ICD Recursos La innovación, un largo camino a recorrer (III) E. Beneït El peor enemigo para las buenas ideas es la lógica y nuestras propias creencias. Hay que complementar el pensamiento lógico, analítico, usado de forma habitual con una forma de pensamiento no tradicional, el pensamiento creativo. El hecho de que todo el mundo piense de igual forma hace que las propuestas de diseño de nuevos productos / servicios / ... sea similar entre nosotros y la competencia, lo que hace difícil diferenciarse y por tanto competir con éxito. Esta forma de pensar alternativa es la que permitirá identificar oportunidades realmente diferentes y originales. Habrá que utilizar la imaginación sin miedo, pues es la base de las buenas ideas. Habrá que saber emplear herramientas de pensamiento creativo, como por ejemplo las provocaciones, sutiles pero muy poderosas, pues cuestionan el razonamiento clásico; pero como hemos avanzado, existe el riesgo de matar buenas ideas en el origen si no estamos preparados a mirar la realidad desde un nuevo prisma. Habrá que incorporar el pensamiento creativo como una buena práctica, siendo conscientes de que los paradigmas válidos hasta ahora quizá hagan falta redefinirlos, sea por cambios en el mercado o incluso mejor, por habernos adelantado en identificar nuevas necesidades. Como complemento de las reuniones formales de análisis y decisión, es necesario poner en marcha sesiones de creatividad con un propósito. Se pueden conseguir un promedio de 200 ideas con grupos reducidos en una reunión bien dinamizada. Ideas que de acuerdo a la estrategia de la compañía permiten cambios reales, que afectan tanto a la introducción de nuevos servicios, el diseño de nuevos procesos, la resolución de problemas de forma creativa, etc .. Como ejemplo práctico podemos comentar la acción de cambio que estamos llevando a cabo en una cadena hotelera nacional con 2.000 trabajadores y cerca de 35 establecimientos. Esta organización sensible al impacto de la situación de crisis se ha dado cuenta de que debían de cambiar la forma de hacer, no sólo decirlo. El primer paso una vez la organización se da cuenta de la necesidad real de cambio es ampliar el proceso de pensamiento. www.innovacd.eu Imagina, Crea, Desarrolla Ha puesto en marcha un proceso de cambio cultural, que afecta al 100% de la plantilla con el objetivo de sensibilizar y aprender a utilizar el pensamiento creativo como una forma adicional de pensar y hacer. La explosión creativa está generando una avalancha amplia de ideas, con un elevado porcentaje de viabilidad, implantación en todas las áreas de la organización, que van del diseño de nuevos platos hasta el diseño de nuevos servicios pasando por la identificación de nuevos mercados utilizando exclusivamente el pensamiento lateral, en sesiones donde participan personas de diferentes áreas, edades, experiencias o culturas. Todo esto no hace más que enriquecer la variedad, calidad, originalidad y velocidad de lanzamiento de nuevas oportunidades respecto a los competidores, permitiendo una clara ventaja competitiva. Ezequiel Beneït Innovation & Creativity Development Junio 2010. www.innovacd.eu Imagina, Crea, Desarrolla