LA EVALUACIà N EN LA ENSEà ANZA. La evaluación no es una práctica esporádica o circunstancial de los profesores y de la institución escolar, sino algo que está muy presente en la práctica pedagógica. 10.6 Las funciones de la evaluación en la práctica. La evaluación desempeña diversas funciones, es decir, sirve a múltiples objetivos, no sólo para el sujeto evaluado, sino de cara al profesor, a la institución escolar, a la familia y al sistema social. Es impensable que el sistema escolar no proporcione “etiquetados” de los alumnos cuando salen de él y pasan a la vida productiva. Es sorprendente la rapidez con la que los supuestos por los que se realiza la evaluación en las escuelas son asimilados por los procesos de ubicación social y creación de jerarquÃ−as. Las prácticas de evaluación tienen influencia decisiva en los alumnos, en sus actitudes hacia el estudio y hacia el contenido, en los profesores, en las relaciones sociales dentro del aula y en el entorno social. Los profesores tienen que plantearse esta doble perspectiva: para qué y cómo evaluar, desde un punto de vista pedagógico, y qué funciones cumple la evaluación que realizan. Ordenando las funciones de la evaluación, tendremos los siguientes tipos: • Definición de los significados pedagógicos y sociales. • Funciones sociales. • Poder de control. • Funciones pedagógicas: • Creadora de ambiente escolar. • Diagnóstico. • Recurso para la individualización. • Afianzamiento del aprendizaje. • Función orientadora. • Base de pronósticos • Ponderación del curriculum y socialización profesional. • Funciones en la orientación escolar. • Proyección psicológica. • Apoyo de la investigación. A) Definición de los significados pedagógicos y sociales. A través de las prácticas variadas de evaluación escolar, apoyadas en exigencias no siempre pedagógicas y en valores no siempre defendibles, nada mas y nada menos se construyen categorÃ−as como las de rendimiento educativo, éxito y fracaso escolar del alumno, buenos y malos escolares, calidad de la enseñanza, progreso escolar, buen-mal profesor, buen centro escolar. Los usos y los resultados de la evaluación, aunque sean discutibles sus procedimientos, generan realidad y sirven para pensar, hablar, investigar, planificar y hacer polÃ−tica educativa sobre la educación. B) Funciones sociales. 1 En una sociedad en el que el nivel de escolaridad alcanzado, el grado de rendimiento que se obtiene en los estudios cursados, tienen que ver con los mecanismos y oportunidades de entrada en gran parte del mercado laboral, la certificación de “valÃ−a” que las instituciones escolares expiden a los alumnos cumple un papel social fundamental. Las titulaciones garantizan totalmente niveles de competencia, lo que no se puede asegurar es tal garantÃ−a. Los tÃ−tulos simbolizan la posesión del saber. Salir de la institución mejor o peor “calificado” tendrá inevitablemente sus consecuencias. Una sociedad jerarquizada y meritocrática reclama la ordenación de los individuos en función de su aproximación a “la excelencia”. La democratización del acceso a la escolaridad básica hace de la enseñanza una oportunidad para todos, sea cual sea su circunstancia personal y su origen social. Trata de proporcionar oportunidades para que todos adquieran la cultura básica y lleguen al final. AsÃ− podemos explicar la aparición de la idea de que la evaluación, es algo del sujeto consigo mismo. C) Poder de control. La posibilidad de acreditar el valor del aprendizaje escolarizado, obviamente dota a quien lo tenga de un instrumento importante de poder sobre los evaluados. Los profesores, con esa capacidad en sus manos, regulan la conducta en clase, controlan las posibles insumisiones y mantienen la actividad del alumno trabajando con contenido sy metodologÃ−as que no son atractivos por sÃ− mismos. El poder de un “cero” o suspender a un alumno es una amenaza afectiva y mas tolerable que el castigo fÃ−sico o la ridiculización social ante los compañeros. Con la evaluación puede controlar la conducta del alumno. D) Funciones pedagógicas. • Creadora de ambiente escolar: la proyección que tiene la evaluación en las relaciones interpersonales en la enseñanza, entre alumnos y entre éstos y los profesores, potenciados por el hecho de que muchos de los resultados trascienden al exterior, es algo evidente para cualquier observador de la realidad escolar. Hacerse notar, competitividad entre alumnos, rechazo a obtener peores resultados en los trabajos colectivos… son expresiones creadoras de ambiente escolar. • Diagnóstico: trata realmente de intervenir a la mejora del alumno. • Conocimiento del estudiante, para conocer el punto desde el que parte, establecer necesidades de aprendizajes previas (EVALUACIà N INICIAL). Es necesario el domino de los aprendizajes previos. • Conocimiento de las condiciones personales, familiares o sociales del alumno. • Para tomar conciencia sobre el curso del aprendizaje, es decir, evitar el fracaso antes de que se produzca. • Se puede diagnosticar con el fin de determinar el estado final de un alumno. • Diagnosticar cualidades de los alumnos. 