Falacias Falacias Referencias Descarga en PDF LECCIÓN 1 de 3 Falacias Falacias formales y no formales1 Una falacia en sentido general significa toda idea equivocada o creencia falsa; en lógica se la utiliza desde una óptica más restringida, haciendo alusión a un error de razonamiento, aquí sucede una particularidad, que tiene que ver con que algunos no son obviamente incorrectos y se usan comúnmente por ser altamente persuasivos (principalmente en la argumentación jurídica). Su estudio es provechoso y necesario dado que a medida que adquiramos mayor familiaridad con ellas evitará que seamos engañados por las mismas. No existe una clasificación que haya sido universalmente aceptada, digamos que ha sido una preocupación constante establecer una que las contenga todas, asimismo la más adecuada para su estudio es la que distingue en: formales y no formales. Las primeras debemos analizarlas en conexión con esquemas de razonamiento válido, ya que son errores evidenciados desde la lógica. En cambio las no formales no cumplen con las reglas no formales (del contenido y fiabilidad de las premisas, que ya repasamos en apartados anteriores) son errores de razonamiento en los que podemos caer por inadvertencia o falta de atención, a la vez ellas se subdividen en falacias de atingencia y ambigüedad. Las falacias de atinencia Tienen la particularidad que sus premisas carecen de atinencia lógica con respecto a sus conclusiones, son incapaces de establecer una verdad, utilizadas para estimular emociones como temor, hostilidad, piedad, entusiasmo, terror, etc. Ellas son: 1. Apelación a la fuerza (ad baculum) Este razonamiento es usado para provocar la aceptación de una conclusión cuando fracasan las pruebas o argumentos racionales, se amenaza con el uso de fuerza o violencia para doblegar a los opositores, es muy común en política. Un ejemplo en el ámbito internacional de esta clase es cuando luego de la Segunda Guerra Mundial, Churchill informa a los demás que el Papa sugería un determinado curso de acción, dicen que Stalin manifestó su desacuerdo aduciendo: “y cuántas divisiones dice Ud. que tiene el Papa para el combate”. 2) Argumento dirigido contra el hombre (ad hominem) A la vez se clasifica en Ofensivo: en este caso en vez de refutar la verdad de lo que se dice se ataca a quien lo afirma, por esto equivaldría decir que la filosofía de Bacon es indigna por fue desposeído del cargo de canciller por deshonesto. Se observa su carácter falaz ya que lo personal carece de importancia lógica para establecer la verdad o falsedad de un enunciado. Circunstancial: refiere a la relación entre la persona y las circunstancias que lo rodean, por ejemplo la réplica del cazador al que se le acusa por sacrificar animales inofensivos por diversión y él pregunta ¿por qué se alimenta de carne de ganado inocente? Vemos que no trata de demostrar que es correcto sacrificar vidas de animales para el placer de los humanos, sino más bien le reprocha a su crítico que no sea vegetariano. Con este argumento atacamos a la persona que nos discute, acusándola de contradicción entre sus creencias y prácticas. Vale resaltar que a menudo logran su propósito, ya que son muy persuasivos, también se lo denomina “envenenar la fuente” las razones de ellos son evidentes. Fuente: http://es.wikipedia.org/falacias (28/08/2010) Caricatura de Charles Darwin como un simio, en la revista Hornet. Se puede observar que lo representaban con características propias de la rama de los simios, como manera de burla a su observación de la evolución del simio al hombre actual. Evidencia la falacia comentada. 3) Argumento por la ignorancia (ad ignoratiam) Sería puesto en práctica si expreso la aserción que deben existir los fantasmas ya que nadie ha podido demostrar que no los hay. La proposición sería verdadera porque no se pudo demostrar su falsedad. Cabe hacer una excepción en el caso del derecho, ya que allí existe un contexto especial en donde no es falaz: la Corte de Justicia; con la presencia del principio rector que supone la inocencia de la persona hasta que no se demuestre su culpabilidad. Siguiendo en el marco judicial, otro caso sería si una investigación no dio pruebas que la persona X es comunista, es erróneo concluir que la investigación no aportó conocimiento alguno, al contrario la misma estableció que X no es comunista. 