LA RELACIÓN ENTRE EL ABURRIMIENTO E INTERNET: APORTES HEIDEGGERIANOS.1 THE RELATIONSHIP BETWEEN BOREDOM AND INTERNET: heideggerian contributions Por Maurício Fernando Bozatski, Docente y Coordinador do Curso del Filosofía de la Universidade Federal da Fronteira Sul (UFFS) campus de Chapecó, Santa Catarina, Brasil. E-mail: mauricio@uffs.edu.br y Elsio José Corá, Professor de la Universidade Federal da Fronteira Sul (UFFS) Campus de Chapecó, Santa Catarina, Brasil. E-mail:ejcora@hotmail.com 2 RESUMEN El filósofo Martín Heidegger (1889-1976) dedicó parte significativa de su obra al análisis del fenómeno del tedio (die Langeweile). Para eso, hizo diferenciación entre tres modos elementales de manifestación del tedio, a saber, a) entediarse por…; b) el entediarse acerca de…; c) el tedio para alguien. Por una cuestión metodológica, ese estudio toma como base las dos primeras formas de aburrimiento, buscando mostrar cómo ellas pueden esclarecer el fenómeno Internet y las relaciones humanas que en ella se expresan. A través de la indagación bibliográfica fue posible percibir que el aburrimiento parece estar presente o aparentemente, ser el destino de gran parte de las actividades humanas, sin embargo, las personas buscan evadirse de él, constantemente. Además de eso, el tiempo, o la percepción del paso del mismo tiempo, es un aspecto intrínsicamente ligado a la manifestación del aburrimiento. Así, se busca pasar el tiempo o abreviarlo en una tentativa de evadirse de esa condición que detiene y, por su vez, propicia un vacío existencial. Con la intención de edificar tal propósito, se hizo uso de la concepción heideggeriana del tedio. En este sentido, se 1 Revisión de traducción Elsa Ponce. Professor da Universidade Federal da Fronteira Sul (UFFS) campus de Chapecó, Santa Catarina, Brasil. E-mail:ejcora@hotmail.com 2 1 objetivó analizar como ese fenómeno cambia de forma acentuada a partir del uso que las personas hacen de la Internet. Se evidencia que, paradojalmente, internet debería ser un sitio donde las personas estén simultáneamente conectadas, sin intentan abreviar el tiempo, sino vivenciándolo con más intensidad y serenidad. La Internet, además de ser usada como simple pasatiempo, se transformó en un sitio de soledad, en el cual la mayoría de los escritores anónimos es también el único lector de sí mismo. Además de eso, la velocidad y la agilidad con que las informaciones son buscadas y leídas generan el desinterés por determinados asuntos aún más rápidamente, lo cual, de manera análoga, contribuye para la manifestación del aburrimiento. De ese modo, a partir de la capacidad de Internet de abreviar el tiempo, sumada a la naturaleza del hombre, se identifica la corta durabilidad de las relaciones humanas y la aceleración de las alteraciones de la percepción del mundo contemporáneo, las cuales no sufren exclusivamente influencias de la industria cultural, sino también de la propia condición humana, que camina para ser determinada y destruida por la conciencia de la limitación y de la soledad. Palabras-clave: Heidegger- Tedio-. Internet. Finitud. Abstract The philosopher Martin Heidegger (1889-1976) has devoted a significant part of his work to examining the phenomenon of boredom (die Langeweile). For this, distinguishes three basic forms of manifestation of boredom, namely, a) to be bored by… b) to be bored with the… c) the boring for someone. For a methodological question, this study uses based on the first two forms of boredom in order to demonstrate how they can explain the phenomenon of the internet and the human relations that are expressed therein. Through literature research was possible to realize that boredom seems to be present or appear to be the fate of most human activities, but people trying to escape it, constantly. Moreover, the time or the 2 perception of the passage of that time is an aspect intrinsically linked to the manifestation of boredom. So, we try to pass the time or shorten it in an attempt to evade this condition holds and that, in turn, favors an existential void. With the intention of building this purpose, we used the heideggerian conception of boredom. In this sense, it was aimed to examine how this phenomenon becomes pronounced from the use people make of the internet. It is evident that, paradoxically, the internet should be a place where people, being simultaneously connected, not attempted to shorten the time, but experience it with more intensity and serenity. The internet, besides being used merely as a hobby, became a place of solitude, with which most anonymous writers is also the only reader of himself. Furthermore, speed and agility with which information is accessed generate disinterest in certain subjects even more rapidly, which, similarly, potentiates the onset of boredom. Thus, from the internet's ability to abbreviate the time, combined with the human nature, it identifies the ephemerality of human relations and the acceleration of changes in the perception of the contemporary world, which not only suffer influences of the culture industry, but also the human condition, which tends to be determined and crushed by the consciousness of finitude and solitude. Key-words: Heidegger. Boredom. Internet. Finitude. 