A.M.T.M. ASOCIACION DE MILITARES DE TROPA Y MARINERIA Asociación Profesional 04/2012 PROPUESTA DE REGRESION DE OFICIO DE LA RESPONSABILIDAD PATRIMONIAL PROPUESTA Establecer de oficio la acción de regreso en el ámbito de la administración de las fas, contra el funcionario o autoridad militar que haya actuado con dolo o culpa grave, habiendo causado un perjuicio al militar administrado, en el ejercicio de su autoridad. JUSTIFICACIÓN RESPONSABILIDAD CIVIL DE LAS ADMINISTRACIONES PÚBLICAS EN LAS FAS El art. 106.2 CE recoge este principio y la reserva de Ley de la CE conserva la aplicación del art. 40 de la Ley de 1957 (aplicado también a las Comunidades Autónomas) hasta la Ley 30/1992, que incorpora la responsabilidad patrimonial de la Administración en sus art. 139-146. El art. 139 Ley 30/92, de conformidad con la formulación amplia y generosa de la Constitución, dice: “Los particulares tienen derecho a una indemnización por parte de las Administraciones Públicas correspondientes por cualquier lesión en cualquiera de sus bienes o derechos, excepto en los casos de fuerza mayor, siempre que la lesión sea consecuencia del funcionamiento normal o anormal de los servicios públicos”. Sobre el papel, el principio de partida en la materia en Derecho español es el de una responsabilidad general de las Administraciones Públicas por los daños que individuos y empresas pueden sufrir en conexión con la de carácter normal o correcta. Así formulada, no habría en Derecho comparado un régimen de responsabilidad público tan generoso (o tan dispendioso y exagerado, desde otro punto de vista) como el español. Vemos, no obstante, cómo distintas reglas jurídicas y doctrinas judiciales permiten limitar este alcance, exagerado, de la responsabilidad patrimonial de las Administraciones Públicas en Derecho español. Responsabilidad directa: la Administración cubre directamente las actividades dañosas de sus funcionarios (no es una responsabilidad subsidiaria). Ahora bien, el art. 145 y 146 Ley 30/92 establece que ello es así sin perjuicio de la ACCIÓN DE REGRESO de la Administración contra el funcionario que haya actuado con DOLO O CULPA GRAVE. La Ley 4/99 ha establecido que dicha acción se debe exigir de oficio. STS, 1ª, 17.2.2006 (La Ley nº 6462): no hay responsabilidad directa del funcionario público, sino tan sólo una acción de regreso ante la propia Administración. Excepción: la responsabilidad es subsidiaria en sede penal (121 CP), sin perjuicio de la responsabilidad patrimonial del régimen general. Ello no significa que se pueda cobrar dos veces, sino que hay hechos generadores de daños que pueden constituir delito (la responsabilidad de la Administración es subsidiaria) y otros que no (se genera la responsabilidad directa de la Administración). Tras este concepto encontramos la Reparación del daño causado al administrado por un hecho soportado el cual es antijurídico, la necesidad que el daño sea consecuencia del funcionamiento normal o anormal de los servicios públicos se está refiriendo a la necesidad que se trate de un daño causado por una Administración. Subjetivamente, significa que la responsabilidad debe ser causada por autoridades, funcionarios o personal al servicio de la Administración. La Sala 1ª TS ha utilizado un concepto restringido del concepto de “servicio público”, de manera que todo aquello que no era servicio público se remitía al Código Civil. En cambio, la Sala 3ª TS ha adoptado un concepto amplio para posibilitar que todos los casos puedan tener cabida y sean remitidos a la jurisdicción contencioso-administrativa. Esto generó el problema de la jurisdicción competente, que actualmente se ha superado a favor de la contencioso- administrativa, si bien en algunos casos la Sala 1ª TS ha minado el sistema al reconocer que no es competente pero que resolverá para evitar el peregrinaje de jurisdicciones. Las lesiones causadas por los contratistas y concesionarios no implican la responsabilidad de la Administración, pues responden los propios concesionarios. La Ley 30/2007, de 30 de octubre, de Contratos del Sector Público, dice en sus arts. 198 y 256 c) que el concesionario es responsable directamente frente a terceros. Pág. 2 Excepciones: (art. 197 Ley 30/2007): cuando tales daños y perjuicios hayan sido ocasionados como consecuencia inmediata y directa de una orden de la Administración, será ésta responsable dentro de los límites señalados en las Leyes. RESPONSABILIDAD POR EL FUNCIONAMIENTO ANORMAL Si en la actuación de la Administración concurre dolo, culpa o negligencia, surge la obligación de indemnizar. La doctrina dice que la responsabilidad basada en la culpa de la Administración sirve como elemento de prevención en la actuación de las organizaciones administrativas. En el ámbito de las FAS, en su Régimen Administrativo Sancionador, existe un nexo de causalidad entre la falta de regresión de la responsabilidad patrimonial de la Autoridad que incoa un expediente sancionador con pena de privación de libertad, que posteriormente deviene en un hecho antijurídico soportado por el administrado, y el gran número de casos que debe indemnizar por ello esta administración, que al final paga el contribuyente, generado por un ambiente de despreocupación de la resolución final de cada acto jurídico iniciado por parte de la Autoridad competente Sancionadora, debido a un sentido de impunidad en este tipo de actos. Para deshacer este ambiente es necesario que la responsabilidad de estos actos recaiga sobre la Autoridad que los genera, aumentando el principio de seguridad jurídica en una administración que se rige por el principio de culpabilidad en su procedimiento sancionados, asegurando así una disminución de los procedimientos sancionadores discrecionales que devienen en indemnizaciones, paliando así el gasto público, preservando consecuentemente a esta medida el principio de Buena Fe de esta Administración, maltrecho tras el último año de publicaciones en medios de prensa de acciones negligentes y corrupción. Pág. 3