Exhumarán restos de estudiante asesinado en 1967 por gobierno de Raúl Leoni Caracas, 03 May. AVN .- Los restos del joven Alberto Alvarado, quien para el momento de su asesinato, en 1967, era estudiante y formaba parte de un frente guerrillero, serán exhumados este miércoles en el sitio donde fue sepultado clandestinamente, según informes aportados por un campesino testigo del crimen. La acción fue anunciada este martes por la comisión de trabajo que promueve el castigo contra los crímenes de Estado ocurridos durante los gobiernos del período denominado cuarta República (1958-1998), liderados por los partidos de derecha Acción Democrática (AD) y Copei. El activista Enrique Pérez, integrante de la citada comisión, dijo que la exhumación será efectuada por personal especializado del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), con la supervisión de representantes del Ministerio Público y de la Defensoría del Pueblo. Alberto Alvarado se unió a la lucha guerrillera surgida en los años 60 como repudio a la postración asumida por la dirigencia política del momento que había liderado el movimiento cívico militar contra la dictadura de Marcos Pérez Jiménez (1948-1958), pero que giró luego a favor de los intereses estadounidenses en el país. Integraba el frente guerrillero Ezequiel Zamora. Tras un enfrentamiento, el estudiante de 18 años se recuperaba en una vivienda de la localidad Chuspita Arriba, parroquia El Guapo, municipio Páez del estado Miranda. Según los testimonios, una cuadrilla del Ejército llegó a la vivienda donde Alberto Alvarado se escondía y se lo llevó detenido. Minutos después sonaron los disparos. Un campesino del sector, quien hoy tiene 55 años y era un niño de 11 para entonces, se adentró en la montaña hacia donde se habían llevado al joven guerrillero y pudo identificar el sitio donde lo sepultaron, el cual marcó para no perder de vista. Cuarenta y cuatro años después, Tito Morales, aquel niño que se convirtió en testigo del crimen, escuchó hablar de la comisión especial, así que buscó la forma de comunicarse para reportar su experiencia. Tito Morales será quien guíe a los especialistas que este miércoles irán al lugar para sacar los restos de allí, verificar la identidad de Alberto Alvarado, desaparecido, y devolverlos a sus familiares. Historias como estas seguirán desvelándose con más frecuencia, según apuntó el activista Enrique Pérez, quien también forma parte del colectivo campesino Cimarroneras de Barlovento. “Hay varios testimonios de asesinados y sepulturas clandestinas como esta en la zona, porque por allí operaba el frente guerrillero Ezequiel Zamora. La ayuda de los campesinos ha sido y seguirá siendo fundamental para comenzar a desenterrar los muertos de los adecos y los copeyanos”, manifestó. La figura del desaparecido “se estrenó” en América Latina con el gobierno venezolano de Raúl Leoni (1964-1969). Posteriormente, esta práctica se impuso en otros países de la región mediante dictaduras de derecha que se dedicaron a apoyar a Estados Unidos en su afán por exterminar todo movimiento de izquierda. Powered by TCPDF (www.tcpdf.org)