TÉCNICA DE “EMPLASTE” PARA REDUCIR LOS HEMATOMAS Vilaplana Fernández.A (fisioterapeuta) Umivale Ontinyent Resumen: Se trata de un paciente que sufre caída desde una altura de 1,5 m produciéndole, además de varias contusiones a nivel de la columna lumbar y cabeza, un hematoma en la cara interna de su brazo izquierdo. El paciente presentaba además limitación a la flexo-extensión de codo debido a la posible rotura fibrilar producida por el traumatismo en dicha zona. Introducción: Un traumatismo directo sobre una parte de nuestro cuerpo suele producir la lesión de los tejidos blandos subyacentes. En consecuencia, se produce la rotura de pequeños vasos (tanto del sistema venoso como del linfático). La consecuencia es una tumefacción de la zona acompañada de edema y en muchos de los casos hematoma. El protocolo de tratamiento hay que enfocarlo en función de si hay o no hematoma, y si se ha producido lesión de fibras musculares. El diagnóstico para la lesión de fibras musculares se realiza explorando el punto del impacto del golpe en el paciente, en este punto encontraremos un escalón conocido como “síndrome del hachazo” (notaremos como nuestro dedo se hunde al pasarlo por la piel del paciente). Este signo nos confirma que ha habido lesión del músculo (rotura muscular). Tratamiento: Para ayudar a la reabsorción del hematoma utilizaremos la técnica del “emplaste”. Esta técnica consiste en colocar una mezcla sobre el hematoma de varias cremas: TRAUMEEL S. THIOMUCASE. THROMBOCID. ALGESAL CREMA. A continuación aplicamos una capa de SOFTBAN empapada en Alcohol. Después colocamos varias capas de FILM de cocina transparente. Y por último le realizamos un vendaje compresivo con TENSOPLAST. El paciente debe llevar el emplaste durante un máximo de 7-9 horas. Transcurrido este tiempo se lo debe de quitar. También debemos advertirle de una posible alergia a alguno de los componentes de la mezcla de las cremas (en especial al Traumeel, ya que contiene arnica); si se produce un intenso picor en la zona después de aplicar el vendaje, este debe retirarse de inmediato y limpiar bien la zona con agua y jabón. Con la técnica del emplaste disminuimos la inflamación, reducimos el edema, eliminamos el hematoma y creamos un efecto antiálgico de la zona. Si además de hematoma hay rotura de fibras musculares, debemos realizar movimientos de estiramiento del músculo lesionado “sin provocar dolor en la zona”, de esta manera favorecemos la correcta alineación de las fibras musculares y disminuimos el riesgo de la formación de fibrosis (que son zonas con poca elasticidad en el músculo). El estiramiento debe hacerse lentamente y detenerse antes de provocar dolor. Caso clínico: Paciente varón de 37 años de edad que acude a consulta en muvale Ontinyent tras caerse desde una escalera de 1,5 metros. Sufre contusiones varias en zona lumbar y cráneo. No hubo pérdida de conciencia, ni mareos, ni nauseas. Marcha normal y pupilas normorreactivas. El paciente fue tratado de sus contusiones para la zona lumbar con Nolotil cada 8 horas y Falcol cada 12 horas, reposo y dieta blanda. Tras acudir de nuevo a visita para control por cuerpo médico en muvale, el paciente presenta un hematoma en la cara interna de su brazo izquierdo con limitación a la flexo-extensión de codo, debido a la posible rotura de fibras musculares a nivel del traumatismo. Se observa hematoma y tumefacción en la cara interna del brazo. Se procede a colocar EMPLASTE en dicha zona y se recomienda al paciente que realice movimientos de flexo-extensión de codo con abducción forzada del hombro (de esta manera estiramos la musculatura del tríceps braquial, músculo implicado en el traumatismo) siempre SIN PROVOCAR DOLOR en la zona del hematoma. Además se recomienda al paciente colocarse hielo 15-20 minutos cada 6 horas en la zona de la lesión. El paciente acude de nuevo a consulta tras 48 horas, tras revisar su brazo presentaba el siguiente aspecto: Se aprecia claramente la reabsorción del hematoma y la disminución del edema. Tras la exploración realizada el paciente no refiere molestias a la flexo-extensión de codo (siendo esta completa) ni dolor en dicha zona. Conclusión: La técnica de EMPLASTE, aplicada precozmente sobre los hematomas, ayuda a la rápida absorción de la sangre en los tejidos blandos. Si además hay lesión muscular (rotura fibrilar) debemos iniciar una movilización precoz de la zona para alinear correctamente las fibras musculares dañadas (incluso con el emplaste puesto). Con todo esto disminuimos el dolor del paciente rápidamente y reducimos la formación de fibrosis muscular. Todo esto nos ayuda a disminuir el absentismo laboral, al practicar una movilización precoz, y curar mejor y más pronto que es de lo que se trata.