1 INTRODUCCIÓN Cuando un estudioso de la gran área de las humanidades pretende realizar un análisis intentando establecer algunas reflexiones respecto del avance tecnológico por el que la humanidad pasa actualmente, al relacionar la fluidez y la velocidad con que las relaciones interpersonales cambian, es común que utilice, como fondo teórico y como crédito para su trabajo, los teóricos de la Escuela de Frankfurt o de sus signatarios para demostrar que todo no pasa de una buena y orquestada maniobra de las fuerzas dominantes del capital instituido para mantener las masas de consumidores alienadas y, efectivamente, consumiendo. En ese sentido, es común, por ejemplo, que se citen tales teóricos para demostrar que existe una relación inversamente proporcional entre avance tecnológico y 3 sensibilidad estética, siendo que el progreso de uno significa el desaparecimiento del otro. Eso puede ser constatado, por ejemplo, en Adorno y Horkheimer (1985, p. 46), para quiénes “la humanidad, cuyas habilidades y conocimientos se diferencian con la división del trabajo, es al mismo tiempo forzada a retroceder a estados antropológicamente más primitivos, pues la persistencia de la dominación determina, con la facilitación técnica de la existencia, la fijación del instinto a través de una regresión mas fuerte. La fantasía se atrofia”. Otros, aun, creen que la industria cultural es mantenida, pese a los avances de la informática, por el control que las empresas del sector tienen sobre el lanzamiento de nuevas tecnologías: Apesar do caráter descentrado e da possibilidade de interação ativa dos usuários dos computadores, a indústria cultural ainda é hegemônica no processo de produção da cultura, na medida em que tende a separar o momento de concepção da mensagem do instante de sua apropriação. Estrategicamente, os recursos técnicos utilizados pela informática não abandonaram a perspectiva de concentração do capital aplicado à produção da cultura. Ou seja, CD-ROMs, laserdiscs, softwares, entre outros recursos, são reproduzidos tecnicamente em escala industrial e, por mais que permitam interação aleatória dos usuários, ainda assim constituem universos com conteúdos pré-elaborados. (COSTA, 2002, p. 114). En ese caso, evidentemente, se ignora o se olvida, deliberadamente, los softwares libres, la piratería y una serie de otros factores que hacen la garantía de la dinámica propia de las tecnologías de información y comunicación. En ese contexto teórico de prominentes pensadores es posible encontrar, aún, teorías que contemplen la idea de que toda evolución tecnológica es pensada de manera perversa, con vistas a la exploración y la dominación. Eso puede ser comprobado, por ejemplo, en la afirmación de Marcuse (1997, p. 21): “No es mas posible aislar la tecnología del uso al cual ella está destinada; la sociedad tecnológica es un sistema de dominación que funciona en el mismo plano de las concepciones y de las construcciones de las técnicas”. Otros ejemplos (CHAUI, 2006; LÉVY, 1994) podrían ser citados para corroborar esa visión sobre que los avanzos tecnológicos – su formato y destinoobedecen tan solo a las configuraciones dictadas por el aspecto económico en lo que se refiere a su uso para exploración y dominación. 4 Véase, todavía, que la dinámica de fluidez con que las relaciones interpersonales son establecidas actualmente puede tener su fuente no solamente en los medios tecnológicos que el hombre utiliza. Estos medios serán siempre medios para algo y nunca fines en sí mismos. Sería demasiado fantasioso creer que una empresa cualquiera que ya posee supremacía en un determinado sector económico buscase determinadas maneras de hacer obsoleto su producto para que tuviera que desarrollar para él un upgrade o un sustituto si tal producto no estuviera perdiendo el ritmo en el mercado, pues sería mas deseable para una empresa producir siempre el mismo bien de consumo, con un tiempo de durabilidad corto que sería sustituido por el mismo producto por el consumidor, que gastar miles de millones en el desarrollo de nuevos designs y funcionalidades para nuevos productos similares al antiguo. Es más probable que las firmas tengan que adaptarse a los deseos y a las necesidades humanas, que lo opuesto. Es cierto, también, que los profesionales del marketing se detienen constantemente en busca de generar nuevos deseos en el ideario humano. Esto puede ser preconizado en nuevas modas y