Benemérita y Centenaria Escuela Normal del Estado Observación y Practica Docente III Alejandra Margarita Moreno Huerta. Licenciatura en Educación Preescolar 3. B 06 de febrero del 2013 BLOQUE I ACTIVIDAD 3. Sistematizar los conocimientos y competencias adquiridas durante la licenciatura en un ensayo individual en el que expresen sus ideas y experiencias sobre los puntos planteados en la primera actividad. Desde el comienzo de los semestres que cursamos dentro de esta Licenciatura hasta hoy, he concebido que la profesión docente simboliza una tarea compleja, puesto que se requieren una serie de habilidades, destrezas y actitudes (competencias) para poder intervenir y brindar conocimientos a los alumnos, ya que dichos aportes que se les brindaran tendrán impacto en cada una de las vidas de estos niños y por lo tanto en la sociedad en donde se desenvuelven. Dichos elementos los hemos adquirido a través de los diversos cursos de las materias de Iniciación al Trabajo Docente y Observación y Práctica Docente conjuntamente con las diversas asignaturas, puesto que en ellas analizamos lecturas que sostenían autores tales como Dewey, Listón, Fullan, Cuberes, etc que nos ayudaron a la comprensión de elementos esenciales para desempeñar el trabajo docente. Fue así como comprendimos que como docentes debemos adquirir y poner en juego habilidades tales como la creatividad, paciencia, la escucha, observación, el pensamiento reflexivo, el análisis, capacidad de percepción, el dialogo; para poder transmitir a los niños aprendizajes realmente significativos a través de las tareas docentes como son la planificación de actividades partiendo de las necesidades e intereses de los niños, promoviendo el desarrollo integro del niño a través del dominio de los propósitos de este nivel educativo. Una educadora se caracteriza principalmente por tener habilidad de observación para poder percibir las necesidades e intereses de cada niño que conforma el grupo de trabajo, donde también tiene que habilitar su capacidad de escucha y dialogo para poder obtener más información. Todo esto se llevara a cabo al establecer medios de interacción no solamente con los niños sino también con padres de familia, compañeros de trabajo, directivos, etc. Por lo tanto el quehacer del docente representa una tarea complicada, ya que no solo se debe disponer de habilidades intelectuales para realizar las tareas demandantes, si no así mismo saberlas emplear en el momento oportuno para poder enfrentar los retos que se puedan presentar al potencializar el desarrollo de los niños, ya que siempre debemos considerar que los aprendizajes que tramitamos y adquieran los niños serán la pauta que impactara dentro de la sociedad. A pesar de estas ventajas la educadora siempre debe de tener en cuenta el gran compromiso y responsabilidad profesional que desempeña en su trabajo docente frente a un grupo de niños, ya que su desarrollo repercutirá de forma positiva o negativa en el aprendizaje de los niños. Tomando así como un reto el atender a la diversidad que se puede presentar en el grupo, estableciendo dicha diversidad no como un limitante, sino más bien como una riqueza que se puede aprovechar para aprender los unos de los otros. Pero nunca dejar a un lado como lo menciona Mari Carmen Diez, que esta profesión es una de las más gratificantes como personalmente y profesionalmente, ya que el ver que los aprendizajes que tu le dejas a los niños son realmente significativos y funcionales dentro de sus vidas te llena de orgullo y enorgullecimiento de tu trabajo.