Capacidades físicas básicas. Evolución, factores y desarrollo. Sesiones prácticas Diplomado y Licenciado en Educación Física (España) Daniel Muñoz Rivera danibarbate@hotmail.com Resumen En general, la Condición Física va a venir determinada por el nivel de desarrollo de las diferentes Capacidades Físicas Básicas (Fuerza, Resistencia, Velocidad y Flexibilidad), las cuales se van a sustentar en una base orgánica (Aparato Locomotor, Circulatorio y Respiratorio), una buena alimentación (Energía) y van a ser susceptibles de mejora con la práctica de ejercicio físico. Palabras clave: Capacidades físicas básicas. Desarrollo. Educación Física. http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 14 - Nº 131 - Abril de 2009 1/1 1. Introducción La Condición Física ha ido tomando importancia por su relevancia en la realidad social (necesidad de una buena salud, calidad de vida y ocio) y por la satisfacción de practicar actividad física (requiere un mínimo desarrollo de las Capacidades Físicas Básicas y Cualidades Motrices). Básicamente, las C. F. B. son la fuerza, resistencia, flexibilidad y velocidad, y en cuanto a las C. M. son la coordinación y el equilibrio, también hay autores que proponen la Agilidad como capacidad resultante; todas son susceptibles de mejora a través de la práctica de ejercicio físico y el entrenamiento. Los métodos y sistemas de entrenamiento han ido evolucionando hasta hoy día desde que se confirmó que el desarrollo de la C. F. era indispensable para el logro de un buen rendimiento. Esto es aplicable a los deportistas de elite, pero no es aplicable a los alumnos/as de un centro escolar, ya que el tratamiento de la actividad física en el ámbito educativo debe partir de una orientación Educativa y Lúdica del movimiento y debe estar basado fundamentalmente en la Salud del individuo. El profesor de educación física debe conocer las necesidades, capacidades y posibilidades del alumnado, las pausas de recuperación y progresiones necesarias en el planteamiento de los ejercicios físicos, cómo afectan determinados tipos de ejercicios al organismo, cuáles son aplicables y cuáles no, en qué edades se pueden aplicar, en definitiva, conocer la repercusión de la actividad física en el organismo de los alumnos. En general, un adecuado desarrollo de la Condición física va a contribuir en el desarrollo integral de los alumnos/as, va a mejorar la salud de éstos en el presente y en el futuro, así como su calidad de vida y disfrute personal (ocio). 2. Capacidades físicas básicas 2.1. Aproximación conceptual Tras analizar varias definiciones de autores como Antón, Matveev, Platonov, podemos definir Las Capacidades Físicas Básicas (C. F. B.) como “predisposiciones fisiológicas innatas en el individuo, que permiten el movimiento y son factibles de medida y mejora a través del entrenamiento”. Estas son: la Fuerza, Resistencia, Velocidad y Flexibilidad. En general, todas las capacidades físicas actúan como sumandos de un todo integral que es el sujeto y se manifiestan en su totalidad en cualquier movimiento físico-deportivo. En esta sentido, las capacidades físicas básicas se van a caracterizar por: 2.2. La estrecha relación que mantienen con la técnica o habilidad motriz. Requieren procesos metabólicos. Actúan de forma yuxtapuesta cada vez que se realiza un ejercicio, es decir, se precisa de todas las capacidades en mayor o menos medida. Hacen intervenir grupos musculares importantes. Determinan la condición física del sujeto. Clasificación de las capacidades físicas básicas La primera clasificación de la cual tenemos constancia acerca de las C. F. B. es la de Bellin de Coteau (finales del S. XIX), que ha sido el punto de partida del resto de clasificaciones: Velocidad. Resistencia. Fuerza. Destreza: Flexibilidad, Coordinación, Equilibrio y Agilidad. Más tarde, surgieron otras clasificaciones acuñadas por autores importantes como: Porta (1988), que distingue entre: o Capacidades Motrices: Fuerza, Resistencia, Velocidad y Flexibilidad. Capacidades Perceptivo-Motrices: Coordinación, Equilibrio, Percepción espacio-temporal y Percepción kinestésica. o Capacidades Resultantes: Habilidad y/o Destreza, Agilidad. Castañer y Camerino (1991), que en su modelo global distinguen: o Capacidades Motrices: Fuerza, Resistencia, Velocidad y Flexibilidad. o Capacidades Perceptivo-Motrices: Coordinación, Equilibrio, Ritmo, lateralidad, etc. o Capacidades Socio-Motrices: expresión, imaginación, creación, oposición-colaboración, etc. Blázquez (1993), nos indica que las Capacidades Físicas Básicas (Fuerza, Resistencia, Velocidad y Flexibilidad), son la base de los aprendizajes y de la actividad física y considera que la reducción de la Condición Física a esos cuatro elementos nos da una clasificación práctica y confortable a la vez que simplista. o 2.3. A. La fuerza como capacidad física básica Definición Porta (1988), define la Fuerza como “la capacidad de generar tensión intramuscular”. B. Clasificación A continuación nos vamos a centrar en la propuesta de Stubler (citado por Matveev, 1992), en la que se distinguen diferentes tipos de fuerza según: A. El tipo de contracción B. F. Isométrica: existe tensión muscular, pero no hay movimiento ni acortamiento de las fibras al no vencerse la resistencia. F. Isotónica: existe movimiento venciéndose la resistencia existente, pudiendo ser Concéntrica (se produce un acortamiento del músculo con aceleración) o Excéntrica(se produce un alargamiento del músculo con desaceleración). La resistencia superada F. Máxima: es la capacidad que tiene el músculo de contraerse a una velocidad mínima, desplazando la máxima resistencia posible. F. Explosiva: es la capacidad que tiene el músculo de contraerse a la máxima velocidad, desplazando una pequeña resistencia. F. Resistencia: es la capacidad que tiene el músculo de vencer una resistencia durante un largo periodo de tiempo. También se la considera como la capacidad de retrasar la fatiga ante cargas repetidas de larga duración. 2.4. A. La resistencia como capacidad física básica Definición Porta (1988), define la Resistencia como “la capacidad de realizar un trabajo, eficientemente, durante el máximo tiempo posible”. B. Clasificación En función de la vía energética que vayamos a utilizar, la Resistencia puede ser: 2.5. A. Resistencia aeróbica: es la capacidad que tiene el organismo para mantener un esfuerzo continuo durante un largo periodo de tiempo. El tipo de esfuerzo es de intensidad leve o moderada, existiendo un equilibrio entre el gasto y el aporte de O2. Resistencia anaerobica: es la capacidad que tiene el organismo para mantener un esfuerzo de intensidad elevada durante el mayor tiempo posible. Aquí, el oxígeno aportado es menor que el oxígeno necesitado. Ésta a su vez, puede ser: o Anaerobica lactica: existe formación de ácido láctico. La degradación de los azucares y grasas para conseguir el ATP o energía necesaria, se realiza en ausencia de O 2. o Anaerobica alactica: también se lleva a cabo en ausencia de O2, pero no hay producción de residuos, es decir, no se acumula ácido láctico. La velocidad como capacidad física básica Definición Torres, J. (1996), define la Velocidad como “la capacidad que nos permite realizar un movimiento en el menor tiempo posible, a un ritmo máximo de ejecución y durante un periodo breve que no produzca fatiga”. B. Clasificación Según Harre (Citado por Matveev, 1992), distinguimos entre: V. CÍCLICA: propia de una sucesión de acciones ( correr, andar). V. ACÍCLICA: propia de una acción aislada (lanzar). Según Padial., Hahn y muchos otros autores, distinguimos entre: 2.6. A. V. DE REACCIÓN: capacidad de responder con un movimiento, a un estímulo, en el menor tiempo posible (salida al oír el disparo en una carrera de 100m.). V. GESTUAL: velocidad de realización de un gesto aislado. También llamada V. de ejecución (lanzar la pelota en béisbol). V. DE DESPLAZAMIENTO: capacidad de recorrer una distancia en el menor tiempo posible. También puede definirse como la capacidad de repetición en un tiempo mínimo de gestos iguales (correr, andar). La flexibilidad como capacidad física básica Definición Según Hahn (Citado por Padial, 2001), la Flexibilidad es “la capacidad de aprovechar las posibilidades de movimiento de las articulaciones, lo más óptimamente posible”. Es la capacidad que con base en la movilidad articular y elasticidad muscular, permite el máximo recorrido de las articulaciones en posiciones diversas, permitiendo realizar al individuo acciones que requieren agilidad y destreza. Otros autores la denominan “Amplitud de Movimiento”. B. Clasificación Según Fleischman (Citado por Antón, J. L., 1989), podemos distinguir entre: FL. Dinámica: aquella que se practica cuando realizamos un movimiento buscando la máxima amplitud de una articulación y el máximo estiramiento muscular. En este tipo de flexibilidad hay un desplazamiento de una o varias partes del cuerpo. FL. Estática: no hay un movimiento significativo. Se trata de adoptar una posición determinada y a partir de ahí, buscar un grado de estiramiento que no llegue al dolor y que deberá mantenerse durante unos segundos. Pueden ser movimientos ayudados. En definitiva, debemos de llevar a cabo la enseñanza y desarrollo de las diferentes Capacidades Físicas Básicas desde una perspectiva de idoneidad y control, con la firme intención de lograr en los alumnos un desarrollo motriz comprensivo y adaptado, tanto a las actividades físico-deportivas que realicen, como a las posibles necesidades cotidianas o profesionales que se les pudiesen presentar. 3. 