Discurso ateo: Buenos días público presente, quiero agradecer la invitación a este congreso de religiones al cual tengo el gusto de asistir hoy, quisiera agradecer en especial a mi padre pedro herrera, sin el no estaría acá hablándole a ustedes, primero me presento mi nombre es tomas tobar, tengo 18 años y soy un miembro del ateísmo hace 3 años atrás, les contare un poco de mi historia y como termine haciendo esto que me ven hoy en día. Yo era un joven el cual venia de una formación católica gracias al colegio en el que mi familia opto por ponerme, desde ahí siempre adore a dios y a la religión, pero nunca me sentí lleno, siempre estaba tratando de buscar algo más, de hecho probé varias religiones antes del catolicismo, como la mormona, evangélica…etc. hasta que un día me surgió el bichito de la duda y me empecé a cuestionar cosas de dios que antes no se me pasaban por la mente y es que uno esta tan cegado con dios que teme fallarle y teme de él porque es un ser divino y está prácticamente prohibido dudar de su existencia, pero yo investigue y adivinen que, ninguna prueba de Dios ni de su existencia, esto fue un balde de agua fría para mis creencias y transformo mi manera de pensar, a todo esto no crean que esto fue de un día para otro, yo siempre creí en la ciencia y me gustaban las teorías de la creación del mundo como el big bang y eso. Desde ese día creí solo en la ciencia, y es que no creen que es estúpido creer a ojos cerrados de que hay un dios celestial omnipresente que nos está viendo a todos en cada momento. Si totalmente UTOPICO. Yo prefiero centrarme más en la evidencia y creer en lo verídico y en lo que está comprobado, no tan solo en lo divino, y es aquí cuando nace el ateísmo en mi. Primero, que es el ateísmo? Ateísmo es la condición de aquellos que no creen en Dios. El ateo, por lo tanto, es una persona que descree de cualquier tipo de divinidad o de entidad sobrenatural. Puede decirse que el ateísmo es lo contrario al teísmo, la doctrina de los que sostienen la existencia de una o más divinidades. Muchas personas se confiesan claramente ateas porque consideran, por ejemplo, que si realmente existiera un Dios no sólo no permitiría los males que asolan a la población sino que además evitaría que seres humanos inocentes sufrieran todo tipo de dolores, de daños y de situaciones míseras.