4) Llamado a la piedad (ad misericordiam) Este recurso es utilizado para conseguir que se acepte determinada conclusión, lo encontramos con frecuencia en los tribunales de justicia, cuando un abogado defensor deja de lado los hechos específicos que atañen al caso y pretende generar piedad en los miembros del jurado y ponerlos a su favor. Un ejemplo algo sutil es la defensa que hizo Sócrates de si mismo durante su juicio: “Quizá haya alguno entre vosotros que pueda experimentar resentimiento hacia mi al recordar que él mismo, en una ocasión similar y hasta, quizá, menos grave, rogó suplicó a los jueces con muchas lágrimas y llevó ante el tribunal a sus hijos, para mover a compasión (…) yo en cambio aunque corra peligro mi vida, no haré nada de eso. El contraste puede aparecer en su mente, predisponerlo en contra de mi e instarlo a depositar su voto de ira, debido a su disgusto conmigo por esta causa (…) claro yo soy un hombre, una criatura de carne y sangre, y tengo familia, y tres hijos, ¡oh atenienses! Uno casi hombre y dos aún pequeños, sin embargo no traeré a ninguno de ellos para que os pida mi absolución”. Esta forma de argumentar puede usarse en tono hasta ridículo si vemos el caso, por ej, de un joven que luego de asesinar brutalmente a sus padres, frente a pruebas abrumadoras que lo comprometían seriamente, hacia un pedido de piedad al jurado por haber quedado huérfano. 5) Llamado al pueblo (ad populum) Este método puede ser utilizado para ganar consentimiento, despertar pasiones y entusiasmo de la multitud, es utilizado por los políticos demagogos que pretenden mover el sentimiento del público a favor o en contra de medidas determinadas. Lo que evita la labor de reunir pruebas y argumentos. Si la medida provoca cambios y se está en contra, arrojará sospechas de innovaciones arbitrarias y elogiará al “orden existente”, pronunciarán términos difamatorios, sin intento racional de argumentación; si está a favor de ella hablará de progreso oponiéndose a los “prejuicios anticuados”. Sobrados ejemplos invaden nuestra historia nacional, muchas veces imposibilitando el sustento de una oposición fuerte y enraizada en la convicción republicana. También en técnicas de publicidad y de ventas se suele manifestar la presencia de este llamado al pueblo; allí producen la asociación del producto con un resultado/ efecto/sensación/situación etc. que alcanzaremos si lo consumimos; es como si hechizaran sus productos y nos vendieran sueños e ilusiones. El político en su campaña electoral argumenta que él debe recibir nuestros votos porque “todo el mundo “vota por él, de igual manera se nos dice cuál marca de automóviles o cigarrillos es la mejor, porque es la que más se vende en el país. Debemos considerar que la aceptación popular de una actitud no demuestra que sean razonables, ni verdaderas. Fuente: http://www.biografiFuasyevntidea: s.com (Octubre 2004) En esta imagen vemos a Adolf Hitler (1889-1945) aclamado por el pueblo alemán, al cual supo convencer luego de la devastadora derrota de la Primera Guerra Mundial que debía levantarse para reivindicar la nacionalidad; hábilmente utilizaba técnicas discursivas para instarlo a seguir sus disposiciones. Lo llevarían a la segunda guerra y un saldo más desfavorable aún que la primera. 6) Apelación la autoridad (ad verecundiam) Tiene que ver con el sentimiento de respeto que siente la gente por personas famosas para tener asentimiento a una conclusión. No siempre es falaz porque nos puede ayudar a sustentar la misma, pero si la citamos fuera del ámbito de su especialidad si se convierte en falacia: por ejemplo apelar a Darwin (quien es una grana autoridad en biología) para una discusión religiosa o a Einstein (quien es un gran físico) para una de índole política. 