3.1. A. Evolución y factores que influyen en su desarrollo Evolución de las C. F. B. Evolución de la Fuerza El factor fuerza se desarrolla continuamente durante el período de crecimiento y alcanza el máximo nivel durante la tercera década de la vida. De los 6 a los 10 años, el desarrollo de la fuerza es lento y se mantiene paralelo entre el hombre y la mujer. En torno a los 11 años, aumenta el desarrollo de la fuerza, siendo el del chico mucho más rápido que el de la chica. De los 12 a 14 años, no hay incremento sustancial de fuerza, sólo el ocasionado por el crecimiento en longitud y grosor de los huesos y músculos. De los 14 a 16 años, tiene lugar un incremento acentuado del volumen corporal, primero en longitud y luego en grosor, lo que supone un alto incremento de la fuerza muscular, hasta casi un 85% de la fuerza total. De los 17 a 19 años, se completa el crecimiento muscular hasta el 44% de la masa corporal de un individuo adulto. De los 20 a los 25 años, se mantiene el nivel de fuerza. A partir de esta edad y hasta los 30 años, se obtiene el máximo % de fuerza en ambos sexos. Tras sobrepasar los 30 años, la fuerza sufre un descenso paulatino, frenado únicamente con trabajos físicos adecuados de mantenimiento. B. Evolución de la Resistencia Es un hecho constatado que la resistencia aumenta, de forma más o menos constante, a lo largo de la infancia y la adolescencia, y que representa un factor de primer orden en el mantenimiento de la salud. A los 8-9 años se produce un aumento significativo en el rendimiento del niño/a, a los 11 años un relativo estancamiento y en torno a los 13 años se comprueba que los chicos experimentan un gran aumento, mientras que las chicas no solo no la aumentan, sino que en muchos casos se estancan. Por tanto, los chicos poseen mejores requisitos para el entrenamiento de la resistencia en estas edades. De los 15 a los 17 años, la capacidad de resistencia aumenta considerablemente, alcanzándose niveles máximos de resistencia aláctica. En torno a los 20 años será cuando el individuo esté preparado para realizar esfuerzos intensivos, que supongan la mejora de la resistencia anaeróbica láctica, ya que el organismo estará más preparado para tolerar la acumulación de lactato. Entre los 20 y 30 años, tenemos la fase de mayor capacidad, tanto para esfuerzos aeróbicos como anaeróbicos. De los 30 años en adelante, la resistencia comienza a decaer, aunque más lenta que la fuerza y la velocidad. En estas edades, con un trabajo adecuado se puede mantener a niveles muy altos. C. Evolución de la Velocidad De 6 a 9 años, se produce un incremento de la velocidad. Los movimientos acíclicos se completan y la frecuencia motriz mejora notablemente. De 9 a 11 años, existen niveles de coordinación satisfactorios que favorecen el desarrollo de factores como la frecuencia y la velocidad gestual, aunque con carencia de fuerza. En torno a los 11 y 12 años, es un buen momento para la realización de tareas motrices específicas de velocidad. De 12 a 14 años, la fuerza adquiere índices mayores y se dan importantes diferencias en la coordinación, también llamada “torpeza adolescente”, algo que limita la velocidad. De los 14 a los 16 años, se adquiere la máxima frecuencia gestual de forma que se igualan los tiempos de reacción a los adultos. El sistema anaeróbico láctico y la fuerza muscular se acercan al momento adulto (80%) por lo que es una buena etapa para la detección de talentos en pruebas que precisen máxima velocidad de reacción. A los 17-18 años se alcanza el 95% de la velocidad máxima, mejora notablemente la velocidad cíclica y el sistema anaeróbico se encuentra al 90%. A partir de esta edad se estabiliza el desarrollo de la velocidad y en torno a los 25 años comienza a bajar si no se mantienen los entrenamientos de dicha capacidad. D. Evolución de la Flexibilidad Al contrario que el resto de capacidades, la flexibilidad involuciona con el crecimiento. La máxima flexibilidad se encuentra en la infancia, aunque también hay un cierto apogeo al inicio de la etapa puberal, más concretamente, alrededor de los 10-12 años y después se va perdiendo progresivamente. Hasta los 6 años, el aparato locomotor se caracteriza por su gran elasticidad, estando indicadas las actividades globales, de movimientos básicos que le permitan ejercer libremente su motricidad. De los 6 a los 12 años, el descenso no es muy importante, pero justamente a partir de esta edad, a causa de los cambios hormonales y el crecimiento antropométrico tan acentuado, se producen una serie de cambios en la extensibilidad, hasta entonces mantenida, abriéndose un punto de ruptura en la progresión de la flexibilidad, ya que se acentúa su regresión. A partir de esta edad, el descenso dependerá mucho de la actividad del sujeto y de su particular constitución. En definitiva, la flexibilidad es una capacidad que sigue un proceso natural de involución, si no se le presta cierta atención, ésta sufrirá un empeoramiento paulatino. 3.2. Factores que influyen en el desarrollo de LAS C. F. B. Todas las capacidades físicas se van a encontrar influenciadas por una serie de factores determinantes. Por un lado, están los factores Exógenos (edad, sexo, estado emocional, alimentación, ritmo diario, hora del día, condiciones climáticas), y por otro lado, los factores Endógenos (musculares, nerviosos, biomecánicos, hormonales), que son los más importantes y los que vamos a comentar a continuación. A. Factores musculares B. Sección transversal. Al incremento de S. T. del músculo se le llama Hipertrofia. Al hipertrofiar el músculo, se crean un mayor número de puentes cruzados entre las proteínas de actina y miosina, pudiendo generar mayor tensión, y por tanto, mayor fuerza. Tipos de fibras. El tipo de fibra va a influir notablemente en el desarrollo de las diferentes C. F. B. Así tenemos: o Fibras blancas (F. T. / fibras rápidas): Se caracterizan por tener un diámetro grueso, están inervadas por moto-neuronas alfa de alta frecuencia de descarga, con encimas anaeróbicos, adecuadas para esfuerzos cortos e intensos, ricas en fosfatos y glucógeno. Dentro de estas encontramos dos tipos: II A: Anaeróbicas Lácticas de intensidad submáxima. II B: Anaeróbicas Lácticas de intensidad máxima. o Fibras rojas (S. T. / fibras lentas): Se caracterizan por tener un diámetro delgado, están inervadas por moto-neuronas alfa de baja frecuencia de descarga, con encimas oxidativos del metabolismo aeróbico, muy capilarizadas y adecuadas para esfuerzos duraderos y de poca intensidad. Factores nerviosos Influencia del S.N.C. Las neuronas inervan multitud de fibras musculares cuando son estimuladas, provocando que las células musculares se contraigan de forma sincronizada. Destacar que la neurona motriz que inerva las fibras rápidas es mayor que la de las lentas, por lo que el impulso nervioso se transmite más rápidamente por el axón y se utiliza menos tiempo para producir una tensión máxima. Además, la capacidad que tiene el músculo de contraerse no solo depende del nº y talla de las fibras musculares, sino también de la capacidad del s. nervioso para activar las fibras musculares. Para que un músculo al contraerse produzca una fuerza máxima, necesita que todas sus Unidades Motrices (U. M.) sean activadas. Capacidad psicológica. Capacidad de soportar la fatiga e incluso incrementar la intensidad en situaciones extremas. La voluntad es fundamental. Reclutamiento de unidades motrices. Normalmente, se reclutan entre un 20-30% de U. M. en sujetos no entrenados. Con el entrenamiento, aumenta hasta un 80-90%. Por ello, cuando entrenamos, en poco tiempo somos capaces de vencer una resistencia más elevada. Esto se debe al aumento de U. M. R. y no al incremento de la S. T. del músculo. C. Factores biomecánicos Dentro de estos factores, los más influyentes van a ser la Frecuencia de los Apoyos, la Amplitud de Zancada, el Dominio de la Técnica y la Complejidad del Gesto. D. Factores hormonales Los factores musculares y nerviosos necesitan de los hormonales. Con el entrenamiento de las C. F. B. se da un aumento de la liberación y utilización de hormonas en los tejidos, y por consiguiente, una mayor concentración sanguínea. Por un lado, se liberan hormonas catabólicas como el Cortisol, que suelen disminuir la acción muscular, reduciendo así el rendimiento de la fuerza y la velocidad, y por otro lado, también se produce la liberación de Testosterona, cuya concentración en sangre no varía en actividades de baja o media intensidad, pero si que aumenta cuando se trabaja con intensidades elevadas. La testosterona va a ser la causante de la hipertrofia muscular, ya que va a incrementar el transporte de aminoácidos y la síntesis de proteínas. También va a favorecer el crecimiento de los huesos, debido al efecto anabolizante que tiene sobre el metabolismo proteico y el cartílago de crecimiento. 4. Desarrollo de las capacidades físicas básicas en la edad escolar Según Hahn (Citado por Padial, 2001), en la infancia se han de crear las bases para que el alumnado esté dispuesto y preparado para afrontar posteriores etapas de mayor complejidad a nivel procedimental. Además, a la hora de llevar a cabo un proceso de enseñanza-aprendizaje con niños, hay que conocer las características propias de éstos y el momento evolutivo de cada uno. En esta línea, aparece el concepto de “Períodos Críticos”, acuñado por Palacios (1979), que son aquellas etapas con mayor disponibilidad, por parte del alumno, para el aprendizaje y el desarrollo de las C. F. B. Será en estos períodos donde las Capacidades pasan a ser entrenables. 