A ñ o 1 5 · N ú m e r o 7 9 0 · D o m i n g o 2 8 d e Ag o s t o d e 2 0 1 6 La lección de la higuera «Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí.» — Sa l m o s 5 1 : 1 0 Po r Diana Díaz de A zp iri A quella mañana de primavera, Jesús caminaba con sus doce discípulos de regreso a Jerusalén, cuando sintió hambre. Al ver de lejos una higuera frondosa, se acercó a ella, enseñándonos de esa forma una gran lección. El día anterior había sido muy intenso. Había hecho la entrada triunfal a la ciudad de Jerusalén en el asna y el pollino en medio de las multitudes que gritaban hosannas al Hijo de David, en lo que ahora nosotros conocemos como domingo de Ramos. En medio de la agitación de toda la ciudad fue recibido con honores y despliegues de júbilo, con palmas y mantos tendidos en el camino por donde iba pasando. Había entrado al majestuoso templo y, con gran indignación, echó fuera a todos los mercaderes, volcando las mesas de los cambistas y los asientos de los que vendían las palomas, a la vez que les recriminaba sus actitudes con las que deshonraban la «casa de oración» convirtiéndola en «cueva de ladrones». Estos mercaderes ocupaban el atrio del templo vendiendo sus animales para los sacrificios a precios muy elevados, aprovechándose de las personas que venían de lejos; y los cambistas abusaban también de los extranjeros que no sabían el tipo de cambio de la moneda del templo. Este comercio deshonesto en el templo naturalmente airó a Jesús. Había sanado también a muchos ciegos y cojos que se habían acercado a Él en medio de las aglomeraciones de la gente; había soportado la furia de los sacerdotes que fueron testigos de todas las maravillas que hacía y de estos cantos de hosannas de la muchedumbre, y les había respondido a sus preguntas intransigentes. Ya entrada la noche, se fueron a hospedar a Betania. Mateo nos cuenta de aquella mañana en que de nuevo venían a Jerusalén: «Al ver una higuera junto al camino, [Jesús] se acercó a ella, pero no halló nada en ella sino sólo hojas, y le dijo: Nunca jamás brote fruto de ti. Y al instante se secó la higuera» (Mateo 21:19). Hay muchas especies de higueras, pero la mayoría dan frutos dos veces al año: en primavera y en invierno. En invierno se da un pequeño fruto no comestible, las plantas permanecen sin hojas y el fruto nace directamente de las ramas del año anterior. Sin embargo, en primavera la higuera retoña con ramas tiernas, de las cuales brotan las hojas y el fruto al mismo tiempo. El higo, particularmente dulce, nace de la axila de la hoja. Cuando una higuera no tiene ni siquiera las «brevas», se sabe entonces que no dará fruto en todo el año. ❧ Bienvenido a La Vid La Vid somos un grupo de familias que nos reunimos cada domingo con el fin de encontrarnos con Dios. Aquí no se predica una religión, sino que creemos firmemente que una relación personal con Dios es lo que nos lleva a vivir una vida en abundancia. ❧ Busca tiempo para orar en familia Aunque es muy importante la relación individual con el Señor, también lo es tener un mismo sentir en el seno de la familia. Busca a diario momentos para compartir y juntos buscar la presencia del Señor. ❧ Muestra Su luz Que la luz del Señor te haga brillar como el resplandor del firmamento (Daniel 12:3). ❧ La higuera en cuestión iba contra natura. Daba todas las señales de tener abundante fruto por su frondosidad; sin embargo, al examinarla de cerca, se podía constatar su infecundidad. Aparentaba lo que no era. Resultó ser un fiasco. Definitivamente, Jesús supo desde lejos lo que esta higuera era en realidad, pero se acercó para escenificarles a los discípulos la parábola de la higuera, que ya les había contado una vez (Lucas 13:6-9). Continúa en la Pág. 2 Intégrate a un grupo de estudio bíblico en hogares. Consulta las direcciones en internet: www.lavid.org.mx ❧ La Vid somos un grupo de familias que buscamos vivir bajo los principios de Dios, aprender de Su palabra y recibir Su bendición ❧ 2 E l M e n s a j e r o · 2 8 d e Ag o s t o d e 2 0 1 6 La lección de la higuera Del Viñador Continúa de la Pág. 1 Ciertamente los hechos que vivieron el día anterior habían entristecido a Jesús. Ese majestuoso templo junto con sus altos líderes y sacerdotes, al igual que la higuera, impresionaban a primera vista, pero sus actividades y sus sacrificios eran infructuosos porque no se ofrecía una adoración genuina a Dios. Jesús estaba expresando su