* Trastorno esquizoide de la personalidad ** Martha Davidron de Silberstein Mi interés por e! tema proviene de la clínica v de la frecuencia con que pacientes de difícil abordaje tcór ico-clíuico son finalmente clasificados como personalidad esquizoide o trastorno csquizoidc de la personalidad. Parte de la dificultad está dada por la ausencia de una entidad clínica definida. Los rasgos esquizoides, aparezcan o no, quedan encubiertos por toda la gama de fenómenos neuróticos. Pueden presentarse bajo el aspecto ele un científico riguroso y obsesivo. O de un adolescente tímido y con problemas de aprendizaje. O de una mujer hipercmotiva, ansiosa v dependiente. O de una persona fría, altanera, inconmovible, Surge así la necesidad de encontrar líneas de aproximación teórica que den coherencia a los fenómenos observados. Y la posibilidad de definir un perfil esquizoide más específico, rescatándolo de la extensión del término dentro de! cual se incluye cualquier aspecto no integrado del Yo. El objetivo de esta monografía es recorrer y, si es posible, articular aportes de autores posfreudianos desde perspectivas gcnct icocvolut ivas. dinámicas v estructurales que se enriquecen mutuamente, El aporte de los autores consultados impone la introducción del concepto de sclf junto a la teoría estructural del funcionamientu mental. Kohut conceptualiza e! self "como un contenido del aparato psíquico sin ser ninguna de sus instancias". Tiene representaciones diversas y contradictorias en cada una de las instancias psíquicas. Está catect izado libidinalmcntc y tiene continuidad temporal. * Presentada H en el Seminario ele! Dr. Benzion Winograd, "Teoría y estructura psicopatológica", APA, 1982. Dirección: Acevedo 1957, (1414) Capital Federal, R. Argentina. de la técnica 1212 Martha Davidzou de Silberstein Historia "Esquizo" en griego significa dividir, disociar. El término "esquizofrenia" es utilizado por B1euler para describir un proceso "que desintegra la capacidad asociativa del Yo, y sume al paciente en una vida autista". Esta división del Yo puede revestir distintas profundidades, ya que tanto puede presentarse frente a situaciones extremadamente críticas como en momentos ordinarios de la vida. Bleulcr hace el pasaje desde una concepción de enfermedad mental, orgánica, demencial a una noción dinámica del Yo y sus funciones de integración, lo que permite el recorrido desde el síndrome esquizofrénico al concepto de rasgos esquizoides de la personalidad. Clasificación El trastorno esquizoide se ubica fuera del ámbito de la psicosis, aunque conservando su relación de parentesco, a través del riesgo a la fragmentación del Yo. También se descarta su ubicación dentro de las neurosis de transferencia, ya que no puede ser enfocado como una problemática del Yo y sus pulsiones, centrada en la temática edípica, ni su psicopatología en el terreno de la represión. Queda así el ámbito de las neurosis narcisistas, donde la problemática estará centrada en los trastornos del seIf, en la indiscriminaciún sujeto-objeto, en la descripción del vínculo narcisista que los une. Tomando el aspecto psicopatológico esencial, el nesgo a la fragmentación, Kohut agrupa los trastornos narcisistas en: 1] Estados fronterizos: El sclf es débil. Su tendencia a la fragmentación es permanente. Pero, a diferencia de las psicosis, está encubierto por complejas defensas. En este subgrupo puede ubicarse el trastorno esquizoide que emplea la distancia emocional (disociación cuerpo-mente) para protegerse de la fragmentación psicótica. 2] Trastornos narcisistas de la conducta: El riesgo a la fragmentación es sólo temporario. El debilitamiento del sclf se manifiesta en síntomas aloplásticos (adicción, delincuencia, perversión). 