¿Cómo se puede interpretar, desde el pensamiento de Epicuro y su planteamiento sobre los placeres, la actual sociedad consumista mundial donde accedemos a bienes y productos que no necesitamos? Valentina Hereira Romero Vivimos en una sociedad cegada de placeres, pues desde el comercio se nos bombardea diariamente con millones de productos y servicios, que buscan mejorar nuestras vidas, así es como promocionan los productos; tanto es el poder del consumismo que el planeta tierra sufre las consecuencias, un ejemplo claro es la tendencia “fast fashion” la cual promueve la producción excesiva de prendas de vestir prácticamente desechables, ¿qué hay detrás de esta tendencia?¿ Por qué una persona compra compulsivamente prendas que no necesita? Desde mi punto de vista esto ocurre porque las personas quieren estar a la moda, la industria de la moda impone ciertas tendencias en colores y diseños, estas se renuevan cada vez con mayor frecuencia, de esta forma hombres y mujeres buscan desesperadamente no quedarse fuera de lo que todo el mundo está utilizando, pues viven presos de los deseos no naturales y no necesarios como plantea Epicúreo, estas personas ciertamente no necesitan tanta ropa, viven preocupadas por como lucir ante la sociedad, además causan un inmenso daño al medio ambiente por lo que crean un círculo vicioso de sufrimiento y tormentos. Epicúreo propone el término ataraxia, que se explica como la carencia de perturbación en el alma. Creo que son muy pocas las personas que logran vivir en ataraxia, pues en su mayoría nos dejamos seducir por los placeres banales como la riqueza, el poder, honor etc. Si ponemos en práctica este concepto, una persona que busca durante toda su vida dinero y lujos, no va obtener plenitud pues su preocupación es obtener dinero sin importar que, para ello debe poner en juego incluso su razonamiento y valores morales, temas como que opina la gente, que puedo aparentar empiezan a ser el centro de sus pensamientos. Es en este punto donde el autor del texto, identifica que el elemento que rige la vida moral del ser humano debe ser el razonamiento, pues debe usar la sabiduría para tomar decisiones, para elegir entre placeres sanos (que no conllevan dolores) y placeres que brindan felicidad efímera y conllevan muchas perturbaciones. Si lo pensamos detenidamente, alcanzar la plenitud es totalmente viable pues no significa restringirnos de disfrutar de las cosas que nos gustan, como la buena comida, comodidades, y prácticas de entreteniendo; estas acciones son catalogadas como placeres naturales pero no necesarios los cuales deben ser usados con mesura, pues se pueden confundir con el tercer grupo y es aquí en donde el ser humano se embriaga de deseos que causan perturbación a su vida, muchas veces es difícil identificar estos placeres pues constantemente en medios de comunicación, conversaciones familiares y del círculo social se habla de que entre más tenga más feliz se puede ser, por ejemplo la fama es anhelada por muchos, aunque desconocen el precio de esta fama, que trae consigo vacíos interiores, preocupaciones superficiales y metas en la vida vanas.