Nota a la Segunda Edición La persistente demanda por el libro El Imperio contracultural: del rock a la postmodernidad, agotado hace ya algún tiempo, nos convenció de la conveniencia de hacer una segunda edición, sabiendo además que reflexiones como las que hace Luis Britto García sobre la crisis civilizatoria actual son sumamente necesarias. En esta segunda edición, el autor incluye un Post-Scriptum donde el último tema de la postmodernidad: la muerte de la idea de progreso, el fin de la confianza en el futuro, es abordado desde la perspectiva del fin de la Guerra Fría: Britto García, en alguna parte de este capítulo, señala que la verdadera crítica a la modernidad consiste en la lucha por la constitución de espacios libres para la creación (no sujetos al imperativo comercial) que den lugar a un nuevo humanismo que centre de nuevo el universo cultural en el hombre y que den paso otra vez al valor de uso como paradigma para el empleo social de las fuerzas que el mismo hombre ha creado y que está a punto de perder. En este sentido, no podemos dejar de subrayar el hecho de que este libro ha sido materia obligatoria de estudio y reflexión en varias universidades de América Latina. ¿Marcará esto el inicio de una toma de conciencia dirigida a cambiar maneras de actuar, y de generar y manejar información? El Editor 1 Nota a la Tercera Edición ¿Qué significan exactamente expresiones tales como subcultura, contracultura, industria cultural, vanguardia, transvanguardia, modernidad, postmodernidad, tardomodernidad, ultramodernidad, Pop, retro, muerte de la Historia, guerra cultural? ¿Por qué cada una de ellas despliega un abanico de implicaciones filosóficas, sociales, económicas, políticas, éticas y estéticas sin cuya comprensión no podemos seguir el debate sobre la contemporaneidad? El imperio contraeultural: del rock a la postmodernidad es un lúcido análisis de los mecanismos de manipulación de la conciencia mediante los cuales los sistemas dominantes libran la guerra cultural contra sus marginalidades internas y los pueblos de la periferia. Pues la historia del último medio milenio se centra en el intento de los países más desarrollados de someter al resto del planeta con el pretexto de imponerle una cultura hegemónica fundada en los ideales racionalistas y universalistas de la modernidad. En 1968, la rebelión política, la liberación sexual, el pensamiento delirante, el pacifismo y la sublevación de las etnias parecían prometer una utopía al alcance de la mano. Pero el sistema pervirtió las simbologías de las insurgencias contraculturales mediante el fetichismo de la mercancía, hasta reducirlas a subculturas de consumo. Estas a su vez dieron paso al último avatar de la modernidad: la postmodernidad, que pretende reducir todos los discursos humanísticos al lenguaje del valor de cambio del mercado. Bajo tal bandera, y sirviéndose a la vez de la guerra cultural, la agresión armada y la contrarrevolución neoliberal, las naciones hegemónicas libran su última ofensiva con el fin confeso de detener la Historia, o lo que es lo mismo, la cultura. La defensa y preservación de esta última es la precondición de una respuesta exitosa por parte de los pueblos de la periferia, entre los cuales se encuentran los de América Latina. Esta tercera edición, al igual que la segunda edición de 1994, incorpora un capítulo que analiza los últimos desarrollos del debate de la postmodernidad hasta esa fecha, así como un mapa ideológico del Nuevo Orden Mundial y varias propuestas sobre la posición que debe adoptar América Latina ante la guerra cultural. Caracas, diciembre de 1996 2