UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE NICARAGUA UNAN-LEON ESCUELA DE CIENCIAS AGRARIAS Y VETERINARIAS. DEPARTAMENTO DE MEDICINA VETERINARIA Y ZOOTECNIA. TECNICO SUPERIOR AGROPECUARIO. Clasificación de los alimentos utilizados en alimentación animal - Alimentos Concentrados: energéticos Proteicos (origen vegetal y animal). - Alimentos no concentrados: forrajes verdes y forrajes conservados - Otros: Vitaminas, Minerales, Aditivos ALIMENTOS CONCENTRADOS: Energéticos: la cantidad de energía – 2,8Mcal de EM/kgMS, que aportan estos alimentos es comparativamente mayor que la cantidad de proteína - menos 20% y con menos del 18% en FB. Estos son alimentos con altos contenidos en carbohidratos: maíz, sorgo, arroz y subproductos, raíces y tubérculos: yuca, camote o batata, frutas, cascaras de cítricos o plátanos, grasas de res o cerdo, aceites de semillas de oleaginosas, melaza de caña de azúcar. Proteicos: la fracción de proteína predomina sobre la fracción energética, pueden ser de origen vegetal y animal. Soya y subproductos, maní y subproductos. Harinas de origen animal: harinas de carne, harinas de carne con hueso, harinas de sangre, harinas de pescado o de origen aviar. Se incluye en este grupo productos de origen industrial como urea y biuret. De acuerdo al contenido de proteína los alimentos pueden ser agrupados en categorías: • Con 20 a 40% de proteína: las tortas de soya, maní y girasol, el ensilaje de maíz. • Entre 40 a 60% de proteína: La torta de algodón y soya, los granos de cervecería y la soya entera. • Con más de 60%: la harina de carne y pescado, de gluten de maíz y de sangre. ALIMENTOS NO CONCENTRADOS Son alimentos de escasa energía utilizable por unidad de peso, debido a su gran contenido de fibra bruta y un promedio de 50% de NDT. En este grupo se incluyen también, aunque no son forrajes, las cascarillas, algunos granos de cervecería, salvado de arroz y otros. La composición química de los alimentos no concentrados, como la de todos los alimentos, define parcialmente su valor nutritivo. Los herbívoros no requieren aporte de aminoácidos en la ración pero necesitan un aporte mínimo de equivalente proteico. Si la ración contiene una fuente de nitrógeno y carbono, los microorganismos del tracto digestivo sintetizan todos los aminoácidos requeridos por el huésped. Los forrajes pueden presentar ciertas deficiencias (especialmente en vitaminas y minerales), que se pueden contrarrestar, mediante bloques de minerales o incluyendo nutrientes en las mezclas. Forrajes verdes y Forrajes conservados -Forrajes verdes: son todas las pasturas frescas de gramíneas y leguminosas, con alto contenido de humedad 70% o más, forrajes suculentos que no han sido cortados, ensilados o procesados. Forrajes de leguminosas: otras clases de leguminosas arbustivas como las leucaenas, acacias, samanes, matarratón, algarrobo, chiminango, aromos, etc, se usan como forraje cosechando las hojas para darlas verdes o deshidratadas o para hacer pastoreo de ramoneo manteniendo los arbustos bajos de altura. Las sacas residuales postcosecha de cultivos de leguminosas tienen aceptable contenido de proteína como las de soya, fríjol, haba, arveja, habichuela, lenteja, garbanzo, canavalia, etc, se pueden suministrar verdes, deshidratadas, enteras o picadas y hasta se pueden ensilar mezcladas con gramíneas. Muchas variedades de leguminosas se aprovechan como forraje de pastoreo, mezcladas con gramíneas, formando bancos de proteína, como forraje verde, heno o forraje deshidratado, como la Crotalaria, Kusdú, Fríjol terciopelo, gandul, desmodio, Vicia, estilozante (Capica), etc. Maíz y Sorgo como forrajes: el maíz y sorgo se usan como forraje verde o para ensilar, el maíz con o sin la mazorca. El maíz se aprovecha después de cosechar la mazorca o también cuando ya está seco. Para ensilar se cosecha cuando la mazorca está en estado lechoso, lo mismo que el sorgo. El sorgo y el maíz muy tiernos pueden contener niveles tóxicos de nitratos y el sorgo contiene ácido hidrocyanico que intoxica al ganado, ovino, y caprinos, por ese se aconseja dejarlo unas horas en el campo después de cortarlo. El Sorgo se puede ensilar o henificar y se usa la soca como forraje verde, para heno o para ensilar. Estos forrajes se pueden ensilar en mezcla con leguminosas, con caña de azúcar entera, con otras gramíneas de corte o se les puede adicionar otros alimentos, como yuca, papa, excretas de animales, melaza, urea, etc. Gramíneas y