¡El derrame cerebral es un ataque al cerebro! El derrame cerebral está en el tercer lugar de las mayores causas de muerte en América y la causa número 1 de invalidez entre las personas adultas. Cada año se registran aproximadamente 750.000 casos de estos ataques in los Estados Unidos. Afortunadamente existen tratamientos que pueden reducir en gran medida el daño causado; sin embargo, es importante identificar los síntomas y vaya al hospital inmediatamente. Si usted puede llegar al hospital durante los primeros tres horas, es posible prevenir la invalidez de un derrame cerebral. El derrame cerebral es un “ataque al cerebro” cortándole el suministro de sangre y oxígeno vitales a las células del cerebro que controlan todo lo que hacemos –desde hablar hasta caminar y respirar. La mayor parte de los derrames cerebrales ocurren cuando coágulos de sangre bloquean, o cuando la formación gradual de placas y los depósitos grasos tapan las arterias. Algunos derrames cerebrales pueden tener como causa el estallido de las arterias cuando puntos débiles rompen las paredes de los vasos sanguíneos. La buena noticia es que muchos derrames cerebrales pueden evitarse con medidas preventivas. Las orientaciones de prevención de la National Stroke Association (Asociación Nacional por el Derrame Cerebral) le ayudará a aprender cómo puede usted disminuir el riesgo de sufrir un derrame cerebral. Si usted sufre un derrame cerebral, hay nuevos tratamientos que pueden ayudar a detener el daño cerebral y la invalidez –pero usted debe reconocer los síntomas comunes del derrame cerebral y tratar esos síntomas como un caso de emergencia, llamando al 911 y obteniendo atención médica inmediatamente. Trate los derrames cerebrales como emergencias. Orientaciones de prevención de la National Stroke Association Los factores de riesgo del derrame cerebral son las cosas que tienen la probabilidad de causar derrames cerebrales. Algunos factores de riesgo para el derrame cerebral fuera del control de usted es tener más de 55 años de edad, ser hombre, ser afroamericano, o tener antecedentes familiares de derrame cerebral. Si usted tiene uno o más de estos factores de riesgo, es aún más importante que usted aprenda los cambios médicos y de su estilo de vida que puede hacer para evitar un derrame cerebral. Si usted fuma, deje de fumar. Fumar duplica el riesgo de sufrir un derrame cerebral. Si deja usted de fumar hoy, su riesgo de tener un derrame cerebral empezará a disminuir de inmediato. Si usted toma bebidas alcohólicas, tome con moderación. Beber un vaso de vino o cerveza, o una bebida mezclada todos los días, puede disminuir el riesgo de tener un derrame cerebral, siempre que no haya alguna razón médica por la que usted deba evitar el alcohol. Recuerde que el alcohol es una droga y puede reaccionar con otras drogas que esté usted tomando, y que el alcohol es dañino si se ingiere en dosis grandes. Si usted bebe demasiado, reduzca o deje de beber. Si usted no bebe, no empiece a beber. Incluya el ejercicio en su rutina diaria. Inclusa un poquito de ejercicio –una caminata a paso rápido, un paseo en bicicleta, nadar o trabajar en el jardín– puede producir una diferencia. Las personas adultas deben participar en actividades físicas de intensidad moderada durante 30 minutos cuando menos, cinco días a la semana o más, según los Centros para la Prevención y Control de Enfermedades. El ejercicio puede reducir el riesgo de que usted sufra un derrame cerebral. Antes de iniciar algún programa de ejercicio vigoroso, asegúrese de consultar con su doctor. Coma apropiadamente. Disfrute una dieta baja en sodio (sal) y baja en grasas. Al reducir el sodio y la grasa en su dieta, usted puede bajar su presión sanguínea, y todavía más importante, disminuir el riesgo de sufrir un derrame cerebral. Presión sanguínea: Conozca su escala. Si es elevada, trabaje con su médico para controlarla. • La presión sanguínea alta (hipertensión) es una de las causas más comunes de los derrames cerebrales. • Su presión sanguínea se expresa con dos números, por ejemplo, 120/80. El primer número, conocido como presión sanguínea sistólica, es una medida de la fuerza que ejercita la sangre sobre las paredes de los vasos sanguíneos cuando el corazón bombea. El segundo número, la presión sanguínea diastólica, es una medida de la fuerza que ejerce la sangre sobre