Abril/Mayo 2013 iP información pública 3 intendencia Carta del Intendente Tormentas severas: hoy estamos mejor preparados Señor vecino: La lluvia que se abatió sobre nuestra ciudad el jueves 11 de abril, con un total de 150mm caídos (90 de ellos sólo en la primera hora y media del temporal), constituyó un fenómeno de magnitud que puso a prueba nuestro sistema de desagües, tanto como la capacidad de respuesta del municipio ante este tipo de contingencias. Del análisis de lo acontecido surge una clara distinción entre aquellos sectores donde se han realizado obras de saneamiento hídrico y aquellos a donde el Estado municipal aún no ha podido llegar. En este aspecto, nos alienta haber constatado que hubo lugares en los que históricamente se producían anegamientos y que, gracias a las obras ejecutadas, no padecieron inconvenientes significativos. Más allá de la acumulación temporaria de agua durante los momentos más intensos de la tormenta, en la mayor parte de la ciudad el escurrimiento se desarrolló rápidamente. En poco tiempo se restableció la normalidad y no se registraron los problemas que una precipitación de estas dimensiones hubiera generado hace tan sólo 4 años atrás. Para ello, sin duda contribuyeron decisivamente las obras que con mucho esfuerzo venimos haciendo y gestionando desde el municipio con el objetivo de disminuir el riesgo hídrico. Sin ánimo de ser exhaustivos, es importante resaltar el funcionamiento del nuevo desagüe de la Autovía 19, obra que tiene un presupuesto cercano a los 13 millones de pesos y que, aún sin estar terminada, ayudó a agilizar notablemente el drenaje del agua acumulada en el cordón oeste del ejido urbano. A ello hay que sumar la construcción del desagüe de calle Chapeaurouge, el de calle Balcarce y el correspon- diente a la obra del PROMEBA en El Chaparral, un barrio donde la respuesta ante las lluvias ha mejorado sensiblemente. Asimismo se destacan la ampliación del desagüe de calle Uruguay a la altura de Vélez Sarsfield y las tareas de limpieza y mantenimiento permanentes en los canales Roverano, Gaboto, San Martín y República de Chile. Estas mejoras fueron complementadas con trabajos de ampliación de los reservorios, especialmente en el Nº 1 (donde prácticamente se quintuplicó la capacidad) y el Nº 3, como así también con la incorporación de equipamiento que incrementó exponencialmente nuestra capacidad de bombeo. Paralelamente, es importante resaltar el efectivo comportamiento de una gran cantidad de obras menores, tales como cruces de calles, cuneteo y colocación de tubos domiciliarios. Un dato no menor en este aspecto es que desde 2007 hasta la fecha llevamos ejecutadas 550 cuadras de mejorado en distintos barrios, todas las cuales han sido acompañadas con trabajos de saneamiento hídrico. Con relación a las zonas que demostraron mayor vulnerabilidad, una de ellas fue la del tramo urbano de la Ruta N° 19. En ése sector, las dificultades se produjeron en gran medida porque todavía no está finalizada la mencionada obra de desagüe de la Autovía. Una vez realizados los cruces en las intersecciones de la ruta con las calles Buenos Aires y Malvinas Argentinas, y de Estados Unidos de México con San Martín, la situación mejorará ostensiblemente. Asimismo, otra área que presentó dificultades fue la de Adelina Centro que, como es sabido, se encuentra por debajo de la cota exigible y por lo tanto es particularmente vulnerable ante fenómenos de esta naturaleza. En resumen, sabemos que en materia de disminución del riesgo hídrico todavía queda mucho por hacer. Comprendemos, además, que a los vecinos que son directamente afectados por los problemas de anegamiento no les alcanza con saber que la ciudad ha mejorado en términos generales. Necesitan respuestas concretas y en el menor tiempo posible. Pero si hacemos memoria y comparamos la situación actual con la que teníamos hace 4 años atrás, podemos afirmar que hoy Santo Tomé está en mejores condiciones para afrontar este tipo de contingencias. El desafío es que, dentro de otros 4 años, estemos todavía mejor. Fabián Palo Oliver Intendente Municipal