Observatori del Deute en la Globalització/ LA ANTICOOPERACIÓN FINANCIERA ESPAÑOLA LOS FLUJOS FINANCIEROS DEL ESTADO ESPAÑOL CON LOS PAÍSES EMPOBRECIDOS1 DANIEL GÓMEZ-OLIVÉ Y GEMMA TARAFA. Observatorio de la Deuda en la Globalización. Julio de 2012 Se define la anticooperación financiera como el conjunto de flujos financieros que salen del Norte hacia el Sur y cuyo impacto va en sentido contrario a la transformación social, económica y ambiental que pretende el sistema de ayuda internacional. Para saber si el Estado español genera cooperación o anticooperación, se analizan cinco2 flujos financieros que salen desde su territorio: 1) La Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD). Es el conjunto de recursos económicos, materiales y de servicios que las administraciones públicas destinan para favorecer el desarrollo social y económico de los países empobrecidos. De toda la AOD solo la Libre de Deuda (AODLD) puede considerarse cooperación, al ser donaciones y operaciones desligadas de intereses comerciales. No ocurre así con la AOD de tipo reembolsable (que incluye créditos que generan deuda externa) ni con las cancelaciones (que no suponen flujos financieros reales). 2) Las remesas3 que envían a sus países de origen las personas que han emigrado al Estado español provenientes de países empobrecidos. Es dinero que se envía sin esperar nada a cambio. En estos últimos dos años, a nivel mundial los países que más remesas recibieron fueron India, China, México y Filipinas. En la mayoría de los casos, las remesas deberían ir en sentido favorable al desarrollo de las poblaciones que las reciben, puesto que pretenden el buen vivir de sus receptores. Por tanto, podrían considerarse un flujo de cooperación. 3) La Inversión Extranjera Directa (IED) española. Es el capital invertido, por una persona natural o jurídica del exterior, con la intención de tener participación directa a largo plazo en el desarrollo de la actividad de la firma participada. Se excluyen, por tanto, de este concepto, las inversiones especulativas. La IED se puede realizar comprando acciones de empresas ya existentes o estableciendo en el terreno una filial de la empresa inversora. Para contabilizar si es cooperación o anticooperación la IED se tiene en cuenta, por una parte, que la repatriación de beneficios es mucho mayor que la inversión realizada. Por otra, han sido ampliamente denunciados los malos servicios prestados por las empresas españolas a los habitantes más pobres. Al mismo tiempo, para atraer la IED, los países empobrecidos implementan rebajas fiscales, medidas de flexibilización (=deterioro) de las condiciones laborales y desregulación ambiental, que, finalmente, acaban afectando gravemente a las poblaciones locales. Si a esto se añade 1 País empobrecido es aquel con una renta inferior a la española y que no se integra en ninguno de los centros de poder económicos y políticos internacionales. 2 Lamentablemente no se han podido obtener los datos de créditos privados, ya que no están sistematizados en ningún organismo oficial. 3 Se realiza el estudio atendiendo a las remesas formales. Se calcula que sólo existe infraestructura para que un 20% de las remesas que salen del Estado lo hagan por medio de mecanismos informales. Este porcentaje permite estimar que en el 2007 pudieron salir del Estado español remesas informales por un valor de 1.600 millones de euros. www .odg. cat 1 Observatori del Deute en la Globalització/ que las empresas españolas, para invertir en el extranjero, se beneficiaron de las privatizaciones y los Planes de Ajuste Estructural impuestos por el FMI, se puede concluir que la IED es un flujo de anticooperación clarísimo. 4) Los créditos públicos y privados que se dan desde el Estado al exterior, condicionados a que se utilicen para la compra de bienes y servicios españoles. Esta manera de proceder genera deudas públicas y privadas en estos países. Este hecho es muy relevante, ya que en la mayoría de los casos se trata de países que parten de situaciones de sobreendeudamiento. Teniendo en cuenta que no está entre los objetivos de estos créditos ayudar a la transformación social, sino beneficiar a las empresas, son ejemplo de anticooperación. 