cereales para pasturas y como forrajes: los pastos de gramíneas que crecen permanentemente, formando colchones o matojos y los cereales (gramíneas temporales) se usan para pastoreo, para cosechar como forraje verde picado, para henificar o para ensilar y también se usan las sacas después de cosechar el grano (trigo, cebada, arroz y avena) bien sea pastoreando o cosechándolos Las residuos de cosechas agrícolas se pueden someter a tratamiento con álcali para aumentar la digestibilidad de la fibra y se aprovechar para alimentar bovinos, ovinos y caprinos de bajas necesidades nutricionales, al igual como se utiliza el bagazo y bagacillo de caña. Las gramíneas de desarrollo alto se usan únicamente como forraje verde picado o para ensilar, como el King grass, el pasto elefante imperial, guatemala, brasilero, etc, y poco para pastoreo. Existe una gran variedad de gramíneas para pastoreo que ocasionalmente se pueden henificar y ensilar, siempre y cuando macollen, Io cual facilita el corte y recolección. La composición general de las gramíneas y su valor nutritivo es semejante, difieren en la palatabilidad muy relacionada con su valor nutricional, lo cual se observan en sus estados iniciales y cuando llegan a la madurez como se mencionó anteriormente. -Forrajes conservados: a este grupo pertenecen los ensilajes y todos los forrajes secos y toscos: el heno de leguminosas y gramíneas, las pajas y rastrojos, parte aérea de los forrajes con espigas y cáscaras, forrajes maduros, en general estos alimentos contienen más del 18% de fibra bruta, son bajos en PB y tienen baja digestibilidad. Ensilaje: método de conservación del forraje que consiste en fermentación láctica espontanea en condiciones anaeróbicas. Las bacterias epifíticas de ácido láctico fermentan los azucares del forraje produciendo ácido láctico y en menor cantidad ácido acético. Al generarse estos ácidos, el pH del material ensilado baja a un nivel que inhibe la presencia de microorganismos que inducen la putrefacción. El uso de ensilajes tiene las siguientes ventajas: a) El forraje ocupa poco espacio al almacenarlo y se pueden alimentar más animales con menor área de cultivos. b) El ensilaje conserva y suministra alimento suculento de alta calidad. c) Se puede ensilar cualquier forraje en diferentes estados vegetativos y aun enmelazados en toda época del año o cuando los forrajes sufren daños por heladas o sequías. El ensilaje de buena calidad es de alto valor nutricional si provienen de forrajes verdes cortados en estado óptimo de mayor contenido de nutrientes y humedad adecuada (35%) para facilitar su compactación y por tener más cantidad de azúcares para la correcta fermentación ácida y buena conservación. El ensilaje por ser muy palatable y laxante, provee más materia seca al ganado si se combina el suministro con heno y pastoreo. El ensilaje se usa más intensamente para alimentar vacas lecheras, ganado de carne, ovinos y caprinos y en pequeñas cantidades para caballos. Los forrajes más usados para ensilar son el sorgo, el maíz, el king-grass y la caña de azúcar. El forraje no debe tener menos de 28 % de MS; cuando se ensila el pasto, sin usar preservativos, la MS debe estar entre 30 a 35%; si el forraje tiene menos MS habría mucha pérdida por jugos exprimidos y se obtendría ensilaje de mala calidad a menos que se adicionen preservativos o absorbentes de humedad como forrajes secos (Pajas y granos). En el ensilaje, las proteínas son desnaturalizadas o degradadas en forma similar como en el aparato digestivo, sin mayores pérdidas; pero si se ensilan leguminosas, la degradación de las proteínas y disminución del valor nutricional por efecto del calor es considerable, aunque en la práctica podría traer beneficios al permitirse un mayor paso de sustancias proteicas y nitrogenadas al intestino. Henificación: el objetivo principal es desecar el forraje verde hasta el grado necesario para que pueda almacenarse sin riesgo de que se caliente o se enmohezca. Para que la calidad del heno sea excelente, debe prepararse con plantas cortadas en una fase relativamente temprana de madurez. El buen heno tiene que curarse y manejarse de tal modo que conserve las hojas y el color verde, los tallos deben ser blandos y no quebradizos. Tienen que estar desprovistos de hongos, tener un aroma agradable, además de la palatabilidad o gustosidad. Los henos de leguminosas son mucho más ricos en proteínas, calcio y vitaminas que los henos de gramíneas. Durante el proceso