Genoveva Varela Ucrania_2009 Un viaje que nos lleva a visitar ciudades míticas que ocupan un lugar destacado en el imaginario colectivo, como es el caso de Sebastopol, que todos hemos utilizado en el lenguaje coloquial para denominar un sitio muy, muy lejano. Otras ciudades visitadas como Kiev, Yalta, Odessa... poseen un patrimonio histórico y cultural muy emocionante. La visita de estos lugares provoca un sinfín de propuestas que la historia, el cine y la literatura ya se han ocupado de mostrarnos. Disfruté especialmente la escalera Potemkin en Odessa. Hemos paseado amplias avenidas arboladas, jardines y zonas verdes. Son encantadores los mercados y mercadillos abarrotados de gente atareada que muestran la cara más amable del país. Ucrania posee las ventajas y desventajas de ser un destino turístico emergente. Estas últimas se sufren en los transportes y los servicios. Se compensan con la ausencia de aglomeraciones y los precios moderados respecto al euro. Se puede comer caviar a diario: ¡un lujo! Oír la lengua, un placer. Intentar hablar, comprender, leer, resulta una aventura que fascina y divierte por la dificultad que representa para los españoles.