7) Accidente Incurrimos en el toda vez que aplicamos una regla general a un caso particular, cuyas circunstancias hacen inaplicable la regla. Por ej.: la regla general sostiene que una persona debe pagar sus deudas, puede suceder que la misma esté en estado de insolvencia y no pueda hacerlo. Lo que es verdad en general puede no serlo universalmente y sin reservas, porque las circunstancias modifican los casos 8) Accidente inverso También denominado generalización apresurada al comprender y caracterizar todos los casos de una especie, se puede prestar atención solo algunos de ellos. Los casos deben ser típicos, no atípicos, porque estos últimos son los que nos pueden llevar a realizar una falacia de esta clase. Por ej: al ver el valor de los narcóticos que son administrados por los médicos para los enfermos graves, con lo que se alivian sus dolores, podemos proponer que los narcóticos estén a disposición de cualquiera. Estaríamos argumentando vía accidente inverso. Fuente: http://es.wikipedia.org/falacias (28/08/2010) Un niño de Palestina sostiene un cartel que dice: «No somos terroristas». No todas las personas que viven en Oriente Medio son terroristas, presunción extendida a consecuencia de la propaganda estadounidense en la llamada "Guerra contra el terrorismo”. 9) Causa falsa Esta falacia ha recibido distintas denominaciones como: non causa pro causa y “post hoc ergo propter hoc”2 . La primera es caer en el error de tomar como causa de un efecto algo que no es su causa real, y la segunda sería la inferencia de que un acontecimiento es causa de otro sólo porque el primero es anterior al segundo. Una creencia de pueblos antiguos que relacionaban el hacer sonar sus tambores como causa de reaparición el sol luego de un eclipse., ofreciendo como prueba que cada vez que se hicieron sonar los tambores durante el eclipse el sol apareció. [2] Significa después de esto, por lo tanto, a consecuencia de esto. Fuente: http://es.wikipedia. org/supersticion (23/06/2010) La esencia justificativa de las supersticiones se avala mediante este argumento falaz, la imagen nos muestra una herradura colocada en la puerta de la vivienda con el propósito de atraer la buena suerte. Significado de causa Ya advertimos la importancia del conocimiento de las conexiones causales, pero debemos diferenciar las condiciones necesarias de las suficientes; las primeras son circunstancias que si no están el fenómeno no se produce, por ej.: el humo es la consecuencia necesaria del fuego.A es necesario para que B se produzca, donde quiera que exista B ahí existe A. El fuego no puede ocurrir sin que exista humo; tener 18 años es necesario para obtener la licencia de conducir, es posible aseverar que una condición necesaria puede ocurrir por sí sola ya que hay formas de generar humo sin fuego.En cambio las segundas son aquellas circunstancias en cuya presencia el fenómeno debeo currir, es lo justo o lo adecuado para que la otra cosa exista: A no puede ocurrir sin B, no puede suceder sin aquello para lo que es condición, no puedes tener una licencia sin 18 años. Es muy frecuente que usemos el término causa tanto como condición suficiente, cuando queremos que se produzca algo deseable, como necesaria la cual tiene un carácter aún más usual. Otro sentido que se le puede atribuir es por él, en el caso de una compañía de seguros que envía a investigar un incendio misterioso. Ella no está interesada en buscar o diferenciar entre condiciones necesarias o suficientes, si pretende descubrir la acción que marque la diferencia entra la aparición y la no aparición del acontecimiento. Aquí entra en juego otra distinción: causas remotas y próximas. C A U S A PRÓ XI M A C A U S A S RE M O TA S En este ejemplo será la acción de encender el fuego por el titular de la póliza. C A U S A PRÓ XI M A C A U S A S RE M O TA S La persona fue instado por su mujer para que gane más dinero. Exigencias de ella de tener más ropa. Dado que la vecina se compró un valioso tapado. Por la especulación en los cereales del marido de la vecina. Favorecido por el aumento de precios. Pérdida de cosecha en India, ésta última sería la causa más remota del hecho. Nunca encontraremos