LA POESÃA LÃRICA EN LA PRIMERA MITAD DEL S. XX Introducción Desde los primeros años del S. XX, se observó la presencia de un grupo que rechazaba el estilo poético anterior (decimonónico), demasiado preocupados por la forma y tan alejados de lo normal que se les consideraba incluso extravagantes, y se les llamó despectivamente modernistas. Más tarde, comenzaron a diferenciar entre modernistas (especialmente esteticistas), y Generación del 98 (mucho más crÃ-ticos), aunque ambos compartÃ-an su rebeldÃ-a ante los valores de la sociedad burguesa y su originalidad, que a veces los hacÃ-a tomar posturas extravagantes y provocativas. La poesÃ-a modernista El modernismo es un movimiento literario de Hispanoamérica (1885 − 1915) y su autor más famoso es Rubén DarÃ-o. Sus caracterÃ-sticas principales son el esteticismo (preocupación por la belleza estética) y el escapismo (evasión en el espacio y tiempo). Al principio, el modernismo mostró un rechazo a la tradición poética española (Excepto a Bécquer), asÃ- que se fijaron principalmente en los movimientos franceses (simbolismo, etc) Los temas modernistas son dos: el modernismo interior y el exterior. Los dos cuidan la belleza estética para escapar de la realidad, pero el modernismo interior expresa la intimidad del poeta y se acerca al romanticismo en sus sentimientos de melancolÃ-a, tristeza y angustia existencial. Los ambientes son otoñales, solitarios, crepusculares El modernismo exterior se remonta a la época medieval o clásica, y recuerda leyendas de la mitologÃ-a en lugares exóticos o en Grecia y Roma. Los ambientes son refinados, aristocráticos y ParÃ-s se considera el centro. El amor y el erotismo también se hacen presentes, y el cisne es el sÃ-mbolo de la belleza y esplendor. El tema Americano se trata como una forma de evasión hacia el pasado, pero después se usa para buscar sus raÃ-ces. El lenguaje modernista trata del deseo de alcanzar la belleza formal. El léxico es rico y variado, y a menudo incluye voces extranjeras, cultismos. Se buscan valores sensoriales y por ello son muy abundantes las referencias léxicas al color, a la luz, al sonido. Se usan muchas sinestesias y aliteraciones. Imágenes originales y sorprendentes también son temas del modernismo. La métrica es muy importante por sus aportaciones, y la musicalidad y el ritmo son sus principales objetivos. Se usan sobre todo versos alejandrinos, los de doce, los de once y los de ocho. Se crean nuevas estrofas o se modifican las ya existentes. El encabalgamiento es muy usado, y se cuidan mucho los acentos para crear pies acentuales al estilo clásico. El Modernismo Español se caracteriza por su tendencia al intimismo y al simbolismo, y por su menor preocupación por la forma. Los más destacados son Manuel Machado, Villaespesa y Marquina, y otros reciben su influencia en sus primeras etapas (Ant. Machado, JR Jiménez o Valle−Inclán. El Modernismo Hispanoamericano evoluciona desde el preciosismo formal hasta el intimismo. Caso de Rubén DarÃ-o (Nicaragüense). Su obra es el espÃ-ritu del modernismo y muestra la evolución de 1 éste: Azul (1888), Prosas Profanas (1896) y Cantos de Vida y Esperanza (1905). Los movimientos de Vanguardia Son todos los movimientos que luchan contra lo establecido y tratan de impulsar diversas manifestaciones artÃ-sticas por nuevos caminos. Apenas hicieron obras de calidad, pero prepararon el terreno para figuras posteriores muy relevantes. El Vanguardismo llegó a España en 1918 con Vicente Huidobro, de ParÃ-s, y vio en España un ambiente propicio para el vanguardismo, especialmente en Ramón Gómez de la Serna. Los movimientos más importantes en España fueron: • El Creacionismo: Pretende que el poeta evite la descripción de la naturaleza y cree realidades nuevas e independientes (Gerardo Diego [Columpio] y Juan Larrea) • El UltraÃ-smo: Pretende una renovación radical del lenguaje y el ver la poesÃ-a de otro modo. Para ello, cuidan mucho la imagen poética y eliminan la anécdota y el sentimentalismo. Disponen los textos de manera que visualmente se parezcan al contenido del poema (Guillermo de Torre) • El Surrealismo: El más importante, proyecta teorÃ-as sobre el inconsciente y la interpretación de los sueños de FreÃ-d. El escritor intentará liberar al lector de sus ataduras racionales, sociales, morales y estéticas que lo condicionan. SurgirÃ-an asÃ- con libertad plena las fantasÃ-as, obsesiones, sueños o deseos ocultos del artista. Usan la escritura automática (plasmar palabras que le vienen al escritor a la cabeza directamente, sin ningún tipo de control racional), pero los poetas surrealistas españoles lo sometieron a una