tendencias o en nuevos productos, entre otros. Esto, todavía, sólo es posible apenas y simplemente porque es propio de la naturaleza humana perder el interés rápidamente por las cosas. La pérdida de este interés que es común al ser humano, sea por un determinado objeto, por una música, por una obra de arte, por una persona o por algún programa o software, es siempre precedido por alguna manera de aburrimiento. Muchas personas perciben esto, pero pocas consiguen entender su fuente o explicarlo de manera satisfactoria. A este respecto, la intención de esta comunicación es demostrar que la velocidad con que las informaciones se renuevan aumenta el uso de Internet y, de manera análoga, mostrar que Internet posee su procedencia en las demandas o en las necesidades por cambios que ella misma y el mundo exigen. Se pretende asociar los conceptos de tedio y pasatiempo para, posteriormente, apuntar que Internet es usada, en un primer momento, como una manera de romper con el tedio de las actividades cotidianas y, en un segundo momento, analizar el efecto inverso, o sea, en que ella misma se torna en una fuente de profundo tedio. Así, si no fuera por el propio dinamismo y velocidad con que los 5 cambios ocurren en su interior, ella misma estaría destinada a su desaparición. En esa dirección, haremos un análisis a partir de la noción de tedio, heideggeriana. 2 TEDIO Y TIEMPO En Los Conceptos Fundamentales de la Metafísica, Martín Heidegger define que hay, básicamente, tres maneras elementares de manifestación del tedio, a saber, el entediarse por…, el entediarse junto a… y lo que es tedioso para alguien. Para la finalidad de este artículo, tomaremos como base las primeras dos maneras del tedio, con el intuito de demostrar cómo estas dos nociones pueden lanzar luces sobre el fenómeno de Internet y las relaciones humanas que en ella se expresan. Se constata- que, en su actuar cotidiano, el ser humano desarrolla diversas actividades de variadas naturalezas, tales actividades nunca lo llenan completamente y cuanto mas él se mezcla en una rutina diaria confortable, más procura salir de ese estado. En muchos casos, cuando está preso al trabajo, busca numerosas actividades que no tengan ninguna relación con el trabajo en sí, o que aparentemente no tengan tal relación, para, con eso, ostentar un estado de libertad que, de facto, no posee. Por otro lado, cuando se halla fuera del trabajo, sea disfrutando del ocio o de un periodo de vacaciones, el retorno al trabajo es siempre una idea presente que comprime este intervalo de tiempo y lo configura como su entorno opuesto. Si está desempleado, la idea de recomienzo en algún trabajo es la meta fija que genera miedo en la vida de cualquiera persona. Entretanto, este estado podría no ser determinado exclusivamente por una relación con el trabajo, pues podría ser con cualquier otro tipo de ocupación considerada centro gravitacional cerca del cual toda la existencia de la humanidad orbita. Así, el ser humano parece que nunca está plenamente presente en el lugar en que efectivamente se encuentra o, al menos, hace lo posible – conciente o inconcientemente – para no estar presente donde realmente está. De esta forma, lo que se observa es que, tanto en el ocio, cuanto en el trabajo, inevitablemente las personas recaen en una sensación de ocio. Esta sensación puede aquí ser caracterizada como una extrañeza en relación al flujo del tiempo. Si analizarmos las sociedades primitivas, por ejemplo, las civilizaciones clásicas como la Grecia Antigua y sus olimpíadas o la misma Roma de los césares y 6 sus gladiadores, encontramos siempre una manera de entretenimiento que, en un momento dado, puede ser considerada como un legado cultural, pero que, al principio, siempre surge como una alternativa que las personas encontraban (o por cuestiones políticas) para salir del aburrimiento. A pesar de no saber absolutamente nada sobre el tiempo, su naturaleza, la posibilidad de su pose, el hombre desde siempre creó pasatiempos con el objeto de volver su existencia más harmónica con el flujo de las horas y de los días. El pasatiempo surgió, según parece, para ser usado como forma de ahuyentar el tedio – la extrañeza- en relación al tiempo. O que significa isto, porém: nós expelimos e afugentamos o tédio? Nós o adormecemos constantemente. Pois, evidentemente não estamos em condições de nadificá-lo através dos passatempos mais eficazes. Nós „sabemos‟ – com um estranho saber – que ele pode retornar a qualquer momento. Portanto, ele já está aí. Nós o afugentamos. Nós o adormecemos. Não queremos saber dele. Isto não significa, contudo, de modo algum, que não queremos ter nenhuma consciência dele, mas sim que não queremos deixá-lo despertar. Ele, que já está por fim desperto e de olhos abertos – mesmo que totalmente a distância –, insere o olhar em nosso ser-aí, e, com este olhar, já nos transpassa e corta afinadoramente. 