3.14.- PROPIEDADES BENEFICIOSAS DEL AGUA BICARBONATADA MALAVELLA EN LA FUNCIÓN RENAL Por Fernanda González LICENCIADA EN NUTRICIÓN Introducción El riñón, es el órgano del cuerpo, encargado de conservar el medio interno (homeostasis). Regula el equilibrio de líquidos y electrolitos, el equilibrio ácido-base y el que existe entre la ingestión de nutrientes y la excreción de los productos de desechos del organismo. Cumple además, funciones de carácter metabólico y hormonal. Purifica la sangre, mediante intrincados procesos que se realizan en sus unidades anatómicas y funcionales llamadas nefrones, y que consisten en la filtración glomerular, la absorción tubular y la excreción, procesos que culminan en la producción de orina. Estas funciones se verían alteradas si no se logra un balance hídrico adecuado. Debemos ingerir al día una cantidad de agua similar a la eliminada. En adultos se recomienda 35 ml/kg de peso corporal. Por ello, el agua, es el componente más abundante del cuerpo humano. Los riñones contienen alrededor de un 83 % de agua, el tejido conjuntivo un 80 % , y el corazón, los pulmones y la sangre alrededor de un 79 %, en cambio,el tejido adiposo solo contiene un 15%. El agua, es el vehículo indispensable para transportar las sustancias nutritivas, logrando su normal absorción, distribución, utilización y eliminación. Cualquier trastorno que entorpezca estas funciones, alterará la composición intracelular de varios órganos. Ocasionando graves problemas al organismo en su totalidad. Existen varios procesos patológicos, propios del riñón, o en los cuales éste se ve afectado, que pueden llevar a la insuficiencia funcional renal aguda o crónica. Litiasis Renal Denominamos Litiasis renal ó cálculos renales a las estructuras cristalinas incluidas en una matriz orgánica, que se forman en las papilas renales, y crecen hasta que, de forma aleatoria, se rompen y los fragmentos pasan al sistema excretor. Etiología Dos mecanismos son los que intervienen en la formación de los cálculos renales: 1. El aumento relativo de la concentración de los solutos en la orina, a lo cual puede llegarse por: a) Reducción de la diuresis (orinas concentradas) b) Aumento de la excreción de solutos (calcio, oxalato, ácido úrico, cistina, etc.) 2. Alteraciones fisicoquímicas capaces de inducir la formación de cálculos, tales como: a) b) c) d) Modificación del pH urinario Matriz del cálculo Presencia de cuerpos extraños Modificaciones de las sustancias protectoras: magnesio, pirofosfato, citrato, péptidos protectores. En España, esta patología, afecta al 3-4 % de la población, con un porcentaje de recidiva del 40 %. Fundamentalmente, se presenta entre los 30 y 50 años. En los países occidentales, la litiasis, predomina en el sexo masculino, en una relación 2:1. La presencia de esta patología produce dolor, obstrucción y predisposición a infecciones de las vías urinarias. Tipos de Litiasis 1. Litiasis cálcica Es el tipo más común de cálculos renales, representa un 80 % de los casos. Se componen de oxalato y fosfato cálcico. En la etiopatogenia influyen diferentes causas, siendo la mas frecuente la hipercalciuria que puede ser: a) Idiopática , por aumento de la absorción intestinal de calcio o por defecto de reabsorción tubular del mismo. b) Secundaria a otras enfermedades, como el hiperparatiroidismo. c) Dietética, por ingesta excesiva de calcio. Se recomienda una dieta restringida en calcio, limitando su ingesta a menos de 800 mg/día y el aporte proteico a 1g/kg/día. Manteniendo una ingesta elevada de líquidos, 2 a 3 litros diarios, y buscar una selección de alimentos que produzcan la acidificación de la orina. 