ni lograremos definir una única causa que se ajuste a todos los requerimientos. Puede haber una pluralidad de causas, en el caso de una muerte puede darse por una ataque al corazón, envenenamiento, bala, accidente, etc., no podemos hacer aquí inferencias que vayan desde los efectos a las causas, pero especificaciones posteriores (autopsia) aclararan el panorama disminuyendo el número de ellas. Toda vez que usemos la palabra causa estamos relacionándola con efecto, debido a que están conectados uniformemente: una circunstancia particular causa un efecto particular, causas similares producen efectos similares. Las causas que producen ciertos efectos es un caso de ley causal general ya que van siempre acompañadas de tales fenómenos, no es una relación lógica ni deductiva, sino que debe descubrirse a priori. El diagrama causa-efecto o también llamado espina de pescado sirve para ayudarnos a graficar las causas del problema que queremos analizar, incluye los siguientes elementos: El problema principal que se desea analizar. Las causas principales que han originado el problema. Las causas secundarias de cada causa principal. En el siguiente ejemplo observamos un diagrama de Causa-Efecto en la fabricación de mayonesa. Figura 1. Causas principales Fuente: http://img56.images.us/img565153dadca4bn1 (08/08/2005) Figura 2. Causas secundarias - Correspondientes a cada causa principal Fuente: http://img56.images.us/img565153dadca4bn1 (08/08/2005) 10) Petición de principios Al establecer la verdad de una proposición buscamos premisas aceptables de las que podemos deducir la conclusión, tomamos como premisa la misma conclusión que se pretende probar, por lo cual adquiere carácter circular este razonamiento. En el caso de alguien que quiere probar la existencia de Dios y expresa: “Dios existe porque así lo dice la Biblia, lo cual es verdad porque la Biblia la escribió Dios”. No se esta dando razones que justifiquen conclusiones, sólo se usa la conclusión para justificarla a sí misma. 11) Pregunta compleja Exponer una pregunta o cuestión de manera que no se pueda acordar con un sí o con no en forma directa. Tiene como efecto ratificar o confirmar la respuesta implícita en la pregunta formulada. Por ej., en un interrogatorio un abogado puede plantearlas para confundir o acusar a un testigo: ¿qué hizo con el dinero que robó? Lo que se debería hacer en estos casos, es analizar a la pregunta compleja en sus partes componentes, así cuando respondamos la parte implícita la explícita es posible que sea diluida simplemente 12) Conclusión inatinente (ignotario elenchi) Se trata de una falacia donde se usa un razonamiento que está dirigido a establecer una conclusión particular es usado para una diferente; sus premisas se dirigen a otra conclusión de aquella a la que se supone establecida por ella. Por ej: probar que el acusado de asesinato es culpable argumentando que el asesinato es un horrible delito para despertar horror y desaprobación. Cabe resaltar que puede usarse un lenguaje neutro y frío asimismo caer en este tipo de error argumental. Falacias de ambigüedad3 [3] 6 Copi, Irving. Introducción a la lógica. Eudeba, Buenos Aires, 1994. Pág 104 a 113 Son razonamientos cuya formulación contiene palabras o frases ambiguas; si retomamos las reglas del lenguaje que vimos paginas atrás, recordaremos que debe utilizarse un único significado para cada término. Las siguientes están clasificadas según las distintas maneras en que pueden presentarse sus ambigüedades: – El equívoco La mayoría de las palabras tienen más de un significado literal, si distinguimos estos diferentes sentidos no tendremos inconveniente alguno, pero si los usamos dentro del mismo contexto con distintos sentidos, entonces caemos en el equívoco. El ejemplo tradicional de este tipo de argumentos es: El fin de una cosa es su perfección La muerte es el fin de la vida La muerte es la perfección de la vida Aquí se confunden dos sentidos distintos del término “fin”, uno como objetivo y otro como último acontecimiento, ambos son legítimos pero lo ilegitimo es confundirlos. Genera que