Una nueva alternativa en el manejo pre quirúrgico del onfalocele gigante. Rengifo Cuello, Garibaldi. El onfalocele es un defecto congénito de la pared abdominal a nivel de la región umbilical, con la salida de vísceras al exterior, cubierta por una capa que está constituida por membrana amniótica exteriormente y una de peritoneo en el interior separados por una fina capa de gelatina de wharton. Defectos en el desarrollo de la pared abdominal anterior con onfalocele resultante o gastrosquisis, afortunadamente son anomalías raras. Se reportan frecuencias aproximadamente de 1 por cada 3,000 nacimientos para el onfalocele y 1 de cada 6,000 o más nacimientos para la gastrosquisis. ONFALOCELE: sinónimos, exomfalo, celosomía, hernia del cordón. Se le define al onfalocele como el defecto abdominal a nivel de la región umbilical, con la salida de vísceras al exterior cubiertas por una capa que está constituida por una membrana amniótica exteriormente y una de peritoneo por el interior, separadas por una fina capa de gelatina de wharton, contiene en su interior vísceras (hígado y asas intestinales), aunque también puede contener estómago y otras vísceras. Al onfalocele se le considera gigante cuando mide más de 5 centímetros de diámetro, contiene hígado y no puede ser cerrado primariamente. Los defectos del desarrollo de la pared abdominal con onfalocele resultante, afortunadamente no se observan con mucha frecuencia. Se observaron aproximadamente 1 por cada 3,000 a 3,500 nacimientos. El pronóstico y sobrevida dependen en gran medida: del peso del recién nacido, del tamaño del defecto, de la presencia de infecciones a nivel del defecto o problemas de septicemia y de la presencia o n de otras malformaciones graves asociadas. El onfalocele, es una anomalía rara, pero frecuentemente se asocia a otras malformaciones congénitas. La reparación del onfalocele gigante con la técnica de dos tiempos, procura salvar el obstáculo de la falta de capacidad de la cavidad abdominal (derecho a domicilio), para las vísceras herniadas, evitando el cierre con una compresión excesiva, lo que implica compromiso del retorno venoso a través de la cava inferior, elevación de los hemidiafragmas con compromisos respiratorios y lesiones propias de la pared intestinal. Dr. Rodríguez Blanco, William.