alta exigencia estética. La Generación del 27 Lo forman un grupo de autores caracterizados por situarse • Entre lo emocional y lo intelectual • Entre una concepción romántica y clásica • Entre lo popular y lo culto • Entre la poesÃ-a humana y la poesÃ-a pura • Entre lo español y lo universal • Entre renovación y tradición Los temas más tratados fueron los relacionados con el ser humano: Amor (plenitud del individuo, con un sentido liberal), universo, destino y muerte. Estaban influenciados claramente por las vanguardias literarias. La naturaleza aparece a veces con una visión panteÃ-sta. La cuidad aparece unida a la visión futurista, impregnada de optimismo, aunque también conservan el aspecto negativo del desarrollo urbano. El lenguaje del grupo poético del 27 se caracteriza por su estilo cuidado. Cultivan insistentemente la imagen tradicional y visionaria, que relaciona los objetos por las emociones que despiertan (y no por su semejanza fÃ-sica). Respecto a la métrica, combinan formas tradicionales (romances, sonetos) con el empleo del verso libre y la consecución del ritmo por el lugar que ocupan las palabras en el poema (influencia de las vanguardias) Miguel Hernández Pastor de Orihuela, autodidacta, cuya vocación poética lo llevó a Madrid en 1931, donde fue apadrinado por los miembros de la Generación del 27. Compartió con ellos el gusto por lo popular, el uso de formas clásicas, la admiración hacia Góngora y el afortunado empleo de la metáfora. Su gran preocupación social culminó con su activa participación con el ejército republicano durante la Guerra Civil. Destaca su 2 obra El Rayo que no cesa (1936) LA GENERACIÓN DEL 98: CARACTERÃSTICAS Introducción: Requisitos Generacionales El nombre de Generación del 98 lo puso AzorÃ-n en 1913 para referirse a una serie de escritores que tenÃ-an en común un espÃ-ritu de protesta y un profundo amor al arte. Los primeros escritores de este grupo fueron: Unamuno, Baroja, Maeztu, Valle Inclán y Antonio Machado. Pedro Salinas aplicó requisitos generacionales a este grupo, propuestos por Petersen: • Nacimiento en pocos años distantes (Once años entre Unamuno y Ant. Machado) • Formación Intelectual Semejante (Todos eran autodidactas) • Relaciones personales entre ellos. AzorÃ-n, Baroja y Maeztu formaban El Grupo de los Tres. En 1901 redactaron un manifiesto para denunciar los problemas de España. El fracaso de su idea ocasionó sus posturas más idealistas. En general, mantuvieron posturas de protesta en su juventud, pero evolucionaron en su madurez: Unamuno, contradictorio, Baroja, escéptico, Maeztu, derechista tradicional. La evolución de Valle − Inclán es distinta, porque pasó de ser conservador a ser progresista. Machado siempre estuvo cercano a Izquierdas. • Participar en Actos Colectivos: En 1901 viajaron a Toledo (Homenaje a Larra). En 1902, homenaje a Baroja (por su novela Camino de Perfección). En 1905, protestaron por el premio Nobel a Echegaray. • Acontecimiento Generacional: Les unió las pérdidas de las colonias americanas del 98. • Presencia de un guÃ-a: Tomaron como maestro a Unamuno, pero se vieron influenciados también por Schopenhauer y Nietzsche. • Lenguaje Generacional: Lo que les une es la tendencia a formar un estilo personal en cada uno de ellos y rechazar el estilo anterior. Temas Su tema fundamental es el problema de España, y el pesimismo que trajo la pérdida de las colonias. Reflejaron en sus poemas el atraso del paÃ-s, de sus pueblos, de sus gentes, por ellos europeizaron España. Más tarde, cambiaron las tornas y hablaron de Españolizar Europa. La búsqueda de las raÃ-ces les condujo a valorar la historia, sobre todo las de la gente sencilla, como Unamuno definió Intrahistoria Castilla y el paisaje castellano llamaron la atención de los noventayochistas. Su visión subjetiva y lÃ-rica de la tierra castellana refleja su estado de ánimo. Se critica el atraso y la pobreza, pero también se exalta de manera lÃ-rica el paisaje. Los temas existenciales y religiosos también preocuparon a los del 98. Son considerados precursores del existencialismo, en su obsesión por el paso del tiempo, por la muerte, el sentido de la existencia Es evidente en este sentido, la influencia de filósofos de esa época. El estilo La generación del 98 rechazó los estilos anteriores, aunque admiró en ciertos aspectos a Galdós, Bécquer o RosalÃ-a de Castro. Fue influida por clásicos (Cervantes, Quevedo) Recuperó leyendas y tradiciones, y recurrió a menudo a lo medieval. Su estilo es sobrio y aparentemente sencillo, pero muy cuidado. Los autores usan terruñeras (palabras rescatadas del pueblo) 3 Frente al objetivismo