la conclusión no sea deducida de las premisas. Hay una clase de equívoco que se relaciona con los términos relativos, es decir los que tiene diferentes significados en contextos distintos. Por ej. la palabra “bueno” se la usa con frecuencia equívocamente, cuando decimos que debe ser una buena persona porque es un buen matemático. La anfibología – Cuando se argumenta con premisas cuyo significado es confuso debido a la manera descuidada en que sus palabras están combinadas; son premisas peligrosas, raramente las encontramos en discusiones serias; suelen aparecer en epígrafes o títulos de periódicos como el siguiente: “un granjero se saltó la tapa de los sesos después de despedirse afectuosamente de su familia con un revolver”. Mi padre fue al pueblo de José en su coche (Texto anfibológico) ¿En el coche de quién? – Composición Esta falacia se aplica a dos tipos de razonamientos muy vinculados entre si; el primero se define como llevar el razonar falazmente desde las propiedades de las partes de un todo, a las propiedades del todo mismo. Un ejemplo sería: si todas las partes de una maquina determinada son livianas la máquina “como un todo” es liviana. El error lo vemos cuando consideramos una máquina muy pesada que puede estar compuesta por partes livianas. El segundo tipo de razonamiento, procede a partir de las propiedades de los miembros individuales de una colección para pasar a las propiedades poseídas por la colección. Equivaldría decir que si un ómnibus gasta más nafta que un automóvil, todos los ómnibus gastan más nafta que los automóviles; lo que se confunde en esta clase es el sentido distributivo y el sentido colectivo de términos generales. Ambos cosas aunque son semejantes la diferencia radica en la distinción entre simple colección de elementos y el todo construido a partir de esos elementos. Por ello una mera colección o clases de partes no es máquina; una mera colección de ladrillos no es una pared. Una totalidad (máquina/ pared) tiene sus partes organizadas de cierta manera definida – División Es la inversa de la anterior, se presenta la misma confusión pero la inferencia procede en la dirección opuesta. Tenemos dos géneros de falacia de división, el primero consiste en argumentar falazmente que lo que es cierto de un todo, debe serlo también de cada una de las partes. Por ej. si sostenemos que un equipo de futbol es bueno decimos que cada uno de sus jugadores lo es. El segundo subtipo consiste en deducir de las propiedades de una colección de elementos las propiedades de los elementos mismos. Argüir que dado que los estudiantes universitarios estudian Medicina, Derecho, Ingeniería, Odontología y Arquitectura, por lo tanto cada uno de ellos o algunos estudian Medicina, Derecho, Ingeniería, Odontología y Arquitectura. Es verdad que colectivamente estudian esas disciplinas, pero es falso que lo hagan distributivamente. Ambigüedades en publicidad En Argentina, un famoso shampoo anticaspa tenía por eslogan «Para la caspa». Cuando se lo usaba en televisión, el locutor lo decía de tal modo que todos se preguntaban si se refería al verbo parar o a la preposición. Se trata de un ejemplo de ambigüedad positiva. La doble interpretación siempre tendría que remitir a algo bueno para el producto, sin que quede lugar para las dudas. El extremo opuesto, una ambigüedad negativa: «Televisores Mega. Son lo que tú ves». ¿Qué habrá querido decir el redactor con esta frase? ¿Qué son lo que se ve? ¿Qué no son nada más que eso? ¿Qué son los televisores que ve todo el mundo? ¿Dónde los ven? ¿En sus casas, en los avisos o en las vidrieras? El manejo de la ambigüedad es un arte complejo. Si se lo utiliza, es preciso asegurarse de que la ambigüedad vaya en un solo sentido, se la tome como se la tome. Si no, es aconsejable volver al seguro terreno de lo directo y sencillo. Falacias formales4 [4] Copi, Irving. Introducción a la lógica. Eudeba, Buenos Aires, 1994. Pág 224 a 231 Caemos en ellas al tomar la verdad de sus proposiciones como garantía de la validez del razonamiento, son fallas de sintaxis lógica, su número es extenso, pero tiene