las paredes de los vasos sanguíneos cuando el corazón tiene un descanso entre los latidos. Para las personas mayores de 18 años, la presión sanguínea óptima se considera 120/80 o más baja. Esto varía ocasionalmente con el ejercicio y con el estrés. La presión sanguínea más de la 120/80 se considera hipertensión. La presión sanguínea alta o hipertensión es una medida de 140/90 o más alta. • Haga que le revisen su presión sanguínea cuando menos una vez al año –con mayor frecuencia si tiene usted antecedentes de presión sanguínea alta, o si ha tenido anteriormente un ataque al corazón, un derrame cerebral, o si es usted diabético, tiene alguna enfermedad en los riñones, nivel alto de colesterol o si presenta sobrepeso. Si usted se encuentra en alguno de los grupos en riesgo, hable con su médico para controlar y disminuir más agresivamente su presión sanguínea. Fibrilación (arritmia) atrial: Sepa si usted la tiene. La fibrilación atrial (o AF, por sus siglas en inglés) es un tipo de latidos irregulares del corazón en el que las dos cámaras superiores del atrio del corazón empiezan a latir rápidamente e imprevistamente, causando que la sangre se acumule y potencialmente se forme un coágulo. Si el coágulo logra salir, puede transportarse del corazón al cerebro y causar un derrame cerebral. Su doctor puede detectar una AF verificando minuciosamente el pulso de usted. Recuerde: el hecho de que su pulso sea irregular, esto no significa necesariamente que usted tiene una AF. Su doctor puede determinar la causa exacta practicándole un electrocardiograma. La AF no es una emergencia, pero si usted cree que tiene un pulso irregular, consulte rápidamente a un médico. Colesterol y diabetes: Conozca sus datos. Si usted tiene un nivel alto de colesterol, obtenga el consejo de su doctor para reducirlo. • El nivel total de su colesterol (LDS y HDL) no debe ser superior a 200. Tendrá un riesgo muy alto de sufrir un derrame cerebral si su nivel de colesterol resulta superior a 240 (o si usted no lo conoce). Un nivel de colesterol entre 200 y 239 le coloca a usted en un riesgo moderado. • Si baja su nivel de colesterol, puede reducir su riesgo a un derrame cerebral. • Con frecuencia, el colesterol alto puede controlarse con dieta y ejercicio; algunas personas pueden requerir medicamentos. Ponga bajo control el azúcar de su sangre con las recomendaciones de su doctor. • Los depósitos de grasa pueden bloquear las arterias que le transportan la sangre del corazón al cerebro. Este tipo de bloqueo, si se le deja sin despejar, puede causar un derrame cerebral. La enfermedad que enferma las células, la anemia grave, u otras enfermedades, pueden producir un derrame cerebral si no se le aplica un tratamiento. • Su doctor puede prescribirle un programa de nutrición, cambios en su estilo de vida y medicinas que pueden ayudarle a controlar su diabetes. Los síntomas comunes del derrame cerebral son: • Adormecimiento súbito de la cara, de algún brazo, o de una pierna – especialmente en un lado del cuerpo. • Confusión repentina, problemas para hablar o para entender. • Problema repentino para ver con un ojo o con ambos ojos. • Dificultad repentina para caminar, mareos, pérdida del equilibrio o de la coordinación. • Un dolor agudo, repentino, de cabeza, sin una causa conocida. Nota especial: Ataque isquémico (disminución brusca de la circulación sanguínea) pasajero Algunas veces los síntomas pueden aparecer por un período muy breve pero después desaparecer, indicando posiblemente un ataque isquémico pasajero o TIA (por sus siglas en inglés). Aunque podría verse tentado a ignorarlos, es importante llamar al 911 siempre que experimente usted cualquier síntoma de un derrame cerebral. Aunque los TIA no son derrames cerebrales, indican un riesgo subyacente grave de ataque cerebral y son un aviso poderoso de que pronto puede seguir un derrame cerebral total. ¡El derrame cerebral es un caso de emergencia! Llame al 911 si usted ve o tiene alguno de estos síntomas. El tratamiento puede ser más eficaz si se aplica rápidamente. ¡Cada minuto cuenta! Este folleto está patrocinado de una beca educativa sin restricción de GE Healthcare Aprenda a reconocerlos síntomas del derrame cerebral. Llame al 911. Publicaciones de NSA están examinados para exactidud científico y médico. © National Stroke Association, September 2005 BC1S 09/05