3 (CFM , p. 95). Entonces cabe preguntar: - ¿En que sentido puede afirmarse que el tedio traspasa la existencia humana? Efectivamente y como presupuesto de este trabajo, esto puede ser dicho porque el tedio es una manera constituyente del propio ser humano. Bajo una perspectiva naturalista, se puede decir que el aburrimiento es aquello que hace con que la humanidad evolucione, pues es a partir de él la curiosidad despierta como búsqueda de nuevas fronteras para la existencia, o sea, despertar para lo nuevo sólo es necesario cuando lo que es común ya no trae contentamiento. Ya fue dicho que el ser humano es un animal único – el único animal racional, el único animal simbólico, etc., pues no sería demasiado decir que el ser humano es el único animal que se entedia, y que posee conciencia permanente de este estado 3 HEIDEGGER, M. Os conceitos fundamentais da metafísica: mundo, finitude, solidão. Rio de Janeiro: Forense Universitária, 2006. 7 de espíritu. En un viaje que nunca hizo, por ejemplo, el hombre sabe que posiblemente se quedará aburrido, por eso lleva consigo libros, juegos u otras maneras de pasatiempos. En una cola, por más que sepa que estará en la compañía de otras personas, los seres humanos desconfían que se quedarán aburridos, por eso la evitan y la desprecian tanto. Esto, probablemente, ocurre ya sea por experiencia o porque debido a alguna especie de innatismo, todos poseen conciencia de la cercana relación entre entediarse y el flujo del tiempo, tanto que etimológicamente en la lengua alemana tedio es una palabra compuesta en combinación con el término tiempo. Especialmente em meio à palavra alemã, o tédio (die Langeweile) – qualquer que seja a sua essência derradeira – indica de forma quase palpável uma relação com o tempo: um modo como nos colocamos diante do tempo, um sentimento de tempo. Com isto, o tédio e a pergunta por ele conduzem-nos até o problema do tempo. Temos de adentrar primeiramente o problema do tempo, para determinarmos o tédio enquanto uma relação característica para com este. (CFM, p. 97). A partir de esta relación entre el tedio y el tiempo es posible afirmar, por lo tanto, que el tedio no es solamente un estado psicológico que acomete a las personas en determinadas situaciones y puede tener su causa fácilmente identificable, pero, antes, se trata de una tonalidad afectiva fundamental, o sea, es constituyente de la propia existencia del ser – ahí. Siendo así, la pregunta por el fenómeno del tedio no es una pregunta sobre lo que es el tiempo únicamente, pero tal cuestionamiento hace aflorar tres cuestiones fundamentales: lo que es el mundo, lo que es finitud y lo que es singularización, pues el tedio remite siempre a una extrañeza en relación al mundo, así como puede despertar la conciencia sobre el flujo del tiempo y sobre la singularidad del ser – ahí frente a los demás seres y entes del mundo. Es también a partir de este estado elemental de entediarse a cerca de... que surge la necesidad de preguntarse por el propio estatuto de tal realidad y sobre el lugar de lo humano en este contexto. Las preguntas elementales de la filosofía sobre el Ser y sobre la Naturaleza son también sobre el origen de la realidad y posiblemente fueron inicialmente lanzadas y continúan teniendo sentido justamente debido a esta relación de extrañeza frente al flujo del tiempo y del propio orden de 8 las cosas. El hombre, al experimentar el tedio, se sintió como un extranjero en aquel espacio que naturalmente lo asimilaba en su totalidad. Así, por lo tanto, al no reconocer mas este espacio natural, al sentirse extraño a él, es que el hombre fue impelido a filosofar. Y posiblemente, es esa misma sensación que posibilita que las preguntas filosóficas por el Ser, por lo Bello, por el Bien cobren sentido aún en los días actuales, pues los seres humanos continúan entediándose y extrañándose con lo que los constituye, internamente o externamente. O tempo, por sua vez, encontra-se para nós em uma relação com o tédio. Portanto, o tédio é a tonalidade afetiva fundamental de nosso filosofar, do filosofar no qual desenvolvemos as três perguntas pelo mundo, pela finitude e pela singularização. O próprio tempo é alguma coisa que nos determina em meio à elaboração destas três perguntas orientadoras. Se o tempo está em conexão com o tédio e é, por outro lado, o solo para as três perguntas, então a tonalidade afetiva fundamental do tédio perfaz uma relação temporal excepcional no interior do ser-aí, e, assim, uma possibilidade excepcional de responder a estas três perguntas. (CFM, p. 98). A pesar de la importancia que el tedio posee en cuanto tonalidad afectiva, o sea, en cuanto una afección que puede hacer al ser humano despertar y cuestionarse sobre la realidad y sobre su lugar en