20 • Del 17 de Diciembre de 2012 al 13 de enero de 2013 Salut i Força entrevista DR. MORENO ESPECIALISTA EN TRAUMATOLOGÍA Y CIRUGÍA ORTOPÉDICA DE RED ASISTENCIAL JUANEDA “Esta técnica ya ha conseguido resultados espectaculares entre deportistas de élite de la NBA” En la última década, los avances de la Medicina no han dejado de sorprendernos, aunque lo más importante llega ahora, y es que todas estas técnicas ya están al servicio del paciente en Red Asistencial Juaneda. Hoy, les hablaremos de cómo con la ayuda de nuestro propio cuerpo podemos combatir la Osteoartritis o dolor articular. Años de investigación resumidas en una innovadora técnica regeneradora que, en muchos casos, evita la colocación de implantes y hasta las intervenciones quirúrgicas. De esta nueva técnica que se está realizando, desde hace un año, en Clínica Juaneda hablamos con su impulsor, el Dr. Moreno. REDACCIÓN P.- Médico, biólogo, especialista en Traumatología y Cirugía ortopédica, y a día de hoy, centrado en la medicina de nueva generación. Concretamente, en técnicas de factores de crecimiento. ¿Cómo surge este interés por lo que, hoy, se considera la vanguardia de la medicina? R.- Soy un biólogo-traumatólogo apasionado de la cirugía artroscópica, y que desde hace un año dedico mi tiempo a compaginar Medicina y Biología en la que llamamos terapia Orthokine. Una técnica indicada para los casos de osteoartritis, que se basa en la utilización de proteínas bioreparadoras que forman parte de nuestro propio cuerpo y que tienen efectos antiinflamatorios y regeneradores. Para que se entienda mejor, estos factores de crecimiento estimulan la formación de colágeno y de esta forma, ayudan a la reparación del tejido lesionado. Es una terapia que se utiliza en el dolor articular, en sus problemas degenerativos y problemas de los tendones. P.- Entonces, esta nueva técnica está pensada para el tratamiento del dolor articular ¿Cómo lo podemos tratar? R.- En nuestro día a día, la mayoría de nosotros aspiramos a un ideal que es el de seguir siendo independientes y activos conforme nos hacemos mayores. Aunque, a menudo, nos enfrentamos a problemas articulares, causados en algunas ocasiones por la degeneración del cartílago (Osteoartritis), que nos provoca dolor al realizar las actividades más cotidianas. Hasta ahora, el tratamiento convencional se ha limitado, en general, a reducir el dolor el mayor tiempo posible mediante fármacos, inyecciones y todo tipo de tratamientos. Pero, hoy la ortopedia molecular nos permite dar un paso más, hablamos de terapias con excelentes resultados y que, a groso modo y para que nos entiendan nuestros lectores, se basan en la extracción de la propia sangre del paciente, su tratamiento con técnicas de última generación y su posterior infiltración en el paciente. Sin efectos secundarios y garantizando una incorporación inme- diata a la vida cotidiana. P.- Ha nombrado la especialidad de ortopedia molecular ¿Cuáles son sus objetivos? R.- La ortopedia molecular busca comprender las causas biológicas de los desórdenes músculo-esqueléticos y desarrollar tratamientos que intervengan y modifiquen los factores causantes de la enfermedad. Debemos tener en cuenta que todas las reacciones en nuestro cuerpo son procesos bioquímicos que comparten un objetivo fundamental: mantener el equilibrio a fin de garantizar la salud del organismo. En el caso de la osteoartritis, el mecanismo no se trata simplemente de una degeneración mecánica del cartílago, sino que se trata de una enfermedad compleja que puede afectar a cualquiera. P.- Entonces, ¿cree qué es posible influir sobre los mecanismos de la enfermedad que causan la osteoartritis? ¿Se podría retrasar o incluso, detener estos procesos degenerativos? R.- Estos son los retos a los que se enfrenta la ortopedia molecular. Uno de estos enfoques terapéuticos es la terapia Orthokine. En este tipo de tratamiento las proteínas inmunes, que combaten el dolor y la inflamación se generan a partir de la propia sangre del paciente. Se conocen como proteínas inmunes endógenas, es decir, que derivan de o se originan dentro del propio cuerpo del paciente. Además, tienen la propiedad de proteger el cartílago y mejorar la movilidad de la articulación. Este tratamiento se usa fundamentalmente para tratar la osteoartritis en rodilla, cadera y otras articulaciones. Es una innovadora técnica regeneradora que, en muchos casos, evita la colocación de implantes y hasta las intervenciones quirúrgicas. o un coche, es doloroso. Sin olvidar que cuando el deterioro de la capa del cartílago ha llegado a determinado punto, el hueso subyacente también se verá afectado. P.- ¿Cuál es el perfil y cuáles son las causas por las que una persona padece osteoartritis? R.- El perfil lo tenemos todos, ya que es parte del proceso natural de envejecimiento y es normal que el cartílago en las articulaciones se deteriore con el tiempo. Ala vez, también lo padecen, a edades más tempranas, personas con sobrepeso y deportistas de élite. Puede afectar a las articulaciones de rodillas, caderas, tobillos, dedos de pies y manos, muñecas, hombros, codos y columna. Si hablamos de las causas, la osteoartritis puede desencadenarse por una variedad de factores que van desde la excesiva presión sobre las articulaciones debida al sobre-uso, malas posturas, desalineación músculo-esquelética a las lesiones musculares. Los primeros signos de la osteoartritis de la articulación de la rodilla son fáciles de detectar: el dolor, la rigidez o tirantez, especialmente al levantarse por la mañana o después de periodos largos de estar sentado o tumbado. Así como, el dolor después de estirar la articulación de la rodilla. También pueden aparecer sonidos de crujido o rechinamiento. Rango limitado de movimiento. Dolor asociado a los cambios de tiempo. Conforme la enfermedad progresa, el dolor también puede aparecer por la noche, cuando la persona está descansando. Subir y, sobretodo, bajar las escaleras empieza a resultar difícil. Subir o bajar de un autobús P.- Los avances de la Medicina no dejan de sorprendernos, ¿nos podría explicar en qué consiste este tratamiento? R.- Es sencillo, el paciente acude a nuestra consulta y le realizamos una sola extracción de sangre, que nos resultará suficiente durante todo el tratamiento. A partir de ese momento, ponemos en marcha la terapia Orthokine, que consiste en obtener "proteínas antiartritis" y factores de crecimiento de la sangre del propio paciente, para posteriormente volver a inyectar estas sustancias endógenas de nuevo en la articulación afectada. Desde el punto de vista médico, la sangre se extrae mediante una jeringa especial que se incuba durante varias horas a temperatura corporal (37º). Durante este tiempo, las células sanguíneas en la jeringa son estimuladas mediante un complejo mecanismo para producir altos niveles de las p ro t e í n a s "buenas". Después de esto, la muestra se centrífuga para separar los componentes sólidos de la sangre del suero. El suero contiene una elevada concentración de las proteínas "buenas" del propio paciente -endógenas- que son beneficiosas para el tratamiento de la osteoartritis. Posteriormente, se congelan hasta que vayan a ser infiltradas. Finalmente, se cita al paciente en la consulta, llenamos la jeringa con el suero tratado y lo administramos directamente en la articulación afectada mediante una inyección. El tratamiento consta de 4 a 6 inyecciones, que se suministran semanalmente.