12 El Hurto permitido, si no se arrepiente mientras tanto. Y siempre su ambition de riqueza lo seduce a robar mas para impedirle el arrepentimiento, y siempre su boca denuncia su amor hacia el dinero. Asi ocurrio en los dias del Rey Shlomo, que tres personas iban por el camino cuando oscurecio y los sorprendio el Shabat, y como poseian gran cantidad de oro y plata temieron de ladrones. Decidieron colocar todo el dinero en una bolsa, y fueron juntos a cierto lugar, y alii cavaron y escondieron el dinero, y volvieron al lugar anterior donde pasaron el Shabat. Durante la noche de Shabat se levanto uno de los viajeros y tomo la bolsa con el dinero, y la escondio en otro lugar, y volvio a acostarse. Al concluir el Shabat se dirigieron los tres viajeros al lugar donde escondieron el dinero, y al no encontrarlo, cada cual acuso a su companero. Fueron los tres delante del rey Shlomo y le contaron lo acontecido, y el rey les pidio que retornen al dia siguiente para revelar el enigma. A l dia siguiente retornaron, y cuando vio desde la ventana que se aproximaban se mostro perplejo, y entraron a su despacho, y el Rey Shlomo estaba concentrado en su asunto e indiferente hacia los tres hombres, hasta que despues de mucho tiempo, les pregunto que deseaban, y los hombres le respondieron que deseaban resolver el enigma del dinero robado. Les dijo el rey que en ese momento se encontraba muy confundido por un asunto: Una muchacha iba sola por el camino, y un hombre que pasaba por el lugar, fascinado por su belleza, la quiso violar. L a muchacha le rogo que no la toque sin casarse con ella. Y si tu deseas, le dijo, me casare contigo y mis padres no se opondran. Le juro que consentia en casarse con el y entonces la libero y la ayudo a llegar a su casa. Despues de un tiempo, el hombre olvido lo ocurrido, y se caso con otra joven. Mientras tanto la muchacha cumplio con su juramento, y su padre despues de un tiempo la caso con un joven al cual entrego una importante dote, y la hija se dejo casar, y se avergonzo de contar acerca de su juramento. Cuando el novio la llevo a su casa, la muchacha le pidio que no la toque pues le jure a cierto hombre que me iba a casar con el, y el vive en una aldea cercana. Decidieron juntos visitar al hombre y obtener la anulacion del juramento. Fueron en medio de la noche, y fueron sorprendidos por un asaltante en el camino, que quiso asesinar al novio, y violar a la novia, y