4.1. Desarrollo de la fuerza En cuanto al desarrollo de esta capacidad, cabe destacar que la musculatura sufre una Hipertrofia (Aumento del volumen muscular), algo que hace disminuir la resistencia y la velocidad, aunque gracias al Principio de Adaptación, posteriormente, la velocidad y la resistencia irán en aumento a medida que aumente la capacidad del músculo. Siempre y cuando las cargas y los descansos sean adecuados, se dará una mejora en el desarrollo de la fuerza y de cualquier otra capacidad. A. Métodos para el desarrollo de la fuerza Métodos para la fuerza estática o o o o Métodos para la fuerza dinámica o o o o o o B. Métodos de contraste (alternando con y sin carga). Métodos isométricos. Métodos combinados (isométrico + Ejercicios concéntricos / pliométricos). Métodos de autocarga. Métodos de esfuerzos dinámicos (Ej: Arrastres por pareja). Métodos de repeticiones. Métodos combinados (excéntricos + Ejercicios concéntricos / pliométricos). Métodos Pliométricos (saltos). Métodos de contraste (alternando con y sin carga). Método de resistencia a la fuerza. Edades aconsejables para su desarrollo 6-8 años La estimulación debe ser global, a través de acciones como empujar, traccionar, siempre de forma jugada y con precaución. En estas edades podemos observar la descompensación que existe entre el tren inferior y el tren superior debido a que casi todos los desplazamientos se realizan de forma bípeda, por ello se recomienda un trabajo lúdico de ejercitación del tren superior mediante acciones de trepar, reptar, a gatas, de arrastre, etc. 8-10 años En esta etapa, el entrenamiento de fuerza buscará la mejora de la coordinación neuromuscular sin desarrollo de la hipertrofia muscular, a través de acciones globales como en la etapa anterior pero con juegos y ejercicios algo más complejos. Empezaremos a incluir pequeños trabajos de tonificación muscular en los calentamientos. 10-12 años En estas edades tiene lugar un aumento considerable de la Fuerza Explosiva en los niños. Ésta la trabajaremos mediante saltos (tren inferior) y lanzamientos (tren superior). También se desarrollará la Fuerza Resistencia a través de actividades lúdicas como mantener el equilibrio, pelea de gallos, etc. * El trabajo de Fuerza Máxima está excluido en estos momentos, por el alto riesgo de lesión que supone. 4.2. Desarrollo de la resistencia El trabajo de la resistencia requiere la realización reiterada de tareas y ejercicios. En la educación física escolar es dificultoso, ya que la sesión se hace demasiado monótona y poco motivante para los alumnos. Para ello, el profesor debe recurrir a diferentes estrategias y métodos que amenicen y motiven la sesión de trabajo. A. Métodos para el desarrollo de la resistencia Métodos Contínuos o o o Métodos Fraccionados o o o B. Carrera continua uniforme. Carrera continua variable. Farlec sueco. Interval training. Circuit Training. Método de repeticiones. Edades aconsejables para su desarrollo En general, en estas edades quedan excluidos los trabajos anaeróbicos lácticos y se trabajará ante todo la resistencia aeróbica y en determinados momentos, la resistencia anaeróbica aláctica. 6-8 años Se plantearán actividades lúdicas y motivantes para mantener la actividad física en el tiempo, mejorando así la resistencia en nuestros alumnos. Por ello, proponemos que se trabaje en esta etapa mediante circuitos, ya que facilitan la ejecución, presentan variedad en sus ejercicios y recuperaciones completas. 8-12 años Se siguen planteando actividades lúdicas y además, trabajaremos en torno a los 10-11 años la Carrera Continua (20-30min) y la Carrera Fraccionada (4-6min), siempre controlando laFrecuencia Cardiaca en nuestros alumnos. 4.3. Desarrollo de la velocidad Es cierto que muchos autores afirman que la velocidad no es una capacidad física fundamental, ya que depende de otras capacidades como la Fuerza, Resistencia, pero en este tema la trataremos como fundamental. Todo cuerpo que se desplaza en el espacio en la menor unidad de tiempo posible, decimos de él, que es rápido o veloz. A. Métodos para el desarrollo de la velocidad Método de reacción repetida: Carreras muy cortas de 10-15 metros con recuperaciones totales, salidas de diferentes posiciones y mismo estímulo. Métodos fraccionados: Idem al anterior, pero variando las situaciones en las que se da el estímulo. Métodos para mejorar la capacidad de aceleración dentro de la velocidad de desplazamiento: Ejercicios de multisaltos, trabajos en cuestas cortas, arena, etc. * A la hora de llevar a cabo todos estos ejercicios es fundamental y de vital importancia realizar un buen Calentamiento y como no, un completo Estiramiento. B. Edades aconsejables para su desarrollo 6-8 años Muchos autores consideran esta edad fundamental e ideal para el trabajo de la velocidad. Además, afirman que la mejora de la velocidad vendrá condicionada por la mejora de la coordinación. En estas edades, trabajaremos la Velocidad Gestual y la Velocidad de Reacción a través de Juegos de Reacción ante estímulos visuales, auditivos o táctiles, también realizaremos actividades que mejoren la coordinación y las habilidades básicas, genéricas y perceptivo-motrices. 8-12 años La Velocidad de Reacción la trabajaremos mediante salidas de diferentes posiciones, con cambio de dirección y sentido atendiendo a un estímulo externo y también, a través de actividades que supongan anticipación o imitación de un compañero. En cuanto al trabajo de la Velocidad de Desplazamiento, podremos comenzar a partir de los 10 años, a través de juegos y pequeñas Carreras de Relevos de poca distancia y mucha recuperación. 4.4. Desarrollo de la flexibilidad El principal objetivo de la Flexibilidad es la mejora de la extensibilidad del músculo y ligamentos junto al incremento de la coordinación intermuscular. A. Métodos para el desarrollo de la flexibilidad Métodos dinámicos Cuando el ejecutante por si solo, a través de las repeticiones, consigue las posiciones deseadas. La elasticidad dinámica es más propia de los deportes que la estática. Estiramientos Balísticos: balanceos de una pierna. Estiramientos Activos-libres: ídem al anterior, pero el movimiento es más pausado. Métodos estáticos Cuando se alcanzan las posiciones límites por si solo o con ayuda del compañero. Son más efectivos que los dinámicos, ya que mantienen el estiramiento el tiempo suficiente para que se produzcan las adaptaciones correspondientes. Stretching de Anderson: se trata de conseguir una posición de estiramiento y mantenerla el tiempo suficiente para que se produzcan las modificaciones. Normalmente, se trabaja de forma Asistida (por pareja). Métodos combinados: presentan una parte estática y otra dinámica. F. N. P. (Facilitación neuromuscular propioceptiva). Metodología: C. Isométrica 10” + Estiramiento progresivo 20” + C. Anisométrica 20-30” + Estiramiento pasivo 30-40”. Stretching de Sölverborn Metodología: C. Isométrica 10-30” + Relajación 2-3” + Estiramiento 10-30”. B. Edades aconsejables para su desarrollo La Flexibilidad tiene una ventaja sobre el resto de capacidades, su nivel más alto se da en la infancia. A partir de los 11 años comienza a decaer, por ello deberíamos de hablar mejor de Mantenimientode esta capacidad, en vez de desarrollo. Es fundamental comenzar el trabajo de esta capacidad desde edades muy tempranas, siempre de forma lúdica y favoreciendo la motivación del alumno. 5. Factores entrenables y no entrenables A la hora de mejorar la Condición Física de una persona, tenemos que considerar que hay aspectos que no son mejorables y otros que sí. Unos vienen predeterminados por la genética y otros, a través del ejercicio físico y una alimentación e higiene adecuada son factibles de mejora. El desarrollo del hombre está condicionado por la herencia genética y el ambiente. Ambos determinan lo que son: Genotipo: parte genética heredada y que es estable (no puede modificarse). Fenotipo: resultado de la interacción del genotipo con el ambiente (puede modificarse a través de la actividad física). Según varios autores, existen dentro de los Caracteres Hereditarios (C. H.), unos que son Estables y otros que son Hábiles: 6. 6.1. C. H. Estables: rasgos que no pueden modificarse o que son muy difíciles de modificar, como es el caso de la Estatura, y en el caso de las C. F. B. podría ser la velocidad. C. H. Hábiles: rasgos que son fáciles de modificar, como el Peso, y en el caso de las C. F. B. podría ser la fuerza o la resistencia. La adaptación al esfuerzo físico en los niños/as Concepto de adaptación Atendiendo a la definición de Álvarez del Villar (1987), la Adaptación es: “la capacidad de los seres vivos para mantener un equilibrio constante de sus funciones ante los estímulos que inciden en ellos”. 