la realidad, es común que las personas busquen y encuentren formas para evitar el acometimiento del aburrimiento de cualquiera manera. Si lanzamos una mirada, aunque superficial, para toda la estructura existencial de la sociedad contemporánea, veremos que varios eventos son programados, varias fechas son marcadas y así el hombre vive en una constante expectativa de que algo grandioso está por ocurrir. Por lo tanto, que, cuando se frustra o se aburre con algo esperado que eventualmente no proporcione tal contentamiento, se proyecta para una nueva expectativa y así evita esa tonalidad afectiva del aburrimiento. Al final de un viaje de ocio que no haya sido tan agradable, se proyecta en uno futuro, en la esperanza de que sea mejor. Al final de un campeonato ya se espera por el siguiente y así sucesivamente. El ser humano busca alejarse de la condición de aburrimiento y, con el avance de la tecnología, con la posibilidad de utilizar aparatos todo el tiempo para romper la soledad, es siempre mas común que nadie consiga quedarse más sólo. 9 En este sentido, radios, televisores y ordenadores están siempre ligados, aunque apenas para romper el silencio. Aparatos celulares se multiplican frenéticamente; softwares de comunicación instantánea son imprescindibles para la vida contemporánea; blogs, microblogs, videoblogs, páginas de relacionamientos y toda una serie de artificios de este orden se multiplican porque el hombre no consigue quedarse más sólo consigo mismo. Talvez não conheçamos este tédio porque não entendemos o tédio em geral em sua essência. Talvez não conheçamos a sua essência porque ele jamais se tronou essencial para nós. E o tédio não pode, por fim, se tornar essencial para nós porque ele pertence de início e na maioria das vezes àquelas tonalidades afetivas que não apenas afugentamos cotidianamente, como também não deixamos frequentemente que nos afinem enquanto tonalidades afetivas; mesmo quando elas estão aí. (CFM, p. 98). En la primera manera de tedio que se puede vivenciar, entediarse por alguna cosa, se experimenta una manera de hastío que es mas superficial, pues ocurre debido al contacto que una persona establece con un determinado objeto o con una determinada situación. El objeto o factor entediante puede ser la rutina del trabajo, una espera por el avión o alguna región en la cual somos forzados a permanecer. Esa manera de tedio es siempre determinada por algo y reproduce la sensación de que estamos perdiendo tiempo, o que el tiempo demora en pasar. Así, se buscan medios para abreviar este tiempo forzado y de la situación aburriente y ahí surge la necesidad de los pasatiempos. Heidegger apunta al aspecto de que el ser humano procura alejarse del aburrimiento, al contrario de ir hasta la raíz de este fenómeno, procurando observar lo que él puede decir de la propia existencia, o sea, de las situaciones contingentes que hacen la sensación de la finitud aflorar como paño de fondo de toda actividad humana. Hay algo de esencial en el sentimiento de vacío existencial que el aburrimiento proporciona a partir de su aparecimiento con las actividades que desarrolla y que, a propósito, no tienen sentido para su vida. La aparición del tedio es, por lo tanto, como un síntoma que indica que algo no está bien, o que determinada actividad no contribuye para una existencia auténtica. Esto ocurre porque, cada vez más, el modo de vida humano se esparce con los artificios tecnológicos o se resuelve con las respuestas establecidas por la 10 ciencia positiva. En ambos casos, el ser humano se distancia mas de sí mismo y, entonces, el tedio surge como una constante que parece ser el destino inescapable para el cual todas las actividades caminan inexorablemente. Como apunta Safranski4 (2005), no será por los artificios o por respuestas científicas que la inquietud del Dasein será resuelta. Es necesario entender ese aburrimiento superficial, que ocurre motivado por una determinada situación o por el contacto con determinados objetos como una especie de puente que puede conducir hasta el aburrimiento mas profundo. Este último, a su vez, es una puerta para la comprensión del ser humano y condición de ser-para-la-muerte en el mundo. “Este aburrimiento superficial debe traernos hasta el tedio profundo, debe traspasarnos afinadamente en el fundamento del ser – ahí. Este tedio ahuyentado, incidental, inesencial debe tornarse esencial. (CFM, p. 99). Heidegger califica este aburrimiento profundo de esencial y lo hace por el aspecto de que esta tonalidad afectiva puede desencadenar un proceso de retomada de la autenticidad. Él afirma que eso puede ocurrir porque el ser humano que empieza a aburrirse junto al mundo sin una determinada causa aparente deberá, inevitablemente, emprender una reflexión sobre la propia existencia y no apenas su existencia factual y puntualmente