enojo contra una religión sin sustancia. La muchedumbre que lo aclamaba con hosannas también se parecía a la higuera y pronto evidenciaría su falta de fruto, al ser ellos mismos los que clamarían por su crucifixión. Juan el Bautista, cuando empezó su ministerio preparando el camino del Señor, instaba a la gente a arrepentirse y les decía: «Dad frutos dignos de arrepentimiento» (Lucas 3:8). ¿Qué quería decir con esto? Cuando nosotros venimos a los pies de Jesús en un sincero arrepentimiento, nuestra vida tiene que experimentar un cambio verdadero. Este cambio, que involucra actitudes, conductas, pensamientos, sentimientos... son los frutos de arrepentimiento. La confesión de pecados y el cambio de vida van de la mano. El arrepentimiento sincero tiene dos lados: alejarse del pecado y acercarse a Dios. No podemos decir que amamos a Dios y vivir como nos da la gana. Nuestro profundo amor a Dios nos debe mover a obedecerlo. Jesús les dijo a sus discípulos: «Por sus frutos los conoceréis» (Mateo 7:16). Para cualquier persona que se acercara a la higuera, sería evidente que tal árbol era estéril, improductivo e inservible, debido a su carencia de fruto. Sólo estaba ocupando un espacio e inutilizando la tierra. ¡Cuántas veces somos como esta higuera! Aparentamos amar a Dios; sin embargo, hacemos lo contrario. Si decimos que somos cristianos y tenemos a Jesús en nuestro corazón, nuestras acciones deben estar acordes con lo que decimos, nuestra conducta debe avalar lo que dice nuestra boca y nuestras obras tienen que demostrarlo. No olvidemos que llegará el día, en que el Señor Jesús se va acercar a nuestras vidas a buscar fruto. Jesús tiene hambre, como aquella mañana de primavera, y quiere deleitarse con la dulzura de nuestros frutos. No hay nada que le agrade más, que un fruto de obediencia y arrepentimiento, nacido de un corazón contrito. Y tú, ¿tendrás algo que ofrecerle al Agricultor? Últimos mensajes grabados... Estos son los títulos de los últimos cuatro mensajes, que están disponibles en CD. La entrega se realizará en la librería La Vid o el siguiente domingo en la reunión. 21/8/16 Una vida que persevera 14/8/16 Sé un ganador Rodolfo Orozco Rodolfo Orozco 7/8/16 Sin temor Rodolfo Orozco 31/7/16 Palabras de aliento Juan José Campuzano Entrega total «Para vivificar el espíritu de los humildes y el corazón de los contritos.» L rorozco@lavid.org.mx Oficinas de La Vid 8356-1207 y 8356-1208 Auditorio La Vid La Huasteca — Isaías 57:15 a fe tiene piernas... Hace años me contaron acerca de un equilibrista que cruzaba el río Niágara, empujando una carretilla y andando sobre una cuerda. Miles de personas lo aplaudían y animaban. Puso un saco de tierra de cien kilos en la carretilla, cruzó por la cuerda y luego cruzó de vuelta. Luego, volviéndose a la muchedumbre, preguntó: «¿Cuántos de ustedes creen que yo puedo cruzar a un hombre en mi carretilla?». Un hombre muy entusiasta estaba bien seguro de que el equilibrista podía hacerlo. El de las proezas lo señaló con el dedo: «Usted será el primero». El hombre desapareció del lugar como por arte de magia. El creía que creía, pero no estaba dispuesto a subir a la carretilla. Es así en cuanto a Cristo. Muchos dicen que creen en Él y que le siguen, pero nunca han subido a la carretilla. Nunca se han comprometido totalmente, entregando al Señor el cien por ciento de su vida. Para conocer el gozo y la paz que solo Él da, hay que entregarle la vida completa. — Billy Graham Tendremos el tiempo de Comunión El próximo domingo 4 de septiembre tendremos el privilegio de acercarnos a la mesa del Señor en el tiempo de Comunión. Dará inicio a las 10 a.m., es decir, antes de la reunión que comienza a las 11. Haz planes para llegar a tiempo. DIRECTOR Rodolfo Orozco E L M ENSAJERO Boletín Informativo Rodolfo Orozco Consejo Editorial Patricia G. de Sepúlveda Edición y diseño Diana Díaz de Azpiri Colaboradora editorial E-mail: elmensajero@lavid.org.mx LUNES • Reunión de oración para hombres 8:00 - 9:00 pm Auditorio La Vid MIÉRCOLES • Reunión de oración para mujeres 10:30 - 11:30 am Auditorio La Vid JUEVES • Jóvenes de prepa, universitarios y profesionistas menores 8:00 - 9:15 pm Auditorio La Vid VIERNES • Xion - Reunión para adolescentes • Mega ( de 9 a 11 años) • Giga ( de 12 y 13 años) • Tera ( de 14 a 16 años) 6:30 - 8:00 pm • Profesionistas 8:30 - 9:45 pm Auditorio La Vid DOMINGO • Reunión general 11:00 am Auditorio La Vid