UNIVERSIDAD DE CHILE FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES DEPARTAMENTO DE EDUCACION PROGRAMA DE MAGISTER EN EDUCACION ENTREGADO A: ALVARO MORENO POR: HAROLD DAVID ORTIZ DIAZ BOGOTA, 2011 SOCIOLOGIA CULTURAL EDUCATIVA “Cuando le doy una mirada al nivel cultural que presenta la mayor parte de la comunidad educativa escolar, casi no logro comprender que es lo que estoy buscando” La transformación cultural que se está desarrollado en la infancia escolar se refleja del consumismo cultural y social, si bien Bourdieu analiza las formas tÃ−picas del capital cultural, en las cuales se observa una modalidad de adquisición y de transmisión, se manifiesta un claro primer acercamiento cultural por medio del vinculo familiar, (estado incorporado) este estado cultural es claramente transmitido o adquirido desde su entorno natural donde el niño adopta las conductas culturales que las circunstancias le ofrecen, entonces podemos de algún modo observar o objetivar un primer acercamiento a el nivel cultural familiar, por procedencia, modo y forma, este signo de capital cultural se destaca en la manera de adquisición como propiedad innata, además el mismo individuo se va a encargar de alimentar y retroalimentar el conocimiento cultural ya sea transmitido o adquirido (habitus). Un segundo momento es el estado objetivado en el cual se hace presente los bienes culturales (libros, instrumentos, mecanismos, medios de comunicación) que tiene su propio medio de transmisión en el cual la influencia principal se deriva del capital económico, dependiendo de el nivel social se desprenderá la fortaleza o facilidad de entrega de información y enriquecimiento cultural, aunque se ofrezcan muchos beneficios y facilidades para el acceso a estos macro-medios de difusión, no se presta un direccionamiento adecuado para la exploración y aprovechamiento real de cultura sana, el seguimiento, acompañamiento y plan de acción se debe realizar con un objetivo cultural y no solo 1 de distracción se debe convertir en una fuente de verdadera información; y el complemento de este desarrollo cultural se fundamenta en el estado institucionalizado, que es aquÃ− donde debemos actuar como equipo de preparación convivencial y cultural donde se maneje el desarrollo humano como un conjunto de actitudes, valores, compromisos, fuentes de información, guÃ−as plenas de saberes con fines de sensibilización personal y cultural, la preparación para afrontar y enfrentar la sociedad se basa en un equipo de trabajo institucionalizado, donde la familia, la sociedad y la comunidad educativa forman un equipo de calidad en pro de desarrollo culturizado. La cultura escolar deber llenar a cada uno de sus integrantes de categorÃ−as de pensamiento que harán posible la comunicación, a través de la adquisición de esquemas comunes de percepción, pensamiento y acción; La cultura no es solamente un código ni un repertorio común de respuestas a problemas recurrentes, es un conjunto compartido de esquemas fundamentales, previamente asimilados, a partir de los cuales se articulan una infinidad de proyectos particulares directamente aplicados a situaciones también particulares. La relación que un individuo mantiene con su cultura depende fundamentalmente de las condiciones en la que la ha adquirido, especialmente porque el acto de transmisión cultural es la actualización de un cierto tipo de relación con la cultura. La escuela muestra una cultura impuesta mas por rutina que por necesidad pedagógica, esto conlleva entonces a la repetición de un circulo sin expansión y peor aun con tendencias de reducción, este programa de pensamiento llamado cultura se va a transmitir por medio de una programación metódica facilista sin consecuencias u objetivos, muchas veces sino la mayorÃ−a nos quejamos de la falta de pensamiento o falta de desarrollo cuando somos nosotros los que ya sea por imposición o decadencia no nos preocupamos o no nos ponemos una meta o un reto de culturizar de alguna manera el esquema escolar dada esta condición se tiene que preparar a los alumnos para responder los problemas de la escuela, los profesores nos vemos obligados a organizar de antemano los propósitos según el nivel cultural o social que tienen los alumnos debemos encontrar y responder a estos problemas; debito a la evolución o falta de la misma no es en los manuales donde se encuentran discursos organizados en función de los temas sobre los que hay que disertar. La recopilación de experiencias, textos, vivencias, manuales, etc. son el tipo de obras subordinadas a la función de valorar y ordenar