3] Trastornos narcisistas de la personalidad: El debilitamiento nifiesta en síntomas autoplásticos (hipocondría, depresión). del sclf se ma- Ubicado dentro del ámbito de las neurosis narcisistas, se trata de personas caracterizadas por su extrema vulnerabilidad frente a situaciones vitales que impliquen desaires o pérdidas. Vulnerabilidad que se pone de manifiesto en el aislamiento afectivo y en las oscilaciones de la autoest ima. ¿Por qué tanta vulnerabilidad? Algunos autores (Bettelheirn. Winnicott, Kohut) se ocuparon de estudiar esta especial "fragilidad del Yo" a partir de la interacción entre el potencial genético evolutivo y el ambiente traumático. La interacción no adecuada entre el niño y el ambiente que lo circunda (especial. mente la madre) da como resultado trastornos en el normal desarrollo del self. Los aportes de B. Bettelheim iluminan el momento del "nacimiento del si mismo" desde la relación de mutualidad madre-hijo, y del estudio del autismo infantil, como su máximo fracaso. Scccion tuonograjias 1213 "El autista vuelve la espalda a la Humanidad. guieron su proceso de humanización?" [ ... ] ¿Qué factores extin- Describe al bebé como un sujeto activo en el momento de sus primeras experiencias, la mamada, \' los modos en que esta actividad puede o no ser respetada. En el niño autista ha sido destruida la participación activa en sus experiencias vitales, por una madre extremadamente rígida, ansiosa, que al estar solamente atenta a sus propias ncccsidndcs frustra sistemáticamente tocio intento activo del bebé. La lactancia es así la primera experiencia nuclear desde la cual se desarollan los posteriores sentimientos sobre el "sí mismo" v los demás. Ya está en juego, a pesar de la dependencia total, la posibilidad de modelar parte de la experiencia. Cuando esto es así se consiguen la satisfacción de una necesidad biológica \. la adecuada satisfacción de una relación emocional. "Cuando Se le impide ser activo alguna se posesiona de él /IIW rabia tensiones En o cuando Sil accion uo suscita respuesta desamparada de inipot ent e v cae VÍctima internas," esta experiencia se establecen las bases del futuro sentimiento de lealtad-deslealtad. La madre que sabe aliviar adecuadamente las necesidades del bebé le permite discriminarlas y reconocerlas, ir estructurando su Yo discriminado del no Yo, la percepción de la realidad y el interés por la misma: "El bebé sabe que su llanto en demanda de alimento conduce a su satisfacción por otros, en SL' horario". coniianra.desconíianza, En caso contrario madre v objeto pasivo es obligado a existir de sus cuidados. como La base csquiroidc de la personalidad queda medida en que situaciones externas desfavorables posibilidad de influir sobre la situación. "La imposibilidad por relacionarse," Winnicotl profundiza de modificar el estudio el medio prolongación constituida convencen lleva de la relación pasiva de la en esta fase en la al bebé de su im- al abandono del esfuerzo madre-hijo: "Es la madre quien da al niño el primer envión en la vida, en condiciones de seguridad tan cercanas a la perfección como es posible imaginar, en una relación humana que entraña una total dependencia física y emocional, para luego permitirle separarse poco a poco de ella, adquirir su autonomía y convertirse en un ser independiente sin perturbar ese sentimiento que ahora es permanente -" estructural, de relacion, -" de intima seguridad." Cabe agregar que en esta relación humana también el niño aporta sus disposiciones innatas, que interactuando con la estructura psíquica materna llevan a la constitución de parejas madre-hijo más o menos armónicas. La comunicación dentro de esta pareja se establece en niveles fundarncntalmente inconscientes, prevcrbales * y cenestésicos "", Cuando esta relación falla, se abren las puertas de la psicopatologfa en sus expresiones psicóticas, psicosomáticas, esquizoidcs. Se han intentado correlacionar el tipo de falla, el momento en que se produce y el trastorno resultante. " Materia prima en la constitución del inconsciente escindido, previo a la constitución del lenguaje, sujeto a los procesos de repetición. ".. Este tipo de información está muy desarrollada en el momento del nacimiento y se pierde con la maduración. /214 1\;1(//"1//(/ Davidtint de Silbcrst ein Así el trastorno psicosomático se relaciona con trastornos de la información a niveles cenestésicos que se