de henificación se pierden algunos principios nutritivos, esto se debe a caída de hojas y otras partes finas de la planta por desprendimiento, pérdidas por fermentación y blanqueamiento y pérdidas de principios nutritivos solubles arrastrados por lluvias. En la henificación se produce fermentación y debido a esto algunos principios orgánicos se pierden, además las fermentaciones destruyen el caroteno; si se han empleado métodos apropiados para la henificación, las pérdidas por fermentación son pequeñas. Si el heno se blanquea excesivamente por una larga exposición al sol, se pierde casi todo el caroteno. En general, la cantidad de esa provitamina es proporcional a la intensidad del color verde del heno. El Heno no debe ser la única ración para los animales, se debe usar como complemento de un buen pastoreo y combinado con ensilajes y suplementación de concentrado. El heno deshidratado de gramíneas y leguminosas cortados en estado suculento aunque contenga menos de 10.7% de fibra y sea muy rico en proteínas, no se puede considerar como un concentrado, porque es muy bajo en NDT y en energía y por ser muy voluminosos los animales no consumen lo suficiente para suplir sus necesidades. Las pajas pertenecen también a los forrajes secos, las pajas de cereales constituye una porción de la ración del vacuno. Las pajas suministran poca energía neta, su máximo valor se manifestará suministrándola juntamente con heno leguminoso de alta calidad Residuos de cosechas agrícolas y agroindustriales: los residuos de cosecha muy abundantes en algunas regiones, tienen alto contenido de fibra y bajo porcentaje de proteína y energía pero son un recurso nutricional durante las épocas de sequía para muchos animales de bajos requerimientos nutricionales. Entre los más abundantes, están los residuos de cereales y leguminosas como la paja de arroz (4.6% de PC), de fríjol (5.9%), de maíz (3.6), de soya (5.0), sorgo (3.8), maní (22.0%), alto contenido de fibra, digestibilidad baja entre 40 a 45%, pero con el tratamiento de hidróxido de sodio puede aumentar en 10-12% Y pueden absorber hasta 60% de melaza. También son aprovechables el cogollo, bagazo y bagacillo de la caña de azúcar, las cascarillas de algunos granos como la de algodón, soya, maní, cacao y hasta la de arroz, las semillas de frutas como la del tomate, guayaba, naranja y las pastas provenientes de la extracción de jugos como de la piña, la naranja, etc. Rastrojos de leguminosas: los rastrojos del fríjol, soya y otras leguminosas están compuestos por 55% de tallos-hojas y 45% de vainas con 4.1 % de proteína; su consumo si se agrega 0.6% de melaza + urea puede llegar a niveles aceptables hasta de 2.5 Kg MS /100 Kg peso vivo y con 1.8 % de melaza urea el consumo aumenta a 2.96 Kg, pero generalmente los animales consumen más las vainas. Se pueden obtener buenas ganancias de peso diario, hasta de 800 gramos si se suplementa proteína (400g) pero la conversión es relativamente baja. Estos forrajes también se pueden amonificar con urea o con sulfato de amonio disolviendo 3 Kg de urea o sulfato de amonio en 50 litros de agua que se rocían por cada 1000 Kg de forraje, rastrojos o leguminosas y se dejen durante 15 días embolsados en plástico, al cabo de los cuales se les agrega melaza antes de darlos a los animales. Otros: Vitaminas, Minerales, Aditivos Alimentos minerales y correctores. No contienen energía o proteína pero aportan los minerales necesarios para equilibrar los minerales en las distintas dietas del ganado. Se pueden incluir aquí otros productos que contienen vitaminas o aminoácidos esenciales que permiten corregir las deficiencias que de éstos nutrientes puedan existir en las raciones. Por lo general se suelen comercializar conjuntamente este tipo de productos en forma de los conocidos correctores minero vitamínicos (CMV), de elevado precio, que se incluyen en las raciones en proporciones muy bajas. A la hora de clasificar cualquier alimento sería necesario utilizar esta doble clasificación. Así hablaríamos de concentrados energéticos con un alto contenido de almidón e hidratos de carbono solubles (los granos de cereales); concentrados proteicos, con alto contenido en proteína asimilable por los animales como los granos de leguminosas (habas, veza), los granos de oleaginosas (soja, colza) y sus derivados (harina de soja, torta de algodón); henos proteicos (heno de alfalfa, heno de leguminosas); subproductos energéticos como la pulpa de remolacha; etc.