ratificados por Colombia”2. De este modo se crea un contexto jurídico en el cual se ratifican los tratados internacionales de los que Colombia ha sido participe para la protección de los DDHH, haciéndolos eje fundamental de una constitución en donde prevalecen, y ninguna ley que se promueva se oponga a su protección. El deber de protección y garantía de los Derechos Humanos implica República de Colombia. Constitución Política de Colombia, 1991. Título II. De los derechos, las garantías y los deberes. Capitulo III. De los derechos colectivos y del ambiente. Artículo 93. 2 5 entonces la articulación de acciones de diferentes entidades del Estado, que aporten desde los ámbitos jurídico, político, administrativo y cultural, entre otros, el reconocimiento de los Derechos Humanos como un paso fundamental para la reconciliación en pro de la consolidación de la paz. 6