CONSEJO DE SEGURIDAD Intervención del Embajador Néstor Osorio Debate sobre Operaciones de Mantenimiento de la Paz Nueva York, 26 de agosto de 2011 Señor Presidente: Colombia se asocia al duelo que afecta a la comunidad internacional y a la familia de las Naciones Unidas, con motivo del trágico ataque ocurrido esta mañana en Nigeria. Al condenar esta, y todas las acciones terroristas, enviamos nuestras sentidas condolencias a las familias de las víctimas. Sr. Presidente, quiero agradecer la presencia del Secretario General Ban Ki-moon y la exposición que ha hecho sobre el tema que nos ocupa y expresarle a usted nuestras felicitaciones por la iniciativa de organizar un debate sobre las operaciones de mantenimiento de la paz, basándonos en un documento de gran interés e importancia (S/2011/496, anexo). Concordamos con la opinión allí expresada, en el sentido de que, a pesar de que la noción de “mantenimiento de la paz” no apárese en forma explicita en la Carta de las Naciones Unidas, esta se ha convertido en uno de los principales instrumentos de la organización. Asimismo, estamos de acuerdo en que a pesar de las deficiencias que todavía se presentan, las operaciones de mantenimiento de la paz representan, quizás, la manifestación más tangible del trabajo colectivo y mancomunado de los Estados Miembros con el fin de mantener la paz y la seguridad internacionales. Colombia sigue de cerca las discusiones relativas a la reestructuración y fortalecimiento del funcionamiento de las operaciones de mantenimiento de la paz. Convencidos de la necesidad de promover la convivencia pacífica, participamos de manera continua y constructiva en las tareas que la Organización desarrolla en esta área, y particularmente en operaciones de mantenimiento y consolidación de la paz, como la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití, la Fuerza Multinacional de Paz y Observadores en el Sinaí y la Oficina Integrada de las Naciones Unidas para la Consolidación de la Paz en Sierra Leona. Para Colombia, los principios básicos del mantenimiento de la paz tales como el consentimiento de las partes, la imparcialidad, y el uso de la fuerza sólo en caso de defensa propia o defensa del mandato, son de indispensable cumplimiento. Consideramos que es conveniente reiterar la vigencia de estos principios y resaltar que ellos deben ser tomados en cuenta en el momento de analizar las alternativas con las que se busca responder a los desafíos impuestos por la realidad. Nos alientan las iniciativas orientadas a mejorar los acercamientos entre el Consejo de Seguridad, órgano que planifica y adopta mandatos sobre las operaciones de mantenimiento de la paz, con aquellos que deben ponerlas en práctica, y en especial con los países que aportan contingentes. Coincidimos en la perspectiva de que la definición de los mandatos de las operaciones de mantenimiento de la paz debe atender el contexto político y estar orientada a objetivos claros y realistas, que guarden relación con los recursos disponibles. En este sentido, los aportes de la amplia membresía representada en la Asamblea General y en particular en el Comité Especial de Operaciones de mantenimiento de la Paz y en la Quinta Comisión resultan fundamentales en la tarea de buscar mayor eficacia y transparencia en las tareas relativas a las operaciones de mantenimiento de la paz. Considero importante resaltar tres aspectos fundamentales para el funcionamiento eficaz y eficiente de las operaciones de mantenimiento de la paz. El primero es, la colaboración en los propósitos, dedicada a los aspectos políticos y de planeación de las operaciones de mantenimiento de la paz; el segundo es la colaboración en la acción, orientada a los aspectos operativos en el terreno; y el tercero es “la colaboración para el futuro”, centrada en el desarrollo de capacidades sostenibles para enfrentar los retos futuros. Uno de los aspectos esenciales para hacer concreta esta colaboración es el establecimiento de un diálogo oportuno, que tenga lugar antes de la aprobación y renovación de los mandatos. Deseo destacar, en este sentido, la práctica establecida por el Consejo de Seguridad de convocar reuniones con los países que aportan contingentes previamente a la renovación del mandato de la respectiva misión. Alentamos a que se continúe aplicando este procedimiento de manera regular. Es muy oportuno hacer un balance sobre el significado y alcance de las Misiones para el mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas, pues consideramos apropiado revisar y, si es del caso, proceder al replanteamiento de la naturaleza y propósito de este tipo de misiones. De igual manera, ser más audaces en el despliegue de las tropas y del componente civil, el cual cobra vigencia, debido a que la dinámica de los conflictos ha cambiado sustancialmente por factores tales como el crimen organizado, el desplazamiento masivo, la violación de los derechos humanos, entre otros aspectos. Es bien sabido que las misiones para el mantenimiento de la paz no se pueden circunscribir sólo el despliegue de elementos militares y de policía, sino que también, deben tener un plan estratégico que incluya las capacidades nacionales propias de los países anfitriones acompañadas de programas de desarrollo social, político y de desarrollo autosostenible, bajo los principios de respeto y defensa de la población civil, que es la más vulnerable, la soberanía y la libre determinación de los pueblos tal como lo consagra la Carta. Finalmente, quiero también resaltar la permanente disposición y receptividad al diálogo que mi delegación ha encontrado en los funcionarios del Departamento de operaciones de mantenimiento de la paz, con motivo de la coordinación de diversos aportes a Haití realizados por mi país, tanto de manera bilateral como a través de la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití. Colombia renueva su disposición a compartir los avances institucionales desarrollados, así como su voluntad de continuar contribuyendo a las operaciones de mantenimiento de la paz en la medida en que nuestras condiciones internas lo permitan y participar activamente en las discusiones relativas a la reestructuración y fortalecimiento de la capacidad de las Naciones Unidas en este campo. Muchas gracias.