6.2. A. Leyes que regulan la adaptación Ley de Schultz-Arnodt o ley del umbral Cada persona tiene distinto nivel de excitación ante un estímulo y para que se produzca la adaptación, el estímulo debe poseer una determinada intensidad en función de la capacidad de aguante y reacción del organismo. Tipos de estímulos o o o Estímulos Débiles (por debajo del umbral, no producen adaptaciones). Estímulos Medios (llegan cerca del umbral, por reiteración pueden producir adaptaciones). Estímulos Fuertes (están dentro del umbral, producen adaptaciones fácilmente). o B. Estímulos Muy Fuertes (por encima del umbral, son perjudiciales y su repetición puede llegar a sobreentrenar). Síndrome General de Adaptación o “Teoría del Estrés”. Selye (citado por Platonov, 1995), definió el S. G. A. como: “Una respuesta adaptativa y no específica del organismo ante cualquier estímulo que pone en peligro su equilibrio interno”. Fases o o o C. Fase de Alarma (reacción espontánea y natural del organismo frente a cualquier estímulo). Fase de Choque: el organismo decae momentáneamente ante el estímulo que recibe. Fase de Antichoque: el organismo contrarresta el estímulo y reestablece su equilibrio interno. Fase de Resistencia (el organismo controla el estímulo estresante y se prepara para adaptarse a la nueva circunstancia biológica). Fase de Agotamiento (tiene lugar cuando el organismo agota todas sus reservas, ya que el estímulo no cesa y por tanto, el organismo decae). Principio de Supercompensación Tras analizar varias definiciones de autores como Antón, Blázquez, Delgado, podemos afirmar que el Principio de Supercompensación es: “una respuesta específica del organismo a determinados estímulos acumulando niveles superiores a los iniciales”. Fases o o o 6.3. A. Fase Positiva o de realización del esfuerzo (en esta fase se va a determinar el gasto energético producido por el esfuerzo o entrenamiento). Fase Negativa o de recuperación (el organismo recupera las energías perdidas y acumula potenciales de trabajo superiores al nivel en que se encontraba). Fase de Supercompensación (tras una fase de excitación y de recuperación provocada por el cansancio, sucede una exaltación, donde la capacidad de trabajo aumenta. Adaptaciones orgánicas y funcionales al esfuerzo en los niños/as Adaptaciones Orgánicas Aquellas que se van a dar en cada uno de los aparatos y sistemas del organismo, aunque de forma diferente. Aparato Locomotor: las adaptaciones van a tener lugar a causa de las acciones mecánicas de presión, tracción y se van a reflejar sobre el tejido óseo, muscular y cartílagos. Aparato Cardiovascular: las adaptaciones se van a dar a causa de la repetición de ejercicios medianamente intensos, dando lugar a un aumento del Volumen minuto, una disminución de la Frecuencia Cardiaca, etc. Aparato Respiratorio: las adaptaciones van a producir incrementos en las capacidades respiratorias, como el aumento de la Capacidad Vital de los Pulmones, la disminución del Número de Respiraciones por minuto, etc. B. Adaptaciones Funcionales Se trata de aquellas adaptaciones fisiológicas que van a influir en el Desarrollo de las distintas Capacidades Físicas Básicas y en la Coordinación y el Equilibrio. 7. Sesiones prácticas Nuestra propuesta va orientada para 2º ciclo de la ESO, ya que en esta etapa los alumnos/as ya poseen un nivel aceptable sobre las Capacidades Físicas Básicas. De esta manera, continuaremos con el aumento y mejora de las habilidades y capacidades básicas emprendidas en etapas anteriores, desarrollando principalmente: La resistencia, velocidad de reacción y traslación, la fuerza, la flexibilidad y como no, conjuntamente con las anteriores, la coordinación general y óculomanual, la lateralidad y la percepción espacio-temporal. A la hora de llevar a cabo cualquier sesión donde el principal bloque de contenidos a trabajar sea: Capacidades Físicas Básicas, pondremos en práctica una Metodología que va a seguir una serie de pautas: Tratamiento global, Aprendizaje vivenciado, Motivación constante, Tratamiento lúdico, Tareas accesibles y variadas, Ir de lo fácil a lo más complejo, Máximo control y seguridad en cada uno de los ejercicios, Eliminación de estereotipos, Agrupamientos variados, Etc. A continuación, proponemos varias sesiones donde a través de varios ejercicios se trabajarán las diferentes capacidades físicas (Fuerza, Resistencia, Velocidad y Flexibilidad), junto con algunas pruebas pertenecientes a la Batería de Eurofit. 8. Conclusión Dentro del ámbito escolar, debemos buscar el enriquecimiento motriz y el desarrollo armónico del alumno, mediante el trabajo previo de la Condición Física, el cual viene determinado por el nivel de desarrollo de las diferentes C. F. B. Sin embargo, debemos de procurar que dicho desarrollo y crecimiento armónico, este basado fundamentalmente en la salud. En definitiva, nosotros como maestros debemos de intentar que los planteamientos básicos en nuestra área, busquen la modificación de hábitos de vida sedentarios y fomenten actitudes que lleven a nuestros alumnos/as a un desarrollo íntegro de todas sus capacidades (cognitivas, motrices, afectivas y sociales), dentro y fuera del ámbito escolar. Bibliografía ÁLVAREZ DEL VILLAR, C. (1987): La preparación física del fútbol basada en el atletismo. Ed. Gymnos. Madrid. ANTÓN, J. L. (1989): El entrenamiento deportivo en la edad escolar. Junta de Andalucía (Colección Unisport). Málaga. BLÁZQUEZ, D. (1993): Fundamentos de Educación Física para la Enseñanza Primaria. Volumen I y II. Ed. INDE. Barcelona. CASTAÑER, M. Y CAMERINO, O. (1991): La E. F. en la enseñanza primaria. Ed. Inde. Barcelona. CONTRERAS (1998): Didáctica de la Educación Física. Ed. Inde. Zaragoza. DECRETO DE ENSEÑANZAS DE ANDALUCÍA. (1992): Anexo II: Área de Educación Física. CEJA. Sevilla. DELGADO, M. (1997): El entrenamiento de las capacidades físicas en la enseñanza obligatoria. Revista Habilidad Motriz, Nº 9, Pág. 15-25. MATVEEV, L. (1992): Fundamentos del entrenamiento deportivo. Ed. Ráduga. Moscú. PADIAL, P. (2001): Fundamentos del entrenamiento deportivo. INEF. Granada. PALACIOS, M. (1979): Deporte y Salud. Ed. Sella. Gijón. PLATONOV, V. N. (1995): El entrenamiento deportivo. Teoría y Metodología. Ed. Paidotribo. Barcelona. PORTA J. y OTROS (1988): Programas y Contenidos de la Educación Física y Deportiva. Ed. Paidotribo. Barcelona. TORRES, J; RIVERA, E Y OTROS (1996): Fundamentos de la Educación Física. Consideraciones Didácticas. Ed. Rosillo. Granada. Introducción El conocimiento sobre los rasgos que caracterizan la personalidad humana, no solo es de interés para los especialistas de las ciencias psicológicas, sino que es de suma importancia para otras ciencias como son, la pedagogía, la medicina y las ciencias vinculadas con las artes, la producción, la actividad militar, etc. En la conformación de la personalidad, interactúan de forma activa, factores de tipo biológico y social. Diversos estudios realizados al respecto, demuestran como influye la relación del potencial genético y los factores de tipo hereditario en la transmisión de algunas características de morfo - funcionales y psíquicas, en la conformación de los rasgos esenciales de la personalidad de cada individuo. Los factores de carácter biológico que vienen predeterminados por el condicionamiento genético interactúan de manera decisiva con los factores medio ambientales y sociales. Esto demuestra que pueden coincidir en determinados individuos algunos rasgos de forma particular, como son el color de los ojos, de la piel, la estatura, somatotipo, etc., pero de forma integra, donde se fusionen armónicamente los elementos psíquicos y físicos, es imposible; por lo que la posibilidad de que se repitan dos personalidades de forma integra resulta improbable. Un elemento que pone en evidencia la importancia del medio social en el desarrollo de la personalidad, es el análisis del papel decisivo de la actividad en el desarrollo de esta, los autores consultados, como Petroski, Rudik, Vargas coinciden en señalar que la personalidad, solo se transforma, a partir de la vinculación del hombre con el medio que lo rodea. De este planteamiento se infiere que lo que permite caracterizar, identificar y diferenciar a cada personalidad, se expresa en la forma peculiar con que cada individuo acomete cada tarea dentro de la actividad. En este acto se integran en una unidad estructural su temperamento, carácter, intereses y capacidades, que garantizan su individualidad. Y dentro del grupo de capacidades que permiten caracterizar a cada ser humano, se encuentra el nivel de desarrollo que alcanza en su motricidad, que se expresa según Zatsiorki en que "a cada hombre se le atribuyen posibilidades diferentes de levantar diferentes pesos, desplazarse a diferentes velocidades, La respuesta a cada tarea motora propuesta, implica una forma peculiar de asumirla en dependencia de las posibilidades físicas que tenga cada individuo o del tipo de actividad y experiencia motriz que éste posea; así su desarrollo físico externo e interno también tendrá cambios en dependencia de la actividad física practicada, por ejemplo: los levantadores de pesas son por lo general hombres de estatura pequeña, con respecto al peso corporal, de hombros anchos y muy musculosos, mientras que los atletas de carreras de fondos son delgados y de poca musculatura sobre todo en los planos del tronco y los brazos. En la actualidad dentro del campo de Metodología del Entrenamiento y la Educación Física, se puede valorar, como no se observa una unidad de criterios en cuanto a la definición y conceptualización de las posibilidades motoras del hombre. García Manso y colaboradores (1996) al respecto señalan que "atendiendo al significado del lenguaje, conceptos como son condición física, aptitud física, eficiencia motriz, capacidad motriz, etc.,… son términos que de forma coloquial se emplean independientemente para designar una misma realidad. Y continúan planteando mas adelante. " Entendemos que los conceptos de capacidad motriz o eficiencia motriz son los que realmente se ajustan a nuestros propósitos. Ambos definen los niveles de aptitud en las capacidades del movimiento que posee una persona, podríamos entender que las capacidades es lo que determinan el aspecto cuantitativo, mientras que la eficiencia su aspecto cualitativo". Mientras que otros autores como son Ozolin (1978), A. Ruiz (1987), Zatsiorki (1988), Manno (1998), S. Obrador (2000), Pradet (2000), etc., muestran algunas divergencias conceptuales con lo planteado por Manso y colaboradores y lo justifican a partir de consideraciones sustentadas en diferentes basamentos teóricos y metodológicos. ¿Que son las capacidades dentro de la ciencia psico-pedagógica? Las capacidades son las propiedades fisiológicas del hombre de las cuáles depende la dinámica