Tendencia del sobrepeso, obesidad y exceso de peso en el Perú. La obesidad es un problema de salud pública y ha sido llamada La “Epidemia del siglo XXI” por su impacto en la morbimortalidad, la calidad de vida, el gasto sanitario y porque se presenta a nivel mundial en los países desarrollados y en vías de desarrollo y además se ha incrementado la contribución de los 1 factores de riesgos ya conocidos que la propicia. En Perú, el sobrepeso y la obesidad afecta principalmente a los adultos jóvenes y adultos; uno de cada cuatro niños entre 5 a 9 años tienen sobrepeso u obesidad, uno de cada tres adultos jóvenes tienen sobrepeso u obesidad y uno de cada 3 dos adultos tienen sobrepeso u obesidad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que en el 2015, en el mundo, el sobrepeso se incrementará a 2,3 millones y 700 4 millones de personas obesas, principalmente mujeres. El sobrepeso y la obesidad causan la muerte de alrededor de 2,8 millones de personas en el mundo en forma directa o indirecta, asociadas con enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT) como la diabetes mellitus, la enfermedad coronaria isquémica y algunos tipos de 5,6 cáncer. En términos monetarios, el costo que demanda la obesidad y sus comorbilidades alcanzan el 2% y 9,4% respectivamente del costo total en salud en países que cuentan con información disponible. El Estado peruano no ha sido ajeno al problema de sobrepeso y obesidad y a mediados de mayo del 2013 promulgó la ley N° 30021 “Ley de promoción de la alimentación saludable para niños, niñas y adolescentes”, cuyo propósito es promover la alimentación saludable dirigidas a los estudiantes del nivel básico regular, la actividad física, la implementación de kioscos y comedores saludables en las instituciones de educación básica regular, la implementación del Observatorio de Nutrición del Sobrepeso y Obesidad y la supervisión de la publicidad, la información y otras prácticas dirigidas a los niños, niñas y adolescentes para reducir y eliminar las enfermedades vinculadas con el sobrepeso, la obesidad y las enfermedades crónicas. Dicha ley ha tenido opiniones a favor y en contra, pero es innegable que pretende contribuir a disminuir las altas prevalencia de sobrepeso, obesidad y consecuentemente las ECNT en la población peruana. En las últimas décadas, la población en general ha adoptado estilos de vida poco saludables, como el consumo de comida rápida y barata con alto contenido calórico, y paralelamente ha disminuido la actividad física, probablemente por la estabilidad de la economía peruana, lo cual se refleja en la mayor capacidad adquisitiva en los hogares. El presente estudio se propone estimar la tendencia del sobrepeso, obesidad, exceso de peso y determinantes sociales del exceso de peso en los miembros que residen en los hogares peruanos entre los años 2007 a 2011. Marco teorico El objetivo propuesto fue evaluar la tendencia del sobrepeso, obesidad y exceso de peso en el Perú con los datos de la única encuesta nacional que se realiza anualmente para describir la tendencia del exceso de peso previo a la implementación de la ley N° 30021 “Ley de promoción de la alimentación saludable para niños, 12 niñas y adolescentes” para contar con información previa para la posterior evaluación de la mencionada ley en la población peruana. Llama la atención, la tendencia al incremento de la prevalencia de la obesidad y el exceso de peso en los niños menores de 5 años, sobre todo porque existe una estrecha vinculación entre la obesidad en la 21 niñez y su persistencia en la adultez, aumentando el riesgo que relaciona a éste con el incremento de las enfermedades cardiovasculares, por otra parte, las prácticas de la alimentación infantil y las preferencias alimentarias influyen directamente con los cambios de los hábitos alimentarios, tales como el incremento en el consumo de las golosinas, la ingesta de las entre comidas con altos contenidos de calorías y las bebidas azucaradas, entre otras, concomitantes al sedentarismo que han contribuido al incremento de la obesidad debido a que las calorías asimiladas no se reflejan en el gasto 6,28 energético diario. En el mismo sentido, la exposición a la publicidad de alimentos con alto contenido de grasas, azúcares o sal, también influyen en la elección de los alimentos y hábitos de 29,14 consumo del niño, al respecto, algunos estudios muestran que la publicidad estimula la lealtad a la marca mediante la aplicación o uso de personajes animados o la inclusión de obsequios y concursos, e incluso algunas veces se recurre a promociones de objetos 30 coleccionables. Un hallazgo del estudio fue el incremento de exceso de peso en el grupo etario de 5 a 9 años respecto a la etapa anterior, relacionado a los niños de padres con nivel educativo superior y a niños no pobres, situación que podría explicarse por el ingreso a la etapa escolar. Consecuentemente, el poder adquisitivo en éste entorno, se acompañaría de decisiones inadecuadas en las elecciones de los alimentos de la lonchera escolar y/o la adquisición de alimentos hipercalóricos (no saludables) consumidos en los quioscos escolares y no controlados por las padres, circunstancias que dura casi todo el año (diez meses). Esto provoca un cambio en el exceso de peso (entre una etapa de vida y otra) que alcanza de tres a seis veces más frecuentes bajo estas condiciones. La presencia de la madre en los menores de 5 años sería un límite al aumento del exceso de peso en estos niños pero que se anula por la asistencia del niño a la escuela y las inadecuadas decisiones en la alimentación de la misma madre (mas aún si trabaja) y del niño. Uno de cada siete adolescentes tuvieron sobrepeso y