Llamamiento a mantener las tomas, a no decaer el ímpetu, a extender el conflicto. Hermanos y Hermanas de clase: Los anuncios del gobierno de comenzar a entablar negociaciones con el Partido autodenominado comunista, debiese ser el llamado de atención para agudizar la movilización, en especial para los secundarios. Preguntamos: ¿Quiénes están a la cabeza de la Confech, del Colegio de Profesores? Militantes de dicho asqueroso partido (recuerden cabros que los socialdemócratas han bajado todas las movilizaciones en el pasado, no podemos permitir que lo sigan haciendo). El movimiento ahora debe crecer. Las negociaciones, si es que se hacen, se deben realizar en bloque, no parceladas, fragmentadas o sectorizadas, no hay que aceptar las divisiones (por ejemplo el llamado de Lavín a la vuelta a clases producto de una reunión sostenida con ¡3 alumnas del Carmela Carvajal! O sea ¿3 alumnas tienen mayor injerencia que los 100.000 manifestantes del jueves pasado? a las que el Estado/Capital y sus organizaciones paraguas (federaciones estudiantiles, sindicatos y partidos políticos) están tratando de llegar. Y todo debe hacerse en movilización. El llamado es a no bajar las tomas. Recurso indispensable de presión. La hora llama a no desanimarnos e ir un paso mas allá de la situación que se está gestando actualmente: abran los centros de estudio para la conformación de foros, talleres, debates, y con esto romper la cultura del orden, la cultura del capitalismo, de la cual, la educación es su principal gestor. No debemos olvidar que la educación está garantizada y acondicionada para el funcionamiento exitoso del trabajo asalariado, de este capitalismo espectacular en el que vivimos. Esta educación es la única posible para que a los estudiantes nos intercambien en el mercado laboral como cosas con un valor variable según las crisis financieras o económicas en las cuales se encuentre la sociedad. Pero retomando lo anterior: la abertura de los centros de estudio debe ser en una concordancia hacia los fines generales de un movimiento que comience a criticar la existencia misma de esta educación capitalista. Es imprescindible que los-as trabajadores-as se sitúen del lado de los estudiantes. Solo con ellos-as, y nunca sin ellos-as, se podrá lograr la IMPOSICION de nuestras necesidades, por sobre las necesidades del mercado. Los fines deben redescubrirlos ustedes mismos, entre todos, interactuando en dinámicas que se separen RADICALMENTE del funcionamiento de esta sociedad, que entendámoslo bien, NO NOS PERTENECE, pues esta CONTRA NOSOTROS, POR SOBRE NOSOTROS Y NEGANDONOS A NOSOTROS MISMOS. Es necesario que se entienda que esta lucha es total y no pertenece al estudiante, como ser alejado del resto de las relaciones sociales, es un conflicto encuadrado dentro de la lucha de clases ¡Hermanas y Hermanos de Clase: esta pelea debe incluir e incumbir a los-as trabajadores-as, es un conflicto del Proletariado! El estudiante es un rol transitorio hacia el trabajo. Los perfeccionan para venderse como mercancía en el mundo laboral, por ende, toda la vida del estudiante está controlada para servir, en el futuro, de esclavos perfeccionados para cada trabajo necesario dentro de la producción incesante de cosas innecesarias. Solo reconociendo lo que somos, proletarios, podemos enfrentar en combate esta vida falsificada del mundo burgués. Y cuando mencionamos los fines generales a conseguir, solo enunciamos lo que se ha vislumbrado desde los confines de nuestra clase: abolición de la sociedad de clases, del trabajo asalariado y aniquilación del estado. Hermanos y Hermanas de Clase: la hora llama a centralizar los esfuerzos, a no dejarse amedrentar, a extender, continuar y radicalizar las tomas. En sus manos está la continuidad del movimiento. No permitan que los embauquen, ni que los vendan como en el 2006. Como indicaba un panfleto repartido hace algunas semanas en España, con motivo de las acampadas en las plazas: “Hace falta desobedecer, porque ninguna revolución se ha hecho nunca respetando las leyes de los poderosos. Hace falta desobedecer, porque lo más violento de todo no sería continuar actuando ilegalmente, sino dejar pasar la oportunidad de acabar de una vez por todas con todos los abusos, con toda la violencia masiva que esta sociedad produce”. Los llamaran a volver a la normalidad, NO LO PERMITAN. Lo más violento de todo sería volver a la normalidad a la que ellos nos han encadenado. ¡Impongan sus necesidades. Están en condición de ello, que no les quiten su oportunidad! Comité de la Imaginación Algunos Proletarios-as que estudian Núcleo de Agitación Comunista Recomendamos leer www.hommodolars.org