transforman en niveles de tensión que cI aparato psíquico no puede evacuar. El trastorno psicótico tendría que ver con informaciones contradictorias entre los niveles conscientes e inconscientes. El trastorno csquizoidc podría ubicarse como la pérdida irreparable de una relación que funcionó en un nivel de gratificación narcisista elevado y que se rompe bruscamente. El bebé carece de medios de integración propios v depende exclusivamente de la integración que el ambien te (madre) le provee. Por lo tanto estas fallas se constituyen en verdaderas situaciones traumáticas, en tanto derivan en un factor desorganizan te del psiquisrno v en fallas de estructuración permanente. La relación ajustada v armónica, con fallas tolerables v mínimas, promueve v facilita las tendencias a la integración que forma parte de la constitución del niño y lo catectizan Iibidinalrncnte. El bebé sólo abandona su narcisismo primario (como estado de quietud plnccn tcrn) frente al surgimiento de sus necesidades. Ahí se vuelve receptivo, aparece un estado de tensión. La satisfacción lo restituye al narcisismo primario, a la quietud v falta de tensión. La alternancia adecuada entre los momentos de quietud y de tensión son factores importantes en la maduración. Cuando los estados de tensión pasan un cierto umbral se constituyen en factor de desorganización v la maduración se ve perturbada. Estos trastornos en la relación, en tanto aún no está estructurado el psiquismo, no derivan en angustias sino en tensiones no resueltas. Es lo que Winnicott denomina "agonías primitivas", que son la materia prima de las angustias psicóticas: "deshacerse", "caer para siempre", "no tener relación alguna con el cuerpo", "carecer de orientación". Angustias todas éstas detectables en personalidades esquizoides. Los aportes de Winnicott sobre falso y verdadero sclf permiten una aproo ximación teórica cercana a la observación clínica. Habla del verdadero sclf como "núcleo de la personalidad", como "un potencial heredado en fase de experimentación de una continuidad v de adquisición a su modo y ritmo, de una realidad psíquica personal". Las amenazas a este núcleo desencadenan "angustias de aniquilamiento". Cuando esta amenaza es reiterada, el movimiento defensivo lleva al aislamiento, disociación, escisión del Yo, que permanecerá oculto y secreto a través de la creación de un falso sclf que lo protege y aísla. Verdadero sel], conectado con la instintividad que se va fortaleciendo en la medida en que se vavan dando las condiciones ambientales que le permitan percibir y discriminar sus necesidades, los efectos a ella relacionados, y tenga el espacio necesario para participar activamente en la satisfacción de las mismas. Si esto tiene lugar en una continuidad temporal. se va consolidando el sentido de identidad. Esto es lo que ha perdido el esquizoide. Ve el mundo a través del otro. No tiene el uso de su afect ividad. Su mundo interno está "vacío", "sin existencia", "fútil". Disocia su ser psicosomático, \/ se organiza utilizando el intelecto. Pueden llegar a ser individuos muy exitosos en el plano intelectual pero a costa del empobrecimiento de toda su personalidad. El falso self se constituye alrededor de la sumision. El bebé abandona sus "propios gestos" ~' adopta el que la madre le coloca. También se bloquea la simbolización, ya que ésta implica el primer espacio propio. Sccciou nionograí /2/5 ias Bettelheim y Winnicott enfatizan la posibilidad de aniquilamiento de una fuerza vital y activa frente a la vida y su remplazo por el aislamiento, que se exterioriza como vivencia de vacío, desesperanza, falta de iniciativa y desconfianza, que da cuenta del síndrome csquizoide básico. Una aproximación metapsicológica Kohut aporta una conccpcion genét icocvolutiva y mctapsicológica con interesantes derivaciones teóricas y técnicas. Los inevitables defectos del cuidado materno, aun los del más ajustado a las necesidades del bebé, perturban el narcisismo primario: "El niño reubica la perfección anterior por medio del establecimiento" de la imagen del sclf grandioso