Magistrado Ponente VLADIMIRO NARANJO MESA Tipo de Corte y Fecha de la sentencia Corte Constitucional, Sala de Revisión, 12 de julio de 1993 No. de la Sentencia. T-269/93 Acción de Tutela por violación TEMAS al derecho de propiedad PRINCIPALES intelectual Abstract El Sr. Darío Cabrera Uribe, es miembro del Taller 27, que es conformado por un grupo de estudiantes de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, el Sr. Cabrera participó en un concurso realizado por la ETB en el año de 1985, que consistía en elaborar un nuevo diseño para las cabinas telefónicas. Él junto con los miembros del Taller 27, elaboraron un proyecto que denominaron "Soporte lógico para el sistema de comunicaciones telefónicas públicas gratuitas por publicidad". Dicho concurso no fue ganado por el Sr Cabrera, pese a esto el accionante junto con los miembros del taller, continuaron en el perfeccionamiento de su diseño, y difundieron el proyecto con ayuda de funcionarios de la ETB, de tal manera que instalaron cabinas experimentales en la Cra. 19 con Calle 39 de la ciudad de Bogotá, y exhibieron dicho proyecto en la feria de diseño “Expo Diseño”, realizada en el año de 1987, dos años después del concurso realizado por la ETB. Todo lo anterior a nombre de Taller 27. De manera independiente, la ETB, comenzó a desarrollar un proyecto de telefonía pública gratuita terminado en el año de 1992, con la instalación de varios aparatos de servicio gratuito. Por tal motivo el Sr. Darío Cabrera Uribe instaura acción de tutela a nombre propio y como integrante de "Taller 27", grupo colectivo de creación y diseño industrial, sin personería jurídica reconocida por las autoridades competentes considerando que se le están violentando los derechos al libre desarrollo de la personalidad, a la honra, a la enseñanza, aprendizaje, investigación y cátedra, a la propiedad privada, a la propiedad intelectual, varios tratados internacionales que consagran los derechos económicos, sociales y culturales, en especial, la Convención Interamericana de Derechos de Autor, y adicionalmente el artículo 94 de la Constitución Política, que consagra la vigencia de derechos fundamentales reconocidos por pactos internacionales Puesto que “el accionante sostiene que la idea de la telefonía pública gratuita es de su autoría, y que al haber aplicado la ETB un sistema similar, ha usurpado su invención, no solo, no reconociendo ningún tipo de crédito a su inventor, sino, adicionalmente, introduciendo modificaciones que no armonizan con la unidad tecnológica y sistemática del proyecto.” Fallo de primera instancia: Juzgado 28 Civil del Circuito, desestima la acción de tutela por considerar que no existe relación jurídica entre el actor y el grupo "Taller 27", ni hay claridad sobre quién tiene la titularidad para reclamar por los derechos de este último, ya que no aparece el actor como representante legal de "Taller 27", ni tampoco como titular de un derecho propio y sosteniendo que no se esta frente a un perjuicio irremediable. Fallo de segunda instancia: Sala Civil, Tribunal Superior de Santa Fe de Bogotá confirma fallo de primera instancia. Argumento No 1, Titularidad de la Acción ARGUMENTOS Cualquier persona puede instaurar acción de tutela, sean personas DE DECISIÓN naturales o jurídicas, el Taller 27 a nombre del cual dice actuar el accionante carece de personería jurídica, por lo cual no se constituye como persona sino un ente jurídicamente indeterminado, por tal motivo carece de derechos fundamentales que solo son propios de quienes gozan la calidad de personas. Argumento No. 2, Existencia de otro mecanismo de defensa Al referirse a derecho de autor existe la ley 23 de 1982, que frente a conflictos de esta índole establece la opción de interponer una acción breve y sumaria en favor del titular del derecho, la cual viene acompañada de medidas cautelares que son eficaces para satisfacer el derecho invocado por el interesado. Otro medio de defensa del que goza el actor es la acción de reparación directa Argumento No.3, Perjuicio Irremediable El perjuicio irremediable es inminente, urgente, grave y certero, es decir no puede partirse de supuestos de hecho en los que se considere que se va a ocasionar un posible perjuicio como lo hace el accionante. DECISIÓN FINAL Confirma la sentencia de segunda instancia, es decir, deniega la tutela.