en común que si abstraemos su forma lógica es posible una nueva interpretación con premisas verdaderas y conclusión falsa. Falacia de afirmar el consecuente en el modus ponens y no el antecedente como es debido: Ej: Si Bacon escribió Hamlet, entonces, Bacon era un gran escritor Bacon era un gran escritor Por lo tanto, Bacon escribió Hamlet. Conclusión absurda. Si llueve, entonces me mojo Me mojo Por lo tanto, llueve. Es posible mojarse por otra causa. Falacia de negar el antecedente en el modus tollens y no el consecuente Ej: Si Carlos mató a su amigo, entonces cometió un grave delito Carlos no mató a su amigo Por lo tanto, no cometió un grave delito. Puede haber cometido otro delito. Falacia de cuatro términos: un silogismo categórico debe contener sólo tres términos, puede que uno esté usado en dos formas distintas. La conclusión sólo puede justificarse si las premisas muestran la relación de los términos de la conclusión con el tercer término. El término medio debe estar distribuido en una premisa al menos, observemos el siguiente caso: Todos los perros son mamíferos Todos los gatos son mamíferos Por lo tanto, todos los gatos son perros. El término medio mamíferos no está distribuido, las premisas deben mostrarnos como los dos términos están conectados con un tercero Falacia de premisas excluyentes: cuando son negativas, generan que no sea válido el silogismo. Falacia de extraer conclusión afirmativa de premisas negativas: conforma un error ya que la misma no puede decir más o ir más allá que ninguna premisa. Falacia existencial: extraer una conclusión particular cuando ambas premisas son universales. Ej: Todos los animales mimados son animales domésticos. Ningún unicornio es un animal doméstico Por lo tanto, algunos unicornios no son animales domésticos Para implicar una conclusión afirmativa ambas premisas deben afirmar una inclusión de clases. La conclusión afirmativa sólo se deduce de premisas afirmativas, si una es negativa la conclusión es negativa sí o sí. Para profundizar los conceptos centrales de la lectura, te propongo la siguiente lectura obligatoria sobre "Falacias y verdades en las justificaciones actuales de los derechos fundamentales". Falacias y verdades en las justificaciones actuales.pdf 220.5 KB Fuente: Herrera Daniel Alejandro. (2010). Falacias y verdades en las justificaciones actuales de los derechos fundamentales. Colombia: Universidad de La Sabana. Síntesis conceptual Los argumentos deductivos son los que pretenden que sus premisas ofrezcan fundamentos concluyentes, la verdad de sus premisas, son prueba suficiente para garantizar la verdad de sus conclusiones, ellas se encuentran lógicamente implicadas por las premisas. Los razonamientos inductivos no nos ofrecen fundamentos concluyentes para asegurar la verdad de la conclusión solo nos dan algún motivo o razón, pueden ser mejores o peores pero no válidos o inválidos. Argumentos categóricos las proposiciones categóricas son aserciones acerca de clases que afirman o niegan que una de ellas esté incluida en otra de manera total o parcial. Tenemos cuatro formas típicas: TODO S ES P NINGÚN S ES P ALGÚN S ES P ALGÚN S NO ES P Debemos diferenciar calidad de cantidad, la primera hace mención al carácter afirmativo o negativo de la proposición, y la segunda al hecho de ser “universal” o “particular”. Silogismo categórico: Es un razonamiento deductivo del cual se infiere la conclusión a partir de la premisa. Posee tres proposiciones categóricas y tres términos de los cuales el que aparece como predicado de la conclusión se llama término mayor en cambio el sujeto de la conclusión es el término menor, el restante se denomina término medio Modus ponens: Significa “poner”, puesto “P” se sigue “Q”, en este razonamiento se afirma el antecedente y como conclusión se afirma el consecuente. Modus tolens: Viene de “tollere” que significa quitar, en este modo realizamos la negación del antecedente para poder en la conclusión negando el antecedente. Silogismo hipotético: la condición es que el consecuente de una premisa sea el antecedente de la siguiente y que