exhibicionista y la entrega de la perfección anterior a un "objeto del self omnipotente y admirado". En condiciones óptimas (frustración mínima y tolerable), el self grandioso evoluciona, se integra a la personalidad adulta y la provee de autoestima. La irnago parental idealizada también se integra estructurando los aspectos idealizados del Superyó. Es decir que se va dando lo que Kohut denomina "internalización transmutadora", "Las catexias narcisistas retiradas de la imago arcaica de perfección incondicional (narcisismo primario) da lugar al establecimiento de una partícula de estructura psicológica interna, que asume la función materna para mantener el equilibrio narcisista". Las situaciones traumáticas excesivas, sobre todo la falta de empana con los requerimientos del niño, impiden esta transformación. El sclf queda fijado a configuraciones arcaicas, de un sclf grandioso y de un objeto idealizado cuyas consecuencias son: a] Empobrecimiento b] La energía invertida de las funciones en estas más estructuras adultas de la personalidad. es sustraída a otras actividades. La existencia de un objeto externo idealizado se vuelve indispensable para mantener la homeostasis narcisista. Su ausencia determina la aparición de ansiedad difusa, vacío, depresión. De ahí su gran vulnerabilidad. Los objetos externos caicctizados narcisistamente son vividos como partes del propio sclf', El control que se ejerce sobre dios está próximo al que se espera poseer sobre el propio cuerpo y la propia psiquis. Cumplen así un papel supletorio de los segmentos faltantes del aparato psíquico del paciente. Al mismo tiempo, a través de esta matriz básica: del sclf grandioso y del objeto del self idealizado, Kohut postula la existencia de un Yo que ya ha alcanzado un grado de cohesión. Cohesión que, cuando está en riesgo, produce como movimiento defensivo la retraccián esquizoidc. Kohut la plantea como una defensa rígida y permanente de un Yo con tendencia a la fragmentación, frente a situaciones que impliquen heridas narcisistas. El aislamiento afectivo que consiguen les permite evitar el riesgo frente a estas heridas narcisistas. En cambio, concentran sus recursos libidinales en ocupaciones que necesiten el mínimo compromiso afectivo. Kohut enfatiza la importancia de la mirada en el esquizoidc. Son pacientes "curiosos". La mirada es un importante factor de cohesión del Yo, sobre todo cuando han faltado experiencias de estimulación táctil. La mirada le permite conectarse con los objetos, sin comprometer la distancia. El enfoque de Kohut, al poner el énfasis en las variables gcnéticoevolutivas, tiene consecuencias técnicas definidas: 12/(, Murtlta Davidzon de Silbcrstein - El distanciamiento alccrivo ex consecuencia de los trastornos genéticoevolutivos. Esto saca el cnfusis de la incapacidad para dar y recibir afecto (Fairbairn) , para centrarlo en el tipo de estructura psíquica, que determina esta particular manera defensiva. - Se hace imprescindible psicopatología de los padres. la reconstrucción del ambiente y de la primitivo - Da un papel protagónico a la instalación de transferencias narcisistas idealizadas o especulares. El tratamiento debe proveer el marco ernpático adecuado para el despliegue de las estructuras arcaicas, v el trabajo analítico debe darle la posibilidad de transformación e internalización que lo provea de la es tructura psíquica fal tan te. Tanto Winnicott como Kohut desarrollan una tcoría centrada en el desajuste ele la díada madre-hijo y en los trastornos en la maduración del self que son su consecuencia. Para estos trastornos, la estructura csquizoide funciona defensivarnente y encuentra, a pesar de la escisión (desconexión afectiva, para Kohut; falso self, para Winnicott), una solución cohesiva para el Yo. Perfil clínico Está dado fundamentalmente por la [alta de rclacionalidad del Yo, el aislamiento, que se traduce en un déficit en las relaciones interpersonales donde funcionan sin participar realmente. Hav aislamiento. Soledad. Falta de relación con los objetos. Painceira propone una división