COSMOVISION ANDINA LA PARIDAD COMPLEMENTARIA DEL AGUA QUTAMAMA JALLUTATA “Wiracocha es el mar, es el agua, es la fuerza, la fuerza vital invisible que aviva la vida; el mar, los lagos y donde nace el agua, son Pakarinas, lugares sagrados. En el Lago Titikaka, Wiracocha creó el mundo. Cuando los antepasados caminaron por las venas de las aguas subterráneas, por las venas de la sangre de los cerros, hasta emerger en los manantiales, donde fundaron los Ayllus de cada pueblo. Los que trascendieron a otro mundo recientemente, deben rehacer el viaje subterráneo, hasta llegar a Wiracocha. Las hojas de coca, los cantos a la eternidad, los rituales y las ofrendas a la Pachamama, ayudan en este viaje” Mito reflejado en el Video “ Tiwanaku, los Señores del Altiplano” Capítulo: Día de los muertos en Chachacomani. Universidad Católica de Chile. 1995. PACHA • • • • Tiempo y espacio Más allá de tiempo y espacio Unión de las dos fuerzas: cósmicas y telúricas VIDA PA = PAYA = DOS PACHA CHA = CHAMA = ENERGIA DOS ENERGÍAS: CÓSMICO - TELÚRICO Existen dos energías: COSMOVISIÓN ANDINA PACHAKAMA o PACHATATA Energía cósmica Las dos energías generan toda forma de existencia PACHAMAMA Energía telúrica Y todo lo que existe es par PACHAKAMA Y PACHAMAMA Generan a sus hijos • NINA TATA • QOTA MAMA • WAYRA TATA • WILLKA TATA • PHAXSI MAMA • JALLU TATA • KUNU TATA KON La Quta Mama (Madre Agua) y el Jallu Tata (Padre Luvia) son abuelos y abuelas que nos acompañan, dan vida y a los cuales estamos ligados profundamente. La modernidad nos ha hecho creer que el agua del río o de la cascada, o de la vertiente, no son aptos para el consumo humano. El mundo moderno está convencido que agua potable es solamente agua embotellada, cuando muchas investigaciones han sugerido que el agua de las montañas o vertientes tiene un equilibrio y una armonía propia en su estructura molecular. Nuestros abuelos y abuelas buscaron preservar la vida; saber que no llueve porque sí, sino porque hay todo un mecanismo de complementariedad en la vida y la naturaleza, y si llueve es porque hay plantas, si no hay qué regar, pues simplemente no va a llover. El ser humano siembra muy poco hoy en día, prefiere emprender la carrera hacia la modernidad y hacia el vivir mejor y es natural que hayan menos lluvias. Sin embargo nuestros ancestros nos han enseñado a cosechar el agua, y hasta a llamar a la lluvia si es necesario. Las culturas ancestrales, saben de la importancia del agua, por lo tanto no comprenden que esta pueda considerarse un recurso, porque es nuestra madre, y no es algo que deba venderse. Se han generado instituciones para expresar esa cultura de respeto, una de ellas es la challa, que permite expresar nuestro profundo agradecimiento a la vida y nos permite relacionarnos con el entorno. Los lagos son fuente de alimentación y de transporte para un número importante de personas, como es el caso del Lago Titicaca en Bolivia. Por otro lado, el agua también acompaña la diversidad cultural. En la región altoandina, para hablar del agua, se debe partir de la comprensión de las implicaciones culturales que estos suponen para las poblaciones locales y tradicionales, específicamente para los pueblos indígenas. Estas implicaciones tienen que ver con la innegable contribución histórica de los pueblos indígenas y las comunidades a la conservación de los ecosistemas hídricos, la cual responde a formas tradicionales de convivencia con la naturaleza. El agua para los pueblos indígenas, “es la vida misma”... “Es fundamental para la producción, para los animales, para la alimentación; es el marco integral y el balance de la vida de los pueblos”... “A través del agua ocurre la lectura del comportamiento de la naturaleza ya que su color, sabor, densidad y otros parámetros son señales que indican cuándo producir, cuándo recoger la cosecha, predecir la época y zona de pesca, etc.”... Casi todas las poblaciones andinas se organizan en función del agua ya que además brinda la estructura social fundamental para la ritualidad y las ceremonias. La tierra, el agua, el aire y todas las demás formas de vida aportaron partes para formar nuestro ser. En aymara se dice pachamamatanwa (somos pachamama). Significa que pertenecemos a la Madre Tierra. Este concepto se acompaña de muchas enseñanzas, una de las cuales es que nuestra relación con la tierra es precisamente eso, una relación. No se trata de negociar derechos a cambio de responsabilidades. En una relación con la Madre Tierra, las responsabilidades ya están implícitas. Nosotros no somos dueños de la tierra, nosotros pertenecemos a ella. Entonces, más que reclamar un derecho de propiedad, lo que pedimos es el “Derecho de Relación” con la Madre Tierra. Los pueblos originarios traen las voces de los ancestros, planteando algo nuevo para occidente y el mundo: una forma de vida en equilibrio y armonía; una relación de equilibrio con toda forma de existencia y de armonía con los ciclos de la Madre Tierra. “Los ancestros vuelven por las venas subterráneas del Multiverso hasta las fuentes elementales de la naturaleza para ser intermediarios ante Wiracocha, Supremo Aliento de la vida. Venimos de la eternidad y volvemos a la eternidad.” JALLALLA