luego en la conclusión se enlace el primer antecedente con el último consecuente. Silogismo disyuntivo: también llamado alternativo, este caso no afirma la verdad de una u otra de sus opciones, sino que al menos una es verdadera o ambas pueden serlo. Dilema: significa tener que elegir entre dos alternativas que son malas o desagradables, es un elemento poderoso e impactante en la persuasión, como arma devastadora en una discusión. La inducción se basa en razonamientos que no aspiran a mostrar la verdad de sus conclusiones como derivación necesaria de las premisas, sino que tienen cierta Síntesis conceptual 14 probabilidad; la misma no demuestra como ciertas las leyes a las que conduce sino más bien como altamente probables. Razonamiento por analogía es muy usado en la vida cotidiana, se encuentra el fundamento por medio de la experiencia pasada que nos permite discernir el futuro Estimación de razonamientos analógicos Número de entidades entre las cuales se afirman por analogía. Número de aspectos en los que se establecen analogías. Fuerza de las conclusiones con respecto a las premisas. Número de desemejanzas o diferencias entre los ejemplos mencionados en las premisas y el ejemplo de la conclusión Atinencia de las premisas. Significado de causa Es frecuente que usemos el término causa tanto como condición suficiente como necesaria. Nunca encontraremos ni lograremos definir una única causa que se ajuste a todos los requerimientos. Toda vez que usemos la palabra causa estamos relacionándola con efecto, debido a que están conectados uniformemente: una circunstancia particular causa un efecto particular. Las causas que producen ciertos efectos es un caso de ley causal general ya que van siempre acompañadas de tales fenómenos, no es una relación lógica ni deductiva, sino que debe descubrirse a priori. Inducción por enumeración simple Es similar a los razonamientos por analogía, se usa a menudo para establecer relaciones causales, tiene los mismos criterios que los anteriores, a mayor número de casos mencionados habrá una mayor probabilidad de conclusión. Debe tenerse precaución porque no son capaces de distinguir entre ejemplos de leyes causales y meros accidentes o coincidencias Falacias formales y no formales Una falacia significa toda idea equivocada o creencia falsa; en lógica se la utiliza, haciendo alusión a un error de razonamiento. Aquí sucede una particularidad, algunos no son obviamente incorrectos y se usan comúnmente por ser altamente persuasivos (principalmente en la argumentación jurídica). No existe una única clasificación la más adecuada para su estudio es la que distingue en: formales y no formales. Las primeras deben ser analizadas en conexión con esquemas de razonamiento válido, ya que son errores evidenciados desde la lógica. En cambio, las no formales, no cumplen con las reglas no formales (del contenido y fiabilidad de las premisas, que ya repasamos en apartados anteriores) y a la vez se subdividen en falacias de atingencia y ambigüedad. Las falacias de atinencia Apelación a la fuerza Argumento dirigido contra el hombre Argumento por la ignorancia Llamado a la piedad Llamado al pueblo Apelación la autoridad Accidente Accidente inverso Causa falsa Petición de principios Pregunta compleja Conclusión inatinente Falacias de ambigüedad Equívoco Anfibología Composición División Falacias formales Falacia de afirmar el consecuente en el modus ponens y no el antecedente Falacia de negar el antecedente en el modus tollens y no el consecuente Falacia de cuatro términos Falacia existencial Falacia de premisas excluyentes Falacia de extraer conclusión afirmativa de premisas negativas El término medio debe estar distribuido en una premisa al menos LECCIÓN 2 de 3 Referencias Copi, I. (1994). Introducción a la lógica (1ª Ed). Buenos Aires: Eudeba. Herrera Daniel Alejandro. (2010). Falacias y verdades en las justificaciones actuales de los derechos fundamentales. Colombia: Universidad de La Sabana. Redondo, M. C. (1996). La noción de razón para la acción en el análisis jurídico. Madrid: Centro de Estudios Constitucionales.