en dos grandes grupos: Esquizoidcs ancst csicos: Corresponde a las caractcropat ías csquizoidcs, donde el Yo es sintómico con sus dificultades. Son los de más fácil diagnóstico. Responden a las personas frías, insensibles, rígidas en sus actitudes, excesivamente racionales, sin lazos afectivos con las personas. Generalmente son científicos, investigadores que consultan por trastornos en el área sexual o por temores hipocondríacos. Esquiroides hiperestésicos: Su diagnóstico es más difícil, ya que su hipersensibilidad (en el área de la vulnerabilidad narcisista), sus reacciones de odio v violencia, los niveles de ansiedad (ansiedad de aniquilamiento), su excesiva docilidad v mimetismo pueden llegar a encubrir su desconexión afectiva. Suelen consultar por inhibiciones sociales, sexuales, o de aprendizaje. En ambos tipos el núcleo principal, el aislamiento (o autismo) , revela ruptura del contacto vital con la realidad. Aislamiento con el cual protegen intimidad (vida secreta). Esto distancia da cuenta: de su escasa cmpat ía. de la rigidez de sus límites, que imponen, de las vivencias de vacío que los atormenta. La desconfianza es un elemento constante. confianza indiscriminada e incondicional. que Las disociaciones (escisiones) detienen queda indiscriminado con el objeto identidad. Puede estar encubierta el desarrollo armónico con los consiguientes la su de la por una del psiquismo trastornos de Sección 1217 monografías Esto los lleva a estructurarse alrededor de sistemas polu icos u rl'ligiosos y de teorías científicas, a los que adhieren con fanatismo, y en los que cncucnt ran el marco apropiado para desplegar su omnipotenciu, que puede estar encubierta con sentimientos de desvalorización e inferioridad. Desde la disociación estructuran vinculaciones con un otro complementario, tipo madre-hijo, protector-protegido, de extrema dependencia, que mantiene a través del sometimiento. Aislamiento, desconfianza, trastornos de identidad, invaden el área de la sexualidad, donde son responsables de síntomas de frigidez e impotencia, que aparecen como motivo de consulta frecuente. Cuando también invaden el área intelectual suelen aparecer inhibiciones en el trabajo v en el aprendizaje. El vínculo narcisista Ubicar la personalidad esquizoidc entre los trastornos narcisistas, cuyo núcleo principal es el aislamiento afectivo y el trastorno de sus relaciones interpersonales, lleva a la necesidad de definir la esencia del vínculo narcisista. Esto ha sido exhaustivamente estudiado por Aragonés. Las relaciones narcisistas se organizan desde parámetros que no responden a la mctapsicología de la pulsión. "Lo que es objetal para la pulsión puede ser anobjetal para el sujeto." La relación narcisista no se establece ni se mantiene por la fuerza de la pulsión que busca su descarga, sino por fuerzas contradictorias que se manifiestan por la tendencia a la fusión anobjetal o a la discriminación S-O-\' de cuya resolución surge la autonomía del sujeto y la autonomía del objeto en la relación. Para describir los grados de fusión sujeto-objeto recurre al concepto de "instalación", de Bleger: "La instalación no necesita de la pulsión, la unión es estructural y complementaria de la incompletud de las partes". Está dada por polos de evolución diferentes que tienen una relación de obligatoria interdependencia. La instalación es un vínculo Iusional, mudo, que habla sólo en los momentos que se rompe, a través de vivencias de desarraigo, desintegración, miedo a la muerte y a la locura. Este es el vínculo que establece el paciente csquizoide en la relación transIcrcncial, en la que he podido corroborar momentos de ansiedad catastrófica y despersonalización frente a un cambio de horario, por otra parte necesitado por el mismo paciente. El concepto de instalación fuerza la atención de lo intrapcrsonal a lo interpersonal, ya que el otro tiene una acción permanente, sea intentando mantener la situación, sea facilitando la evolución hacia situaciones más discriminadas. Este Yo fusionado, instalado, tiene su correlato clínico en los