de la adquisición de los conocimientos, habilidades, hábitos y éxitos de una determinada actividad. P .A. Rudik al respecto expresa que "en la mayoría de los tipos de actividad cada persona puede dominar un mínimo de conocimientos, habilidades y hábitos que sirvan para realizarla. Sin embargo bajo las mismas condiciones externas las distintas personas adquirirán a ritmos diferentes estos conocimientos, habilidades y hábitos: por ejemplo, uno todo "lo coge al vuelo" y otro invierte mucho tiempo y esfuerzo; un tercer sujeto alcanza el nivel máximo de la maestría y el otro a pesar de todos sus esfuerzos, solo logra un determinado nivel medio de desarrollo". Mientras que A. V. Petrosk señala que "las capacidades son particularidades psicológicas el hombre, de las cuales dependen la adquisición de conocimientos, habilidades y hábitos; pero que sin las mismas no conducen a estos conocimientos, hábitos". Las capacidades se desarrollan no en los conocimientos sino en la dinámica de su adquisición es decir a la rapidez, la profundidad, la facilidad y la solidez en el proceso adquisición del dominio de los conocimientos y habilidades son una suma importante para una actividad determinada. Precisamente aquí se revelan aquellas diferencias que nos posibilitan hablar sobre las capacidades. Las capacidades son particularidades individuales de la personalidad que, al mismo tiempo, son condiciones para realizar con éxito una actividad dada y revelan las diferencias en el dominio de los conocimientos, habilidades y hábitos necesarios para ella. Capacidades y cualidades Según R. Manno" las capacidades motoras son las condiciones motoras de tipo interno que permiten el funcionamiento de las posibilidades motoras", y complementa lo antes planteado al señalar que "éstas son un conjunto de predisposiciones o potencial motriz fundamental en el hombre, que hacen posible el desarrollo de las habilidades motoras aprendidas". Para A. Ruiz (1987) "las capacidades físicas constituyen fundamentos para el aprendizaje y perfeccionamiento de las acciones motrices para la vida que se desarrollan sobre las bases de las condiciones morfo - funcionales que tiene el organismo, representan uno de los componentes esenciales para el desarrollo de las capacidades de rendimiento físico del individuo" Continúa expresando que independientemente de las influencias de las propiedades orgánicas individuales, existen tres factores que determinan la rapidez, facilidad y magnitud con pueden desarrollarse las capacidades físicas: Las particularidades desde el punto vista ontogenético que tiene cada individuo. Las particularidades de las influencias externas dirigidas al desarrollo de esas capacidades motoras. Las particularidades de que una misma actividad pueda desarrollar diferentes capacidades físicas. Manno al hablar de las cualidades motoras, reflexiona sobre como éstas se aprecian unidas a la ejecución de los movimientos técnico - tácticos y físicos en sentido general, son los que expresan el nivel de desarrollo de una habilidad determinada. Por ello, el profesor debe de tener en cuenta, por ejemplo si en la estructura del movimiento hay fluidez, fuerza de salida adecuada, aceleración del movimiento, etc. Pradet (2000) es del criterio de "que es mas importante la cualidad que la capacidad, ya que la capacidad cubre el supuesto de que un individuo pueda poseer una posibilidad motora, lo que no implica, según sus consideraciones, que el individuo sea capaz de utilizarla, referido al deporte señala que es mucho mas importante afirmar que un atleta realiza tal perfomance, que decir que este atleta merece tal perfomance". No compartimos el criterio expresado por Pradet, partiendo del punto de vista de que si el individuo no tiene las potencialidades orgánicas y psíquicas para el desarrollo de una capacidad determinada, será imposible utilizar esta dentro de la actividad competitiva(cualidad); pero si se debe de señalar que sus planteamientos, coinciden con algunos de los argumentos valorados, sobre todo cuando define la capacidad motora, como condición potencial y la cualidad como expresión cualitativa de cada movimiento técnico, deportivo. Los elementos antes expuestos nos permiten afirmar que las capacidades motoras constituyen un requisito básico sobre el que se desarrolla una habilidad técnica, es la posibilidad orgánica, potencial, y la cualidad es la capacidad puesta en función, concretada de una habilidad técnico - táctica, que se expresa en la forma peculiar de ejecutar dicha técnica por diferentes atletas. Por ejemplo, en atletas de similares resultados en el evento de 100 metros planos, logran similares tiempos en la distancia o sea 10.43seg. Pero uno lo logró por las cualidad que posee de realizar una alta frecuencia de pasos, mientras que el otro lo realiza a expensa de su amplia zancada y un tercero, por la cualidad de resistencia a la velocidad, ya que mantiene mayor tiempo la velocidad máxima, a pesar de demorarse más en adquirirla. Poseer una cualidad motora significa ciertamente estar dotados del potencial y de las capacidades motrices que las contiene, pero también, poseer y controlar el conjunto de los parámetros fisiológicos y psicológicos que permiten aplicarlas. La reflexión que aporta el brillante médico y ensayista español Gregorio Marañón y Posadillo ((1887-1960) cuando expresa "…tienes más cualidades de lo que tú mismo crees; pero para saber si son de oro bueno las monedas, hay que hacerlas rodar, hacerlas circular Gasta tu tesoro", permite ilustrar metafóricamente, la importancia de la actividad para el desarrollo de diferentes cualidades humanas, aspecto que es válido para el perfeccionamiento de las cualidades motoras producto del ejercicio físico. El proceso de metamorfosis de la capacidad a cualidad, sólo se logra en la práctica, lo que debe de propiciar la determinación de la calidad del gesto técnico; en este complejo proceso el entrenador o profesor se debe de auxiliar de ejercicios físicos especiales que permitan hacer una transferencia positiva de hábitos, que faciliten una movilización efectiva de todas las potencialidades acumuladas por el deportista de la capacidad o conjunto que de éstas, teniendo en cuenta como una premisa básica las particularidades individuales del deportista. Este campo resulta muy complejo y contradictorio dentro del marco del desarrollo de la formación de habilidades motoras y de la preparación del deportista en sentido general, ya que el paso de la trasformación de la capacidad potencial general, heredada o adquirida por un deportista y su posterior incorporación al acerbo de una estructura técnico - táctica, requiere de una fina habilidad pedagógica y metodológica para organizar y conducir el proceso por parte del entrenador, cualquier error en la selección de los ejercicios que permitan la formación del conjunto de las cualidades que garantizan la eficiencia técnica, pueden dar al traste con el nivel de rendimiento competitivo de una técnica dada o retraso en el aprendizaje motor. Un ejemplo de lo antes planteado se observa en la preparación de velocistas cuando desarrollamos la capacidad de fuerza máxima y explosiva general y posteriormente ejecutamos los controles al finalizar la etapa general, se puede observar que los valores adquiridos por un atleta determinado de esa capacidad, son excelentes en dos pruebas (extraídas de la preparación de velocistas juveniles de la provincia de Matanzas, para el ciclo1999- 2000), estos valores son: Para un 1RM en el movimiento de semicucilla o sentadilla con pesas se logra un resultado de 260 Kg., que nos miden su nivel de fuerza máxima. En el salto largo sin impulso como indicador de fuerza explosiva de piernas, se obtienen 3.16m, Los especialistas de esta actividad podrá percatarse que estos resultados en velocistas juveniles pueden catalogarse de excelentes, desde el punto de vista físico general, pero: ¿Como se comporta la eficiencia técnica de este atleta? En los controles de distribución de esfuerzos, efectuados al propio atleta e en investigaciones ejecutadas por C. Hernández, J. Labrada y L. Cortegaza, 2000, que permiten controlar, parámetros de la carrera de velocidad plana de 100 metros, cada 10 metros utilizando celdas fotoeléctricas y un velocímetro digital, se detectan bajos rendimientos de dicho atleta en la fase de arrancada y la acelerativa que van desde la salida de los tacos y hasta los 60 metros; para este atleta, con resultados de 7.20 s. para los 60 metros y la fuerza de empuje sobre los tacos es de 1.345 n, que resultan muy bajos para el nivel deportivo y la etapa en que se realizan estos controles al ser comparados con los datos de investigaciones ejecutados por Mero (1983), Mero (1988) y Van Copnolle (1989), que son citados por García Manso y colaboradores (1996). Partiendo del porcentaje de importancia propuesto por Téllez (1988) en la carrera de 100 metros de cada fase, así como los estudios de Vitori donde: Se podrá observar que las fases de tiempo de reacción, mas la de salida de los tacos, y de aceleración comprenden alrededor de un 70%( 1%+5%+64%=69 al 70) y ¿cuáles son las cualidades motoras de mayor importancia, que deben respaldar la eficiencia de la ejecución técnica, durante estas tres fases? Los estudios de Vitori demuestran que las cualidades de mayor importancia son la fuerza máxima durante la salida y la fuerza explosiva en la fase acelerativa, además otros estudios como los de Mero y col. (1988 - 1992) demuestran a través de análisis estadísticos, utilizando el coeficientes de correlación un coeficiente de correlación fuerte entre el salto con contramovimiento, los saltos pliométricos y la fuerza