ubicada en aquel determinado tiempo y local, pero en su propia condición humana y en el sentido de su finitud frente a la propia marcha del tiempo del mundo en cuanto totalidad. Cuando todo aquello que es tenido como fundamental en el modo de vida contemporáneo, como, por ejemplo, la búsqueda por acumulaciones materiales, más tiempo libre del trabajo o más poder en determinadas instituciones, ya no promueve contentamiento porque los bienes materiales ya no rellenan el vacío en que no hay nada por hacer; y el poder alcanzado o aumentado ya no rellena la necesidad por tal vanidad, entonces lo que resta al ser humano es colocarse en cuestión, buscando un entendimiento mas 4 “Olhando para o tempo como para um horizonte aberto, percebemos que muitas coisas incertas nos aguardam, uma com toda a certeza: o grande passar, a morte. Nós a conhecemos, não apenas porque outros morrem, mas porque a cada momento podemos vivenciar o „passar‟: o rio do tempo – tantas pequenas despedidas, tantas pequenas mortes. Temporalidade é a experiência do passar presente, futuro, e finalmente moral. [...] A objetivação científica do ser humano é para Heidegger um fugir da temporalidade inquietante do dasein. Enquanto isso as ciências apenas prosseguem na já mencionada teimosia tendência do dasein cotidiano, de se compreender a partir do mundo, isto é, como coisa entre coisas. Ciência é a forma culta e metodicamente executada da coisificação (Verdinglicchkeit) cotidiana do dasein. [...] Esse jeito de indagar pelo sentido como por algo presente, para Heidegger faz parte da fuga do dasein de sua temporalidade e seu ser-possível. A pergunta pelo sentido do ser foi feita e respondida na dimensão de uma metafísica da presença, e por isso mesmo deu errado” (SAFRANSKI, 2005, p. 191). 11 profundo sobre sí propio, sentimiento que es el leitmotiv mas elemental de todo cuestionamiento filosófico. A pesar de este aburrimiento profundo ser extremamente deseable, no obstante es imposible promoverlo mediante alguna acción intencional o buscarlo en alguna acción pre-orientada para ello. Como devemos fazer isto? Devemos produzir o tédio expressa e intencionalmente em nós? De maneira nenhuma. No que concerne a este tédio, não precisamos empreender absolutamente nada. Ao contrário, já sempre empreendemos demais. Este tédio vem a ser por si mesmo essencial; e isto justamente se não nos colocamos em contraposição a ele, se não reagimos sempre imediatamente para nos protegermos, se lhe dermos muito mais espaço. (CFM, p. 99). No es posible, por lo tanto, determinar, a partir del mecanismo de causa y efecto, la relación entre el tedio y lo que entedia. Un mismo libro, un mismo sitio o una misma persona que, en determinado momento, es agradable, puede cambiar a aburridor, y la ciencia natural no puede resolver nada en este dominio. Así, no se puede localizar la fuente del aburrimiento específicamente en un objeto determinado o únicamente en el sujeto que sufrirá tal afección. No depende exclusivamente de un estado de espíritu del Dasein el acometimiento del aburrimiento ni exclusivamente de un contacto del sujeto con un determinado objeto. Esta naturaleza indeterminada de la fuente del aburrimiento es lo que, propiamente, confiere el carácter de ser una tonalidad afectiva fundamental. Y este dominio del aburrimiento también no puede ser localizado únicamente en el universo de la empiria ni exclusivamente en el reino de la subjetividad, pero en la interrelación histórica, temporal y cultural entre el Dasein y su tiempo y su espacio específico. “En resumen: el aburrimiento – así como, en última análisis, toda y cualquiera tonalidad afectiva – es una esencia híbrida; una esencia en parte objetiva, en parte subjetiva” (CFM, p. 106). El entediarse con, del cual se intenta salir por medio de pasatiempos y que, al mismo tiempo, posee una causa o situación específica, es, en síntesis, la sensación de que se está pegado a algo desagradable y entonces el tiempo debe ser abreviado para que este pase lo más rápidamente posible, visto que, después que esta situación pasa, algo mas interesante ocurrirá (las horas que no pasan durante 12 el trabajo, y por eso la necesidad de hobbies y de happy hour, etc.). Ya entediarse con algo que no posee una causa determinada y que se caracteriza como una tonalidad afectiva es la sensación de que nada trae contentamiento y de que no hay lo que posa ser hecho que haga el tiempo pasar mas rápido y también de que no hay algo especial aguardando después de un determinado espacio de tiempo. Esta individuación puede desencadenar una reflexión sobre la finitud, generando la oportunidad de una revisión de la existencia en vista de un proyecto de vida más auténtico. No obstante ello, es común evitar el tedio profundo a través de la búsqueda de distracciones y de una infinidad de superficialidades. 