Empezamos por la capital de Ucrania, Kiev, que fue la capital de la antigua Rusia durante los siglos IX-XIV. Primera impresión: hay muchos parques y mucho verde (se considera que es la ciudad más verde del planeta) y su antigüedad se combina armónicamente con influencias modernas. En el casco antiguo de Kiev se encuentran numerosas catedrales e iglesias. A la izquierda, la Catedral de San Miguel del monasterio del mismo nombre, y a la derecha, la de San Vladimiro. A la izquierda, el monasterio más antiguo del mundo eslavo, Kiev Pechersk Lavra, y a la derecha, el mosaico bizantino en la cúpula de la Catedral de Santa Sofía. 1 Allí tuvimos la suerte de escuchar como se toca el instrumento típico: la bandura. Este mismo día vimos el ensayo general del desfile militar en vísperas del día de la independencia de Ucrania. Paseo en barco por el río Dniepr. Nos gustó la visita al pueblo Pirogovo, que es todo un museo al aire libre de casas antiguas. Visitamos la feria medieval y compramos manteles y camisas bordadas… y todo muy barato. 2 Un tren nocturno nos llevó a Crimea. Nos alojamos en Yalta y desde allí visitamos sus palacios. Os mostramos el de Livadia, donde tuvo lugar la conferencia de Yalta en 1945. No es el palacio Taj Mahal, sino el del conde Vorontsov. Toda construcción es un capricho de un noble. Una de las salas está decorada en madera, copiando el estilo británico. Este palacio pertenecía a la familia de los zares. Recibe el nombre de Massandra por el nombre de la región de los vinos. Allí mismo hemos visitado la bodega de Massandra con degustación de sus vinos, tan famosos como los de Oporto. En la tienda compramos algunos de recuerdos. ¡Qué bonita la casa de Chejov! Toda blanca, con un jardín muy verde y, por dentro, una atmósfera bien conservada del escritor. 3 Nos trasladamos a Sebastopol. El edificio redondo es el museo donde se exhibe el panorama de la batalla de la guerra de Crimea. El monumento simbólico de Sebastopol, a los barcos hundidos en la defensa de la ciudad. La vista desde la terraza del restaurante de nuestro hotel “Sebastopol” ¡El barco nocturno: qué romántico! La bahía de Balaclava, zona donde tuvo lugar la famosa carga de la brigada ligera. 4 Estamos en Odessa, un puerto importante y una ciudad muy bella. El monumento a los fundadores de la ciudad. Los coches en la calle. Odessa es una joya arquitectónica: por sus edificios, galerías y el Teatro de Ópera y Ballet. 5 Odessa, como toda Ucrania, es muy hospitalaria en sus restaurantes y en los mercados. Aquí nos tenéis debajo de los fundadores de Kiev. Nos gustó el viaje y ya somos muy buenos amigos. Por cierto, entre nosotros había ocho personas veteranas de los viajes anteriores. 6