máxima isométrica con la aceleración. El análisis anterior pone en evidencia, (para el caso del atleta analizado) que mientras que se obtienen excelentes resultados en los controles que expresan los valores de fuerza máxima y fuerza explosiva (capacidad), se observan pobres resultados en el control competitivo, o sea cuando se aplica estas capacidad al componente competitivo(cualidades). Por lo que en este ejemplo se corrobora lo antes planteado, o sea, la contradicción que se da en algunos casos de una desproporción entre el nivel de desarrollo de las capacidades y las cualidades motoras, demostrándose un alto nivel de las capacidades fuerza máxima y fuerza explosiva y un bajo nivel de aprovechamiento de éstas en función de la ejecución técnica e indudablemente no se observa un correcto desarrollo del trabajo de conversión de la capacidad en cualidad. ¿Cómo en la práctica el entrenador puede acercar y utilizar el potencial de las capacidades en cualidades? Diferentes investigaciones vinculadas con la temática nos demuestran que para el deportista, los estímulos mas grandes y específicos (en forma de stress) son solo los capaces de conducir al organismo a un nivel mas alto de adaptación funcional Ivoilov (Pág. 96) El nivel de entrenamiento del deportista, considerando sus posibilidades de adaptación morfofuncional y psicológica, no es de una magnitud constante; sino que es portador de un carácter gradualmente progresivo en la medida que se logre una mayor o menor transmisión de las acumulaciones cuantitativas del organismo y su posterior transformación cualitativa. En este aspecto se debe de tener en cuenta el trabajo específico de los órganos y funciones del organismo del deportista atendiendo las particularidades de cada especialidad deportiva. Por lo tanto para lograr una transformación efectiva de la cualidad se debe de partir de una metodología que permita de forma gradual acercar los ejercicios para el desarrollo de capacidades aisladas como son las cuclillas, lanzamientos carreras, saltos etc., en ejercicios integradores, que se estructuren en cadenas, donde se mezclen ejercicios físicos y técnicos, que exijan del organismo un gasto energético y potencia de ejecución muy similar al ejercicios de competencia, desarrollándose en un tiempo de ejecución equivalente al de la especialidad que se modele. Lo antes planteado se puede resumir en los ejercicios de EE5 que es una actividad muy utilizada hoy en día en la formación de grandes campeones como respuesta a la transformación necesaria de las capacidades en cualidades. Como resumen de lo antes planteado se puede señala que la expresión de las cualidades motoras se pone de manifiesto en como el desarrollo de las capacidades motoras especiales (cualidades motoras) que se exteriorizan en el dominio perfecto de la técnica deportiva y de la táctica. Además se debe reiterar como un hecho muy importante la necesidad de que el entrenador se apoye en ejercicios espéciales que acerquen el potencial general (capacidad) en un potencial especial(cualidad),partiendo de la capacidades motoras de base y transfiriendo con un tratamiento metodológico adecuado los ejercicios generales a los ejercicios de competencia. Clasificación de las capacidades motoras Existen diferentes clasificaciones de las capacidades motoras, la mas difundida es la propuesta por M. Gundlach (1968), que según R. Manno es utilizada en toda Europa, y que clasifica en dos grupos: lascapacidades condicionales y las capacidades coordinativas, a las que A. Ruiz (1987), J Hernández (2002 le adicionan una tercera, denominada por algunos autores como capacidad básica, por estar presente en todo movimiento del hombre, y que no se basa en fundamentalmente en requerimientos de tipo energético, que es la denominada movilidad o flexibilidad, criterio de Vargas(1994), y compartido por Linner (1996) Las investigaciones realizadas por el autor durante 10 años y que finalizaron con su tesis doctoral (2000), que tuvo como problema fundamental la determinación del nivel de flexibilidad en escolares en las edades desde 4 hasta 14 años en ambos sexos, permite polemizar con estos fundamentos teóricos, ya que dicho estudio demostró, la enorme dependencia de la capacidad motora flexibilidad de capacidad motora fuerza, situación demostrada en la gran reserva de la flexibilidad( Reserva = Flexibilidad pasiva - Flexibilidad activa) en los niños de las edades de 5, 6 y 7 años de vida, la investigación demostró que los niños de estas edades , poseen un alto nivel de flexibilidad pasiva, (con ayuda) mientras que el nivel de la activa( sin ayuda) es bajo y esto es un indicador de un bajo nivel del desarrollo de la fuerza, típico en estas edades, mientras que en las edades de 12, 13 y 14 años ocurre, todo lo contrario. ¿A donde nos conduce este análisis? Es indudable que la mayor o menor amplitud de una articulación se logra a partir de limitantes de tipo anatómica, seria imposible que en una articulación de dos grados de libertad, como por ejemplo la de la rodilla, donde su propia estructura no permite ejecutar movimientos de rotación, realice este movimiento; pero la posibilidad de realizar los movimiento que admita su estructura, será más amplio en la medida con que cuente con la energía y las condiciones para realizar una mayor distensión del plano muscular a alongar. Por lo que a la flexibilidad como capacidad motora (que nunca puede ser confundida con la elasticidad muscular), le son inherente algunas de las condiciones necesarias a otras capacidades motoras que dependen de la potencia como son la velocidad y la fuerza, además se ha demostrado su estrecha relación y dependencia de la fuerza Es por esto que consideramos ubicar la flexibilidad al igual que Gundlach (1968), R. Manno, Manso y colaboradores (1996) dentro de la capacidades condicionales Los elementos antes expuestos permiten clasificar las capacidades condicionales en: La clasificación de capacidades condicionales según Zatsiorki (1988), A. Ruiz (1987), R. Manno (1998) y otros autores dependen fundamentalmente para su desarrollo de un condicionamiento de tipo energético. Este planteamiento es compartido por muchos autores, pero realmente aunque este constituye un elemento de gran importancia, partimos del criterio que la condición del tipo de sustrato metabólico como base energética, no puede ser solo el elemento decisivo para que una capacidad se clasifique como de fuerza, de velocidad o resistencia, o de flexibilidad. Este planteamiento se sustenta en la concepción que existen diferentes capacidades o combinaciones de estas, que se apoyan en similar base bioenergética, como por ejemplo, la carrera de 30 metros volantes o lanzada que posee requerimiento de tipo anaerobio alactácido, y se clasifica como un ejercicio de velocidad, mientras que en el levantamiento de pesas cuando se ejecuta el movimiento de arranque o los lanzamientos de balones medicinales, son ejercicios que responden al grupo de fuerza, particularmente a la fuerza explosiva y también poseen una base anaerobia aláctacida. Un estudio profundo de dicha clasificación lleva a análisis de los factores que consideramos son básicos y que determinan el criterio diferencial entre las capacidades motoras condicionales. Requerimientos de tipo metabólico que implica cada capacidad. Factores genéticos Características cinemáticas y dinámicas de los parámetros técnicos que garantizan ejecución de los ejercicios físicos y que respondan a las exigencias de cada capacidad motora. Respuestas específicas a las exigencias morfo - funcionales de cada capacidad motora. Requerimientos psicológicos de cada capacidad motora Influencia del desarrollo de las capacidades coordinativas en la ejecución de las capacidades condicionales. Interrelación entre las capacidades condicionales con los componentes técnicos y tácticos. Dependencia e interrelación con otras capacidades motoras Requerimientos de tipo metabólico que implica cada capacidad Cada capacidad o combinación de estas, se apoyan en diferentes requerimientos de tipo metabólico para un efectivo desarrollo, que va a responder a la intensidad con que se realizan los ejercicios, por ejemplo para los eventos de velocidad la base bioenergética oscila en necesidades de tipo anaerobio alactácido y lactácido, los ejercicios de fuerza por lo general trabajaban en el régimen anaerobio alactácido, mientras que los evento de resistencia se caracterizan sobre todos los de larga duración en régimen continuo al base aerobia. Factores genéticos La base fisiológica de cada capacidad condicional va a estar influenciada por elementos que se transfieren por vía genética, lo que garantiza que un deportista posea mayores potencialidades físicas para poder desarrollar una capacidad física que otra, este tipo de condicionamiento es muy utilizado hoy en día en la selección deportiva de futuros talentos para una actividad deportiva dada. Por ejemplo en las mesas redondas de la IAF donde se analizan la formación de jóvenes velocistas, destacados entrenadores como Kratknejov, Blider, etc.; exponen como se utilizan la biopsia para determinar el tipo de fibra que prevalece en el atleta, lo que garantiza buscar individuos con mayor fibras rápidas (FT), aspecto que constituye una condición indispensable para determinar cual es el deportista que potencialmente tiene condiciones para los eventos de velocidad en el atletismo. Para una mejor asimilación de lo antes expuesto, debemos de valorar que el tipo de fibras es uno de los componentes que se transmiten por vía genética y que de forma muy elemental podemos analizar, que existen dos tipos de fibras, las fibras de contracción lenta (ST o