3. ABURRIMIENTO, TIEMPO E INTERNET La evolución tecnológica de los medios de comunicación promovida en las últimas décadas generó nuevas posibilidades de relaciones sociales y de trabajo como nunca antes en la historia de la humanidad. Sin duda, internet es el marco más significativo de esta evolución. Ella no puede ser considerada apenas como un medio mas de comunicación, pero sí su propia finalidad y su propio propósito son la comunicación. Con la facilidad de divulgación de informaciones, el número de escritores ultrapasó, bastante, la cantidad de lectores y, de facto, muchos de estos escritores desconocidos son también los únicos lectores de si mismos. Puede verificarse que, virtualmente, una enorme parte de toda la historia y psique de la humanidad fue transferida para internet. La ciencia y la cultura tuvieron sus contenidos digitalizados y ahora son accesibles juntamente con el contenido de una infinidad de librerías y de museos. Es posible, además, aprender idiomas por medio de sitios que pueden ser accesibles gratuitamente. Además de esto, es posible aprender sobre tecnología, medicina y una gama permanente de contenidos científico-culturales. Internet también perpetúa y ayuda a desarrollar una mentalidad supersticiosa y fetichista, con contenidos fantasiosos y obscuros. Se muestra siendo el locus de la existencia humana y cambiando un espacio que es, sin duda, inaudito en la historia del hombre. Esto no cambia, todavía, lo que el ser humano es. Si en un determinado momento, Internet puede ser utilizada para hacer salir aquella primera forma de tedio, siendo utilizada como un simple pasatiempo, ella 13 también traduce una característica esencial del Dasein, pues es común que muchos acaben no encontrando nada para hacer en Internet, pese a que ella traduce, en líneas generales, como ya fue evidenciado, toda la cultura de la humanidad. Nuestra intención es mostrar que Internet aumenta significativamente la aparición del tedio, pues este acostumbra a imponerse exactamente cuando mas intentamos huir de él, como constata Heidegger: Se o entediante e o que está entediando, e, em unidade com eles, o tédio são algo que nos é desconfortável, que não queremos deixar surgir, de que buscamos imediatamente nos livrar quando surgem; se o tédio é algo contra o que nos encontramos no fundo e desde o princípio, então ele se revelará originariamente enquanto um tal, contra o qual nos encontramos, aí onde nos livramos dele – quer consciente ou inconscientemente. Isto acontece onde criamos para nós um tempo curto em contraposição ao tempo longo (die Langeweile) do tédio: onde, com este intuito, passamos o tempo a cada vez desta ou daquela maneira. Exatamente aí onde nos contrapomos a ele, ao tédio, é preciso que ele queira se afirmar: aí, onde ele entra em cena de tal maneira, é preciso que ele se nos imponha sua essência. (CFM, p. 109110). Es precisamente cuando se busca huir del aburrimiento que se impone, y, entonces, como todas las relaciones están siendo, en cierto sentido, transferidas para Internet, es preciso que ella se renueve constantemente, pues las personas no quieren entrar en contacto con el denominado tedio profundo. La novedad debe ser reinventada a cada momento y es esta lógica la que garantizará que Internet sea este sitio existencial especialmente buscado para pasar el tiempo. Así, no son apenas cambios superficiales que Internet promueve con mucha rapidez, pero concepciones morales y estéticas también son bruscas y significativamente alteradas con mucha frecuencia. Esta lógica de fluidez arrastra consigo toda la existencia humana y concepciones de gusto o de valor no se quedarían de fuera de este torrente de cambios. De esta manera, como Internet es el pasatiempo por excelencia de este siglo y como, de facto, en ella todo ocurre muy rápidamente, la tendencia es que su efecto ocurra al revés, y ella cambie todo lo entediado y sin sentido o, como decía Heidegger, el tedio acaba irradiándose de una cosa para las demás: 14 No ser entediado por este livro, não obstante, estamos concentrados nesta respectiva coisa e justamente nesta. No entediar-se junto a..., o tédio não está mais colado em..., mas já começa a ter lugar uma certa ampliação. O tédio não cresce a partir desta determinada coisa entediante, mas se irradia inversamente até as outras coisas. Agora, ele, o próprio tédio, fornece ao nosso ser-aí – para além do entediante em particular – um estranho horizonte. Ele não se liga apenas ao entediante determinado, mas se abate sobre muitas outras coisas: tudo se torna entediante. (CFM, p. 111). Frente a eso, se puede afirmar que esta búsqueda constante por la evasión del aburrimiento, por medio de pasatiempos, es el centro gravitacional en torno del cual la lógica de Internet orbita y de la cual extrae su base. Ella es el