que incumbe a la escuela. AsÃ−, el programa de pensamiento y acción que la escuela tiene por misión transmitir debe una parte importante de sus caracterÃ−sticas a las condiciones institucionales de su transmisión y a los imperativos propiamente escolares. La cultura que trasmite separa a los que la reciben del resto de la sociedad por un conjunto de diferencias sistemáticas: los que se han apropiado de la “cultura erudita” trasmitida por la escuela disponen de un sistema de categorÃ−as de percepción, de lenguaje, de pensamiento y de apreciación que les distingue de los que no han conocido otro aprendizaje que los trucos del oficio y los contactos sociales con sus semejantes. El habitus de clase Este concepto permite expresar cómo son los procesos de aprendizaje y analizar cómo, mediante el trabajo de inculcación y de apropiación, estos niveles estructurales genera cambios notorios en grupos e individuos y toman la forma de disposiciones duraderas. Por esta razón, todos los educandos que se apropian de esta estructura presentan condiciones objetivas de presencia similar, y a su vez tienen en consecuencia sistemas de disposiciones naturales. El habitus de clase hace referencia al sistema de habilidades comunes que se pueden llegar a desarrollar, mantener y practicar bajo ciertos parámetros o estructuras de enseñanza. Este habitus se empieza a definir cuando un grupo de estudiantes empiezan a mostrar caracterÃ−sticas similares de comportamiento, estudio, atención, creatividad, etc., el énfasis o estructura de estudio es semejante y por tanto se puede enfocar a un mismo propósito que va a demostrar su resultado, los procesos de génesis de las clases intervienen tanto la pedagogÃ−a espontánea como la pedagogÃ−a racional, El trabajo especÃ−ficamente pedagógico, racionalmente orientado a la producción de habitus, contribuye a la integración de los grupos y clases sociales, y a la organización de las experiencias, ésta multiplicidad de culturas, criterios y esquemas van a enriquecer de algún modo el enfoque cultural de los escolares. 2 Bourdieu afirma que solo una teorÃ−a adecuada del habitus permite revelar las condiciones sociales y reales del ejercicio en función de justificar el orden social que por otra parte es el más disimulado de los factores ideológicos de la escuela; es asÃ− como la labor en la comunidad estudiantil se debe dirigir mas por los conceptos de producción mental, que por el mismo medio social, se deben buscar habitus que reflejen a esta comunidad y no la que nos imparte el sistema por criterios de creencias, religiones o polÃ−ticas y economÃ−as sin fundamentos que solo buscan mostrar estatus ficticios. Si se tiene en cuenta que en toda sociedad de clases existe un sistema de acciones pedagógicas estructurado (sistema escolar) destinados a reproducir los habitus que corresponden con los intereses de las clases dominantes, el trabajo pedagógico escolar va a tener una productividad diferencial de acuerdo a la clase social de origen de los individuos. Para los que provienen de los sectores dominantes, la educación escolar tendrá el sentido de una reeducación, para los que pertenecen a los sectores dominados, será de deculturación. Cuando existe una distancia considerable entre los habitus incorporados y los contenidos del currÃ−culum escolar la relación pedagógica, si quiere ser eficaz, debe adquirir formas notoriamente impuestas, El aprendizaje por familiarización y las pedagogÃ−as racionales constituyen dos modos de adquisición de la cultura y la competencia cultural de cada individuo va a quedar marcada por su origen y a definir modos particulares de relación con la cultura. Sin embargo, aunque el aprendizaje escolar se basa sobre los habitus previamente adquiridos y, por tal razón, no se puede adjudicar toda la competencia desarrollada por un individuo únicamente a la acción de la escuela, se puede afirmar que la escuela deberÃ−a o podrÃ−a cumplir una función remedial. La educación escolar es tanto más necesaria como estrategia de adquisición de capital cultural en la medida en que no ha sido posible obtener el mismo mediante herencia familiar. Para aquellos individuos que pertenecen a los sectores más desposeÃ−dos de capital económico y cultural, el recurso de la escuela se constituye en el único camino para apropiarse de los bienes culturales. BibliografÃ−a Pierre Bourdieu, introducción elemental, Ôlvaro Moreno Duran / José Ernesto RamÃ−rez P. Bourdieu y Jean Claude Passeron, Los estudiantes y la cultura Pierre Bourdieu, "Elementos de una teorÃ−a sociológica de la percepción artÃ−stica", 3