2. Litiasis Oxálica Se produce debido a una excesiva eliminación de ácido oxálico. El tratamiento debe alentar el consumo de una importante cantidad de líquidos y restringir la ingesta de alimentos ricos en oxalatos, tales como, acelga, espinaca, tomate, pimientos, guisantes, cacao, té, chocolate, entre otros. 2 3. Litiasis Úrica Constituyen entre el 5-10 % de los casos de litiasis. Su formación se debe a la hiperproducción de ácido úrico, con una elevada excreción urinaria del mismo, y un pH urinario ácido. El tratamiento aconsejado consiste en beber abundante líquido para mantener un volumen de orina superior a 2 L/ día. Para ello, es aconsejable el consumo de agua carbonatada, como Malavella, que con su aporte de bicarbonatos, alcaliniza la orina, aumentando su solubilidad para los cristales de ácido úrico, evitando su precipitación y disminuyendo la posibilidad de formación de tan dolorosas " piedras de urato". Se restringen las purinas de la dieta. Las purinas se encuentran en carnes y sus extractos, vísceras, y en menor cantidad granos enteros y legumbres. 4. Litiasis Cistínica Es un defecto genético en el mecanismo de transporte renal de la cistina y de los amino ácidos dibásicos. Suelen aparecer en la segunda o tercera década de la vida. La terapia actual, en éste caso, consiste en beber abundantes líquidos, alcalinizar la orina y reducir la metionina de la dieta. Se recomienda beber 2 vasos cada 2 horas, durante el día y 2 vasos por la noche de agua rica en bicarbonatos y potasio, como el agua mineral natural Malavella. Logrando así, una diuresis de 3 a 4 litros diarios y su consiguiente alcalinización de la orina. Limitando, el consumo de alimentos ahumados, enlatados y procesados. 5. Litiasis por Estruvita Representa el 20 % de todas las litiasis. Se produce por la infección de microorganismos que desdoblan la urea, aumentando el pH urinario y favoreciendo la formación de éstos cálculos. El tratamiento de elección en estos casos, es la extracción completa del cálculo. Para finalizar, cabe destacar la utilización de las aguas bicarbonatas sódicas como Malavella, por sus características fisico-quimicas y aporte de minerales, ejerciendo efectos sobre el equilibrio electrolítico y sobre el equilibrio ácido-base. Destacando su acción diurética, si se ingiere en cantidades suficientes y en ayunas. Aumentando la motilidad del uréter y favoreciendo la expulsión de pequeñas piedras, facilitando la solubilización de la cistina y los cálculos uráticos, por su efecto alcalinizante de la orina. Sin embargo, las aguas bicarbonatadas sódicas no están indicadas en los demás tipos de litiasis. Por tanto, es importante adecuar la dieta a cada patología y beber agua en las cantidades que nuestro organismo necesita para realizar sus funciones vitales. BIBLIOGRAFIA: 3 1. Aranceta Bartrina, J. Dieta en la tercera edad. En Nutrición y dietética clínicas. SalasSalvadó, Bonada i San-Jaume, A, Trallero Casañas, R saló y Solá. ME editores. Barcelona, DOYMA.2000 2. Cervera P, Clapes J, Rigolfas R. Alimentación y Dietoterapia:nutrición aplicada en la salud y en la enfermedad. Madrid. McGraw Hill. Interamericana, 1993. 3. Guillén Sans, R. "Aguas y bebidas no alchólicas, Guías alimentarias para la población española, SENC, Bilbao, IM&C, S.A ediciones, 2001. 4. Longo E.N, Navarro E.T. Plan de alimentación de las enfermedades renales. Técnica Dietoterápica. Ed . El Ateneo. Argentina 2000 . 5. Monje Pardo, L. "Aguas minerales y bebidas acalóricas". Guías alimentarias para la población española, SENC, Bilbao, IM&C, S.A ediciones, 2001. 6. Requejo Marcos, Ana M, Ortega, Rosa M, Nutriguía, Editorial Complutense, Madrid, 2000. 7. Vaquero, M. Pérez-Granados, AM y Schoppen, S, Nutrición y Agua, V Jornadas. Revista de Nutrición Práctica, Dietecom, Madrid, 2001 4