VIII Informes Especiales En el caso de bienes muebles, se considera efectuado el aporte al momento en que se otorga la escritura pública de constitución o de aumento de capital, según sea el caso, debiendo acreditarse mediante una declaración que efectúa el representante legal de la sociedad en la que deja constancia de haber recibido los bienes, debiendo además adjuntarse a la escritura pública un informe de valorización de los bienes, en el que se describan sus características, el valor asignado y el criterio utilizado para establecer dicho valor. Este informe no requiere ser suscrito por un perito o tasador, pudiendo ser firmado por el propio socio aportante. En el caso de bienes inmuebles, la transferencia se considera efectuada con el otorgamiento de la escritura pública de constitución o de aumento de capital, según sea el caso, debiendo también adjuntarse a la escritura pública un informe de valorización de los inmuebles aportados, en el que se describan sus características, el valor asignado y el criterio utilizado para establecer dicho valor. Cuando se trata de derechos de crédito, la Ley General de Sociedades dispone que si el aporte consiste en títulos valores o documentos de crédito a cargo del socio aportante, el aporte no se considera efectuado sino hasta que el respectivo título o documento sea íntegramente pagado. Si el derecho de crédito aportado está representado por títulos valores o documentos de crédito en los que el obligado principal no es el socio aportante, el aporte se entenderá cumplido con la transferencia de los respectivos títulos o documentos, con el endoso de los respectivos títulos valores o documentos y sin perjuicio de la responsabilidad solidaria prevista en la ley respectiva. 6. Saneamiento de los aportes El saneamiento constituye una obligación a cargo del aportante en virtud de la cual debe responder frente a la sociedad por aquellas circunstancias que puedan limitar o impedir el ejercicio de los derechos que le corresponden a la sociedad como titular del recurso aportado. A estos efectos, es necesario tener en cuenta las disposiciones del Código Civil en materia de obligación de saneamiento, contenidas en sus artículos 1484° al 1528°, pues son esas disposiciones las que regulan el contenido de la obligación de saneamiento en sus distintas formas. Cabe señalar que cuando él aporte la cesión de un derecho, la responsabilidad del aportante se limita al valor atribuido al derecho cedido pero está obligado a garantizar su existencia, exigibilidad y la solvencia del deudor en la oportunidad en que se realizó el aporte. 7. Riesgo y pérdida del aporte Uno de los factores que requiere una regulación especial es la posibilidad de que los bienes aportados sufran daños o se pierdan, siendo necesario determinar quién asume dicho riesgo, si el socio aportante o la sociedad, y desde qué momento se produce la transferencia de dicho riesgo. La Ley General de Sociedades prevé que el riesgo de los bienes aportados en propiedad sea de cargo de la sociedad desde que se verifica su entrega, de acuerdo a las reglas que ya hemos visto anteriormente. Cuando el bien no ha sido aportado a título de propiedad sino en uso o usufructo, el riesgo del bien aportado en uso o usufructo recae sobre el socio que realiza el aporte, perdiendo la sociedad el derecho a exigir la sustitución del bien. ¿Qué ocurre cuando el bien materia de aporte se pierde? La Ley General de Sociedades fija las siguientes reglas cuando la pérdida del aporte se produce antes de su entrega a la sociedad: • Si se trata de un bien cierto o individualizado, la obligación del socio aportante se resuelve y la sociedad queda liberada de la contraprestación, esto quiere decir que el socio no estará obligado a cumplir con el aporte y la sociedad tampoco estará obligada a considerar como socio a dicha persona. Si la pérdida del bien se hubiera producido por causa imputable al socio aportante, éste quedará obligado a indemnizar a la sociedad. • Si se trata de un bien incierto, el aportante no queda liberado de su obligación; es decir, que deberá cumplir con su obligación de aportar otro bien de las mismas características que el bien perdido. • Si se trata de un bien a ser aportado en uso o usufructo, el aportante puede optar por sustituirlo con otro que preste a la sociedad el mismo beneficio. La sociedad queda obligada a aceptar el bien sustituto, salvo que el bien perdido fuese el objeto que se había propuesto explotar. En este último caso, el socio aportante queda obligado a indemnizar a la sociedad si la pérdida del bien le fuese imputable. 8. Reglas particulares para la sociedad anónima Veamos algunas de las reglas específicas que se aplican a la sociedad anónima para regular los aportes que se efectúan a su capital social. 8.1 Objeto del aporte La primera regla que debemos tener en cuenta al realizar aportes a una sociedad anónima es que en este tipo de sociedades no está permitido el aporte de servicios; por lo tanto, sólo serán aceptados los aportes en dinero, bienes muebles e inmuebles y derechos susceptibles de valoración económica. 8.2 Revisión del valor de los aportes no dinerarios Cuando se hayan efectuado aportes no dinerarios al capital social de una sociedad anónima el valor de dichos aportes debe ser objeto de revisión por parte del directorio de la sociedad. La revisión debe efectuarse dentro del plazo de sesenta días contado desde la constitución de la sociedad o del pago del aumento de capital, según sea el caso. Si el directorio no cumple con efectuar la revisión dentro del plazo previsto, dentro de los treinta días siguientes, cualquier accionista podrá solicitar que se compruebe judicialmente el valor de los aportes mediante una pericia. Si se demuestra que el valor de los bienes aportados es inferior en 20% o más a la cifra en que se recibió el aporte, el socio aportante deberá optar entre la anulación de las acciones equivalentes a la diferencia, su separación del pacto social o el pago en dinero de la diferencia. En cualquiera de los dos primeros casos, la sociedad reduce su capital en la proporción correspondiente si en el plazo de treinta días las acciones no fueran suscritas nuevamente y pagadas en dinero. Glosario Empresarial 1. ¿Por cuánto tiempo se puede constituir el derecho de usufructo? De acuerdo al artículo 1001º del Código Civil, el usufructo se constituye en forma temporal. Tratándose de personas naturales, en el caso máximo, estaría limitado a la existencia del usufructuario, en tanto que si se otorga a favor de una persona jurídica, el plazo máximo es de treinta años. VIII-4 Instituto Pacífico 2. ¿La responsabilidad de los miembros de un contrato de consorcio es solidaria? De acuerdo al artículo 447º de la Ley General de Sociedades, la responsabilidad de los miembros del consorcio frente a terceros es individual, sólo es solidaria si así se ha señalado en el contrato. N° 191 Segunda Quincena - Setiembre 2009