Prevención de enfermedades cardíacas Según el Instituto Nacional de la Salud, la cardiopatía es la principal causa de muerte en los Estados Unidos. Si bien algunas personas nacen con o tienen una tendencia genética a la cardiopatía, hay muchas maneras mediante las cuales usted puede reducir sus posibilidades de desarrollar una afección cardíaca. Ejercítese regularmente: Ejercitarse regularmente es bueno para su salud física y mental. Quema calorías y puede fortalecer el músculo del corazón. Los adultos sanos deben hacer ejercicios al menos 2.5 horas semanales. Visite a su médico con regularidad: Su médico puede monitorear su salud general y solicitar análisis de la presión arterial alta, diabetes y otras afecciones que complican la salud del corazón. Deje de fumar: El tabaco daña su salud de muchas formas y es una de las causas principales de la enfermedad de las arterias coronarias. Monitoree su consumo de alcohol: Consumir mucho alcohol puede elevar su presión arterial. Mantenga un peso saludable: La obesidad puede aumentar sus posibilidades de desarrollar una afección cardíaca. Duerma bien y lo suficiente: La falta de sueño puede contribuir a una enfermedad cardíaca. La calidad del sueño también es importante: Si se despierta con frecuencia, ronca regularmente o desarrolla la apnea del sueño, usted no está durmiendo bien ni lo suficiente. Maneje su estrés: Si bien no está confirmado que el estrés contribuye directamente a una afección cardíaca, los efectos del estrés pueden contribuir indirectamente al desarrollo de problemas cardíacos. El estrés crónico puede desencadenar mecanismos de afrontamiento poco saludables, tales como el consumo de tabaco, el exceso de comidas, el consumo de alcohol y la falta de ejercicio suficiente. Muchas personas sienten que la oración, la meditación y otras prácticas espirituales les ayudan a manejar el estrés. La prevención de enfermedades cardíacas implica bastantes cambios en el estilo de vida. La familia, las redes sociales y las comunidades religiosas pueden reforzar la importancia de una salud cardíaca al promover la ingesta de comidas saludables, formar grupos para ejercitarse y proporcionar apoyo emocional durante situaciones estresantes. Oración: Querido Dios, nuestro corazón se encuentra muy agobiado. Ayúdanos a estar conscientes de nuestros pensamientos, actividades y relaciones. Amén. Recursos: Advocatehealth.com • NIH: Prevención de enfermedades cardíacas – nlm.nih.gov/medlineplus/heartdiseasesprevention.html • Heart.org: Prevención de enfermedades cardíacas a cualquier edad – goo.gl/1FoPqr • CDC: Prevención: Qué puede hacer usted – goo.gl/s7Zk21 Las mujeres y las enfermedades cardíacas Si bien nosotros asociamos con frecuencia los problemas cardíacos más con los hombres que con las mujeres, una de cada cuatro mujeres muere de una enfermedad cardíaca. De hecho, la enfermedad cardíaca coronaria es el número uno de muerte de tanto mujeres como hombres en los Estados Unidos. The American Heart Association anima a las mujeres a ser proactivas con respecto a su salud cardíaca. Si bien hay muchas mujeres que efectivamente buscan animar a sus familiares a desarrollar buenos hábitos de comida y ejercicio que contribuyan a su salud cardíaca, estas mismas mujeres pueden olvidarse de atender sus propias necesidades para un cuidado preventivo del corazón. El AHA empezó una campaña de “Go Red For Women” donde las personas se vestirán de rojo el 6 de febrero con el fin de concientizar acerca de las mujeres y las enfermedades cardíacas. He aquí algunos hechos alarmantes acerca de la mujer y las enfermedades cardíacas: Si bien las mujeres tienden a desarrollar una enfermedad cardíaca coronaria diez años más tarde que los hombres, dicha enfermedad es la causa principal de muerte en las mujeres. Los síntomas de un ataque al corazón en las mujeres pueden ser diferentes a los de los hombres. De acuerdo al centro de control de enfermedades, las mujeres tienen más probabilidades de experimentar dolores en la mandíbula, el cuello y la garganta, así como un dolor en el pecho que se describe como “agudo y ardiente”. Las mujeres tienen más probabilidades que los hombres de sufrir de diferentes tipos de enfermedades cardíacas, tales como ataques cardíacos “silenciosos” sin síntoma alguno. Además, las mujeres tienen más probabilidades de sufrir de un “síndrome del corazón roto”, un debilitamiento temporal del músculo del corazón en respuesta a un estrés emocional y una enfermedad microvascular coronaria, donde las arterias pequeñas del corazón sufren daños. Casi dos de tres mujeres que mueren de repente de una enfermedad arteria coronaria no experimentaron síntomas previos. He aquí algunas maneras por las que las mujeres dentro de comunidades religiosas pueden lidiar con su salud cardíaca: Educar a las mujeres en la congregación acerca de la salud cardíaca a través de la distribución de documentos y presentaciones por profesionales del cuidado de la salud. Patrocinar un club de ejercicios para mujeres. Promover la preparación de recetas que sean saludables para el corazón en reuniones de comidas de la congregación y otros eventos. Proporcionar transporte a las citas médicas y examinaciones a los miembros de la congregación que no tengan un carro o ya no puedan conducir. 6 de febrero -- Go Red for Women 2-15