5) Los pagos por las importaciones de productos de países empobrecidos. A lo largo de las últimas décadas estos países han enfocado la mayor parte de sus economías hacia la exportación de productos primarios, ya que éste es el sector que les permite introducir bienes en el mercado global y conseguir divisas. Para lograr exportar, estos países se ven obligados a sobre explotar los recursos naturales, ya sea haciendo una producción intensiva de monocultivos sobre sus mejores tierras agrícolas (café, té, cacao, bananas, soja, palma…), o intensificando la explotación de la industria extractiva (minerales, hidrocarburos…), sin suficientes controles ambientales. Debido a esta sobreexplotación, se dañan los ecosistemas y el buen vivir de las poblaciones empobrecidas. El balance entre los daños (pérdida de soberanía alimentaria y/o energética) y los beneficios (divisas) es claro: las importaciones suponen anticooperación. 1. ANÁLISIS DE LOS FLUJOS DEL ESTADO ESPAÑOL HACIA LOS PAÍSES EMPOBRECIDOS DE LA ÚLTIMA DÉCADA Según el gráfico 1, la AODLD es muy pequeña respecto a los otros tres indicadores de anticooperación que hemos estudiado, tanto en los años anteriores a la crisis económica como después de 2007. Se puede concluir, por tanto, que el daño infligido es mucho mayor al beneficio. 70.000 60.000 50.000 40.000 30.000 20.000 10.000 0 2001 2002 2003 2004 créditos públicos 2005 2006 2007 AOD libre de deuda 2008 2009 IED 2010 importaciones Gráfico 1. AOD libre de deuda, IED, créditos públicos e importaciones españolas sobre los países empobrecidos (2000-2009). Millones de euros. Fuente: elaboración propia del ODG Por otro lado, si se compara la AODLD con el flujo de las remesas4 (Gráfico 2) se evidencia que la AODLD es muy pequeña en comparación con este otro indicador de “cooperación”. Esto es así incluso en los años de crisis, en los que, aunque los flujos de remesas caen substancialmente, llegan a ser entre dos y tres veces superiores a la AOD libre de deuda. 4 Para el cálculo de las remesas se han utilizado datos de la web www.remesas.org y del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación www .odg. cat 2 Observatori del Deute en la Globalització/ 9.000 8.000 7.000 6.000 5.000 4.000 3.000 2.000 1.000 0 2001 2002 2003 2004 2005 2006 AOD libre de deuda 2007 2008 2009 2010 Remesas Gráfico 2. AOD libre de deuda y remesas del Estado español hacia los países empobrecidos (2000-2009). Millones de euros. Fuente: elaboración propia del ODG 2. CONCLUSIONES Aunque es un hecho incontestable que la AOD bilateral libre de deuda ha aumentado en la última década, vemos cómo se ha estancado a raíz de la crisis económica. Esto es preocupante porque todavía estamos muy lejos de alcanzar el compromiso de destinar el 0,7% del PIB.5 A la vez, las remesas caen en picado a raíz de la crisis económica que empezó en el 2007. No obstante, la suma de estos dos flujos, que supuestamente trabajan en favor del fomento del desarrollo integral de los pueblos empobrecidos, es infinitamente menor a la suma de los otros tres flujos estudiados y que actúan, en muchas ocasiones, en sentido contrario (IED, créditos públicos e importaciones). Por todo esto, se puede afirmar que, si realmente se pretende la transformación de las desigualdades socioeconómicas y ambientales de los países empobrecidos, es imprescindible denunciar los impactos negativos de los flujos de anticooperación, y a la vez tratar de revertirlos, minimizarlos o eliminarlos. 5 La AOD española (tanto la bilateral como la multilateral) se situó en el 0,46% en relación al PIB. Si tan sólo tuviéramos en cuenta la AOD libre de deuda ésta se hubiese situado en el 0,40% del PIB español. www .odg. cat 3