conceptos de simbiosis y autismo de Bleger: "La simbiosis (o fusión) que se rompe porque su depositario externo falla, en tanto no puede desprenderse del objeto externo para hacerlo mundo externo (escisión Yo/mundo-externo) desprende el objeto del mundo externo y de la realidad, recreándolo en el espacio mental (autismo) ". en La psicopatología esquizoide aparece cuando la vivencia de fusión es rota forma masiva y violenta antes de que haya discriminación sujeto-objeto. El retiro autista consigue: Mar/Iza 1218 DavidZ011 de Silberstein - Anular la pérdida del objeto: "No hay pérdida del objeto, hay pérdida del enclave en lo real ele una relación anobjetal, para ser recreada en ot ro espacio, el autista." Apropiarse - Transformar del objeto v mantener la realidad, creando la fusión una realidad intrapsíquica. propia. Reflexiones Al titular esta monografía "Trastorno csquizoidc de la personalidad" he querido poner el énfasis en el aspecto patológico de la organización psíquica. Patología que consiste en una organización defensiva, rígida y permanente que a través del aislumicnto aicct ivo consigue mantener la cohesión, v separarse así de la psicosis. Esta solución intelectual. se ve facilitada en personalidades dotadas de alto nivel Bleichmar describe el proceso de "narcisización" de las funciones. Llama "al proceso intcrsubjct ivo que comprende, por parte del otro significativo, una valoración positiva del sujeto, con la concomitante expresión de placer, y por parte del sujeto, una identificación con esa valoración y ese placer". narcisizacion "El narcisismo de repetición." es el alimento de las funciones, ya que provoca el anhelo Por lo contrario, cuando una función narcisizada falla, surge el sufrimiento narcisista. Cuando esto se da repetidamente tiene lugar la "desnarcisización de la función". Esto es, el retiro de la cutcxis narcisista con que estaba investida. Esto es 10 que ocurre en todas aquellas actividades inhibidas en su desarrollo, que son características de las personalidades csquizoidcs, inhibiciones en las relaciones sociales, en las actividades físicas, en el estudio, en el trabajo. Se daría así un desplazamiento de catcxias narcisistas desde una función donde hay sufrimiento hasta otra donde no lo haya. De esta manera la evitación del sufrimiento narcisista se consigue a costa de una automutilación. Disociacion, cscision, aislamiento, automutilacion, hablan que ha perdido la posibilidad de pcrcíbirsc dentro de una Esto lo lleva a reaccionar frente a las situaciones conflictivas de una manera que se vuelve inadecuada e incompatible necesidades. de un ser humano unidad psicofísica. que debe afrontar con sus propias Esto ocurre cuando el ser que comienza su desarrollo no es satisfecho en sus verdaderas necesidades, sino que se le impone avasalladoramcnte la necesidad del otro. Entonces se cansa, abandona la lucha, se desvitaliza, se disocia, se aisla, ronipc el contacto vital eO/1 la realidad. Para sobrevivir adopta el gesto impuesto, que no responde a su necesidad (falso sclf}, que no le aporta vitalidad, que lo deja vacío. Esta derrota en sus posibilidades de "ser", la pérdida de confianza en sí mismo y en los demás, ocurre en momentos previos a la palabra y, por lo tanto, a la posibilidad de conceptualización. Es decir que dentro del vínculo narcisista con el objeto hay una pérdida, de un orden tan sutil que no llega a ser pensada como pérdida, y por lo tanto no es elaborada como tal. Esto detiene el proceso, donde, a través de las pérdidas de objeto y de la retracción libidinal que es su consecuencia, se van dando las identificaciones que estructuran el psiquisrno. Se ccián monograjias 1219 Por lo contrario, el objeto que no se reconoce como con lo que se intenta mantener el vínculo fusiona\. perdido es idealizado, Las perspectivas teóricas que he elegido ponen el énfasis en el vínculo intersubjetiva, que devino traumático en momentos muy tempranos de la evolución del psiquismo, en los estadios preverbales. Estas perspectivas permiten tender líneas que llenan de sentido las