INFECCION INTESTINAL O GASTROENTERITIS Es una infección intestinal afecta a todas las personas tanto niños, adultos y ancianos. Se caracteriza por presentar diarrea líquida, cólicos estomacales, náuseas o vómitos y, a veces, fiebre. La forma más habitual de enfermarse gastroenteritis es por ingerir alimentos o agua contaminados, a través del contacto con una persona infectada, por compartir utensilios, toallas o alimentos con alguien que esté infectado. SINTOMAS La infección intestinal ataca los intestinos, y produce signos y síntomas como los siguientes: diarrea generalmente sin sangre dolores y calambres abdominales; náuseas, vómitos, o ambos; dolores de cabeza o dolores musculares ocasionales; fiebre. PREVENCIÓN La mejor manera de prevenir la propagación de infecciones intestinales es siguiendo estas precauciones: Lavarnos muy bien las manos. Antes de comer y después de ir al baño. Evitar compartir utensilios y otros artículos de aseo personal. Mantener distancia y evitar el contacto con personal que estén infectadas o enfermas. TRATAMIENTO El tratamiento consiste en medidas de cuidado personal. Se recomienda Suspender la ingesta de alimentos durante algunas horas Beber líquidos rehidratantes Reiniciar gradualmente la ingesta de alimentos pero que sean blandos y fáciles de digerir. Descansar mucho. Y no abusar de los medicamentos. EL CÓLERA El cólera es una enfermedad infecciosa aguda, provocada por la bacteria 'Vibrio Cholerae'. Se caracteriza por desarrollar de forma muy brusca una diarrea muy importante y vómitos ocasionales. Puede suceder una deshidratación extrema, lo que puede provocar la muerte. CAUSAS La forma más habitual de contagio es por beber agua o comer alimentos contaminados con heces humanas. No se suele transmitir de persona a persona. Los brotes más importantes suelen estar provocados por fuentes de agua contaminada por residuos fecales. SÍNTOMAS Por lo general, la enfermedad comienza con una diarrea repentina, indolora y acuosa, además de vómitos. En los casos graves se llega a perder casi un litro de líquido por hora, pero usualmente la cantidad es mucho menor. En tales situaciones graves, la gran disminución de agua y sal produce una marcada deshidratación con intensa sed, calambres musculares, debilidad y una producción mínima de orina. PREVENCIÓN Las medidas de prevención más eficaces son las siguientes: Cocer los alimentos completamente y consumirlos aún calientes. Evitar que los alimentos cocinados entren en contacto con los alimentos crudos para que no se contaminen, así como con el agua o el hielo, moscas, superficies contaminadas, cubiertos sucios y otros. No comer frutas ni verduras crudas sin mondarlas en el momento del consumo, ni dejarlas expuestas. Medidas habituales de higiene que no hay que descuidar, como lavarse las manos antes de tocar cualquier alimento. TRATAMIENTOS El tratamiento adecuado y suficiente de forma general es la solución de sales de rehidratación oral, aunque en las ocasiones en las que la deshidratación es muy acusada, es necesaria la reposición intravenosa de los líquidos y solutos perdidos. ESTREÑIMIENTO Se refiere a la falta de frecuencia de la defecación, se considera estreñido al individuo que realiza menos de tres deposiciones semanales. CAUSAS La causa más frecuente de estreñimiento hoy en día son la falta de fibra en los alimentos. Otras veces, el estreñimiento está relacionado con diferentes enfermedades que padece la persona y es un síntoma frecuente en pacientes con diabetes y enfermedades del tiroides. También pueden producir estreñimiento el uso de algunos medicamentos. En el caso de que junto con el estreñimiento haya dolor y aparezca sangre en las heces, la causa puede ser un tumor en el intestino. SÍNTOMAS Los síntomas varían dependiendo de cada paciente Los síntomas más comunes son deposiciones menos de tres veces a la semana, dificultad para ir al baño, heces duras, presencia de gases o dolor al defecar. PREVENCIÓN La mejor forma de prevenir el estreñimiento es llevar un estilo de vida saludable con una dieta rica en fibra. Además, conviene beber muchos líquidos, aproximadamente dos litros de agua al día, realizar ejercicio de forma regular y acostumbrar al cuerpo a ir al baño cuando tenga ganas de defecar en lugar de esperar. TRATAMIENTOS El tratamiento del estreñimiento depende fundamentalmente de la causa que lo produce. La mayoría de las veces será suficiente con añadir fibra a la dieta. Si se relaciona con la toma de medicinas, y estos se pueden cambiar por otros, será aconsejable hacerlo. En otras ocasiones puede ser necesario recurrir a la cirugía.