pasatiempo por excelencia y, como puede tornarse en la fuente para o desencadenar un tedio profundo, precisa renovarse, esto porque el tedio profundo puede cambiarse la llave para una reflexión mas seria sobre la finitud y sobre el tiempo, pero esta reflexión, esta perspectiva o el propio tiempo nos afligen profundamente5. Por esta característica, Internet se vuelve un elemento canalizador de las dos formas de tedio. Esto ocurre porque, en la primera forma de aburrimiento, estamos presos a algo y retenidos al tiempo. Entonces procuramos un pasatiempo, en la búsqueda de abreviar este tedio, o sea, tenemos la sensación de que el tiempo no nos pertenece y por esto deseamos abreviarlo, y se hace esto recorriendo a Internet como pasatiempo. En la segunda forma de aburrimiento no estamos presos a nada, no hay pasatiempos posibles, pues el propio pasatiempo puede ser entediante. Tenemos ahí la sensación de que poseemos el tiempo y podemos hacer lo que quisiéramos, por esto el tedio estará en cualquier actividad que podamos ejercer. En el primer caso estamos retenidos junto al tiempo, tenemos la sensación de no poseerlo, pero de estar presos a él y por esto deseamos abreviarlo. En el segundo caso estamos parados con el tiempo, tenemos la sensación de estar hundidos en el tiempo, como en un constante presente, sin perspectiva de un futuro, por eso no hay 5 “Mas esta perplexidade temporal no tédio é evidentemente uma afluência característica do poder do tempo, ao qual estamos ligados. Daí se retira o seguinte: o tempo pode nos afligir ou nos deixar em paz ora de um modo, ora de outro. Por fim, isto está em conexão com a sua própria capacidade de mudança. O ser-entediado e o tédio em geral estão, com isto, claramente enraizados nesta essência enigmática do tempo. Mais ainda: se o tédio é uma tonalidade afetiva, então o tempo e o modo de ser do tempo, ou seja, o modo como ele se temporaliza, possuem uma parcela significativa na afinação do ser-aí em geral. [...] Procuramos um passatempo: isto é, não e justamente não uma ocupação com o tempo, um entregar-se ao tempo, uma meditação sobre o tempo. Passatempo – isto diz estranhamente: uma ocupação que nos distrai do tempo hesitante e de seu caráter aflitivo” (CFM, p. 119-120). 15 cómo escapar de ese aburrimiento profundo, pues tomamos conciencia de nosotros mismos como estando presos a un ahora lineal, donde pasado y futuro se hunden y ser – ahí dado y el tiempo son un solo. 4 CONSIDERACIONES FINALES Fue posible observar, a partir de los análisis hechos, que el fenómeno de Internet se convirtió en una herramienta necesaria y, al mismo tiempo, indispensable para la sociedad actual, teniendo en vista la agilidad y la accesibilidad. Así, se cree que continuará siendo ampliamente utilizada, lo que es extremamente deseable para el ámbito de la sociedad o para determinados ramos de ella, por ejemplo, especialmente el comercio, teniendo en cuenta que es en la renovación de los deseos que el consumo es estimulado. También se planteó, que la fugacidad de las relaciones que se establecen en Internet y la velocidad de los cambios de los paradigmas éticos y estéticos fueran aumentados por la rapidez de utilización que Internet posibilita, lo que todavía no es pensado solamente a partir de una lógica de mercado, pero, sí, de una necesidad vital de sobrevivencia, pues la raíz de eso está en el tedio, que, implacablemente, surge cuanto más se busque abreviar el tiempo. Por fin, tomada en esta perspectiva, Internet da origen a un ciclo en el cual, cuanto más rápido las cosas ocurran, más rápido ellas necesitarán renovarse, para que continúen generando intereses, pues el más extraño, en ese admirable y extraño „mundo nuevo‟, es que a nadie le gusta pensar sobre la propia finitud, aunque sea esa la gran cuestión que debería orientar toda la existencia humana. Referencias ADORNO, T. W.; HORKHEIMER, M. Dialética do esclarecimento: fragmentos filosóficos. Rio de Janeiro: Zahar Editor, 1985. CASANOVA, M. A. Compreender Heidegger. Petrópolis, RJ: Vozes, 2009. 16 CHAUI, M. Simulacro e poder: uma análise da mídia. São Paulo: Perseu Abramo, 2006. COSTA, B. C. G. da. Estética da violência, jornalismo e produção de sentidos. Campinas/Piracicaba, SP: Autores Associados/Unimep, 2002. HEIDEGGER, M. Os conceitos fundamentais da metafísica: mundo, finitude, solidão. Rio de Janeiro: Forense Universitária, 2006. ________________. Seminários de Zollikon. São Paulo: EDUC; Petrópolis, RJ: Vozes, 2001. ________________. Ser e tempo. Petrópolis, RJ: Vozes, 2006. LÉVY, P. As tecnologias da inteligência. O futuro do pensamento na era da informática. Rio de Janeiro: Editora 34, 1994. MARCUSE, H. Cultura e sociedade. V. 1. São Paulo: Paz e Terra, 1997. SAFRANSKI, R. Heidegger: um filósofo da Alemanha entre o bem e o mal. São Paulo: Geração Editorial, 2005. 17