1 Santiago, doce de junio de dos mil siete. VISTOS: 1º Que, con fecha 06 de junio de 2007, Alfredo Brahm Moura, en la causa rol 164.101­12 del Segundo Juzgado del Crimen de Santiago, por delitos en contra de la fe pública y en contra de la propiedad, interpone requerimiento de inaplicabilidad por inconstitucionalidad para que este Tribunal declare que las aplicaciones del artículo 401 del Código de Procedimiento Penal que ha efectuado el juez de la causa en las resoluciones sobre cierre del sumario, como asimismo en las que pueda hacer al resolver la solicitud de reapertura del sumario, y también en las aplicaciones que pudieren efectuarse de dicho precepto legal en alzada conociendo el recurso de apelación en el caso que se denegare el de reposición, han resultado o pueden resultar contrarias al artículo 19 Nº 3, inciso quinto, de la Constitución Política; 2º Que la requirente, en las páginas 14 y siguientes de su presentación, examina diversas resoluciones judiciales que califica como contrarias a la Carta Fundamental y que constituyen el objeto de su impugnación: “Resolución inconstitucional de fs. 1612”, de la que señala que “con esta resolución no solamente se hace irracional la investigación, sino que se hace irracional el procedimiento mandado por el legislador”; “Resolución de fojas 705 que declaró cerrado el sumario por primera vez en marzo de 2000”; “Resolución de fs. 784” que reabrió el sumario para la práctica de ciertas diligencias, y Resolución de la I. Corte de Apelaciones de Santiago de fs. 1229 que confirmó la anterior; 2 3º Que, en conformidad a lo dispuesto en el articulo 93 Nº 6 de la Constitución, es atribución de este Tribunal “Resolver, por la mayoría de sus miembros en ejercicio, la inaplicabilidad de un precepto legal cuya aplicación en cualquier gestión que se siga ante un tribunal ordinario o especial, resulte contraria a la Constitución “; 4º Que el artículo 93 inciso decimoprimero de la Constitución establece que en tal caso “corresponde a cualquiera de las salas del Tribunal declarar, sin ulterior recurso, la admisibilidad de la cuestión siempre que verifique la existencia de una gestión pendiente ante el tribunal ordinario o especial, que la aplicación del precepto legal impugnado pueda resultar decisivo en la resolución de un asunto, que la impugnación esté fundada razonablemente y se cumplan los requisitos que establezca la ley. A esta misma sala le corresponderá resolver la suspensión del procedimiento en que se ha originado la acción de inaplicabilidad por inconstitucionalidad.”; 5º. Que es menester agregar que la acción de inaplicabilidad instaura un proceso dirigido a examinar la constitucionalidad de un precepto legal cuya aplicación en una gestión pendiente que se siga ante un tribunal ordinario o especial, resulte contrario a la Constitución. En consecuencia, la acción de inaplicabilidad es un medio de evitar la aplicación de normas legales determinadas que inciden en una gestión judicial y que puedan resultar derecho aplicable al caso sub­lite; 6º. Que la aplicación de un precepto legal que resulte contrario a la Constitución y que corresponde 3 apreciar al Tribunal Constitucional al conocer de una acción de inaplicabilidad, no es la eventual aplicación incorrecta o abusiva de dicho precepto que pudiere efectuar un tribunal, la que corresponderá corregir a través de los diversos recursos que contemplan las leyes de procedimiento, sino la aplicación de dicho precepto, que rectamente interpretado y entendido infringe la Carta Fundamental; 7º. Que, la acción de inaplicabilidad es un medio inidóneo para impugnar resoluciones de órganos jurisdiccionales, ya que la salvaguarda del imperio de la ley en el conocimiento, resolución y ejecución de lo juzgado en causas civiles y criminales corresponde exclusivamente a los tribunales establecidos por la ley, a través de los medios procesales que el legislador establezca mediante los Códigos de Enjuiciamiento; 8º. Que, el requerimiento no cumple con los presupuestos procesales establecidos para su admisión a trámite por la Carta Fundamental, toda vez que no se deduce en contra de un precepto legal cuya aplicación pudiere resultar contraria a la Constitución, sino en contra de resoluciones dictadas por el Tribunal de la instancia, lo que en definitiva constituye una cuestión de recta interpretación de la ley que no se encuentra dentro del marco de atribuciones de este órgano de jurisdicción constitucional; 9º. Que, a mayor abundamiento, lo razonado precedentemente se reafirma al analizarse el resultado que se obtendría de acogerse la pretensión, esto es, declarar inaplicable el artículo 401 del Código de Procedimiento Penal para el caso sub lite, situación en 4 la cual el juez de la causa estaría imposibilitado de cerrar sumario, lo que alteraría en su esencia la prosecución del proceso y como su efecto no cumpliría con las funciones que le asigna la Constitución al debido proceso; 10º. Que, atendido lo que se termina de exponer, el requerimiento deducido a fojas 1 debe ser declarado inadmisible. Y, TENIENDO PRESENTE lo dispuesto en los artículos 6º, 7º y 93 inciso primero Nº 6 e inciso decimoprimero de la Constitución Política de la República, SE DECLARA, resolviendo la petición principal de 6 de junio de 2007, que es inadmisible el requerimiento de inaplicabilidad deducido. Al primer y segundo otrosíes, estése al mérito de autos. Al tercer otrosí, por acompañados los documentos. Al cuarto otrosí, téngase presente. Notifíquese por carta certificada. Rol Nº 794­2007.­ Pronunciada por la Segunda Sala del Excmo. Tribunal Constitucional integrada por su Presidente señor Juan Colombo Campbell y sus Ministros señores Raúl Bertelsen Repetto, Hernán Vodanovic Schnake, Jorge Correa Sutil y Enrique Navarro Beltrán. Autoriza el Secretario del Tribunal Constitucional don Rafael Larrain Cruz.