I) y las fibras de contracción de contracción rápida (FT o II) y distintos sub grupos en función de la clasificación utilizada (FTa, FTb, FTab, FTc, etc.) Otros aspectos susceptibles de ser transmitidos son los elementos inherentes al sistema nervioso, donde por ejemplo se encuentra el temperamento de cada individuo, lo que permite darle un sello distintivo para ejecutar cada capacidad atendiendo a la fuerza equilibrio y movilidad de los proceso nerviosos, como ejemplo se puede observar que un colérico y un sanguíneo, potencialmente se adaptan mejor para los eventos de velocidad que un flemático, mientras que por lo general en los eventos de fondo los atletas son de tipo flemáticos, a sanguíneos, pero en muy pocas ocasiones se observan los de tipo colérico. (Coll y Pullman, 1996) Estimación de factores que pueden ser heredados (Bouchar et at, 1974; Citados por E. Sebastiani I Obrador y C González Barragán; 2000) Estimación de la posibilidad de entrenamiento de algunos factores de la condición física (Bouchar et at, 1974; Citados por E. Sebastiani I Obrador y C González Barragán; 2000) Características cinemáticas y dinámicas de los parámetros técnicos que garantizan ejecución de los ejercicios físicos y que respondan a las exigencias de cada capacidad motora condicional Cuando se habla de característica cinemáticas se habla de las fases de desarrollo local, ángulos articulares, velocidades, aceleraciones y en cuanto las características dinámicas, a las fuerza de impulso, impulsos de rotación, ubicación del centro de gravedad, rozamiento y otras. Todos estos aspectos Grosser y Neumaier lo consideran como características cuantitativas por lo tanto medibles así como otro grupo de elementos que solo son observables y que tipifican el movimiento desde el punto de vista cualitativo, como son la fluidez, el ritmo, la exactitud, etc. La ejecución de ejercicios vinculados con las capacidades de fuerza, velocidad y resistencia indudablemente se diferencian en su estructura técnica ya sea desde el punto cinemático, como dinámicos, en ocasiones la diferencia es estructural y en otros casos dado en las necesidades internas, en su forma de ejecución y en sus exigencias: Por ejemplo en la propia carrera cuando forma parte de un evento de velocidad el apoyo es metatarsiano mientras que en los eventos de resistencia se permite un mayor apoyo plantar, este ejemplo es valido para las carreras pedestres, en la natación un elemento que lo diferencia es la respiración que en eventos de velocidad se hace de forma mas prolongada que en los eventos de fondo, al igual que el ritmo de brazadas que lógicamente es mas lento en los eventos de resistencia que en los eventos de velocidad. Respuestas especificas a las exigencias morfo - funcionales que implica cada capacidad motora Este aspecto se refiere cumplimiento de los objetivos que implica la ejecución de cada capacidad motora, que son diferentes en cada caso, por ejemplo para la velocidad su objetivo es reaccionar ante estímulos, ejecutar un movimiento o desplazarse en el menor tiempo posible, mientras que para las fuerza la tarea esencial consiste en vencer las resistencias externas a través de los esfuerzos neuromusculares y la fatiga mantenerse el mayor tiempo de trabajo con una alta capacidad de trabajo en lucha contra la fatiga. Cada una de los objetivos antes expuestos necesita de una respuesta acorde las exigencias de cada capacidad, lo que implica por ejemplo diferentes tipos de contracción muscular, y una aporte diferenciado por lo tanto de la participación del aparato somático, compuesto por los músculos, huesos y articulaciones, que debe responder a diferentes exigencias de cada capacidad motora, de igual forma ocurre con los sistemas cardiovascular, respiratorio, etc. Otra condición en este caso se refiere al ritmo de trabajo, mientras que para la velocidad es de máxima intensidad, para los eventos de resistencia, son de lentos a medios, en la fuerza depende del tipo de manifestación de la fuerza; así para las acciones que dependen de la fuerza explosiva como es la pliometría, son de máxima potencia de ejecución, en la fuerza resistencia utilizan un ritmo lento y el la fuerza máxima es de medio a lento, como condición que permite agruparlos Requerimientos psicológicos de cada capacidad motora La Dra. Norma Sainz de la Torre ofrece al respecto sus consideraciones cuando expresa como en el proceso de desarrollo de las potencialidades motrices de cada deportista intervienen una serie de componentes psicológicos que difieren en su forma de expresión, atendiendo al tipo de capacidad de que se trate. Así se observa que la actitud que adopta el sujeto ante el cumplimiento de las tareas de entrenamiento estará íntimamente relacionada con el tipo de esfuerzo que se le exige y por ello es necesario tener en cuenta dichos componentes que se encuentran en la base de la regulación de la actividad del mismo y que son, entre otros, los siguientes: Connotación afectiva: El deportista realiza con mayor disposición las tareas vinculadas al desarrollo de aquellas capacidades motoras que prefieren entrenar. Mientras que, por una parte, existen atletas que experimentan placer por llevar a cabo esfuerzos de fuerza máxima, por el gusto de experimentar en su propio organismo la satisfacción del logro de metas que pocos alcanzan, como levantar grandes pesos, por otra se encuentran aquellos que disfrutan la sensación de desplazar su cuerpo lo más rápido posible, el correr largos kilómetros, nadar prolongados minutos sin pausa, como reto a sus posibilidades y como reafirmación de su personalidad. Vínculo lógico: Estrechamente relacionado con el aspecto anterior encontramos la participación de los elementos lógicos del pensamiento. La comprensión de la necesidad del desarrollo de determinadas capacidades motoras para el logro de un alto rendimiento, el conocimiento de la relación causa - efecto en el entrenamiento de determinado tipo de ejercicios para mejorar su base física en función de mayores resultados, hace que el deportista se esfuerce con mayor tesón, conciencia y responsabilidad en aquellas tareas que acepta como lógico requerimiento a vencer en el camino de sus objetivos propuestos. Si posee mayores conocimientos, por ejemplo, sobre velocidad, le dedicará mayor empeño a todas las tareas vinculadas con la misma. Si el entrenador, como parte de la preparación teórica ha profundizado mas en temáticas relacionadas con la resistencia a la fuerza, al trabajo encaminado al desarrollo de la misma le prestará mayor atención. Diferenciación de las movilizaciones volitivas: Como se conoce, la disposición volitiva se traduce en la utilización del lenguaje interior de forma precisa y positiva. Atendiendo al tipo de esfuerzo que se requiere para el cumplimiento de las tareas de entrenamiento encaminadas al perfeccionamiento de determinadas capacidades motoras, así las palabras en forma de automandato variarán en cuanto a su contenido, frecuencia de utilización, objetivo a lograr, momento de evocación, etc. Por ello, no será el mismo automandato el que se utilice para movilizar la capacidad de control consciente de los esfuerzos ante un ejercicio de fuerza explosiva que el que potencie un esfuerzo prolongado o el mantenimiento del ritmo de una actividad, por lo que se observa una diferenciación en dichas palabras que le permiten al sujeto trasformar las disposiciones para el rendimiento en un esfuerzo real y eficiente. Influencia del desarrollo de las capacidades coordinativas en la ejecución de las capacidades condicionales. Las exigencias estructurales de cada capacidad condicional implican un nivel de las capacidades coordinativas diferente para cada una de estas, e inclusive se comporta de forma desigual entre variantes de una misma capacidad como es el caso de la fuerza máxima y la fuerza explosiva y la velocidad de locomoción cíclica y la rapidez de reacción. Si se observa en la practica algunos movimiento que simbolicen dos capacidades motoras condicionales por ejemplo: el despegue vertical (fuerza explosiva) y la carrera de 30 metros volantes (velocidad de locomoción cíclica), se podrá valorar las diferencias en cuanto a las influencias y necesidades del desarrollo de una capacidad u otra, mientras que la velocidad de locomoción cíclica depende fundamental mente del ritmo, de la fluidez y del acoplamiento de las partes del cuerpo. El despegue vertical fundamentalmente necesita el equilibrio, de la coordinación general, y la coordinación segmentaría. Interrelación entre las capacidades condicionales con los componentes técnicos y tácticos. Es importante conocer que todas las capacidades motoras se condicionan mutuamente, e influyen en la ejecución de la técnica y de la táctica. Un aumento o disminución de las capacidades motoras puede transformar la técnica de forma cuantitativa y cualitativa, lo que implica que el deportista tenga que adaptarse a una nueva forma de ejecutar la técnica. Por ejemplo Grosser plantea que un gran desarrollo de la fuerza en una parte del cuerpo puede convertir la estructura de un movimiento en una estructura arrítmica. Otro ejemplo que permite ilustrar lo antes expuesto es como para lograr un nivel o adecuado de la velocidad se debe de desarrollar en primer termino la fuerza explosiva y elástica y para incrementar la capacidad de resistencia a la velocidad crear como base un correcto desarrollo de las capacidades de tipo aeróbico, etc. También es importante valorar como según el deporte practicado se puede haber notar una mayor o menor incidencia de una capacidad motora condicional que otra. En los deportes de resistencia por ejemplo, la condición física que