Siglo nuevo A rquitecto mexicano, procedente de una familia numerosa y reconocida; siendo su madre la nieta mayor del presidente Benito Juárez. Se le considera, junto a José Villagrán García, el precursor de la Pabellón de México para la exposición arquitectura moderna en México. Mundial de Río de Janeiro, 1922. En 1916, ingresó a la Academia de San Carlos, escuela en la que por aquella época se estudiaban las carreras de arquitectura, pintura y escultura. De sus vivencias como estudiante, señala como vanguardia en la enseñanza a maestros como Eduardo Macedo Arbeu, Manuel Ituarte y al Ingeniero José Luis Cuevas, puesto que en ellos halla la motivación y el entusiasmo por generar una arquiCasa unifamiliar, propiedad tectura propia acorde a las transforde Obregón Santacilia, 1930. maciones de modernidad que se iban dando y, como resultado del proceso revolucionario, con el espíritu que impregnaba la vida cultural de un una redefinición total de su pasado e México que miraba por primera vez identidad, era un contexto entendido a sus raíces como un camino asom- por el nuevo Secretario de Educación broso e inquietante que explorar y Pública, José Vasconcelos, quien deanalizar con detalle. cidió impulsar personalmente un paOcho años después, concreta- bellón de claro estilo colonial. mente el 31 de mayo de 1924, preDicha decisión (aparentemente sentó su examen profesional con el sorprendente), es necesario comtema Centro Educativo. Carlos Lazo, prenderla desde la propia figura de Manuel Ortiz Monasterio, Manuel Vasconcelos, quien por aquellos días, Ituarte, Macedo y Arbeu Martínez promovía una práctica artística de del Cerro, fueron los arquitectos estado, que a modo de ‘nueva evangeque integraron el jurado y otorgaron lización republicana’, fuera capaz de a Carlos Obregón una Mención Honorífica, gracias a la genialidad que se reflejaban en diversos proyectos de importancia que ya había llevado a cabo. Centro Escolar Benito Juárez. Estudio de Casa unifamiliar con amplia terraza que permitía vista a lo que hoy es la colonia Tlacopac,1930. recoger la raíz popular de la expresión nacional, que él identificaba y señalaba en el barroco novohispano. El Pabellón, era de geometría rectangular, con un frente de treinta metros y un ancho de veinte metros. Tenía dos pisos y el tratamiento exterior de los muros, imitaba la cantera y el tezontle. Llama la atención además el centro del mismo, que lejos de disponer de imágenes religiosas optaba por un escudo de México con el águila, la serpiente y el nopal, sacralizan- OBRAS REPRESENTATIVAS Destaca el Pabellón de México en la Exposición de Río 1922-1923, organizado con motivo del Centenario de la Independencia de Brasil, puede observarse como el proyecto más sorprendente de todos los que había realizado México hasta la fecha. La Revolución, prácticamente finalizada en el país y sometida a la inquietud e incertidumbre propia de Secretaría de Salubridad y Asistencia, 1929. Sn • 47