3) Recurso para la individualización: la función diagnóstica de la evaluación permite la adaptación de la enseñanza a las condiciones del alumno y a su ritmo de progreso asi como el tratamiento de dificultades particulares. 4) Afianzamiento del aprendizaje: tratar de que lo aprendido quede bien afianzado, para poder seguir aprendiendo. 5) Función orientadora: la evaluación es una guÃ−a para que, tanto él, como los profesores o los padres tomen decisiones apropiadas en la elección de tipos de estudios, de materias optativas, etc. 2 6) Base de pronósticos: los datos que conocemos sobre las personas o sobre alguno de sus rasgos son una guÃ−a para las percepciones que elaboramos sobre ellas, de la conducta que desarrollaremos y de lo que esperamos de ellas. Los resultados de las evaluaciones son referentes para crear imágenes de los alumnos en el medio escolar y en el exterior, sobre su valÃ−a académica o su “excelencia”. 7) Ponderación del curriculum y socialización profesional: las formas de evaluar, los contenidos y aprendizajes que se seleccionan en la evaluación, ponen de manifiesto los esquemas implÃ−citos, la idea que se tiene de “aprendizaje ideal” y de conocimiento relevante. Actúan de filtros en el desarrollo del curriculum. Si es evidente que se evalúa para ver lo que se aprende, también es cierto que a través de lo qu ese exige al alumno se sabe lo que se enseña, lo que se considera relevante. E) Funciones de la organización escolar. El sistema escolar está organizado en niveles, cursos y especialidades, pueden ser varios senderos que conducen a diversos destinos en distintas altitudes. Todos recorremos un camino juntos, pero mas tarde unos quedarán estancados y otros continuarán. Los que progresan irán dispersándose por trayectorias diferentes. Pero, ¿Cómo se regulan los recorridos posibles? Dándoles credenciales a los usuarios cuando pasan por determinados niveles de dificultad para seguir ascendiendo, que les indican para qué senderos valen y para cuáles no. La previsión de plazas escolares de niveles secundarios y superiores, se puede realizar no sólo por el pronóstico de población que puede acudir a ellos, sino también considerando cuántos culminan con éxito los niveles inmediatamente anteriores. F) Proyección psicológica. Es obvio que la evaluación tiene repercusiones psicológicas en la motivación, en la modelación del autoconcepto personal, en las actitudes del alumno. La evaluación puede tener un carácter extrÃ−nseco, es decir, cuando queremos aprender por la recompensa que supone el éxito y eludir las consecuencias del fracaso, o intrÃ−nseca, es decir, cuando aprendemos por el interés que despierta el contenido y la actividad. A un niño le gustar aquello donde son más apreciados, pudiendo desenvolverse ante los malos resultados. El autoconcepto también influye en este apartado (imagen que tenemos de nosotros mismos), tiene consecuencias en la conducta posterior del sujeto Las prácticas de evaluación son las encargadas de proporcionar una información constante, revestida de autoridad, reforzada por la familia, que se convierte en relevante para que el alumno obtenga noticia de su valÃ−a. G) Apoyo de la investigación. A través de la investigación obtenemos unos resultados cuantificables de las evaluaciones como únicas herramientas para hablar de calidad de centros, profesores y del sistema en su conjunto. Para los profesores tiene relevancia en la medida en que se sientan llamados a analizar su propia práctica o la experiencia educativa global del centro, ver como varÃ−an los datos de una clase a otra, entre ciclos y cursos diferentes, de unos profesores a otros, variaciones entre asignaturas o áreas, entre centros dentro de una misma zona, etc. 3 ¿Qué instrumentos emplear? 1.- La elección de las técnicas depende primero de ¿Qué se quiere evaluar?. 2.- Cada técnica o procedimiento de evaluación puede desempeñar en desigual medida las funciones que hemos sistematizado. 3.- Las condiciones de la práctica y del trabajo de los profesores hacen que unos procedimientos y técnicas sean más factibles de utilizar que otros. Hay que conocer las ideas previas que tienen los alumnos sobre un tema o un concepto antes de abordarlo. * Es necesario elegir procedimientos posibles de desarrollar. 4