prevalece es la resistencia aerobia y/o anaerobia, mientras que en los juegos deportivos se caracterizan por una mayor dependencia de la fuerza explosiva y la velocidad anaerobia y aláctacida y lactácida. Capacidades coordinativas Cuando se analiza el aprendizaje o perfeccionamiento de las diferentes técnicas deportivas como modelo ideal de un movimiento deportivo podemos observar como el avance de éste aprendizaje en cada atleta es diferente, aunque en mucho de los casos los atletas son sometidos al mismo tipo de ejercicio físico. Diversos son los factores que pueden incidir en el desnivel del aprendizaje de los movimientos, así como en la formación de los hábitos. Dentro de los factores que resultan esenciales en el aprendizaje de las técnicas deportivas está el nivel de desarrollo de las capacidades coordinativas (K. Zimmermann 1983) La coordinación es una capacidad que no solo influye en la actividad deportiva, sino que es determinante en cualquier actividad laboral, militar, recreativa, etc. que tenga que vincular habilidades de diferentes partes del cuerpo como son manos, piernas, vista, etc. (I. Parellada 1977). El hombre con una buena coordinación general tendrá posibilidades superiores para ejecutar movimientos con mayor exactitud, economía y armonía de disímil estructura, en ocasiones sin ninguna vinculación como son: aprendizaje en una actividad laboral como puede ser conducir un auto, o una actividad recreativa como es el baile, o una actividad deportiva: por ejemplo el aprendizaje de una técnica específica, coordinación de piernas y brazos en la natación. Las capacidades coordinativas son capacidades sumamente complejas que influyen en la calidad del acto motor y en toda la actividad que implique movimiento dentro de la actividad humana. Esta es una capacidad sensorio motriz, que se manifiestan a partir de la capacidad de control y regulación del movimiento que posea el individuo. Manno señala que las capacidades de coordinación permiten que en la mayor medida posible, coincidan el valor del modelo ideal y valor real o sea el que realiza el individuo. Esto permite que el conjunto de los procesos organizativos y de control del movimiento tengan una eficacia adecuada García Manso y colaboradores(1996) al respecto son del criterio que antes de la aparición de un gesto técnico, se hace necesario adquirir cierto nivel de perfeccionamiento básico de una serie de aptitudes, de las cuales a su vez vienen condicionadas por el dominio de aspectos de percepción de toma de decisión y ejecución de la acción motriz. La participación de las cualidades de coordinación permite al deportista realizar los movimientos con precisión, economía y eficacia. Existen diferentes clasificaciones de las cualidades coordinativas como son las de Hirtz1979; Roth, 1982; Zimmermann, 1984; Ariel Ruiz, 1987, Platonov, 1993; siendo la más utilizada la que divide las capacidades coordinativas en tres grandes grupos: A pesar de que esta es la clasificación que en la mayoría de la literatura se utiliza y se recomienda, y ser la que en Cuba respalda el trabajo de esta capacidad, dentro de los programas de educación física y de la preparación del deportista y además es la que reconocen como valida la generalidad de los especialistas de la Cultura Física en nuestro país, en el análisis teórico de esta capacidad establecemos una polémica, al ofrecer una nueva clasificación, así como un conjunto de consideraciones metodologicas y teóricas, que la respaldan, fruto de la búsqueda minuciosa de la bibliografía especializada y del trabajo de muchos años en la docencia en la en la impartición de la disciplina Teoría y Metodología de la Educación Física y el Entrenamiento Deportivo, así como en la formación de atletas de altos rendimiento en varios niveles, ¿En que se fundamentan estos criterios? Sobre las capacidades coordinativas se han manifestado un elevado número de teóricos que han sido elaborados sobre bases empíricas en algunas ocasiones y fundamentadas con rigor científicas en otros estudios. Los datos obtenidos han aportado notables resultados en la práctica del deporte de rendimiento y de la Educación Física. V.I. Liaj (1987) estudió varias teorías que clasifican las capacidades coordinativas en 3 básicas y 11 especiales, una segunda clasificación valora la influencia de 10 factores y un tercer especialista que la divide en 2 básicas y varias especiales. El especialista de la antigua RDA H. Hirts asegura que las capacidades coordinativas están influenciadas fundamentalmente por funciones psicofísicas expresadas en 4 grupos de los cuales dedujo 18 capacidades coordinativas. También existen profundos trabajos sobre las capacidades coordinativas en la antigua Yugoslavia y Checoslovaquia, en estos estudios valoran otras clasificaciones que difieren de estas que la anteceden como son: la clasificación atendiendo al grupo de deportes donde inciden. Estas la dividen en: Manipulación con pelotas. Ejercicios de carácter gimnástico. Motricidad de las técnicas de deportes de combate. Atletismo. Donde se analizan cuatro factores fundamentales: Equilibrio. Habilidad de la mano. Agilidad del tipo locomotor. Agilidad del tipo no locomotor. VI. Lyaj (1987) amplía la diversidad de formas de manifestarse la coordinación clasificándolas en: 1. Todas las locomociones cíclicas (marchas, carreras, deslizamiento, escaleras, locomociones durante el movimiento de esquís y patinaje, etc. 2. En los movimientos no locomotivas donde el cuerpo está en el espacio (Gimnástica, mortales, saltos, etc.). 3. Los movimientos de manipulación en el espacio con la ayuda de determinadas partes del cuerpo (movimientos suspendidos en una cuerda y otros.). 4. Durante los traslados del objeto en el espacio (ejemplo: el movimiento de Arranque en pesas) 5. En los movimientos balísticos (impulsiones de bala, martillo, etc.). 6. Movimientos de precisión. 7. Movimientos de puntería. 8. Movimientos de imitación y copias. Este mismo autor establece una profunda investigación valorando 50000 coeficientes de correlación de los factores antes mencionados de niños entre 7 - 17 años estableciendo solamente muy pocos valores positivos en contadas ocasiones , principalmente por la estrechez del promedio índice homogénico entre las diferentes componentes de las capacidades coordinativas. Esta investigación nos demuestra que no existe correlación entre los diferentes componentes de la coordinación estudiados hasta el momento, ya que por ejemplo se dan casos de atletas con buena coordinación con 2, 3 ó 4 factores con buenos resultados, no siendo así en otros. Mientras Zimmermann ( 1983 ) asegura como uno de los factores fundamentales en el deporte de baloncesto es el de poseer una eficaz coordinación los actos de la regulación motora; situación compartida por Benshtein (1987) que expresa que el reflejo más exacto del nivel de las capacidades coordinativas lo constituye el grado de correspondencia de las capacidades motrices con el exterior. Matveev (1983) presenta otra hipótesis al respecto, al valorar que las actividades de coordinación son influenciadas por factores fisiológicos como son: las funciones coordinadoras del sistema nerviosos central y su propiedad que I. Pavlov denominó plasticidad. La posibilidad de coordinar cualitativamente los movimientos, sin duda, depende de manera sustancial del perfeccionamiento de los analizadores, lo que parcialmente ha sido comprobado por medio de experimentos. Como se puede observar, existen un considerable numero de clasificaciones y consideraciones sobre las capacidades coordinativas, donde se manifiestan criterios contrapuestos, se demuestra que en ocasiones deportistas que poseen desarrollada con calidad solo uno o dos de los tipos de las llamadas capacidades coordinativas presentan un buen índice de dicha capacidad, mientras que otros que poseen un mayor numero de estas capacidades, manifiestan un bajo desarrollo de la coordinación. Estos elementos permiten afirmar que en la actualidad se observen muchas lagunas en los conocimientos sobre las capacidades coordinativas, mostrándose inconsistencias y falta de rigor científico en muchas de las investigaciones ejecutadas al respecto, además de la complejidad que poseen las bases de la formación de ésta capacidad. Somos del criterio que para ejecutar un profundo estudio de las capacidades coordinativas se deben diferenciar fundamentalmente los factores que determinan estas capacidades y los tipos de coordinación que manifiestan, atendiendo las partes del cuerpo humano, órganos, sistema de órganos que participen en una acción deportiva. Analizando lo antes planteado y tomando como referencia el estudio de diferentes clasificaciones, un riguroso estudio de los elementos teóricos y metodológicos vinculados con esta capacidad, así como la experiencia personal de los autores proponemos la siguiente clasificación de las capacidades coordinativas. Tipos de coordinación 1. COORDINACION OCULO-MANUAL EN ACTIVIDADES VARIABLES 2. 3. 4. 5. 6. 7. COORDINACIÖN COORDINACIÓN COORDINACIÓN COORDINACIÓN COORDINACIÓN COORDINACIÓN OCULO-MANUAL EN ACTIVIDADES CICLICAS OCULO -PIE EN ACTIVIDADES VARIABLES OCULO-PIE EN ACTIVIDADES CICLICAS DE LA LATERALIDAD DINÁMICO GENERAL DINÁMICO ESPECIAL El estudio de esta capacidad se profundiza en dos textos vinculados con el desarrollo de las capacidades motoras y la preparación física, que están en fase de ser publicados, en una editorial mexicana y que por su extensión es imposible publicar de forma integra en esta prestigiosa revista electrónica, pero estamos en la mejor disposición de intercambiar y polemizar con diferentes especialistas que se interesen en esta temática.