observaciones clínicas dentro del campo transfcrencial donde se desplegarán, no sólo sus conflictos intrapsíquicos sino sus perturbadas relaciones interpersonalcs, Así se presentan C01110 pacientes exigentes, silenciosos, desconfiados, aislados, poco receptivos, tan bien descritos por Liberman como "observadores no participantes". Y que yo entiendo como la puesta en escena en la situación terapéutica de su desconfianza básica en la posibilidad de ser entendidos y respetados. El paciente csquizoide duda de las palabras del analista y está especialmente atento a detectar los registros emocionales no verbales del terapeuta. ¿Cómo relacionarse tcrapéuticamentc es el principal problema? con estos pacientes para quienes la relacionalidad Guntrip y Winnicott señalan que necesitan terapeutas que sean a su vez "personas reales". Está en juego toda la persona del analista, sus posibilidades de empana, Necesitan ser "encontrados" a pesar de la distancia que imponen. y ése es el verdadero riesgo, no encontrarlos, no descubrir su singularidad, y dejarlos en la desesperanza de su no existencia. Paradójicamente, en tanto no son encontrados en su verdadero self, son pacientes dóciles, dependientes, que se instalan indefinidamente en el análisis. En cambio si son descubiertos, aparecen sentimientos de sorpresa, alivio, esperanza, mezclados con intensa ansiedad persecutoria. Es el momento de mayor riesgo de interrupción del tratamiento. La cmpatía y el marco referencial del terapeuta tendrán un papel protagónico, en tanto consigan evitar un nuevo aislamiento, dada la vulnerabilidad de estos pacientes. El proceso terapéutico una experiencia de relación los demás. Esto incluye: debe proveerles el marco adecuado para rehacer que les devuelva la confianza en sí mismos y en a] El despliegue de su desconfianza, lo que posibilita hablar de ella, entendiéndola, no como un ataque al vínculo fruto de pulsioncs agresivas o envidiosas, sino del temor a la repetición de una situación, que ya le ha ocurrido, aunque no la recuerda, ni puede recordarla, y que justifica su desconfianza. b] La reconstrucción de la psicopatología de los padres y la incidencia en los sucesos de su historia infantil, que adquiere especial importancia no tanto en función de llenar lagunas mnérnicas, sino para pensar una historia más coherente que le permita restablecer su identidad. e] La figura psiquismo. del terapeuta como pieza central en la rcstructuración d ] Las ansiedades, como vivencias catastróficas y confusionales, que desencadenan en momentos de amenaza de dcsestructuración del Yo. e] Los desarrollos de afectos de ira, odio, en la transferencia, cienes de un Yo vulnerable, frente a heridas nar-cisistas que amenazantes para su cohesión o como falta de cmpat ía. del se como rcacviven como 1220 Mar/ha Davidton de Silberstein Cuando el proceso terapéutico se pone en marcha, estos pacientes, "los más difíciles", pueden llegar a ser los más gratifican tes, en tanto comienzan a "sentirse vivos, por primera vez" y son capaces de decirlo. Los índices de mejoría tienen que ver con el aumento de la autonomía, de la creatividad, de una postura vital frente a la vida, así como con la disminución ele la vulnerabilidad. Bibliografía Aragonés, J. R., "Estudio del vínculo narcisista: algunas consecuencias de su revisión", REV. DE PS1COAN¡\l.lSIS, XXXIV, 2, 1977. "Narcisismo y sincretismo, dos teorías complementarias", REV. DE PSICOAN,\LISIS, XXXII, 3, 1975. Bettelheim, B., La fortaleza vacía, Laia, Barcelona. Bleichmar, H., Estudio sobre la enunciacián y la gramática inconciente, Nueva Visión, Buenos Aires, 1981. Fairbairn, R. D., Estudio psicoanalítico de la personalidad, Paidós, Buenos Aires, 1962. Guntrip, H., El sel] en la tcoria y la terapia psicoanaliticas, Amorrortu, Buenos Aires, 1971. Kohut, H., Análisis del sel], Amorrortu, Buenos Aires, 1971. -, La restauración del si-mismo, Paidós, Buenos Aires, 1980. Libcrrnan, D., La comunicacion ell terapéutica psicoanalitica, El'DEBA, Buenos Aires, 1962. 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