decimonónico, se muestran subjetivos y usan el lirismo. Dieron más flexibilidad a los géneros literarios que usaron. Destacan las Nivolas de Unamuno, o el teatro de Valle − Inclán. ANTONIO MANCHADO BiografÃ-a Nació en Sevilla en 1875, en una familia culta y liberal. Se educó en la Institución de Libre Enseñanza, lo que marcó su espÃ-ritu liberal. Se trasladó a Soria y se casó con Leonor Izquierdo, que murió de tuberculosis, y Antonio se fue a Jaén. De nuevo se trasladó para ejercer la docencia a Madrid y conoció a Pilar Valderrama, su amor imposible, por estar casada, y a la que dedicó muchos de sus poemas. Con la guerra Civil, se trasladó a Francia, donde murió en 1939 Obra poética Su primer libro, Soledades (1903), de estilo modernista, fue depurado y apareció como Soledades, GalerÃ-as y otros poemas (1907), eliminando todo lo modernista y apartándose de ese estilo. El tono del libro es melancólico, y hay en él una veta romántica becqueriana, que perdura en toda la obra posterior del autor. Los temas esenciales son el tiempo, la muerte y Dios. También observamos el tiempo, el amor, el paisaje, el sueño Aparecen paisajes seleccionados para mostrar el estado de ánimo del poeta. El libro está lleno de sÃ-mbolos para representar realidades más perennes que el poeta (Ocaso para referirse a la tarde, por ejemplo, la cual se refiere al momento del dÃ-a que está acabando, o a la propia vejez). También representaba con la tarde el alma y su estado de ánimo acompañándola de sustantivos (roja, clara) Otro sÃ-mbolo repetido es el agua, que si se representa en movimiento simboliza el paso del tiempo, y si se representa estancada simboliza la muerte. Está muy cercano al existencialismo por los temas y los sÃ-mbolos que usa. La forma es sencilla y no abusa de figuras retóricas, aunque si emplea mucho el adjetivo. CAMPOS DE CASTILLA (1912) disminuye la subjetividad, y se centra en describir un paisaje auténtico y menos simbólico. Con esta obra demuestra el descubrimiento de la tierra castellana y sus gentes y tradiciones, y la capacidad de observación y el amor al paisaje. El tema del libro es el paisaje castellano, contrastando con gentes castellanas. Desde la muerte de Leonor, en estos poemas se nota más subjetividad. También publicó Proverbios y Cantares, que encierra pensamientos filosóficos y morales. Además, incluye el poema La Tierra de Alvar González, donde recoge una leyenda de las tierras sorianas y muestra el tema de la envidia y la ambición. Machado busca la brevedad y la esencia, y para ello disminuye el uso de verbos y aumenta la nominalización. 4 Ya en su madurez, publicó PoesÃ-as de Guerra, de la guerra civil, dedicadas a Pilar Valderrama Obra en prosa Escribió artÃ-culos y diálogos de prensa, bajo el nombre de Juan de Mairena, Los Complementarios(permiten ahondar en su pensamiento), y las obras Juan de Mañara, La Lola se va a los puertos, La duquesa de BenamejÃ- y La Prima Fernanda, de teatro. JUAN RAMÓN JIMENEZ BiografÃ-a Juan Ramón Jiménez (1881 − 1958), poeta lÃ-rico de la literatura universal del S. XX, que obtuvo en 1956 el Premio Nóbel de Literatura. PertenecÃ-a a una familia acomodada de Huelva, Su rasgo más importantes fue el repentino fallecimiento de su padre (lo que le hace ser más susceptible al tema de la muerte, y sentir un miedo obsesivo hacia ella) Trayectoria Poética Caben distinguir cuatro etapas: • La primera etapa, en la que siente la inspiración romántica y modernista, y escribe poesÃ-a muy adornada, con relación a sentimientos de tristeza y melancolÃ-a (Arias Tristes) • La segunda etapa, en la que prescinde de cualquier tipo de adorno innecesario para dejar paso a una poesÃ-a que él mismo llamó PoesÃ-a desnuda, en la cual se muestra únicamente lo que el autor quiere mostrar, prescindiendo de adornos y ornamentaciones que aparten al lector del tema que quiere transmitir. • La tercera, en la que el poeta cae en un estado cuasi−mÃ-stico en el que se siente fundido con ese conglomerado espiritual de eternidad/belleza/plenitud, que Juan Ramón bautiza con el nombre de Dios. AquÃ- trata sobre todo del júbilo que le produce haberse unido a ese dios terrenal, identificado con todo lo bello. • La cuarta y última etapa, en la que el poeta usa mucho la asociación libre y vive nostálgico por sus años de éxtasis. También fue un gran prosista, como lo demuestra con su obra Platero y yo Estilo La poesÃ-a de J.R. Jiménez se alimenta de experiencias interiores del autor, en perpetua búsqueda de la perfección, de la expresión de la belleza y de sus propios sentimientos de plenitud, usando mucho la sinestesia y tratando de detallar sus sensaciones. 5