uno de cada cinco adolescentes tuvieron exceso de peso al final del periodo de estudio, mostrando una tendencia creciente, Al analizar la frecuencia de los determinantes sociales del exceso de peso se observó que a tempranas edades son más frecuentes en los menores de 10 años, sin embargo, a partir de la adolescencia es más frecuente en las mujeres. También es más frecuente en la zona urbana y al analizar el ámbito geográfico de residencia, se observó que en Lima Metropolitana y el resto de la costa se concentra la mayor prevalencia de exceso de peso; por otro lado, el nivel educativo de los padres de los niños menores de 10 años aumenta la frecuencia del exceso de peso, no obstante, a partir de los 10 años se observó que el exceso de peso fue más frecuente en la población que tiene un nivel educativo secundario o superior, situación que podría explicarse por la creciente urbanización y la modificación de los estilos de vida de la población que conlleva a patrones de alimentación inadecuados y menor actividad física. Al respecto, se sabe que diversos factores intervienen en la selección de los alimentos que consume la población peruana, tales como, los precios, el presupuesto familiar, los hábitos alimentarios y la disponibilidad de alimentos. El sedentarismo de muchas ocupaciones en el ámbito urbano ha contribuido a disminuir los niveles de actividad física que conlleva al menor gasto de calorías, y adicionalmente, en las áreas urbanas existe una tendencia creciente a consumir alimentos ricos en grasas y 37 azúcares, que muchas veces provienen de las comidas rápidas que incrementa la obesidad que se asocia a la ocurrencia de enfermedades crónicas como la hipertensión arterial, hipercolesterolemia, enfermedades cardiovasculares y diabetes 38 mellitus. En general se observa que el sobrepeso y la obesidad aumenta hasta los 60 años, posterior a ello, se muestra una tendencia decreciente, es así que uno de cada cinco adultos mayores tienen sobrepeso y uno de cada once tuvo obesidad al final del periodo, resultados similares se 39 observó en la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de México. Una limitación del estudio fue que la muestra fue calculada por el INEI para evaluar la evolución de la pobreza en el hogar y algunas características de salud de los miembros que viven en los hogares peruanos, y en el marco del convenio suscrito entre ambas instituciones, el INS se encarga de la evaluación nutricional en los miembros de los hogares peruanos, por ello, podría ser insuficiente para calcular la prevalencia del sobrepeso y la obesidad en la población total. Sin embargo, permite estimar el sobrepeso y obesidad a nivel de los miembros que habitan en los hogares que constituyen la muestra, otra posible limitación fue el posible sesgo de medición en la evaluación nutricional, que se trató de minimizar con el entrenamiento de los profesionales de la salud, el cual estuvo a cargo de profesionales de CENAN estandarizados en antropometría, la supervisión permanente efectuada por el personal del CENAN y el uso de equipos calibrados. Se sugiere que el Estado implemente políticas públicas que promuevan estilos de vida saludables como la alimentación saludable (consumo de la dieta mediterránea como una posible alternativa), mayor actividad física, disminución del número de horas dedicados a mirar televisión o computadora en especial en los niños menores de 10 años, monitoreo permanente del sobrepeso y obesidad en la población en general y la vigilancia de la ingesta energética, así como la composición de las dietas para realizar intervenciones oportunas que tiendan a promover el consumo de dieta saludable, con propuestas de alternativas según la zona o región, fundamentalmente durante la infancia y la adolescencia en donde se requiere una adecuada alimentación, tanto en cantidad como calidad, para contribuir al crecimiento y desarrollo adecuado. Un punto clave es realizar intervenciones oportunas, principalmente en los niños entre los 5 a 6 años por el llamado “rebote adipocitario” (aumento significativo del contenido graso corporal en el primer año de vida -primera elevación del IMC- seguido de un periodo de caída que finaliza alrededor de los 4 a 6 años para aumentar posteriormente -segunda elevación del IMC- hasta el final de la adolescencia, siendo 1 mayor en el sexo femenino), momento crítico para el inicio de la obesidad infantil, el cual aumenta el riesgo de obesidad en la edad adulta y que coincide con el inicio de la escuela, en este sentido, se espera que la ley de promoción de la alimentación saludable en los niños y niñas promulgada por el Gobierno Peruano, contribuya a disminuir el sobrepeso y la obesidad en la población peruana. Asimismo, se sugiere la inclusión de intervenciones de salud ocupacional en las diversas instituciones, ya sea pública o privada, para disminuir el sobrepeso y obesidad en los adultos, sobretodo en la población económicamente activa, y paralelamente podría aumentar la productividad y disminuir el ausentismo de los 36 trabajadores. Se concluye que la tendencia en el tiempo, de la obesidad y el exceso es al aumento en los niños menores de 5 años, y la tendencia de la obesidad en los adolescentes es a la reducción. Los determinantes sociales mas frecuentes del exceso de peso fueron el sexo masculino en los niños menores de 10 años Referencias bibliográficas Tarqui-Mamani, Carolina, Sánchez-Abanto, José, Alvarez-Dongo, Doris, Gómez-Guizado, Guillermo, Valdivia-Zapana, Sarai, Tendencia del sobrepeso, obesidad y exceso de peso en el Perú.. Revista Peruana de Epidemiología [Internet]. 2013;17(3):1-7. Recuperado de: http://portal.amelica.org/ameli/jatsRepo/203129459004